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Las organizaciones ecologistas piden al futuro Gobierno un Ministerio de Medio Ambiente y cambiar el modelo energético

Europa Press.- Las ONG Amigos de la Tierra, Ecologistas en Acción, Greenpeace, SEO/BirdLife y WWF reclamaron al futuro Gobierno que el medio ambiente esté «en el centro de todas sus políticas desde los primeros 100 días», un Ministerio de Medio Ambiente propio y una Vicepresidencia de Sostenibilidad, tras una campaña en la que el tema ha estado «ausente» y después de una X legislatura «nefasta» en este ámbito, por lo que llaman a avanzar en el cambio de modelo energético con las renovables.

El portavoz de Amigos de la Tierra, Alejandro González, ha lamentado que durante la campaña electoral los cuatro partidos han tenido al medio ambiente «lejos» del debate y esta ausencia supone, en su opinión, «un precedente importante» para la próxima legislatura. Si bien González ha destacado los «pasos parlamentarios» durante la «breve» legislatura undécima, «en contra de las políticas ambientales de los cuatro años anteriores del PP», tales como la petición de derogación del real decreto de autoconsumo. Con ello, espera que se puedan revertir «algunas» de las decisiones «más perjudiciales» para el medio ambiente tomadas en la legislatura anterior.

Para el coordinador estatal de Ecologistas en Acción, Paco Segura, el resultado electoral «no es bueno para el medio ambiente», ya que el ganador, el PP, «no se caracteriza» por defender el medio ambiente. Por ello, le exige «lo mismo que la sociedad» como un cambio de modelo energético, el cierre de las centrales nucleares incluido y acción contra el cambio climático. De este modo, ha advertido de que pueden ser «cuatro años perdidos» para la lucha contra la amenaza contra el cambio climático si el Gobierno «orbita entorno al PP». «Las expectativas no son buenas, aunque nuestras reivindicaciones son las mismas para todos», manifestó.

Mientras, el director ejecutivo de Greenpeace, Mario Rodríguez, está «a la espera de como se conforma el Gobierno» y que, esta vez, el medio ambiente «no pague los platos rotos» sino que esté en la agenda real. De este modo, insta al futuro Ejecutivo que tenga el medio ambiente en sus prioridades, «sobre todo los determinantes primeros cien días» para que mejore la «nefasta» legislatura del PP en lo medioambiental.

Desde SEO/BirdLife, su directora ejecutiva, Asunción Ruiz, ha advertido de que no habrá regeneración ni cambio de modelo si el futuro pacto no tiene un corazón verde y considera que sería una «irresponsabilidad» política y social no tener en cuenta el medio ambiente. Ruiz no sólo ha pedido un Ministerio de Medio Ambiente «propio» sino una Vicepresidencia de Sostenibilidad para que cualquier política, energética, social, económica o de educación esté «impregnada» por el medio ambiente. «Necesitamos una Vicepresidencia para ahorrar incoherencias de Gobierno entre la política ambiental con la energética o la económica», ha insistido.

Del mismo modo, el secretario general de WWF, Juan Carlos del Olmo, pide un Gobierno que de prioridad el medio ambiente y para ello, ve preciso que haya un Ministerio de Medio Ambiente independiente. A su juicio, entre las cuestiones ambientales que deberá gestionar el próximo Ejecutivo de manera más inmediata será la ratificación «rápida» del Acuerdo de París y «ponerse en marcha» para luchar contra el cambio climático y reducir CO2. La receta para hacerlo, según el representante de WWF, pasa por cambiar el modelo energético, «una de las grandes oportunidades»,  ahora que la sociedad, los partidos y la industria está «preparada para ir a una energía 100% renovable».

Ese, precisamente, cree que sería uno de los asuntos en los que la mayor parte de los partidos «ahora que se necesitarán pactos» pueden llegar a mayor acuerdo, así como en generación de empleo y economía verde, para reducir la cifra de cuatro millones de parados. «El desarrollo rural, la energía renovable, los residuos, todo lo que esté relacionado con una economía baja de carbono es una oportunidad laboral», opina. Por último, reclamó que en la actual coyuntura en la Unión Europea, España abogue por defender la legislación europea «a ultranza» y que no se rebaje la exigencia ambiental. «Si el PP dice que mira por España, debe velar porque a largo plazo no se rebaje la normativa ambiental», aseveró.

Greenpeace reclama a los partidos que pongan el medio ambiente en el centro de su agenda

Europa Press.- La organización ecologista Greenpeace ha pedido a los partidos políticos que pongan al medio ambiente en el centro de su agenda de cara a las elecciones generales del próximo 26 de junio y los posteriores acuerdos porque las políticas de protección medioambiental tienen repercusiones positivas directas en el empleo, los ecosistemas y el bienestar social.

La ONG recuerda que España tiene como prioridad la puesta en marcha para reducir las emisiones de cara a cumplir los compromisos adquiridos en la Cumbre del Clima de París.

Además, critica que seis meses después de la firma del Acuerdo de París, el Gobierno en funciones va «en la dirección contraria a la que debería» y no está adoptando «ninguna medida» para reducir las emisiones de CO2 y tratar de que el aumento de la temperatura no sobrepase los 1,5 grados centígrados.

De hecho, considera que «más bien hace todo lo contrario» ya que mantiene una política energética que apoya las energías sucias, como la nuclear y el carbón y castiga a las renovables, aunque esto haya supuesto una pérdida de unos 50.000 empleos en el sector en los últimos años.

Del mismo modo, reclama que las negociaciones del acuerdo comercial entre la Unión Europea y Estados Unidos (conocido como TTIP) se hagan con la mayor transparencia posible y que se salvaguarde el respeto al medio ambiente, ya que la ONG ve numerosos indicios que apuntan a que el acuerdo supondría una merma en los estándares de protección medioambiental.

El CSN prevé resolver en noviembre la petición de renovación de la autorización de operación de Garoña

Redacción / Agencias.- El pleno del Consejo de Seguridad Nuclear (CSN), que ya había anunciado que resolvería el informe sobre la solicitud de prórroga de la central nuclear de Garoña en el segundo semestre de este año, ha concretado que esa resolución se producirá en torno a noviembre. El informe se emitirá una vez que el titular de la central nuclear “vaya concluyendo todos los trabajos que todavía debe realizar”, en particular las modificaciones de diseño que deben contar previamente con la apreciación favorable del CSN.

Nuclenor, sociedad propietaria de Garoña formada por Endesa e Iberdrola, pretende seguir operando la planta hasta marzo de 2031, cuando cumplirá los 60 años de actividad. La solicitud de prórroga que planteó requiere de ese informe; de ser negativo implicaría el cierre definitivo de la planta y, en el caso de que sea favorable, sometería el futuro de la central a la decisión del Gobierno. La nuclear lleva parada y desenganchada de la red desde diciembre de 2012, 7 meses antes de que expirase su licencia de operación el 6 de julio de 2013, aunque Nuclenor siempre justificó esta decisión por falta de rentabilidad económica.

El pleno del CSN ha sido informado por los directores técnicos de Seguridad Nuclear y Protección Radiológica de que continúa la evaluación de la solicitud de renovación de la autorización de operación de la central nuclear Santa María de Garoña, de acuerdo a los requisitos y pasos que el pleno estableció en la Instrucción Técnica Complementaria que emitió en julio de 2014, para que una vez «satisfechos y verificados» se pueda emitir el informe correspondiente.

Tanto Greenpeace como Ecologistas en Acción habían alertado del riesgo de que el informe del CSN pudiera emitirse antes de contar con un nuevo Gobierno en España, de manera que el Gobierno en funciones del PP, el único partido que se muestra favorable a conceder la prórroga, pudiera conceder el permiso e hipotecar al siguiente Gobierno, que se vería abocado a pagar una indemnización millonaria por «lucro cesante» si decidiera cerrar la planta atómica burgalesa.

Garoña dice que «seguirá cumpliendo»

Por su parte, desde Nuclenor, el portavoz Elías Fernández Centella confirmó que el planteamiento de la central de Garoña es «seguir cumpliendo los requisitos» de cara a la renovación y que, de hecho, «el CSN sabe todo lo que se está haciendo«. En concreto, ha recordado como algo «que es normal», el hecho de que en la planta el regulador mantiene un inspector residente y que hay inspecciones «constantes» del cuerpo técnico que está viendo la «evolución» de los trabajos.

La petición de renovación se basa en lo dispuesto en el artículo 28 del Reglamento sobre Instalaciones Nucleares y Radiactivas, modificado mediante Real Decreto 102/2014, del 21 de febrero, para la gestión responsable y segura del combustible nuclear gastado y los residuos radiactivos. Esta modificación legislativa, impulsada por el Gobierno del PP, permitía a las plantas atómicas que no hubieran cerrado por motivos de seguridad nuclear o protección radiológica, sino por motivos económicos, pedir de nuevo su reapertura en el plazo de un año desde su cese de explotación. Nuclenor expuso entonces que «un marco temporal de explotación de estas características» era necesario para que el proyecto fuera «viable», estable y lograr la «certidumbre adecuada» para acometer las inversiones precisas.

“Es un lujo cerrar Garoña”

Desde entonces, la planta está en situación de cese de actividad, a la espera de que «se den las circunstancias administrativas y regulatorias que posibiliten la vuelta a la operación», según el Foro de la Industria Nuclear. En concreto, el presidente del Foro Nuclear, Antonio Cornadó, expresó la preocupación del sector porque un activo industrial como Garoña, que «funciona bien», pueda cerrarse cuando, de hecho, «puede seguir operando a largo plazo«. «Garoña es un activo industrial que funciona. Es un lujo que España, que no es tan lista ni tan rica como para permitirse prescindir de un activo viable que además ha operado más de 40 años de edad y conoce cómo hacer para operar a largo plazo», subrayó Cornadó.

En este sentido, admitió que el futuro de Garoña está «en manos del CSN» y, llegado el caso, de la posterior resolución del Ministerio de Industria, Energía y Turismo. Así, ha garantizado que «está demostrado» por parte de Garoña que es «viable y seguro» operar un reactor más de 40 años, porque ya ha funcionado durante 42 años y que, incluso, un dictamen técnico del CSN aprobado por unanimidad en 2009 era «favorable» a que la planta operase hasta 2019.

De este modo, ha reiterado la defensa del Foro Nuclear sobre la operación del parque atómico a largo plazo, porque «no supone un salto cuantitativo», ya que se está haciendo en otros países, como Estados Unidos, donde 81 de sus 99 reactores tienen autorización para operar 60 años. En caso de que, finalmente, el Gobierno de visto bueno a Garoña, ha apuntado que entonces su vuelta a la producción eléctrica dependerá de su titular, Nuclenor, y su programa de plazos de vuelta a la operación.

APPA pide que España desarrolle todo su potencial en la transición a un sistema basado en renovables como propugna Greenpeace

Europa Press.- Mientras Greenpeace lamenta que España vaya en sentido contrario respecto al crecimiento global de las renovables, la Asociación de Empresas de Energías Renovables (APPA) reclama que España no deje pasar la oportunidad y desarrolle «todo su potencial» en la transición hacia un sistema energético basado en renovables. De hecho, el presidente de APPA, José Miguel Villarig, considera que España, que debería «aprovechar esta oportunidad» para relanzar el sector, «aún sufre las consecuencias de la reforma energética y de la moratoria».

La patronal recuerda que, según el informe Energía Renovable y Empleo de la Agencia Internacional de las Energías Renovables (Irena), el empleo en el mundo en el sector creció un 5% en 2015 con respecto al 2014, hasta alcanzar 8,1 millones de personas, y que puede generar 24 millones de nuevos empleos. A este respecto, APPA considera que el sector en España se mantiene «estancado», después de que en 2015 se instalarán en España apenas 23 megavatios (MW) de los más de 150.000 MW mundiales.

Además, la patronal del sector renovable señaló que mientras el empleo verde crece en todos los países, en España se perdió casi la mitad de los empleos que llegó a tener desde 2008. Para Villarig, «no tiene sentido» dejar pasar la oportunidad que representa el desarrollo de las energías renovables, «cuando contamos con empresas líderes en los mercados internacionales, algo que debemos reforzar con la correspondiente reactivación del mercado doméstico«.

Greenpeace lamenta la situación española

Asimismo, Greenpeace valoró muy positivamente los resultados del nuevo informe REN21, los datos globales sobre la potencia instalada y las nuevas inversiones en energías renovables, que muestra que 2015 ha vuelto a ser un año récord para las renovables. Sin embargo, ha lamentado que España vaya en sentido contrario en este aspecto. Así, ha recordado que, en España, 2015 fue el segundo año en que no se instalaron energías renovables a causa de lo que consideran «una clara política contraria» que ha imperado desde 2010.

Ante esta situación, Greenpeace ha pedido a los partidos políticos que concurren a las elecciones que asuman el acuerdo COP21 y reactiven un marco estable y favorable a las energías renovables, el ahorro y la eficiencia y establezcan como objetivo alcanzar un sistema energético 100% renovable antes de 2050. La organización añade que el informe REN21, reconoce que España, tras ser líder mundial en energía solar en 2008, ha desaparecido prácticamente del mapa de la energía fotovoltaica a causa de «cambios legislativos retroactivos y el nuevo impuesto sobre el autoconsumo».

Mientras, en España, “la normativa en materia ha destruido un sector prometedor con la pérdida de unos 50.000 empleos en pocos años”, el resto del mundo ha triplicado sus inversiones en energías renovables en los últimos 10 años y el resultado es que más de 8 millones de personas ya trabajan en el sector a escala global, tal y como publicó IRENA, según indicó Greenpeace.

Greenpeace transforma ‘La rendición de Breda’ en ‘La rendición de Garoña’

Redacción / Agencias.- Activistas de Greenpeace exhibieron ante las puertas del Museo del Prado una adaptación del cuadro de Velázquez La rendición de Breda (o Las lanzas) para denunciar que «el Gobierno ha dejado la seguridad nuclear en manos de las grandes empresas eléctricas«. El Salón de Actos del Museo del Prado acoge la Conferencia Internacional sobre Seguridad Nuclear, a la que asisten representantes de los organismos reguladores de todo el mundo.

Los miembros de Greenpeace recibieron a los participantes en la conferencia con la adaptación de la pintura de Velázquez en tamaño real, que han rebautizado como La rendición de Garoña, en la que se puede ver en el centro a Mariano Rajoy que entrega con gesto sumiso «las llaves de la seguridad nuclear» al presidente de Iberdrola, Ignacio Sánchez Galán. En la obra aparecen también los rostros de numerosas personas del mundo de la política, la energía y las puertas giratorias, respetando los cuerpos de los personajes originales del cuadro.

«La actual dirección del CSN y el Gobierno en funciones no tienen inconveniente en cambiar los principios básicos de la seguridad nuclear si así lo quieren los dueños de las nucleares», declaró Raquel Montón, responsable de energía nuclear de Greenpeace. «Esta adaptación representa cómo los políticos se rinden en materia de seguridad nuclear ante los intereses económicos del sector eléctrico».

En el lado de los «rendidos» es posible reconocer a los responsables políticos que en opinión de Greenpeace «han dado la espalda al medio ambiente y quieren ceder, como en el caso de Garoña, las llaves de la seguridad nuclear a la industria energética»: José Manuel Soria, Alberto Nadal, Miguel Sebastián. En el lado de los «vencedores» se ve a los presidentes de las eléctricas, así como también diversos políticos que pasaron a ocupar cargos en empresas del sector energético: José Bogas y Rafael Villaseca, o Felipe González, José María Aznar, Ángel Acebes, Juan María Atutxa, Cristina Garmendia, Manuel Marín.

Greenpeace ha recordado que la renovación de la licencia de Garoña por un periodo de 17 años, tal y como han solicitado Endesa e Iberdrola, «incumpliría la buenas prácticas del CSN al descompasar las revisiones periódicas de seguridad (RPS), que se hacen cada 10 años, y las renovaciones de licencia«. «Esperamos que los asistentes a la Conferencia puedan disfrutar de la magnífica obra original de Velázquez pero la adaptación que de ella hemos hecho refleja mejor la triste realidad del sector energético español, especialmente del nuclear, con un presidente del CSN que ignora las buenas prácticas de la institución que preside, rehúsa rendir cuentas ante el Parlamento y mantiene un grave enfrentamiento con parte de su cuerpo técnico», añadió Montón.

Greenpeace pide al CSN que aclare si alguna central nuclear española tiene elementos defectuosos fabricados por la francesa Areva

Redacción / Agencias.- Greenpeace ha enviado una carta al Consejo de Seguridad Nuclear (CSN) para que explique si alguna central nuclear española posee alguno de los 400 componentes defectuosos que la empresa nuclear Areva reconoció haber instalado en centrales nucleares de todo el mundo.

La organización ecologista pide al CSN que «aclare públicamente y con urgencia si ha recibido información de si Ascó y Almaraz pueden tener generadores de vapor que no cumplen con los estándares de calidad», así como una lista de todos los componentes procedentes de Areva instalados en España. La responsable de energía nuclear de Greenpeace, Raquel Montón, señaló que «la seguridad nuclear no ocurre por la mera existencia del CSN, sino porque éste trabaje para cumplir sin excusas los requerimientos de seguridad en todo momento».

El pasado 26 de abril de 2016, Areva informó a la autoridad de seguridad nuclear francesa (ASN) que, tras analizar los registros de producción de su empresa filial, Le Creusot Forja, se habían identificado 400 irregularidades en componentes producidos desde el año 1965. Por ello, Greenpeace teme que algunos de esos elementos puedan estar en España después de que Areva admitiera haber reemplazado los generadores de vapor de las plantas atómicas de Almaraz y Ascó.

Información a finales de mes

No obstante, «aún no está claro que hayan recibido alguno de los elementos defectuosos y se espera que a finales de este mes el regulador francés reciba toda la información de Areva«. Según la organización ecologista, las irregularidades incluyen «inconsistencias, modificaciones u omisiones en los archivos de producción en relación con los parámetros de fabricación o resultados de las pruebas». Areva ha confirmado que los registros han sido falsificados y que de los 400 componentes alterados, 50 están instalados en Francia, pero se desconoce el paradero de los otros 350.

Por su parte, fuentes de Areva España han confirmado que antes del 31 de mayo emitirá un informe de progreso, tras la auditoría de calidad lanzada a finales de 2015 en las unidades de fabricación de Areva en Francia, que aún «continúa». En todo caso, asegura que no se han establecido informaciones que pongan en cuestión la integridad mecánica de las piezas. En concreto, señala que en la auditoría a la fábrica de Creusot, se han puesto en evidencia «anomalías» que en la actualidad «están siendo caracterizadas» en el seguimiento de las fabricaciones. Asimismo, la empresa afirma que esta fase continuará en las próximas semanas.

Igualmente, ha agregan que se ha puesto en marcha un proceso de información e intercambios de documentos en el que se asocia a la ASN. De acuerdo con los resultados de la auditoría, estas «anomalías» son fruto de «acciones pasadas» y que la organización de modos de funcionamiento actuales «no permiten hoy estos tipos de anomalías«. En todo caso, subraya que, para la caracterización de estos hallazgos, un comité técnico comenzó a trabajar junto a la empresa eléctrica francesa EDF.

Las organizaciones ecologistas piden a los políticos un modelo energético sostenible sin carbón

Europa Press.- Las organizaciones ambientales Amigos de la Tierra, WWF, Ecologistas en Acción, SEO/BirdLife, Greenpeace, el Instituto Internacional de Derecho y Medio Ambiente (IIDMA) y la Fundación Renovables han pedido a los partidos políticos que asuman que este combustible fósil es responsable del cambio climático. Así, aseguran que el carbón no tiene cabida en un modelo energético sostenible por su elevado nivel de emisiones de gases de efecto invernadero.

Estas organizaciones consideran que cualquier política dirigida a impulsar el uso de este combustible fósil contraviene los acuerdos internacionales de lucha contra el cambio climático y “será irresponsable e insolidaria con el resto de personas que habitan este planeta y con las generaciones futuras». Además, les insta a rechazar cualquier propuesta que suponga el desarrollo de políticas que garanticen la continuidad del uso del carbón, ya sea autóctono o importado.

Propuestas recientes que han hechodiversos partidos como el PSOE o Foro Asturias buscan prolongar la actividad de la minería y el carbón autóctono más allá del límite de 2018 así como favorecer el consumo del carbón autóctono en las centrales térmicas a través de beneficios fiscales. A su juicio, los planteamientos de las iniciativas son inconsistentes y califica de ilegales algunas de las propuestas.

Los firmantes solicitan que ningún partido político apoye la quema de carbón en España con subsidios, incentivos o bonificaciones, ni para su extracción, ni para su combustión para la planificación de energía. Desde 1992, las empresas mineras de extracción de carbón han recibido ayudas por un total de 32.000 millones de euros. Así que exigen que se desarrollen políticas de acuerdo a los compromisos internacionales de cambio climático y dirigidas a lograr un sistema energético 100% renovable que incluya un plan de cierre del carbón.

Equo, Greenpeace y la Fundación Renovables lamentan que el Congreso pida bonificaciones al carbón nacional

Europa Press.- Equo, Greenpeace y la Fundación Renovables expresaron su malestar por la decisión de la Comisión de Hacienda del Congreso de pedir al Gobierno que bonifique el Impuesto sobre el Carbón para incentivar el consumo de este producto siempre que tenga origen nacional, tal y como ha propuesto el PSOE.

El partido ecologista pretendía que, en lugar de esta bonificación al llamado ‘céntimo verde’, se impusiera un arancel a las importaciones de carbón de empresas que no respeten las exigencias sociales y medioambientales que deben cumplir las producciones nacionales.

Sin embargo, con el texto finalmente aprobado se plantea una «ayuda encubierta al conjunto del sector nacional del carbón que perjudica al sector de las energías renovables», según opina el diputado de Equo Jorge Luis Bail, que lamenta que así se perjudica a la necesaria transición energética hacia la generalización de las renovables, imprescindible para cumplir con el Acuerdo de París.

«El sector del carbón es un sector en declive que ha recibido continuas subvenciones que se han mostrado ineficaces, por lo que apoyar a sus trabajadores pasa por la reconversión y por su reubicación progresiva en nuevos sectores limpios y competitivos, como el de las energías renovables«, ha insistido.

Contra la normativa europea

En la misma línea, Greenpeace y la Fundación Renovables también se han quejado de la aprobación de esta iniciativa parlamentaria, contra la que habían pedido el voto, y advierten de que las bonificaciones que se plantean son «contrarias a la normativa europea» además de perjudicar a los objetivos de reducción de las emisiones.

«La bonificación para el carbón nacional es una ayuda encubierta que producirá un claro perjuicio a la competitividad de las energías renovables y, por lo tanto, es contraria a los compromisos internacionales asumidos por España de lucha contra el cambio climático», advierten ambas organizaciones.

En este sentido, el presidente de la Fundación Renovables, Domingo Jiménez Beltrán, critica la «gran falta de compromiso con la lucha contra el cambio climático» que muestra el PSOE promoviendo esta iniciativa «a dos días de la firma en Nueva York del Acuerdo de París».

Por su parte, la responsable de Energía de Greenpeace, Tatiana Nuño, ha reprochado que se pretenda seguir subsidiando a un sector cuyas ayudas finalizarán en 2018 en cualquier caso, por lo que el Gobierno debería estar dedicándose a plantear un plan de cierre progresivo de las centrales térmicas de carbón y programas de transición justa para el empleo.

Una víctima de Chernóbil invitada por Greenpeace intentará convencer a los políticos españoles de los «riesgos» de la energía nuclear

Redacción / Agencias.- Mientras San Sebastián acogerá esta semana el cierre de la Semana de Acción Europea Por un futuro sin Chernóbil ni Fukushima con un programa de actividades dedicado a profundizar en la sensibilización sobre esos desastres nucleares y sus efectos, una maestra ucrania de 43 años y víctima del accidente nuclear de Chernóbil llegará a España invitada por Greenpeace con el objetivo de mantener reuniones con los principales partidos políticos españoles y «alertar de los riesgos que entraña la energía nuclear».

Se trata de Svitlana, una profesora ucrania que el 26 de abril de 1986, cuando se produjo la catástrofe nuclear de Chernóbil, residía en la aldea de Orane, a unos pocos kilómetros de Chernóbil. Esta víctima de la radiación se reunirá a lo largo de esta semana con representantes políticos del Parlamento catalán, de la Cámara vasca y del Congreso de los Diputados, ya que fuentes de la ONG explicaron que el objetivo es que se vea con todos los grupos parlamentarios de estas cámaras.

Tanto Svitlana como muchas otras personas de Ucrania, Rusia y Bielorrusia sufren aún, 30 años después, los efectos de la fuga radiactiva y «son el verdadero rostro de una fuente de energía incontrolable e innecesaria», según la organización ecologista Greenpeace. En 2006, 20 años después, esta ONG cifró en 200.000 las víctimas mortales y previó otras 93.000 por casos de cáncer asociados a la radiación. Greenpeace recuerda que el accidente nuclear de Chernóbil es el «más grave sucedido hasta la fecha» y que las consecuencias no sólo se dieron en el momento en el que se produjo el accidente, sino actualmente, ya que buena parte de la población de la zona arrastra problemas de salud y psicológicos asociados al accidente.

San Sebastián, Chernóbil y Fukushima

Según la asociación Bikarte, que promueve el acogimiento temporal de niños rusos y bielorrusos en familias vascas, se trata de poner el colofón a una iniciativa anual apoyada por el Parlamento de la Unión Europea. El programa organizado en San Sebastián incluirá una exposición fotográfica, conferencias y otras iniciativas. Un concierto solidario en la basílica de Santa María a cargo del Orfeón Donostiarra pondrá este sábado el punto final a la Semana de Acción Europea.

Entre las ponencias, que se desarrollarán entre el jueves y viernes en el auditorio del Aquarium y la Facultad de Derecho de la UPV/EHU, destacan las que impartirán Alexander Shimasky, militar que trabajó como testigo o «liquidador» tras el accidente de la central de Chernóbil, y Alexei Nesterenko, director del instituto Belrad de Bielorrusia, entidad dedicada a la medición de radicación en el cuerpo humano.

Las organizaciones ecologistas creen que Soria fue «un elefante en una cacharrería» contra las renovables al apostar por las fósiles

Redacción / Agencias.- Las organizaciones ambientales valoran positivamente la renuncia del ministro de Industria, Energía y Turismo en funciones, José Manuel Soria, a quien consideran que ha sido como «un elefante en una cacharrería» en materia energética, pues le culpan del «desmantelamiento» del sector de las energías renovables, con miles de empleos perdidos, y su apuesta por las fósiles, con las prospecciones y el fracking, y por los intereses de las empresas eléctricas.

Así, el coordinador de campañas de Amigos de la Tierra, Alejandro González, indicó que la ONG condena todo tipo de fraude fiscal, pero además, en este caso, considera que «el trabajo que ha hecho Soria en estos cuatro años ya le hacía susceptible de dimitir hace mucho tiempo». Igualmente, recordó que el ya exministro ha ido en contra del medio ambiente por su protección del petróleo, el decreto de autoconsumo, la retirada de ayudas a las renovables y las subvenciones al carbón. «Nos alegramos», sentenció.

En el mismo sentido, el diputado de Podemos (Equo), Juan López de Uralde, señaló que su «desastrosa» política fue determinante para «el hundimiento» del sector de las renovables. Su apuesta han sido «las energías sucias: las prospecciones petrolíferas y su posición favorable a la energía nuclear, en concreto la central de Garoña, la única razón por la que este dossier sigue vivo. Su salida puede ser una salida para Garoña». «Con Soria ha pasado como con Al Capone, tendría que haber dimitido por su política energética y, sin embargo, ha sido por evasión fiscal», señaló Uralde, que considera que su impuesto al sol ha bloqueado el autoconsumo eléctrico y, por tanto, el inicio hacia el cambio de modelo energético limpio.

El coordinador estatal de Ecologistas en Acción, Paco Segura, cree que su dimisión estaba «cantada» por las continuas contradicciones en que ha incurrido en sus explicaciones pero más allá, en su tarea como ministro le califica de «nefasto». En su opinión, José Manuel Soria ha sido el «ariete» contra las renovables, ya que generó una «inseguridad jurídica completa», con sus «continuos recortes a las subvenciones, arrasando con el sector», que «se ha venido abajo totalmente», más aún al final con el decreto contra el autoconsumo.

En cuanto a su papel respecto a la energía nuclear, Segura criticó que Soria haya parecido “más interesado en reabrir la central nuclear de Garoña que Iberdrola y Endesa». Del mismo modo, aseveró que no ha sabido gestionar un parque «sobredimensionado» de instalaciones térmicas, de carbón o de gas natural, que sobrepasan con mucho la demanda existente en España. «Lo han alentado tanto que se ha ido de las manos», lamentó, al tiempo que respecto al carbón, fue «dejando correr el asunto», cuando sabe que es un combustible a prohibir por las emisiones que produce y opina que tendría que haber sido «mucho más estricto». En definitiva, le califica de «nefasto en temas energéticos», con el «hachazo» a las renovables.

El peor ministro de Industria

Asimismo, el director ejecutivo de Greenpeace, Mario Rodríguez, dice que Soria es «el peor ministro de Industria que España ha tenido, con diferencia», por el «grado de retroceso» en sus materias, por su apuesta contra las renovables y a favor del petróleo, la nuclear y el fracking y los retrocesos en los procesos de control en Garoña y el almacén temporal centralizado (ATC). A su juicio, el mandato de Soria ha supuesto un retroceso «sin precedentes» y recordó el impuesto al Sol, la eliminación de las primas a las renovables que, en realidad, cree que estaba alimentado por «una apuesta descarada por los combustibles fósiles». Además, ha lamentado que colocó al Consejo de Seguridad Nuclear en «una situación muy compleja».

Rodríguez también criticó al ministro ya dimitido por subvencionar el carbón «hasta las últimas consecuencias», a pesar de ser una de las fuentes más contaminantes y haber aumentado los niveles los gases de efecto invernadero en España, frenado la lucha contra el cambio climático. En definitiva, desde Greenpeace consideran que Soria ha estado en el Ministerio de Industria, Energía y Turismo «como un elefante en una cacharrería» donde ha producido un «daño» que tardará mucho tiempo en repararse. Por ello, ha valorado su renuncia como «una buena noticia» que podía haber llegado antes, ya que se han producido «mil oportunidades anteriores» para que dimitiera y ha agregado que España no se puede permitir tener ministros con negocios en paraísos fiscales.

Mientras, la directora ejecutiva de SEO/BirdLife, Asunción Ruiz, dio por «aceptada y bienvenida» la dimisión el ministro en funciones a quien culpa de haber provocado «un gran apagón en el desarrollo energético, ambiental y social». En concreto, considera que desde el punto de vista ambiental, sus reformas legislativas han supuesto un «claro retroceso» en el avance hacia un modelo energético bajo en emisiones y que ha puesto freno al reto de las energías renovables a pesar de ser el país del sol y el viento.

Desde el punto de vista económico, recordó que las políticas de Soria han significado que muchos inversores no vieran a España como un «país fiable», tras su freno al sector de las renovables, donde España era un «país de referencia» y ocupaba una «posición de liderazgo«, lo que ha provocado que siga manteniendo una «alta» dependencia de los combustibles fósiles. En su opinión, sus reformas han mermado las posibilidades de empleo verde que traería el desarrollo de las renovables y, también desde el punto de vista social, la elevada cifra de afectados en España por pobreza energética es «una realidad».

Por último, el secretario general de WWF, Juan Carlos del Olmo, considera que ha sido una etapa sobre todo marcada por el enfrentamiento, la falta de sintonía con las ONG ecologistas y por su apuesta «muy clara» por las prospecciones petrolíferas en Canarias y en el Mediterráneo. Para Del Olmo, Soria ha ejercido de bloqueo contra las energías renovables y limpias y hacia la democratización de la energía que necesita España. Por ello, pide al presidente en funciones, Mariano Rajoy, que el próximo ministro sea «mucho más dialogante» y capaz de afrontar el reto que tiene la sociedad en materia energética, de modo que, en primer lugar, pueda cumplir los retos del cambio climático y abogar por la transición energética.