Sol Solá es nombrada nueva presidenta de Greenpeace España

La asamblea ordinaria se celebró el pasado fin de semana, donde se trataron y debatieron las líneas estratégicas de la organización en el marco social, económico y político actual, especialmente en el contexto europeo y nacional.

Además de la renovación de la presidencia, se aprobó el resto de cargos de la junta directiva que estará integrada por Luigi Ceccaroni (trustee y vicepresidente 1ª), Xabier Barón (vicepresidente 2ª), Pedro Senso (administrador general), Nacho Benítez, Oscar Cabrero y Daniel Fernández (vocales).

Solá agradeció «el excelente trabajo realizado por la presidenta saliente Sonia Rubio y la confianza que ahora se deposita en la nueva Junta» y transmitió el deseo de «continuar trabajando con la misma ilusión y rigor en 2015».

Asimismo, el Consejo de Greenpeace valoró de forma positiva el «buen trabajo desarrollado, en un año en el que se consolidó la estabilidad de la organización, consiguiendo superar la cifra de 100.000 socios».

Además del cambio climático y el modelo energético, el medio ambiente en España en un contexto electoral, y el proyecto internacional para conseguir un santuario Ártico, continuarán siendo prioridades para Greenpeace. Igualmente, los activistas continuarán trabajando en las campañas contra la Ley Mordaza, por la protección de los bosques, los océanos y la agricultura sostenible.

Sol Solá es natural de Barcelona y socia de Greenpeace desde 1995. Voluntaria y consejera, enfocada en la comunicación, la formación y la gestión de equipos, está especialmente sensibilizada con el respeto por la biodiversidad y el vínculo entre defensa del medio ambiente y los derechos humanos ante los conflictos armados por los recursos energéticos, el agua y los alimentos.

Con formación en derecho, arqueología y comercio, desarrolló la mayor parte de su carrera profesional en comercio internacional y desde hace más de once años trabaja en la distribución internacional de derechos fotográficos y aplicaciones web y de gestión para stock fotográfico.

WWF pide la ampliación del nuevo LIC para incluir aguas próximas a las prospecciones en Canarias

La organización ecologista resaltó las carencias detectadas en la delimitación del área, unas carencias que ya señaló durante el período de alegaciones. Entre ellas, destacó la exclusión de la zona protegida de determinados espacios de gran valor ambiental en el litoral de ambas islas, donde proliferan sebadales y otros tipos de hábitat vulnerables, en declive «y de gran importancia por su alta concentración en biodiversidad».

Además, WWF señaló que la propuesta aprobada tampoco contempla la ampliación aguas afuera del límite oriental del LIC en base a la existencia de «datos que avalan la necesidad de extender el margen exterior hacia el oriente, tomando como referencia la propuesta de área protegida en la que WWF basa su propuesta de Santuario de Ballenas«, añadió la organización ecologista.

Del mismo modo, WWF señaló que recurrirá a la Comisión Europea para solicitar que se amplíen los límites del LIC en base a la adopción de criterios científicos, como exige la Directiva europea de Hábitats, y no políticos o económicos, así como que declare estas aguas como Santuario internacional de ballenas y delfines para garantizar una gestión eficaz que preserve en buen estado de conservación estos animales y su hábitat.

La tercera fase del estudio sobre la biodiversidad de los embalses que gestiona Endesa está ya en marcha

Según informó Endesa, en este estudio se analiza, mediante el tratamiento de datos obtenidos en campo combinados con información geográfica de fuentes oficiales públicas, la funcionalidad de los embalses como zonas húmedas en razón a su morfología, localización, gestión y especies que acogen.

Asimismo, añadió que desde 2012, se vienen muestreando en los meses de verano un total de 27 embalses por año, repartidos entre las comunidades autónomas de Andalucía, Extremadura, Castilla La Mancha, Cataluña y Galicia.

«Con los embalses estudiados durante el pasado verano se ha alcanzado la cifra de 81 masas de agua muestreadas, la totalidad de los embalses que gestiona Endesa en España», precisó.

El conocer con exactitud el papel ecológico que juegan estos embalses en el entorno en que se encuentran permitirá, según explicó Endesa, «contar con una herramienta más a la hora de realizar una gestión de los recursos hídricos compatible con la conservación de la biodiversidad, aportando nuevos valores y criterios».

Finalmente, recordó que en España existen más de 1.200 grandes presas. «El hecho de que en la Península Ibérica no haya auténticos lagos naturales –solo Sanabria, Banyoles y más recientemente el lago artificial de As Pontes, son masas de agua que cumplirían con los condicionantes para ser considerados lagos– convierte a los embalses en lo más cercano a los ecosistemas lacustres en nuestro territorio«, concluyó.

Medio Ambiente propone a Bruselas proteger las aguas a 16 kilómetros de los sondeos de Repsol en Canarias

Así consta en una orden ministerial publicada este miércoles en el Boletín Oficial del Estado (BOE), casi seis meses después de que Medio Ambiente iniciara el periodo de participación pública de esta propuesta de LIC en la Red Natura 2000. Repsol inició el sondeo denominado Sandía en noviembre, a 16,6 kilómetros del espacio marino propuesto para LIC, y los trabajos acabaron dos meses después, cuando la compañía confirmó la existencia de petróleo y gas «en capas muy delgadas no explotables«.

La propuesta del Ministerio de Medio Ambiente aporta información sobre los límites geográficos, superficie, cercana a 14.300 kilómetros cuadrados, y los valores por los que se propone este espacio marino e incluye un régimen de protección preventiva hasta que este espacio sea designado por la Comisión Europea como LIC. Si se declara como LIC, España contaría con un 8% de sus mares protegidos, con lo que así se acercaría al objetivo marcado por el Convenio sobre Diversidad Biológica de proteger al menos un 10% de sus zonas marinas para 2020.

García Tejerina sigue esperando la confirmación de la ONU sobre el cumplimiento del Protocolo de Kioto pero afirma estar «tranquila»

«Tenemos la tranquilidad de que España cumplirá pero seguimos a la espera de la confirmación», señaló García Tejerina. La responsable de la política de cambio climático confirmó que, inicialmente, esta comunicación estaba anunciada para el pasado mes de septiembre y cree que el motivo del retraso es que los técnicos de la ONU están evaluando «a muchos países», por lo que «tienen que estar desbordados«.

En este sentido, destacó que 2015 es un año «trascendental y de enorme importancia» porque España quiere llegar a Paris, a la Cumbre del Clima de diciembre, a contribuir a alcanzar «un acuerdo como no ha habido nunca». García Tejerina indicó que con el anterior Gobierno se invirtieron 800 millones de euros en comprar de derechos de emisión de CO2 en el extranjero porque a nivel nacional «no se incentivó ningún cambio de modelo económico«.

En este contexto, apuntó que cuando el actual Ejecutivo asumió el Ministerio, quienes les pasaron «el testigo» en este departamento les indicaron que necesitarían destinar otros 800 millones de euros más para cumplir con el compromiso de Kioto. La ministra defendió que además del montante económico, lo más importante es «el cambio de filosofía» porque en la «búsqueda de la eficiencia de los recursos públicos» lo que se hizo fue negociar «bien», de modo que los 800 millones iniciales se han cubierto con 40 millones.

Asimismo, añadió que tras estos 40 millones, que se necesitaron para cumplir Kioto en el periodo 2008-2012, «no se ha vuelto a gastar nada» en 2013 y 2014. En este sentido, subrayó que en este periodo el Gobierno destinó 96 millones de euros a financiar proyectos de reducción de emisiones en España, que generan empleo, actividad económica y fomentan la inversión en el país. En materia presupuestaria ha apuntado que por primera vez en 2015 los Presupuestos Generales del Estado contemplan una partida de 12 millones de euros para adaptación al cambio climático, con proyectos que, en su mayoría van destinados a defender el litoral.

Ecologistas pedirán a los políticos que concreten sus prioridades medioambientales en el Debate sobre el Estado de la Nación

El director ejecutivo de Greenpeace, Mario Rodríguez, reivindicó que los representantes de los partidos concreten propuestas medioambientales. «Sería un indicador de que realmente se toman en serio el medio ambiente; esto no es lo mismo que un mitin, tiene mucho más valor», indicó Rodríguez, antes de destacar que los líderes deben clarificar en el Debate sobre el Estado de la Nación si las cuestiones medioambientales están en sus agendas y por qué modelo energético apuestan.

«Me gustaría que la protección del medio ambiente y el cambio del modelo productivo, para acercarlo hacia una economía baja en carbono, sea una prioridad para los grandes líderes. Me gustaría saber qué piensan de las prospecciones petrolíferas, del fracking, de que la gente no tenga para pagar la luz ni la calefacción, de las energías renovables o si apuestan por un nuevo modelo energético que tenga en cuenta el cambio climático y no se base en el ladrillo», indicó.

Por otro lado, Paco Segura, coordinador estatal de Ecologistas en Acción, indicó que el cambio climático debe ser «una prioridad» en el Debate sobre el Estado de la Nación, puesto que el próximo diciembre tendrá lugar una cumbre sobre el clima en París (Francia) de la que debería consensuarse un nuevo acuerdo mundial que sustituya al Protocolo de Kioto. Sin embargo, Segura desconfió de que el Debate sobre el Estado de la Nación concluya con la aprobación de alguna propuesta relacionada con el medio ambiente.

ONG ecologistas reclamaron a los europarlamentarios españoles limitar más el consumo de agrocombustibles

En una misiva remitida a los europarlamentarios, los grupos ecologistas de desarrollo y rurales consideran que la reforma ofrece una oportunidad para «mitigar los graves impactos ambientales y sociales generados por la extensión del uso de agrocombustibles (biocarburantes producidos con materias primas de origen agrario), como el incremento en la emisión de gases de efecto invernadero (GEI), la deforestación y pérdida de biodiversidad, el desplazamiento de comunidades de sus territorios, o las presiones alcistas en el precio de alimentos básicos». Además, añaden que la reforma también supone una oportunidad para orientar la política europea de transporte hacia una mayor sostenibilidad.

En este sentido, en la carta recuerdan que en 2012 comenzó el proceso de revisión de las dos directivas que promueven la producción y uso de agrocombustibles en la Unión Europea, que se corresponden con la Directiva de Energías Renovables y la Directiva de Calidad de Combustibles. Así, la primera fase del proceso de revisión terminó en diciembre de 2014 con dos posiciones divergentes entre el Parlamento y el Consejo Europeo, según las organizaciones ecologistas.

De este modo, aseguran que el Parlamento optó por medidas «considerablemente más ambiciosas» que las del Consejo, tanto para limitar el uso de cultivos alimentarios o energéticos para agrocombustibles, como para contabilizar las significativas emisiones GEI resultantes de los cambios indirectos en el uso de suelos(ILUC). Sin embargo, añaden que el Consejo priorizó la protección de las inversiones realizadas para la fabricación de agrocombustibles e incrementó el límite en el uso de agrocombustibles de primera generación hasta el 7% y eliminó la contabilización de ILUC.

«Otro elemento preocupante es que tanto Parlamento como Consejo adoptaron diferentes medidas para favorecer el desarrollo de los llamados biocarburantes avanzados, olvidándose de aquellas medidas imprescindibles para garantizar su sostenibilidad tanto social como ambiental», añaden los ecologistas. Por ello, para las organizaciones «la posición de la Comisión de Medio Ambiente va a ser clave en el momento actual de las negociaciones». Asimismo, destacan que el informe del ponente de la Comisión ENVI, Mr Nils Torvalds, corrige sustancialmente la posición del Consejo recuperando la senda marcada por el Parlamento. No obstante, piden a la Comisión Europea que vaya más lejos «para garantizar una revisión que cumpla con el objetivo inicial: un transporte más sostenible en Europa«.

Citi invertirá 90.000 millones de euros en diez años para la lucha contra el cambio climático

La entidad financiera trata de afianzar su posición respecto a la eficiencia energética y energía renovable facilitando a sus clientes la identificación de oportunidades para la financiación de proyectos que minimizan la emisión de gases de efecto invernadero (GEI), así como la búsqueda en la eficiencia de los recursos naturales.

Se trata de financiar actividades que permitan a las ciudades adaptarse a los impactos del cambio climático y directamente financiar mejoras de infraestructura que aumenten el acceso al agua potable y la gestión de residuos de apoyo, mientras que también se apoya la vivienda asequible para los clientes, incluso en comunidades de bajos y moderados ingresos o el transporte sostenible.

El banco norteamericano ya se comprometió en 2007 su objetivo de dedicar 45.000 millones de euros a este mismo ámbito, objetivo que cumplió en 2013, tres años antes de lo previsto.

«Citi ha demostrado su profundo compromiso no sólo con tomar en cuenta los aspectos ambientales, sino también con la financiación de proyectos que permitan un crecimiento sostenible», afirmó el consejero delegado de la entidad, Michael Corbat.

Por otra parte, también se anunciaron los objetivos del banco para 2020 y 2050 en reducción de emisiones de gases, consumo de energía, agua y generación de residuos, entre otras materias.

Así, se prevé la reducción del 35% en las emisiones de gases de efecto invernadero, 30% de reducciones en la energía y el uso del agua y la reducción del 60% en los residuos, todos con una línea de base 2005.

El ministro de Industria afirma que «lo sostenible no puede ser insostenible financieramente»

Soria aplaudió las actuaciones que se están realizando en materia medioambiental en nuestro país y no duda de que «España está en la ruta adecuada para alcanzar los objetivos medioambientales fijados en la Cumbre de Lima para 2020» aunque reconoció que el cumplimiento de estos requisitos «ha limitado la competitividad industrial«. Para solucionar este problema, el ministro aseguró que España tiene que convencer a otros países, como Rusia, Estados Unidos, China o la India, de que «el esfuerzo medioambiental real tiene que ser global y no solo competencia de Europa».

Para Europa, señaló el ministro, «es muy importante a nivel energético la interconexión y nuestro país la tiene que llevar a cabo con la colaboración de Francia». Desde 1996 solo tenemos un 1,5% de energía eléctrica interconectada, pero «hasta pasado mañana, porque con el acuerdo al que han llegado el primer ministro francés Manuel Valls y el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, se va a doblar el porcentaje eléctrico». Además, anunció que se quiere poner en marcha el Proyecto de Vizcaya, que aumentará un 5% más esa conexión de energía.

Preguntado por el uso de la técnica de la fractura hidráulica (fracking ), a pesar de los documentos elaborados por organizaciones ecologistas y del Defensor del Pueblo, que indican que no hay certezas sobre que no se ocasionen daños sobre el medio ambiente, el ministro sentenció que tiene plena confianza en los informes del Ministerio y de sus funcionarios «que actúan en base a su profesionalidad».

García Tejerina dice que los países presentarán pronto sus compromisos en la lucha contra el cambio climático

La ministra explicó que así se podrá valorar antes de la Conferencia de las Partes de París si la suma de los compromisos de los 196 países son suficientes para evitar que el aumento global de la temperatura sobrepase el incremento de 2 grados centígrados respecto a los niveles preindustriales. En su comparecencia ante la Comisión de Cambio Climático del Congreso de los Diputados, Tejerina explicó los logros de la conferencia de Lima y las negociaciones que se celebraron este mes en Ginebra (Suiza) de cara a lograr al final de año un acuerdo multilateral para frenar el cambio climático.

En concreto, Tejerina señaló que los avances de Perú quedaron reflejados en el Llamamiento de Lima para la acción climática , que incluye decisiones técnicas y objetivos como la movilización de recursos del Fondo Verde para el Clima, al que España contribuye con 149 millones de dólares de los 10.200 millones de dólares comprometidos a nivel mundial. En este sentido, destacó que por primera vez hay donantes entre los países no desarrollados como Mongolia, Chile, México, Perú o Corea del Sur.

Además, Tejerina indicó que el documento firmado en Lima establece un calendario de trabajo para adoptar un nuevo régimen internacional contra el cambio climático; sienta las bases para aumentar la mitigación entre 2015 y 2020; y señala que los países desarrollados y otras organizaciones tendrán que proporcionar recursos para facilitar la preparación de las contribuciones de los países en desarrollo. Asimismo explicó que la Unión Europea y la mayoría de los países defienden que las contribuciones de los países deben centrarse en la reducción de emisiones, mientras que otros encabezados por Arabia Saudí, China, Argentina, Malasia o México defienden otros aspectos como adaptación o financiación.

En definitiva, Tejerina explicó que el acuerdo final de Lima garantiza que las contribuciones incluyan una componente de mitigación, mientras que la adaptación se puede presentar de manera voluntaria, así como la financiación ha quedado fuera del ámbito de estas contribuciones. «Los países desarrollados buscan asegurar que el Acuerdo de París sea duradero y refleje que las circunstancias de los países cambian a largo plazo», apuntó. Además, aseguró que el Gobierno está a la espera de que la ONU se pronuncie respecto al cumplimiento del Protocolo de Kioto u adelantado que «quien lo tiene que decir es Naciones Unidas, que se pronunciará en breve y dirá que España ha cumplido«.

Por su parte, el diputado de Amaiur, Javier Errekondo denunció que no se puede estar ocultando la realidad de las emisiones y habló de emisiones reales y virtuales, en alusión a las que se han emitido y a las que se han compensado mediante la compra de derechos de emisión, a la par que reclamó políticas «reales» en materia de agricultura, como fomentar un menor uso de pesticidas, y otras medidas a todos los niveles.

El diputado de UPyD, Toni Cantó, acusó al Gobierno de hacer «propaganda» sobre su política medioambiental y de cambio climático mientras que recordó «las palabras del primo de Rajoy» que, para él denotan el «pitorreo» con que se toma el Ejecutivo esta cuestión. Así, reclamó una actitud más valiente y proactiva por parte del Ejecutivo en las negociaciones internacionales y una política energética y medioambiental diferente en el ámbito nacional.

La diputada de Izquierda Plural, Laia Ortiz, criticó que España en la Unión Europea «ha estado casi siempre junto a Polonia, en la posición más conservadora» y reclamó mayor información sobre lo que está defendiendo España. «Nos preocupa la posición y los hechos a nivel energético», señaló, al tiempo que se refirió a cuestiones como las prospecciones, las energías renovables, la movilidad o el transporte.

En su turno, el diputado de CiU, Martí Barberá, preguntó a García Tejerina por el papel de las comunidades autónomas a la hora de gestionar los fondos de carbono o los proyectos clima o Pima así como reclamó conocer los criterios que identifican como prioritarios los proyectos a los que se destinarán 12 millones de euros del Fondo de Carbono.

El diputado del PSOE Ángel Luis González, reclamó la elaboración de una Ley de Cambio Climático así como un cambio en la política energética que deje de estar basada en los hidrocarburos y favorezca a las renovables. Así, reprochó al Gobierno no estar interesado en el cambio climático y disfrazar ese desinterés con una «apariencia profesionalizada» del tema destinando los recursos mínimos y, mientras la titular de Medio Ambiente asiste a la Cumbre del Clima, Soria «se empeña en buscar petróleo donde no lo hay». Finalmente, reclamó al Ejecutivo que busque el máximo consenso parlamentario y acuerde una hoja de ruta deseable y de «gran amplitud» de cara a París.