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España valora «positivamente» los avances en interconexiones y autoconsumo conseguidos en las negociaciones con los países de la Unión Europea

Europa Press.- El ministro de Energía, Álvaro Nadal, ha valorado «positivamente» los resultados obtenidos por España en las negociaciones entre los ministros de Energía de la Unión Europea del llamado Paquete de Invierno, logrando avances en interconexiones eléctricas y autoconsumo de energía.

En concreto, España ha defendido un objetivo ambicioso en materia de energías renovables, pero insiste en que para ello necesita que se introduzcan las herramientas necesarias como las interconexiones. En este sentido, la Unión Europea ha reforzado la consideración de las interconexiones energéticas en la normativa energética comunitaria. Así, el Ministerio destaca que se han recogido plenamente las propuestas españolas en esta materia, incluyéndose avances «muy importantes» de cara a otorgar carta de naturaleza a los compromisos europeos de alcanzar el 10% en 2020 y del 15% en el año 2030 como una de las dimensiones de la gobernanza energética.

En particular, la normativa comunitaria otorgará al objetivo de interconexiones una importancia similar a los objetivos de renovables y eficiencia energética. De esta manera, los Estados deberán marcar en sus planes nacionales de Energía y Clima una estrategia elaborada en cooperación con los Estados vecinos para progresar en las interconexiones y alcanzar en 2030 el objetivo del 15%. Además, la Comisión Europea evaluará periódicamente los progresos de los diferentes países de cara al logro de los objetivos de interconexión, lo cual será un elemento esencial para España y que, de detectarse por la Comisión avances insuficientes, la Comisión y los Estados deban cooperar para alcanzar soluciones a los problemas identificados.

Asimismo, se incluirán las interconexiones a la hora de valorar los costes que asumen los países para contribuir a los objetivos de cambio climático, reconociendo que el logro de un nivel de interconexión del 15% es clave para incrementar la penetración de renovables de forma técnica y económicamente viable. El Consejo de Energía también ha reconocido la importancia de un despliegue eficiente y efectivo de renovables que suponga el menor coste para el consumidor, lo que avala la política desarrollada por el Gobierno español mediante las subastas celebradas durante el año 2017 y que permitirán incorporar más de 8 gigavatios (GW) de nueva potencia renovable sin primas, señala el Ministerio.

Respecto al autoconsumo, el Gobierno considera «muy positivo» el tratamiento que se le ha dado en el Consejo, con una propuesta que «refleja claramente» que no debe haber discriminación ni subsidios cruzados entre consumidores y que estos deben sufragar los costes del sistema de forma equitativa, independientemente de que autoconsuman o no, subraya el gabinete dirigido por Álvaro Nadal. En lo que se refiere a los precios regulados para consumidores eléctricos, se reconoce la posibilidad de los Estados miembros de contar con sistemas como el español, de precios voluntarios para el pequeño consumidor, que es dinámico y fluctúa de acuerdo con el precio del mercado.

El Consejo ratificó su objetivo de alcanzar al menos un 27% de energía renovable en el consumo final en el año 2030 y establecer importantes mecanismos de control y coordinación de las políticas de los Estados miembros, en el marco de la gobernanza de la Unión Energética, con vistas a asegurar el cumplimiento de dicho objetivo. España valora «muy positivamente» el marco que se ha propuesto en estas orientaciones generales, que incluye avances importantes en la simplificación de los trámites administrativos para las instalaciones renovables, nuevos compromisos en materia de penetración de renovables en el transporte y la fijación de criterios objetivos para la evaluación del avance de los distintos Estados miembros, entre otras cuestiones.

El compromiso mundial en la lucha contra el cambio climático se refuerza en París con la One Planet Summit

Europa Press.- El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, asistió en París a la Cumbre Un Planeta (One Planet Summit), en la que se calcula que hubo 2.000 participantes aproximadamente con el objetivo de reforzar el compromiso mundial con la lucha contra el cambio climático y con el Acuerdo de París. La cumbre fue auspiciada por el presidente francés, Emmanuel Macron, dos años después de la firma del Acuerdo de París sobre cambio climático.

Convocada por el presidente francés en calidad de antigua sede de la COP21, la ONU y el Grupo del Banco Mundial, participaron más de 100 Estados, organizaciones internacionales, instituciones financieras y bancos internacionales y regionales y administraciones locales. El encuentro es también una respuesta al anuncio del presidente Trump de Estados Unidos de que su país saldrá del Acuerdo del Clima de París, a lo que el mandatario francés respondió con el eslogan Make our planet great again. El Acuerdo de París entró en vigor en noviembre de 2016. El asunto principal abordado fue la financiación destinada a la lucha contra el cambio climático, así como a la adaptación a sus efectos, especialmente por parte de los países en desarrollo.

De manera particular, en París se abordaron las iniciativas vinculadas a la financiación climática, es decir, la transferencia de recursos de países desarrollados a países en desarrollo para la financiación de proyectos y actuaciones en los ámbitos de lucha contra el cambio climático y de adaptación al cambio climático. En este marco, España ha incrementado anualmente sus contribuciones a la financiación climática desde 205 millones de euros en 2012 a 595 millones en 2016, en línea con el compromiso adoptado hace dos años en la COP de Paris de alcanzar los 900 millones de euros anuales a partir de 2020.

A otro nivel, España también mantiene su firme compromiso con los esfuerzos internacionales de lucha contra el cambio climático. Así, ha asumido compromisos de reducción de emisiones, uso de energías renovables y aumento de la eficiencia energética, lo que le ha permitido tener una tasa de emisiones per cápita inferior a la media de la Unión Europea y situarse en la senda para cumplir con sus objetivos en 2020. Además, y con vistas a asegurar el cumplimiento de los nuevos objetivos europeos para 2030, el Gobierno está trabajando en la elaboración de una Ley de cambio Climático y Transición Energética, que permita abordar estas cuestiones desde una perspectiva amplia y fomentando la implicación y participación de todos los actores involucrados.

Cumbre de interconexiones en 2018

Por otro lado, el jefe del Ejecutivo español, el presidente de Francia, el primer ministro de Portugal y el vicepresidente de la Comisión para la Unión Energética, Maros Sefcovic, han anunciado además la celebración de una nueva Cumbre de interconexiones en Portugal en el primer semestre de 2018, como continuación de la celebrada en Madrid en marzo de 2015. Estas interconexiones entre los tres países (España, Francia y Portugal) permitirán aumentar su contribución a la seguridad energética y cumplir con los objetivos de la Unión Europea en materia de energías renovables y de reducción de los gases de efecto invernadero.

Mientras, el responsable de la organización WWF en Francia, Pascal Canfin, ha señalado que se podrá considerar que la Cumbre es un éxito si se logra una hoja de ruta para cambiar las reglas no solo del sistema financiero global, sino también de los sectores del transporte y la energía. «En los países ricos y con el acuerdo de París, estamos comprometidos a lograr la neutralidad de carbono para 2050. Esto significa que tenemos 33 años para reducir drásticamente las emisiones de gases de efecto invernadero. Esta es la lucha de toda una generación», subraya.

En este sentido, Margaret Kuhlow, líder del Programa sobre financiación de WWF, pide a las empresas que adopten las recomendaciones del Grupo de Trabajo sobre Divulgaciones Financieras Relacionadas con el Clima (TCFD) que establece la conexión entre los problemas ambientales y la estabilidad financiera. «Hacemos un llamamiento a los miembros del G20 para que apoyen la implementación de TCFD y consideren su integración en las políticas de forma obligatoria», añade. Para la organización, iniciativas como esta Cumbre auspiciada por Macron son importantes para mantener a los líderes comprometidos y para impulsar nuevas acciones climáticas entre todos los actores. «Es vital si queremos mantener el calentamiento por debajo de los 1,5°C y evitar los peores impactos del cambio climático», subraya WWF.

Arias Cañete pide una cumbre europea para relanzar las interconexiones ante la predisposición de Francia

Europa Press.- El comisario europeo de Energía y Acción por el Clima, Miguel Arias Cañete, considera que «sería necesaria» una nueva cumbre de España y Portugal, los países que conforman la Península Ibérica, con Francia y la Comisión Europea para «relanzar» las interconexiones eléctricas, vista la «predisposición» actual que hay en esta materia por parte del Ejecutivo francés desde la llegada a la presidencia de Emmanuel Macron, lo que calificó de «una gran oportunidad» para «impulsarlas y hacer posible los objetivos» establecidos.

Cañete señaló que la Península Ibérica se encuentra en una situación de interconexión «absolutamente crítica» y afirmó que mientras no se avance en esta materia entre los países europeos «ninguna medida será efectiva«. En 2015 ya tuvo lugar en Madrid una cumbre entre España, Francia, Portugal y la Comisión Europea en la que se plasmó el compromiso de impulsar las interconexiones energéticas con el objetivo de lograr un mercado interior de la energía en Europa.

A este respecto, España y Francia han dado recientemente un impulso a la interconexión eléctrica por el Golfo de Vizcaya, la primera submarina entre los dos países, que permitirá aumentar la capacidad de intercambio desde los 2.800 megavatios (MW) actuales hasta los 5.000 MW, y que cuenta con un presupuesto de 1.750 millones de euros y finalización prevista para 2025. No obstante, y a pesar de este proyecto, España cuenta actualmente con un nivel de interconexión con Europa muy alejado del mínimo establecido por la Unión Europea para 2020: el 10% de la capacidad de producción instalada, que en el caso de España tendría que alcanzar los 10.000 MW frente a los actuales 2.800 MW.

Además, el comisario advirtió de la necesidad de abordar el problema de la reducción de emisiones en un sector como el del transporte, «que es dinámico y con una expansión que incrementa sus emisiones». A este respecto, Cañete consideró que Europa «está perdiendo el liderazgo» en el vehículo eléctrico, ante el crecimiento existente en países como India y China, por lo que vio necesario «favorecer la innovación» para su impulso.

Así, apuntó la necesidad de abordar el «doble desafío» de ser líderes en baterías, «con baterías de nueva generación», y en desarrollar gamas de vehículos eléctricos, para lo que «hay que establecer sistemas de recargas». «Estamos en el problema de que los fabricantes no producen coches eléctricos porque no hay sitios de recarga y los que pueden poner recargas no lo hacen porque no hay coches eléctricos«, subrayó al respecto. Finalmente, Arias Cañete advirtió que la transición energética hacia la descarbonización de las economías es «imparable», aunque aseguró que «hay que saber gestionarlo», ya que es un proceso que «cambiará el futuro y los que lo lideren ganarán la batalla».

Bruselas evita polémicas con España

Por otro lado, Cañete ha reconocido que la Comisión Europea está «analizando» si el borrador de real decreto para el cierre de centrales eléctricas que pretende sacar adelante España es «compatible con la legislación comunitaria», pero ha subrayado que Bruselas no está para «entrar en polémicas entre un país y una empresa«. En este sentido, Cañete señaló que la Comisión está empezando a analizar «cuál es la compatibilidad o no» de la normativa española para cambiar las reglas del juego en la clausura de centrales eléctricas con el derecho comunitario.

No obstante, el comisario dejó claro que Bruselas no está para «analizar posicionamientos de gobiernos y empresas», en referencia a la batalla entre el Ministerio de Energía e Iberdrola por la petición de cierre de sus centrales térmicas de Lada y Velilla. Respecto al servicio de interrumpibilidad, por el que las empresas electrointensivas reducen o suspenden su consumo de energía cuando el sistema no logra atender la demanda, sostuvo también que Bruselas está en «diálogo» con España para ver qué «ayudas son de Estado y compatibles» con las reglas comunitarias.

Bruselas incluye 6 interconexiones, 4 eléctricas y 2 gasistas, de España con Francia y Portugal en su lista de prioridades

Europa Press.- La Comisión Europea ha incluido 6 interconexiones de España con Francia y Portugal en su lista de proyectos prioritarios para completar la Unión de la Energía, de las cuales 4 son eléctricas y 2 gasistas, al tiempo que ha advertido de que el nivel de conexión eléctrica del país, que es del 5,8%, es «insuficiente» frente al objetivo del 10%.

El comisario de Energía y Acción Climática, Miguel Arias Cañete, ha presentado el tercer informe sobre el estado de la Unión de la Energía y una nueva actualización de la lista de Proyectos de Interés Común (PIC), que son aquellas infraestructuras «clave» para que la Unión Europea cumpla sus objetivos climáticos y energéticos y que son susceptibles de recibir fondos comunitarios. En este sentido, el comisario español ha afirmado que «se necesitan esfuerzos adicionales» para integrar la Península Ibérica en el mercado energético europeo. En concreto, la nueva lista de Bruselas incluye seis interconexiones de España con Francia y Portugal.

En cuanto a las interconexiones eléctricas, el Ejecutivo comunitario sigue incluyendo en esta lista a la interconexión entre España y Francia por el Golfo de Vizcaya, las interconexiones con Francia desde Navarra y Aragón y la conexión entre Galicia y Portugal. Con respecto a las conexiones gasísticas, la nueva lista incluye el gaseoducto Midcat, que debe unir España y Francia a través de Cataluña, con la primera fase de este proyecto (STEP), y la tercera interconexión entre España y Portugal.

El Ejecutivo comunitario señaló en su análisis sobre los avances energéticos en España que su nivel de interconexión eléctrica en 2017 es del 5,8%, una cifra que es «insuficiente» porque está «muy por debajo» del objetivo fijado para 2020, que es del 10%. «España sigue estando conectada de forma insuficiente con la Unión Europea en el mercado eléctrico y no puede recoger todos los beneficios de un verdadero y efectivo mercado interior comunitario», afirma Bruselas en el documento, en el que añade que este hecho tiene «consecuencias negativas» para Portugal.

En este sentido, la Comisión Europea ha apuntado que el proyecto del Golfo de Vizcaya para conectar Francia y España, cuya finalización está prevista para 2025, elevará la capacidad de interconexión entre los dos países hasta los 5.000 megavatios (MW), y llevará a España «cerca» del objetivo del 10%. Además, Bruselas calcula que las otras 2 interconexiones eléctricas con Francia a través de los Pirineos, desde Navarra y Aragón, cuya puesta en marcha se estima en 2026, incrementará esta cifra hasta los 8.000 MW. Asimismo, el comisario Arias Cañete ha subrayado también los avances conseguidos con respecto al proyecto Midcat.

Cañete habla abiertamente de un 30% de renovables para 2030: “Apenas supondría 1.600 millones de inversión adicional al 27% planteado”

Redacción / Agencias.- El comisario europeo de Energía y Acción por el Clima, Miguel Arias Cañete, aseguró que el compromiso de la Unión Europea con la descarbonización del mercado energético es «firme» y ve factible ampliar al 30% el objetivo de energía generada por fuentes renovables en la Unión Europea para 2030, que actualmente es del 27%, dada la importante reducción de costes del desarrollo de las renovables en los últimos años, especialmente en tecnologías como la fotovoltaica, la eólica y eólica marina.

Arias Cañete, durante la inauguración del Congreso Nacional de Energías Renovables, ha subrayado que, respecto a las previsiones que había cuando se fijó el objetivo de que en 2030 la energía renovable supusiera el 27% del total en Europa, los descensos en los costes de las renovables arrojan nuevas cifras. En este sentido, explicó que el ahorro hasta 2030 será de 2.900 millones de euros, así como de 6.900 millones el que habrá de 2030 a 2050, respecto a los cálculos iniciales. Además, desveló que con un objetivo del 30% de energías renovables sólo se generarían unos costes adicionales de inversión de 1.600 millones de euros con respecto al del 27%, muy inferiores a los que había cuando se fijó.

En este sentido, Cañete indicó que la Comisión Europea ha facilitado documentación con esos datos para convencer al Consejo Europeo, formada por los representantes de los Gobiernos de cada país, de que es factible considerar porcentajes de renovables superiores al 27%, dada la citada reducción de costes. Por ello, añadió que desde la Comisión Europea se ve «con buenos ojos el incremento del objetivo de ambición a la vista de los nuevos datos» que «hacen más fácil, en términos de coste-eficiencia, asumir objetivos más ambiciosos».

Por otro lado, el comisario de Energía explicó que organizar la descarbonización, consistente en reducir las emisiones de CO2 entre un 80% y un 95% para 2050 a nivel europeo, es «un desafío gigantesco» que pretende realizarse en tres décadas. Asimismo Cañete recalcó el «compromiso» de España con esta política comunitaria y quiso desmentir una afirmación común: «No es verdad, como se dice a menudo, que nuestros sistemas energéticos estén en una encrucijada; están completamente encaminados hacia las energías renovables».

En cuanto a los planes nacionales integrados de Energía y Clima que los países tienen que enviar a Bruselas, Cañete ha indicado que si se producen retrasos, espera que sean los menores posibles, pues los borradores que se envíen tendrán que ser analizados por la Comisión Europea. También se ha referido a las interconexiones energéticas, que ha reconocido que condicionan el desarrollo de las renovables, y aseveró que su construcción «es una prioridad política de primera magnitud para la Comisión Europea» ya que si no es así está en riesgo la descarbonización. Así, valoró el respaldo dado por el presidente de Francia, Emmanuel Macron, al desarrollo de las interconexiones energéticas en Europa, ya que sin ellas “no habrá Unión Energética”.

Además, Cañete también destacó el impulso «decisivo» que se dio a las interconexiones en 2015 con la celebración de la Cumbre de Madrid, en la que España, Portugal, Francia y la Unión Europea acordaron avanzar su desarrollo, pero consideró que alcanzar los objetivos del 15% de interconexión en 2030 va a «requerir de un nuevo impulso político». Por ello, señaló la necesidad de una nueva cumbre para relanzar los proyectos actualmente en marcha, como el de la interconexión por el Golfo de Vizcaya, cuya tramitación y financiación ya está en la recta final. «Creo que un impulso político adicional sería fundamental para rematar este proceso hasta que España alcance el nivel de interconexión necesario», apuntó.

Por su parte, el presidente de la Asociación de Productores de Energías Renovables (APPA), José Miguel Villarig, ha expresado su preocupación por la evolución en el futuro de las subastas de renovables; por la fiscalidad en España, «excesiva y recaudatoria, que no es congruente con los objetivos europeos», por lo que pidió una fiscalidad «bajo el principio de que el que contamina paga» ya que cree que la actual fiscalidad no incentiva las renovables; y por la posibilidad de que se reduzca la rentabilidad razonable del parque instalado en la próxima revisión que se haga.

Villarig señaló en su intervención que España ha sido «modelo de integración de las renovables en el sistema eléctrico» a nivel europeo. No obstante, también reivindicó que «debemos conseguir que las renovables no sean consideradas un subapartado» dentro de las políticas de desarrollo sostenible. Asimismo, Villarig criticó la «falta de rigor de algunos de los últimos Gobiernos de nuestro país» en materia de gestión de la política de energías renovables. Desde APPA, afirmó su presidente, están «preocupados por la continua improvisación del Ministerio de Energía».

Unidos Podemos demanda al Gobierno que defienda unos objetivos de energía y clima más ambiciosos ante la Unión Europea

Europa Press.- Unidos Podemos, grupo parlamentario del que forma parte Equo, exigió al Gobierno una serie de objetivos verdes que deberá defender en el marco de la Unión Europea, dentro de la negociación del paquete de medidas legislativas Energía limpia para todos los europeos. Así lo hizo con una moción consecuencia de la interpelación que la coportavoz de Equo, Rosa Martínez, dirigió al ministro de Energía, Álvaro Nadal.

En su iniciativa, Unidos Podemos plantea que el Gobierno defienda en las negociaciones comunitarias objetivos nacionales y vinculantes para situar en 2030 el uso de renovables en el 45% y el ahorro en eficiencia energética en el 40%. Este es uno de los objetivos con los que Unidos Podemos esperaba que el Congreso instara al Gobierno a redirigir su política energética en Bruselas. Otras de las medidas propuestas por Unidos Podemos pasan por defender el acceso prioritario de las energías renovables a la red eléctrica, el apoyo a las cooperativas de productores energéticos, el establecimiento de «una estrategia transversal contra la pobreza energética» y la obligatoriedad de un presupuesto de carbono en la Unión Europea.

Asimismo, también llaman a acabar con los mecanismos por capacidad, pues consideran que son «subvenciones encubiertas a las energías sucias» y, si no es así, recurrir a ellas siempre que no se supere el umbral de emisión de 350 gramos por CO2, como propone la propia Comisión Europea, para centrales ya existentes y nuevas. Otras de las medidas que incluyen en su moción son el fin de las subvenciones públicas a los agrocombustibles, que compiten con la producción alimentaria y contribuyen a la deforestación en países empobrecidos, reforzar la cooperación a nivel nacional, regional y municipal, y fijar una tasa de renovación de viviendas «eficientes, saludables y asequibles» del 3%.

Durante su interpelación Nadal, la dirigente de Equo afeó al ministro que España no se situara en el «eje París-Berlín» y se decantara por hacer «causa común con Polonia en defensa de las energías sucias». En el texto de la moción, Martínez critica que, aunque los objetivos propuestos por la Comisión Europea «no son todo lo ambiciosos que deberían para dar cumplimiento a los Acuerdos del Clima de París», la posición del Ejecutivo español «ha sido la de defender unos objetivos en energía renovables y eficiencia energética muy por debajo de los propuestos por la Comisión». De esta forma, la diputada de Unidos Podemos acusa al Gobierno de «defender una transición mucho más lenta de lo que es posible tecnológicamente».

Martínez critica que la posición española condicione cualquier objetivo y acuerdo a la construcción de nuevas interconexiones, que si bien concede que este elemento «será importante en la transición energética» asegura no compartir «la supeditación de los objetivos de renovables a la construcción de nuevas interconexiones». Así, advierte del «altísimo coste económico» de estas infraestructuras y vuelve a demandar «máxima transparencia y control» habida cuenta de su impacto ambiental. «Necesitamos más información y evidencias de la necesidad estratégica de estos proyectos: estudios de mercado, los cálculos, análisis de coste-beneficio, de la viabilidad de otras opciones (ahorro, almacenamiento, gestión de la demanda)… Estos informes deben ser públicos y debatidos, dado el esfuerzo que va a suponer en la factura eléctrica», asevera.

Nadal advierte de que un cierre de las térmicas de carbón encarecería el precio de la electricidad hasta un 15%

Europa Press.- El ministro de Energía, Álvaro Nadal, ha asegurado que el Gobierno defenderá la permanencia de las centrales de carbón «mientras no perjudique los objetivos medioambientales» y ha argumentado que su desaparición podría encarecer hasta un 15% el precio de la electricidad en los momentos de mayor repunte de los precios.

Así lo ha asegurado durante la interpelación dirigida al Gobierno por la coportavoz de Equo y diputada de Unidos Podemos, Rosa Martínez, que le ha reclamado mayores esfuerzos por impulsar energías limpias y luchar contra el cambio climático. Sin embargo, Nadal ha asegurado que España es, dentro de los países grandes de la Unión Europea, el que más energía renovable ha instalado «con diferencia», que este año alcanzará el 18,9% cuando el objetivo es el 20% en 2020, por lo que cree que es el país que «más rápidamente» está dando cumplimiento a sus compromisos.

Ante las exigencias de la diputada de Equo, el ministro instó a «aprender de los errores del pasado», recordando que la apuesta hace 10 años por «renovables totalmente inmaduras» tiene un coste anual de 7.000 millones durante 25 años y que decisiones de este tipo tienen un coste en la factura. «Aquí todo el mundo promete mucho y sueña mucho», lamentó, acusando a Martínez de «pintar el mundo de color de rosa», y que estas decisiones, y su impacto en el empleo, en la producción industrial, acaba con el mundo «pintado de color de paro».

Nadal ha rechazado que la decisión de mantener este tipo de centrales o su apuesta por las interconexiones energéticas se motiven por el interés de las grandes compañías eléctricas, ya que ha argumentado que tanto el aumento de los precios que traería el cierre de térmicas como una mayor competencia que traerán las interconexiones no beneficiarán sus intereses. El ministro ha defendido la necesidad de profundizar las interconexiones con el resto de países pues ha explicado que permitirá que dotar al sistema de una mayor flexibilidad en los momentos en los que las energías renovables no aporten suficientemente al pool.

La escasa interconexión de España, reflexionó Nadal, condena al país a tener un sistema de pago por capacidad ya que en los momentos de escasez hay que pagar la estacionalidad de centrales térmicas, pero sí ha reconocido la necesidad de encontrar un procedimiento más competitivo, como subastas, «para revelar el coste de esta flexibilidad«. El ministro ha cuantificado que el coste anual de no estar suficientemente conectado con Europa, por los momentos de escasez y el exceso de energía renovable que no puede derivarse a otros sistemas, supone 1.200 millones, pero que en caso de avanzar a objetivos en renovables más ambiciosos, superiores al 20% e incluso cercanos al 30%, estos costes podrían aumentar hasta los 10.000 millones de euros.

Por su parte, Rosa María Martínez ha lamentado que España no contribuya a que Europa lidere las energías renovables y cree que la posición del Gobierno hace que vaya «justo en la dirección contraria a una transición limpia, justa y democrática«. «Ha perdido la oportunidad de ponerse al lado de los Estados que con más fuerza están apostando por la acción climática y las renovables. En vez de ponerse en el eje París-Berlín, hace causa común con Polonia en defensa de las energías sucias», criticó.

Para Martínez, la argumentación del ministro por las limitaciones tecnológicas para apostar por sistemas alternativos no es válida. «Han destrozado la ciencia y la investigación; quizás tengan parte de responsabilidad», denunció. Tampoco dio por buenas ni la defensa de la interconexión ni del carbón. «Me crié en una zona minera. Llevo 20 años viendo cómo se dilapidan los fondos que iban destinados a dar futuro y alternativa a las cuencas», aseveró, responsabilizando al PP y al PSOE. «Su cierre va a llegar antes o después. No lo digo yo, lo dice la transición energética«, auguró.

Respecto a las interconexiones, Martínez expresó su rechazo a que España condicione su compromiso en renovables y contra el cambio climático a estas infraestructuras, y ha reiterado su demanda por poder tener acceso a los análisis, estudios de mercado y coste-beneficio, entre otros, de estos proyectos, recordando los resultados de otros proyectos como el Castor o muchas autopistas, rescatados con dinero público. «Mientras no los tengamos, vamos a seguir pensando que, o bien son excusa para retardar el objetivo de las renovables, o un medio para conseguir contratos millonarios para eléctricos y grandes constructoras«, sentenció.

Asimismo, también puso en duda que las interconexiones vayan a perjudicar a las grandes compañías, como decía el ministro, pues pueden dar salida al gas o a los ciclos combinados, y que si sirven para exportar en momentos como el parón nuclear en Francia, ha advertido que «con el mix actual va a disparar el precio de la electricidad». También criticó la ausencia de alternativas por parte de Nadal, como la búsqueda de formas de almacenamiento, el ahorro energético o la gestión de la demanda. «Eso nos va a dar flexibilidad y no se contempla en sus discursos», ha dicho, defendiendo que esto sí provocaría un descenso de los precios.

La diputada de Equo ha criticado la «visión cortoplacista» de Nadal, «basada en el precio», y que «las acciones del Gobierno indican que no tiene ningún compromiso». «Dice que a España le cuesta mucho más luchar contra el cambio climático, pero es que lo sufre mucho más«, ha dicho. «Dígale a la gente que sufre y está pagando la factura de las consecuencias del cambio climático en su vida que es más caro actuar contra el cambio climático que no hacer nada. Dígaselo», ha concluido.

El Gobierno señala la importancia de las interconexiones energéticas para alcanzar los objetivos de renovables

Redacción / Agencias.- El secretario de Estado de Energía, Daniel Navia, ha afirmado que el Gobierno no condiciona los objetivos de energías renovables a la existencia de más interconexiones energéticas en la Unión Europea aunque sin ellas «España no llega» a su cumplimiento. Se trata de una cuestión planteada por España y Portugal, países que han pedido aumentar las interconexiones para avanzar en el mercado único energético y acabar con la «isla energética» que es la Península Ibérica.

Para elaborar la futura Ley de Cambio Climático y Transición Energética, el Gobierno ha creado un grupo de expertos a propuesta del propio Ejecutivo, los grupos políticos, la patronal y los dos sindicatos mayoritarios. Navia explicó que no se trata de proporcionar al Gobierno una estrategia energética, sino que aporte iniciativas y que cada una de ellas vaya asociada con un análisis de sus costes y beneficios. Respecto a esta ley, Navia destacó la interlocución que el Gobierno mantiene con los grupos de la oposición en el Congreso, con quienes hay un diálogo «muy positivo».

El secretario de Estado destacó la importancia del consenso social y su sostenibilidad financiera para la predictibilidad de la ley y su duración en el tiempo ya que consideró que tendrá que hacerse una ley que genere empleo y no suponga una reducción de la industria o que haya mayores costes que ingresos”. «Si no es sostenible financieramente, la realidad se impondrá y se cambiará», al tiempo que recordó la inserción de la ley en la legislación europea. «España tiene que acompasarse e influir en la política europea, para lo que es fundamental que como país demos una imagen coherente», señaló Navia, por lo que destacó la existencia de un proceso abierto de participación y consulta pública de la ley.

Según Navia, el objetivo de la ley es vertebrar los esfuerzos por cumplir los objetivos de cambio climático a la vez que se tiene en cuenta la eficiencia y «se crea prosperidad económica». Así, Navia subrayó la importancia de que la transición energética sea un proceso gradual y señaló la conveniencia de diversificar políticas para evitar errores que «nos lleven a situaciones de no retorno».

Destacó la duplicidad de sistemas energéticos para cubrir la demanda todos los días, independientemente de la climatología, «salvo que se desarrolle la tecnología de almacenamiento». Para ello, la solución es pagar por la capacidad, por un sistema de respaldo a las renovables que dé seguridad en el suministro y garantía de precio. «Quién sea capaz de garantizar la capacidad a un precio competitivo es el que debe participar«, aseguró Navia.

En cuanto a la energía nuclear, el secretario de Estado afirmó que la postura del Gobierno «es clara» al señalar que «la energía nuclear tiene que jugar un papel en el mix energético ya que renunciar a ella tendría consecuencias en los costes de la electricidad y en las emisiones». Navia ha vuelto a mostrar la postura favorable del Gobierno a prorrogar en 10 años la vida útil de las centrales, como están haciendo otros países de Europa, y ha manifestado que renunciar a ella implica costes económicos y medioambientales. «También tiene una idea de gradualidad y reversión de las políticas. Llevamos 40 años invirtiendo en energía nuclear y no tendría sentido amortizarla inmediatamente» apuntó.

A pesar de reconocer que no ha sido la forma «más óptima», también ha defendido las dos recientes subastas de renovables, que en conjunto han sumado 8.000 megavatios (MW), pues considera que estas nuevas adjudicaciones de retribución a las renovables sólo se han podido hacer «cuando ha habido margen financiero». «Han sido un gran éxito y son razonablemente defendibles», sostuvo Navia, que destacó que al haber esperado más que otros países «ahora estamos aprovechando las ventajas tecnológicas desarrolladas los últimos años».  Respecto al vehículo eléctrico, avanzó que antes de fin de año habrá iniciativas para desarrollar infraestructuras de recarga, pues incentiva más la compra de estos coches que las subvenciones y tiene un coste menor.

Asimismo, cree que la ley debe profundizar y buscar un «tono más social» de la eficiencia en aquellos hogares con menores recursos. «Tiene mucho sentido que estas casas tengan más acceso a recursos para mejorar la eficiencia». Por último, en cuanto a la cuestión del autoconsumo, aseguró que el Gobierno «está totalmente abierto a nuevas propuestas» y quiere eliminar trabas administrativas, aunque no es partidario de subvencionar el autoconsumo a pequeña escala porque es más eficiente hacerlo a otras renovables.

Narbona critica que España juega un papel «de lastre» en los debates europeos sobre las energías renovables

Europa Press.- La presidenta del PSOE y exministra de Medio Ambiente, Cristina Narbona, ha criticado que España juega actualmente un papel «de lastre» en los debates europeos sobre energías renovables, como los que se producen en los Consejos de Ministros de la Unión Europea, cuando nuestro país ha sido «pionero».

Además, ha asegurado que los proyectos presentados por el Gobierno español en relación con las interconexiones energéticas en la Unión Europea «no se corresponden» con la petición que hizo en junio de este año el ministro de Energía, Turismo y Agenda Digital, Álvaro Nadal, junto con Portugal, de adoptar «medidas urgentes y vinculantes» para aumentar el nivel de interconexión de los países que se encuentran por debajo del objetivo de interconexiones de un 10%, como es el caso de España.

En este sentido, ha incidido en que estas interconexiones son uno de los «elementos más importantes» en la actualidad y las ha calificado de «pescadilla que se muerde la cola» porque son infraestructuras con financiación privada y pública, a través por ejemplo del Banco Europeo de Inversiones), pero ha destacado que «hace falta» que los países presenten proyectos. Del mismo modo, Narbona ha hecho hincapié en que los mecanismos normativos en España «no están ni mucho menos a la altura» de lo que sucede en Alemania, Francia o Reino Unido. En este sentido, ha afirmado que «las grandes empresas» están entrando «claramente» en la producción de energías renovables en los países de la Unión Europea.

Además, ha lamentado que Europa «ha llegado tarde» en materias como la electrificación del transporte que es, en su opinión, «la asignatura pendiente», y ha concretado que el papel de «liderazgo» lo «está asumiendo» China. Igualmente, advirtió de que la dependencia energética europea es «una extraordinaria debilidad» y precisó que actualmente «un 53% de los recursos energéticos que se consumen en la Unión Europea» proceden del exterior, mientras que en el sector del transporte la dependencia es «de un 90%».

Narbona también ha defendido que debe producirse una transición energética y un cambio de modelo que pase por un abandono de los hidrocarburos y los combustibles fósiles hacia la «consolidación» de las energías renovables «aunque no existiera el cambio climático», una cuestión que, tal y como ha añadido, tiene consecuencias también a nivel de seguridad global. Así, asegura que los motivos de esta transición son que «cada vez somos más capaces» de usar energías renovables «a un precio menor» y que los cambios tecnológicos actuales «cuestionan a las grandes empresas» energéticas. En este sentido, incidió en que actualmente los consumidores tienen «mucha capacidad» para convertirse en productores de su energía.

Asimismo, ha alertado de que los fenómenos naturales del cambio climático «se están intensificando» y ha mencionado las consecuencias de la tormenta tropical Harvey, que ha provocado unas inundaciones en el estado de Texas (Estados Unidos) que podrían alcanzar un coste de hasta 20.000 millones de dólares (16.605 millones de euros) para la industria de seguros estadounidense, lo que lo colocaría como uno de los diez huracanes más costosos en la historia del país, según estimaciones de JP Morgan Chase.

Por ello, Narbona aboga por que haya políticas «globales» y asevera que el modelo energético «imperante» en la sociedad explica en torno a un 80% del proceso de calentamiento global, mientras que ha completado que el 20% restante es consecuencia del modelo alimentario humano basado en la deforestación y en el consumo de carne y, por lo tanto, la mayor emisión de gas metano a la atmósfera. De esta forma, considera que las causas y efectos del calentamiento global muestran «una terrible asimetría» y una «injusticia» porque los países «que más han contribuido» al calentamiento global «no son necesariamente los más afectados» por sus consecuencias. Es decir, que considera el cambio climático como «un enorme desafío ético de nuestra sociedad».

El consumo energético crece un 0,2% en España, continuando en la senda de mejora de su eficiencia y reduciendo emisiones

Europa Press / EFE.- El consumo energético creció un 0,2% en España durante 2016, frente al 1,7% que aumentó en 2015, lo que supone, unido al incremento del PIB español un 3,2% en el último año, una mejora de la intensidad energética y pone de manifiesto que España continúa por la senda de mejora de su eficiencia energética, según el informe Statistical Review of World Energy 2017 de BP.

Por fuentes de energía, el informe recoge un descenso del 23,9% en el consumo de carbón mientras que el de la hidráulica subió un 27,3%. Según BP, estos cambios en el consumo respecto al año anterior han producido una nueva configuración del mix energético español. El petróleo, el gas natural, la energía nuclear y la hidráulica, por su parte, ganaron en el último ejercicio en comparación a 2015 cuota en su aportación a la demanda, acabando con una participación en el mix de 46,3%, 18,6%, 9,8% y 6%, respectivamente. Mientras tanto, el carbón redujo su porcentaje hasta el 7,7%, en contraste al crecimiento del 6% que experimentó un año antes.

BP destaca también que en España se redujeron un 2,7% las emisiones de dióxido de carbono (CO2), mientras que a nivel mundial aumentaron un 0,1%, el promedio más bajo desde 1981-1983, y cambia el mix energético hacia fuentes más limpias. En 2016, la demanda mundial de energía volvió a tener un crecimiento «débil» por tercer año consecutivo, aumentando solo un 1%. Por su parte, las renovables siguieron creciendo «fuertemente» y cayó el uso del carbón.

2016 fue un ejercicio de ajustes para el mercado del petróleo, que fue absorbiendo el exceso de oferta que había dominado en los últimos años. Los precios bajos del crudo (44 dólares, según el crudo Brent) impulsaron el crecimiento de la demanda en un 1,6% e influyeron en la producción, que creció a nivel mundial solo un 0,5%, cayendo de manera muy importante en Estados Unidos. La producción de la OPEP se incrementó en 1,2 millones de barriles por día, mientras que en la producción en los países no miembros se redujo en 800.000 barriles diarios, su mayor caída anual en los últimos 25 años.

Modelo energético con menos emisiones

El consumo mundial de gas natural, por su parte, aumentó un 1,5% en 2016, un porcentaje «pequeño» en comparación con su tasa media de la última década, y representó un 24,1% del mix de energía primaria. Así, los mercados de petróleo y de gas también consolidaron ciertas tendencias que hacen evidente la transición a un modelo energético con menores emisiones de carbono, como son un menor crecimiento de la demanda mundial de energía y el traslado del centro de gravedad de esta demanda a las economías emergentes con altos índices de crecimiento. De este modo, China e India incrementaron su demanda en un 1,3% y 5,4%, respectivamente, mientras que la demanda de la OCDE creció un 0,2% respecto a 2015.

En cuanto al carbón, el más contaminante de todos los combustibles fósiles, su consumo cayó por segundo año consecutivo, en un 1,7%, debido, principalmente, a la disminución de la demanda de Estados Unidos y China. La producción también se redujo en un 6,2% y su participación en la demanda de energía primaria fue menor, al 28,1%. Por el contrario, las energías renovables, encabezadas por la eólica y la solar, aumentaron un 12%, pese a que el suministro representó el 3% de la energía primaria. China fue el mayor productor mundial de energías renovables en 2016, desplazando así a Estados Unidos.

La producción de energía nuclear creció un 1,3%, dejando el mix energético a nivel mundial con el petróleo y el gas como combustibles dominantes en cuanto a su participación en el consumo de energía primaria con un 33,3% y un 24,5%, respectivamente, seguidos del carbón (28,1%), la hidráulica (6,9%), nuclear (4,5%) y renovables (3,2%). Finalmente, la generación de electricidad aumentó un 2,2% con todo el crecimiento proveniente de los países en desarrollo. Los países de la OCDE no registraron variaciones.

Entre 40 y 60 dólares

Por su parte, el presidente de BP España, Luis Aires, auguró que los precios del petróleo se mantendrán en la banda baja de entre 40 y 60 dólares por barril ya que los inventarios de crudo «siguen siendo muy elevados». Aires ha manifestado que los precios del petróleo «se van a comportar en línea parecida a los últimos años» pues sigue habiendo mucho crudo en inventario, pese a la mayor «elasticidad» que la extracción por fracking o fractura hidráulica aporta.

Por otra parte, ha destacado el cambio que se está produciendo en el mundo del gas con el despegue del gas natural licuado (GNL), cuya venta ya no se hace mayoritariamente en contratos a largo plazo, pues el 40% de los contratos de GNL tiene una duración menor de 10 años y se está produciendo liquidez. Aires ha señalado que de aquí a 2020 el GNL crecerá un 30% y ha añadido que hará que el mercado de gas, que hasta ahora era muy de regiones, sea más integrado, y que los precios vayan convergiendo.

Aires, que recordó que el precio del gas en Europa es más caro que en Estados Unidos, manifestó que para que se abarate es necesario seguir fomentando el desarrollo de infraestructuras para importar gas natural licuado. Indicó que ello, junto a otras actuaciones, como la alternativa para traer gas por gasoducto a través del corredor Azerbaiyán-Italia, en el que colaboran BP y Enagás, y que proporcionará gas adicional a Europa en 2019, así como la ejecución de las interconexiones en el continente, hará que países como Rusia bajen los precios.