Entradas

Repsol compra otro millón de barriles de crudo de Irán que recibirá en julio

EFE.- La República Islámica de Irán cerró un acuerdo de venta de un millón de barriles de crudo a la petrolera española Repsol, cifra que aumenta el volumen de la importación del crudo iraní por el continente europeo tras el final de las sanciones internacionales al país por su programa nuclear. Según el acuerdo firmado entre la compañía Repsol y la Compañía Nacional de Petróleo iraní, en el próximo mes de julio llegará el cargamento a España.

Este acuerdo ha permitido que ya el pasado marzo se recibiese el primer cargamento de petróleo iraní, con un millón de barriles de petróleo, que fue enviado a España desde la isla Jark en el Golfo Pérsico, cantidad que se triplicó en el mes de abril con el envío del crudo iraní a las refinerías de Cepsa, Repsol y BP.

Se multiplica la exportación iraní

Desde que en enero se levantaran las sanciones internacionales contra Irán, han sido decenas las empresas de todo el mundo que se han acercado a Teherán para retomar las compras de crudo, particularmente europeas o asiáticas. Según las cifras publicadas por medios locales, antes del acuerdo nuclear Irán exportaba a Europa solo 100.000 barriles de petróleo por día mientras esa cifra en la actualidad ha alcanzado los 600.000 barriles diarios.

Hace poco el ministro de Petróleo de Irán, Bijan Zanganeh, aseguró que ya se ha concluido la venta de 700.000 barriles de crudo por día a Europa. Pese a los bajos precios mundiales de los hidrocarburos, Irán ha anunciado que bombeará y exportará petróleo en el mercado a lo largo de este ejercicio 2016 hasta recuperar la cuota de mercado que tenía antes de las sanciones, unos 2 millones de barriles de petróleo al día.

El futuro aumento de la producción en Irán tras el levantamiento de las sanciones hunde los precios del petróleo

EFE.- Se venía especulando en los últimos meses y el momento ha llegado: el levantamiento del veto a las exportaciones de crudo desde Irán por parte de la comunidad internacional forma parte del acuerdo nuclear. El mercado de petróleo, temeroso de que se hundan más los precios ante el incremento de la oferta, acumula una caída de más del 20% en su precio desde el inicio de 2016, con un 6,7% de caída en su última sesión.

El Brent, referencia en Europa, cerró en 28,94 dólares, con una caída de 2,08 dólares, por debajo de 30 dólares el barril por primera vez desde febrero de 2004, y el estadounidense Texas acabó en 29,42 dólares, su nivel más bajo desde noviembre de 2003. Por su parte, el barril de la OPEP cotiza en 25 dólares, el menor precio en 12 años, según comunicó la organización. Una nueva remesa de indicadores negativos para la economía china, cuya desaceleración amenaza con afectar a la demanda global de crudo, se sumó a la inquietud por el regreso de Irán al mercado del petróleo, ahogado desde hace más de año y medio por el exceso de producción.

«Irán quiere incrementar sus exportaciones todo lo que pueda y tan rápido como sea posible. Aspira a exportar alrededor de 500.000 barriles diarios muy pronto y tratará de incrementar esa cifra hasta un millón de barriles», señaló David Elmes, jefe de la Red de Investigación Global en Energía de la Universidad británica de Warwick. «Los mercados mundiales están actualmente saturados, así que ese incremento en la producción iraní probablemente empujará a la baja los precios, o por lo menos contribuirá a mantenerlos bajos», sostuvo Elmes.

Los analistas calculan que cada día se producen en el mundo un millón de barriles de crudo innecesarios, una presión que ha derrumbado los precios casi un 75% desde junio de 2014. Irán, que posee la cuarta mayor reserva de crudo del planeta, es uno de los socios más potentes de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP), cuya estrategia de producción es el principal factor que explica la caída de los precios. El cártel, liderado por los países del Golfo, insiste en mantener su nivel de bombeo por encima de lo que los mercados pueden absorber a fin de golpear a la industria del fracking estadounidense y mantener su cuota de mercado global.

La consecuencia de esa política es un abaratamiento del crudo, un escenario que está castigando con dureza a las economías de los miembros del grupo de exportadores, especialmente a aquellas menos opulentas. También se acrecientan las tensiones internas en la OPEP ante la insistencia de Arabia Saudí y sus socios por mantener esa estrategia. Para tratar de contrarrestar el aumento del déficit en las cuentas públicas que está produciendo el pulso de los productores, el precio del carburante sufre, paradójicamente, fuertes incrementos en los últimos meses en algunos Estados de la OPEP. Arabia Saudí ha elevado los precios de la gasolina en un 50%, Bahréin un 60% y Qatar, Omán y Emiratos Árabes Unidos entre un 24% y un 35%.

Fuera de ese grupo, también están sufriendo las consecuencias de los bajos precios productores países como Rusia, cuyo primer ministro, Dmitri Medvédev, alertó de que no descarta revisar su presupuesto para 2016 ante las dificultades financieras que está provocando la caída del precio del crudo. Las compañías petroleras, que han recortado empleos e inversiones en los últimos meses ante la pérdida de rentabilidad de sus explotaciones, son las otras grandes perjudicadas por el desplome. Los consumidores de gran parte del mundo, los países importadores de crudo y compañías como las aerolíneas, cuyos resultados se ven influidos por el precio del combustible, se están viendo beneficiados por una coyuntura a la que los expertos no ven una salida a corto plazo.

La Unión Europea prepara a las empresas para las oportunidades que se abren en Irán

EFE.- La Unión Europea viene trabajando con las empresas comunitarias para que aprovechen las oportunidades de inversión y de negocios que se abren en Irán tras levantar unánimemente las sanciones económicas y financieras contra la República Islámica, entre ellas las relativas al sector gasístico y petrolero.

Ha sido el comisario europeo de Acción por el Clima y Energía, el español Miguel Arias Cañete, el que dejó patente el interés de la Unión Europea por entrar en el mercado energético iraní. «El acuerdo histórico con Irán abre la puerta a una cooperación energética más estrecha. El trabajo está en curso», señaló en un mensaje de la red social Twitter, en la que sin embargo no dio más pistas sobre los planes que elabora, aunque sí anunció que enviarán en febrero a Irán una «misión de evaluación técnica» para sondear las posibilidades de importación de los hidrocarburos iraníes.

Fuentes europeas han señalado que unos 15 cargos viajarán en la misión inicial, que tendrá una duración prevista de 4 días. Después habrá un segundo viaje con miembros de la Comisión Europea y posiblemente una delegación empresarial. Europea estaría especialmente interesada en conseguir una alternativa al gas natural ruso, que supone en estos momentos aproximadamente un tercio de su consumo.

Teherán, que comenzó a preparar el terreno hace meses a la espera de que llegara el denominado Día de la Implementación del acuerdo nuclear, ya presentó en noviembre pasado el nuevo Contrato de Petróleo de Irán en un evento al que asistieron un millar de representantes de 152 multinacionales de hidrocarburos de 45 países, entre ellas las europeas Shell, BP, Total, ENI, Repsol y Cepsa. También el Servicio de Acción Exterior de la Unión Europea, consciente de que las empresas están ansiosas por iniciar o retomar negocios con Irán, actuó con rapidez para tratar de resolver todas las preguntas que pudiera tener el empresariado comunitario.

El mismo día en que el Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA) confirmaba la entrada en vigor del acuerdo nuclear que dificulta que Irán desarrolle armas atómicas, la Unión Europea no solo levantó sus sanciones, sino que en cuestión de horas emitió una nota informativa especialmente útil para las empresas. A lo largo de 46 páginas explica a los operadores económicos las implicaciones de esta decisión y especifica las sanciones que quedaron anuladas el sábado. Esta rapidez de la Unión Europea no es de extrañar.

La República Islámica tendrá de golpe acceso a miles de millones de euros en activos descongelados en la Unión Europea y Estados Unidos y una necesidad urgente de modernizar su economía tras años de estrangulamiento por las sanciones internacionales por sus aspiraciones nucleares. El FMI cree que «una producción petrolera más elevada, menores costes para el comercio y transacciones financieras y el acceso a los activos extranjeros, pueden aumentar el PIB de Irán un 4-5,5%» en los próximos dos años.

Los Estados miembros de la Unión Europea no se han quedado de brazos cruzados esperando a que llegue el día del levantamiento de las sanciones. Delegaciones de ministros y empresarios de varios países miembros organizaron ya el año pasado viajes a Irán para tratar de asegurarse contratos millonarios para sus respectivas economías. También España se ha movido con rapidez con la visita de varios ministros en septiembre al país. El propio Cañete ha apuntado a todas las áreas energéticas como posibles ámbitos de cooperación: nuclear, gas, petróleo, energía renovable y eficiencia energética. En particular se ha referido a un Corredor Gasístico del Sur que llevaría el gas iraní a Europa.

El OIEA votará a favor de la puesta en marcha del acuerdo nuclear con Irán

EFE.- La Junta de Gobernadores del OIEA, la agencia nuclear de la ONU, adoptará mañana en Viena una resolución que permitirá la pronta entrada en vigor del histórico acuerdo atómico pactado en julio entre Irán y la comunidad internacional.

El objetivo, según indicaron esta semana varios diplomáticos, es adoptar el texto -acordado por Irán y seis grandes potencias- de forma unánime entre los 35 países miembros de la Junta, el órgano ejecutivo del Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA).

Quedará así allanado el camino para que el acuerdo nuclear pactado el pasado 14 de julio en Viena pueda entrar en vigor en las próximas semanas, probablemente a mediados de enero.

El histórico acuerdo, negociado durante casi dos años entre Irán y seis grandes potencias (EEUU, Rusia, China, Francia, Reino Unido y Alemania), prevé una limitación de varios aspectos del programa nuclear iraní a cambio de levantar las sanciones internacionales que pesan sobre la República Islámica.

A su vez, el acuerdo estipula un estricto y exhaustivo régimen de verificación y supervisión nuclear en Irán por parte del OIEA. Ningún otro país del mundo está sometido a una verificación de este alcance, recordaron esta semana varios diplomáticos en Viena.

El director general del organismo, Yukiya Amano, emitió a comienzos de diciembre un informe final sobre las posibles dimensiones militares del programa nuclear iraní en el pasado. En ese documento, los expertos del OIEA concluyen que hasta 2003 hubo un esfuerzo coordinado para hacerse con un arma nuclear en Irán, mientras que hasta 2009 hubo otras actividades, que no llegaron más allá de estudios de viabilidad y experimentos. Desde entonces, los inspectores del OIEA aseguran no tener evidencias sobre actividades sospechosas en Irán.

Esta evaluación final, que fue más dura y clara de lo esperado, era una de las condiciones para que entrara en vigor el tratado nuclear de Viena.

Una vez aclaradas las dudas sobre el pasado del programa nuclear iraní, el OIEA se dedica ahora a verificar las condiciones previas a la entrada en vigor al acuerdo y luego vigilará el cumplimiento de los compromisos asumidos por Irán.

Concretamente, la República Islámica debe reducir hasta menos de 300 kilos sus reservas de uranio poco enriquecido y desmantelar gran parte de sus centrifugadoras para producir ese material, que tiene un posible doble uso, civil y militar.

Una vez que Irán haya cumplido lo exigido, podrá pactar con el OIEA la entrada en vigor del acuerdo, que coincidirá con el levantamiento de las sanciones, tanto de las del Consejo de Seguridad de la ONU, como de las impuestas por la Unión Europea (UE) y EEUU.