Puntos de vista muy distantes sobre una misma realidad

División no, reubicación de activos

El vicepresidente económico y ministro de Economía y Hacienda, Pedro Solbes, ha declarado este lunes a EFE que el acuerdo alcanzado entre Enel, Acciona y E.On permitirá «una Endesa fuerte e independiente en el futuro», y considera que el pacto alcanzado no supone una división de la eléctrica española, sino una «reubicación de activos».

Según Solbes, el Ejecutivo «se felicita» por la entrada de E.On en el mercado español. Una entrada que, en su opinión, ofrece «enormes posibilidades para el futuro», y añadió que la empresa alemana será un elemento adicional muy positivo dentro del mapa energético español.

Respecto a las acciones legales abiertas por las tres compañías, Solbes ha valorado muy positivamente la renuncia a las mismas, ya que desde su punto de vista, «han generado mucha incertidumbre y no son buenas ni para la empresa ni para sus accionistas».

Solbes ha insistido en que el Gobierno «respeta las decisiones empresariales como siempre».

El PP, menos optimista

No es tan positiva la visión de conjunto desde el Partido Popular, que ha denunciado la actuación «intervencionista» del Gobierno en la opa. El portavoz del partido en el Congreso, Vicente Martínez Pujalte, considera que el PSOE no ha cumplido con su programa electoral, en el que hablaba de «independencia de los reguladores», además de acusar a Pedro Solbes de «haber nombrado a todos los miembros de la CNMV sin contar con nadie».

Las palabras de Pujalte no han sido las únicas críticas que ha recibido el Gobierno por su papel en la opa. El secretario Ejecutivo de Economía y Empleo del PP, Miguel Arias, considera que el acuerdo al que han llegado las empresas aspirantes al control de Endesa es una «actuación intervencionista del Gobierno», que ha permitido que Endesa sea «repartida y fragmentada mediante una operación vergonzosa».

Asimismo afirmó que «Zapatero ha conseguido destrozar Endesa y el desprestigio internacional de España con su política intervencionista». Además, calificó de favoritismo la actitud inicial del Ejecutivo al «apadrinar el asalto de Gas Natural» y de vulnerar la legislación española y comunitaria «para torpedear la opa de E.On».

Por su parte, el secretario ejecutivo de comunicación del PP, Gabriel Elorriaga, afirmaba que el reparto de Endesa en manos de Enel y Acciona suponen un grave riesgo estratégico para España y para la calidad y el precio que recibirán los consumidores. Elorriaga sí cree que el reparto de Endesa es una división, y así lo demuestra cuando dice que «una gran empresa multinacional española va a ser troceada y controlada por una empresa pública italiana».

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