Entradas

Sacyr gana 31,3 millones en el primer trimestre gracias a la aportación de 55 millones de su participación en Repsol

Europa Press.- Sacyr obtuvo un beneficio neto atribuible de 31,3 millones de euros en el primer trimestre, un 26,5% menos que un año antes, cuando se anotó ganancias extraordinarias por la venta de 3 hospitales, y a pesar de la aportación recibida por su participación en Repsol. La compañía que preside Manuel Manrique se anotó 55 millones de euros en sus resultados trimestrales en virtud del porcentaje del 8,2% que tiene como segundo accionista de la petrolera.

Por contra, las cuentas trimestrales de Sacyr no recogen aún impacto alguno derivado de la liquidación total de la deuda que la constructora tenía vinculada a esta inversión en Repsol, dado que se terminó de amortizar ya en el mes de abril. En el plano operativo, la cifra de negocios de la compañía se elevó un 15,6%. En el capítulo financiero, la deuda financiera neta de la compañía se situaba en marzo en los 3.015 millones de euros, si bien este importe ya tiene descontado el pasivo de Repsol, liquidado en abril. Ello implica un recorte de deuda del 19% desde el inicio del año.

La petrolera británica BP sale de pérdidas y gana 1.325 millones de euros por el alza del precio del petróleo

EFE.- La petrolera británica BP anunció que su beneficio atribuido en el primer trimestre de 2017 fue de 1.449 millones de dólares (1.325 millones de euros), gracias al aumento este año del precio del crudo, con lo que deja las pérdidas del año anterior. BP indicó que estos resultados contrastan con las pérdidas atribuidas de 583 millones de dólares (533 millones de euros) obtenidas en el mismo periodo del año anterior.

Las ganancias se han producido una vez que el petróleo se situó este año un 35% por encima de su cotización de 2016. Según la petrolera, su beneficio antes de impuestos fue entre enero y marzo de 2.115 millones de dólares (1.935 millones de euros) frente a las pérdidas de 865 millones de dólares (795 millones de euros) en los tres primeros meses del año pasado. Los ingresos totales alcanzaron en el periodo los 56.386 millones de dólares (51.593 millones de euros), un alza del 43,9% respecto al mismo periodo del año anterior, según BP.

La deuda neta de la empresa es de 38.600 millones de dólares (35.319 millones de euros), un 28,6% más frente a la cifra de 2016, por lo que la ratio de deuda, según BP, se situó en el 28%. Además, la empresa indicó que continúa con su plan de desinversiones y espera que este año se sitúen entre 4.500 a 5.500 millones de dólares (4.117-5.036 millones de euros). Entre otras cosas, BP informó de que los pagos relacionados con el vertido del Golfo de México fueron en el primer trimestre de 2.104 millones de euros.

La empresa señaló que su negocio continúa en ascenso y los volúmenes de ventas se han visto incrementados en el último año. BP resalta que ha abierto sus primeras gasolineras en México y espera ampliarlas en los próximos cinco años. Según la empresa británica, en el primer trimestre se halló gas en el este del Delta del Nilo, en Egipto, mientras que el proyecto Trinidad empezó sus operaciones en abril.

Isolux tiene hasta el 5 de agosto para pactar un nuevo rescate y evitar el concurso

Europa Press.- Isolux Corsán cuenta con plazo hasta el 5 de agosto para acordar con sus principales bancos acreedores y accionistas una inyección de capital de unos 400 millones de euros que garantice la viabilidad de la compañía de construcción e ingeniería con el fin de evitar el concurso de acreedores.

El Juzgado de lo Mercantil número 1 de Madrid admitió la solicitud de preconcurso de la empresa este 5 de abril, con lo que comenzaron a contar los preceptivos cuatro meses para pactar con la banca. Isolux solicitó acogerse a la Ley concursal el 31 de marzo después de que no lograran fructificar las negociaciones que mantenía con los bancos. Con esta decisión, el grupo busca dotarse plazo suficiente para seguir negociando sin el riesgo de que un tercero inste el concurso de la compañía. Cuenta para ello con el asesoramiento de la firma Alvarez&Marsal.

El grupo que preside Nemesio Fernández-Cuesta necesita una nueva inyección de capital para cubrir sus necesidades de liquidez, garantizar la operativa de la empresa y la ejecución de sus proyectos. La compañía negocia lograr estos recursos con Santander, Bankia y CaixaBank, bancos que además actualmente son sus tres primeros socios. Las tres entidades suman el 30% del capital de la constructora, controlada al 90% por un total de veinte bancos.

Precisamente, Isolux quedó en manos de sus bancos acreedores a finales del pasado año, cuando canjeó su deuda por acciones, unos 1.400 millones del pasivo total de 2.200 millones que soporta. El canje de deuda por acciones constituyó uno de los pilares del plan de rescate que la compañía acordó con sus bancos en julio de 2016. De esta forma, Isolux negocia un nuevo rescate con la banca menos de un año después del primero, con el que salieron de la empresa y diluyeron a menos del 5% su participación sus antiguos accionistas de control.

El plan pactado el pasado año supuso una reestructuración de la compañía, tanto en la plantilla como en su dirección y organización, y el lanzamiento de un programa de desinversiones de activos no estratégicos. Así, tras vender un parque eólico en Argentina y la filial de plantas fotovoltaicas T-Solar, trabaja ahora para desprenderse del resto de activos en los que tiene colgado el se vende como un conjunto de líneas de transmisión eléctrica de Brasil.

El fondo de inversión Blackstone compra en Texas el operador de gasoductos EagleClaw Midstream por unos 1.876 millones de euros

Europa Press.- Blackstone ha llegado a un acuerdo vinculante para la adquisición de EagleClaw Midstream Ventures, uno de los mayores operadores privados de gasoductos en Texas, por unos 2.000 millones de dólares (1.876 millones de euros). La operación, que podría completarse a finales de julio, se llevará a cabo en efectivo e incluye 1.172 millones de euros en deuda financiada por Jefferies.

Tras el cierre de la transacción, EagleClaw mantendrá su nombre comercial y operará como una compañía en cartera de Blackstone, precisó la entidad. «Esta transacción representa un momento muy emocionante en nuestra historia de crecimiento», declaró el presidente y consejero delegado de EagleClaw, Bob Milam, destacando la reputación de Blackstone como inversor en el sector de la energía, así como su escala, que permitirá llevar a EagleClaw «al siguiente nivel».

Sacyr liquida la deuda de 769 millones de euros que le quedaba de la compra de su participación en Repsol

Europa Press.- Sacyr ha liquidado anticipadamente la totalidad de la deuda de 769 millones de euros que le quedaba vinculada a la participación del 8,2% que tiene como segundo máximo accionista de Repsol, según indicó la constructora. Se trata del último remanente del pasivo de 2.264 millones de euros asociado a la inversión en la petrolera que el grupo que preside Manuel Manrique refinanció en enero de 2015 y que vencía el 31 de enero de 2018.

Con esta amortización anticipada, Sacyr no solo liquida toda la deuda vinculada a Repsol, sino que recorta por debajo de la cota de los 3.000 millones de euros la deuda total de 3.726 millones que tenía. Asimismo, el grupo podrá beneficiarse del dividendo que reparte Repsol, que hasta ahora venía destinando a cubrir los intereses que le generaba el pasivo vinculado a su inversión en la compañía que preside Antonio Brufau. Además, la compañía blinda las acciones que tiene de Repsol de las oscilaciones de su cotización vinculadas a las variaciones del precio del petróleo.

Sacyr ha logrado todo ello al firmar una nueva operación de derivados con parte de los títulos que tiene de la petrolera, esto es, con 72,70 millones de acciones, equivalentes al 60% del total que tiene en Repsol, y representativas del 5% de esta compañía. En virtud del préstamo, no tendrá que poner garantías si los títulos del préstamo de derivados bajan de la cota de 10,9 euros por acción.

Se trata de la tercera operación de este tipo que el grupo de construcción acomete, tras las dos realizadas el pasado año. Con ella, todas sus acciones de Repsol pasan a estar en contratos de derivados, si bien Sacyr conserva los derechos de voto, y liquida toda la deuda que tenía asociada a su inversión en la petrolera. Con las operaciones realizadas en septiembre y diciembre de 2016 pagó anticipadamente un total de 885 millones de la deuda vinculada a Repsol, el 53% de la que tenía entonces, que quedó reducida a estos 769 millones.

No obstante, los derivados son un activo financiero y se puede liquidar en acciones o en efectivo. En este caso, la operación constituiría una puerta de salida o de reducción de la posición de Sacyr en el capital de Repsol, donde desembarcó en 2006 y en el que llegó a tener un 20% del capital. Sacyr, que actualmente está inmerso en su crecimiento internacional, siempre ha defendido su participación en Repsol como una inversión «estable» con la que se siente «confortable”, tal como reiteró el presidente de la constructora en su última junta de accionistas.

Abengoa prevé cerrar este año la venta de su 41,6% en Atlantica Yield mientras completa la reestructuración de su deuda

EFE.- Abengoa ha completado el proceso de reestructuración de su deuda una vez admitidas a negociación las nuevas acciones y los warrants (derechos de compra sobre acciones) emitidos para compensar a los acreedores, según comunicó el grupo de ingeniería y energía a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), que prevé cerrar en un plazo de entre tres y seis meses la venta de su participación del 41,6% en Atlantica Yield, su filial cotizada estadounidense, según explicaron fuentes del mercado.

Es una participación de control

Abengoa prevé desprenderse de la totalidad del paquete en un solo bloque porque se trata de una participación de control, lo que le permitirá obtener un mejor precio. Atlantica Yield tiene una capitalización de 2.070 millones de dólares (1.943 millones de euros), lo que supone valorar el 41,6% de Abengoa en 850 millones de dólares (unos 800 millones de euros), suma a la que habría que sumar la prima de control. Según las fuentes consultadas, en el mercado existe interés por adquirir esa participación, en concreto entre fondos soberanos y otros especializados en infraestructuras y activos energéticos. La venta de la participación en Atlantica Yield forma parte del plan de desinversiones de Abengoa, que persigue la reducción de la deuda.

Completa reestructuración de su deuda

Por otro lado, el comienzo de la cotización de los nuevos títulos ha diluido la participación de los antiguos accionistas de la compañía, que se quedan tan solo con el 5% del capital, mientras que los acreedores y nuevos financiadores se quedan con el 95% restante, lo que se ha traducido en fuertes caídas en Bolsa de los títulos de Abengoa. Las acciones de clase B han caído un 78,18%%, hasta 0,02 euros, mientras que las de clase A han descendido un 79,78%, hasta 0,05 euros. Recientemente Abengoa recibió el dinero nuevo que los inversores se habían comprometido a inyectar en la compañía, 1.170 millones de euros para que así la compañía pueda poner en marcha su plan de viabilidad.

Gas Natural Fenosa lanza una emisión de bonos de 1.000 millones a 7 años mientras realiza una recompra de obligaciones

EFE / Servimedia.- Gas Natural Fenosa ha realizado una emisión de bonos por valor de 1.000 millones de euros a 7 años, a la vez que también ofrece recomprar bonos por un importe de hasta 1.000 millones. La primera de las operaciones, con vencimiento en abril de 2024, fija un cupón anual del 1,125%, con un precio de emisión del 99,466% del valor nominal de los nuevos bonos.

La emisión ha tenido una demanda superior a los 3.000 millones de euros, el triple de la oferta, y ha recibido órdenes de más de 230 inversores institucionales de 34 países, según indicó la multinacional. El desembolso de esta operación está previsto que tenga lugar el próximo día 11 de abril. En paralelo, Citigroup Global ha lanzado una oferta de recompra de bonos de Gas Natural Fenosa con vencimientos entre 2018 y 2021, cuyo resultado se conocerá el 5 abril. Está previsto que los nuevos bonos, total o parcialmente, sean permutados por los bonos de la energética que hayan sido finalmente adquiridos por Citigroup Global.

La oferta de compra se dirige a cinco emisiones de obligaciones simples que tienen un importe de entre 700 y 850 millones de euros cada una, un tipo de interés de entre el 4,125% y el 6%, y que vencen en 2018, 2020 y 2021. Citigroup aceptará compras solicitadas por tenedores de obligaciones hasta un importe máximo de 1.000 millones.

Estas actuaciones, asegura la compañía que preside Isidre Fainé, “se enmarcan en el habitual proceso de optimización de su deuda financiera”. Durante 2016, tan solo a nivel corporativo y en el mercado bancario, refinanció o reestructuró líneas de crédito por importe superior a 4.500 millones de euros, así como préstamos por importe de 1.300 millones de euros. «Gas Natural Fenosa, de acuerdo con su política financiera, realiza constantemente una revisión de su estructura financiera con el objetivo de incrementar la liquidez, ampliar la vida media de su deuda financiera, así como reducir sus costes de financiación», ha asegurado la firma.

Abengoa recibe 1.169 millones de euros para completar su reestructuración y pone en marcha la ampliación de capital

Europa Press / EFE.- Abengoa recibió los 1.169 millones de euros de dinero nuevo, lo que, sumado a la ampliación de capital prevista y a la emisión de los warrants, permitirá completar el proceso de reestructuración con el que la empresa ha evitado la quiebra. Tras la firma la semana pasada de los documentos de la reestructuración de Abengoa, se procedió a solicitar el desembolso a los diferentes bonistas e inversores.

En concreto, la reestructuración contempla una figura, la del agente escrow, a quien se le encargó la gestión de una cuenta de depósito a la que se ha destinado el dinero, que se inyectará posteriormente a la compañía en paralelo a la ampliación de capital y a la emisión de los warrants. Al recibirse los fondos, se ha procedido a la ejecución de la ampliación de capital de Abengoa y a la emisión de los warrants (derechos de compra de acciones) previstos en el acuerdo.

Según el acuerdo de rescate con los bancos acreedores y los fondos para la reestructuración de su deuda financiera y su recapitalización, el grupo recibiría una inyección de dinero nuevo de casi 655 millones de euros. El importe total del dinero nuevo que se acordó prestar al grupo asciende a 1.169 millones de euros, aunque esta cantidad incluye los importes refinanciados de los préstamos recibidos por el grupo en 2015 y en marzo de 2016, unos 514 millones de euros.

Los inversores que aporten los nuevos fondos recibirán las acciones que se emitan en esta ampliación de capital. Los warrants se entregaron a quienes eran titulares de acciones de Abengoa, lo que ofrecía el derecho a comprar títulos del grupo en un plazo de 8 años (96 meses) si se cumplen una serie de condiciones. Al término del proceso de reestructuración, los actuales accionistas de Abengoa se quedarán tan solo con el 5% del capital, un porcentaje que podrán aumentar por medio de los warrants.

Además, se incluían 307 millones de euros de nuevas líneas de avales. Las entidades financiadoras que lo aporten tendrán derecho a recibir un 5% del nuevo capital social de Abengoa. De esta cantidad, unos 50 millones serán para pujar por nuevos proyectos y el resto para avanzar en los actuales. El acuerdo suponía para los acreedores aceptar una quita del 97%, manteniéndose el 3% restante con vencimiento a 10 años, sin devengo anual de intereses y sin posibilidad de capitalización.

El reparto del capital de la nueva Abengoa será de en torno al 50% para los bonistas y hedge funds y aproximadamente un 40% para la banca acreedora. Además, otro 5% quedará en manos de los avalistas. El comité de bancos que participaron en las negociaciones para la reestructuración estuvo compuesto por Bankia, Banco Popular, Banco Santander, Caixabank y Credit Agricole, mientras que los inversores de nuevo dinero son Abrams Capital, The Baupost Group, Canyon Partners, The D.E. Shaw Group, Elliott Management, Oaktree y Värde.

Gas Natural Fenosa presenta ante Uncitral el proceso arbitral contra Colombia para que le devuelva Electricaribe antes de su liquidación

Europa Press.– Gas Natural Fenosa ha iniciado el arbitraje internacional contra Colombia con la presentación de una demanda ante el Tribunal de la Comisión de las Naciones Unidas para el Desarrollo Mercantil Internacional (Uncitral) por la decisión de liquidación de su filial Electricaribe, según anunció la compañía.

En concreto, el objetivo de la demanda por parte de la energética española es que se le devuelva Electricaribe, en la que posee una participación del 85%, con un marco regulatorio viable o se le compense por un importe que se cuantificará en el curso del procedimiento, pero que, con arreglo a valoraciones preliminares, superará los 1.000 millones de dólares (unos 927 millones de euros).

En la solicitud presentada, Gas Natural Fenosa se alza al acudir al arbitraje, entre otros, contra la ausencia de trato equitativo y de seguridad jurídica en la actividad regulada; contra la toma de posesión que constituye una expropiación sin indemnización; y contra el hostigamiento sobre un inversor internacional, mientras trata de resolver por vía amistosa sus diferencias con un Estado mediante los instrumentos establecidos en Derecho Internacional, señala la compañía. La Comisión de las Naciones Unidas para el Derecho Mercantil Internacional (Uncitral), al igual que el Ciadi del Banco Mundial, está reconocido como un foro adecuado de resolución de diferencias en el Acuerdo Bilateral de Promoción y Protección Recíproca de Inversiones entre Colombia y España.

Deuda de casi 1.300 millones

Por su parte, Colombia cifra entre 1.200 y 1.300 millones de euros la deuda total de Electricaribe, incluyendo el pasivo correspondiente a entidades financieras y proveedores, según indicaron fuentes diplomáticas colombianas. Esta cifra es superior a la facilitada al anunciarse la liquidación de Electricaribe, por la Superintendencia de Servicios Públicos Domiciliarios del país, que cifraba el pasivo total de la compañía en 2,4 billones de pesos colombianos (unos 750 millones de euros), de los que 1,8 billones (565 millones de euros) correspondían a entidades financieras.

Estas mismas fuentes diplomáticas calificaron a Electricaribe como «uno de los grandes problemas de Colombia», especialmente debido a que se trata de un «problema público» al afectar al suministro energético de 10 millones de personas, aproximadamente el 25% de la población. Además, estimaron que la cifra de impagos de los llamados organismos semioficiales del país, las Administraciones locales de las regiones, asciende a unos 50 millones de euros y es producto de muchos años de impago. «Es una cifra importante, pero lejos de ser la causa de la situación», señalaron.

Por otra parte, estas mismas fuentes diplomáticas consideraron «injustas» las críticas recibidas contra el país respecto a la seguridad jurídica por este conflicto con Gas Natural Fenosa. A este respecto, señalaron que se ha explicado a las empresas españolas con presencia en Colombia que la seguridad jurídica está garantizada y afirmaron que éste es «un caso específico». «Ninguna ha manifestado ningún temor y todas las empresas han expresado que se sienten muy cómodas en Colombia«, añadieron. Además, en el caso particular del presidente de Repsol, Antonio Brufau, que consideró que la decisión de Colombia de liquidar y vender Electricaribe se trataba de un ejemplo de «falta de seguridad jurídica-económica», indicaron que las autoridades colombianas en España le explicarán la intervención.

Las mismas fuentes subrayaron que la decisión de liquidar Electricaribe radica en la falta de condiciones para prestar el servicio con la calidad y continuidad que requieren los consumidores debido a la ausencia de inversión para acometer las mejoras de la red, algo «que viene de muchos años», precisaron, aunque reconocieron que existe una cultura del no pago en la región afectada. A este respecto, recordaron que Gas Natural Fenosa opera como distribuidora de gas natural en Bogotá y en otras zonas del país y que no existe este problema. «La seguridad jurídica de como operar una compañía en el país es la misma», indicaron.

Gas Natural Fenosa denunciará a Colombia por Electricaribe ante los tribunales internacionales de arbitraje mientras Fainé intenta aún el diálogo

Europa Press.- Gas Natural Fenosa considera que «no le queda otra alternativa» que recurrir a los tribunales internacionales de arbitraje tras la decisión de las autoridades colombianas de liquidar y vender su filial Electricaribe. Sin embargo, fuentes conocedoras de las negociaciones entre la empresa y las autoridades colombianas indicaron que el presidente de Gas Natural Fenosa, Isidro Fainé, mantuvo recientemente una reunión con el presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, en la que ambas partes acordaron abrir una línea de diálogo paralela.

Las fuentes explican que, al margen de estos contactos con el Gobierno colombiano en los que se negociaría una nueva regulación para Electricaribe a cambio de que la empresa española realice nuevas inversiones, se están ultimando los detalles de la denuncia internacional, que se presentará ante el tribunal de arbitraje dependiente del Banco Mundial, el Ciadi. La compañía española asegura que, «dada esta situación de hechos consumados, a Gas Natural Fenosa no le queda otra alternativa que acudir a una institución internacional para que resuelva la situación creada en la forma prevista en el Acuerdo de bilateral de protección recíproca de inversiones entre España y Colombia, vía que ha estado demorando hasta el momento voluntariamente».

La compañía recuerda que ya ha desconsolidado su participación en Electricaribe y reclasificó la filial como activo financiero con un valor contable de 475 millones. «Obviamente, la reclamación internacional se hará por la totalidad de su valor, que es muy superior», asegura. Gas Natural Fenosa reclama además a las autoridades colombianas que «dejen sin efecto» la liquidación y venta de su filial Electricaribe y «trabajen para buscar una solución satisfactoria y, sobre todo, sostenible para la prestación del servicio de suministro eléctrico en la zona».

Además, lamenta la decisión anunciada por la Superintendencia de Servicios Públicos Domiciliarios de Colombia, que «obvia» a su juicio el «problema fundamental» de la filial intervenida y «entra en contradicción» con las declaraciones realizadas por los actuales administradores de Electricaribe. Electricaribe es una empresa regulada y suministra a todos los clientes de su zona en las condiciones que el Gobierno determina en cada momento. La regulación actual no tiene en cuenta las características de la zona del Caribe y sus problemas, lo que aboca a la filial a un déficit adicional de 85 millones en 2017, argumenta la compañía española.

Al tiempo que se muestra dispuesta a denunciar a Colombia ante los tribunales internacionales, Gas Natural Fenosa expresa su «voluntad de seguir negociando con el Gobierno de Colombia para alcanzar un acuerdo que, dotando a Electricaribe de un marco regulatorio adecuado, establezca la necesaria regulación jurídica y económica que le permita continuar operando Electricaribe, y llevar a cabo las inversiones convenientes». La situación de Electricaribe se debe a la «inseguridad normativa existente en el país debido al fraude e impago padecido», señala Gas Natural Fenosa.

Además, considera que la liquidación de la empresa también es contraria al «espíritu de profundización de las relaciones comerciales entre la Unión Europea y Colombia, conforme al Acuerdo de Libre Comercio» e «impacta negativamente en el clima requerido para que se produzcan los flujos de inversión internacional hacia ese país». La orden de liquidación es «claramente» un paso en la dirección opuesta a los principios que preconiza la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), de la que Colombia es candidata a la adhesión, añade la compañía española.

Gas Natural Fenosa también expresa su «sorpresa» por la «falta de importancia» que la Superintendencia atribuye al «gravísimo problema de la morosidad y el fraude», pues arrastra una deuda superior a los 1.300 millones de euros. La deuda de los clientes protegidos a los que es imposible cortar el suministro por imperativo legal supera los 350 millones de euros. A estos importes se suman fraudes por importe superior a los 100 millones de euros anuales. La empresa, señala, interpuso más de 16.000 denuncias, de las que solo obtuvo 85 condenas. «Es una auténtica ocurrencia decir que la gestión del riesgo de fraude o impago está en manos de Electricaribe», concluye.

«A pesar de la magnitud de las cifras, a pesar de las auditorías al efecto y de los numerosísimos escritos a diversos organismos oficiales, y al hecho de que el Estado colombiano detenta un 14% del capital social (bajó del 30% al 14% al no acudir a las ampliaciones de capital) y tiene un representante en el Consejo de Administración, la Administración colombiana no ha tomado las medidas necesarias para evitar el colapso de la sociedad por falta de adecuada regulación y seguridad jurídica«, afirma. Electricaribe fue adquirida por Unión Fenosa en 2000 y, desde entonces, se invirtieron desde España en Electricaribe más de 800 millones de euros, «y jamás se cobró ningún dividendo», señala.