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Las compañías eléctricas defienden la libertad empresarial para cerrar centrales y piden pagos por capacidad para respaldar a las renovables

EFE / Europa Press.- El presidente de la patronal eléctrica Unesa, Eduardo Montes, ha reclamado al Gobierno que las centrales eléctricas que acaben no usándose y que no se retribuyan deben tener libertad para salir del mercado. En el mismo sentido, las propias compañías eléctricas reclaman mantener su libertad para cerrar centrales de generación y demandan pagos por capacidad para seguir teniendo abiertas aquellas que no resulten rentables, pero que son necesarias para dar respaldo al sistema cuando baja la producción de origen renovable.

Responsables de regulación de las cinco grandes eléctricas españolas, Iberdrola, Endesa, Gas Natural Fenosa, EDP y Viesgo, se han pronunciado así durante una mesa redonda celebrada dentro del Encuentro del Sector Eléctrico, organizado por Expansión. El director de Relaciones Institucionales y Regulación de Endesa, José Casas, ha indicado que el problema de centrales como las de carbón o los ciclos combinados es que, al funcionar según la intermitencia de la producción eléctrica de las tecnologías renovables, en el mercado no recuperan los costes que tienen, por lo que necesitarían de unos pagos por capacidad complementarios.

En cuanto al decreto que prepara el Gobierno para regular el cierre de centrales por sus propietarios, a fin de garantizar el suministro, José Casas indicó que cree que el Ejecutivo podría evitar un cierre aduciendo motivos de seguridad del suministro o para contribuir a los objetivos de cambio climático, pero no por su influencia en la formación de precios porque la Comisión Europea es contraria a intervenir en ello.

Piden garantizar la rentabilidad razonable

El sector eléctrico también reclama que «se garantice lo que la ley denomina la rentabilidad razonable» en la revisión que llevará a cabo el Gobierno para la retribución correspondiente a las actividades reguladas para el periodo 2020-2025, que deberá aprobarse dentro de dos años. José Casas señaló que el informe de la pasada semana de Goldman Sachs sobre el sector, que provocó la caída en Bolsa de las grandes eléctricas, constata que «el mercado ha tomado como que no es una rentabilidad razonable» la revisión a la baja prevista. Casas, que estuvo respaldado en su petición por los representantes de Iberdrola, Gas Natural Fenosa, EDP y Viesgo, pidió que esta rentabilidad para las actividades del sector «al menos se mantenga».

El director de Regulación de Iberdrola España, Rafael del Río, señaló que hay que abordar el papel del carbón o de la nuclear, sobre la que hay «serías dudas» sobre su rentabilidad, y que en el caso de los ciclos combinados el mercado sólo cubre costes variables, pero no los fijos de operación e inversión. Por ello invitó a mirar a otros países, como el Reino Unido, que convoca subastas en las que los operadores que acuden reciben una retribución por estar disponibles y, los que no, cierran la planta o hacen una hibernación, una posibilidad esta última que también hay prevista en España pero que no se ha desarrollado.

Asimismo, las compañías eléctricas consideran que la «ambiciosa» hoja de ruta para la descarbonización de la economía, con los objetivos de reducción de emisiones para 2030 y 2050, pasa por una «electrificación» de la economía. A este respecto, Rafael del Río señaló que la planificación final para esa transición tiene que ser «responsabilidad del Estado» y que las empresas deberán «acatar esas decisiones y cumplirlas”. No obstante, el directivo de Iberdrola pidió una senda «razonable» que permita cumplir los objetivos.

Barreras a la libertad empresarial

Por su parte, el director de regulación de Gas Natural Fenosa, José Antonio Guillén, ha dicho que prohibir el cierre de una central es la mayor barrera que se puede poner a la libertad de empresa y ha señalado que la única manera de mantener ciertas instalaciones es tener mecanismos de capacidad. En su opinión, los dos grandes retos regulatorios para el sector actualmente son que se permita el cierre de centrales sin restricciones administrativas y el establecimiento de un mecanismo de pagos por capacidad. También se mostró a favor de eliminar tarifas como la regulada si se quiere que la demanda participe en la formación de precios de mercado.

El director de Regulación y Relaciones Institucionales de EDP, Santiago Bordiú, apuntó que el denominado Paquete de Invierno de la Comisión Europea «no reconoce para nada los mecanismos de capacidad», quizá porque «la visión de Bruselas no es la del mercado ibérico», caracterizado por un bajo nivel de interconexión. Asimismo defendió el papel «vital» del sector eléctrico en la descarbonización debido a que se producirá un incremento de la demanda eléctrica que debe ser atendido por el mix de generación.

El director de Regulación de Viesgo, Francisco Rodríguez, señaló que el borrador del decreto del Gobierno le ha sorprendido mucho, pues el procedimiento para cerrar centrales ya está “perfectamente” regulado y, de hecho, su compañía ha cerrado 3 de carbón en los últimos 5 años. Además, ha señalado, en alusión a mecanismos compensatorios para mantener abiertas instalaciones no rentables, que «la seguridad de suministro es un bien y, en general, los bienes tienen un precio».

Por otro lado, los directivos de las eléctricas se han mostrado a favor de eliminar los impuestos y cargas ajenos al sistema que soporta la factura eléctrica y de repartirlo entre otros sectores para que todos contribuyan ya que el sector eléctrico está pagando «buena parte de la transición energética y de los objetivos de renovables». Otra propuesta fue que se constituya un fondo de transición energética que se financie con una fiscalidad medioambiental, como propuso el representante de Endesa.

Unesa reclama libertad para decidir

Por su parte, el presidente de la patronal eléctrica, Unesa, Eduardo Montes, ha indicado que las centrales eléctricas que acaben no usándose y que no se retribuyan deben tener libertad para salir del mercado.  Montes, que también intervino en el Encuentro del Sector Eléctrico, considera que en el proceso de transición energética la sostenibilidad “no debe cegar respecto a la necesidad absoluta de la seguridad de suministro y la competitividad de los precios«. Por otro lado, volvió a reclamar que impuestos y cargas ajenos al suministro eléctrico, que entre 2005 y 2016 han aumentado al doble, salgan de la factura.

El presidente de Unesa también ha considerado necesario que exista certidumbre regulatoria en la transición energética hacia una economía descarbonizada, ya que la entrada de renovables va a suponer la llegada de inversores. De hecho, Montes señaló que esta certidumbre será importante, ya que «los mercados van a ser muy sensibles a todo ello». Montes subrayó que la electricidad con bajas emisiones será «clave» en ese camino para la descarbonización en otros sectores y destacó que es «imprescindible» una transformación «inteligente, racional y sin pausa».

El papel de las redes

Por su parte, el presidente de Red Eléctrica de España (REE), José Folgado, defendió el importante papel que jugarán las redes en la transición energética, ya que «hacen compatible» el nuevo modelo con la seguridad de suministro. En su intervención, el presidente del operador del sistema eléctrico subrayó que las redes serán las «facilitadoras» de la transición energética, ya que las energías renovables no son gestionables, lo que supone «un problema que hay que resolver».

Nadal asevera que la reforma eléctrica se aplicará «sin ningún cambio en sus planteamientos» y se revisará la rentabilidad razonable

Redacción / Agencias.- El ministro de Energía, Turismo y Agenda Digital, Álvaro Nadal, ha asegurado que la reforma eléctrica aprobada en 2013 se aplicará «sin ningún cambio en sus planteamientos» y que cuando llegué el momento de revisar la rentabilidad razonable de las actividades reguladas del sector eléctrico para el periodo 2020-2025 se hará según marca la normativa.

«La reforma es la que se hizo, con una retribución ligada al bono que se revisa cada 6 años. Ha habido cierto revuelo cuando se ha recordado por un banco de inversión, pero es lo que está en la ley. La reforma se hizo y se aplicará, tal como estaba prevista, sin ningún cambio en sus planteamientos», afirmó Nadal en referencia al informe del banco estadounidense Goldman Sachs en el que se advertía de los recortes que se avecinan en la retribución y en la rentabilidad del sector eléctrico español, lo que provocó un derrumbe en Bolsa de las principales compañías del sector (Iberdrola, Endesa, Gas Natural Fenosa y REE), dejándose casi 3.000 millones en capitalización en un solo día.

El ministro defendió en su intervención la necesidad de acertar en las decisiones que se tomen en política energética en momentos de cambios como los actuales, ya que «es crucial y los errores en política energética duran décadas». Por ello, Nadal subrayó que «el objetivo primordial» del Gobierno en materia energética es asegurar un precio competitivo de la energía con el que poder respaldar a la competitividad y al crecimiento económico para conseguir mayor nivel de empleo, «siempre respetando los objetivos medioambientales a los que España se ha comprometido, dentro de un marco de reducción de emisiones de CO2 y de incremento de las renovables».

Así, Nadal valoró los trabajos iniciados para la elaboración de la futura Ley de Cambio Climático y Transición Energética, para la que se ha conformado un grupo de expertos, y subrayó la necesidad de definir cuál es el mix energético «más adecuado» para afrontar ese futuro de descarbonización. A este respecto, se mostró partidario de definir qué hacer con el carbón y la nuclear, tecnología que defendió ya que tiene «ventajas indudables», como que no emite CO2 y produce continuamente, aunque «tiene el problema de los residuos». De hecho considera que no se podrá prescindir de la nuclear mientras siga habiendo un nivel muy bajo de interconexión, una materia en la que, a su juicio, se está avanzando muy lentamente.

Respecto al carbón, destacó que emite más CO2 que el gas, aunque es más barato, por lo que se mostró a favor de mantener «una diversificación adecuada» de las dos fuentes de energía en el mix en esa transición energética. «Prescindir del carbón por tema medioambiental tiene su coste», advirtió. Además, el ministro señaló también la necesidad de ver cómo se retribuye la térmica, una tecnología que será imprescindible con la introducción de energías más volátiles como las renovables. «Debemos tener mayor capacidad de actuar con el parque de bomberos, que es la térmica, que estará parada o poco utilizada, pero imprescindible por esa falta de interconexión y por el hecho de que la renovable es volátil», añadió al respecto.

Nadal ha señalado que la transición energética obligará a ordenar una reducción de la capacidad existente en ciertas energías y a variar la retribución para dotar de más flexibilidad a la gestión, pues habrá fuentes, como la energía térmica, que a futuro se utilizarán poco pero con mucha intensidad cuando se necesite. En opinión del ministro, la retribución de lo que queda del sistema para dar flexibilidad, por la reducción de capacidad de generación que tiene que ir desapareciendo al ser sustituida por las nuevas fuentes de energía, es lo que va a condicionar la política energética no sólo de España, sino de la Unión Europea, de aquí a 2030.

Sobre el paquete de invierno de la Unión Europea, que marcará el camino hacia la descarbonización de las economías, Nadal lamentó que no se haya tenido en cuenta al configurar esta hoja de ruta dos aspectos fundamentales para España como son la alta tasa de desempleo y el «altísimo grado de aislamiento que tiene la Península Ibérica«. Nadal afirmó que mientras otros países están en mejores condiciones de poner más énfasis en objetivos medioambientales y de reducción de emisiones, la prioridad española es cumplir esos objetivos pero sin perder competitividad.

Recordó que, cuando el PP llegó al Gobierno en 2012, se encontró con un sistema eléctrico «desequilibrado» y con una deuda en crecimiento, que de no haberse adoptado medidas, hubiera crecido en 10.000 millones de euros por año, lo que hubiera supuesto «la quiebra del sistema». El ministro reivindica que la reforma produjo un declive de los precios del sector eléctrico y lo mismo pasó con el gas y con el suministro a la industria, cumpliéndose el objetivo de causar un cambio en los precios.

Asimismo, Nadal afirmó que «es muy difícil» compaginar la reducción de emisiones y el desarrollo de las renovables con la eficiencia y la competitividad, puesto que se pueden generar costes a las empresas que frenen la creación de empleo. «Cada euro que una empresa paga en energía es un euro que no va a salarios» añadió en este sentido. Por otra parte, Nadal señaló que Europa supone solamente el 10% de las emisiones de gases contaminantes y que son otras regiones y países quienes tienen que hacer más contra el cambio climático. Nadal también afirmó que mientras Europa se centra en objetivos medioambientales, otros países de América y Asia se centran en reducir precios y aumentar su eficiencia y competitividad.

«Realmente estamos aislados, tenemos un problema de interconexión, que es el principal problema de España en su relación con la Unión Europea», afirmó, añadiendo que le hubiera gustado que existiera en el paquete una gobernanza de cumplimiento para el tema de las interconexiones «tan estricta como existe para otros aspectos, ya que lo básico es que exista un mercado interior«. Por ello ha señalado que, aunque el problema del déficit del sistema en España está solucionado, quedan asuntos pendientes, como las interconexiones, sin las cuales ha advertido que un mercado interior de la energía en la Unión Europea es hablar para España de una «ficción».

Galán (Iberdrola) pide en la ONU que todos los sectores luchen contra el cambio climático para lograr una economía descarbonizada

EFE / Servimedia.- El presidente de Iberdrola, Ignacio Sánchez Galán, ha destacado el papel clave del sector eléctrico para lograr una economía baja en carbono, a pesar de que solo representa el 25% de las emisiones mundiales. En este sentido, Galán subrayó ante la ONU las oportunidades de empleo y bienestar que genera una economía baja en carbono, y subrayó la necesidad de que todos los sectores económicos trabajen juntos para frenar el cambio climático, según indicó Iberdrola.

Galán participó en una reunión de alto nivel auspiciada por la Secretaría General de la ONU en el marco de la apertura de la Asamblea General de las Naciones Unidas en Nueva York (Estados Unidos) y de la Semana del Clima que se celebra en la ciudad. Según Galán, «la electricidad proporciona una gran oportunidad para lograr una descarbonización rápida y efectiva para reducir las emisiones contaminantes, llevando a una electrificación de la economía que podrá generar bienestar y empleo».

En el foro Financiando la agenda 2030: desbloqueando la prosperidad y en presencia del secretario general de la ONU, Antonio Guterres, Galán ha explicado que la lucha contra el cambio climático «es una responsabilidad compartida que debe involucrar a todos los sectores de la economía». «Entre todos podemos hacer una contribución significativa aprovechando las oportunidades de una economía limpia y desarrollando marcos regulatorios que atraigan la inversión y creen valor para todos», añadió. Iberdrola está participando en la Semana del Clima de Nueva York (Estados Unidos). La empresa ha suscrito un acuerdo con Sustainable Energy for All, una plataforma dependiente de Naciones Unidas, para trabajar juntos con el objetivo de asegurar el acceso universal a una energía asequible y segura.

Iberdrola se adhiere a Bewego

Por otro lado, Iberdrola, en el marco de la Semana Europea de la Movilidad, se ha adherido a la iniciativa Bewego, la primera plataforma de movilidad colaborativa en España, que permite a empleados de la misma organización y de organizaciones distintas, pero próximas entre sí, compartir coche. De este modo, la compañía ofrece a su equipo una nueva alternativa para acudir a su centro de trabajo reduciendo su huella de carbono. La incorporación a Bewego se suma al Plan de Movilidad Sostenible de Iberdrola, que hasta ahora contaba con 23 acciones. Este Plan tiene un carácter integral e involucra a empleados, empresa, clientes y proveedores.

Entre las acciones puestas en marcha por Iberdrola, destaca el programa Vehículo eléctrico para empleados, cuya implantación se ha realizado ya en España y Reino Unido, si bien se prevé ampliar al resto de países donde está presente. Con esta acción, Iberdrola promueve la utilización del vehículo eléctrico entre su equipo profesional, para lo que ha articulado 3 tipos de ayudas: 4.000 euros para la compra de un vehículo 100% eléctrico, ayudas a fondo perdido de hasta 750 euros para la instalación de puntos de recarga y de hasta 6.000 euros para aquellos empleados que accedan al patrocinio de la marca Iberdrola en sus vehículos durante 3 años, sumando ayudas de hasta 250 euros por la compra de bicicletas eléctricas.

Estas ayudas son compatibles con el Plan Movea del Gobierno, por lo que los empleados de Iberdrola pueden acceder a un vehículo eléctrico a un precio realmente competitivo. A estas acciones se suman otras 22, entre las que destaca también el servicio de car sharing eléctrico impulsado por Iberdrola. Mediante esta medida, los empleados de la compañía disponen de vehículos respetuosos con el medio ambiente para realizar gestiones comerciales en Madrid, Bilbao, Valencia y Barcelona.

Endesa advierte de que España necesitaría 11.000 MW más en 2025 si se prescinde de la nuclear y del carbón

Europa Press.- Endesa calcula que España necesitaría incorporar aproximadamente 11.000 MW de nueva potencia firme a partir de 2025 si se prescinde de manera prematura de las centrales de carbón nacional e importado y de las nucleares. Así lo indica en la respuesta a la consulta pública previa del proyecto de decreto por el que se regula el procedimiento de cierre de las instalaciones de generación eléctrica.

La compañía eléctrica explica que en 8 años las únicas tecnologías disponibles para proporcionar firmeza a un coste razonable serían nuevas turbinas de gas o nuevos ciclos combinados, «lo que incrementaría notablemente los precios de la electricidad». Por el contrario, el mantenimiento temporal del carbón y de la nuclear permitiría retrasar la necesidad de nueva potencia firme en, al menos, una década, dando así tiempo suficiente para que maduren nuevas tecnologías, actualmente incipientes, con emisiones nulas y a coste competitivo como, por ejemplo, las baterías.

Para la compañía que preside Borja Prado, es «crítico» determinar cuáles serán las necesidades de potencia del sistema eléctrico en distintos horizontes temporales. En la actualidad, considera que hay un cierto exceso de capacidad. No obstante, cree que es una situación transitoria que desaparecerá en un futuro más o menos cercano en función de las decisiones que se puedan tomar sobre el cierre de las centrales de carbón y nucleares.

A juicio de Endesa, la solución ambiental y económicamente más eficiente para la transición energética en España es mantener en operación la capacidad térmica y nuclear actual «hasta que deje de ser necesaria». En todo caso, precisa, mantener esta capacidad no significa continuar utilizándola del mismo modo: la producción de energía de estas plantas seguirá disminuyendo, debido a la creciente penetración de renovables, al igual que lo harán sus emisiones.

En su respuesta, Endesa indica que las herramientas para conseguir una correcta transición serían una planificación adecuada y unos mecanismos regulatorios que garanticen la disponibilidad de las instalaciones que son indispensables para el suministro energético y la reducción de emisiones al mínimo coste. Así, propone, en primer lugar, un plan de transición hacia un sistema energético libre de emisiones de CO2 en 2050 al mínimo coste posible, incluyendo mecanismos que permitan la electrificación de buena parte de la demanda doméstica, industrial, de servicios y del transporte; y garantizando que el cierre de las centrales emisoras existentes se lleve a cabo mediante la sustitución de estas instalaciones por renovables, como medida de eficiencia económica del sistema.

En segundo lugar, aboga por la revisión de la «elevada fiscalidad específica» que afecta a la generación eléctrica y que da lugar a que todas las tecnologías de generación estén afrontando «importantes dificultades económicas». Por último, aboga por el establecimiento de un mecanismo de pago por capacidad firme que sea conforme con los criterios recogidos por la Comisión Europea, basado en las necesidades del sistema, tecnológicamente neutro y cuyo precio esté fijado por criterios competitivos.

Bruselas pide permitir los incrementos

Ante la pregunta de la consulta de si considera oportuno mantener operativa una central por motivos de seguridad del suministro, cambio climático e impacto en el precio, Endesa argumenta que la necesidad de mantener operativa una central cuyo titular ha solicitado su cierre es, por lo general, el síntoma de un fallo de mercado, pues significa que el mercado no está permitiendo recuperar los costes de una central que es necesaria. Para evitar estas situaciones, la Comisión Europea recomienda permitir precios de escasez y eliminar distorsiones que afecten a las señales de precios. Si el fallo persiste, se puede proceder a la introducción de mecanismos de remuneración de la capacidad basados en criterios de mercado.

«En todo caso, si se deniega el cierre de una central, se está imponiendo a su titular una obligación de servicio público por la que debe ser lógicamente compensado, según la legislación y la jurisprudencia comunitarias», subraya. Así, recuerda que la Comisión Europea es contraria a la denegación del cierre si la razón es evitar un incremento del precio de mercado. Según Endesa, justificar el mantenimiento en explotación de una central, cuyo titular ha solicitado su cierre, para evitar un incremento en el precio de mercado, «supone una intervención que distorsiona el proceso de formación de la señal de precio».

Los mecanismos de remuneración de capacidad, que la Comisión Europea contempla como solución a problemas de seguridad de suministro, no son, en opinión de Endesa, «nada más que el pago firme, seguro, de las cantidades aleatorias, inciertas y volátiles que, de no existir esos mecanismos de pago, se recibirían como precios de escasez, así que estos mecanismos tienen el efecto positivo de reducir la volatilidad de los precios y los episodios de precios muy elevados».

Sobre qué procedimiento debería seguirse en el supuesto que el titular solicite el cierre de una central que es necesaria para el sistema, Endesa señala que si se pretende evitar el cierre de la central porque incide en la seguridad del sistema eléctrico o por motivos de cambio climático, «debe establecerse un mecanismo de compensación al titular que debe ser aprobado por la Comisión Europea con anterioridad a su implementación«.

La eléctrica estima que la introducción de un mecanismo de capacidad compatible con la normativa europea permitiría estructurar un proceso ordenado de previsión de las necesidades de capacidad y la modulación de los cierres, y explica que si el problema es de carácter transitorio, la Comisión Europea contempla el establecimiento de una reserva estratégica compuesta por capacidad de generación que ha de mantenerse fuera del mercado para preservar la señal de precios, pero a disposición del operador del sistema para operar en situaciones de escasez.

La italiana Enel pone en marcha en Brasil las 2 plantas solares fotovoltaicas más grandes de Sudamérica

EFE.- La italiana Enel comenzó la actividad en las plantas solares fotovoltaicas Ituverava y Nova Olinda, en Brasil, los mayores parques actualmente en funcionamiento en Sudamérica. La empresa explicó que las instalaciones están gestionadas por su filial en el país Enel Green Power Brasil Participações Ltda (EGPB) y especificó que Ituverava, de 254 megavatios (MW), se encuentra en Bahia, mientras que Nova Olinda (292 MW) se sitúa en Piauí.

La planta Ituverava cuenta con cerca de 850.000 paneles solares en un área de 579 hectáreas y ha precisado de una inversión de cerca de aproximadamente unos 334,7 millones de euros. Será capaz de producir más de 550 gigavatios hora (GWh) al año, equivalente al consumo anual de más de 268.000 hogares brasileños, y evitará la emisión a la atmósfera de más de 318.000 toneladas de dióxido de carbono (CO2).

Nova Olinda está compuesto por casi 930.000 paneles solares en un área de 690 hectáreas y podrá producir más de 600 GWh al año, suficientes para hacer frente a las necesidades de 300.000 familias. Evitará la emisión a la atmósfera de cerca de 350.000 toneladas de CO2 y ha necesitado de una inversión de cerca de 300 millones de dólares (unos 251 millones de euros).

Enel detalló que la producción de ambos parques solares se comercializará en el marco de un contrato de suministro energético a 20 años con la Cámara de Comercialización de Energía Eléctrica (CCEE) de Brasil. En ese país, Enel a través de sus filiales EGPB y Enel Brasil cuenta con una capacidad de energía renovable total instalada de aproximadamente 2.276 MW, de los que 670 MW son de energía eólica, 716 MW de energía solar fotovoltaica, 890 MW de energía hidroeléctrica.

La patronal Carbunión pide un papel destacado para el carbón autóctono en la transición energética

EFE.- La patronal del carbón, Carbunión, ha reclamado que el carbón que se produce en España tengan un papel destacado en la transición a un nuevo modelo energético bajo en emisiones. En este sentido, destaca que es el único combustible autóctono, contribuye a moderar los precios del mercado eléctrico y da garantía y seguridad al suministro.

Carbunión ha vuelto a pedir al Ministerio de Energía y a las compañías eléctricas la puesta en marcha de mecanismos que permitan la participación y el consumo del carbón autóctono en el mix de generación eléctrica. La patronal del carbón ha explicado que los incumplimientos por la Administración de los compromisos que figuraban en el Acuerdo Marco del Carbón 2013-2018 y el Plan de Cierre de explotaciones, junto a la negativa de las eléctricas a comprar carbón nacional, están provocando procedimientos concursales y de liquidación de empresas productoras de carbón.

Según Carbunión, la falta de un suministro sostenido de carbón autóctono a las centrales térmicas, al no firmarse contratos con las empresas eléctricas en los últimos tres meses, está provocando la parada de la producción en la mayoría de las explotaciones españolas de carbón. La patronal recuerda que, aunque la participación del carbón en la generación eléctrica ha aumentado un 43% este año por la baja producción de las tecnologías renovables, más de un 85% del que se utiliza para generación eléctrica es de importación, frente a un 15% nacional.

La versión Goldman Sachs (II)

En un país en el que la electricidad ha caído en las fauces de la política politizada, puede sorprender a primera vista la consideración de Goldman Sachs de que la actividad eléctrica debe ser valorada de forma económico-financiera por los accionistas que son, en realidad, los propietarios de las empresas. Ante una posición tan pueril es preciso subrayar que estamos en un mundo globalizado dónde los flujos de capital se mueven de forma muy rápida y no se someten a los intereses partidistas o electorales de un país en concreto.

Eso exige una política definida en materia económica, energética, medioambiental y fiscal; habilidades de negociación, disponer de una regulación predecible, de seguridad jurídica y estabilidad regulatoria. Se comprende que quienes ejercen responsabilidades de Gobierno conocen e incorporan esas reglas del juego, lo asumen dentro de su comportamiento como una coordenada a tener en cuenta y, si la traspasan, se entiende que es de forma deliberada.

Es un informerevelador” del modelo de política que el Ejecutivo plantea para el sector eléctrico y de la visión inversora de sus responsables, orientada a la reducción de precios sin revisar la composición de la tarifa, sin limpiarla de componentes (cuña gubernamental) que aumentan sus costes y que deberían ser tratados de otra forma. En consecuencia, sigue existiendo un modelo en que se habilitan mecanismos discrecionales y de dudoso encaje en la tarifa que presionan al alza los precios y que se combinan con la pretensión electoralista de una tarifa forzada a la baja fruto de una politización de la electricidad que no cesa.

¿Cómo se resuelve este sudoku en esta revisión regulatoria prevista? Rebajando los componentes regulados vía exprimir sus resquicios legales, lo que seguramente nos atrapará en un nuevo proceso de judicialización, e incorporando nueva potencia renovable para aumentar la oferta de generación y bajar el componente de los precios de mercado de generación, tratando de cumplir al límite los compromisos con Europa del 20-20-20 antes que con un proceso planificado de descarbonización o de transición energética.

Una vez descontado el efecto del anuncio y de su instrumentación legal sobre las compañías y los accionistas de las empresas, queda el propio Ministerio de Energía. Seguramente perciban el origen y las causas de esta tormenta con un cierto grado de indiferencia, más allá de las lecturas resultantes sobre la Administración energética española y de que se trate de una fórmula adicional para instigar a las compañías hacia la desinversión y la internacionalización empresarial. O a lo mejor no es así, siquiera. Lo que si nos confirma es que, menos en el sector energético, las empresas e inversores internacionales son una coartada necesaria para la argumentación y comunicación política.

Energía seguirá manteniendo la rentabilidad ligada al bono para retribuir a las renovables y recuerda que nada cambiará hasta 2019

EFE / Europa Press.- El Ministerio de Energía no tiene intención de cambiar la fórmula para calcular la rentabilidad razonable que reciben los dueños de instalaciones renovables, según indicaron fuentes de este departamento tras conocerse un informe de Goldman Sachs sobre las caídas en la rentabilidad obtenida de las compañías en España ante la revisión que se hará para el siguiente periodo regulatorio, que comenzará a aplicarse en 2020.

Energía explicó que en la reunión con el secretario de Estado de Energía, Daniel Navia, se volvió a exponer ante representantes del banco de inversión la postura del Gobierno y se insistió en que la intención del Ejecutivo es no cambiar la fórmula que se utiliza para calcular la rentabilidad que perciben los propietarios de esas instalaciones y aunque es previsible que se revise a la baja, «aún es pronto para saber qué puede pasar». La fórmula, que se fijo en el año 2013 y que toca revisar a mediados de 2019 para su aplicación en el siguiente periodo regulatorio desde 2020, es la suma del rendimiento del bono español a 10 años y un diferencial de 300 puntos básicos.

En la actualidad la rentabilidad razonable, fijada en 2013 con esa fórmula para un periodo de 6 años, es del 7,4%, porcentaje que se vería rebajado por la evolución del bono español, aunque fuentes del Ministerio han dicho que habrá que esperar a mediados de 2019, cuando se haga la revisión. Han asegurado que el compromiso del Gobierno es no mover la fórmula que se aplica para la retribución de las renovables y han recordado que en junio pasado el ministro de Energía, Álvaro Nadal, ya manifestó en el Congreso que es partidario de que la retribución siga ligada al bono del Estado para poder rebajar entre un 5% y un 10% el coste de la factura de la luz.

El descenso en este tiempo del interés del bono y el no proceder a un cambio normativo para aumentar el actual diferencial llevaría a rebajar esa rentabilidad para las plantas renovables para el periodo 2020-2025. Por ello, fuentes de Energía indicaron que quedan dos años para revisar la retribución de las renovables, y hay factores de muy distinta índole que pueden afectar al rendimiento del bono del Estado a 10 años, como por ejemplo el Brexit o la evolución de la prima de riesgo. Eso sí, Nadal subrayó en el Congreso que la «prioridad número uno» del Gobierno es que las empresas y los consumidores «paguen lo menos posible» en la tarifa de la luz.

El informe de Goldman Sachs

El informe de Goldman Sachs indica que, tras las conversaciones que mantuvieron con representantes del Gobierno, son más «cautelosos» a la hora de invertir en compañías de energía en España y Portugal, recomendando no comprar ningún valor, al apreciar factores que pueden reducir significativamente sus ganancias en el periodo 2020-2025 y que no están siendo descontados por el mercado. Según expone, las rentabilidades de la distribución eléctrica pueden caer en el mercado ibérico cerca de un 40% en el periodo 2020-2025, que la próxima revisión regulatoria podría reducir en un tercio los ingresos de las renovables y que su incorporación tras las subastas ejercerá una presión a la baja sobre los precios a partir de finales de 2019 y 2020.

Por eso, reduce en promedio la previsión de beneficio de esas compañías en un 8% para el periodo 2020-2025, por lo que no recomienda comprar valores de eléctricas en el mercado ibérico, y dice que aprecia un riesgo a la baja de alrededor de un 15% en las acciones de la portuguesa EDP y Endesa sobre los niveles actuales. Fuentes del sector eléctrico manifestaron su descontento y lamentaron que los mensajes lanzados por el Gobierno en encuentros del tipo de Goldman Sachs pueden «desincentivar la inversión» en el sector eléctrico español y llamaron a la responsabilidad del Gobierno para promover la llegada de inversores a un sector estratégico en lugar de «espantarlos» así como adoptando medidas que mejoren la competitividad.

Por su parte, la agencia de calificación crediticia Moody’s ha alertado de que las dos subastas de renovables que han tenido lugar en España bajarán los precios del sistema, pero aumentarán los costes y la exposición al riesgo de las empresas adjudicatarias. Entre las subastas han adjudicado 8.037 MW de nueva potencia renovable distribuidos entre 3.910 MW fotovoltaicos, 4.107 MW eólicos y 20 MW correspondientes a otras tecnologías. Moody’s estima que estas subastas de renovables han reducido los costes de la electricidad y han transferido el riesgo que soportaban el sistema y los consumidores a las comercializadoras, lo cual es «positivo» para la viabilidad del sistema», pero «negativo» para las empresas adjudicatarias de los proyectos.

Goldman Sachs pone números al terremoto regulatorio sobre el sistema eléctrico de España que el Gobierno piensa desencadenar en 2019

Javier Angulo.- Una reunión con responsables del Ministerio de Energía y el consecuente informe de Goldman Sachs sobre las conclusiones. Así caduca el mantra enarbolado por la Administración Rajoy de que las medidas puestas en marcha por el binomio Soria-Nadal servían para aportar estabilidad al sistema eléctrico. Se avecinan nuevos recortes retributivos en las actividades reguladas y la recomendación de la entidad financiera estadounidense es clara: invertir en las utilities españolas no es buen negocio: caerán un 8% de media hasta 2025.

A nivel bursátil, Goldman Sachs considera que el mercado no está descontando el impacto sobre las cuentas de las compañías energéticas que puede producirse a raíz de la revisión regulatoria que se producirá a finales de 2019, al finalizar el primer periodo regulatorio de 6 años establecido por el Gobierno en la denominada como reforma energética, con los consiguientes efectos sobre los ingresos percibidos por redes y renovables. Un nuevo ajuste contable que viene a sumarse a la reforma de 2013, con un impacto aproximado de 10.000 millones de euros para enjugar el déficit tarifario.

Tal y como ha manifestado el ministro de Energía, Álvaro Nadal, y pudo corroborar ante los enviados de Goldman Sachs el secretario de Estado de Energía, Daniel Navia, la intención del Gobierno es aplicar en su literalidad la Ley del Sector Eléctrico de 2013 y mantener la rentabilidad razonable, establecida para las actividades reguladas, ligada al rendimiento del bono español a 10 años más 300 puntos básicos, eso sí, calculándose en cada momento de revisión retributiva y desde las perspectivas de las instalaciones tipo bien gestionadas. En consecuencia, el recorte retributivo que el Gobierno ejecutará para las redes de transporte y distribución de electricidad en el período regulatorio 2020-2025 puede alcanzar un recorte de la rentabilidad de un 40%. Igualmente, y por el mismo procedimiento, salen mal paradas las renovables, con un nuevo ajuste de hasta un tercio en su rentabilidad.

En este sentido, Goldman Sachs aconseja ser cautelosos con las compañías energéticas españolas y cambia directamente su consejo sobre Acciona, donde ahora mantiene una posición neutral y en la que hasta ahora venía recomendando entrar a los inversores. Más tajante es su cambio de postura con Red Eléctrica de España. La compañía presidida por José Folgado puede ser una de las grandes damnificadas de los nuevos recortes al depender en gran medida de su retribución como operador del transporte, tras sortear las reformas anteriores. Por ello Goldman Sachs aconseja vender las participaciones en la compañía. En el resto de utilities, mantiene una postura neutral respecto a Enagás e Iberdrola, mientras que aconseja abandonar posiciones en la compañía lusa EDP, en Endesa y Gas Natural Fenosa.

Precisamente la principal perjudicada en Bolsa desde que se conoció el informe de Goldman Sachs es Gas Natural Fenosa, con una caída acumulada en las dos últimas sesiones del 3,08%, similar al 3,07% perdido por Red Eléctrica. Por su parte Acciona ha caído un 2,75% en las dos últimas sesiones, acercándose a perder los 70 euros por acción, mientras que Endesa perdió un 1,78%, poniendo en peligro los 20 euros pero en unos números que no llaman especialmente la atención al situarse en cifras muy similares a las de Iberdrola, que con un negocio más internacional también cayó un 1,76%.

Otro de los aspectos señalados por Goldman Sachs en su informe es que la nueva potencia renovable subastada durante este año, que debería comenzar a operar antes de 2020 para cumplir los objetivos europeos, supondrá introducir una mayor presión a la baja sobre el precio del mercado mayorista de electricidad (pool) por el aluvión de megavatios de energía eólica y fotovoltaica. Por ello, ante estas perspectivas, Goldman Sachs subraya que no hace “ninguna recomendación de comprar en la región” y, al contrario, recomienda vender, principalmente EDP y Endesa, donde calcula un riesgo de caída de rentabilidad de hasta el 15%.  De hecho, la caída media de rentabilidad en las empresas del sector que se anticipa es del 8%, dependiendo el mayor o menor impacto de su exposición al mercado español y su participación en las actividades afectadas por esta revisión retributiva que prepara el Gobierno.

Calidad Pascual probará en la isla de Mallorca la posibilidad de electrificar su flota comercial de la mano de Endesa

EFE.- Mallorca ha sido el lugar elegido para un proyecto piloto demostrativo de movilidad eléctrica de la empresa Calidad Pascual, que prevé electrificar toda su flota comercial en España. El anuncio lo realizó el coordinador de Movilidad Sostenible de la empresa, José Carlos Espeso, en el II Congreso de Movilidad y Turismo Sostenible, según indicó Endesa, que hará posible el plan piloto. El plan empezará a partir del 16 de octubre.

Endesa tiene desplegada en Mallorca una red de 6 puntos de carga rápida situados estratégicamente a lo largo de la isla que permite recorrerla toda en coche eléctrico 100%, sin temor a quedarse sin batería. Endesa además instalará en la delegación comercial de Calidad Pascual en Mallorca puntos de carga semirápida. «Con este piloto se quiere testear si la movilidad eléctrica a día de hoy es una opción real que garantice la movilidad comercial a las compañías», apuntó Espeso, que ha añadido que la empresa busca hacer «un demostrativo que sirva como punto de inflexión» en España a la hora de la toma de decisiones por parte de las compañías.