La Comisión Europea permite a Portugal conceder ayudas de 150 y 99 millones a Repsol y La Seda

La Comisión Europea (CE) autorizó al Gobierno portugués a conceder sendas ayudas de 150 y 99 millones de euros a Repsol y al grupo español La Seda para la puesta en marcha de tres plantas químicas en la región de Alentejo (centro-este).

La comisaria europea de Competencia, Neelie Kroes, señaló en un comunicado que la instalación de estas industrias contribuirá al desarrollo regional y a la creación de empleo en Portugal sin distorsionar excesivamente la competencia.

Bruselas, que debe supervisar la concesión de ayudas de Estado en los Veintisiete, considera que estas subvenciones cumplen todos los requisitos comunitarios, tanto por la posición de las empresas en el mercado como por las cantidades aprobadas.

El Ejecutivo luso concederá una ayuda de 150 millones de euros en forma de reducciones fiscales y préstamos a la empresa Repsol Polímeros, filial de Repsol, para la instalación de dos plantas que producirán polipropileno y polietilieno lineal, dos tipos de plástico.

La inversión total del proyecto es de unos 750 millones de euros, y se espera que permita la creación de unos 512 nuevos puestos de trabajo en Alentejo, región que por su situación económica es susceptible de recibir ayudas comunitarias para el desarrollo de algunos sectores.

Por su parte, la empresa española Artensa, propiedad del grupo La Seda, recibirá una ayuda de 99,29 millones de euros para la construcción de una nueva planta en Sines (Alentejo), que producirá Acido Tereftálico Puro (PTA), materia prima básica para la producción de poliésteres. El proyecto, con un coste total de unos 360 millones de euros, creará 150 empleos directos y 200 indirectos.