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Las organizaciones renovables critican al Gobierno tras el apoyo de la Comisión Europea al autoconsumo

Redacción / Agencias.- La patronal fotovoltaica UNEF y la Fundación Renovables cargaron contra la propuesta de regulación para el autoconsumo elaborada por el Gobierno español ante el apoyo mostrado por la Comisión Europea a esta actividad al subrayar que «los consumidores necesitan ser libres para generar y consumir su propia energía en condiciones justas para ahorrar dinero, ayudar al medio ambiente y asegurar la seguridad de suministro» dentro de un paquete de propuestas en materia energética con el objetivo de reducir las emisiones y mejorar la eficiencia energética.

La Fundación Renovables asegura que el real decreto del Ejecutivo va «en dirección contraria» a las recomendaciones de la Comisión Europea en materia de autoconsumo, por lo que exigió que «retire su propuesta y la redacte de nuevo tomando nota de las recomendaciones«. El presidente de la Fundación, Domingo Jiménez, señaló que «la propuesta del Gobierno sobre autoconsumo es un ataque frontal a los intereses de los ciudadanos españoles» que va contra «la inevitable democratización energética«. De esta forma, Jiménez celebró que Bruselas recoja «las mejores prácticas internacionales sobre autoconsumo creando así una clara indicación sobre la necesidad de derribar las barreras para que la ciudadanía pueda jugar en paridad de condiciones con las grandes empresas en el sector energético».

Por su parte, la Unión Española Fotovoltaica (UNEF), asociación que representa al 85% de la capacidad fotovoltaica instalada y a la mayoría de entidades relacionadas con el sector, considera que las directrices distribuidas por la Comisión Europea son un «respaldo» a sus reivindicaciones en contra del proyecto de real decreto de autoconsumo energético que planea aprobar el Gobierno, que a su juicio queda así «invalidado«.

Para UNEF, este documento «demuestra que el Gobierno de España no está construyendo un sistema eléctrico adecuado a nuestro futuro y debe retirar el proyecto de real decreto actualmente en tramitación», añadió. Este borrador prevé el establecimiento de una serie de cargas económicas para los autoconsumidores conectados a la red con el objetivo de que estos contribuyan a sufragar los costes del sistema eléctrico. Para el presidente de UNEF, Jorge Barredo, la normativa española contradice las directrices de la Comisión tanto por las cargas como por los complejos procesos administrativos establecidos y por las dificultades impuestas al uso de almacenamiento.

En el documento Mejores prácticas para el autoconsumo con energías renovables, la Comisión Europea destaca que «el autoconsumo energético puede producir un gran número de beneficios», y reconoce que el fomento del autoconsumo energético puede reducir los costes del sistema, «especialmente en aquellos países soleados, en los que ayuda a reducir los picos de demanda producidos por el uso de los aires acondicionados«. La Comisión Europea reconoce asimismo que el autoconsumo puede significar «una importante contribución a financiar la transición energética» hacia un modelo más sostenible y a «reducir la factura eléctrica de los consumidores».

Bruselas considera que la energía renovable es «esencial y contribuye a todos los objetivos de la Unión Energética: seguridad de suministro, transición hacia un sistema sostenible de energía reduciendo gases de efecto invernadero, desarrollo industrial para el crecimiento y la creación de puestos de trabajo y reducción de los costes de la energía para la economía de la Unión Europea». Además, según la patronal fotovoltaica, la Comisión se ha posicionado «en contra» de algunas de las medidas más polémicas introducidas en el proyecto de real decreto de autoconsumo que se encuentra en tramitación en España.

Concretamente, según UNEF, Bruselas denuncia que los procesos administrativos complejos para la autorización de proyectos representan «una importante barrera para la competitividad de los pequeños y medianos proyectos»y aboga por la eliminación de cualquier necesidad de legalización para las pequeñas instalaciones, más allá de un «sistema de notificaciones sencillo». Asimismo, la Comisión Europea destaca la idoneidad del uso de sistemas de almacenamiento que «pueden permitir a los consumidores almacenar y utilizar la energía generada por sus propios sistemas renovables de una manera más eficiente».

«Los mayores beneficios para la red se alcanzan cuando el almacenamiento distribuido se gestiona para reducir la potencia pico de las instalaciones de energía renovable descentralizadas», puntualizó la Comisión. El documento aboga además por la eliminación de «cargos discriminatorios para los autoconsumidores» y por la necesidad de garantizar la no retroactividad de los cambios administrativos, «asegurando la estabilidad de las inversiones en autoconsumo ya realizadas.

UNEF recuerda que el borrador del Gobierno, sin embargo, prevé la eliminación de los procesos simplificados de regularización de instalaciones existentes, y obligaría a todos los proyectos a legalizarse de nuevo bajo la «compleja y costosa normativa» que, además, prohíbe el uso de sistemas de almacenamiento. Además, el borrador propuesto por el Gobierno, prevé unas «cargas«, conocidas popularmente como «impuesto al sol«, para todos los que opten por este sistema de ahorro y eficiencia energética.

La patronal fotovoltaica UNEF tacha de «vaguedades» los cambios regulatorios en el autoconsumo

EFE.- El sector solar fotovoltaico tachó de «recopilación de vaguedades» los cambios introducidos por el Gobierno en la normativa de autoconsumo para, según apuntó el Ejecutivo, beneficiar a los pequeños consumidores. Según fuentes de la patronal UNEF, el cambio aprobado el pasado viernes por el Consejo de Ministros «no tiene ninguna precisión» y, de hecho, avanza en la «voluntad del Gobierno de seguir adelante con el impuesto al sol ignorando el clamor social».

El viernes, como parte del real decreto que redujo el IRPF, el Gobierno aprobó una vía para reducir las cargas asociadas al autoconsumo para los pequeños clientes, los de menos de 10 kilovatios (kW). En el real decreto, se abre la puerta a la posibilidad de reducir esas cargas, como ocurre para los autoconsumidores de los territorios extrapeninsulares cuando la instalación de estos equipos supone un ahorro para el sistema eléctrico. Sin embargo, la eventual reducción de cargas sería «excepcional y siempre que se garantice la seguridad y la sostenibilidad económica y financiera del sistema».

Hasta ahora, la regulación del autoconsumo sólo está esbozada en la ley del Sector Eléctrico de 2013, que remite a un desarrollo posterior todavía pendiente de aprobación por el Gobierno. Así, tanto la definición de las cargas asociadas al autoconsumo por conectarse a la red como las posibles reducciones o exenciones de estas tendrán que recogerse en la normativa definitiva, que el Gobierno prevé aprobar antes de final de mes.

28 organizaciones del sector energético rechazan el decreto de autoconsumo

Servimedia.- Un total de 28 organizaciones del sector energético de toda España, entre las que figuran Anpier, APPA, Fundación Renovables, UNEF y WWF, manifestaron su «frontal rechazo» al nuevo proyecto de real decreto sobre autoconsumo del Gobierno ya que consideran que este proyecto de real decreto constituye un «nuevo ataque» a la posibilidad de desarrollar en España un sector energético «democrático, sostenible, de baja huella de carbono, de generación distribuida e independiente de los intereses que no se basen exclusivamente en criterios medioambientales, sociales, de eficiencia energética, que sean económicamente sostenibles».

A su juicio, presenta en su globalidad «incontables contradicciones» y propone tanto impedimentos económicos como burocráticos al autoconsumo, desincentivando «por completo» este tipo de instalaciones. Asimismo, sostienen que contradice de forma «flagrante» las directivas europeas a las que precisamente hace referencia en la introducción y justificación de la normativa. Entre otros aspectos, indican que mantiene elementos disuasorios como el peaje de respaldo, de una forma «incluso peor que en la anterior propuesta de real decreto», ya que añade un término fijo, además del variable, a dichos peajes.

También se refieren a las trabas añadidas a los procedimientos de autorización y conexión a redes de transporte y distribución, de manera «injustificada», para aquellas instalaciones en las que se garantiza que no habrá inyección de energía a la red, «eliminando de facto la posibilidad de que cualquier ciudadano pueda, libremente, disponer de una instalación de autoconsumo en el interior de su instalación eléctrica, garantizando que no inyecta energía en la red y por tanto haciendo un uso cero de la misma».

Además, creen que añade nuevas imposiciones «muy difíciles de justificar desde una óptica social, y tampoco justificables técnica o económicamente«. En concreto, consideran que condena a los ciudadanos que sufren pobreza energética al recoger que el consumidor con autoconsumo «no tendrá´ derecho a ninguna modalidad regulada de suministro» y perdería por tanto el derecho al bono social además de pagar por la totalidad de la energía que consuma. Igualmente, reprueban que la norma dictamine que «toda la energía generada por la instalación de generación asociada pasará a ser cedida al sistema eléctrico, sin ningún tipo de contraprestación económica vinculada a dicha cesión» lo que a su entender constituiría «una expropiación en toda regla».

Las entidades firmantes se comprometieron a hacer llegar este manifiesto a la Comisión de Industria, Investigación y Energía del Parlamento Europeo, así como al Ministerio de Industria, Energía y Turismo, y solicitar una reunión con cada organismo para poder defender su postura. Las organizaciones firmantes son: A3E, HACER, Actecir, Agaen, AGEM, AGIC, Aifoc, ANAE, Anpier, APPA, Aprean, Asinca, Avaesen, CEEC, Cetib, CCOO Cataluña, Coamb, GGE, Eoliccat, Fenie, Ferca, Fundació Electrotécnica Catalana, Fundación Renovables, GremiBCN, Som Energia, UNEF, Solartys y WWF.

SEO/BirdLife presenta alegaciones al borrador del real decreto de autoconsumo

Servimedia.- La Sociedad Española de Ornitología (SEO/BirdLife), como parte de la Plataforma por un Nuevo Modelo Energético, ha presentado alegaciones al borrador de real decreto de autoconsumo publicado por el Ministerio de Industria, Energía y Turismo. La organización señala que el borrador de Industria haría que el consumidor pagase más peajes sobre la misma energía si la autoconsume desde fuentes renovables autónomas , que si la saca de la red eléctrica.

Dicho cargo, además, sería «todavía más elevado» si hace uso de baterías, lo que a su juicio resulta «inaceptable» ya que el almacenamiento de energía es un importante elemento de gestión de la demanda que, además, proporciona más autonomía y flexibilidad al consumidor. Además, critica que el borrador de Industria no contiene una Memoria del Análisis de Impacto Normativo elaborada de acuerdo a la ley, que «habría sido fundamental para poder valorar, entre otras cosas, el impacto del borrador de autoconsumo sobre el empleo y la economía». La organización conservacionista recuerda el autoabastecimiento de electricidad podría cubrir el 50% de la demanda energética de los municipios del Estado para 2050, y crear 136.000 empleos de calidad en solo diez años.

Neutralidad en la regulación del autoconsumo (II)

Desde la política, y ha sido una constante repetida en el último proceso electoral, los grupos políticos vienen alimentando una visión fantasiosa del autoconsumo como opción dentro del suministro eléctrico para dar un cauce de salida a los consumidores de una tarifa cuya parte fija es creciente por sus propios costes de acceso. No solamente los partidos políticos emergentes, proclives al populismo mágico, han incurrido en este problema. Partidos que han tenido responsabilidades de gobierno están haciendo bandera de esta reivindicación, uniéndose de forma poco meditada a los damnificados de la anterior burbuja.

La regulación del autoconsumo tendrá, por tanto, que oscilar entre lo posible, lo necesario, lo equilibrado y orillar las tentaciones para que sea disuasoria o, lo contrario, para que estimule una burbuja artificial, la sobreinversión y sobrecapacidad de generación, en este caso distribuida. En este escenario, estamos en la fase de que la confusión entre fomento, discriminación positiva o discriminación negativa respecto al resto de consumidores, y falta neutralidad en la regulación. Al margen queda el debate sobre lo cuantioso de los peajes de acceso.

La regulación propuesta del autoconsumo, actualmente de salida en la CNMC, busca disuadir por los peajes que se fijan; se estima que el retorno de la inversión de alrededor de 30 años. La CNMC, por su lado, remarca de forma futurista el papel de la fotovoltaica en el cumplimiento de los objetivos medioambientales españoles de cara a la planificación energética. Pero eso hay que aterrizarlo de acuerdo con el parque instalado, la capacidad, la demanda y la relación competitiva entre tecnologías limpias, con atención a la no discriminación con respecto al resto de consumidores que no pueden utilizar esta tecnología.

Finalmente, siguiendo con la diferencia entre fantasía y realidad, la no asunción de los costes de los servicios de red y de los servicios de acceso también es una posición ilusoria, utópica y discriminatoria con el resto de usuarios, lo que tampoco podría ser una opción, ni siquiera que deviniera en una burbuja incentivadora que causase tensiones financieras al sistema de suministro eléctrico. Y, la otra frontera, el límite de esta fantasía debe ser la no necesidad de subvención actual (o futura por reclamación), de fomento, incentivo o discriminación positivaa este modelo. Del mismo modo, la disuasión no parece sostenible como modelo regulatorio.

Calcular el coste de estos servicios de red en términos no discriminatorios con otros usuarios, es decir, en condiciones de neutralidad incluyendo la fiscalidad a la generación, no debe ser tan complicado sin hacer un ejercicio deliberado y oportunista de amnesia sobre los costes de acceso del sistema actual. Y, probablemente, la solución a este fantástico y fantasioso nudo gordiano.

El PSOE reclama al Gobierno que paralice el decreto de autoconsumo y dialogue con el sector

Europa Press.- El PSOE reclamó al Gobierno que paralice el real decreto de autoconsumo de electricidad y abra una mesa de diálogo con el sector, con las comunidades autónomas y con el resto de grupos políticos.

El portavoz socialista en Industria y Energía y senador por Guadalajara, Jesús Alique, criticó el texto propuesto por el Gobierno en su intervención ante el Pleno de la Cámara. «Señorías del grupo popular, dejen de recorrer un camino contrario al de otros países y dejen de aferrarse a un modelo cortoplacista y anticuado que solo beneficia a las grandes eléctricas», afirmó Alique. «Si no quieren hacer caso al grupo parlamentario socialista ni al resto de los grupos, háganselo al menos al Papa, al que espero que ustedes no consideren un ecologista trasnochado y radical», afirmó el senador socialista por Guadalajara.

Neutralidad en la regulación del autoconsumo (I)

La actualidad del sector energético en estos últimos estertores de la legislatura pasa por la regulación del autoconsumo que tiene el Ejecutivo planteada y de la partida de ajedrez mediática que hay a su alrededor, con tres ejes fundamentales. El primero es la depresión en términos productivos que se ha producido en el sector fotovoltaico español, fruto de las reformas operadas para la reducción del déficit de tarifa eléctrica.

La segunda tiene que ver con la elaboración argumental de un denominado “impuesto al sol” por los peajes que el Ejecutivo fija para dicho modelo de autosuministro. La tercera se está construyendo en torno a algo más libertario, un movimiento de separación del sistema, que acentúa las tendencias antiempresariales del país y cuyo punto álgido nihilista se ha cristalizado en la oposición a las pretensiones inspectoras y sancionadoras del Ejecutivo que pudieran incurrir en fraude.

El Ejecutivo parece un tanto escarmentado de la forma en que se forjó la dinámica de la burbuja fotovoltaica: ruptura de los diques de la planificación renovable en la fotovoltaica por pasividad y dejación interesada de las comunidades autónomas, descuido en la retribución, sospecha de grandes negocios en la cadena que iba desde la autorización a la puesta en funcionamiento, incluyendo procesos y flujos de financiación enormemente turbios, repotenciaciones encubiertas.

Igualmente se podrá atribuir la reclamación futura a los damnificados por una burbuja del autoconsumo en un país que va de burbuja en burbuja. En este contexto su propuesta ha sido poner pies en pared  y fijar unos peajes disuasorios, más que neutrales, viéndose impelido por una inminencia regulatoria energética en renovables de final de legislatura, fatal en los últimos gobiernos españoles (recuerdos ya tenemos).

Por otra parte, alrededor del autoconsumo energético se están planteando un ejercicio también fantasioso desde el punto de vista político. Un punto de partida es ver su posible alcance, para una sociedad, como la española, cada vez más urbana. Como punto de partida en el autoconsumo, desde el punto de vista del consumidor final, hay que partir de unas dimensiones mínimas. La primera, es que se traten de instalaciones de consumidores cuyas instalaciones tengan una potencia mínima de 5,5 kV, cuya inversión inicial se sitúa entre los 8.000 y los 10.000 euros, que requieren un mínimo de 40 metros de superficie para contar con ella.

Una inversión de tal calibre ya reduce el porcentaje de posibles consumidores que podrían acogerse a esta fórmula. Así este modelo de suministro se dirige a un colectivo con un perfil concreto: clase media-alta, rentistas, titular de viviendas individuales y con capacidad de invertir un equivalente a 10 años de consumo para buscar esa ansiada «separación» del suministro eléctrico general. Un perfil muy diferente de otros países dónde se estimula el autoconsumo por sus problemas de suministro y de capacidad. La pregunta, por tanto, es si es necesario el “estimulo” al autoconsumo en España en este estado de cosas. Es decir, una respuesta entre estímulo al autoconsumo frente a neutralidad.

CCOO afirma que los «obstáculos» al autoconsumo solo favorecen a las grandes eléctricas

Europa Press.- CCOO considera que el mantenimiento de «los obstáculos» que están frenando el desarrollo del autoconsumo «sólo favorece a las grandes empresas eléctricas que así no pierden una parte, aunque sea pequeña, de su mercado y de sus beneficios«. El sindicato, que ha presentado alegaciones a la propuesta de real decreto del Gobierno, considera que el proyecto prohíbe expresamente este autoconsumo a los colectivos más vulnerables al negar el autoconsumo a los usuarios del bono social o a los que tienen el PVPC«.

El sindicato destaca que el autoconsumo energético representa una «pieza clave» para avanzar en la autonomía energética y en la democratización del sector eléctrico, dando entrada a nuevos actores, empresas que permitan aumentar el control y la participación social «en detrimento del actual oligopolio». Asimismo, el sindicato, que cree que debería regularse también un sistema de balance neto, asegura que representa una oportunidad para reactivar el sector de las energías renovables y de toda la industria auxiliar, «actuando como un motor de arrastre para otras actividades como la rehabilitación de edificios o las empresas de servicios energéticos, con el consiguiente impacto positivo en el empleo».

Facua dice que el borrador de Industria «paraliza» el autoconsumo y «se pliega» ante las eléctricas

Europa Press / Servimedia.- Facua-Consumidores en Acción considera que el borrador de real decreto del Ministerio de Industria para el desarrollo del autoconsumo «paraliza» esta actividad y «se pliega a los intereses de las grandes eléctricas«. De este modo, la asociación de consumidores muestra «su más firme rechazo» al proyecto de real decreto presentado por Industria para regular el autoconsumo de energía eléctrica puesto que también considera que «perjudica económicamente a los consumidores».

«Si entra en vigor, la nueva ley supondrá la paralización de un sistema de producción y consumo de electricidad más barato y más respetuoso con el medioambiente», señala. La propuesta, indica, «pretende mantener el statu quo de un sistema que ha provocado subidas de la factura de la luz para las familias del 72,3% en los últimos diez años«. Facua recuerda que España es uno de los países europeos con la factura eléctrica más cara y considera que, si sale adelante la norma, será «uno de los Estados con una regulación más restrictiva para el autoconsumo, a pesar de ser líder en horas de sol«.

La asociación lamenta además que el Ejecutivo no aproveche este decreto para «apostar por un nuevo modelo energético más sostenible», que permita una mayor eficiencia y ahorro de energía y que contemple un mayor impulso a las energías renovables. «Una legislación favorable al autoconsumo permitiría, además, que la producción de electricidad se orientase hacia un modelo de generación distribuida», de modo que la generación «no se concentra en pocas compañías como ocurre en la actualidad, sino que podrían aparecer centrales eléctricas a escala familiar o de pequeña y mediana empresa, algo que repercutiría en una mayor competencia y ampliación de la oferta para los usuarios«.

A juicio de Facua, la norma que quiere aprobar el Gobierno contradice la recomendación de implantar y fomentar en España la producción generada por los pequeños sistemas de autoconsumo realizada por la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC). El organismo indica en un informe que este sistema es necesario para contrarrestar el incremento de precios de la energía eléctrica que se producirá en los próximos años, conforme aumente la demanda de energía. Facua considera también que el proyecto vulnera las directivas europeas de Eficiencia Energética y de Fomento de las Energías Renovables.

Además, entiende que la norma perjudica económicamente al autoconsumo por los «absolutamente desproporcionados» cargos por peaje de acceso a redes, al cobrar por el acceso a la red eléctrica sin que necesariamente se vaya a utilizar su energía todo el tiempo. De igual forma, la norma no recoge una compensación económica al consumidor por la energía excedente que vierta al sistema eléctrico, lo que, según Facua, puede dar lugar a conductas abusivas por parte de las comercializadoras de electricidad. «La asociación pide al Gobierno que elabore una regulación de mínimos que garantice el equilibrio entre las partes implicadas. Lo contrario supone dejar el control total a las propias distribuidoras», agregó.

Px1NME y 17 organizaciones aseguran que el borrador de autoconsumo vulnera directivas europeas

Europa Press / Servimedia.- La Plataforma por un Nuevo Modelo Energético (Px1NME) y otras 17 organizaciones de consumidores, sectoriales y ambientales, han promovido la recogida de alegaciones en Internet de miles de particulares acerca del borrador de decreto de autoconsumo y diseñaron un documento propio en el que consideran que la norma elaborada por el Ministerio de Industria vulnera tres directivas comunitarias. En concreto, las alegaciones presentadas ante el Ministerio de Industria por estas asociaciones consideran que la norma vulnera las directivas europeas sobre renovables, eficiencia energética y eficiencia en edificios.

Entre las alegaciones genéricas a la norma figuran denuncias como la ausencia de un procedimiento específico que regule la tramitación simplificada de las instalaciones de autoconsumo o la inexistencia del balance neto. También se critica que se penalice a los autoconsumidores que tengan almacenamiento de energía o que se produzca la pérdida del derecho a la tarifa PVPC y al bono social. Además, también se apela al concepto de «inseguridad jurídica», al dejar al criterio del Ministerio de Industria la determinación de la cuantía de los «peajes de acceso» y «otros cargos asociados a los costes del sistema» y cargos de «otros servicios del sistema».

Compleja, discriminatoria y sin transparencia

Las asociaciones señalan que la norma «penaliza con carácter retroactivo» y tiene carácter «discriminatorio» para las instalaciones de energías renovables frente a la cogeneración, que tienen una exención hasta el 31 de diciembre de 2019. También lamentan que se niegue o no se reconozca la contribución de los sistemas de autoconsumo con fotovoltaica a reducir las emisiones y la dependencia energética y producir con renovables. Aparte de la Px1NME, en el documento de alegaciones han participado asociaciones como ADICAE, Amigos de la Tierra, ASGECO, ATTAC, CECU, Ecologistas en Acción, Ecooo, EnerPlus, Facua, Fundación Renovables, Goiener, Greenpeace, Holtrop SLP, SEO/Birdlife, Som Energía, UNEF y WWF España.

«La propuesta de autoconsumo basa sus restricciones y cargos en el hecho de que el sistema presta un respaldo y unos servicios a las instalaciones de generación eléctrica, cuando más bien es al revés», apuntan las organizaciones. En concreto, explican que son las instalaciones de generación, incluidas las de autoconsumo, las que prestan un servicio al sistema, especialmente al consumir de forma instantánea la energía generada, al reducir la demanda del consumidor-generador, pero también al generar excedentes, ya que en general disminuyen la demanda total del sistema, reduciendo las pérdidas y evitando la emisión de gases de efecto invernadero, además de no tener en cuenta los beneficios de la generación distribuida, tal y como establece la directiva comunitaria de renovables.

Por último, la «extrema complejidad» de los procedimientos administrativos que define, así como «la muy deficiente redacción de la norma, confusa y hasta en ocasiones inteligible, provoca, según criterios jurisprudenciales, incidencias en el principio de seguridad jurídica y vicios de competencia«. Además, estas organizaciones también consideran que la propuesta del Ministerio de Industria «adolece de falta de transparencia y participación social activa de los ciudadanos».