La Consejería de Medio Ambiente del Gobierno de Cantabria deniega a Sniace la autorización para construir una planta de bioetanol si no la aleja de las casas

La Consejería de Medio Ambiente del Gobierno de Cantabria ha comunicado a Sniace que no autorizará su proyecto para construir una fábrica de bioetanol en los terrenos que la empresa posee en Torrelavega si no propone un emplazamiento que esté más alejado de las viviendas que existen en esa zona.

Medio Ambiente ha notificado en concreto a Sniace que, con el emplazamiento que propone, no obtendrá la autorización ambiental integrada que precisa para construir esa planta de bioetanol, en la que la empresa tenía previsto invertir 65 millones de euros.

El Consejería exige a Sniace que cambie la ubicación de la planta, «alejándola del cierre del recinto fabril y de las viviendas colindantes, de forma que se cree una zona transición y de seguridad entre las instalaciones industriales y la zona residencial», explica el Gobierno de Cantabria en un comunicado de prensa. El departamento de Medio Ambiente ha tomado esta decisión tras estudiar los informes sectoriales y las alegaciones presentadas por varias asociaciones ciudadanas y ecologistas respecto a esa planta.

Sniace dispone ahora de 15 días para presentar una nueva propuesta de ubicación que cumpla con las condiciones exigidas por la Consejería de Medio Ambiente, para volver a iniciar el proceso necesario para obtener la autorización ambiental integrada.

«De no presentarse una ubicación alternativa en el plazo señalado, la Consejería de Medio Ambiente procedería a dictar una resolución denegatoria motivada, poniendo fin al procedimiento y archivando las actuaciones», añade el Gobierno cántabro.

Sniace promueve esa planta a través de sus filiales Green Source y Sniace Biofuels, con la sociedad de inversiones Cantabria Capital Sgecr como socio minoritario. Esa sociedad de capital riesgo está formada, a su vez, por el Banco Santander (50%), el Gobierno cántabro (20%), Caja Cantabria (20%) y la Ceoe-Cepyme (10%).

Según la información que la propia empresa facilitó el año pasado al Ayuntamiento de Torrelavega, la planta tendría capacidad para producir unos 126 millones de litros anuales de bioetanol y otras 114.000 toneladas al año de DDG, un subproducto de la destilación del cereal utilizado en la alimentación de animales.

Sniace calculaba que esa fábrica de Torrelavega consumiría unas 325.000 toneladas de cereal (trigo, cebada o maíz) al año, que serían suministrados por los agricultores de las zonas limítrofes y por las importaciones realizadas a través del Puerto de Santander.

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