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El TUE da la razón a Madrid, París y Bruselas y anula los nuevos límites de emisiones del diesel

Europa Press.- El Tribunal General de la Unión Europea (TUE) ha dado la razón a Madrid, París y Bruselas en su recurso contra la decisión de la Comisión Europea de establecer unos nuevos límites para las emisiones de óxidos de nitrógeno (NOx) de vehículos diésel superiores a las que fijaba la norma anterior y ha anulado dichos topes.

La Justicia europea ha concluido que el Ejecutivo comunitario no era competente para modificar los límites de emisiones incluidos en la norma Euro 6 para los nuevos ensayos en condiciones reales de conducción (ensayos RDE) que los vehículos deben superar en el marco de los trámites de homologación. El objetivo de estas pruebas es conocer el verdadero nivel de emisiones contaminantes en condiciones reales de conducción, algo que no consiguen los ensayos de laboratorio, y evitar el uso de dispositivos que manipulen los resultados, como ocurrió en el escándalo Volkswagen.

En 2016, la Comisión Europea fijó estos límites a partir de los topes definidos para la norma Euro 6, asignando a éstos unos coeficientes de corrección para tener en cuenta «ciertas incertidumbres estadísticas y técnicas». Así, por ejemplo, para un límite definido en Euro 6 de 80 miligramos por kilómetro (80 mg/km), el nuevo límite en ensayos RDE se fijó en 168 mg/km para un periodo transitorio y después en 120 mg/km. Los ayuntamientos de París, Bruselas y Madrid interpusieron sendos recursos de anulación ante el TUE porque consideraban que la Comisión no podía adoptar esos valores de emisiones de NOx al ser menos exigentes que los límites fijados para la norma aplicable, Euro 6, aprobado en el año 2007.

No a los coeficientes correctores

En primer lugar, el TUE confirma que los 3 consistorios están legitimados para impugnar los límites de emisiones determinados con respecto a los ensayos en condiciones reales de conducción, algo que cuestionaba el Ejecutivo comunitario. En segundo lugar, los jueces europeos señalan que los límites de emisiones fijados en la norma Euro 6 constituyen «un elemento esencial» de la normativa que «la Comisión no puede modificar«. Por tanto, concluyen que la Comisión «no era competente para modificar, mediante la aplicación de coeficientes de corrección, tales límites para los ensayos RDE».

El tribunal de Luxemburgo añade que, incluso si se admitiese que determinadas limitaciones técnicas pueden justificar cierta adaptación con una diferencia como la que finalmente se aprobó, resulta «imposible» determinar si se respeta la norma Euro 6 en ensayos RDE. En consecuencia, el TUE determina que debe anularse la disposición que fija los límites de las emisiones NOx en el nuevo reglamento, pero mantiene el resto de disposiciones sobre las condiciones en las que deben realizarse los ensayos RDE. Sin embargo, el TUE aboga por mantener los efectos de la disposición anulada para el pasado y durante un periodo «razonable» que permita modificar la normativa, que no podrá exceder los doce meses, con el objetivo de no crear inseguridad jurídica.

Endesa abrirá su segunda estación pública de gas para vehículos en París

EFE. – Endesa abrirá su segunda estación pública de gas para vehículos en París, en concreto en Île-de-France, en el área metropolitana de la capital francesa.

Según ha informado la compañía de energía en un comunicado, la asociación de ayuntamientos para la gestión del gas y la electricidad de Île-de-France, SIGEIF, y Endesa han firmado la adjudicación del diseño, construcción y operación de esta estación de gas vehicular, que estará ubicada en la localidad de Wissous, al sur de París y abastecerá a los camiones que pasan por este nudo logístico.

La apertura de la estación de gas de Endesa está prevista para junio de 2019 y forma parte de la estrategia de crecimiento de la compañía en Francia y en Europa a través de gas natural vehicular (GNV), un combustible que permite reducir en un 95% la emisión de partículas y entre un 40% y un 65% las de óxido de nitrógeno (NOx). También se dispensará en la estación BioGNV, gas metano de origen renovable, que permite reducir un 90% las emisiones de CO2.

La nueva estación de Endesa, de más de 4.000 metros cuadrados, estará abierta las 24 horas del día durante los 365 días al año y dispondrá de gas comprimido (GNC) para cargas rápidas. Tendrá de dos surtidores, con posibilidad de extenderlos a cuatro para lograr la carga simultánea de cuatro camiones, y su tarificación se diferenciará según si su uso es ocasional o fijo.

La adjudicación de la estación se enmarca en el Plan de Prevención contra la Contaminación en la ciudad de París y su área metropolitana. Además, Endesa firmó en 2016 con SIGEIF, que engloba a 185 alcaldías del área metropolitana de París, el contrato para la instalación de la primera gasinera de la compañía de energía en Île-de-France.

La nueva adjudicación se suma a las cuatro gasineras que ya ha puesto en servicio Endesa en Lyon (2005), París (2016), Saint-Etienne (2017) y Vannes (2017).

Barcelona y 11 grandes ciudades se comprometen a comprar solo autobuses ecológicos a partir de 2025 para reducir las emisiones

Europa Press.– 12 grandes ciudades, incluida Barcelona, se han comprometido a comprar exclusivamente autobuses ecológicos a partir del año 2025 con el fin de reducir las emisiones de combustibles fósiles y proteger el Medio Ambiente de cara a 2030. Las 12 ciudades, entre las que están incluidas Londres, París, Los Ángeles, Barcelona, Copenhague, Quito, Vancouver, Ciudad de México y Ciudad del Cabo, alcanzan una población conjunta de casi 80 millones de personas y promoverán una política de «calles libres de combustible fósil».

Los alcaldes, algunos de los cuales forman parte del grupo C40, buscan frenar así el calentamiento global y han asegurado que «a partir de 2025 comprarán solamente autobuses sin emisiones y garantizarán que las principales áreas de sus ciudades tengan contaminación cero para 2030». Los ayuntamientos de muchas ciudades están estableciendo objetivos ambientales más estrictos que los impuestos por los Gobiernos de sus respectivos países, con el propósito de reducir la contaminación del aire y alcanzar las metas establecidas en el acuerdo de París 2015, con el que se pretende frenar las emisiones de gas que provocan el efecto invernadero.

Uso exclusivo de vehículos eléctricos

Caroline Watson, una experta en vehículos de baja emisión en el C40, ha asegurado que el acuerdo implica «un compromiso claro por escrito para que el sector privado fomente inversiones más ecológicas en las ciudades». Las zonas libres de emisión pueden derivar en más parques, áreas peatonales o carreteras de uso exclusivo de vehículos eléctricos o impulsados por hidrógeno, de forma que las ciudades sean lugares más atractivos para vivir.

«La contaminación del aire, producida por los vehículos de gasolina, está matando a millones de personas en ciudades de todo el mundo», ha declarado la alcaldesa de París, Anne Hidalgo, quien ha recordado que «estas mismas emisiones han provocado el cambio climático». La alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, desveló que pretendía generar unas 165 hectáreas de espacio verde en los próximos años, aumentar los carriles para bicicletas y reducir el uso de los vehículos privados.

París quiere prohibir los coches de diesel en 2024 y de gasolina en 2030 para convertirse en neutra en emisiones

EFE.– La Alcaldía de París anunció su intención de prohibir la circulación de los coches diesel de aquí a 2024 y de los de gasolina para 2030, con el objetivo de convertirse en una ciudad neutra en emisiones de dióxido de carbono. La meta fijada se adelanta a los planes del Gobierno francés, que en julio aseguró que aspira a que para 2040 ya no haya vehículos diesel y de gasolina.

Las autoridades parisinas destacan que el horizonte previsto «tiene en cuenta de forma pragmática la evolución cada vez más rápida del sector de los transportes estos últimos años». “El desarrollo de coches eléctricos se ha acelerado, la oferta de transporte público se está reforzando, incluyendo a la región parisina, y los carriles bici cobran cada vez un protagonismo más destacado”, apuntan. «Este objetivo no está formulado como una prohibición, sino más bien como una trayectoria que parece a la vez creíble y sostenible«, añaden mientras anuncian reuniones con los fabricantes automovilísticos en los próximos meses para asociarlos a esa meta.

París fue sede en 2015 de la cumbre del clima (COP21), en la que se aprobó el primer acuerdo universal de lucha contra el cambio climático. Durante los picos de polución por partículas finas en el aire, es habitual que se impongan en la ciudad restricciones al tráfico, con medidas de circulación alterna o la oferta gratuita de transporte público.

Enertis abre una oficina en París para entrar en el prometedor mercado de las energías renovables de Francia

Europa Press.- Enertis ha abierto oficina en París con el objetivo de entrar en el mercado de energías renovables de Francia, al que la compañía considera uno de los más prometedores de Europa para el período 2017-2030. La empresa indica que, desde que se publicó la Ley de la Transición Energética en 2015, Francia se ha comprometido con una verdadera transformación de su sector energético encaminada a aumentar la aportación de las energías renovables al consumo de energía final a un 32% para 2030.

Para lograr sus objetivos con respecto al desarrollo futuro de las renovables, Francia estableció en su Plan Plurianual de Energía (PPE) hitos concretos para 2018, en el que se definen además dos escenarios con respecto a 2023. Enertis indica que, con la apertura de nuevas oficinas, apuesta por la expansión de su negocio. Desde la nueva oficina, la empresa busca estar más cerca de sus clientes y apoyarlos en las licitaciones programadas para los próximos años en el mercado local. Además del interés tradicional de Enertis en proyectos fotovoltaicos, la compañía planea ingresar también al mercado francés de energía eólica.

El Acuerdo de París contra el cambio climático entrará en vigor el 4 de noviembre tras ratificarlo la UE

Redacción / Agencias.- La ONU confirmó que el Acuerdo de París sobre el cambio climático, el primer tratado de carácter universal en la materia, entrará en vigor el próximo 4 de noviembre, una vez se ha alcanzado el número de países necesario para echar a andar el tratado. «Estoy encantando de anunciar que el Acuerdo de París ha cruzado el último umbral necesario para su entrada en vigor, que será el 4 de noviembre», afirmó el secretario general de la ONU, Ban Ki-Moon.

El paso fue dado después de que la Unión Europea acordara ratificar este acuerdo y se depositaran los instrumentos legales de esa decisión en la sede de la ONU. Para que este acuerdo entrara en vigor se necesitaba la ratificación de al menos 55 países que representen el 55% de las emisiones mundiales de gases de efecto invernadero. Una vez alcanzada esa meta, se fija un plazo para que entre en vigor el instrumento, que fue definido en diciembre pasado en París por 195 naciones después de años de negociaciones.

«Ha sido extraordinario el impulso global para que entrara en vigor el Acuerdo de París este año», afirmó Ban. «Lo que antes parecía impensable ya es imparable», agregó. También destacó que el apoyo internacional para que entrara pronto en vigor este acuerdo «es un testimonio de la urgencia» de las acciones que se necesitan para luchar contra el cambio climático. «Refleja además el consenso de los gobiernos para una robusta cooperación global que es esencial a fin de enfrentar los desafíos climáticos», agrega el secretario general de la ONU. «Durante la última década, he trabajado sin cesar para reunir a los países a fin de acelerar la respuesta global al cambio climático», concluyó el dirigente.

Será realidad para la COP22

La secretaria ejecutiva de la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (Cmnucc), Patricia Espinosa, precisó en su cuenta de Twitter que 72 partes de esta Convención que representan el 56,75% de las emisiones de gases de efecto invernadero ratificaron el Acuerdo de París, con lo que éste será una realidad antes de que se celebre la Cumbre del Clima de Marrakech (Marruecos), conocida como COP22, que se desarrollará desde el 7 hasta el 18 de noviembre.

Esta situación se produce después de que el Parlamento Europeo diera su visto bueno a la ratificación por parte de la Unión Europea, con 610 votos a favor, 38 en contra y 31 abstenciones. El Acuerdo de París recibió un espaldarazo importante el pasado 3 de septiembre, después de que China y Estados Unidos lo ratificaran en la víspera de la cumbre del G-20, que tuvo lugar en Hangzhou (China). Entonces, un total de 26 países que acumulan un 39,06% de las emisiones habían depositado sus instrumentos de ratificación, aceptación, aprobación o adhesión del Acuerdo.

La relación de países asciende ahora a 72. China (que representa un 20,09% de los gases globales de efecto invernadero), Estados Unidos (17,89%), India (4,10%), Brasil (2,48%), México (1,70%), Ucrania (1,04%) y Argentina (0,89%) son los Estados con mayores porcentajes de emisiones de gases de efecto invernadero que depositaron antes que la Unión Europea sus instrumentos de ratificación del Acuerdo ante la Cmnucc. El objetivo del Acuerdo de París es mantener el aumento de la temperatura media mundial muy por debajo de 2ºC y lo más cerca posible de los 1,5ºC con respecto a los niveles de la era preindustrial con el fin de aumentar la capacidad de la economía y de la sociedad de adaptarse a los extremos climáticos.

Un “día histórico” para Obama

Por su parte, el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, aseguró que el 4 de noviembre será «un día histórico» en la lucha por proteger al planeta para las generaciones futuras con la entrada en vigor del Acuerdo de París que, a juicio de Obama, «nos da la mejor oportunidad posible para salvar al único planeta que tenemos y ayudará a retrasar o evitar algunas de las peores consecuencias del cambio climático». «Ninguna nación, ni siquiera tan poderosa como la nuestra, puede resolver este desafío en solitario», advirtió a continuación.

Asimismo, Obama animó a los países que todavía no se han unido formalmente al Acuerdo de París, destinado a sustituir en 2020 al Protocolo de Kioto, a que lo hagan «tan pronto como sea posible». El presidente también urgió a que se avance «en los próximos días» para concluir otros acuerdos climáticos como los que persiguen disminuir el uso de los hidrofluorocarbonos (HFC), un gas de efecto invernadero que se usa en frigoríficos y aires acondicionados, y limitar las emisiones contaminantes de los aviones comerciales. Obama ha dado prioridad a la lucha contra el cambio climático durante sus casi ocho años en la Casa Blanca, particularmente en su segundo mandato.

Por su parte, el presidente de la Cámara de Representantes, el republicano Paul Ryan, aseguró que el acuerdo «sería desastroso para la economía estadounidense». «Arroja por tierra las grandes ganancias que Estados Unidos ha hecho en la última década en el desarrollo energético. La energía abundante y de bajo coste que hemos desbloqueado se hundiría, eliminando el crecimiento económico y el empleo que han venido con ese desarrollo», afirmó Ryan. «El resultado supondrá unos mayores costes de energía para los estadounidenses, que serán especialmente dolorosos para los más pobres”, aseveró.

Un total de 23 países, que representan apenas un 1% de la emisiones de CO2, han ratificado el Acuerdo del Clima de Paris

Europa Press.- El Acuerdo del Clima de París está aún lejos de su entrada en vigor, ya que desde que se abrió para firma y ratificación el 22 de abril hasta el 23 de agosto ha sido ratificado por un total de 23 países, cuyas emisiones de CO2 suman el 1,08 por ciento del total.

Sin embargo, se necesita la ratificación de al menos 55 países, o bien, la suma del 55 por ciento de todas las emisiones de gases de efecto invernadero del planeta, para que el histórico acuerdo entre en vigor, justo 30 días después, según consta en el primer párrafo del artículo 21 del Acuerdo.

Según la Convención Marco de Cambio Climático de la ONU, en la ceremonia de alto nivel celebrada en Nueva York el pasado 22 de abril en la sede de la Organización de Naciones Unidas (ONU), el documento fue firmado por un total de 174 Estados, entre ellos España, y la Unión Europea y en esa misma jornada, 15 de esos países depositaron también sus respectivos instrumentos de ratificación.

Los más amenazados por el cambio climático

Se trata de Barbados, Belice, Fiji, Granada, Maldivas, Islas Marshall, Mauricio, Nauru, Palau, Samoa, Somalia, San Kits y Nevis, Santa Lucía, Palestina, Tuvalu, que firmaron y ratificaron el mismo 22 de abril en Nueva York.

Aunque también firmaron el documento en abril, posteriormente han ratificado el Acuerdo Seychelles, 29 de abril; Guyana, 20 de mayo; Noruega, 20 de junio; San Vicente y Granadinas, 29 de junio; Perú, 25 de julio; Camerún, 29 de julio; Corea del Norte, 1 de agosto y, el último en hacerlo ha sido Bahamas, el pasado 22 de agosto.

Para la directora del Instituto de Desarrollo Sostenible y Relaciones Internacionales (IDDRI), Teresa Ribera, el acuerdo de París es «fantástico, pero si va adelante», lo que en su opinión supone «acción y voluntad política». En este sentido, ha puntalizado, que se han producido gestos «muy interesantes» en la realidad política y económica pero «queda mucho por hacer».

La exsecretaria de Estado de Cambio Climático cree que a pesar de que hay «grandes» países que anunciaron una rápida ratificación están a la espera de que otros den pasos, como China o Estados Unidos, pendiente de los resultados de las elecciones presidenciales del próximo mes de noviembre.

En este contexto, ha apuntado que esto podría llegar en la próxima cumbre del G-20, que se celebrará a mediados de septiembre, en la que ambos países podrían «ir de la mano» y hacer algún anuncio conjunto en esta materia.

Para Ribera, otras de las piedras en el camino que «no facilitan» la ratificación es la situación de Brasil o los posibles efectos del ‘Brexit’ en el proceso de la Unión Europea.

«Si yo fuera parte del Ejecutivo de España impulsaría una ratificación unilateral, pero no he oído a ningún miembro del Gobierno en funciones nada que apunte a prisas por ratificar. Hay más margen. Me encantaría oír a Rajoy hablar en el debate de investidura sobre objetivos de desarrollo sostenible y cambio climático», ha manifestado.

La exsecretaria de Estado admite que la situación política en España es «anómala» y que «limita» el margen de acción, pero aún así, insiste en que se puede hacer más.

Por otro lado, el hecho de que la mayor parte de los países ratificadores sean pequeños Estados se debe, en su opinión, a que son de los más afectados por los efectos del cambio climático y, sobre todo, a que están «reivindicando» su capacidad de luchar y actuar porque sus sociedades son mucho más conscientes «de lo que se juegan» con el paquete de clima. «Es bastante lógico que los que se sienten más vulnerables se quieran reivindicar», ha añadido.

Sin embargo, confía en las posibilidades de la próxima cumbre del G-20 en la que «últimamente» uno de los elementos de discusión es la transformación el sistema financiero hacia un sistema compatible con el desarrollo sostenible.

Un número récord de países firma en la ONU el acuerdo climático de París, con China y Estados Unidos comprometidos

EFE / Europa Press.– Estados Unidos y China, los dos países más contaminantes del mundo, reiteraron su compromiso de ratificar antes de que termine el año el Acuerdo de París contra el cambio climático y prometieron cooperación con el resto del mundo para frenar el calentamiento global. En este sentido, un número récord de países dejaron claro ante las Naciones Unidas la urgencia de actuar contra el calentamiento global.

Al menos 175 Estados sellaron en una gran ceremonia el documento negociado el pasado diciembre en la capital francesa. Nunca antes tantos países habían firmado una convención internacional de este tipo en el primer día en que el texto se abre para que las naciones comiencen a adherirse. Para que el acuerdo entre en vigor se necesita ahora que al menos 55 países, que sumen en total el 55% de las emisiones globales, completen el proceso de ratificación. 15, en su mayoría pequeños Estados insulares, ya lo hicieron y se espera que a lo largo de 2016 sigan el camino muchas otras naciones. En la mayoría de los casos, los países necesitan que el texto sea aprobado por sus parlamentos.

Los dos mayores contaminadores del mundo, Estados Unidos y China, se comprometieron para luchar contra el cambio climático. El secretario de Estado de Estados Unidos, John Kerry, confirmó que su país ratificará el pacto a lo largo de este año, mientras que el viceprimer ministro chino, Zhang Gaoli, dijo que el suyo lo hará antes de la cumbre del G20 prevista para septiembre. Washington y Pekín han trabajado juntos en los últimos meses para tratar de dar ejemplo a otros países y acelerar la entrada en vigor del acuerdo internacional alcanzado en la capital francesa.

Kerry, en un discurso, defendió que el Acuerdo de París es sólo un punto de partida y que será necesario ir más allá si se quiere frenar el cambio climático. En ese sentido, destacó que el verdadero poder del pacto es «la oportunidad que crea» y el mensaje que envía a todos, incluido al sector privado. El jefe de la diplomacia estadounidense subrayó que lo que hay que hacer, como reducir emisiones e impulsar las renovables, está ya al alcance del mundo con las tecnologías actuales y sólo depende de la «determinación» que se muestre.

Por su parte, China no ratificará el acuerdo hasta el próximo mes de septiembre, cuando calcula que habrá completado los trámites internos necesarios, según comunicó el viceprimer ministro, Zhang Gaoli. Estaba previsto que China suscribiera el tratado internacional inmediatamente. Sin embargo, Pekín indicó que sólo efectuará una «adhesión preliminar«. «China finalizará sus procedimientos legales domésticos sobre el consentimiento para formar parte del acuerdo de París antes de la cumbre del G20 que se celebrará el próximo septiembre en Hangzhou», explicó Xie Zhenhua, enviado especial para cambio climático. Hasta entonces, Gaoli ha aseguró que «China honrará sus compromisos» en materia de cambio climático. «Pondremos en marcha un estricto sistema de responsabilidad para la protección ambiental», indicó.

Francia, que lideró en la COP21 las negociaciones de este primer acuerdo global contra el cambio climático, espera que su Parlamento autorice la ratificación «de aquí al verano», según dijo el presidente, François Hollande. El jefe del Elíseo, que fue el primero en estampar su firma en el documento, urgió al resto de países de la Unión Europea a dar «ejemplo» y completar sus ratificaciones a lo largo de 2016.

Las intervenciones de los líderes mundiales subrayaron el sentimiento de urgencia para actuar contra el calentamiento global y la necesidad de ir más allá de los compromisos de París. «Estamos en una carrera contrarreloj», advirtió el secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, que insistió en que el «futuro» del mundo depende de los progresos hacia una economía baja en emisiones. «Estamos batiendo récords en esta cámara. Pero los récords también se están batiendo fuera», dijo Ban, apuntando a las temperaturas globales y el deshielo. El jefe de la ONU, en todo caso, recalcó el carácter «histórico» de la firma del Acuerdo de París y aseguró que «es un día para nuestros niños y nietos y todas las generaciones futuras».

Simbolizando esa frase, el secretario de Estado de Estados Unidos, John Kerry, selló el pacto en nombre de su país acompañado de su nieta de dos años. Naciones Unidas también quiso destacar la importancia del momento para el futuro del mundo y decidió que, en lugar de un alto cargo de la organización, las primeras palabras fuesen para la joven tanzana Gertrude Clement, que con sólo 16 años destaca por su activismo sobre el clima.

Los más de 60 líderes y cientos de representantes nacionales reunidos ante la Asamblea General escucharon también un potente discurso del actor Leonardo DiCaprio, que apoya a la ONU como Mensajero frente al cambio climático. «El mundo está mirando. Ustedes serán aclamados o vilipendiados por las generaciones futuras», advirtió el intérprete a los dirigentes, a quienes quiso dejar claro que «el planeta no se salvará si no dejamos los combustibles fósiles bajo tierra, donde pertenecen».

Muchos líderes subrayaron precisamente la necesidad de ir más allá de lo que establece el pacto, que entre otras medidas fijó el compromiso para mantener el aumento de la temperatura media mundial muy por debajo de los 2 grados centígrados con respecto a los niveles preindustriales y proseguir los esfuerzos para limitarlo a 1,5 grados centígrados. También definió la necesidad promover el desarrollo económico con bajas emisiones de gases de efecto invernadero, «de un modo que no comprometa la producción de alimentos», y orientar los flujos financieros en ese sentido para que los países menos ricos puedan asumir también esfuerzos.

Endesa abastecerá de gas vehicular al área metropolitana de París

Redacción / Agencias.– Endesa y Sigeif, la asociación de ayuntamientos que están mancomunados en Ile-de-France, han firmado en París la adjudicación del “abastecimiento y la operación” de la primera estación pública de gas vehicular (GNV- BioGNV) en esa región. Según Endesa, la nueva estación de servicio, la más grande de Francia, estará ubicada en el puerto autónomo de París en Bonneuil-sur-Marne, y “abastecerá a los camiones que pasan por este importante nudo logístico”.

Ille de France constituye el área metropolitana de París y es una de las regiones con mayor renta per cápita del mundo, representando aproximadamente un 30% del PIB de Francia y 11 millones de habitantes. La apertura de la gasinera de Endesa, filial de Enel, está prevista para septiembre, y se enmarca en la estrategia de la compañía de crecimiento en Francia y en Europa a través del GNV, un combustible que permite reducir en un 95% la emisión de partículas, en un 100% las emisiones de SOx y en un 65% las de NOx. El BioGNV, metano de origen renovable, permite además reducir un 90% las emisiones de CO2.

Sigeif, que engloba a 185 municipios y que atribuyó el contrato, indicó por su parte que será una primera estación piloto en la región. «Las tarifas, competitivas con respecto al gasoil, será diferente para los usuarios ocasionales que para los regulares», señaló el Sigeif, quien afirmó que ha negociado tarifas con Endesa para quienes quieran abonarse. La mancomunidad financia 2 millones de euros del proyecto, con una aportación de la región, en esta primera estación que debe venir seguida de otras 10 en los próximos años. Su construcción se enmarca dentro del plan global de reducción de la contaminación de toda la región de París.

La nueva estación de Endesa, de 4.000 metros cuadrados, estará abierta las 24 horas durante los 365 días del año y dispondrá de gas comprimido (GNC) para cargas rápidas. Endesa señaló que este combustible, que permite una autonomía de 500 kilómetros a los camiones, supone un ahorro energético y reduce también los gastos de mantenimiento. Recientemente, la energética, que empezó a comercializar gas en Europa en el año 2000, firmó un acuerdo con la compañía francesa de transportes CityLogistics para el suministro de gas natural de uso vehicular y biometano para toda la flota de vehículos que la empresa tiene en la ciudad de Lyon.

Alcanzar un 36% de generación renovable a nivel mundial en 2030 incrementaría el PIB global en un 1,1%

EFE.- Si se consiguiera un 36% de generación renovable en el mix energético global en 2030 supondría un incremento del producto interior bruto (PIB) a nivel mundial del 1,1%, equivalente a 1,3 billones de dólares, según Beneficios económicos de las energías renovables, un informe publicado por la Agencia Internacional de las Energías Renovables (IRENA) en el marco de su sexta asamblea, que analiza el impacto que tendría para la economía duplicar el porcentaje de generación renovable en 2030 respecto a niveles de 2010.

Alcanzar un 36% de generación renovable en 2030 supondría también la creación de 24,4 millones de empleos en el sector renovable para esa fecha, respecto a los 9,2 millones de personas a las que emplea en la actualidad. De esos 24,4 millones de nuevos empleos en 2030, 9 millones corresponderían al sector de los biocombustibles, 6,4 al solar, 5,5 al hidráulico, 3,3 al eólico y 0,2 a otras energías renovables. El aumento de generación renovable supondría también una notable reducción de las importaciones de carbón, gas y petróleo por parte de los países, de la que se benefician especialmente los países de la Unión Europea.

«Este nuevo análisis nos dice que la tan necesaria transición energética no sólo serviría para luchar contra el cambio climático, sino también para estimular el crecimiento económico y la generación de empleo», dijo Adnan Amin, el director del IRENA en la presentación del estudio. La IRENA celebró en Abu Dhabi su sexta asamblea con representantes de 150 países, entre ellos los principales artífices del acuerdo climático de París (COP21), que se vieron por primera vez tras la cumbre del clima.

Precisamente, en la lucha contra el cambio climático, Adnan Amin subrayó que, según datos de IRENA, se lograría reducir la mitad de las emisiones necesarias si las renovables supusieran ese 36% de la generación eléctrica global en 2030 para así mantener el calentamiento de la temperatura del planeta por debajo de los 2 grados. La otra mitad de emisiones podría disminuirse mediante la eficiencia energética.