El alcalde de Alburquerque y Greenpeace piden al Gobierno una política energética cien por cien de energías renovables para 2050

La responsable de la campaña cambio climático y energía de Greenpeace España, Aida Vila, explicó que si el Ejecutivo realmente tiene la voluntad de reducir las emisiones a nivel interno para ahorrar en la factura de derechos de emisión, debe adoptar una serie de medidas.

En concreto, reclamó la derogación de la moratoria a las primas para las energías renovables e internalización de los costes externos (sociales y ambientales) de la producción de energía. Igualmente, instó a la eliminación de las subvenciones, directas e indirectas, a los combustibles fósiles y a la energía nuclear, así como al mantenimiento de un régimen estricto de prohibición de las ayudas a los combustibles fósiles más allá del actual límite de 2018.

Por otro lado, Vila opinó que se debería establecer un calendario de abandono de las energías «sucias» y apostar por la planificación energética a largo plazo y por alcanzar cero emisiones derivadas de la energía mediante un sistema energético inteligente, eficiente y cien por cien renovable en 2050 en el que se haya reducido el 55% de la demanda energética final.

Del mismo modo, pidió que se defienda, en la negociación climática de la Unión Europea, la propuesta de trayectoria energética a 2050 presentada por la Comisión Europea, con los objetivos intermedios de reducción de emisiones y una Directiva de Eficiencia Energética que establezca un objetivo obligatorio del 20% de ahorro para 2020, objetivos nacionales de eficiencia energética, así como la reforma del mercado de derechos de emisión para aumentar el precio del carbono.

Vila destacó que «España es uno de los países de Europa más afectados por la doble crisis climática y económica, pero uno de los que tienen una situación más favorable para la recuperación en ambos flancos». En este sentido, hizo hincapié en que «la lucha por el clima es sinónimo de reactivación económica para España por el impulso que implica de sectores como las energías renovables, muy intensivos en generación de empleo y en los que España conserva cierto liderazgo internacional».

A pesar de ello, aseguró que la política energética del Gobierno va «en sentido contrario» y subrayó que su apuesta por los combustibles fósiles y la energía nuclear está provocando «graves consecuencias a nivel de destrucción de empleo en territorios ya muy afectados por ambas crisis la climática y la económica».

En esa línea, el alcalde de Alburquerque, Ángel Vadillo, apuntó que «con la moratoria a las primas a las renovables provocó la cancelación de los cinco proyectos de energía solar térmica en los que la zona confiaba para paliar el grave desempleo y despoblación que les afecta».

Finalmente, en este contexto, la representante de 350.org, Julia Gladiné, señaló que la organización celebra este sábado 5 de mayo el Día de Acción Global organizado bajo el lema «conecta los puntos», para visibilizar los impactos de la crisis climática en todo el mundo.