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Abengoa estima triplicar sus cifras con más renovables y superar los 4.000 millones de facturación en los próximos 10 años

Europa Press.- Abengoa ha trazado un plan de viabilidad a 10 años, en el marco de su reestructuración financiera, con el que estima alcanzar los 4.202 millones de euros de facturación en 2028, frente a los 1.488 millones de euros con los que prevé cerrar 2019, según comunicó a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV). Aunque espera casi triplicar su cifra de negocio durante la próxima década, no espera que su beneficio antes de impuestos (Ebitda) siga el mismo camino.

Según se desprende del documento, Abengoa cerrará el ejercicio de 2019 con un Ebitda de 164 millones de euros, mientras que en 2028 considera que se situará en 295 millones de euros, menos del doble. Por otro lado, Abengoa ha alertado de que el plan está basado en la estimación de que contará con un crecimiento de ingresos «razonable» y «apoyado» por el cambio del mix energético hacia una estructura en la que tengan mayor peso los recursos renovables. Asimismo, para no poner en peligro la reestructuración, Abengoa se ha comprometido a centrarse en proyectos de tamaño pequeño y mediano.

Cesce deberá asumir indemnizaciones por cerca de 100 millones de euros por seguros con Abengoa

Europa Press.- La Compañía Española de Seguros de Crédito a la Exportación (Cesce) deberá asumir alrededor de 97,4 millones de euros por 24 pólizas relacionadas con el Grupo Abengoa. Así figura en su Informe de fiscalización del Fondo de Reserva de los riesgos de la internacionalización, ejercicio 2017 realizado por el Tribunal de Cuentas y que recoge que, en enero de 2016, esta entidad tenía riesgo vivo con Abengoa por importe total de 116 millones de euros y 99,5 millones de dólares.

De estas pólizas, el importe que Cesce deberá indemnizar asciende, al menos, a 75,5 millones de euros y 25 millones de dólares, entre riesgo procedente de crédito comprador, de seguro a fiadores por riesgo de ejecución de avales y de seguro a fiadores por riesgo de garantías bancarias. Respecto el crédito comprador, Cesce había asegurado a 3 entidades financieras con 8 pólizas concedidas a distintas empresas del Grupo Abengoa (deudores y garante, respectivamente frente a Cesce), de las que deberá indemnizar 25 millones de dólares y 54,6 millones de euros, el importe vivo en 2016.

De todas estas cantidades, Cesce aún no abonó las indemnizaciones por 4 pólizas con una de las tres entidades financieras, que deberá pagar paulatinamente hasta 2020, a medida que venzan las cuotas del crédito, hasta un total de 35,8 millones de euros. Para estas 4 pólizas, señala el Tribunal de Cuentas, Cesce instruyó al asegurado para que bloquease las disposiciones de los créditos, por lo que no tuvo que indemnizar 9,2 millones de euros ni se dispuso de la totalidad del crédito denominado en dólares.

Respecto a las pólizas de seguro a fiadores por riesgo de ejecución de avales, 15 en total suscritas entre junio de 2012 y abril de 2015, el riesgo vivo fue disminuyendo hasta situarse en enero de 2016 en 56,5 millones de euros y en 74,5 millones de dólares. Sin embargo, Cesce había llegado a asumir inicialmente un riesgo máximo de 77 millones de euros y 157 millones de dólares, con una cobertura de entre el 95% y el 34,7%, cuando el porcentaje más habitual, según el Tribunal, es del 50%.

Según la fiscalización realizada, estos seguros tuvieron que prorrogarse en numerosas ocasiones, autorizándose por la Comisión de Riesgos por Cuenta del Estado (CRE) la suscripción de los correspondientes suplementos a las pólizas con el consiguiente pago de la prima. Este riesgo fue disminuyendo a medida que avanzaban los proyectos, y hasta mayo se habían ejecutado avales de 2 pólizas, en 2016 y 2018, por un importe total de 16,2 millones de euros. Sin embargo, 9 pólizas aún tenían riesgo vivo por 25,1 millones de euros y 33 millones de dólares.

Otras cuatro pólizas, suscritas en el 2015, tenían un riesgo vivo en enero de 2016 de 3,8 millones de euros y 23,4 millones de dólares, cancelándose estas fianzas ese año antes de su vencimiento pues, según ha manifestado Cesce al Tribunal de Cuentas, el proyecto, la construcción de una planta termosolar en Israel, se vendió, tal y como preveía el plan de viabilidad de Abengoa.

Por último, la única póliza procedente de un seguro a fiadores por riesgo de garantías bancarias se cerró con una indemnización total de 4,7 millones de euros entre 2016 y 2017. Cesce es una sociedad mercantil participada mayoritariamente por el Estado, con una representación del 50,25% en su capital social. El resto de accionistas son Grupo Banco Santander, con una participación del 23,88%, BBVA, con el 16,30%, otros bancos, con el 5,67%, y otras compañías de seguros, con el 3,90%.

Abengoa suscribe un contrato de bloqueo con sus principales acreedores del New Money 2 y abre un proceso de adhesión

Europa Press.– Abengoa ha suscrito un contrato de bloqueo o lock-up con un conjunto de entidades financieras e inversores que ostentan la mayoría del llamado New Money 2, el tramo 2 de la deuda «nueva» de la empresa andaluza tras el acuerdo de reestructuración alcanzado en 2017, en el marco del proceso de reestructuración financiera, para lo que ha abierto un proceso de adhesión para el resto de sus acreedores financieros, según comunicó a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).

Hasta finales de este mes

Los acreedores de este contrato acuerdan dejar en suspenso el ejercicio de determinados derechos y acciones bajo dichas financiaciones frente a las sociedades correspondientes del grupo Abengoa hasta el próximo 31 de enero o cualquier fecha long-stop posterior acordada por las partes, adoptar las acciones necesarias para apoyar o implementar la propuesta de reestructuración financiera y entablar negociaciones para firmar un contrato de reestructuración antes de la fecha long-stop y no vender o transmitir su deuda hasta esa fecha. A estos efectos, la sociedad ha informado al resto de sus acreedores financieros del proceso de adhesión al contrato de bloqueo.

Por su parte, requirió su adhesión al contrato a los titulares de la emisión de bonos senior de Abengoa Abenewco 1 de 26,09 millones de euros a un tipo de interés del 5/9% y vencimiento en 2021, la emisión de bonos garantizados de Abengoa Abenewco 2 de 492,65 millones de euros y vencimiento en 2022 o por importe de 424,04 millones de dólares y vencimiento en 2022 y la emisión de bonos garantizados de Abengoa Abenewco 2 por 495,26 millones de euros y vencimiento en 2023 o 249,43 millones de dólares y vencimiento en 2023.

La hispanoalemana Siemens Gamesa gana 70 millones de euros en su primer ejercicio fiscal desde la fusión

Europa Press.- Siemens Gamesa Renewable Energy registró un beneficio neto de 70 millones de euros en el primer ejercicio fiscal desde su fusión, que culminó en abril de 2017, incluyendo el impacto de los costes de reestructuración e integración (176 millones), según indicó la compañía.

En su ejercicio fiscal, que concluyó el pasado mes de septiembre, Siemens Gamesa registró unas ventas de 9.122 millones de euros, un 17% inferiores, con unos costes de integración y reestructuración de 693 millones y un margen sobre el resultado neto operativo (Ebit) del 7,6%. Este margen, según la compañía, está impactado por una caída de precios de doble dígito en el negocio de aerogeneradores onshore, parcialmente compensado por sinergias y productividad, así como un fuerte desempeño del área de Servicios. La posición de caja neta se incrementó hasta 615 millones de euros en septiembre.

La compañía ha destacado que ha tenido un «sólido» desempeño financiero en el cuarto trimestre, con un incremento de las ventas hasta los 2.619 millones de euros, un 12% más, impulsadas por la recuperación del volumen en onshore y una «elevada» ejecución de proyectos offshore. El margen sobre Ebit se sitúa en el 8,2% y el beneficio neto en 25 millones de euros. Siemens Gamesa subrayó que ha alcanzado «con éxito» las guías del año fiscal 2018 (ventas de 9.000-9.600 millones de euros y capex de 500 millones), «sentando las bases para su crecimiento rentable».

El consejo de administración de Abengoa recomienda a sus accionistas rechazar el split para desdoblar acciones y estudia medidas legales

EFE.- El Consejo de Administración de Abengoa recomienda a los accionistas que voten en contra de la propuesta de desdoblamiento de acciones (split) planteada por los antiguos accionistas de control, vinculados a la familia Benjumea, fundadora del grupo, entre otros inversores, y avanza que no descarta medidas legales.

La compañía advierte sobre la gravedad de esta situación y anuncia que, en el caso de que prosperen estas propuestas, «se verá obligado a valorar la adopción de las medidas legales a su alcance en defensa del interés social«, tal y como señala a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).

Abengoa coincide con la CNMV en que esta operación podría tener efectos negativos en la formación adecuada de los precios y en la liquidez de la acción, y subraya su preocupación por mantener una negociación ordenada de los valores de la sociedad, a raíz de la ampliación de capital realizada en marzo de 2017.

Asimismo, insiste en que «por iniciativa propia y sin que mediara requerimiento del regulador», sometió a la Junta General celebrada el 30 de junio de 2017 una propuesta contraria de contra-split en las dos clases de acciones de la sociedad.

«Lamentablemente no pudo siquiera ser sometido a votación de los accionistas por no haber reunido dicha Junta el quorum legalmente necesario para modificar los estatutos», señala Abengoa.

Abengoa considera que este contra-split habría facilitado una negociación ordenada de las acciones de la sociedad y habría evitado probablemente que el grupo se viera afectado por las medidas anunciadas por Bolsas y Mercados Españoles el pasado 30 de julio.

La compañía insiste, además, en que la convocatoria del pasado 29 de agosto de la Junta General para pronunciarse sobre el split «no fue realizada por voluntad propia», sino en estricto cumplimiento de la normativa.

«El Consejo ni hizo suyas las medidas planteadas por Inversión Corporativa IC, ni por Finarpisa y Blanca de Porres Guardiola ni las valoró positivamente», subraya.

Inversión Corporativa IC es un vehículo que agrupa a unos 300 accionistas liderados por Felipe Benjumea, y otros accionistas minoritarios que juntos suman una participación del 3%.

Por ello, el Consejo ha acordado formular una recomendación de voto en contra de las medidas propuestas en los puntos 1 y 2 del orden del día de la Junta, convocada para su celebración los próximos 1 y 2 de octubre.

Adicionalmente, y para el supuesto de que la Junta finalmente llegara a aprobar estas medidas valorará adoptar las medidas necesarias.

La Junta, cuya solicitud fue presentada por Inversión Corporativa y otros accionistas minoritarios, entre ellos la mujer del expresidente del grupo de ingeniería, recoge en su orden del día aprobar el desdoblamiento de las acciones clase A y B de la compañía a razón de diez nuevas por cada una antigua.

Según los accionistas solicitantes de la Junta, estas medidas deben llevarse a cabo antes del 28 de septiembre, fecha en la que entrará en vigor la norma que implica la modificación del precio mínimo de cotización de los valores negociados en el mercado continuo a 0,001 euros respecto del valor de 0,01 euros vigente hasta la fecha.

Esta medida, sostienen los solicitantes, representaría una dilución de la acción del 90% que, sumada a la dilución del 95% ya sufrida en 2016 durante el proceso de restructuración, supondría en la práctica la desaparición total de las inversiones realizadas.

La CNMV advierte a Abengoa que el split que abordará en junta extraordinaria de accionistas podría ser manipulación de mercado

Europa Press.- La Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) ha advertido a Abengoa que si prospera el split (desdoblamiento de acciones) que planteará en su junta general extraordinaria de accionistas, convocada el próximo 2 de octubre para abordar la propuesta realizada por algunos accionistas minoritarios como la familia Benjumea, estudiará si esta medida «pudiese constituir un supuesto de manipulación de mercado«.

En un carta remitida por el supervisor bursátil al presidente de Abengoa, Gonzalo Urquijo, y puesta a disposición de los accionistas mediante un hecho relevante, la CNMV señala que valorará la posibilidad de ejercer las competencias que la ley otorga para garantizar «la libre formación de precios y la integridad de la negociación, entre ellas la suspensión o exclusión de la negociación de los valores correspondientes, así como la impugnación de los pertinentes acuerdos societarios».

Abengoa ha convocado junta general extraordinaria de accionistas para abordar la propuesta realizada por Inversión Corporativa (IC), sociedad en la que se integran las participaciones de la familia Benjumea y de otras de las familias fundadoras de Abengoa, de aprobar un split de 10 títulos nuevos por cada uno antiguo ante el temor a una futura nueva dilución de su participación ante el cambio de mínimo de cotización realizado en julio por Bolsas y Mercados Españoles (BME), y que entrará en vigor el próximo 28 de septiembre. En concreto, esta norma implica la modificación del precio mínimo de cotización de los valores negociados en el mercado continuo a 0,001 euros, respecto del valor de 0,01 euros vigente hasta la fecha.

Según explica la CNMV, el organismo presidido por Sebastián Albella considera que la decisión anunciada por la Sociedad de Bolsas es «positiva y necesaria para promover la liquidez de los valores, asegurar su ordenada negociación, la correcta formación de sus precios y la protección de los inversores«. Asimismo, subraya que responde al nuevo marco normativo establecido por la directiva MIFID II y permite evitar la formación de precios «en niveles artificiales y la negociación desordenada».

Para la CNMV, esta propuesta de split para contrarrestar el efecto de la medida de BME supone iniciativas cuyo objetivo sería que el valor por acción se aproxime al límite mínimo de precio por acción, «lo que neutralizaría los efectos de la reforma» y podrían prolongar «la actual situación de negociación desordenada y la fijación de precios en niveles artificiales«. Por ello, si finalmente prosperara, el supervisor bursátil subraya que valorará «en su momento» si esta conducta «pudiese constituir un supuesto de manipulación de mercado».

IC y estos accionistas minoritarios, que actualmente representan el 3% del capital del grupo, temen que el cambio de mínimo de cotización, realizado recientemente por BME, provoque una dilución del 90% en las acciones del grupo, «con un grave perjuicio para los inversores«, según indicaron. Además, IC recuerda que la dilución de la acción del 90% se sumaría a la dilución del 95% ya sufrida en 2016 durante el proceso de restructuración, lo que «supondría en la práctica la desaparición total de las inversiones realizadas».

Asimismo, en el orden de la junta se incluye a petición de estos accionistas la propuesta de instar al consejo de administración a solicitar de forma urgente a BME la suspensión temporal de cotización de ambos tipos de acciones de la compañía hasta que pueda hacerse efectivo el split. En su petición, IC consideraba de «máxima importancia» poder discutir con el consejo de administración tratar estas medidas y sus consecuencias y advertía que, de no celebrarse la junta y si no se adoptaba una solución, el órgano rector de la compañía «sería responsable de la pérdida patrimonial que esta medida de BME pudiera ocasionar en el valor de la acción«.

El acuerdo de reestructuración de Abengoa, alcanzado en 2016 y que permitió a la compañía esquivar la amenaza del que hubiera sido el mayor concurso de acreedores de la historia de España, supuso una quita del 97%. Así, los entonces accionistas de la empresa mantuvieron un máximo del 5% de la Nueva Abengoa. Inversión Corporativa, que poseía más de un 50% del capital, vio reducida su participación a un 2,5%.

Abengoa vende el 16,5% que le quedaba de Atlantica Yield a Algonquin a un precio menor a lo fijado inicialmente

EFE.– La empresa canadiense Algonquin Power & Utilities ha ejercido la opción de compra que tenía sobre un 16,47% adicional de Atlantica Yield, antigua filial de Abengoa, a un precio de 20,9 dólares (16,9 euros) por acción, según comunicó la empresa a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV). Este precio está por debajo del que se había fijado inicialmente, que era de 24,25 dólares (19,7 euros) por título, el mismo al que Algonquin compró el 25% de Atlantica Yield.

De hecho, según la comunicación remitida a la CNMV, Abengoa y Algonquin llegaron a un acuerdo para modificar la opción de compra antes de que la empresa canadiense haya decidido ejecutarla. El precio de 20,90 dólares al que Algonquin adquiere este 16,47% adicional de Atlantica Yield establece el importe obtenido con la venta a 345 millones de dólares (279,5 millones de euros), antes de costes de transacción y de algunas otras posibles reducciones. Abengoa destinará el importe neto obtenido al repago de su deuda conforme a los contratos de financiación que suscribió con los bancos.

Según ha indicado la empresa de ingeniería y energía, el precio acordado para la venta a Algonquin de la participación que le quedaba en Atlantica Yield supone una prima del 6,2% sobre el precio al que cerró su acción en el Nasdaq, el índice tecnológico de la Bolsa de Nueva York. Algonquin, con la compra de este 16,47%, eleva su participación en Atlantica Yield al 41,47% y Abengoa se desprende del total de la que le quedaba. La operación tendrá que ser aprobada por ciertos organismos reguladores y por los acreedores de Abengoa, compañía que en 2016 consiguió cerrar un acuerdo de reestructuración de su deuda con el que evitó llegar al concurso de acreedores.

El presidente ejecutivo de Abengoa, Gonzalo Urquijo, indicó que con la venta de la participación que le quedaba en Atlantica Yield la compañía cumple con sus compromisos de desinversiones previstos en el plan que se hizo para asegurar la viabilidad. Abengoa cerró en marzo la venta del 25% de Atlantica Yield a Algonquin por 607,6 millones de dólares (492 millones de euros al cambio actual), con una plusvalía de 108 millones de dólares. Ese primer acuerdo supuso también la creación de la sociedad Abengoa-Algonquin Global Energy Solutions (AAGES) para el desarrollo internacional y la construcción de infraestructuras de energía, y que ya ha presentado su primera oferta para desarrollar una línea de transmisión en Perú.

La venta de Abengoa de toda su participación en Atlantica Yield forma parte de su estrategia de desinversiones, con la que ya vendió una planta desaladora en Ghana, la central de ciclo combinado Norte III en México, las filiales de Bioenergía en Europa y Estados Unidos, la planta termosolar Ashalim en Israel, la desaladora Qingdao en China o el parque eólico Campo Palomas, en Uruguay.

Atlantica Yield tuvo unas pérdidas en 2017 de 111,8 millones de dólares (unos 90,5 millones de euros) por la reforma fiscal en Estados Unidos, muy por encima de los 4,8 millones de dólares (unos 3,9 millones de euros) que perdió en 2016, aunque incrementó en un 2% su ebitda y mejoró sus ingresos un 4% con respecto al año anterior.

Abengoa pretende vender lo que le queda de Atlantica a otros inversores si Algonquin no ejecuta su opción de compra

EFE.- El presidente de Abengoa, Gonzalo Urquijo, asegura que están abiertos a vender a otros inversores el 16,5% que les resta de Atlantica Yield, después de la venta de un 25% a la canadiense Algonquin, que tiene una opción de compra sobre el porcentaje que queda. Urquijo confirmó el interés de otros inversores por la venta de ese 16,5% que le resta por desprenderse a Abengoa.

El presidente de la compañía ha recordado que Algonquin, la empresa de servicios y energías renovables a la que ha vendido el 25% de filial en Estados Unidos por 607 millones de dólares (unos 492 millones de euros), tiene una opción de compra sobre el resto de la participación de Abengoa, que se elevaba en total al 41,5%, que puede ejercer. No obstante, ha señalado que están abiertos a otros compradores y han tenido acercamientos a otros potenciales inversores o interesados en hacerse con el porcentaje restante, aunque ha señalado que la prioridad es Algonquin, con la que cerraron la venta de un 25% de la filial y «eso es en lo que estamos ahora».

En cuanto a la estructura de capital de Abengoa, que consiguió eludir el concurso de acreedores tras llegar a un acuerdo con la banca para reestructurar la importante deuda que tenía, Urquijo señaló que no es ahora una de las preocupaciones. Respecto a cómo dar más valor a la acción de Abengoa, cotizando a 0,0113 euros, Urquijo resaltó que se avanza en el cumplimiento del plan de reestructuración, se está incrementando la rentabilidad, la cartera de pedidos y los proyectos, al tiempo que se reduce la deuda y sus gastos asociados, aunque no haya ningún plan específico para los accionistas.

El Estado aflora un 3,15% del accionariado de Abengoa, que vende un 25% de Atlantica a Algonquin

EFE.– Abengoa ha vendido un 25% de su filial estadounidense Atlantica Yield a la canadiense Algonquin Power&Utilities por 607 millones de dólares (unos 492 millones de euros) mientras se ha hecho público que la Secretaría de Estado de Comercio, incluida en el Ministerio de Economía, mantiene una participación del 3,152% en Abengoa, que la coloca como el segundo accionista de la compañía, tras el Santander, que cuenta con un 4,975%, según consta en los registros de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).

El organismo dependiente del Ministerio de Economía posee, a través de dos fondos, 5.687 millones de acciones de Abengoa, compañía que consiguió a finales de 2016 cerrar un acuerdo de reestructuración de su deuda con el que evitó llegar al concurso de acreedores. Hasta aflorar esa participación de la Secretaría de Estado de Comercio, el Santander se mantenía como el único de accionista de referencia de la compañía, tras la salida de la mayoría de los bancos (Bankia, Credit Agricole, Caixabank y Banco Sabadell) después de haber reestructurado su deuda.

El Santander, que también se deshizo de parte de su participación, cuenta con el 4,975% del capital, en su mayoría procedente de la que tenía el Banco Popular, la entidad que adquirió por un euro en junio pasado tras considerar el Banco Central Europeo que el Popular era «inviable». El Banco Popular se había convertido en mayo del año pasado en el principal accionista de Abengoa, después de que Credit Agricole redujera su participación y que Banco Santander, Caixabank y Banco Sabadell se desprendieran total o parcialmente de sus acciones.

Abengoa completó en marzo de 2017 el proceso de reestructuración de su deuda con una nueva estructura societaria en la que los antiguos accionistas vieron diluida su participación hasta el 5%, mientras que los acreedores y nuevos financiadores se quedaron con el 95% restante. El grupo de ingeniería y energía presentó el pasado febrero sus resultados de 2017, en que obtuvo un beneficio neto de 4.278 millones de euros, frente a las pérdidas de 7.629 millones que registró en 2016.

Venta de Atlantica a Algonquin

Por otro lado, Abengoa comunicó a la CNMV que se han cumplido todas las condiciones a las que el acuerdo con Algonquin, alcanzado el pasado 1 de noviembre, estaba sujeto, con lo que la operación podría cerrarse a finales de esta semana. Entre las condiciones para cerrar la transacción estaba la obtención del visto bueno de los organismos reguladores y los acreedores de la sociedad. El valor de la operación es de 607 millones de dólares, siendo el repago de la deuda de 510 millones de dólares (413,7 millones de euros), conforme a los contratos de financiación, ha precisado Abengoa.

La participación total de Abengoa en Atlantica era de un 41,5% y, según el acuerdo de venta del 25%, Algonquin también adquiere una opción de compra, en las mismas condiciones, sobre su 16,5% restante. Esta opción, sujeta a la autorización del Departamento de Energía de Estados Unidos, puede ser ejecutada por Algonquin este mes. El acuerdo para la venta fue cerrado a un precio de 24,25 dólares por acción (20,9 euros), sujeto a ciertas deducciones relacionadas con algunas obligaciones recogidas en el contrato y con los costes de la transacción.

Asimismo, las partes acordaron también un mecanismo según el cual Abengoa podrá beneficiarse del 30% de los primeros 2 dólares (1,7 euros) en los que se revalorice la acción de Atlantica Yield, hasta un máximo de 0,60 dólares (0,52 euros) por título. Esta suma se devengará en el primer aniversario de la fecha de cierre de la transacción. La plusvalía, calculada en unos 96 millones de euros cuando se llegó al acuerdo, se hará efectiva cuando se cierre la operación.

Por otro lado, Abengoa y Algonquin suscribieron un acuerdo de intenciones (memorandum of understanding MOU) para constituir una sociedad cuyo objeto será el desarrollo internacional y la construcción de infraestructuras de energía y agua, que se denominará Abengoa-Algonquin Global Energy Solutions (AAGES). La constitución de la nueva compañía se hará efectiva ahora y supondrá nuevas oportunidades para Abengoa, pues dispondrá de derechos exclusivos para desarrollar tanto la ingeniería y construcción como la operación y mantenimiento de todos los proyectos que desarrolle AAGES, así como un derecho preferente para proyectos llave en mano que desarrolle Algonquin.

La alianza permitirá acelerar la construcción y venta de activos concesionales de Abengoa a Atlantica Yield, lo que supone, según la firma española, un paso más en su plan de desinversiones. El presidente de Abengoa, Gonzalo Urquijo, ha afirmado que la culminación del acuerdo de compraventa de Atlantica, además de permitir reducir la deuda y crear AAGES, supone un hito dentro del desarrollo del plan de viabilidad de la compañía.

Abengoa gana 4.278 millones de euros en 2017 por su proceso de reestructuración frente a las millonarias pérdidas de 2016

EFE.- El grupo de ingeniería y energía Abengoa obtuvo en 2017 un beneficio neto de 4.278 millones de euros, frente a las pérdidas de 7.629 millones registradas en 2016, según comunicó a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV). Esta mejora del resultado se debe básicamente al beneficio no recurrente derivado de la reestructuración financiera.

El beneficio bruto de explotación (ebitda) ascendió a 127 millones, frente a las pérdidas de explotación de 241 millones contabilizadas en 2016. Sin contar el gasto en asesores por la reestructuración financiera y otros atípicos, el ebitda se habría situado en 179 millones. Por el contrario, las ventas descendieron un 2% en 2017, hasta 1.480 millones. El endeudamiento financiero bruto se situó en 5.475 millones, en línea con el nivel alcanzado tras la reestructuración financiera.