Los hogares españoles tienen un potencial de ahorro energético de 1.407 millones, según Gas Natural

Este barómetro, que mide los hábitos de consumo de energía en España, experimentó un crecimiento del 8,66% respecto a 2004, primer año en que fue elaborado, y supuso un ahorro de 222 millones de euros al año. En conceto, la VII edición de este Índice de Eficiencia Energética se situó en 2011 en una puntuación de 6,65, con lo que se aprecia una ligera mejora respecto a 2010, cuando el resultado obtenido fue de 6,59. Además, este dato supone confirma la evolución positiva de nuestro país tras el estancamiento de 2008 (6,50) y 2009 (6,49).

Este avance parece indicar que se está extendiendo la cultura mediaoambientalmente sostenible en los hogares españoles, algo que se traduce en hábitos reales de mayor control, mantenimiento y equipamiento energético.

La mejora de este balance nacional fue extensible a la mayoría de comunidades autónomas, siendo Baleares, Castilla-La Mancha y País Vasco las únicas que descendieron en su nota respecto al año anterior.

Otra de las conclusiones de este estudio demuestra que los hogares catalanes resultaron ser los más eficientes (6,82), seguidos por los madrileños (6,78) y los aragoneses (6,74), mientras que los canarios obtuvieron el índice más bajo (6,17).

Asimismo, se observa que siete de las comunidades autónomas superan o igualan la media nacional. Además de las tres citadas anteriormente, están Andalucía y Comunidad Valenciana con un 6,69, Cantabria con un 6,68 y Extremadura que, con un 6,65, iguala la media española.

Por su parte, los resultados del resto de comunidades son Murcia con un 6,64, Asturias y Baleares con un 6,56, Castilla y León con un 6,54, Navarra con un 6,53, Galicia con un 6,49, País Vasco con un 6,46, La Rioja con un 6,44 y Castilla-La Mancha con un 6,42.

La muestra también resalta que los hogares en los que el responsable de las tareas domésticas es un hombre (6,77) son ligeramente más eficientes que el de una mujer (6,61). Además, es claro que el índice aumenta a medida que el municipio y el nivel socioeconómico del hogar es mayor.

Ramón Silva, director de Eficiencia Energética de Gas Natural Fenosa, aseguró que los hábitos eficientes más extendidos en los hogares españoles son «despejar las ranuras de electrodomésticos y radiadores, no introducir comida caliente en el frigorífico, usar la lavadora y el lavavajillas en carga completa, lavar en frío, apagar la calefacción cuando no es necesaria y revisar las luces y equipos antes de acostarse».

Sin embargo, Silva afirmó que hay otros aspectos que tienen gran margen de mejora, como pueden ser «el desconocimiento del nivel de consumo de los electrodomésticos, la inadecuada localización de la caldera o no poseer diferentes interruptores para encender las luces de forma independiente». Todo ello mejoraría mediante un esfuerzo de concienciación, formación y comunicación continua.

Asimismo, entre las medidas de eficiencia energética llevadas a cabo en los últimos años, se percibe un incremento acusado del uso de Lámparas de Bajo Consumo (LBC) desde 2009, debido principalmente al reparto gratuito de estas bombillas y la prohibición en su fabricación de las bombillas incandescentes. A esto hay que añadir la obligatoriedad de realizar la revisión anual de las calderas y la mejora del equipamiento en los hogares.

Los resultados de este estudio se obtuvieron a partir de las 3.800 encuestas, realizadas entre noviembre y diciembre de 2011, y se basaron en cuatro aspectos diferentes: cultura energética, mantenimiento, control energético y equipamiento.