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El Parlamento Europeo propone unas medidas para actuar contra la contaminación atmosférica

Europa Press. – El pleno del Parlamento Europeo ha aprobado una resolución en la que propone una serie de medidas para combatir la contaminación atmosférica. Además, subraya que se trata de un fenómeno con dimensión local, regional, nacional e internacional, por lo que requiere «acciones a todos los niveles de gobernanza»

El texto, aprobado con 446 votos a favor, 146 en contra y 79 abstenciones, pide por ejemplo a la Comisión Europea que apruebe actuaciones más exigentes para las partículas PM2.5, como recomienda la Organización Mundial de la Salud (OMS).

De la misma manera, los eurodiputados también han solicitado a las autoridades a desarrollar planes de acción con medidas para atajar «todas las fuentes de contaminación atmosférica en todos los sectores de la economía». Además, instan al ejecutivo comunitario una revisión de la directiva de calidad del aire para alinear los límites europeos a los recomendados por la OMS para niveles de materia particulada, óxido de azufre y ozono. También piden a Bruselas a mejorar los controles en Estados miembros para garantizar el cumplimiento de las normas sobre emisiones diésel de vehículos.

Asimismo,  la Eurocámara ha defendido el seguir reduciendo la flota de vehículos con emisiones de óxidos de nitrógeno (NOx) y a introducir procedimientos para quejas colectivas de consumidores en caso de que vuelva a suceder algún escándalo similar al ‘Dieselgate’.

Según afirman los eurodiputados, son los fabricantes de los vehículos quienes deben encargarse de acondicionar los coches que no cumplen con las normas europeas de emisiones y asumir los costes que supone incorporar equipos ‘limpios’ obligatorios.

 

PAC y sector energético

En cuanto a la agricultura, el pleno del Parlamento Europeo ha solicitado que los fondos de la próxima Política Agrícola Común (PAC) estén vinculados a medidas obligatorias para reducir la contaminación atmosférica.

Con respecto al sector energético, los eurodiputados han celebrado que al menos diez Estados miembros se hayan comprometido a reducir gradualmente el uso de carbón y han pedido al resto que hagan lo mismo como muy tarde para 2030.

Los representantes europeos han afirmado, asimismo, que la contaminación atmosférica tiene un impacto «enorme» en la salud de los seres humanos y afecta principalmente a mujeres embarazadas, niños y ancianos. El 90% de los ciudadanos europeos que viven en ciudades están expuestos a niveles de contaminación que puede dañar su salud.

Abogados ambientales piden el fin del carbón en 2025 «como muy tarde» para cumplir con el Acuerdo de París

Europa Press.- El Instituto de Derecho y Medio Ambiente (IIDMA) espera que el Plan Nacional Integrado de Energía y Clima (PNIEC) establezca el 2025 como fecha final para el carbón en España para que el país pueda alcanzar los estándares de la Organización Mundial de la Salud (OMS) sobre calidad del aire y cumplir con el Acuerdo de París contra el cambio climático.

La OMS estima que la contaminación del aire provoca 7 millones de muertes prematuras al año y que el 90% de la población mundial respira aire con una calidad por debajo de los estándares recomendados en sus Guías de Calidad del Aire (GCA). La directora de IIDMA, Ana Barreira, recuerda que es «imperativo» que España siga los estándares de la OMS sobre la calidad del aire, trasladándolos a la normativa ambiental ya que la contaminación es actualmente un problema de salud pública y afecta al derecho a la vida y el derecho a la salud.

Precisamente, una de las fuentes principales de la contaminación en España son las emisiones de las centrales de carbón por lo que la organización subraya que debe ser una «prioridad política» poner fin a la producción de energía mediante este combustible, como muy tarde en 2025. «La salud pública debe ser un criterio fundamental para la elaboración de los Planes de Energía y Clima, así como de la futura Ley de Cambio Climático», ha concluido.

La ministra Ribera pide a la comunidad internacional aumentar «con determinación» la acción para mejorar la calidad del aire mundial

Europa Press.– La ministra para la Transición Ecológica, Teresa Ribera, ha reclamado a la comunidad internacional que aumente la acción para mejorar la calidad del aire y la salud y ha expuesto las iniciativas del Gobierno de España en ese sentido durante su intervención en la Primera Cumbre sobre Calidad del Aire y Salud de la Organización Mundial de la Salud (OMS).

Entre estas acciones ha recordado que el Gobierno presentará en 2019 un Programa Nacional para el Control de la Calidad del Aire, en línea con los objetivos de reducción de emisiones asumidos porque considera que «respirar no puede ser una actividad de riesgo» y en la actualidad es la cuarta causa de mortalidad a nivel mundial, por lo que se debe actuar «con determinación» e informar con transparencia a los ciudadanos. Ese programa, según ha añadido, abordará el problema tanto en las ciudades como en los sectores industrial, de generación de energía o los transportes.

La contaminación, “el asesino invisibilizado”

«Con frecuencia, se alude a la contaminación atmosférica como un asesino invisible. No lo es. Es un asesino invisibilizado, un asunto a menudo descuidado en las agendas políticas globales», ha destacado Ribera, que añadió que además no es solo una cuestión de salud pública sino también un problema ambiental, social y económico. En este marco, ha animado a facilitar más información a los ciudadanos sobre la calidad del aire que respiran, de forma que sea más comprensible y «completamente transparente», con la meteorología como referencia.

En este sentido ha añadido que España está preparando un índice estatal de calidad del aire en línea con el Air Quality Index aprobado recientemente por la Comisión Europea e insta a la comunidad internacional acción contra este problema global porque postergar medidas es una postura «equivocada y cortoplacista«. «El mundo está asistiendo a un proceso de transición hacia un modelo basado en la sostenibilidad y respetuoso con los límites del planeta y nuestros propios límites. Respirar no puede ser una actividad de riesgo», concluyó.

Las organizaciones ecologistas exigen reducir las emisiones un 7% anual y prohibir en 2028 los vehículos que no sean eléctricos

Europa Press.- Las organizaciones Amigos de la Tierra, Ecologistas en Acción, Greenpeace, SEO/BirdLife y WWF han trasladado al Gobierno una propuesta para su inclusión en un Plan Nacional de Energía y Clima que sea efectivo en la lucha contra el cambio climático y que pasa por reducir un 7% al año las emisiones, cerrar las térmicas de carbón y las nucleares en 2025 o prohibir todos los vehículos no eléctricos en 2028.

El Gobierno debe enviar a la Comisión Europea la propuesta de España antes de final de año y las ONG consideran necesario un proceso de participación y recuerdan que el último informe del Panel de Cambio Climático (IPCC) señala que un aumento de más de 1,5 grados centígrados de la temperatura global tendría unas consecuencias irreparables para España, por lo que las 5 ONG consideran «necesario» un esfuerzo «sin precedentes» en la lucha contra el cambio climático. Así, la propuesta que sugieren al Gobierno pasa por que se fije 2040 como un año de emisiones netas cero mediante una planificación coherente que cada 5 años plantee objetivos obligatoriamente más ambiciosos.

Además, señala que se deben reducir las emisiones un 7% anual porque aplazar la acción climática es «una temeridad» que obligará a «mayores esfuerzos» a medio plazo. También aconsejan al Gobierno que se comprometa a lograr el 100% de la demanda de energía final total con energías renovables acorde con alcanzar emisiones netas 0 en 2040 y a acelerar la transición a un sistema eléctrico 100% renovable en 2030 e insta a cerrar el parque de generación con carbón y con energía nuclear en 2025.

Asimismo, pide que se acuerde un compromiso de reducción progresiva de la demanda energética compatible con los objetivos de reducción de emisiones anteriores e impulsar una «transformación radical» del transporte, que pase por el fin de la venta de automóviles de gasolina y diésel, incluidos los híbridos convencionales, para 2028, lo que significa que todos los automóviles nuevos deben ser eléctricos después de esta fecha.

Las ONG recomiendan también un conjunto de medidas y políticas para reducir las emisiones de gases efecto invernadero, sobre todo en los sectores de la energía y transporte y en cuestiones transversales, además de identificar la necesidad de que el PNEC aborde las emisiones de otros sectores, como la agricultura, la gestión forestal, los residuos, la industria y la edificación. Finalmente, insisten en que este conjunto de medidas deberá suponer un cambio «sin precedentes» en todos los aspectos sociales, culturales y económicos y advierten de que esto supondrá a corto, medio y largo plazo «transformaciones imprescindibles» para garantizar el futuro.

Muertes por contaminación del aire

Por otro lado, la Organización Mundial de la Salud (OMS) advierte, con motivo de la celebración de la primera Conferencia Mundial sobre Contaminación del Aire y Salud, de que el 90% de la población respira aire contaminado y que, por esta causa, cada año mueren 7 millones de personas, ya que tiene un efecto «equivalente» al de fumar tabaco. «De la contaminación del aire es difícil escapar, porque no importa qué rica sea el área en la que se viva, ya que está a nuestro alrededor. Los contaminantes microscópicos en el aire pueden deslizarse más allá de las defensas de nuestro cuerpo, penetrando profundamente en nuestro sistema respiratorio y circulatorio y dañando nuestros pulmones, corazón y cerebro», alerta la OMS.

Por este motivo, el organismo de Naciones Unidas presentó la Plataforma Global sobre Calidad del Aire y Salud, la cual está trabajando en técnicas para detectar con mayor precisión la contaminación del aire proveniente de diferentes fuentes de contaminación. Además, está trabajando para mejorar las estimaciones de la calidad del aire mediante la combinación de datos de varias redes de monitoreo de la calidad del aire, el modelado atmosférico y la detección remota por satélite.

Hay dos tipos principales de contaminación del aire: la contaminación del aire ambiente y la contaminación del aire en los hogares, la cual se refiere a la contaminación generada por la combustión de combustibles en los hogares (como carbón, madera o queroseno) que utilizan estufas básicas en espacios poco ventilados. En este sentido, según datos de la OMS, la contaminación del aire en los hogares mata a 4 millones de personas al año y tiende a afectar a África y Asia, donde se utilizan combustibles y tecnologías contaminantes para cocinar, calentar e iluminar. La población más afectada son las mujeres y los niños porque suelen pasar más tiempo en casa.

La quema de combustibles fósiles

Concretamente, los principales contaminantes son las partículas, una mezcla de gotitas sólidas y líquidas que surgen principalmente de la combustión de combustible y el tráfico rodado; el dióxido de nitrógeno, del tráfico o de las cocinas de gas en interiores; el dióxido de azufre por la quema de combustibles fósiles; y el ozono a nivel del suelo, causado por la reacción de la luz solar con contaminantes de las emisiones.

Y es que, mientras que las partículas con un diámetro de 10 micrones o menos pueden penetrar y alojarse profundamente dentro de los pulmones, las partículas aún más dañinas para la salud son aquellas con un diámetro de unos 2,5 micrones, partículas que son tan pequeñas que se necesitarían 60 para alcanzar el ancho de un pelo. Todas pueden aumentar el riesgo de patologías cardiacas, respiratorias o cáncer de pulmón.

Además de afectar la salud, los contaminantes en el aire también están causando daños ambientales a largo plazo al impulsar el cambio climático, que en sí constituye una gran amenaza para la salud. Por todo ello, la OMS y sus socios, como ONU Medio Ambiente, están apoyando a los países de diferentes formas. Por ejemplo, la OMS está desarrollando un conjunto de herramientas (el Conjunto de herramientas de soluciones de energía doméstica limpia, CHEST) para ayudar a implementar las recomendaciones sobre la combustión de combustible en los hogares y para desarrollar políticas para expandir el uso de energía doméstica limpia.

«La contaminación del aire está atrofiando los cerebros de nuestros niños, afectando a su salud más de lo que sospechábamos. Pero hay muchas formas sencillas de reducir las emisiones de contaminantes peligrosos. La OMS está apoyando la implementación de medidas de política de salud, promoviendo el uso de transporte más limpio. Estamos preparando el terreno para la generación de energía de baja emisión, tecnologías industriales más seguras y una mejor gestión de residuos municipales», ha zanjado la directora del departamento de Salud Pública, Determinantes Ambientales y Sociales de la Salud de la OMS, Maria Neira.

Ecologistas en Acción denuncia la contaminación por ozono que deriva del transporte y de las centrales térmicas

Europa Press.- Cerca de 38 millones de españoles respiraron aire contaminado por ozono durante la primavera y el verano en España, lo que supone el 81% de la población, y el 87% del territorio estuvo expuesto a niveles superiores a los recomendados por la Organización Mundial de la Salud (OMS).

Sin embargo, según las recomendaciones españolas la cifra se reduce hasta el 30% de los ciudadanos (27,6%), según el Informe La contaminación por ozono en el Estado español durante 2017 de Ecologistas en Acción, que destaca que esto supone uno de cada cuatro españoles (12,8 millones de personas) y que las comunidades autónomas con peor situación son Andalucía, Extremadura, Comunidad de Madrid, Murcia y Baleares.

Según el valor fijado por la Directiva 2008/50/CE y el Decreto 102/2011, las cifras de 2017 apuntan a un aumento de 2 y 3 millones de personas afectadas respecto a las evaluaciones de 2016 y 2015, y de 6 millones de personas más que las evaluaciones de 2013 y 2014. Es decir, que uno de cada cuatro españoles respira un aire que incumple el estándar legal vigente para el ozono.

Además, la ONG denuncia que solo 5 de 12 comunidades autónomas han elaborado sus preceptivos Planes de Mejora de Calidad del Aire, de modo que las 12 restantes siguen sin contar con estos planes obligatorios. Se trata de Andalucía, Aragón, Baleares, Castilla-La Mancha, Castilla y León, Cataluña, País Valenciano, Extremadura, Comunidad de Madrid, Región de Murcia, Navarra y País Vasco.

Estos planes son obligatorios cuando se superan los valores objetivo para la protección de la salud y/o la vegetación y, precisamente, la negativa de estas 12 comunidades a elaborarlos motivó que en 2016 se presentara una denuncia contra el Reino de España ante la Comisión Europea, aunque esta queja se archivó en agosto de 2017 porque «el cumplimiento de los valores objetivo establecido para el ozono resulta complejo«. En este contexto, señala que el coste sanitario que se deriva de la contaminación por ozono troposférico supuso unos 5.000 millones de euros en 2013, un 0,33% del Producto Interior Bruto (PIB) español, según el Banco Mundial.

Sin embargo, la ONG critica que pese a la vulneración de los límites legales, el Gobierno ha «aparcado sin fecha» el Plan Nacional de Ozono Troposférico y ha limitado las actuaciones previstas en cuanto a estudios científicos y la mejora de su medición. Entre las principales causas de este repunte, Ecologistas en Acción responsabiliza al aumento del tráfico, el fraude en las emisiones de los automóviles y la apuesta del Gobierno «por las energías sucias en detrimento de las renovables».

Sobre este contaminante, la ONG explica que se forma en la baja atmósfera por la combinación de otros contaminantes denominados precursores, emitidos por el tráfico rodado (vehículos diésel), las grandes centrales termoeléctricas y determinadas actividades industriales. Se trata por lo tanto de un contaminante secundario que afecta durante la primavera y el verano especialmente a las áreas suburbanas y rurales influenciadas por la contaminación urbana e industrial. Además, señala que la evolución reciente de la contaminación está relacionada con la tendencia al incremento en verano de las temperaturas medias y de las olas de calor, como resultado del cambio climático.

Por ello, considera que la contaminación por ozono debería abordarse como un problema sanitario de primer orden y recuerda que las últimas estimaciones de la Agencia Europea de Medio Ambiente, en 2014 se registraron 1.600 muertes prematuras en España por exposición a niveles de contaminación por ozono como los registrados en la mayor parte del territorio durante 2017. De estos, los más afectados son niños, mayores, embarazadas y personas con enfermedades respiratorias y cardiovasculares crónicas.

Finalmente, la ONG recomienda como principales vías de actuación la disminución del tráfico motorizados, la reducción de la necesidad de movilidad y potenciar el transporte público, así como facilitar el tránsito peatonal, el uso de la bicicleta en las ciudades o sustituir los disolventes orgánicos por agua y reducir de forma drástica la generación eléctrica en centrales térmicas, en particular las que utilizan carbón, o limitar las emisiones contaminantes de los barcos en el caso de puertos con importante tránsito.

El 95% de los españoles respira aire contaminado según Ecologistas en Acción

Europa Press.- Más de 44,7 millones de españoles respiraron aire contaminado durante 2014. La cifra representa el 95% de la población total según el informe de Contaminación del Aire de Ecologistas en Acción, que añade que el 94% del territorio se expuso el año pasado a niveles de contaminación superiores a los que recomienda la Organización Mundial de la Salud (OMS). Según el estudio, un total de 474.000 kilómetros cuadrados soportan una contaminación que daña los bosques y cultivos y la causa principal en las áreas metropolitanas es el tráfico.

El informe de Ecologistas en Acción recuerda que, según las últimas estimaciones de la Comisión Europea, cada año mueren en España 27.000 personas de forma prematura por afecciones derivadas de la contaminación del aire. Respecto a los costes sanitarios que se derivan de este problema, la OMS apuntó en un reciente estudio que representan entre el 2,8% y el 4,6% por ciento del PIB de España, es decir, unos 46.000 millones de euros. Esto incluye los daños provocados sobre los cultivos y los ecosistemas naturales, que también implican costes económicos.

En este ámbito, recuerda que la Comisión Europea inició en enero de 2009 un procedimiento de infracción contra España por el incumplimiento de la normativa sobre partículas PM10 que está a punto de llegar al Tribunal de Justicia Europeo. Recientemente la Comisión abrióun nuevo expediente a España por los niveles de dióxido de nitrógeno. Ecologistas en Acción además de alertar por los resultados del informe, denuncia que la información a los ciudadanos por parte de las administraciones públicas no es ni adecuada ni ajustada a la gravedad del problema.

En este sentido, recuerda la obligatoriedad de cumplir los Planes de Mejora de la Calidad del Aire, que competen a las comunidades autónomas y a los ayuntamientos. Sin embargo, advierte de que en muchos casos «no existen» y los existentes son «inefectivos en la mayoría de los casos por falta de voluntad política». Finalmente, la organización subraya que las vías «principales» para reducir la contaminación del aire son: disminuir el tráfico motorizado, reducir la necesidad de movilidad y potenciar del transporte público. Por ello, insiste en que deben adoptarse mejores técnicas industriales disponibles y la reducción drástica de la generación eléctrica por centrales térmicas, en particular las que utilizan carbón.

El estudio anual de Ecologistas en Acción analiza los datos de 700 estaciones de medición oficiales instaladas en todo el país y presenta datos sobre la calidad del aire, por comunidades autónomas y por sustancias contaminantes. En concreto, el informe toma como referencia los valores máximos de contaminación recomendados por la OMS; el objetivo a largo plazo para la protección de la vegetación establecido por la Unión Europea; y los valores límite de obligado cumplimiento establecidos por la normativa de Unión Europea, más laxos que los recomendados por la OMS.

Así, según los dos primeros parámetros, en 2014, al menos 44,7 millones de españoles respiraron aire contaminado, lo que supone el 95% de su población en el 94% de su territorio. Sin embargo, si se tiene en cuenta los valores límite establecidos por la Unión Europea, la población que respiró aire contaminado es de 15,5 millones de personas: En total, una de cada tres personas respiró aire que superaba los límites que establece la ley. Con este parámetro la superficie expuesta a unos niveles de contaminación que dañan la vegetación alcanza 263.000 km2, más de la mitad del Estado español.

Por causas, la principal fuente de contaminación es el tráfico rodado y los contaminantes que provocan más problemas de salud son las partículas en suspensión (PM10 y PM2,5), el dióxido de nitrógeno (NO2), el ozono troposférico (O3) y el dióxido de azufre (SO2). Además, las partículas son el contaminante que más incrementó su incidencia a lo largo del 2014 mientras que el dióxido de nitrógeno y el azufre declinaron ligeramente. Ecologistas en Acción expresó su preocupación por los elevados niveles de benzoapireno, que es un contaminante cancerígeno. Para la valoración del porcentaje de población que respira aire contaminado se tuvieron en cuenta todos estos contaminantes.

Asimismo, el informe indica que el ozono troposférico es el contaminante que tiene una mayor extensión y que más afecta a la población, con unos niveles que se mantienen estacionarios o incluso al alza. Esto se debe al incremento de las temperaturas medias y de las situaciones meteorológicas extremas (olas de calor) durante el verano, como resultado del cambio climático. Durante el año 2014, se redujeron los niveles de ozono «ligeramente» respecto al año anterior, pero a pesar de esto, la «práctica totalidad» de la población y de las formaciones vegetales españolas respiraron aire con concentraciones de ozono peligrosas para la salud humana y vegetal.

Por su parte, las partículas (PM10 y PM2,5), el dióxido de nitrógeno (NO2) y el dióxido de azufre (SO2) afectan a más de dos terceras partes de la población aunque con una tendencia a la baja de los dos últimos contaminantes. Para la ONG, esta reducción se debe «fundamentalmente» a la crisis económica, que provocó una reducción forzada de la movilidad y la disminución de la actividad industrial. Contribuyó también la evolución del parque móvil hacia vehículos más pequeños y eficientes y a la sustitución de electricidad en centrales térmicas por energía eólica y solar. «La reducción de contaminantes se debe a la coyuntura en exclusiva», apunta el informe presentado.