Moscú y Bruselas crean un mecanismo de alerta para evitar nuevas crisis de gas

El documento lo firmaron en Moscú el ministro ruso de Energía, Serguéi Shmatkó, y el comisario europeo de Energía, Andris Piebalgs, informaron las agencias rusas.

El acuerdo tiene como objetivo garantizar el suministro energético estable e ininterrumpido, así como prevenir y superar con consecuencias negativas mínimas las situaciones de emergencia en el campo de la energía.

En particular, el memorando establecerá una serie de medidas conjuntas para la prevención de posibles situaciones de emergencia y la reacción operativa en caso de una crisis de suministros.

Bruselas propuso este mecanismo después de la crisis de enero pasado en la que Rusia interrumpió durante varios días los suministros a Europa por los gasoductos ucranianos.

Al respecto, el Kremlin ha expresado su deseo de abordar con la Unión Europea los nuevos problemas con el suministro de gas a Ucrania durante la cumbre de Estocolmo del próximo 18 de noviembre.

Moscú busca «una solución común con la Unión Europea» que garantice un suministro estable del gas ruso con destino a los clientes europeos a través de territorio ucraniano, señaló Serguéi Prijodko, asesor del Kremlin.

«Rusia está interesada en que no se repita la situación del pasado año en la que se vio obligada a suspender el bombeo de gas», dijo.

Jelil insta a los exportadores a seguir una estrategia común para alcanzar un precio «justo» del gas

En declaraciones a la radio estatal argelina, Chakib Jelil afirmó que el Foro de Países Exportadores de Gas, «pese a las divergencias políticas existentes» entre sus miembros, debe funcionar como una organización económica similar a la de la OPEP para poder defender mejor los intereses de los estados exportadores.

«En el seno de la OPEP siempre ha habido divergencias políticas entre sus miembros, pero ellos consiguen defender sus intereses, especialmente en lo que respecta a un precio justo del petróleo», dijo.

Preguntado sobre si una OPEP del gas favorecerá una asociación estratégica con los grandes productores como Rusia, el ministro recalcó que el Foro debe defender un mejor precio del combustible, que se ha reducido «de manera sustancial últimamente» debido al desarrollo por Estados Unidos de una nueva tecnología que les permite ser autosuficientes en ese recurso.

En este sentido, explicó que el gas que debía ser exportado a Estados Unidos está reorientándose hacia Europa, lo que se traduce en un descenso de los precios, especialmente los del vendido en el mercado Spot.

El coste del gas que se vende en el marco de contratos a largo plazo, pese a su baja, no ha caído tanto como el del mercado Spot, indicó.

El ministro instó a los países del Foro a «ponerse de acuerdo sobre una estrategia para obtener un precio justo del gas» y lamentó que el objetivo de esa organización de intercambiar información sobre los contratos gasísticos «no se ha logrado hasta el momento».

«Cada uno de los países miembros guarda muy confidencialmente sus contratos de venta de gas a largo plazo, nadie quiere desvelar a qué precio vende en el mercado», señaló.

Por otra parte, Jelil subrayó que el recorte acumulado de la producción de petróleo en 4,2 millones de barriles diarios decidido por la OPEP ha «influido positivamente» en el precio del crudo y en los ingresos de los países exportadores, entre ellos Argelia, que ha ganado más de 60 dólares por barril.

El país magrebí dispone de una capacidad de producción de 1,4 millones de barriles diarios pero sólo produce en la práctica 1,2 millones en aplicación de las decisiones de la OPEP.

Argelia mantendrá esa cuota efectiva, al igual que el resto de los miembros del cartel, para intentar mantener los precios al nivel de los 70 dólares, según el ministro.

El mercado gasista podría superar los siete millones de clientes a finales de año

Según el último «Informe Trimestral de Supervisión del Mercado Minorista de Gas Natural en España», correspondiente al segundo trimestre de 2009, la cifra total de clientes de gas en España era de 6.983.740 clientes de gas a finales del mes de junio.

Esto representa un incremento trimestral de aproximadamente 10.000 nuevos clientes más con respecto a la cifra registrada en marzo de 2009. De este modo, continúa la deceleración en la captación de clientes.

Por otra parte, el regulador prevé que a final de año los clientes suministrados a precio libre alcancen el 50% del total de clientes de gas, mientras que el otro 50% de los clientes se suministraría a través de las tarifa de último recurso.

En términos de volumen de gas, la demanda suministrada a través de la tarifa de último recurso puede suponer un 5% de las ventas totales de gas en 2009, y el 95% a precio libre.

Por grupos societarios, Gas Natural tiene 5.015.154 consumidores (el 71,8%), seguido de Endesa, con 1.030.013 (14,8%); Naturgas Energía, con 626.186 (9%); Iberdrola, con 211.332 (3%), y Unión Fenosa, con 100.323 (1,4%).

Demanda de gas

El consumo de gas natural en España hasta junio de 2009 fue de 197.050 GWh, un 16,1% menos que en el mismo periodo del año pasado.

El consumo total de gas en el segundo trimestre decreció un 9,4% con respecto al mismo periodo del año pasado, principalmente motivado por la disminución de la demanda de gas natural para el sector eléctrico e industrial, que se redujo un 20,2%.

Sin embargo, el consumo del sector doméstico fue más alto que en el mismo trimestre del año 2008, con un crecimiento del 36% (3.811 GWh). Las principales causas de este aumento en el consumo doméstico fueron las menores temperaturas con respecto al mismo periodo de 2008, en particular el mes de abril, así como el incremento del número de clientes.

Moratinos urge a la puesta en marcha de la conexión España-Francia para enviar gas a la UE

Los ministros comunitarios de Exteriores debatieron las medidas adoptadas en la UE desde que el pasado enero, cuando una disputa comercial entre Rusia y Ucrania, afectó al suministro de varios países europeos y puso en evidencia la débil situación comunitaria.

En la reunión se apostó también por vincular eficiencia y seguridad energética como vía para reducir la dependencia del exterior y evitar que se repitan nuevas crisis de suministro. Los países de la UE coincidieron en que funcionar de forma más eficiente es el primer paso para reforzar la seguridad energética.

«Si Ucrania, por ejemplo, utilizase la energía de manera tan eficiente como Eslovenia, no necesitaría importar de otros países», indicó en rueda de prensa la ministra sueca de Asuntos Europeos, Cecilia Malmström.

La vicepresidenta de la Comisión Europea (CE), Margot Wallström, se sumó a esta afirmación al asegurar en rueda de prensa que «la eficiencia energética contribuye a la seguridad energética».

Los ministros desearon, en este contexto, que las reformas del sector gasístico ucraniano avancen a buen ritmo, así como que progresen los contactos con las instituciones financieras internacionales para lograr los fondos necesarios para costear las medidas.

Rumanía señaló su preocupación por el anuncio de Ucrania de que prevé elevar la tarifa de tránsito de gas ruso por su territorio a principios de año, ya que teme que pueda originar una nueva crisis de suministro y recalcó que la UE debe tomar todas las medidas necesarias para «estar mejor preparada que el año pasado de cara al invierno», informaron fuentes comunitarias.

Austria, por su parte, dijo que no es realista pensar que la dependencia de Ucrania -país por el que transita el 80 por ciento del gas ruso que importa la UE– pueda reducirse a corto plazo.

Los Veintisiete también se refirieron al plan europeo de recuperación económica -que incluye asistencia financiera a proyectos energéticos por valor de 2.000 millones de euros en 2009 y 1.980 millones en 2010– y recalcaron que la UE tendrá que asegurarse de que los fondos son utilizados de manera adecuada.

La UE concibe el plan como el principal elemento para reforzar la situación europea a largo plazo y recuerda que se destinarán 1.440 millones de euros a proyectos de infraestructuras de gas, 910 millones a infraestructuras eléctricas, 15 millones para proyectos en islas pequeñas, 565 millones a redes eólicas marítimas y 1.050 millones a la captura y almacenamiento de dióxido de carbono (CO2).

Moratinos destacó ante sus colegas europeos la relevancia de la interconexión hispano-francesa entre Baixas y Santa Llogaia (que recibirá 225 millones de euros), así como la necesidad de reforzar la conexión entre España y Argelia, de donde procede la mayor parte del gas que entra en la península. «Para España es fundamental trabajar para lograr la interconexión con Francia, ya que eso permitiría conectar con el resto de Europa y suministrar gas en caso de crisis», comentó en rueda de prensa Moratinos.

Asimismo, el ministro español subrayó la importancia de dar visibilidad al Plan Solar Mediterráneo, uno de los proyectos prioritarios de la Unión por el Mediterráneo-Proceso de Barcelona (UPM).

El balance de la situación energética actual que efectuaron los Veintisiete sirve como preparación del Consejo Europeo de octubre, en el que se volverá a tratar la seguridad energética de la UE.

La demanda mundial de gas caerá en 2009 por primera vez en 50 años debido a la crisis

Este es el diagnóstico de la Agencia Internacional de la Energía (AIE) que en su informe anual sobre el mercado del gas constata que la demanda cayó un 4% en el primer trimestre, y el retroceso va a continuar el resto del año en proporciones que no cifra.

El bajón en esos tres meses llegó a ser del 17% en España (del 31% en la producción de electricidad), que es el tercer importador mundial de gas natural licuado (GNL), destacó la AIE.

Al mismo tiempo, está previsto que este año entren en actividad instalaciones para la producción de GNL equivalentes a 60 millones de metros cúbicos, frente a los 240 millones que había en 2008, y la cifra en tres años subirá hasta al menos 370 millones.

El primer efecto de todo lo anterior ha sido el descalabro de precios, que en el mercado estadounidense pasaron del pico de 13 dólares por pie cúbico a mediados del pasado año a unos 4 dólares en la actualidad.

En el caso del gas ruso vendido en Europa y vinculado a la cotización del petróleo, la caída ha sido menos pronunciada, pero desde el techo de cerca de 15 dólares por pie cúbico se descenderá a unos 7-8 dólares este verano.

La AIE advirtió de que «la combinación de una demanda débil y precios más bajos puede reducir inversiones futuras».

«Si se retrasan las inversiones en producción e infraestructuras de aprovisionamiento, hay riesgo a medio plazo de tensión en los mercados cuando la demanda se recupere», argumentó.

Así señaló que mientras en el periodo 2009-2013 las instalaciones de licuado van a permitir una aportación suplementaria del 50%, no habrá nuevas capacidades a menos que se aprueben los periodos correspondientes en el periodo 2009-2010.

La agencia puso el acento en los «retos considerables» que afronta Rusia -primer productor mundial-, tanto desde el punto de vista técnico como financiero.

El director ejecutivo de la AIE, Nobuo Tanaka, hizo un llamamiento para que la actual coyuntura no anule los esfuerzos de inversión y aludió a la necesidad de reforzar las interconexiones transfronterizas de gasoductos y de llevar adelante la construcción de un mercado más eficiente, en especial en Europa.

En el estudio se subraya que en la actual década el gas será el principal contribuyente al incremento de la producción eléctrica en los países de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico, ya que representará 806 teravatios hora de un total de 1.015.

El OMEL realizó su segunda subasta de gas natural

El Operador del Mercado Español de Electricidad (OMEL) ha realizado la segunda subasta para adquirir gas natural destinado a las operaciones y al llenado de las instalaciones de transporte, regasificación y almacenamiento subterráneo.

Según informa el operador en una nota de prensa, el precio del gas subastado quedó fijado en 14,65 euros el megavatio por hora, y fue adjudicado a BP Gas España y a Shell España.

El producto objeto de subasta incluye el gas que se consume en los puntos de entrega de las plantas de regasificación, almacenamiento subterráneo y en las estaciones de compresión y regulación.

El Ministerio de Industria, Turismo y Comercio designó a OMEL como entidad responsable de organizar la subasta que fue supervisada por la Comisión Nacional de Energía (CNE).

El consumo de gas cayó un 17,6% hasta febrero, según datos de la CNE

El consumo de gas cayó un 17,6 por ciento en los dos primeros meses de 2009 con respecto al mismo periodo de un año antes, debido principalmente a la menor demanda para producir electricidad, según un informe estudiado por la Comisión Nacional de la Energía (CNE).

En un comunicado, la CNE explica que a esa caída del consumo de gas contribuyó el descenso del 33 por ciento de la demanda de gas para producir electricidad y añade que en los dos primeros meses del año la reducción más importante se produjo en las importaciones de gas natural licuado (GNL) de Nigeria.

En los dos primeros meses del año, el consumo de electricidad había caído el 7,2 por ciento por el descenso de la actividad industrial, según los datos de Red Eléctrica de España (REE).

La CNE informó también de que en los dos primeros meses del año, el mercado español se abasteció de un conjunto de doce países, en el que Argelia fue el principal aprovisionador.

Sin embargo, las importaciones de gas natural a través de los gasoductos de conexión internacional disminuyeron hasta febrero un 15,8 por ciento respecto al mismo periodo del año anterior.

En cuanto al aprovisionamiento de gas de enero a febrero, éste cayó un 16 por ciento en tasa interanual, mientras que las importaciones totales de gas natural licuado a Europa se redujeron ligeramente, al caer un 0,2 por ciento.

El consumo de gas cayó un 17,6% hasta febrero, según datos de la CNE

El consumo de gas cayó un 17,6 por ciento en los dos primeros meses de 2009 con respecto al mismo periodo de un año antes, debido principalmente a la menor demanda para producir electricidad, según un informe estudiado por la Comisión Nacional de la Energía (CNE).

En un comunicado, la CNE explica que a esa caída del consumo de gas contribuyó el descenso del 33 por ciento de la demanda de gas para producir electricidad y añade que en los dos primeros meses del año la reducción más importante se produjo en las importaciones de gas natural licuado (GNL) de Nigeria.

En los dos primeros meses del año, el consumo de electricidad había caído el 7,2 por ciento por el descenso de la actividad industrial, según los datos de Red Eléctrica de España (REE).

La CNE informó también de que en los dos primeros meses del año, el mercado español se abasteció de un conjunto de doce países, en el que Argelia fue el principal aprovisionador.

Sin embargo, las importaciones de gas natural a través de los gasoductos de conexión internacional disminuyeron hasta febrero un 15,8 por ciento respecto al mismo periodo del año anterior.

En cuanto al aprovisionamiento de gas de enero a febrero, éste cayó un 16 por ciento en tasa interanual, mientras que las importaciones totales de gas natural licuado a Europa se redujeron ligeramente, al caer un 0,2 por ciento.

Las importaciones españolas de gas natural cayeron un 16,7% en enero

El Consejo de Administración de la Comisión Nacional de Energía examinó el informe de supervisión de los abastecimientos de gas y la diversificación de suministro correspondiente al mes de enero de 2009.

Este documento atribuye el citado descenso al aumento del viento y de las reservas de los embalses, así como al aumento del papel del carbón en el hueco térmico. De este modo, decayó el consumo peninsular de gas para la producción de energía eléctrica.

La cantidad de GNL (gas natural licuado) importado por España supone el 40,2% del total importado por Europa, situándolo como principal país importador de GNL.

En el ámbito europeo, el hecho más relevante del período fue la reducción de las exportaciones rusas a través de Ucrania, que se produjo a partir del 1 de enero: hasta el día 22 de dicho mes, el flujo de gas hacia Europa no recuperó la normalidad.

La reducción en el suministro afectó esencialmente al sureste europeo, especialmente a Bulgaria, Rumania, Serbia, Bosnia, Croacia y Macedonia.

El informe señala que, durante el primer mes del año, el mercado español se abasteció de 11 países. El principal país aprovisionador fue Argelia (27,13%), seguido, en este orden, de Egipto (20,25%), Trinidad y Tobago (19,04%), Qatar (10,95%), Nigeria (8,86%) y Noruega (8,12%).

Estos datos suponen un aumento de la proporción de gas abastecido a España desde Egipto, Trinidad y Tobago, Omán, Noruega y Libia, disminuyendo desde Argelia, Qatar y Nigeria.

Las importaciones españolas de gas natural cayeron un 16,7% en enero

El Consejo de Administración de la Comisión Nacional de Energía examinó el informe de supervisión de los abastecimientos de gas y la diversificación de suministro correspondiente al mes de enero de 2009.

Este documento atribuye el citado descenso al aumento del viento y de las reservas de los embalses, así como al aumento del papel del carbón en el hueco térmico. De este modo, decayó el consumo peninsular de gas para la producción de energía eléctrica.

La cantidad de GNL (gas natural licuado) importado por España supone el 40,2% del total importado por Europa, situándolo como principal país importador de GNL.

En el ámbito europeo, el hecho más relevante del período fue la reducción de las exportaciones rusas a través de Ucrania, que se produjo a partir del 1 de enero: hasta el día 22 de dicho mes, el flujo de gas hacia Europa no recuperó la normalidad.

La reducción en el suministro afectó esencialmente al sureste europeo, especialmente a Bulgaria, Rumania, Serbia, Bosnia, Croacia y Macedonia.

El informe señala que, durante el primer mes del año, el mercado español se abasteció de 11 países. El principal país aprovisionador fue Argelia (27,13%), seguido, en este orden, de Egipto (20,25%), Trinidad y Tobago (19,04%), Qatar (10,95%), Nigeria (8,86%) y Noruega (8,12%).

Estos datos suponen un aumento de la proporción de gas abastecido a España desde Egipto, Trinidad y Tobago, Omán, Noruega y Libia, disminuyendo desde Argelia, Qatar y Nigeria.