La compañía eléctrica informó a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) de que «ha consumado con éxito» la venta de su participación en Ibener -que Iberdrola Energía ostentaba de forma directa- a CGE Generación, tal y como pactaron el pasado mes de junio por un importe de 190,6 millones de euros.

Asimismo, explicó que no se han cumplido «en su integridad» las condiciones a las que quedaba sujeta la efectividad de la venta de la participación en Licán «por causas ajenas a la voluntad de las partes».

Por ello, ha quedado sin efecto dicha operación, que se habría realizado a través de Iberdrola Energía de Chile, por importe de 10,8 millones de euros.

Tal y como ya informó la eléctrica cuando se pactaron las ventas, éstas formaban parte del plan de desinversiones en activos no estratégicos recogido en el plan de negocio 2008-2010 de Iberdrola, que prevé deshacerse de activos por valor de 2.500 millones de euros para este año.

Iberdrola entró en 1996 en el capital de Ibener, firma chilena que cuenta con dos centrales hidroeléctricas que tienen una capacidad instalada de 75 y 49 megavatios (MW), respectivamente.

Por su parte, Empresa Eléctrica Licán, también chilena, posee una central hidráulica de 17 MW en fase de construcción.

Con el plan de desinversiones previsto por Iberdrola, la eléctrica presidida por Ignacio Sánchez Galán persigue mantener su fortaleza financiera, optimizar su estructura de capital y asegurar el ritmo de inversión comprometido a los mercados.

El grupo CGE, con más de cien años de experiencia en el sector eléctrico chileno, cuenta en la actualidad con más de 300 MW atribuibles de generación y ha distribuido en 2008 más de 14.000 gigavatios hora (GWh).

La CE autoriza a Iberdrola a vender el 25% de BBG

Además, la Comisión Europea autorizó la venta del 25 por ciento controlado por Iberdrola en la regasificadora Bahía de Bizkaia Gas (BBG) al fondo REEF Pan-European Infraestructures, propiedad de Deutsche Bank, al concluir que la operación no tendrá un efecto negativo sobre la competencia.

Según la información facilitada por Iberdrola el pasado mes de julio, transferirá al citado fondo de inversión el 25 por ciento que tenía en BBG, una venta que, junto a la del 30 por ciento que controla de manera indirecta en Saggas -otra planta regasificadora de Sagunto (Valencia)- le reportará 200 millones de euros.

Iberdrola entró en 1998 en el capital de BBG, ubicada en el municipio vizcaíno de Ziérbena y en servicio desde agosto de 2003.

Esta planta regasifica el gas natural licuado que recibe de barcos metaneros, y dispone de una capacidad de almacenamiento de 300.000 m3 y de emisión de 800.000 m3 de gas por hora.

Los expertos de la Comisión tuvieron en cuenta que RREEF no tiene ninguna actividad que se solape o tenga relación con el negocio de Iberdrola o BBG, por lo que no habría duplicación horizontal ni relaciones verticales entre las partes, explicó el ejecutivo de la UE en un comunicado.

«Si las circunstancias nos dan, nuestros planes son seguir adelante», afirmó Enrique Eskenazi, vicepresidente de YPF, en una entrevista concedida a TVE.

Sin referirse en concreto a esta operación, Eskenazi destacó que su grupo cuenta con la «confianza» de los grandes bancos internacionales, entre los que citó a BNP Paribas, Itaú, Goldman Sachs y Credit Suisse, para acometer compras, y defendió que sólo se puede crecer por medio de créditos.

A finales de 2007, el grupo Petersen firmó un acuerdo con Repsol por el que se comprometió a tomar hasta un 25 por ciento del capital de YPF en dos fases.

La familia Eskenazi adquirió en febrero el 15 por ciento de la filial argentina de Repsol y se reservó una opción para comprar el porcentaje restante.

El plan inicial de Repsol incluía la colocación en bolsa de un 20 por ciento adicional de YPF, pero la iniciativa se aparcó por la situación de los mercados.

Además, durante este verano han circulado numerosos rumores sobre el presunto interés de petroleras chinas por entrar en el capital de YPF.

En la entrevista concedida a TVE, Enrique Eskenazi se refirió también a las críticas que Argentina recibe por su presunta falta de seguridad jurídica y admitió que puede existir cierta sensación de inseguridad en el terreno económico porque se abordan «cambios legales muy rápidos», al igual que en otros países de la región.

«Estamos en el camino de la seguridad jurídica. Tenemos baches pero estamos en el camino. Eso es muy positivo», explicó.

En cuanto a la crisis económica internacional, Eskenazi dijo que la perspectiva es «positiva». En su opinión, se ha superado el «tsunami» y ahora quedan las «últimas pequeñas olas».

No obstante, anticipó que la recuperación mundial no será lineal sino «en forma de serrucho», con avances y retrocesos.

Eskenazi atribuyó la crisis a la falta de regulación del sistema financiero, circunstancia que, dijo, creó un «fantasma de progreso».

«Una parte de la riqueza no era real. Era una invención económica virtual», concluyó.