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Ecologistas insta a las administraciones a tomar medidas de restricción del tráfico por la contaminación en Madrid

Europa Press.- Ecologistas en Acción insta a todas las administraciones a la adopción de medidas de restricción del tráfico para preservar la salud humana y el medio ambiente, después de los últimos episodios en los que se rebasó el umbral de ozono en distintas estaciones de la capital y la región. En este sentido, la organización ha señalado que «la situación actual de la contaminación por ozono  malo no tiene precedentes» y esto exige la toma de decisiones «que no se vislumbran de ninguna manera».

Ecologistas en Acción insiste en la adopción de medidas que observen un objetivo a medio y largo plazo para combatir la contaminación en la región, «gobernada durante un cuarto de siglo por administraciones depredadoras de territorio y de recursos». En su opinión, la «agobiante» red de autovías y carreteras de la región de Madrid, la segunda del mundo en kilómetros por habitante, por encima de las áreas metropolitanas de Londres, Paris o Berlín, «se traduce en un modelo de movilidad que produce la boina de contaminación en el invierno y la invisible pero dañina del ozono malo en el verano».

Desde el pasado lunes las dos redes de medición, 24 estaciones de Madrid ciudad y 23 de la Comunidad han registrado situaciones «antes no conocidas, especialmente en la capital», denunció Ecologistas. De las 24 estaciones, son 14 las que miden ozono. El sábado 14 de ellas superaron el umbral de aviso a la población, mientras que este lunes fueron 12. En cuanto a la Comunidad, la organización ecologista ha señalado que de las 23 que miden ozono, 14 fueron las que superaron este umbral tanto el sábado como el lunes. «El domingo hubo un ligero respiro en la región», matizó.

Para Ecologistas, el problema de fondo no se afronta «con una adecuada información a la opinión pública» y es hora que se transmita que «el aberrante tráfico que se observa tanto en las carreteras de acceso a la capital, y en todo el área metropolitana, causa serios problemas a la salud y a la economía«. Ecologistas en Acción considera que solo actuaciones «conjuntas y contundentes» pueden paliar esta situación, «que no acabar con ella, ya que ello exige medidas a medio y largo plazo que no han sido abordadas por gobiernos monocolores desde hace 25 años en la región madrileña».

El 95% de los españoles respira aire contaminado según Ecologistas en Acción

Europa Press.- Más de 44,7 millones de españoles respiraron aire contaminado durante 2014. La cifra representa el 95% de la población total según el informe de Contaminación del Aire de Ecologistas en Acción, que añade que el 94% del territorio se expuso el año pasado a niveles de contaminación superiores a los que recomienda la Organización Mundial de la Salud (OMS). Según el estudio, un total de 474.000 kilómetros cuadrados soportan una contaminación que daña los bosques y cultivos y la causa principal en las áreas metropolitanas es el tráfico.

El informe de Ecologistas en Acción recuerda que, según las últimas estimaciones de la Comisión Europea, cada año mueren en España 27.000 personas de forma prematura por afecciones derivadas de la contaminación del aire. Respecto a los costes sanitarios que se derivan de este problema, la OMS apuntó en un reciente estudio que representan entre el 2,8% y el 4,6% por ciento del PIB de España, es decir, unos 46.000 millones de euros. Esto incluye los daños provocados sobre los cultivos y los ecosistemas naturales, que también implican costes económicos.

En este ámbito, recuerda que la Comisión Europea inició en enero de 2009 un procedimiento de infracción contra España por el incumplimiento de la normativa sobre partículas PM10 que está a punto de llegar al Tribunal de Justicia Europeo. Recientemente la Comisión abrióun nuevo expediente a España por los niveles de dióxido de nitrógeno. Ecologistas en Acción además de alertar por los resultados del informe, denuncia que la información a los ciudadanos por parte de las administraciones públicas no es ni adecuada ni ajustada a la gravedad del problema.

En este sentido, recuerda la obligatoriedad de cumplir los Planes de Mejora de la Calidad del Aire, que competen a las comunidades autónomas y a los ayuntamientos. Sin embargo, advierte de que en muchos casos «no existen» y los existentes son «inefectivos en la mayoría de los casos por falta de voluntad política». Finalmente, la organización subraya que las vías «principales» para reducir la contaminación del aire son: disminuir el tráfico motorizado, reducir la necesidad de movilidad y potenciar del transporte público. Por ello, insiste en que deben adoptarse mejores técnicas industriales disponibles y la reducción drástica de la generación eléctrica por centrales térmicas, en particular las que utilizan carbón.

El estudio anual de Ecologistas en Acción analiza los datos de 700 estaciones de medición oficiales instaladas en todo el país y presenta datos sobre la calidad del aire, por comunidades autónomas y por sustancias contaminantes. En concreto, el informe toma como referencia los valores máximos de contaminación recomendados por la OMS; el objetivo a largo plazo para la protección de la vegetación establecido por la Unión Europea; y los valores límite de obligado cumplimiento establecidos por la normativa de Unión Europea, más laxos que los recomendados por la OMS.

Así, según los dos primeros parámetros, en 2014, al menos 44,7 millones de españoles respiraron aire contaminado, lo que supone el 95% de su población en el 94% de su territorio. Sin embargo, si se tiene en cuenta los valores límite establecidos por la Unión Europea, la población que respiró aire contaminado es de 15,5 millones de personas: En total, una de cada tres personas respiró aire que superaba los límites que establece la ley. Con este parámetro la superficie expuesta a unos niveles de contaminación que dañan la vegetación alcanza 263.000 km2, más de la mitad del Estado español.

Por causas, la principal fuente de contaminación es el tráfico rodado y los contaminantes que provocan más problemas de salud son las partículas en suspensión (PM10 y PM2,5), el dióxido de nitrógeno (NO2), el ozono troposférico (O3) y el dióxido de azufre (SO2). Además, las partículas son el contaminante que más incrementó su incidencia a lo largo del 2014 mientras que el dióxido de nitrógeno y el azufre declinaron ligeramente. Ecologistas en Acción expresó su preocupación por los elevados niveles de benzoapireno, que es un contaminante cancerígeno. Para la valoración del porcentaje de población que respira aire contaminado se tuvieron en cuenta todos estos contaminantes.

Asimismo, el informe indica que el ozono troposférico es el contaminante que tiene una mayor extensión y que más afecta a la población, con unos niveles que se mantienen estacionarios o incluso al alza. Esto se debe al incremento de las temperaturas medias y de las situaciones meteorológicas extremas (olas de calor) durante el verano, como resultado del cambio climático. Durante el año 2014, se redujeron los niveles de ozono «ligeramente» respecto al año anterior, pero a pesar de esto, la «práctica totalidad» de la población y de las formaciones vegetales españolas respiraron aire con concentraciones de ozono peligrosas para la salud humana y vegetal.

Por su parte, las partículas (PM10 y PM2,5), el dióxido de nitrógeno (NO2) y el dióxido de azufre (SO2) afectan a más de dos terceras partes de la población aunque con una tendencia a la baja de los dos últimos contaminantes. Para la ONG, esta reducción se debe «fundamentalmente» a la crisis económica, que provocó una reducción forzada de la movilidad y la disminución de la actividad industrial. Contribuyó también la evolución del parque móvil hacia vehículos más pequeños y eficientes y a la sustitución de electricidad en centrales térmicas por energía eólica y solar. «La reducción de contaminantes se debe a la coyuntura en exclusiva», apunta el informe presentado.

Detenida la inspección para reabrir Garoña por la agenda de General Electric, empresa supervisora

Europa Press.- El programa de inspección de la central nuclear de Santa María de Garoña, ordenado por el Consejo de Seguridad Nuclear (CSN) en el marco de evaluación de la solicitud de la planta atómica de volver a producir electricidad hasta 2031, ha sido «parado», pero no «suspendido«, según precisó Elías Fernández, portavoz del titular de la planta, Nuclenor, que indicó que obedece a la agenda de la empresa estadounidense General Electric respecto a sus inspecciones en centrales distribuidas por todo el mundo.

Sin embargo, Ecologistas en Acción apunta que el titular se está ha planteado paralizar las tareas de inspección ordenadas por el Consejo de Seguridad Nuclear (CSN). La organización ecologista estima que el elevado coste de las inspecciones ha llevado al titular a plantearse la renuncia a seguir solicitando su renovación de licencia y cree que este sería un «nuevo paso hacia el cierre definitivo». «Es una excelente noticia para la ciudadanía y el medio ambiente», subrayó el portavoz nuclear de Ecologistas en Acción, Francisco Castejón.

En el programa de inspección requerido por el organismo regulador a Garoña se incluía las inspecciones de las penetraciones de la parte inferior de la vasija y la búsqueda de posibles fallos en esta, ya que es similar a la de las centrales belgas Döel y Thianje, donde se detectaron anomalías, por lo que permanecen cautelarmente paradas. Ecologistas añade que estas inspecciones supone un gasto estimado de 10 millones de euros, sin que su realización pueda garantizar el voto favorable del CSN a su apertura. Además, estima que Garoña, en caso de que finalmente sea reautorizada tendría que realizar unas reparaciones cuyo coste ascendería a unos 150 millones de euros.

Ecologistas tiene en cuenta también la «enorme incertidumbre política» para Nuclenor que puede suponer las próximas elecciones generales, ya que los únicos partidos favorables a la continuidad de Garoña son PP y UPyD. Por ello, para Ecologistas en Acción, la paralización de las inspecciones de Garoña, «supone una excelente noticia para el medio ambiente y para los ciudadanos» y acerca «un paso más hacia el cierre definitivo de la central, que ya debería haberse producido».

Por el contrario, desde Nuclenor aseguran que «no se ha tomado ninguna decisión en ese sentido» y que «todo sigue igual», por lo que no hay «nada nuevo», sino que permanece la voluntad de arrancar la planta.  Además, Fernández precisó que una decisión así tendría que tomarse en el marco de un consejo de administración y que, en el último, celebrado a principios de junio, no se estudió tal cuestión.

Respecto a la revisión de la vasija, recordó que está inspeccionada totalmente a falta de una pequeña parte de los manguitos de los accionadores de las barras de control (sistema de seguridad de la vasija). «No hay nada suspendido. Falta poco por hacer y lo que falta está pendiente de calendario. No hay nada respecto a una decisión de cerrar la central. Seguimos pensando que podemos arrancar Garoña«, sentenció. Finalmente, recordó que el 26 de marzo, Nuclenor aseguró que la inspección realizada a la vasija durante noviembre y diciembre de 2014 dieron como resultado que «no hay defectos de fabricación» en la vasija y que se encuentra en «buen estado para operar de forma segura«.

Decenas de personas marchan por sexta vez a pie a Villar de Cañas para decir que el silo «no se pone»

Así lo indicó Carlos Villeta de Ecologistas en Acción de Cuenca, quien apuntó que la marcha ha transcurrido con normalidad pese a la amenaza de lluvia y que se ha parado frente a los terrenos en los que está proyectado el ATC «para que la gente vea que no se ha hecho absolutamente nada».

Asimismo, el ecologista ha recordado que la marcha recorrió desde las 11.00 horas los 5,5 kilómetros que separan Casalonga de Villar de Cañas, para concluir en la Plaza de la localidad conquense sobre las 13.50 horas, donde se ha leído un manifiesto y se escucharon lemas como «El ATC no se pone».

«La gente tiene claro que el ATC no se va a poner y está prácticamente convencida de que estamos a punto de conseguirlo porque los terrenos no son aptos» , ha apuntado para añadir que desde Ecologistas en Acción están «muy preocupados» por el hecho de que el ministro de Industria, José Manuel Soria, haya dicho que la obra se va a adjudicar «sin permisos».

En este sentido, ha señalado que desde Ecologistas en Acción están preparados para que en cuanto haya el mínimo atisbo de que esto pueda suceder acudir a los tribunales para denunciar tanto a Enresa como al Ministerio.

De su lado, el portavoz federal de Equo, Juan López de Uralde, ha dicho que la formación política ha acudido a esta marcha porque su compromiso contra el ATC es «firme». «Es un proyecto que está muriendo, es insostenible y no tenía ningún sentido», ha apuntado.

«Nosotros esperamos que no se lleve a cabo, sabemos que la voluntad del PP es seguir adelante pero está teniendo un coste político importante y los problemas técnicos que están apareciendo así lo demuestran», ha argumentado.

Las organizaciones ambientales afirman que España ha «aprobado de chiripa» los objetivos de Kioto por la crisis económica y la compra de CO2

Los representantes de las cinco principales organizaciones ambientales en España han criticado la política de los distintos Gobiernos en esta materia y han reclamado una «verdadera transición energética» y unos objetivos de reducción de emisiones domésticas «verdaderamente ambiciosos».

En este sentido, la portavoz de Amigos de la Tierra, Liliane Spendeler, ha indicado que se trata de una noticia que ya se esperaba porque España «ha hecho lo que tenía que hacer formalmente» respecto al primer periodo del Protocolo de Kioto, pero «lo ha hecho comprando emisiones».

Por ello, ha recomendado al Gobierno que, de cara al segundo periodo de cumplimiento, debe fijar objetivos de reducción de emisiones «más ambiciosos» de lo que exigen los compromisos internacionales y que estas reducciones se hagan en España. «Eso es esencial, porque si no, la reducción no es real», ha manifestado. Para ello, estima necesarias políticas «efectivas» en esta línea y que esto se planifique con los presupuestos de carbono, con un objetivo repartido de la carga entre los distintos sectores.

Mientras, el responsable de energía de Ecologistas en Acción, Rodrigo Iruzun, ha dicho que el primer periodo de Kioto era «simbólico» porque, en realidad se permitía a España emitir un 15% más de CO2 que en 1990. En este sentido, ha denunciado que España no ha cumplido con reducciones internas sino con la compra de derechos y haciendo «un uso masivo y desmesurado» de los mecanismos de flexibilidad y de desarrollo limpio en terceros países.

En concreto, ha indicado que a partir del año 2000 España incrementó «muchísimo» sus emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) y a partir de 2008 experimentaron un «fuerte descenso». «El periodo 2008-2012 -el que sirve para medir las emisiones- no es representativo y sin embargo se han tenido que comprar derechos en el exterior».

A su juicio, «esto es una trampa, pero el Protocolo de Kioto está así pensado», ya que España ha emitido «mucho más de lo deseable» en un desarrollo sostenible.

Entre sus recomendaciones, se deben poner en marcha mecanismos estructurales eficaces para reducir los GEI y dejar de apostar por un crecimiento basado en la movilidad, el turismo insostenible, los viajes en avión, alta velocidad y carretera. «Se necesita una apuesta por un cambio en la economía hacia lo más sostenible ambientalmente y socialmente», ha apostillado.

En este sentido, la portavoz de cambio climático de Greenpeace, Tatiana Nuño, ha recordado que España es el país que más ha tenido que pagar para cumplir con Kioto porque «no ha sido ambiciosa» a la hora de cambiar el modelo energético y le ha costado 830 millones de euros entre 2008 y 2012. «Las cuentas salen, pero porque se ha comprado, ya que se ha emitido más de lo permitido», ha subrayado.

De este modo, quiere que en el segundo periodo de Kioto (2012-2020) España vaya más allá de cumplir la cuota de energías renovables hasta el 20 por ciento y de reducir un 10 por ciento las emisiones de sectores difusos como el transporte o la agricultura. Sin embargo, cree que, de momento «no está encaminada» y ha mostrado su sorpresa por la reciente aprobación del plan de apoyo al carbón nacional que, «queda muy lejos de los objetivos de reconversión del sistema energético». «El Gobierno está haciendo todo lo contrario a lo que recomiendan los objetivos de la UE y los científicos», ha sentenciado.

Mientras, la directora ejecutiva de SEO/BirdLife, Asunción Ruiz, ha lamentado que se ha cumplido con «un aprobado por los pelos» y ha manifestado que no es una cuestión de signo político, sino que esto se debe al último periodo del PSOE y al primero del PP.

En su opinión, España «debe hacer bien sus deberes» con una transición a un nuevo modelo energético y ha recordado que es el país europeo con mayor riesgo de desertificación. «El nuevo modelo energético requiere de un pacto de Estado que no dependa de los vaivenes políticos del partido que esté en cada caso en el poder», ha reclamado y ha advertido de los efectos futuros del parón de las renovables.

De hecho, estima que si los más de 800 millones destinados a la compra de derechos de CO2 se hubieran invertido en una transición energética y en la eficiencia energética, se habría logrado, además «un montón de empleo verde». Por ello, estima que el país debe ser «más inteligente» a la hora de afrontar los compromisos climáticos, que van de la mano con el crecimiento verde del futuro.

Respecto a la política del último Gobierno, ha valorado que es un «acierto indiscutible» dejar de comprar derechos, pero cree que esto se debe acompañar de un tránsito a una energía 100 por 100 renovable.

Además, ha lamentado la «clara incoherencia política» entre las apuestas del Ministerio de Medio Ambiente y la política energética del Ministerio de Industria y ha precisado que el «parón de las renovables» del ministro José Manuel Soria «ha hecho mucho daño».

«Los ministerios que debían ir de la mano iban por caminos distintos. Solo se han puesto tiritas. Esperamos que la ventana de oportunidad que se abre con las interconexiones sirva para desbloquear el avance de las renovables y no para dar vía libre al gas«, ha concluido.

Por su parte, el director ejecutivo de WWF, Juan Carlos del Olmo, opina que cumplir el Protocolo de Kioto es «mejor noticia que no cumplido», pero en este caso se ha logrado porque el periodo en que se miden las emisiones de gases de efecto invernadero coincide con la «mayor crisis económica que se recuerda» y que ha provocado un desplome del consumo y que la nueva potencia instalada ha entrado a contar en el mix energético.

«Al final hemos compensado lo que nos faltaba comprando derechos a Polonia y así es como hemos cuadrado las cuentas. Si hubiéramos hecho los deberes España habría tenido muy buenos resultados, así que nada de triunfalismos ni de sacar pecho porque hemos tirado de chequera», ha apostillado.

En este sentido, ha alentado poner las bases para evitar que tan pronto haya una recuperación económica vuelvan a aumentar las emisiones porque, de momento, se mantiene una enorme dependencia de las energías fósiles y ha urgido a cambiar la política de infraestructuras y transportes y de eficiencia energética.

Del Olmo reconoce que se han hecho «algunas cosas» para cambiar la tendencia por parte de Medio Ambiente, departamento del que señala que con los pocos recursos que tenía lo ha intentado, pero ha criticado al Ministerio de Industria por su «bombardeo de las renovables».

Finalmente, cree que España tiene un gran potencial para reducir emisiones más allá del objetivo del 40 por ciento de reducción fijado por la Unión Europea. «Este ha sido un aprobado de chiripa por la crisis. España tiene posibilidades y puede ir más allá», ha concluido.