La UE celebra la reanudación del suministro de gas y apuesta por reducir la dependencia energética

La Unión Europea (UE) celebró la decisión de Rusia de restaurar el suministro a Europa y de Ucrania de permitir el paso del combustible por su territorio, y confió en que ambas partes cumplan sus compromisos y el flujo no vuelva a quedar interrumpido.

El presidente de la Comisión Europea (CE), José Manuel Durao Barroso, confirmó que el bombeo había sido restablecido en condiciones normales y que una parte ya había llegado a Eslovaquia y el resto lo haría en el curso de la jornada a los demás países de la Unión.

«Por fin podemos decir a los ciudadanos que el gas está de camino», recalcó Barroso en rueda de prensa, antes de añadir que después de trece días de interrupción la reanudación es una buena noticia, aunque «es difícil celebrar algo que no debería haber sucedido».

Los observadores internacionales sobre el terreno han asegurado que el combustible está fluyendo de forma normal y la presión está aumentando gradualmente, indicó el presidente de la CE.

«Esperamos que Rusia y Ucrania cumplan sus compromisos de forma que el suministro completo del gas natural no sea interrumpido otra vez», señaló la presidencia checa de la UE en un comunicado.

Barroso calificó de «inaceptable» que los consumidores europeos hayan sido utilizados como «rehenes» en el conflicto y dejó claro que todas las partes tienen lecciones que aprender de lo ocurrido.

Explicó que no está juzgando «las intenciones» de Rusia y Ucrania, sino que se remite a un «hecho objetivo: el gas de Rusia no llega a Europa a través de Ucrania«, así que como «medida de prudencia (…) tenemos que tenerlo en cuenta para el futuro» e incluir la diversificación en nuestra política energética.

«Rusia y Ucrania son dos socios muy importantes de la UE y queremos mantener y desarrollar unas relaciones constructivas con ambos», pero los repetidos anuncios de acuerdo que luego no se llevaban a la práctica son «increíbles» y «muy negativos para la credibilidad de ambos», afirmó. «Ha sido la primera vez en mi vida que he visto acuerdos que sistemáticamente no se cumplían, nunca había ocurrido esto con ningún socio del mundo», insistió.

La UE no ha querido intervenir directamente en la disputa comercial, pero ha exigido reiteradamente la restauración «inmediata» del suministro, una gestión de la crisis que Barroso consideró un «esfuerzo de equipo«.

La presidencia checa indicó que la reanudación del suministro es el resultado de la presión política ejercida desde la UE, que «ha hablado con una sola voz en esta disputa».

La presidencia y el Ejecutivo comunitario coincidieron en señalar que «la solidaridad funciona» en el interior de la UE, ya que las medidas que tomaron los gobiernos nacionales y las compañías para ayudarse han hecho posible que los efectos hayan sido menores para muchos. Asimismo, se mostraron de acuerdo en que la disputa actual ha perjudicado seriamente la credibilidad de Rusia y Ucrania.

Barroso insistió en que la crisis ha enseñado que «debemos dejar de hablar de seguridad energética en Europa y empezar a hacer algo al respecto«. En este sentido, la UE tiene que desarrollar las infraestructuras necesarias y diversificar las fuentes y vías de suministro como primer objetivo.

Barroso confió además en que se logre un acuerdo rápido para poder emplear en la construcción de infraestructuras, en especial del sector energético, los 5.000 millones de euros procedentes del presupuesto comunitario no gastado.

Otra de las medidas que quedan por delante es concluir las negociaciones sobre las normas del mercado único de la energía, lo que favorecerá la transparencia, el almacenamiento y la demanda.

Barroso también indicó que la Unión tiene que estar preparada para la siguiente crisis, por lo que se hace necesario la aprobación rápida de los cambios a la directiva sobre seguridad de suministro.

La presidencia checa también incluye la energía entre sus prioridades para el semestre, en concreto, el refuerzo de la transparencia, la solidaridad, las interconexiones y la diversificación, según mencionó en un comunicado.

El conflicto entre Rusia y Ucrania estalló el pasado 1 de enero cuando Gazprom cortó totalmente los suministros al vecino país tras no llegar a un acuerdo de tarifas para este año con Naftogaz, a la que ofreció un precio de 250 dólares por mil metros cúbicos de gas para todo 2009.

El gasoducto Nabucco prioritario para la UE

El presidente de la Comisión Europea, Jose Manuel Durao Barroso, y el primer ministro turco, Recep Tayyip Erdogan, se comprometieron a «trabajar juntos para encontrar un camino adelante» para impulsar el proyecto de gasoducto Nabucco, prioritario para la Unión Europea, después de analizar la guerra del gas entre Ucrania y Rusia que ha afectado a 18 países, incluida la propia Turquía.

«Hemos discutido el rol que Turquía puede tener para ayudar a Europa a diversificar sus suministros de energía y erigirse como un nexo energético muy importante en la región. En particular hemos abordado cómo podemos trabajar juntos para encontrar una vía adelante para el gasoducto Nabucco. Hemos acordado sobre la necesidad de este gasoducto y deberíamos resolver rápidamente los problemas restantes», explicó Barroso en rueda de prensa conjunta con Erdogan al término de su reunión y, posterior, almuerzo de trabajo en Bruselas.

A juicio de Barroso, la cooperación energética bilateral ofrece «un gran campo de cooperación entre Turquía y la Unión Europea«. «La UE tiene un mercado muy importante para la energía. Turquía es un país crucial para el tránsito. Creo que aquí hay una situación de ganancia mutua tanto para Turquía como para la UE y hemos acordado aumentar y profundizar nuestro diálogo en asuntos energéticos», agregó el jefe del Ejecutivo comunitario.

Barroso, quien informó a Erdogan sobre la guerra del gas entre Ucrania y Rusia y «el impacto muy negativo que esta disputa está teniendo para la reputación de Rusia y Ucrania como socios proveedores o de tránsito para el gas», confirmó que, pese a haber vuelto a hablar por teléfono con el presidente ruso, Vladimir Putin, y su homóloga ucraniana, Yulia Timoshenko, las partes «han sido incapaces» de llegar a un acuerdo que permita reanudar los suministros a Europa.

«El comisario de Energía, Andris Piebalgs y yo mismo hemos trabajado día y noche durante tres semanas para conseguir que el gas vuelva a fluir a los consumidores europeos y todavía estamos trabajando», recalcó.

Por su parte, el primer ministro turco subrayó su deseo de que Ucrania y Rusia lleguen a un acuerdo «muy pronto» al reconocer que la guerra del gas «también afecta a Turquía» dado que compra «una gran parte» del gas que consume a Rusia. «Espero que haya un acuerdo muy pronto», recalcó.

Erdogan reconoció que tanto Turquía como Europea deben apostar por diversificar sus fuentes de suministro y «acordar otras soluciones para el futuro» para garantizar el abastecimiento seguro, a la luz de la nueva guerra del gas entre Ucrania y Rusia. «Tenemos que diversificar», subrayó.

A juicio de Ankara, el proyecto de gasoducto Nabucco, que «siempre» ha recibido «todo el apoyo» del Gobierno turco, se puede consolidar como «la solución entre tanto» y, desde esta perspectiva, subrayó que Turquía como país de tránsito de gas nunca utilizará la energía como un arma. «Nunca lo utilizaremos como un arma», aseguró, al tiempo que recalcó que su Ejecutivo hará «todas las inversiones necesarias» en infraestructura energética.

La UE alerta a Moscú y Kiev de las consecuencias políticas del corte de gas

La Unión Europea (UE) advertirá a rusos y ucranianos, en la reunión prevista para el próximo día 17 en Moscú, de que ambos están dañando su credibilidad en el mercado del gas y de que la actual situación «tendrá consecuencias financieras, económicas y políticas significativas para los dos países«.

En un encuentro celebrado con los embajadores de los veintisiete países miembros de la UE confirmaron su intención de «seguir hablando con dureza y con una sola voz» en esta crisis, según un comunicado.

Otro de los mensajes que transmitirán la Presidencia checa de turno de la UE y la Comisión Europea durante el encuentro con rusos y ucranianos será que la prioridad continúa siendo «la inmediata recuperación de los suministros de gas«.

Asimismo, instarán a ambos países a «resolver sus disputas bilaterales sin más tardanza» y a respetar, «inmediatamente y en todos sus términos», el compromiso que adquirieron el pasado día 12 de recuperar el tránsito de gas hacia Europa.

Además, alertaron de que sólo asistirán al encuentro si también lo hace Ucrania, aunque por el momento no se ha puesto en duda públicamente la asistencia de Kiev a la reunión, convocada por el presidente ruso, Dmitri Medvédev, para tratar sobre los suministros y tránsito del gas ruso a consumidores europeos.

La CE quiere reducir el consumo energético de los electrodomésticos

La Comisión Europea (CE) estudia una serie de medidas para reducir el consumo eléctrico de los electrodomésticos, entre ellos los televisores de pantalla plana, con vistas a cumplir el objetivo de que la UE reduzca el gasto de energía en un 20 por ciento para 2020.

Esta iniciativa se enmarca en el desarrollo de la norma comunitaria sobre diseño ecológico, que define los principios, condiciones y criterios para establecer requisitos medioambientales a los productos.

Esta normativa no establece exigencias vinculantes a productos específicos, pero sí prevé que se vayan adoptando medidas aplicables a distintos artículos, tras efectuar estudios de impacto y consultar a las partes interesadas.

Los televisores de pantalla plana son uno de los aparatos que deberán ajustar su funcionamiento a un consumo menor de energía. Para ello, los fabricantes tendrán que elegir para su diseño «tecnologías que gasten menos», explicó el portavoz comunitario de Energía, Ferrán Tarradellas, que recalcó que esto no significa que los televisores de plasma «se vayan a prohibir».

En el caso de estos dispositivos, la Comisión analizará la tecnología de los diferentes televisores que hay en el mercado y evaluará cómo mejorar su rendimiento energético, apuntó Tarradellas.

Por su parte, los fabricantes de tecnologías digitales descartaron la posibilidad de que se prohíban las pantallas de plasma por razones de eficiencia energética y tachó de «objetivamente incorrectas» las informaciones publicadas en algunos medios de comunicación que así lo afirmaban.

EICTA, la asociación que representa a compañías como Apple, Canon, IBM, Intel, Microsoft, Nokia, Philips o Sony, destacó en un comunicado que la UE trabaja actualmente para que los televisores de pantalla plana consuman menos energía, lo que afecta no sólo al plasma sino también a otras tecnologías como LCD o CRT. En ese sentido, señaló que todas esas tecnologías son cada vez más eficientes y que han hecho «avances significativos» en los últimos años.

Las empresas prevén que si la UE publica una nueva regulación a mediados de este año los fabricantes podrán cumplir con los requisitos mínimos al término de un periodo de transición, en la segunda mitad de 2010.

En virtud de la directiva de diseño ecológico, la UE ya ha previsto la retirada de todas las bombillas incandescentes para 2012 en favor de dispositivos de iluminación más eficientes, lo que supondrá un ahorro de 40 teravatios por hora (equivalente al consumo de Rumanía o a once millones de hogares europeos) y un recorte de quince millones de toneladas de emisiones de CO2.

Del mismo modo, la UE pretende recortar drásticamente el consumo eléctrico de las funciones de apagado y espera («standby») de los aparatos eléctricos, lo que podría reducir el gasto energético de la Unión en un 75 por ciento antes de 2020, según datos de la Comisión.
Ese ahorro equivale al consumo eléctrico total de Dinamarca y permitiría evitar la emisión anual de 14 millones de toneladas de CO2.

Los 27 exigen a Rusia y Ucrania que cumplan el acuerdo y reanuden el suministro de gas

«Hago un llamamiento a ambas partes a que realmente hagan lo que han prometido», afirmó el ministro checo de Industria y Energía, Martin Riman, cuyo país ejerce la presidencia de turno de la UE este semestre.

Riman destacó que los ministros de la UE «han hablado con una voz única a diferencia de otras ocasiones en el pasado» y recomendó ser prudentes todavía, porque en los últimos diez días la UE se ha hecho ilusiones en varias ocasiones y luego no se han cumplido los acuerdos.

Rusia y Ucrania cerraron finalmente un acuerdo con la UE para el envío de observadores europeos, rusos y ucranianos a los puntos clave de tránsito, desde los que podrán controlar la circulación del gas.

La diferencia entre antes y ahora es que, si no se restablece el flujo, «podremos decir quién es el responsable», advirtió el comisario europeo de Energía, Andris Piebalgs.

Según Riman, «nunca vamos a averiguar» quién es el culpable de la situación que ya ha afectado a once países de la UE (en especial a Bulgaria y Eslovaquia), pero una vez que la misión de observación haya ocupado todos sus puestos, la UE contará con información detallada de lo que ocurra de ahora en adelante.

«Ucrania renunció a su declaración unilateral del domingo con lo que ya no debe haber ningún problema», subrayó Riman, quien también explicó que los Veintisiete han recalcado que esta nueva crisis afecta a la «credibilidad de ambos países» (Rusia y Ucrania, como principal proveedor de gas y país de tránsito, respectivamente).

El viceprimer ministro ucraniano, Grygoriy Nemyria, deseó al término del Consejo que el bombeo de gas ruso se reanude mañana, pero se mostró escéptico en vista de la actitud de Moscú que ya bloqueó la semana pasada un pacto y una restauración del suministro que Kiev había aceptado.

El presidente de la ucraniana Naftogaz, Oleg Dubyna, dijo que desde el momento en el que gas ruso llegue «garantizo que circulará hacia los países de la UE, pero también garantizaba esto el 1 de enero».

Por su parte, el vicepresidente de Gazprom, Alexander Medvedev, matizó que la reanudación no depende únicamente de ellos: «estamos dispuestos, pero desearíamos que la parte ucraniana cumpla todas las condiciones».

Según Piebalgs, la ucraniana Naftogaz ha asegurado que hará todo lo posible para que el combustible llegue rápidamente a la UE una vez que Moscú abra el grifo, a más tardar en 10 ó 12 horas, por lo que se puede esperar que los consumidores europeos dispongan de gas en unas 24 horas.

Los Veintisiete exigieron a ambas partes que hagan lo necesario para evitar que se repitan crisis similares en el futuro y propusieron acciones a medio plazo, como la diversificación de fuentes de suministro y rutas de abastecimiento, el refuerzo de las interconexiones energéticas y el fomento de la solidaridad, e invitaron a la CE a que presente nuevas medidas en este sentido.

Piebalgs consideró que la UE ha respondido muy bien a esta crisis y que ha habido una «clara solidaridad entre países», pero que se han manifestado «debilidades estructurales» en los socios que se han visto más afectados, algo que ya está previsto abordar en el marco de la segunda revisión energética que propuso la CE en noviembre.

El Consejo de Ministros también ha destacado la importancia de fomentar la transparencia en torno al abastecimiento, demanda y niveles de reservas, lo que requiere instalar sistemas de medición fiables en países de origen, tránsito y recepción del combustible.

El comisario ha precisado además que habrá que volver a plantear el refuerzo de las reservas estratégicas de gas, algo a lo que no se dio tanta importancia en un principio, pero que se ha demostrado que es crucial, ya que precisamente los países que contaban con gas almacenado han sido los que han afrontado mejor la situación.

La crisis estuvo motivada por una disputa comercial por el precio del gas y las tarifas de tránsito para 2009 que llevó al consorcio ruso Gazprom a interrumpir el suministro hacia Ucrania.

La UE resultó la principal afectada del conflicto, ya que importa de Rusia el 25 por ciento del gas que consume y de ese total el 80 por ciento lo recibe por territorio ucraniano.

EE.UU. celebra acuerdo de la UE con Rusia y Ucrania

El Gobierno estadounidense ha celebrado el acuerdo alcanzado por los 27 países de la Unión Europea (UE) con Rusia y Ucrania para restablecer el suministro de gas hacia territorio comunitario.

El portavoz del Departamento de Estado, Sean McCormack, dijo en un comunicado que EE.UU. acoge con «satisfacción» el acuerdo negociado por la presidencia checa de la UE para permitir el restablecimiento de los flujos de gas a los clientes europeos y dar una «mayor transparencia» a la ruta de tránsito.

Estados Unidos hizo un llamamiento a Rusia «para restablecer los flujos de gas de inmediato» e instó a Moscú y Kiev «a concluir rápidamente un acuerdo sobre la venta y el tránsito del gas».

Este incidente, dijo McCormack, «subraya una vez más la importancia de diversificar los suministros de gas natural y su transparencia«.

Los 27 celebran una reunión extraordinaria sobre la crisis del gas

Los ministros europeos de Energía se reunen de forma extraordinaria para estudiar las consecuencias del corte de suministro de Rusia y la manera de evitar que una crisis similar se repita en el futuro.

Los Veintisiete tienen previsto aprobar un texto de conclusiones en el que harán recomendaciones básicas de carácter político para afrontar la dependencia energética que la UE tiene del exterior, en especial de Rusia.

Fuentes de la presidencia checa señalaron que los ministros discutirán medidas para garantizar el suministro a largo plazo y la posibilidad de acelerar algunas medidas y proyectos que aseguren el suministro y minimicen el riesgo de que la actual crisis pueda repetirse de nuevo.

Según indicaron fuentes comunitarias, los titulares de Energía tomarán como referencia las propuestas que el Grupo de Coordinación del Gas formuló el pasado viernes tras estudiar los datos que facilitaron los países de la UE. Si por la tarde aún no se ha restaurado el suministro de gas ruso hacia Europa, lo primero que harán los ministros será exigir su reanudación inmediata.

Las medidas necesarias a corto plazo ya están siendo tomadas, por lo que el margen de acción es «muy limitado», reconocieron las fuentes comunitarias, aunque el Consejo de Ministros insistirá en impulsar al máximo la producción de gas para compensar la falta de flujo de los últimos días, indicaron fuentes diplomáticas.

Holanda se comprometió el viernes a incrementar su producción en un 10 por ciento durante un periodo de dos semanas y el Grupo de Coordinación del Gas estimó que, además, países como Reino Unido, Rumanía y Polonia podrían ofrecer un mayor flujo de gas en Europa.

A medio y largo plazo queda mucho por hacer, en especial, en lo que se refiere a las interconexiones y almacenamiento de gas en la UE.

Los países comunitarios deben mejorar las conexiones con otros socios y con el exterior, entre otras cosas, para que los mecanismos de solidaridad puedan hacerse efectivos.

La reducida capacidad de almacenamiento de gas que tiene actualmente la Unión es otro de los puntos sobre los que hay que trabajar intensamente para lograr mayores inversiones que permitan la construcción de las instalaciones necesarias.

Los Veintisiete son partidarios de apoyar la creación de más terminales de gas licuado -la de Grecia es la única con que existe ahora mismo en el sureste de Europa-, una técnica que facilita el transporte del combustible por barco desde lugares más lejanos (Oriente Medio o África).

Todos los esfuerzos se enmarcan dentro de la prioridad europea de fomentar la seguridad de suministro energético y pasan por el desarrollo de las numerosas medidas que la Comisión Europea propuso en su segunda revisión estratégica el pasado mes de noviembre.

Resulta fundamental que países que como España reciben gas de África desarrollen más conexiones con el resto de Europa para que sea posible aumentar el bombeo de gas desde este origen en casos como el de ahora en los que falla el principal suministrador (la UE compra a Rusia el 25% de todo el gas que consume).

Asimismo, los ministros pueden hacer hincapié en la necesidad de aumentar la diversificación de países proveedores y vías de transmisión del suministro, así como ampliar la transparencia en torno a los contratos comerciales para el abastecimiento de energía es otra de las metas que se fija la UE.

El corte de suministro que ha afectado a once países de la UE, en especial a Bulgaria y Eslovaquia, se debe a una disputa entre las compañías estatales del gas de Rusia y Ucrania (Gazprom y Naftogaz) por el precio del combustible y las tarifas de tránsito para este año.

Antes de la reunión, el ministro checo de Industria y Comercio, Martin Riman, se reunirá con los titulares de algunos de los países más afectados, y durante el Consejo explicará el intenso fin de semana de negociaciones con Rusia y Ucrania sobre la puesta en marcha de un mecanismo de supervisión internacional.

Las fuentes que suministran gas a la Unión Europea

La Unión Europea, importador neto de energía, sólo genera alrededor del 40% de su consumo de gas, mientras que el resto se importa fundamentalmente de Rusia (25,5%) a través de tres grandes gasoductos, Noruega (16,7%), Argelia (10,9%) y Nigeria (2,7%), según datos comunitarios del año 2006.

La «guerra del gas» entre Moscú y Kiev, que ha cortado el suministro de gas ruso a Europa vía Ucrania, ha reavivado la alarma sobre la dependencia energética de la UE de Rusia.

Por zonas, la producción de gas del Mar del Norte llega a Europa mediante una red de gasoductos con ramificaciones en Noruega (principal extractor y segundo exportador de gas a la UE), Reino Unido, Holanda y Dinamarca. Por ejemplo, Reino Unido y Holanda cubren el 90% de sus propias necesidades.

El resto del gas llega de forma licuada en buques metaneros, salvo en el caso de Rusia, principal exportador de la región.

En 2007, los países europeos compraron a Rusia, que posee un tercio de las reservas globales de gas, un total de 168.500 millones de metros cúbicos (168,5 bcm) de gas ruso, un 4,3% más que en 2006.

Este gas entra en Europa principalmente por tres grandes sistemas de gasoductos, el mayor de los cuales pasa por Ucrania, el segundo por Bielorrusia y un tercero por Turquía.

– Ucrania

El 80% pasa por la red que cruza Ucrania, que es a su vez el mayor comprador de gas ruso, y que consta de cuatro sistemas de tuberías que por tres ramificaciones alimentan el sur y el centro de Europa. Por Ucrania pasan diariamente 300 millones de metros cúbicos camino de Europa.

– Bielorrusia.

El principal gasoducto de este sistema es el Yamal-Europa, con una capacidad de 74 millones de metros cúbicos diarios, que atraviesa Bielorrusia y Polonia hacia Alemania.

– Lituania

Otra ramificación va desde Bielorrusia a Lituania y continúa hacia los países bálticos. Finlandia recibe el gas directamente del territorio ruso, por una conducción que no pasa por terceros países.

– Turquía

El gasoducto Blue Stream, con capacidad para 33 millones de metros cúbicos, lleva gas hacia Turquía a través del Mar Negro.

Rusia no oculta su deseo de convertir a Turquía en país de tránsito y continuar el Blue Stream hacia Rumania y Bulgaria, esquivando así la rama sur del sistema ucraniano.

Ankara, sin embargo, prefiere desarrollar su propia política energética y convertirse ella misma en suministradora de gas a Europa, sumando al Blue Stream ruso un nuevo gasoducto cuya construcción discute con Azerbaiyán y Turkmenistán.

– El South Stream y el North Stream

Gazprom tiene en proyecto dos nuevos gasoductos, que le permitirían dejar de depender del tránsito por países como Ucrania, Polonia, Letonia, Lituania y Estonia, con los que Moscú mantiene relaciones tirantes.

Por un lado, el proyecto «South Stream» aspira a unir Rusia con Bulgaria, donde se bifurcará: su ramal del norte pasará por Serbia, Rumanía, Hungría y Austria, y el del sur lo hará a través de Grecia, con posibilidad de conexión con Italia.

El proyecto «North Stream«, o Gasoducto de Europa del Norte (NEGP), permitirá a Rusia suministrar gas directamente a Europa, por debajo del Mar Báltico hacia Alemania. Este proyecto tendría un elevadísimo coste económico y gran dificultad técnica al sincronizar el tendido de los dos tramos del gasoducto: el terrestre y el submarino.

El terrestre, de 917 kilómetros de largo, enlazaría las ciudades rusas de Griazovets y Viborg (costa báltica), mientras el submarino, que tiene un ramal hasta Suecia, cruzará el Báltico hasta llegar al puerto alemán de Greifswald, tras recorrer 1.198 kilómetros. A los problemas técnicos, se suman la oposición y los recelos de los países ribereños tanto del Mar Negro como del Báltico.

– Turkmenistán

No todo el gas que Rusia exporta a Europa es de producción propia. Hasta este año a Rusia le es más rentable comprar gas natural a ex repúblicas soviéticas, sobre todo Turkmenistán, que extraerlo de sus yacimientos siberianos.

Gazprom, que posee el monopolio de la exportación del gas ruso, tiene un acuerdo con Turkmenistán para la exportación de 50.000 millones de metros cúbicos de gas anuales que expira en 2009.

A partir de este año, sin embargo, el precio del gas asiático ha subido fuertemente y ya no reportará los mismos beneficios a Rusia, que no obstante contará con una comisión del 25-30 por ciento.

La Unión Europea estudiará su posición sobre la crisis del gas

Diversos países de la UE estudiarán de manera conjunta la posición sobre el conflicto del gas natural entre los países de Rusia y Ucrania, que ha empezado a afectar a algunos países comunitarios que han visto reducido su suministro.

«Queremos una respuesta europea coordinada», así lo indicaron fuentes de la presidencia checa de turno que ha convocado la reunión.

Embajadores adjuntos de los Veintisiete estudiarán todos los elementos de la actual situación causada por una decisión tomada por el consorcio ruso Gazprom de suspender los envíos de Ucrania el pasado día 1 debido a una disputa sobre su precio.

En la reunión de hoy, la UE podría acordar el envío de una misión de investigación a Ucrania y Rusia, según lo indicó por otra parte una fuente diplomática.

El presidente de Gazprom, Alexéi Millar, denunció que países como Hungría, Eslovaquia, Rumanía, Polonia, los estados bálticos y algunos balcánicos, realizan sustracciones ilegales de gas en territorio de Ucrania.

Representantes de Rusia y de Ucrania participará en esta cita, convocada por la Comisión Europea, declaró un portavoz del Ejecutivo comunitario.

Moscú y Kiev intentan involucrar a la UE en la solución de la crisis del gas

Rusia y Ucrania intentaron involucrar a la Unión Europea (UE) en la solución de la crisis del gas, mientras la corporación rusa Gazprom aumentó de nuevo el suministro de ese carburante a los países europeos.

«A la vista de la gravedad de la situación, Rusia ha presentado al presidente del Parlamento Europeo (PE), Hans-Gert Pöttering, una propuesta para celebrar una sesión especial sobre el tránsito del gas ruso por Ucrania», aseguró Alexandr Grushko, viceministro de Exteriores de Rusia.

Además, Grushko expresó la disposición de los representantes de Gazprom, que mantiene interrumpido el suministro de gas a Ucrania por segundo día consecutivo, de «viajar de inmediato a Bruselas para aportar información detallada sobre el caso».

«Esperamos una respuesta rápida y constructiva a esta propuesta. Rusia y la Unión Europea (UE) son partidarios de mantener intensos contactos en materia de suministro de gas ruso a los países comunitarios», añadió.

A su vez, el embajador ruso ante la UE, Vladímir Chizhov, matizó que la UE debe participar junto a Moscú y Kiev «en la discusión de asuntos relativos a la seguridad energética. Pero antes se debe solventar el problema entre Rusia y Ucrania».

«No creo que Rusia y Ucrania necesiten mediadores en las negociaciones para las que está plenamente cualificados Gazprom y (la compañía estatal ucraniana) Naftogaz. Sería un poco extraño convertir en mediador al principal consumidor de gas ruso», apuntó.

Esa no es la opinión de Kiev, ya que el presidente ucraniano, Víctor Yúschenko, se ha dirigido oficialmente a la UE para que medie en su disputa con Gazprom, lo que ha sido confirmado por Bruselas.

El líder ucraniano defendió la postura de su país en el conflicto en una carta enviada a su homólogo de Estados Unidos, George W. Bush, y a otros ocho dirigentes europeos

Según el servicio de prensa de la Presidencia ucraniana, Yúschenko envió también misivas al presidente de Francia, Nicolas Sarkozy; a la Canciller alemana, Angela Merkel; y al presidente de la Comisión Europea, José Manuel Durao Barroso.

Yúschenko también se dirigió al presidente checo, Vaclav Klaus, cuyo país asumió la víspera la presidente de los Veintisiete y que ya ha pedido a Kiev y Moscú a que garanticen el cumplimiento de los contratos de suministro.

En su mensaje, Yúschenko expresa la voluntad de Kiev de reanudar las negociaciones con Gazprom sobre la base del memorándum bilateral suscrito el 2 de octubre pasado.

A su vez, una misión del Gobierno ucraniano integrada por el ministro de Energía, Yuri Prodan, y el vicepresidente de Naftogaz, Vadim Chuprun, inició una gira por varios países de la UE en Praga, donde se reunieron con el primer ministro checo, Mirek Topolanek. No obstante, la presidencia checa de la UE comunicó posteriormente que no considera necesario, «de momento, intervenir» en el conflicto entre Moscú y Kiev.

«La UE no tiene intención de tomar parte en la disputa ni como mediador ni como demandante, mientras no haya reducciones en el suministro a los consumidores europeos», señaló hoy en Praga Jiri Frantisek Potuznik, portavoz del Gobierno checo.

Por otra parte, Gazprom volvió a aumentar el suministro de gas con destino a los países europeos debido a la confiscación de una parte de ese carburante por Ucrania. «Ucrania ha reconocido abiertamente que roba gas y no se avergüenza de ello», denunció Serguéi Kupriánov, portavoz de Gazprom, en rueda de prensa.

Kupriánov añadió que el volumen del gas que transita por los gasoductos ucranianos con destino a Europa que ha sido sustraído asciende a 21 millones de metros cúbicos de gas, menos de un diez por ciento del total. Por esta razón, agregó, «aumentamos el bombeo de gas por otras rutas, como Bielorrusia», por cuyo territorio pasa el 20 por ciento del gas que Gazprom vende a Europa.

Al respecto, la Comisión Europea y otros países como Alemania y Polonia informaron de que no habían experimentado interrupciones en el suministro ni el jueves ni el viernes.

En cuanto a la deuda ucraniana, Kupriánov señaló que Naftogaz aún debe 614 millones de dólares, en su mayor parte en concepto de multas por morosidad.

No obstante, Ucrania anunció que recurrirá al tribunal de arbitraje de Estocolmo, ya que considera «ilegal» la imposición de una multa antes de que expirara el contrato el 1 de enero.

En declaraciones a la emisora de radio «Eco de Moscú», el portavoz de Naftogaz, Valentín Zemliánski, aseguró que la solución del conflicto pasa por la implicación de los dirigentes políticos. Además, insistió en que Ucrania tiene acumuladas reservas de gas que le permitirían subsistir sin el gas ruso hasta abril.

La CE envía un pliego de cargos a EDF por posible abuso de posición dominante

La Comisión Europea (CE) anunció el envío de un pliego de cargos al gigante francés de la energía EDF por un posible abuso de posición dominante en el mercado eléctrico francés.

La CE señaló, en un comunicado, que está «preocupada» por los contratos que EDF ha concluido con clientes industriales, y que pueden atentar contra la libre competencia en el mercado.

Las preocupaciones de Bruselas se centran en la duración y la naturaleza exclusiva de los contratos, así como que parecen restringir la reventa de electricidad.

Estas prácticas pueden constituir infracciones a las normas comunitarias, añadió la CE, ya que pueden dificultar que otros proveedores entren o expandan su presencia en el mercado eléctrico francés.

La Comisión recordó que el envío de un «pliego de cargos» es un trámite en las investigaciones antimonopolio comunitarias, con el que se informa a las partes de las acusaciones, pero no prejuzga su culpabilidad.

EDF tiene la posibilidad de responder por escrito o solicitar una audiencia oral para exponer sus puntos de vista.

La empresa, uno de los mayores gigantes eléctricos europeos, confirmó en un comunicado la recepción del documento y dijo que se refiere a los contratos a largo plazo con consumidores finales, especialmente de carácter industrial.

EDF añadió que el envío del pliego de cargos es «la primera etapa» de un intercambio entre la empresa y la Dirección General de la Competencia de la CE y «no prejuzga en nada la decisión final» tomará el Ejecutivo comunitario.