El sindicato USO requiere a la clase política coherencia en la defensa del carbón nacional

Marcos Martínez, en rueda de prensa en la sede gijonesa de USO, ha expresado su temor a que las eléctricas, que están ejerciendo una presión para que no entre en aplicación el Real Decreto, que obtuvo luz verde de la Unión Europea el pasado 29 de septiembre y que posteriormente fue refrendado por el Consejo de Ministros, intenten hacerlo coincidir con la aprobación del Reglamento -el actual expira el próximo mes de diciembre–, cuya propuesta inicial en verano era comprometer las ayudas al cierre de las minas deficitarias en 2014.

Mientras tanto, ha avisado que se sigue sin vender la producción de carbón nacional desde el pasado mes de marzo, cerca de cinco millones de toneladas, y que si no se aplica el Real Decreto podría obligar a devolver las ayudas del carbón no vendido. Todo ello en conjunto redundaría, en su opinión, en posibles nuevos impagos.

Así lo ha avisado de cara a la decisión que deberá adoptar la Audiencia Nacional sobre si dictamina o no medidas cautelares que retrasen aún más el Real Decreto. También ha apuntado a los dos meses de reflexión sugeridos desde el Tribunal Europeo.

Además, ha explicado que si se retrasa el Real Decreto y se aprueba el Reglamento Europeo, puede llevar a la necesidad de un nuevo Plan del Carbón, si es que el Reglamento discrepa mucho del contenido del actual Plan, que cubre el periodo 2006-2012. En este caso, USO exige que el nuevo Plan del Carbón se cumpla, al contrario de lo que pasa con el actual, y que el tema estrella sea el trabajador. «No se puede estar jugando con el interés general del país ni el particular de los trabajadores», ha dicho.

Según él, cuando se habla de energía es una cuestión de Estado, «no puede haber divisiones por problemas territoriales», ha indicado antes de culpar de la situación en parte a la «inapetencia» del Gobierno y, por otro lado, a la presión de las eléctricas por un tema económico. Asimismo, ha criticado que se utilice políticamente «de forma desastrosa». «España se acordará un día del carbón», ha augurado antes de cifrar en unos 9,5 millones de tonelaads de carbón la producción nacional anual.

Martínez ha lamentado, también, que parezca que la clase política no lo tenga claro y que esté «disgregada», lo que le hace dudar del peso que pueda tener España ante la Unión Europea para mantener las ayudas más allá de 2022, al menos. «Si como país no somos capaces de defender esto, sobran las palabras», ha apostillado.

El Reglamento Europeo, que permite ayudas para compensar la producción y precio de venta del carbón mientras que el Real Decreto obliga a las térmicas a usar el mineral nacional, puede llevar, de aprobarse la propuesta del pasado mes de julio, a que se vayan reduciendo un 33 por ciento las subvenciones cada 15 meses hasta 2014, lo que haría desaparecer a las minas menos competitivas. Según USO, en Asturias habrá tres o cuatro que puedan competir, el resto cerrará.

Por todo ello, ha insistido en activar el Real Decreto para quemar la producción del carbón nacional de manera «inmediata» y que las ayudas no estén condicionadas al cierre de las minas, sino más bien a un descenso de las mismas pero con medidas complementarias de seguir reconvertiendo el sector minero. Además, ha incidido en que las ayudas no pueden ser para que especulen los empresarios y ha criticado que algunos de ellos tengan «carta blanca», con alusión especialmente a Victorino Alonso.

El sindicato USO requiere a la clase política coherencia en la defensa del carbón nacional

Marcos Martínez, en rueda de prensa en la sede gijonesa de USO, ha expresado su temor a que las eléctricas, que están ejerciendo una presión para que no entre en aplicación el Real Decreto, que obtuvo luz verde de la Unión Europea el pasado 29 de septiembre y que posteriormente fue refrendado por el Consejo de Ministros, intenten hacerlo coincidir con la aprobación del Reglamento -el actual expira el próximo mes de diciembre–, cuya propuesta inicial en verano era comprometer las ayudas al cierre de las minas deficitarias en 2014.

Mientras tanto, ha avisado que se sigue sin vender la producción de carbón nacional desde el pasado mes de marzo, cerca de cinco millones de toneladas, y que si no se aplica el Real Decreto podría obligar a devolver las ayudas del carbón no vendido. Todo ello en conjunto redundaría, en su opinión, en posibles nuevos impagos.

Así lo ha avisado de cara a la decisión que deberá adoptar la Audiencia Nacional sobre si dictamina o no medidas cautelares que retrasen aún más el Real Decreto. También ha apuntado a los dos meses de reflexión sugeridos desde el Tribunal Europeo.

Además, ha explicado que si se retrasa el Real Decreto y se aprueba el Reglamento Europeo, puede llevar a la necesidad de un nuevo Plan del Carbón, si es que el Reglamento discrepa mucho del contenido del actual Plan, que cubre el periodo 2006-2012. En este caso, USO exige que el nuevo Plan del Carbón se cumpla, al contrario de lo que pasa con el actual, y que el tema estrella sea el trabajador. «No se puede estar jugando con el interés general del país ni el particular de los trabajadores», ha dicho.

Según él, cuando se habla de energía es una cuestión de Estado, «no puede haber divisiones por problemas territoriales», ha indicado antes de culpar de la situación en parte a la «inapetencia» del Gobierno y, por otro lado, a la presión de las eléctricas por un tema económico. Asimismo, ha criticado que se utilice políticamente «de forma desastrosa». «España se acordará un día del carbón», ha augurado antes de cifrar en unos 9,5 millones de tonelaads de carbón la producción nacional anual.

Martínez ha lamentado, también, que parezca que la clase política no lo tenga claro y que esté «disgregada», lo que le hace dudar del peso que pueda tener España ante la Unión Europea para mantener las ayudas más allá de 2022, al menos. «Si como país no somos capaces de defender esto, sobran las palabras», ha apostillado.

El Reglamento Europeo, que permite ayudas para compensar la producción y precio de venta del carbón mientras que el Real Decreto obliga a las térmicas a usar el mineral nacional, puede llevar, de aprobarse la propuesta del pasado mes de julio, a que se vayan reduciendo un 33 por ciento las subvenciones cada 15 meses hasta 2014, lo que haría desaparecer a las minas menos competitivas. Según USO, en Asturias habrá tres o cuatro que puedan competir, el resto cerrará.

Por todo ello, ha insistido en activar el Real Decreto para quemar la producción del carbón nacional de manera «inmediata» y que las ayudas no estén condicionadas al cierre de las minas, sino más bien a un descenso de las mismas pero con medidas complementarias de seguir reconvertiendo el sector minero. Además, ha incidido en que las ayudas no pueden ser para que especulen los empresarios y ha criticado que algunos de ellos tengan «carta blanca», con alusión especialmente a Victorino Alonso.

Los ecologistas exigen que se derogue el decreto al carbón y que no se ralentice el crecimiento de las renovables

En este sentido, ha pedido a José Luis Rodríguez Zapatero que aproveche «los reparos formulados» por la Audiencia Nacional y el Tribunal de Luxemburgo para derogar el decreto, y establezca un calendario para el cierre de las térmicas. A su juicio, la sustitución del carbón «debería ser una prioridad de las políticas energéticas».

«Prolongar indefinidamente, con ayudas públicas directas e indirectas, la vida de las térmicas de carbón, centrales eléctricas muy ineficientes e intensivas en emisiones de dióxido de carbono, resulta irresponsable en el contexto de una crisis ecológico-energética», ha criticado la asociación ecologista.

De este modo, la asociación resalta que «los costes de renunciar al carbón son muy inferiores a los costes de usarlo», al tiempo que han resaltado los beneficios económicos y socioambientales que conllevaría sustituirlo.

Por su parte, Greenpeace ha celebrado el bloqueo temporal promovido por la Audiencia Nacional y el Tribunal de Justicia de la Unión Europea al desarrollo del «dañino» real decreto que incentiva la quema de carbón nacional en centrales eléctricas.

Para la organización ecologista, se trata de una decisión judicial positiva, al entender que la medida de ayudas al carbón hasta 2014 perjudica el medio ambiente, es un gasto «innecesario» y retrasa la reconversión del sector minero.

Además, la organización reitera la «total incompatibilidad» de esta normativa con el futuro régimen europeo de ayudas al carbón y con la estrategia europea a 2020 para un crecimiento inteligente, sostenible e integrador.

Según Greenpeace, se trata de una medida «exclusivamente destinada a beneficiar al empresariado minero que retrasa la necesaria reconversión del sector y, por lo tanto, no garantiza un futuro a sus trabajadores».

«La aceptación de las medidas cautelares solicitadas por las partes en un proceso es el primer indicio de que la autoridad judicial considera razonables sus argumentos y dañina la aplicación de la normativa impugnada por las eléctricas» explicó la responsable de la campaña cambio climático y energía de Greenpeace, Aida Vila.

Los ecologistas exigen que se derogue el decreto al carbón y que no se ralentice el crecimiento de las renovables

En este sentido, ha pedido a José Luis Rodríguez Zapatero que aproveche «los reparos formulados» por la Audiencia Nacional y el Tribunal de Luxemburgo para derogar el decreto, y establezca un calendario para el cierre de las térmicas. A su juicio, la sustitución del carbón «debería ser una prioridad de las políticas energéticas».

«Prolongar indefinidamente, con ayudas públicas directas e indirectas, la vida de las térmicas de carbón, centrales eléctricas muy ineficientes e intensivas en emisiones de dióxido de carbono, resulta irresponsable en el contexto de una crisis ecológico-energética», ha criticado la asociación ecologista.

De este modo, la asociación resalta que «los costes de renunciar al carbón son muy inferiores a los costes de usarlo», al tiempo que han resaltado los beneficios económicos y socioambientales que conllevaría sustituirlo.

Por su parte, Greenpeace ha celebrado el bloqueo temporal promovido por la Audiencia Nacional y el Tribunal de Justicia de la Unión Europea al desarrollo del «dañino» real decreto que incentiva la quema de carbón nacional en centrales eléctricas.

Para la organización ecologista, se trata de una decisión judicial positiva, al entender que la medida de ayudas al carbón hasta 2014 perjudica el medio ambiente, es un gasto «innecesario» y retrasa la reconversión del sector minero.

Además, la organización reitera la «total incompatibilidad» de esta normativa con el futuro régimen europeo de ayudas al carbón y con la estrategia europea a 2020 para un crecimiento inteligente, sostenible e integrador.

Según Greenpeace, se trata de una medida «exclusivamente destinada a beneficiar al empresariado minero que retrasa la necesaria reconversión del sector y, por lo tanto, no garantiza un futuro a sus trabajadores».

«La aceptación de las medidas cautelares solicitadas por las partes en un proceso es el primer indicio de que la autoridad judicial considera razonables sus argumentos y dañina la aplicación de la normativa impugnada por las eléctricas» explicó la responsable de la campaña cambio climático y energía de Greenpeace, Aida Vila.

Los ecologistas exigen que se derogue el decreto al carbón y que no se ralentice el crecimiento de las renovables

En este sentido, ha pedido a José Luis Rodríguez Zapatero que aproveche «los reparos formulados» por la Audiencia Nacional y el Tribunal de Luxemburgo para derogar el decreto, y establezca un calendario para el cierre de las térmicas. A su juicio, la sustitución del carbón «debería ser una prioridad de las políticas energéticas».

«Prolongar indefinidamente, con ayudas públicas directas e indirectas, la vida de las térmicas de carbón, centrales eléctricas muy ineficientes e intensivas en emisiones de dióxido de carbono, resulta irresponsable en el contexto de una crisis ecológico-energética», ha criticado la asociación ecologista.

De este modo, la asociación resalta que «los costes de renunciar al carbón son muy inferiores a los costes de usarlo», al tiempo que han resaltado los beneficios económicos y socioambientales que conllevaría sustituirlo.

Por su parte, Greenpeace ha celebrado el bloqueo temporal promovido por la Audiencia Nacional y el Tribunal de Justicia de la Unión Europea al desarrollo del «dañino» real decreto que incentiva la quema de carbón nacional en centrales eléctricas.

Para la organización ecologista, se trata de una decisión judicial positiva, al entender que la medida de ayudas al carbón hasta 2014 perjudica el medio ambiente, es un gasto «innecesario» y retrasa la reconversión del sector minero.

Además, la organización reitera la «total incompatibilidad» de esta normativa con el futuro régimen europeo de ayudas al carbón y con la estrategia europea a 2020 para un crecimiento inteligente, sostenible e integrador.

Según Greenpeace, se trata de una medida «exclusivamente destinada a beneficiar al empresariado minero que retrasa la necesaria reconversión del sector y, por lo tanto, no garantiza un futuro a sus trabajadores».

«La aceptación de las medidas cautelares solicitadas por las partes en un proceso es el primer indicio de que la autoridad judicial considera razonables sus argumentos y dañina la aplicación de la normativa impugnada por las eléctricas» explicó la responsable de la campaña cambio climático y energía de Greenpeace, Aida Vila.

Se constituye la comisión de investigación que evaluará el impacto de decreto al carbón tras una reunión en Industria

A la reunión han asistido responsables de Industria y del Ministerio de Fomento; los alcaldes de Cerceda y As Pontes; representantes de Endesa y Gas Natural Fenosa, de los sindicatos de las centrales eléctricas y de los transportistas.

Al término de la reunión, el alcalde de Cerceda, José García Liñares, ha explicado que se les ha informado de los pasos que se dieron para aprobar el real decreto y que salía «más optimista» de lo que entró.

Según Liñares, han preguntado a las empresas si tienen intención de mantener los empleos y éstas les han comentado que de momento sí, pero que habrá que esperar a ver mes a mes la evolución del real decreto y que, en función de ello, actuarán.

El presidente de la central de Meirama, Bautista Vega, ha afirmado que la reunión ha servido para constatar que el Gobierno no se compromete a modificar el real decreto, en caso de que haya consecuencias negativas para las centrales gallegas.

Y tampoco ofrece, según ha asegurado el representante sindical, ninguna fórmula que permita que sigan funcionando, así como el mantenimiento de los puestos de trabajo y del tejido industrial.

El alcalde de As Pontes, Valentín González Formoso, ha comentado que volverán a reunirse a principios de diciembre para valorar mejor el impacto de la entrada en vigor del decreto y tomar medidas en caso de que se produzca.

Desde Santiago de Compostela, el director general de Industria, Energía y Minas de la Xunta, Ángel Bernardo Tahoces, ha expresado su malestar por el hecho de no haber sido invitados, como autoridad energética de Galicia a participar en la comisión.

Para Tahoces, se trata de una comisión «inútil» porque ha salido publicado en el BOE el procedimiento de operaciones de Red Eléctrica española para poner en funcionamiento el decreto.

«En consecuencia, la reunión es inútil, incompleta y claramente política«, ha sentenciado.

Se constituye la comisión de investigación que evaluará el impacto de decreto al carbón tras una reunión en Industria

A la reunión han asistido responsables de Industria y del Ministerio de Fomento; los alcaldes de Cerceda y As Pontes; representantes de Endesa y Gas Natural Fenosa, de los sindicatos de las centrales eléctricas y de los transportistas.

Al término de la reunión, el alcalde de Cerceda, José García Liñares, ha explicado que se les ha informado de los pasos que se dieron para aprobar el real decreto y que salía «más optimista» de lo que entró.

Según Liñares, han preguntado a las empresas si tienen intención de mantener los empleos y éstas les han comentado que de momento sí, pero que habrá que esperar a ver mes a mes la evolución del real decreto y que, en función de ello, actuarán.

El presidente de la central de Meirama, Bautista Vega, ha afirmado que la reunión ha servido para constatar que el Gobierno no se compromete a modificar el real decreto, en caso de que haya consecuencias negativas para las centrales gallegas.

Y tampoco ofrece, según ha asegurado el representante sindical, ninguna fórmula que permita que sigan funcionando, así como el mantenimiento de los puestos de trabajo y del tejido industrial.

El alcalde de As Pontes, Valentín González Formoso, ha comentado que volverán a reunirse a principios de diciembre para valorar mejor el impacto de la entrada en vigor del decreto y tomar medidas en caso de que se produzca.

Desde Santiago de Compostela, el director general de Industria, Energía y Minas de la Xunta, Ángel Bernardo Tahoces, ha expresado su malestar por el hecho de no haber sido invitados, como autoridad energética de Galicia a participar en la comisión.

Para Tahoces, se trata de una comisión «inútil» porque ha salido publicado en el BOE el procedimiento de operaciones de Red Eléctrica española para poner en funcionamiento el decreto.

«En consecuencia, la reunión es inútil, incompleta y claramente política«, ha sentenciado.

Se constituye la comisión de investigación que evaluará el impacto de decreto al carbón tras una reunión en Industria

A la reunión han asistido responsables de Industria y del Ministerio de Fomento; los alcaldes de Cerceda y As Pontes; representantes de Endesa y Gas Natural Fenosa, de los sindicatos de las centrales eléctricas y de los transportistas.

Al término de la reunión, el alcalde de Cerceda, José García Liñares, ha explicado que se les ha informado de los pasos que se dieron para aprobar el real decreto y que salía «más optimista» de lo que entró.

Según Liñares, han preguntado a las empresas si tienen intención de mantener los empleos y éstas les han comentado que de momento sí, pero que habrá que esperar a ver mes a mes la evolución del real decreto y que, en función de ello, actuarán.

El presidente de la central de Meirama, Bautista Vega, ha afirmado que la reunión ha servido para constatar que el Gobierno no se compromete a modificar el real decreto, en caso de que haya consecuencias negativas para las centrales gallegas.

Y tampoco ofrece, según ha asegurado el representante sindical, ninguna fórmula que permita que sigan funcionando, así como el mantenimiento de los puestos de trabajo y del tejido industrial.

El alcalde de As Pontes, Valentín González Formoso, ha comentado que volverán a reunirse a principios de diciembre para valorar mejor el impacto de la entrada en vigor del decreto y tomar medidas en caso de que se produzca.

Desde Santiago de Compostela, el director general de Industria, Energía y Minas de la Xunta, Ángel Bernardo Tahoces, ha expresado su malestar por el hecho de no haber sido invitados, como autoridad energética de Galicia a participar en la comisión.

Para Tahoces, se trata de una comisión «inútil» porque ha salido publicado en el BOE el procedimiento de operaciones de Red Eléctrica española para poner en funcionamiento el decreto.

«En consecuencia, la reunión es inútil, incompleta y claramente política«, ha sentenciado.

La Xunta de Galicia no va a «descansar» hasta paralizar el decreto del carbón nacional

Así lo apuntó en el pleno del Parlamento gallego en respuesta al diputado nacionalista Henrique Viéitez, que recordó las diversas movilizaciones convocadas contra las «nefastas» consecuencias que, a su juicio, tendrá el decreto para la actividad económica de las térmicas y para la generación de empleo.

Además, el parlamentario del BNG negó que el Ejecutivo autónomo haya liderado el proceso contra esta disposición y, por el contrario, dijo que han estado «ausentes, negando el impacto del decreto cuando los nacionalistas lo estábamos denunciando» desde el primer momento.

El consejero de Industria le replicó que esta es una de las «grandes preocupaciones» del Gobierno gallego, no así del central, que trata de «condenar al ostracismo a las minas gallegas y a 3.500 trabajadores».

Insistió en que la Xunta ha sido la «primera en decir a las claras que era un problema para Galicia» y el decreto es lesivo para los intereses de la Comunidad, motivo por el cual insistió en que el Gobierno autónomo, «desde los instrumentos que pone el Estado de derecho», hará todo lo que está en su mano para «frenar el decreto».

Apuntó también que el Gobierno está desatendiendo «una gestión equilibrada de todas las CCAA», mientras también niega la realidad, incluso en la intervención que sobre este asunto protagonizó el presidente, José Luis Rodríguez Zapatero.

«El Gobierno socialista niega permanentemente los perjuicios» que la norma tendrá para la minería gallega, señaló el consejero, que insistió en que rechaza «con firmeza ese decreto».

«Nuestro planteamiento es claro: paralización del decreto», insistió Javier Guerra. «No vamos a descansar» hasta conseguirlo, ante lo que insistió en que irán por la vía judicial para paralizar las consecuencias del decreto «ante el Supremo y Luxemburgo».

IU cree que el decreto del carbón es un paso adelante para las zonas mineras

Por su parte, Izquierda Unida considera que el decreto del carbón es un pequeño avance ya que supone un paso adelante para resolver los problemas por los que atraviesan las comarcas mineras españolas.

Sin embargo, IU cree que es «imprescindible» que el Gobierno plantee de forma urgente alternativas para garantizar el futuro de las cuencas mineras más allá de 2014, fecha hasta la que se autoriza la concesión de compensaciones económicas a las compañías eléctricas que utilicen carbón autóctono.

Según subrayó el responsable federal de Energía de IU, Adolfo Barrena, el decreto del carbón marca un plazo de tiempo «insuficiente» para implantar alternativas de empleo que impidan la despoblación de las comarcas mineras españolas.

Por ello, Barrena pide al Ejecutivo que luche para conseguir ampliar estas ayudas hasta el año 2018 como mínimo y para conseguir que el carbón autóctono sea declarado como reserva estratégica necesaria para asegurar el mix energético.

El Gobierno aprobó el decreto del carbón el pasado 1 de octubre, dos días después de que la Comisión Europea autorizara este tipo de ayudas, con el propósito de evitar que el mineral nacional sea relegado ante el descenso en el consumo de electricidad que se ha producido como consecuencia de la crisis económica.

Areces pide no cerrar las minas porque se trabaja en sistemas de captura de CO2

Asimismo, el presidente del Principado, Vicente Álvarez Areces, pidió «tiempo» a la Unión Europea para que se prolongue el cierre de minas deficitarias de carbón en 2014 porque «se está trabajando» en la solución del problema ambiental que generan, con la investigación de sistemas de captura del dióxido de carbono (CO2).

Muestra de ese trabajo «en tiempo real» es el inicio de la construcción de una planta de captura de CO2 en Mieres -junto a la central térmica de La Pereda-, en cuyo acto Areces advirtió: «Tendría poco sentido seguir investigando cosas que a lo mejor se liquidan antes en el ámbito político».

Areces deseó que el Europarlamento muestre en noviembre su rechazo a la decisión inicial de ese cierre de minas de carbón europeas en 2014, y especialmente de que también lo haga el Consejo, que tomará la decisión final este diciembre.

El hecho de que ya se haya iniciado la construcción de la planta de captura de CO2, según dijo el presidente regional, «da credibilidad al argumento» de que es viable el secuestro del CO2 para que la combustión del carbón no coadyuve al cambio climático.

La nueva planta que se ha comenzado a construir en Mieres utilizará la técnica de la carbonatación-calcinación para la captura del CO2 después de la combustión y comenzará su fase de ensayos a partir de junio de 2011, una vez que desde 2000 se han realizado pruebas en laboratorio.

Areces pidió que no exista competencia entre las diversas plantas de investigación que están surgiendo en España sobre el «carbón limpio» en las diferentes técnicas que usen, ya que los resultados que obtengan serán siempre en beneficio de toda España y Europa.

«Es absolutamente falso asociar la imagen del carbón al pasado, a lo obsoleto, a lo que no tiene sentido», dijo Areces, que ve «perfectamente asumible en Asturias combinar el carbón con las renovables».

La Xunta de Galicia no va a «descansar» hasta paralizar el decreto del carbón nacional

Así lo apuntó en el pleno del Parlamento gallego en respuesta al diputado nacionalista Henrique Viéitez, que recordó las diversas movilizaciones convocadas contra las «nefastas» consecuencias que, a su juicio, tendrá el decreto para la actividad económica de las térmicas y para la generación de empleo.

Además, el parlamentario del BNG negó que el Ejecutivo autónomo haya liderado el proceso contra esta disposición y, por el contrario, dijo que han estado «ausentes, negando el impacto del decreto cuando los nacionalistas lo estábamos denunciando» desde el primer momento.

El consejero de Industria le replicó que esta es una de las «grandes preocupaciones» del Gobierno gallego, no así del central, que trata de «condenar al ostracismo a las minas gallegas y a 3.500 trabajadores».

Insistió en que la Xunta ha sido la «primera en decir a las claras que era un problema para Galicia» y el decreto es lesivo para los intereses de la Comunidad, motivo por el cual insistió en que el Gobierno autónomo, «desde los instrumentos que pone el Estado de derecho», hará todo lo que está en su mano para «frenar el decreto».

Apuntó también que el Gobierno está desatendiendo «una gestión equilibrada de todas las CCAA», mientras también niega la realidad, incluso en la intervención que sobre este asunto protagonizó el presidente, José Luis Rodríguez Zapatero.

«El Gobierno socialista niega permanentemente los perjuicios» que la norma tendrá para la minería gallega, señaló el consejero, que insistió en que rechaza «con firmeza ese decreto».

«Nuestro planteamiento es claro: paralización del decreto», insistió Javier Guerra. «No vamos a descansar» hasta conseguirlo, ante lo que insistió en que irán por la vía judicial para paralizar las consecuencias del decreto «ante el Supremo y Luxemburgo».

IU cree que el decreto del carbón es un paso adelante para las zonas mineras

Por su parte, Izquierda Unida considera que el decreto del carbón es un pequeño avance ya que supone un paso adelante para resolver los problemas por los que atraviesan las comarcas mineras españolas.

Sin embargo, IU cree que es «imprescindible» que el Gobierno plantee de forma urgente alternativas para garantizar el futuro de las cuencas mineras más allá de 2014, fecha hasta la que se autoriza la concesión de compensaciones económicas a las compañías eléctricas que utilicen carbón autóctono.

Según subrayó el responsable federal de Energía de IU, Adolfo Barrena, el decreto del carbón marca un plazo de tiempo «insuficiente» para implantar alternativas de empleo que impidan la despoblación de las comarcas mineras españolas.

Por ello, Barrena pide al Ejecutivo que luche para conseguir ampliar estas ayudas hasta el año 2018 como mínimo y para conseguir que el carbón autóctono sea declarado como reserva estratégica necesaria para asegurar el mix energético.

El Gobierno aprobó el decreto del carbón el pasado 1 de octubre, dos días después de que la Comisión Europea autorizara este tipo de ayudas, con el propósito de evitar que el mineral nacional sea relegado ante el descenso en el consumo de electricidad que se ha producido como consecuencia de la crisis económica.

Areces pide no cerrar las minas porque se trabaja en sistemas de captura de CO2

Asimismo, el presidente del Principado, Vicente Álvarez Areces, pidió «tiempo» a la Unión Europea para que se prolongue el cierre de minas deficitarias de carbón en 2014 porque «se está trabajando» en la solución del problema ambiental que generan, con la investigación de sistemas de captura del dióxido de carbono (CO2).

Muestra de ese trabajo «en tiempo real» es el inicio de la construcción de una planta de captura de CO2 en Mieres -junto a la central térmica de La Pereda-, en cuyo acto Areces advirtió: «Tendría poco sentido seguir investigando cosas que a lo mejor se liquidan antes en el ámbito político».

Areces deseó que el Europarlamento muestre en noviembre su rechazo a la decisión inicial de ese cierre de minas de carbón europeas en 2014, y especialmente de que también lo haga el Consejo, que tomará la decisión final este diciembre.

El hecho de que ya se haya iniciado la construcción de la planta de captura de CO2, según dijo el presidente regional, «da credibilidad al argumento» de que es viable el secuestro del CO2 para que la combustión del carbón no coadyuve al cambio climático.

La nueva planta que se ha comenzado a construir en Mieres utilizará la técnica de la carbonatación-calcinación para la captura del CO2 después de la combustión y comenzará su fase de ensayos a partir de junio de 2011, una vez que desde 2000 se han realizado pruebas en laboratorio.

Areces pidió que no exista competencia entre las diversas plantas de investigación que están surgiendo en España sobre el «carbón limpio» en las diferentes técnicas que usen, ya que los resultados que obtengan serán siempre en beneficio de toda España y Europa.

«Es absolutamente falso asociar la imagen del carbón al pasado, a lo obsoleto, a lo que no tiene sentido», dijo Areces, que ve «perfectamente asumible en Asturias combinar el carbón con las renovables».