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López de Uralde (Podemos/Equo): «Es indecente que Maroto diga que está en contra de Garoña»

EFE.- El cabeza de lista de Podemos al Congreso por Álava, Juantxo López de Uralde, calificó como «indecente» que el actual vicesecretario sectorial del PP y exalcalde de Vitoria, Javier Maroto, diga que está en contra de la reapertura de la central nuclear de Garoña (Burgos).

En una comparecencia de prensa, López de Uralde criticó que el exalcalde de Vitoria reiterara su rechazo «contundente» a reabrir la central nuclear burgalesa cuando es el PP el que está «dando pasos decisivos para ponerla en marcha otra vez, después de tres años de cierre«. El coportavoz de Equo emplazó a Maroto a ir a Génova, a la sede del PP en Madrid, a defender la clausura definitiva de esta central y le ha pedido que, cuando consiga cambiar la posición de su partido, venga a Vitoria para decirlo.

El Parlamento Vasco arremete contra el PP por su actitud ante Garoña mientras Maroto insiste en su clausura

Europa Press / EFE.- El exalcalde de Vitoria, Javier Maroto, mantiene su oposición a Garoña desde su nueva responsabilidad nacional como vicesecretario sectorial del PP pero sus compañeros de partido no quisieron participar en las críticas al Gobierno central presentes en el rechazo emitido por el Parlamento Vasco, con el apoyo del PNV, EH Bildu y PSOE, a la reapertura de la planta y a la creación de un ATI, almacén temporal individualizado de residuos nucleares.

El PNV, EH Bildu y el PSOE reprocharon la actitud del PP del País Vasco, al que acusaron de ponerse «de perfil» en este debate, frente a la «apuesta» del gabinete de Mariano Rajoy y de la dirección nacional del Partido Popular por «reabrir» esta central, inaugurada en 1970 y que lleva varios años cerrada. El PP aseguró, en el pleno del Parlamento Vasco, que «rechaza» la reapertura de la central nuclear, aunque afirma que «no hay nada que denunciar del Gobierno de España por lo que ejerce en derecho y fruto de sus competencias».

Estas formaciones expresaron su oposición a la decisión del Gobierno central de emitir una declaración de impacto ambiental favorable al proyecto para crear un almacén temporal de residuos nucleares en Garoña. También censuraron la decisión del Consejo de Seguridad Nuclear (CSN), en el que han destacado que el PP tiene mayoría, de dar el visto bueno a varias mejoras en la central, al interpretar que esta decisión puede abrir la puerta al reinicio de la actividad nuclear de la planta.

La resolución, acordada por EH Bildu, PNV y PSOE, consta de 5 artículos. El PP se había mostrado dispuesto a apoyar 4 de ellos, aunque ha rechazado respaldar el apartado en el que la Cámara «denuncia la falta de información del Gobierno de España hacia las instituciones vascas» respecto al futuro de Garoña. Los grupos proponentes han pedido que la iniciativa se votara conjuntamente, por lo que finalmente el PP ha votado en contra. El texto ha salido adelante con el voto a favor de EH Bildu, PNV y PSOE, y la abstención de UPyD.

A través de esta resolución, el Parlamento insta al Gobierno vasco a que recurra la declaración de impacto ambiental favorable al proyecto de un ATI en Garoña. También pide al Ejecutivo central que no autorice una nueva licencia para reabrir la central. Asimismo, solicita a la Comisión Europea que supervise el procedimiento para la concesión de una eventual licencia de apertura para que, en todo caso, «se asegure el cumplimiento de las exigencias de seguridad«. Además, el Parlamento muestra su intención de sumarse a la comisión interinstitucional que las Juntas Generales de Álava esperan crear en torno a este tema.

El parlamentario de EH Bildu Igor López de Munain, que había presentado la iniciativa original que suscitó el debate, reprochó al PP de Euskadi y de Álava que «se pliegue a los intereses» de la dirección nacional del Partido Popular respecto a Garoña. Por parte del PNV, Juan Carlos Ramírez-Escudero advirtió de la posibilidad de que el Gobierno central facilite la reapertura de la planta «incluso antes de las elecciones». Además, denunció que la reapertura de la planta pondría «en peligro» a los ciudadanos del entorno. Natalia Rojo, del PSOE, reclamó a los populares vascos que si realmente están en contra de que Garoña vuelva a abrir, «convenzan» al Gobierno y a su propio partido para cerrar definitivamente esa central.

Por parte del PP, Carmelo Barrio, calificó de «injusta» la actitud del PNV, EH Bildu y el PSOE respecto a su partido, y les ha reprochado que utilicen este tema para el «el politiqueo». «No hay nada que denunciar del Gobierno de España por lo que ejerce en derecho y fruto de sus competencias», ha manifestado. El parlamentario de UPyD, Gorka Maneiro, ha criticado la «hipocresía» de quienes pretenden «vender la idea de que las fuentes de energía renovable son una alternativa a la energía nuclear». Además, ha afirmado que si se cumplen todos los requisitos de seguridad, no debería haber impedimento para reabrir Garoña.

Maroto (PP) reitera su rechazo

Por su parte, el vicesecretario sectorial del PP y exalcalde de Vitoria, Javier Maroto, reiteró su rechazo «contundente» a la posible reapertura de la central nuclear de Garoña (Burgos). Ha recordado que su postura «es la misma» que mantuvo en el ejercicio de sus diferentes cargos políticos «como concejal en la oposición del Ayuntamiento», además de «como alcalde, parlamentario, y como actual vicesecretario sectorial en la dirección del partido«. Maroto insistió en que en esta cuestión no puede «ser más claro y más contundente». Estas declaraciones se producen después de que en octubre el BOE publicara el estudio de impacto ambiental favorable a la creación de un ATI en Garoña.

El CSN da el visto bueno a mejoras necesarias para la reapertura de Garoña con el voto discrepante de Narbona

Europa Press.- El Pleno del Consejo de Seguridad Nuclear aprobó, por cuatro votos a favor y uno en contra, un informe favorable de la Dirección Técnica de Seguridad Nuclear sobre la revisión de las Especificaciones Técnicas de Funcionamiento de la actualización de las curvas límite de presión y temperatura de la vasija del reactor de la central nuclear de Santa María de Garoña (Burgos).

En la cuestión no ha habido unanimidad en el pleno, donde la consejera Cristina Narbona ha votado en contra porque la iniciativa va dirigida a la vuelta en operación del reactor de Burgos sin que el regulador atómico haya aclarado ni debatido de manera técnica y jurídica las «implicaciones» de la solicitud del titular, Nuclenor, de renovar su licencia hasta 2031, un periodo superior al de las Revisiones Periódicas de Seguridad, que se realizan cada 10 años, normalmente coincidiendo con las peticiones de renovar los permisos.

Según el pleno, el informe responde a los requisitos del CSN exigidos a Nuclenor en la Instrucción Técnica Complementaria sobre la documentación y los requisitos adicionales previos a discutir la solicitud de renovación de la central atómica burgalesa.

La actualización de las curvas de presión-temperatura (P-T) son calculadas para 40, 50 y 60 de operación correspondientes a los escenarios de arranque y parada en operación normal y de prueba hidráulica, así como para las condiciones de núcleo crítico. También se entiende que la vasija está en condiciones de vacío y se ha analizado la adecuación de las curvas de P-T a esta situación. Esta revisión sería aplicable «solo en el caso» de que el titular lograse una renovación de la autorización de su explotación.

Durante el pleno se ha puesto en evidencia las diferencias sobre la cuestión de Garoña, ya que además del voto en contra y voto particular presentado por la consejera Narbona, tanto el presidente, Fernando Martí, como el consejero Fernando Castelló Boronat, han adjuntado al acta del pleno del día 4 de noviembre sus respectivos votos particulares, a favor de la decisión y en contra de la postura de Narbona.

Así, en su voto particular, Narbona se reitera en el contenido de su voto particular emitido en julio de 2014 en el que discrepa de la decisión del pleno porque es «la primera vez en la historia» en España en que un titular de una central solicita renovar su autorización de explotación por más de 10 años y esto «implica la disociación automática» de las Revisiones Periódicas de Seguridad del tiempo de duración de las renovaciones de las autorizaciones de explotación. A su juicio, esto rompe «una buena práctica reconocida internacionalmente y asumida por el CSN desde la década de los años 90».

Además, afirma que también es la primera vez en la historia de la seguridad nuclear española que un titular ha solicitado operar un reactor nuclear hasta los 60 años de explotación comercial y esto supone un incremento de los residuos nucleares.

«La calidad de los procesos de regulación son inherentes y consustanciales a las garantías de seguridad», considera Narbona que no identifica el objetivo general de la mejora de la seguridad nuclear y radiológica en el «inédito» proceso de renovación que sigue el regulador sobre Garoña, ya que se ha iniciado la evaluación para su renovación sin que el Pleno haya aclarado aún si puede o no aceptar tal «anómala solicitud de Nuclenor».

Por ello, reitera su petición de que el pleno delibere y decida «cuanto antes» respecto a la vigencia de la práctica de asociar las revisiones periódicas de seguridad con el periodo de autorización de explotación. A este respecto, estima que si el pleno decide cambiar esta práctica tendría que explicar las mejoras técnicas y jurídicas que introduciría tal disociación en la seguridad nuclear y radiológica y, también, las implicaciones de operar un reactor a 60 años. «Hasta que esto no se produzca, esta consejera considera inadecuado proseguir con el proceso de evaluación de la central», concluye Narbona.

Del mismo modo, el presidente del CSN ha presentado su voto particular para justificar su voto favorable en el que el expediente votado está incardinado en el cumplimiento de los propios acuerdos del pleno del regulador atómico en julio de 2014 en el que se establecían una serie de requisitos a Garoña, como condición previa a estudiar su solicitud de renovación.

En su opinión y respecto al voto en contra de Narbona, Marti Scharfhausen argumenta que la reiteración de argumentos, opiniones y juicios de valor no introduce elemento novedoso alguno para la seguridad nuclear. «Considero que dicha reiteración sí menoscaba la credibilidad de este organismo regulador, cuya misión no es otra que garantizar la seguridad nuclear», concluye el presidente.

Asimismo, estima que se repiten conceptos separados como asociar o identificar los periodos de tiempo de la revisión periódica de seguridad para analizar tendencias e incorporar lecciones, con el nuevo tiempo por el que se solicita o se revisa las condiciones de las seguridad para la operación a largo plazo, siempre a futuro.

Por su parte, el consejero Castelló Boronat es más exhaustivo en su explicación de voto y sus opiniones respecto a su compañera Narbona. En concreto, recuerda que el argumento de Narbona sobre la necesidad previa de un debate técnico y jurídico sobre la propia solicitud de Nuclenor «en su momento sólo contó con un solo voto» y que el pleno adopta las decisiones por mayoría.

A su juicio, la existencia o no de un debate amplio sobre un proceso regulatorio, no puede ni debe predeterminar el voto concreto sobre un asunto que técnicamente está «perfectamente soportado y argumentado» por el cuerpo técnico.

De este modo, opina que la reiteración de los argumentos ya expuestos y conocidos por Cristina Narbona en su momento, «fundamentados en el error conceptual» de confundir los mecanismos de evaluación» de una revisión periódica de seguridad sobre los diez años pasados, con los de la evaluación para la continuidad de Garoña en el futuro «no pueden utilizarse de forma reiterada, en contra de la amplia mayoría de los miembros del Pleno, ya que pueden confundir a la opinión pública y menoscabar la credibilidad del regulador nuclear.

Castelló califica de «extemporáneo» plantear este tipo de cuestiones que no son objeto de lo que se está analizando en el pleno y que, de hecho, ya han sido objeto de análisis por parte del mismo o que lo serán en su momento.

En definitiva, el consejero estima que la «buena» práctica regulatoria es «respetar los procedimiento y los tiempos» que conllevan los trámites y las evaluaciones técnicas y «ceñirse» a las cuestiones que son «realmente» la competencia del organismo y «no introducir elementos de debate ajenos y sesgados por debates políticos o circunstanciales».

Del mismo modo, critica la «predisposición para disturbar la toma de decisión» sobre la cuestión introduciendo elementos de análisis del proceso regulador.

En ese sentido, advierte de que la «previa disposición de «alguno» de los consejeros a emitir su voto sobre un asunto concreto, en función de un posicionamiento general y amplio en el que se pueda encontrar dicho asunto, «puede interpretarse como estrategia política estrictamente como un debate regulatorio sobre una propuesta técnica.

«La existencia o no de un debate amplio sobre un proceso regulatorio no puede ni debe predeterminar el voto concreto sobre un asunto, que técnicamente está perfectamente soportado y argumentado por el cuerpo técnico», manifiesta el consejero.

Finalmente, insiste en que en su opinión, «no parece oportuno ni conveniente que se aproveche cada ocasión que se incluye en el orden del día un asunto relativo a una instalación determinada, en este caso Santa María de Garoña».

La Diputación de Álava estudia recurrir la declaración ambiental favorable al ATI de Garoña

Europa Press.- La Diputación Foral de Álava está estudiando la posibilidad de recurrir la Declaración de Impacto Ambiental favorable emitida por el Gobierno central para la apertura de un almacén temporal individualizado de residuos nucleares en Garoña, en Burgos, aunque en una zona muy próxima al territorio alavés.

El diputado general de Álava, Ramiro González, aseguró que agotará «todas las vías» para evitar la reapertura de la central nuclear de Santa María de Garoña. González se refirió así a la Declaración de Impacto Ambiental «favorable» del Gobierno central al proyecto para construir un almacén temporal de residuos nucleares en Garoña, así como a las informaciones que apuntan a un inminente reinicio de la actividad nuclear de la central.

El diputado general encargó un informe a los servicios jurídicos del Gobierno foral en torno a la posibilidad de recurrir la declaración de impacto ambiental sobre el almacén de residuos nucleares. El recurso, según explicó, se basaría en que de acuerdo al «interés legítimo» reconocido por los tribunales de justicia al territorio de Álava en las cuestiones que afectan a la central de Garoña, las instituciones alaveses «tenían que haber sido tenidas en cuenta como parte interesada a la hora de aprobar» la citada declaración de impacto ambiental. En función del resultado del informe, el Ejecutivo foral adoptará la «correspondiente decisión». De todas formas, ha reafirmado su compromiso con tratar de evitar el reinicio de la actividad nuclear de Garoña.

EH Bildu exige al Gobierno vasco que lidere una comisión para el desmantelamiento de la central nuclear de Garoña

EFE / Europa Press.- EH Bildu criticó una posible reapertura de la central nuclear de Santa María de Garoña y aseguró que es la  «herencia» para Álava del ministro de Sanidad y presidente del PP vasco, Alfonso Alonso, y el vicesecretario de Acción Sectorial del PP, Javier Maroto. Por ello exigió al Gobierno vasco y a la Diputación de Álava que «tomen cartas en este asunto y comiencen a trabajar» con la constitución de una comisión interinstitucional para el seguimiento del desmantelamiento de la central.

En este sentido, la parlamentaria de EH Bildu, Belén Arrondo, y el cabeza de lista de EH Bildu al Congreso por Álava, Iker Urbina, criticaron la decisión del Gobierno central de emitir una Declaración de Impacto Ambiental «favorable» al proyecto para construir un almacén temporal individualizado (ATI) de residuos nucleares en Garoña, a 40 kilómetros de Vitoria, así como advirtieron de las informaciones que apuntan a un inminente reinicio de la actividad de la central nuclear. La coalición asevera que «Garoña, de la mano del PP, vuelve a amenazar la seguridad de todas las personas». «El Gobierno ha activado la maquinaria para volver a poner en marcha la central nuclear más obsoleta del Estado», insistieron.

Asimismo, acusaron al ministro Alonso de «mentir» cuando afirma que la decisión de reabrir o no Garoña es una decisión técnica, y aseguraron que «la decisión de poner de nuevo en marcha la central más vieja del Estado español es política», en referencia a la mayoría de miembros del PP en el pleno del Consejo de Seguridad Nuclear (CSN), organismo del que depende la decisión definitiva sobre la apertura. «El PP de Alfonso Alonso y Maroto cumple así con su promesa electoral, en Burgos eso sí, de volver a abrir Garoña. ¿Qué dice Alfonso Alonso a esto? ¿Es ese su tecnicismo? ¿O están pagando favores y hablamos de clientelismo?», criticaron.

Ante esta situación, la coalición ha exigido a las instituciones, al Gobierno vasco y a la Diputación Foral de Álava, ambas gobernadas por el PNV aunque en la entidad foral en coalición con los socialistas, que constituyan, «inmediatamente» una comisión interinstitucional para el seguimiento del desmantelamiento de Garoña. «Dada la gravedad de la amenaza, exigimos que esta comisión eche a andar antes de navidad«, apuntaron. Para EH Bildu, en esta comisión es «indispensable» que participen todas las entidades locales de la provincia, desde los Concejos hasta los Ayuntamientos y Cuadrillas, pero también deben tener cabida los colectivos sociales y medioambientales así como sindicales y económicos.

Los socialistas piden más claridad

Por su parte, la secretaria general del PSOE en el País Vasco, Idoia Mendia, emplazó a Alonso y a Maroto a aclarar con «rotundidad» cuál es su postura en relación a la nuclear de Garoña y se mostró muy preocupada ante la posibilidad de que esta central se reabra o se utilice como almacén de residuos nucleares. Por ello, dejó claro que los socialistas están en contra de que Garoña retome su actividad y pidió al PP de Álava que se exprese «con la misma claridad y rotundidad». En concreto, se dirigió a Alonso y a Maroto para que «no se escuden en informes» y manifiesten «con claridad qué es lo que proponen para Garoña».

El PSOE denuncia el «silencio» del PP vasco ante la posibilidad de reabrir Garoña

EFE.- El PSOE acusó al PP de no defender los intereses del País Vasco, en especial de la mayoría social alavesa, y censuró el «total silencio» de los populares vascos ante las «maniobras» del Gobierno central de Mariano Rajoy para reabrir la central nuclear de Garoña (Burgos).

El candidato socialista de Álava al Congreso de los Diputados, Javier Lasarte, criticó que el ministro de Sanidad y presidente del PP vasco, Alfonso Alonso, haya asegurado que la decisión definitiva sobre la creación de un almacén de residuos en Garoña depende del Consejo de Seguridad Nuclear (CSN). En su opinión tal afirmación es «una trampa» y un «intento de engaño» a la ciudadanía porque, según indicó, es «público» que el Ejecutivo ha «cambiado a los miembros del CSN para asegurar una mayoría» y lograr «su objetivo» de reabrir Garoña.

Lasarte mostró su malestar con la actitud de otros dirigentes del PP como el exalcalde de Vitoria, Javier Maroto, y el anterior diputado general alavés, Javier de Andrés, a los que ha acusado de no haber defendido los intereses de los alaveses ante el gobierno central ni de haber presionado políticamente para evitar la posible reapertura de esta central. El candidato socialista recordó las acciones llevadas a cabo por su partido en diversas instituciones para evitar que vuelva a funcionar esta central y aseguró que son el «único partido que ha demostrado con hechos» que apuesta porque Garoña siga cerrada.

El Gobierno vasco cree que debería haber sido consultado sobre el ATI de Garoña mientras Alfonso Alonso apela al CSN

Europa Press / EFE.- Después de que el ministro de Sanidad y presidente del PP vasco, Alfonso Alonso, eludiera pronunciarse sobre este asunto, la consejera de Medio Ambiente del País Vasco, Ana Oregi, indicó que el Gobierno vasco debería haber sido consultado y haber tenido «voz» en la posible construcción de un almacén temporal individualizado (ATI) de residuos nucleares en la central nuclear de Garoña (Burgos), y anunció que exigirá al Ejecutivo central la documentación al respecto para «evaluar el alcance de las acciones».

La Secretaría de Estado de Medio Ambiente emitió el pasado mes de octubre una Declaración de Impacto Ambiental «favorable» al proyecto del almacén temporal individualizado (ATI) de residuos nucleares en la central nuclear de Garoña por un periodo inferior a 10 años, un trámite que fue interpretado por los movimientos ecologistas como un paso hacia la reapertura de la central burgalesa. Al respecto, Oregi aseguró que el Gobierno vasco exigirá la documentación «para tener la ocasión de estudiarla y evaluarla». También recordó que «una y otra vez» el Gobierno vasco manifestó su posición a favor del cierre de Garoña «de una manera definitiva y sin ningún otro tipo de consideración al respecto más allá de su cierre inmediato y total».

País Vasco exige tener «voz»

Según explicó, «parece ser» que el Gobierno central «ha llevado a cabo una serie de procedimientos» en los que no ha consultado «ni al Gobierno vasco ni a la Diputación foral de Álava» porque, en su opinión, «ha entendido que, al estar fuera de Euskadi, las cuestiones que plantea no tienen afección» en la comunidad autónoma vasca. «Obviamente, no estamos de acuerdo con esa consideración, respetamos las decisiones del órgano ambiental actuante, pero, dadas las circunstancias y la ubicación de la central, a unos 40 kilómetros de Vitoria y próxima a Álava, Euskadi debería de haber tenido conocimiento y voz dentro de los procedimientos administrativos previos, como territorio limítrofe y que, además, puede verse afectado por las actividades evaluados», señaló.

Alonso (PP) no quiere «interferir»

Por su parte, el ministro de Sanidad, Alfonso Alonso, ha eludido pronunciarse en torno a la instalación del ATI en Garoña para no crear «interferencias políticas» en el Consejo de Seguridad Nuclear (CSN). El también presidente del PP del País Vasco, formación que votó en el Parlamento vasco en contra de la reapertura de Garoña, indicó que la decisión definitiva corresponde al CSN. «Son los que saben; y nosotros no hacemos interferencias políticas en esas decisiones, que deben tener el máximo aval técnico y garantizar de manera absoluta la seguridad», aseguró Alonso, que confía en que «ese sea el criterio que definitivamente pese, y que las decisiones se tomen sobre esa base de la seguridad y la gestión más correcta».

«Rajoy dejará solucionada la reapertura»

Desde las filas del PNV, el diputado general de Álava, Ramiro González, aseguró que tiene «la sensación» de que el Gobierno de Rajoy dejará la cuestión relativa a la central nuclear de Garoña «solucionada» antes de las elecciones, ante la eventualidad de que un nuevo ejecutivo pudiera impedir la reapertura. En su opinión, los «movimientos» que el Gobierno central ejecutó en los últimos días en relación con Garoña «conducen a pensar» que existe «una alta probabilidad» de que la central nuclear burgalesa vuelva a abrir. El diputado general recalcó que son movimientos que se producen «a 4 días del final de la legislatura» por lo que «da la sensación de que quieren garantizar la reapertura«.

González se refirió a las dos cartas que la Diputación alavesa ha enviado a los ministerios de Industria y de Medio Ambiente. En ambas cartas muestra su «total oposición» hacia un proyecto que se ha decidido «sin consultar» a este territorio, lo que a su juicio prueba que Álava se ve «sistemáticamente ninguneada» por el Gobierno de Rajoy. Para González, el territorio alavés sería el «más afectado» por la reapertura de la central, ya que «los riesgos no conocen fronteras».

El diputado general criticó la actitud del ministro de Sanidad, Alfonso Alonso, en este asunto, y aseguró que en su lugar «se le caería la cara de vergüenza» al comprobar cómo el Consejo de Ministros toma decisiones «en contra de Álava y de la opinión de sus propios compañeros de partido en territorio alavés». En su opinión las decisiones del Gobierno central sobre Garoña prueban que el PP de Álava «no pinta nada para Rajoy».

Bildu pide el amparo comunitario

Mientras tanto, EH Bildu presentó tres preguntas parlamentarias ante la Comisión Europea para saber si está al tanto de que el Gobierno español «pretende reabrir» la central nuclear de Garoña, y si es consciente «de los riesgos que conllevaría«. En su iniciativa, el europarlamentario de EH Bildu Josu Juaristi recuerda que esta instalación fue diseñada para 40 años, pero tras las modificaciones requeridas por el Consejo de Seguridad Nuclear (CSN) para su vuelta a la actividad, entre las que se encuentra la verificación del estado funcional y de la integridad estructural de la vasija del reactor y de sus componentes, «Garoña podría estar en funcionamiento un total de 61 años».

Juaristi alerta de que actualmente sólo falta el dictamen del CSN, que se espera para los próximos meses, para que la central vuelva a ponerse en funcionamiento. Advierte de su «antigüedad, falta de inversiones, junto a las denuncias de irregularidades acumuladas sobre la misma» y pone de relieve que las instituciones de Álava se han pronunciado con claridad a favor del cierre y desmantelamiento de Garoña. Recalca, en este sentido que Álava tampoco quiere un cementerio nuclear a escasos kilómetros de la central, «ya sea de forma temporal o definitiva».

Iberdrola advierte a los políticos contra las «ocurrencias» en el sector eléctrico

EFE.- El director corporativo de Iberdrola España, Fernando Becker, advirtió contra las «ocurrencias en sectores estratégicos», como el eléctrico, porque «son peligrosas» para la economía del país. Becker fue uno de los ponentes iniciales en Bilbao en el Congreso de la Empresa Familiar. Aunque no ha citado al PSOE, la semana pasada los socialistas avanzaron que su programa electoral incluirá el cierre de las centrales nucleares españolas para 2028.

El directivo de Iberdrola, eléctrica propietaria de varias nucleares, como Garoña, cuyo cierre también defiende el PSOE, ha pedido «responsabilidad y prudencia para analizar el futuro» a la hora de hacer propuestas en sectores estratégicos. Becker ha subrayado que Iberdrola no solo no se opone a las energías renovables, sino que estima que «se puede y se debe seguir aumentando la energía renovable». También incidió en la necesidad de reconsiderar los costes que aumentan la tarifa de la luz, para lo que ha pedido «limpiar la tarifa de impuestos locales y regionales». «Hagamos un marco fiscal impositivo homologable para el conjunto del mercado en la Unión Europea; abogamos por un regulador europeo y por una política tributaria común», concluyó Becker.

Amaiur pide a Industria explicaciones por el «incumplimiento» de las medidas de seguridad en la central nuclear de Garoña

Europa Press.- Amaiur ha pedido al Ministerio de Industria, Energía y Turismo explicaciones por el «incumplimiento» de las medidas de seguridad en la central nuclear de Garoña, haciéndose eco de la denuncia de Ecologistas en Acción. El diputado de Amaiur Xabier Mikel Errekondo califica de «gravísima» la denuncia realizada por Ecologistas en Acción y se ha dirigido al Ministerio de Industria y Energía mediante una batería de preguntas.

En ellas, el portavoz de Amaiur, se interesa por las inspecciones técnicas realizadas y a realizar por Nuclenor, la propietaria de la central nuclear y participada a medias por Endesa e Iberdrola. Además, Errekondo se interesa por la fecha de cumplimiento de cada una de ellas. En fechas recientes Ecologistas en Acción denunciaba que Nuclenor no está realizando las inspecciones de seguridad exigidas por el CSN. Según explicaron, el Plan de Inspecciones que ha ordenado el CSN para evaluar la petición de alargar el funcionamiento de la planta atómica hasta los 60 años, lo que supondrá mantenerla activa hasta 2031, «costaría unos 10 millones de euros y la titular de Garoña no lo está haciendo«.

Shale Gas España asegura que el CSN ve compatible la explotación de fracking cerca de Garoña

EFE.- La plataforma española de exploración y desarrollo del gas pizarra, Shale Gas, ha asegurado hoy que el Consejo de Seguridad Nuclear (CSN) ha considerado que los proyectos presentados en el norte de Burgos, en el lugar en el que se ubican, son compatibles con la actividad de la central nuclear de Garoña.

En un comunicado, el director general de Shale Gas España, David Alameda, ha asegurado que, desde 2013, con la nueva Ley de Impacto Ambiental, los proyectos de exploración de gas no convencional están supeditados a múltiples requerimientos técnicos, entre ellos un detallado Estudio de Impacto Ambiental que es analizado por técnicos cualificados de distintas instituciones y de las Administraciones, y también por asociaciones, sindicatos, partidos políticos, ONGs y ciudadanos.

David Alameda ha asegurado que entre los organismos que han sido consultados está el CSN, la instancia oficial que posee las competencias en materia de seguridad nuclear y protección radiológica. Tras las últimas críticas de Ecologistas en Acción, que apuntan al riesgo añadido de que el uso de la técnica de la fractura hidráulica -fracking- a pocos kilómetros de Garoña pueda provocar un riesgo de accidente nuclear, Alameda ha explicado que los organismos técnicos toman decisiones fundamentadas y basadas en hechos científicos, por lo que pide «responsabilidad para aportar claridad y no confusión» al debate sobre los proyectos de exploración.

David Alameda ha asegurado que hay consenso en la comunidad sobre el hecho de que los trabajos de exploración, incluyendo la técnica de fractura hidráulica, «son seguros si se desarrollan bajo la legislación adecuada y aplicando los estándares de la industria». En su opinión, en España se cumplen ambos requisitos, ya que las empresas que forman parte de Shale Gas España saben que «el éxito de los proyectos requiere hacer todo lo necesario para que éstos se desarrollen con total seguridad.» En todo caso, ha añadido que la «sismicidad inducida» por fractura hidráulica es menor que la producida por otras actividades tales como la minería o el llenado de embalses.

De hecho, considera que la sismicidad inducida provocada por el fracking entra normalmente en el rango de los microsismos, con menos de tres grados en la escala de Richter, lo que no es detectable por el ser humano, sólo por sismógrafos, y está un punto por debajo del nivel de riesgo que señalaba hace unos días el portavoz para temas nucleares de Ecologistas en Acción, Francisco Castejón.

Además, el representante de la compañía ha asegurado que solo en tres ocasiones, de los dos millones de fracturas que se han realizado en el mundo, se han detectado microsismos, en todos los casos por debajo de esta magnitud