El PP rechaza que los contadores eléctricos se instalen dentro de los hogares porque tienen que ser accesibles para una lectura fácil

Así lo defendió la diputada del Partido Popular (PP) Macarena Montesinos en la Comisión de Sanidad y Servicios Sociales del Congreso de los Diputados, durante el debate de una proposición no de ley del PSOE en la que se pedía al Gobierno que permitiera esa posibilidad para facilitar el acceso de los usuarios a sus datos en aras a hacer un consumo más sostenible y eficiente.

«El tamaño del nuevo contador no varía, por lo que se puede instalar en el mismo lugar que los actuales. Además, como norma general los contadores deben ser accesibles no sólo para permitir una lectura fácil, sino también para garantizar la seguridad de la instalación y para facilitar su mantenimiento. Si se accediese a situarlos dentro de los domicilios los propietarios podrían impedir el acceso de los técnicos e inspectores de la compañía, que no son autoridad pública», explicó la diputada.

A renglón seguido, subrayó que según el Reglamento Electrónico de Baja Tensión cuando existen más de 16 suministros en un mismo inmueble los contadores deben estar «centralizados» en un «recinto especial y con condiciones específicas» en materias como la prevención antiincendios.

Es una mejora en defensa del consumidor

Sin embargo, la portavoz socialista de Consumo, Pilar Grande, estimó que ésta es una gran oportunidad para «mejorar las políticas en defensa de los consumidores», aprovechando que los nuevos contadores inteligentes pueden dar a los ciudadanos la posibilidad de «promover la sostenibilidad en el consumo» y, así, «fomentar la eficiencia y el ahorro, y garantizar el acceso inmediato a la información y la gestión a distancia».

«Para que esto sea posible la normativa vigente debería permitir que los consumidores que lo deseen puedan instalar los equipos en sus domicilios, pero en la mayor parte de los casos se están sustituyendo en el mismo lugar donde se encuentran ahora, generalmente en zonas comunes de difícil acceso que muchas veces no sabemos ni dónde están», lamentó.

Y ello a pesar de que las eléctricas sí pueden acceder telemáticamente a los datos, por lo que no les hace falta enviar a un técnico a por la lectura del consumo. Esto, añadió Grandes, les produce un doble beneficio, ya que además de cobrar precios más altos por los alquileres de los nuevos contadores se están ahorrando costes que antes sí tenían.

Además, la portavoz socialista consideró que con esta simple medida se «resolverían de inmediato problemas denuncias recurrentemente» como las refacturaciones por «supuesto fraude en la manipulación del contador», que sitúan al consumidor en una «gran desprotección» ya que debe demostrar su falta de responsabilidad, frente a una empresa que «no debe acreditar el fraude sino que únicamente ha de presentar una foto del contador», imagen que se puede tomar sin que el titular esté presente y sin que figure el número de identificación del contador.

«Por eso también queremos que se exija a los suministradores más diligencia en el control de posibles manipulaciones de contadores, adaptando las consecuencias económicas a la posibilidad que ofrecen los nuevos contadores de detectar inmediatamente el fraude, evitando la refacturación de un año según los consumos estimados; y que se modifique la normativa para que la verificación de fraudes o manipulaciones deba realizarse, cuando sea posible, en presencia del titular del contrato», añadió la diputada.

Sin embargo, Montesinos recordó que el Ministerio de Industria está tramitando un proyecto de real decreto para regular las actividades de comercialización y las condiciones de contratación y suministro de energía eléctrica, en el que «se aborda el fraude y la manipulación de los equipos», con lo que las críticas sobre esta materia «quedarán cubiertas» garantizando «el control del fraude en ambas direcciones».

Además, la diputada del PP recordó que la legislación que obliga a sustituir los contadores eléctricos data de 2007, cuando el PSOE aún estaba en el Gobierno, por lo que los socialistas podían haber incluido en la normativa todas estas crítica que ahora plantean.

Finalmente, la diputada de CiU Lourdes Ciuró aplaudió la iniciativa, que vio «necesaria» tanto para «optimizar los beneficios» del uso de las nuevas tecnologías como para «ayudar a las familias a adecuar su nivel de consumo a su realidad económica y fomentar el consumo responsable y sostenible».

Igualmente, la nacionalista catalana consideró que hace falta resolver la «barbaridad de la inversión de la prueba» que se da con la manipulación de los contadores, una materia «muy sensible» y en la que se debe incrementar la protección de los consumidores. «Creo que el Gobierno no tiene otra solución que intentar encaminar los pasos de este reemplazo de contadores en este sentido», concluyó.