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Pekín registra el nivel más bajo de contaminación de los últimos 4 años

Europa Press.- La Oficina de Protección Medioambiental de la capital de China, Pekín, ha registrado entre enero y julio de este año el nivel más bajo de contaminación por polución desde 2013. La agencia ha registrado un nivel de 64 microgramos por metro cúbico, un 34,7% menos respecto al valor detectado en 2013. La niebla tóxica es ya uno de los principales problemas medioambientales del país, especialmente en el norte debido a la concentración de la industria y al uso excesivo de carbón, una situación que empeora en invierno.

En febrero, el alcalde de Pekín, Cai Qi, anunció la puesta en marcha de un plan de reducción del consumo de carbón en un 30% durante 2017 en un intento por combatir la contaminación en la ciudad, una de las más afectadas por el smog. Según las autoridades, el nivel de polución cayó, entre otras cosas, gracias a la retirada de 300.000 vehículos obsoletos, el desplazamiento de unas 500 fábricas y la sustitución del carbón por energías renovables en al menos 4.000 hornos. El objetivo es llegar a los 60 microgramos por metro cúbico a lo largo de este año.

El mercado español, el segundo más activo de Europa en fusiones y adquisiciones del sector energético operando por 2.193 millones

Redacción / Agencias.- El mercado español ha sido el segundo destino de inversión más atractivo de Europa para el sector energético al registrar transacciones por valor de 2.193 millones de euros en el primer trimestre de 2017, según el estudio Power Transactions and Trends de la consultora EY.

España, que supone el 27% del total del sector en Europa, sólo es superada por Reino Unido, con 4.400 millones de dólares (unos 3.858 millones de euros) en el mismo periodo, y en conjunto han representado el 73% del valor total de las fusiones y adquisiciones del sector a nivel europeo, con 9.400 millones de dólares (unos 8.244 millones de euros). Esta última cifra supone una caída del 66% con respecto al trimestre anterior, si bien, en términos comparativos interanuales se trata de un ascenso del 28%. Desde EY apuntan que el sector ha estado en estos meses centrado en buscar «activos con ingresos estables, como los de renovables y de transmisión y distribución (T&D)».

En este sentido, España «volverá a apostar por las energías verdes con una nueva subasta de 3 GW, tras la celebrada en el mes de mayo de igual potencia, con la que el Ejecutivo pretende acercarse al objetivo fijado por Bruselas de que en 2020 el 20% del consumo energético proceda de fuentes renovables«, ha explicado el socio director del área de transacciones de EY, Rafael Roldán. Precisamente, en línea con esta tendencia por los activos renovables, la compra del 22,5% de EDP Renovaveis por su propia matriz EDP por alrededor de 1.400 millones de dólares fue al cierre del primer trimestre la segunda operación de mayor tamaño de Europa.

A nivel mundial, el mercado de transacciones en el sector energético ha movido 45.500 millones de dólares (unos 39.894 millones de euros) en el primer trimestre, un 30% menos que en el trimestre anterior. Los activos más atractivos para los inversores han sido los de transmisión y distribución con operaciones por valor de 20.300 millones de dólares (unos 17.802 millones de euros), el 45% del total. Por su parte, el segmento renovable registró 66 transacciones valoradas en 15.300 millones (unos 13.416 millones de euros). De hecho, las fusiones y adquisiciones de activos de energías verdes captaron el triple de capital que en el trimestre anterior.

Por diversificación geográfica, las regiones de América y Asia-Pacífico han sido las que más capital movieron en operaciones de M&A en el sector durante el primer trimestre del año, 21.000 y 15.100 millones de dólares, respectivamente, lo que representa el 80% del total mundial. Canadá y China fueron los principales inversores del mundo y aportando el 41% y el 36%, respectivamente, del capital invertido en transacciones a nivel global. En cuanto a las previsiones para el resto del ejercicio, el informe de EY prevé que continúe la fuerte actividad inversora y contempla un alza en la implantación de las energías renovables en las economías desarrolladas.

La Agencia Internacional de la Energía (AIE) prevé un aumento del 10% de la demanda mundial de gas para 2022

EFE.- La demanda global de gas está previsto que crezca a un ritmo anual del 1,6% entre 2016 y 2022, lo que implica un avance total del 10% en ese periodo impulsado por los bajos precios, la amplia demanda y su menor efecto contaminante que el carbón, según indicó la Agencia Internacional de la Energía (AIE).

El informe del organismo eleva en una décima la previsión anual respecto a la lanzada el año pasado e implica un consumo total de gas de 3,986 billones de metros cúbicos para finales de 2022, frente a los 3,630 billones registrados en 2016. La demanda industrial, según sus datos, es el principal impulsor del aumento de la demanda, con un creciente uso en el sector químico o en el transporte.

La AIE precisó que casi el 90% del crecimiento de la demanda parte de países que no pertenecen a la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), y que China acapara cerca del 40% del incremento global. En su informe constata que muchos países están reformando sus mercados del gas para incrementar el uso de esa fuente de energía y atraer nuevos inversores. Entre ellos figuran México, China y Egipto, señaló la AIE, según la cual si esos cambios se implementan de forma rigurosa pueden suponer un mayor equilibrio entre oferta y demanda.

Para el organismo, la disponibilidad de un suministro amplio y a precios competitivos ayuda a expandir las posibilidades del gas en Asia y a hacer que este mercado vaya a crecer más que el del petróleo o el del carbón en los próximos 5 años. Estados Unidos, el mayor consumidor de gas del mundo, mantiene su crecimiento, aunque a un ritmo menor que entre 2010 y 2016. Ese país es también el mayor productor de gas y para 2022: aportará una quinta parte de la producción; en Oriente Medio habrá también un crecimiento destacable; en Rusia, será menor por su acceso limitado a los mercados; y China pasará a convertirse en el cuarto mayor productor.

«Las ventajas medioambientales del gas natural, en concreto a la hora de reemplazar al carbón, merecen mayor atención por parte de quienes definen las políticas», señaló el director ejecutivo de la AIE, Fatih Birol. La agencia destacó, además, el crecimiento constatado en el gas natural licuado, con la aparición de nuevos países exportadores e importadores. La AIE apuntó que su amplia disponibilidad está añadiendo presión al mercado del gas natural. El liderazgo de las exportaciones del GNL se lo reparten Australia y Qatar, con un protagonismo cada vez mayor de Estados Unidos en el futuro.

Las inversiones del sector energético mundial cayeron un 12% en 2016, hasta 1,5 billones, su segundo año seguido en retroceso

EFE / Europa Press.- El parón de nuevos proyectos petroleros y gasísticos por los bajos precios del barril de crudo influyeron en el descenso del 12% de la inversión mundial en el sector de la energía en 2016, por segundo año consecutivo. En su informe anual sobre la inversión, la Agencia Internacional de la Energía (AIE) señaló que el volumen total de inversiones fue de 1,7 billones de dólares (1,5 billones de euros), lo que representa un 2,2% del producto interior bruto (PIB) global.

El dinero dedicado a la exploración y explotación de yacimientos de petróleo y gas se redujo en 2016 en un cuarto, con lo que en dos ejercicios la disminución acumulada fue del 38%. En cualquier caso, esos hidrocarburos en 2016 todavía supusieron las dos quintas partes de la inversión. En la electricidad, el descenso se limitó al 1% para quedar en 718.000 millones de dólares (630.067 millones de euros), por el efecto del recorte en la generación con carbón, que no fue totalmente compensado por el alza en las redes.

Sin embargo, por primera vez, las inversiones en el sector eléctrico superaron el gasto combinado en petróleo, gas y carbón, señala la agencia adscrita a la OCDE, destacando que la inversión destinada a energías limpias supuso el 43% del dinero invertido en suministros, un nuevo récord de porcentaje. Eso sí, la inversión en nueva generación de electricidad con fuentes renovables bajó un 3%, hasta 297.000 millones de dólares, lo que significa un 3% menos que 5 años atrás, aunque las capacidades instaladas son ahora un 50% superiores, con una producción que se estima un 35% más elevada. La explicación de esa aparente contradicción está en la reducción de los costes unitarios con las mejoras de las tecnologías solares y eólicas.

El dinero destinado a dispositivos de mejora de la eficiencia energética aumentó un 9%, para representar 231.000 millones de dólares (aproximadamente 202.722 millones de euros), de la mano en particular de China que, según la AIE, en unos años podría superar a Europa, que hasta ahora ha sido el líder en este terreno. Una buena parte de esas partidas (133.000 millones) se consagraron a reforzar la eficiencia de los edificios, que absorben un tercio del total de la energía consumida.

China se mantuvo como el primer país por la inversión en energía, ya que representó un 21% del total mundial, y lo más significativo de su evolución fue el hundimiento del 25% en nuevas centrales de carbón. Una muestra de que el país asiático se orienta cada vez más hacia la producción de electricidad con bajo nivel de emisiones de dióxido de carbono (CO2) y a las medidas de eficiencia.

Estados Unidos se mantuvo en segunda posición, e incluso incrementó su peso relativo al 16%, y eso pese al fuerte descenso en la actividad de petróleo y gas. A contracorriente de la tendencia general, India se reafirmó en su tercer puesto con un incremento del 7% gracias al impulso del Gobierno a la modernización de infraestructuras. En Europa, la inversión disminuyó un 10%, sobre todo a causa de las renovables.

El director ejecutivo de la AIE, Fatih Birol, resaltó que en un contexto como el actual en el que la industria del petróleo y del gas se centra en proyectos a corto plazo, cobra mayor importancia que las políticas presten atención a las necesidades de aprovisionamiento a largo plazo. Sobre todo porque, aún asumiendo «objetivos ambiciosos» en términos de mitigar el impacto sobre el calentamiento climático, la inversión en gas y petróleo «tendrá que aumentar respecto a su actual desplome». De acuerdo con la agencia, los primeros indicios apuntan a que la inversión en gas y petróleo este año repunta «modestamente», sobre todo de la mano de los yacimientos de esquistos en Estados Unidos, donde el tirón es del 53%.

El gigante ruso Gazprom comenzará a bombear gas a China por Siberia en diciembre de 2019

EFE.- El gigante ruso de gas Gazprom comenzará a suministrar a China gas natural por el gasoducto Fuerza de Siberia el 20 de diciembre de 2019, según el presidente del consorcio, Alexéi Miller, al término de las negociaciones ruso-chinas. «No cabe duda de que los suministros de gas ruso a China arrancarán el 20 de diciembre de 2019», aseveró Miller.

Agregó que los respectivos documentos con la petrolera china CNPC fueron firmados durante las negociaciones en el marco de la visita a Rusia del mandatario chino, Xi Jinping. Miller prometió que para cumplir con ese compromiso se completará la construcción de los «2.156 kilómetros restantes del gasoducto Fuerza de Siberia”. «Las obras se realizan según los plazos previstos», aseguró Miller.

De esta forma, las entregas de gas ruso al país asiático comenzarán incluso antes de que se inaugure la planta de procesamiento de gas de Amur y no estarán listas para su consumo inmediato al contener helio y etano. Sin embargo, esta era la opción que prefería Pekín, dispuesto a correr con los gastos para procesar el gas ruso, sostienen diversos analistas. Según los expertos, CNPC está interesada en adquirir ese tipo de gas para desarrollar sus propias plantas de purificación. «Parece más bien una solución temporal para Gazprom, hasta la construcción de la planta de procesamiento del gas, pero los chinos están interesados en que se convierta en una opción definitiva», explicó un analista.

China quiere que el gas natural aporte el 15% de su consumo energético en 2030

EFE.- China publicó su plan para incentivar el uso del gas natural, especialmente en las zonas más contaminadas del norte del país, en el que se marca el objetivo de que esta fuente de energía suponga el 15% del total de su consumo energético para 2030. El documento, de la Comisión Nacional para la Reforma y el Desarrollo, apuesta por un mayor protagonismo del capital privado en la expansión de la capacidad gasística china, incluyendo proyectos de exploración en el extranjero y de construcción de gasoductos.

En áreas como Pekín, Tianjin y Hebei, gravemente afectadas por la contaminación atmosférica, este organismo apuesta por cambiar el carbón por el gas natural para los sistemas de calefacción como parte de una «limpieza» de la región, en la que espera que se produzca una transición a un «sistema moderno de energía limpia» en un plazo de 5 años. Asimismo, el gigante energético Sinopec anunció que, tras el descubrimiento de un yacimiento de 220.216 millones de metros cúbicos de gas de esquisto, el campo de Fulingye, la reserva más grande de China, alcanza ya los 600.000 millones de metros cúbicos.

Apple, Facebook, Google, Microsoft y otras empresas piden a Trump que Estados Unidos no abandone el pacto de París

Europa Press.- Mientras el meteorólogo de eltiempo.es, Mario Picazo, considera que el anuncio del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, de abandonar el Acuerdo del Clima de París, que este país firmó en 2016, constituye un «duro golpe» para el sector económico y el empleo norteamericano, grandes empresas que operan en Estados Unidos como Facebook, Microsoft, Apple, Google, Gap, Hewlett-Packard, Levi Strauss y Tiffany, entre otras, han firmado una declaración conjunta en la que emplazan a Trump a no abandonar el acuerdo.

En su escrito, 25 grandes empresas que operan en Estados Unidos subrayaron que mantener el compromiso con el pacto de París beneficiará a la economía estadounidense porque refuerza su competitividad, crea empleos, genera crecimiento y reduce los riesgos empresariales. Las firmas han dicho que el pacto contra el cambio climático «refuerza la competitividad» porque garantiza un esfuerzo global «más equilibrado y reduce el riesgo de desequilibrios competitivos para las empresas estadounidenses». El acuerdo también contribuye a crear empleos y mercados y a generar crecimiento. «Retirarse del acuerdo limitará nuestro acceso a mercados y podría exponernos a medidas de represión», aseguraron.

Por último, aseveran que el acuerdo «reduce los riesgos empresariales». «Como empresas concienciadas con el bienestar de nuestros consumidores, nuestros inversores, nuestras comunidades y nuestros suministradores, estamos fortaleciendo nuestra resiliencia climática y estamos invirtiendo en tecnologías innovadoras que ayuden a alcanzar una transición energética limpia. Para que esta transición ocurra, sin embargo, los gobiernos deben liderar también», indicaron. Tras subrayar que supone un «acuerdo práctico y estable», las empresa han hecho hincapié en que, en un momento en el que otros países invierten en tecnologías y avanzan hacia el cumplimiento del Acuerdo de París, Estados Unidos podrá ejercer «mejor» el liderazgo global en cambio climático y defenderá mejor sus intereses continuando como «pleno miembro» del esfuerzo «global» contra este fenómeno.

“Duro golpe” para Mario Picazo

Experto en cambio climático, Picazo repasa la situación de la política energética mundial y el futuro de las fuentes de energía limpia si Trump abandona la lucha climática, así como sus posibles efectos para la atmósfera y el cambio climático. En este contexto, subraya que mientras China y la mayoría de países de la Unión Europea pretenden liderar el cambio de energías contaminantes por energías renovables, la política de Trump incluye entre sus planes energéticos potenciar las industrias del petróleo y el carbón, dos importantes fuentes de emisión de dióxido de carbono, que además es el principal potenciador del conocido «efecto invernadero» de la atmósfera.

Así, ha destacado que China tiene «todas las papeletas» para desbancar a Estados Unidos y convertirse en el principal fabricante de tecnología solar del mundo. De ser así, Picazo cree que esto supondría un duro golpe para Estados Unidos, ya que durante el segundo mandato del presidente Barack Obama creció este sector vertiginosamente. Mientras, Alemania busca hacer «algo similar» pero liderando el sector de la energía eólica y así contribuir, junto a China y el resto de países comprometidos, a implantar estas dos fuentes de energía en muchas zonas del mundo y en tiempo récord. Para Picazo, «lo positivo de todo esto” es que el mundo está reaccionando «como nunca» lo ha hecho para implementar nuevas fuentes de energía limpia.

Trump confirma la ruptura de Estados Unidos con el Acuerdo de París y la lucha contra el cambio climático

Europa Press,. El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, confirmó la ruptura de su Gobierno con el Acuerdo de París contra el cambio climático, con el que su predecesor, Barack Obama, se comprometió en 2014, en un gesto sin precedentes hasta entonces por parte de una Administración norteamericana.

«Estados Unidos se retirará del acuerdo del clima de París», anunció Trump, entre el aplauso de los presentes, en una esperada comparecencia con la que confirmó lo que ya era un secreto a voces. No en vano, él mismo lo había prometido en la campaña electoral. Trump ha argumentado que los compromisos recogidos en ese «mal acuerdo» perjudican a Estados Unidos y, en concreto, al desarrollo de su economía y a la creación de empleo. El objetivo del inquilino de la Casa Blanca pasa por buscar un nuevo documento más favorable y «justo«, aunque por el momento no ha aclarado cómo ni cuándo lo hará.

En este sentido, ha explicado que no quiere que nada se «interponga en el camino» del desarrollo de Estados Unidos y ha apelado a su «deber solemne» de proteger los intereses de su país de una «gran herida autoinfligida» por el anterior Gobierno. «El resto del mundo aplaudió cuando firmamos el Acuerdo de París, estaban muy felices, por la simple razón de que ponía a nuestro país en una desventaja económica muy grande», ha afirmado.

Trump ha lamentado, por ejemplo, que Estados Unidos haya puesto «bajo llave» las grandes reservas energéticas de las que dispone y advirtió de que no está dispuesto a aceptar una «redistribución de la riqueza» norteamericana entre otros países. El vicepresidente, Mike Pence, verbalizó instantes antes de que Trump tomase la palabra que el lema «Estados Unidos, primero» sigue guiando el rumbo de la Casa Blanca.

El gesto de Trump, tan anticipado como polémico, sitúa a Estados Unidos junto a Siria y Nicaragua, que tampoco se unieron a un acuerdo del que sí forman parte 195 países. Obama se había comprometido a que el país norteamericano redujese las emisiones de gases contaminantes entre un 26% y un 28% para el año 2025, tomando como referencia los datos de 2005. Estados Unidos es el segundo país más contaminante del mundo, sólo por detrás de China. Los expertos estiman que emite a la atmósfera más del 15% de los gases registrados en todo el mundo, por lo que su implicación en materia climática se antoja imprescindible para lograr reducir de forma significativa los niveles actuales en términos globales.

El artículo 28.1 del Acuerdo de París contempla la posibilidad de que una de las partes decida dejar de serlo, pero sujeto a determinadas condiciones. Así, un país podrá solicitar su retirada con una petición escrita que será legalmente efectiva solo un año después de haberla presentado y que, además, no podrá presentar hasta que hayan pasado al menos tres años desde la entrada en vigor del Acuerdo de París. En la práctica ello implica que aunque Trump anuncie el abandono de Estados Unidos, legalmente no podrá solicitarlo hasta noviembre de 2019, y no se haría efectivo hasta un año después, en noviembre de 2020.

Trump, que anteriormente calificó el calentamiento global como una farsa, se negó a apoyar el histórico acuerdo alcanzado en París durante la cumbre del G-7, diciendo que necesitaba más tiempo para tomar una decisión. El acuerdo de París, sellado por cerca de 200 países en la capital francesa en 2015, tiene como objetivo limitar el calentamiento del planeta mediante la reducción del dióxido de carbono y otras emisiones provocadas por la quema de combustibles fósiles. La Comisión Europea señaló que es «decepcionante» que Estados Unidos abandone el acuerdo, pero avisó de que ello «no cambiará el curso de la humanidad» y que la Unión Europea está dispuesta a asumir el liderazgo internacional en esta causa.

Greenpeace denuncia que Trump «deja a Estados Unidos aislado del resto del planeta» al abandonar el acuerdo climático de París

Europa Press.- La organización ecologista Greenpeace ha lamentado la decisión del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, de abandonar el Acuerdo Climático de París, algo que califica como «moralmente reprochable», y «deja a su país aislado del resto del planeta». «Es una decisión moralmente reprochable que el presidente llegará a lamentar. La acción climática no es un debate legal o político, es una obligación ineludible para proteger a las personas y al planeta», ha aseverado Jennifer Morgan, directora ejecutiva de Greenpeace Internacional.

La organización ha señalado que esta decisión supondrá para Estados Unidos «una pérdida de liderazgo internacional», además de «la renuncia a los beneficios económicos y medioambientales de una transición a las fuentes de energía limpias», recordando que Estados Unidos es uno de los mayores emisores de CO2. «Estamos viendo un cambio gigantesco en las políticas de Europa y China, y muchos otros países», añadió Morgan. «Mientras China cierra centrales térmicas de carbón, Trump cierra la puerta a la lucha climática», critican desde Greenpeace, que considera esta decisión como «un intento de sabotear la transición hacia un futuro de energías limpias», aunque augura que «no va a tener éxito» y solo «arrinconará a los Estados Unidos».

Por otra parte, la organización Birdlife lamentó «profundamente» la decisión «naif, aislacionista e inmoral» de Trump por sus consecuencias en el calentamiento global. Desde la delegación española SEO/BirdLife se reclama al Gobierno de Mariano Rajoy y a las fuerzas políticas españolas «redoblar» los esfuerzos tanto en mitigación como en adaptación frente al cambio climático. «La Unión Europea necesita liderazgo y España precisa de ambición climática. Es el país más vulnerable del continente», señaló la directora de la organización, Asunción Ruíz. «Decisiones como esta evidencian que es preciso avanzar en justicia y defensa ambiental internacional», concluye.

Llamamiento a la unidad global

Por su parte, Amigos de la Tierra ha llamado a la unidad global ante la «inminente» retirada de Estados Unidos del Acuerdo del Clima de París y ha destacado que «ahora más que nunca» ve «indispensable» garantizar la unidad del resto de las partes de la Convención Marco de Cambio Climático a las que insta a poner en marcha «políticas climáticas drásticas«. La ONG advierte de que ahora faltarían por ver las implicaciones jurídicas y políticas que acontecerán tras la decisión y lamenta que Trump sea «el único líder mundial» que niegue abiertamente el cambio climático y su carácter antropogénico.

Así, ante la «cruzada» contra los partidarios de la lucha contra el cambio climático, reclama a la Unión Europea y a Mariano Rajoy, que presione a nivel político y diplomático para que Estados Unidos no se salga del Acuerdo. «Esta es la gota que colma el vaso tras la apuesta definitiva de Trump por el gas y el petróleo, así como la promoción de dos mega-infraestructuras para el transporte de combustibles fósiles, el Keystone XL y el Dakota Acces», denunciaron.

En ese sentido, el responsable de clima y energía de la organización, Héctor de Prado, considera que la «obsesión por levantar muros de la Administración Trump» ha empujado a su presidente a construir un «muro a base de ladrillos negacionistas alrededor del clima». Si bien, ha advertido que aún falta ver cómo reaccionará la Organización de Naciones Unidas y los mecanismos legales y políticos que se utilizará para evitar la partida del segundo emisor de gases de efecto invernadero del mundo tras China. «Ahora, más que nunca, es indispensable garantizar la unidad del resto de las Partes y poner en marcha políticas climáticas drásticas», concluyó.

Repsol prevé invertir 500 millones de euros hasta 2020 con el objetivo de reducir sus emisiones más de un 25%

Europa Press.– Repsol reducirá en más de un 25% sus emisiones gases de efecto invernadero en 2020 respecto a 2005 mediante un plan inversor de 500 millones de euros y la puesta en marcha de 150 acciones anuales concretas de integración energética.

En concreto, los programas de eficiencia energética de la petrolera, puestos en marcha hace más de 10 años, permitirán reducir sus emisiones, sobre un inventario de 20 millones de toneladas de CO2, en unos 6 millones de toneladas para 2020. A este respecto, el director corporativo de Tecnología y Negocios Emergentes de Repsol, Jaime Martín Juez, señaló que las medidas de eficiencia energética seguirán siendo la principal fuente de reducciones hasta mediados de siglo, aunque «llegará un momento en que no podremos avanzar más sobre ellas y en el sector tendremos que apostar por desarrollos tecnológicos que tomen el relevo».

En este sentido, las políticas contra el cambio climático han llevado a Repsol a ser invitada a la Oil&Gas Climate Initiative (OGCI), un proyecto de 10 grandes petroleras que suman el 20% de la producción mundial y que invertirán 1.000 millones de dólares (896 millones de euros) en la próxima década para impulsar un salto de escala en las tecnologías para combatir el calentamiento global.

La OGCI, de la que forman parte, además de Repsol, Saudi Aramco, la china CNPC o las grandes petroleras europeas, centrará su trabajo colaborativo en el desarrollo de la captura y almacenamiento de CO2 y en el control de las emisiones de metano, áreas con un alto potencial para reducir emisiones y en las que la industria del petróleo puede aportar su conocimiento y experiencia.

Martín Juez subraya que la propuesta de la OGCI «no se trata de una declaración de intenciones» y que, para ello, se ha comprometido esa inversión de 1.000 millones de dólares en tecnologías frontera, que se sumarán a los programas de reducción que ya realiza cada compañía. «Nos gustaría sembrar la semilla de una mayor inversión en toda la cadena de valor del sector y en otros», que incluye el apoyo a startups tecnológicas para incubar soluciones a largo plazo.

A este respecto, los miembros de la OGCI comparten la apuesta por el gas natural como un combustible central en la transición hacia un modelo energético más bajo en carbono. En esta parcela, Repsol figura bien posicionada para este cambio, con una cartera donde el 65% de la producción y el 75% de las reservas son de gas. Además, la petrolera española aporta a la OGCI su trabajo en áreas como la utilización del CO2 capturado para fabricar otros productos con más valor añadido y también comparte su experiencia en la formulación de combustibles eficientes asociados a motorizaciones muy diversas, un sector crucial porque el transporte consume una quinta parte de la energía primaria del mundo, un porcentaje que crecerá.

En la pasada junta de accionistas, el presidente de Repsol, Antonio Brufau, mostró el compromiso del grupo con la lucha contra el cambio climático a través de esta pertenencia a la OGCI, así como de las medidas puestas en marcha por la compañía. «No solo predicamos con palabras. Somos responsables y vamos a actuar y estamos actuando. Hemos invertido 500 millones de euros para proyectos de reducción de emisiones. Se han reducido, o van a reducirse, porque hay proyectos que están en marcha, 4,3 millones de toneladas/año», subrayó Brufau, pidiendo a todos ser «responsables» y a la industria ponerse a trabajar para conseguir «la meta del objetivo de los 2ºC».