Varios expertos del sector eléctrico apuestan por reducir la tarifa eliminando los costes no vinculados al sistema como la interrumpibilidad

Europa Press.- Expertos del sector eléctrico apuestan por reducir la tarifa eléctrica eliminando los costes no vinculados estrictamente al sistema en el marco de un debate sobre la transición energética y los mercados eléctricos. En este sentido, el consejero de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) Josep Maria Guinart, ha afirmado que la clave es que la reducción de la tarifa eléctrica sea una realidad sostenible en el tiempo, tanto en el ámbito doméstico como en el industrial.

La CNMC y la interrumpibilidad

Guinart apuesta por «reducir la tarifa eliminando los costes no vinculados estrictamente al sistema eléctrico, como es el servicio de interrumpibilidad para algunas empresas industriales que no deja de ser una ayuda encubierta que, si se da, debería de financiarse vía presupuestos». Ha añadido que es necesario «limpiar la tarifa eléctrica de todo aquello que no es propio», y ha apuntado que en 2017 se mantuvo la tendencia estable entre ingresos y costes en el sistema eléctrico. Asimismo, el director de Asuntos Europeos e Institucionales de Omie, Rafael Gómez-Elvira, ha asegurado que en 2017 el coste de la energía eléctrica suministrada supuso el 37,5% de la factura total del sistema.

El doctor en Transición Energética por la Universitat Politècnica de Catalunya (UPC), Pep Salas, ha afirmado que cualquier decisión política energética debe tener presentes el precio de la energía, la seguridad del suministro y la reducción del impacto ambiental. «Es necesaria valentía política y social para afrontar una reforma integral en el mercado energético influyendo en una formación de precios razonable a través del aumento de la competencia y la separación estricta de los negocios de la generación de electricidad y su comercialización«, ha finalizado.

Los trabajadores de Alcoa están seguros de que «la empresa se sentará a negociar»

Europa Press. – El presidente del comité de empresa de Alcoa en Avilés, Sergio Sobrido, ha mostrado su convencimiento de que la multinacional terminará negociando con las autoridades su continuidad. «Estamos seguros de que la compañía se sentará, obligada por el Ministerio, a negociar unas condiciones para seguir operando».

Sobrido lo ha explicado así, en unas declaraciones a SER Asturias, en las que ha calificado de «reconfortante» el interés mostrado por los Reyes de España sobre su situación, algo que reveló a primera hora del día el presidente del Gobierno asturiano, Javier Fernández.

De esta manera, la multinacional productora de aluminio Alcoa anunció, hace unos días, su intención de iniciar un periodo formal de consultas para llevar a cabo un despido colectivo en sus plantas de Avilés y La Coruña, por el que se verán afectados un total de 686 trabajadores.

Así, para Sobrido, la reacción unánime apoyando a los trabajadores por parte de las máximas autoridades demuestra que están defendiendo una causa justa y que su reclamación «está llegando donde tiene que llegar».

Para que Alcoa puede seguir operando, Sobrido ha apuntado que en las actuales condiciones es difícil por los costes energéticos. Por eso, ha insistido en la necesidad de introducir las modificaciones oportunas en el sistema de tarifas y homologar las plantas en cuanto al precio de la energía con el resto de instalaciones europeas.

 En cuanto a la falta de inversiones de la multinacional, el presidente del comité de empresa ha explicado que Alcoa tampoco ha invertido en otras instalaciones, como las gallegas de A Coruña o San Ciprián. «Ningún gobierno le ha obligado a modernizar las plantas», ha lamentado.

Por otro lado, el presidente de la Federación Asturiana de Empresarios (FADE), Belarmino Feito, ha hecho unas declaraciones en Oviedo en la que ha dicho que ahora «no soluciona nada» que todo el mundo cierre filas para que no se cierre Alcoa. Las soluciones, ha indicado, se tendrían que haber puesto en su momento. Para el empresario asturiano, el cierre anunciado «no es ninguna sorpresa».

 

 

El déficit eléctrico provisional asciende a 1.542 millones de euros hasta agosto, una previsión de 644 millones menos según la CNMC

Europa Press. – El déficit de tarifa provisional del sistema eléctrico, que se produce porque los costes reconocidos de la actividad regulada son superiores a los ingresos obtenidos a través de los peajes, se situó en 1.542,1 millones de euros hasta agosto, 643,9 millones menos de lo previsto, según la séptima liquidación provisional de 2018 del sector eléctrico de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC).

Según informa el regulador, este resultado de la liquidación se debió, fundamentalmente, a la menor retribución adicional y específica de los sistemas no peninsulares (-357,0 millones de euros) y de la actividad de la distribución (-196,4 millones de euros).

En otro sentido, la demanda en consumo registrada en esta octava liquidación alcanzó los 146.414 gigavatios hora, siendo un 1,7% superior al valor promedio observado en años precedentes.

Esta demanda en consumo representaría el 60,6% de la demanda prevista para el ejercicio 2018, valor superior al promedio registrado en el histórico de las liquidaciones de los ejercicios 2015 a 2017 (59,6%).

Puesto que los ingresos no han sido suficientes para cubrir todos los costes reconocidos, se ha procedido al cálculo y aplicación del coeficiente de cobertura, que ha dado como resultado un coeficiente de cobertura del 84,01% y se aplica a cada uno de los costes reconocidos para determinar los costes a pagar con cargo a la liquidación.

Si se habla de energías renovables, se han liquidado 63.607 de las instalaciones activas en el sistema de liquidaciones de la CNMC. Así, la liquidación provisional acumulada y la cuenta correspondiente a la energía generada en el ejercicio 2018 hasta el pasado 31 de agosto asciende a 4.801,12 millones de euros.

Como resultado de los desajustes temporales entre ingresos y costes del sistema, es necesario aplicar el coeficiente de cobertura, resultando una cantidad a pagar a cuenta a los productores de 860,155 millones de euros.

Además, la liquidación provisional a cuenta correspondiente al mismo periodo con cargo a los Presupuestos Generales del Estado (PGE) asciende a 49,05 millones de euros antes de IVA o impuesto equivalente.

En la fecha de cierre de la liquidación se habían recibido ingresos del Tesoro Público que permiten abonar el 100% de esta partida a los productores de energías renovables, cogeneración y residuos ubicadas en los territorios extrapeninsulares. La cantidad a pagar a cuenta a estos productores en la liquidación asciende a 6,250 millones de euros.

 

Sector del Gas

En lo que respecta al sector del gas, el déficit provisional fue de 245 millones de euros, frente a un déficit de 326 millones de euros en el mismo periodo del ejercicio anterior, lo que representa una disminución del 25%. Teniendo en cuenta los ingresos netos de liquidación se ha calculado un índice de cobertura del 87,1% de la retribución acreditada.

El total de ingresos liquidables declarados ha sido de 1.846 millones de euros, un 6,6% superior a la del mismo periodo del ejercicio anterior debido al incremento de los ingresos por peaje de transporte-distribución.

En esta octava liquidación del ejercicio, la retribución total acreditada a las empresas es de 1.901 millones de euros, que es un 0,4% superior a la del año anterior.

Por otra parte, el número de consumidores declarado por las empresas distribuidoras al pasado 31 de agosto ha ascendido a 7,87 millones, con un aumento interanual de 107.414 consumidores (+1,4%), de los que 1,6 millones se suministran con tarifa de último recurso.

 

La central nuclear de Almaraz valora en 91 millones el impacto negativo que supondría su cierre en la economía extremeña

Europa Press. – La Central Nuclear de Almaraz ha cifrado en 91 millones de euros el impacto negativo que supondría el cierre de esta instalación en la economía extremeña, que genera 2.900 empleos en la región entre directos, indirectos e inducidos, y 45 millones de euros de contribución al entorno en el que se sitúa.

Así lo han expresado el director de la Central Nuclear de Almaraz, Rafael Campos, y el responsable de Relaciones Institucionales de la Central Nuclear de Almaraz, Aniceto González, en una rueda de prensa ofrecida en Navalmoral de la Mata a los medios de comunicación. Los protagonistas han hecho un balance de la operación de la planta durante el primer semestre de 2018, en el que ha obtenido unos «resultados excepcionales».

Específicamentedurante el primer semestre de 2018, la producción bruta generada entre las dos unidades de la Central Nuclear de Almaraz ha sido de 8.150 millones de kilovatios hora (kWh), mientras que la producción neta conjunta se ha elevado a 7.860 millones de kilovatios hora (kWh).

Según ha explicado Campos, estos datos ponen de manifiesto que la Central de Almaraz produce el 6% de la energía eléctrica que se consume en todo el país, por lo que se trata de «una de las centrales que más aporta», ya que supone entre un 25 y un 30% de la producción nuclear española.

Además, el director de la Central Nuclear de Almaraz ha destacado que en este semestre la planta ha conseguido su «misión, que es producir energía eléctrica de forma segura, fiable y por supuesto protegiendo en todo momento al público, al medio ambiente y la instalación».

Del mismo modo, Campos ha destacado que la Central Nuclear de Almaraz es «motor generador de empleo», ya que a cierre del segundo semestre de 2018 su plantilla es de 405 empleados propios, más otros 400 trabajadores diarios de empresas especializadas, y a los que se suman los 1.200 trabajadores adicionales de las paradas de recarga.

En su explicación, Campos ha destacado el semestre «intenso» que ha supuesto en la Central Nuclear de Almaraz debido a la recarga de la unidad II, la preparación para la puesta en servicio del Almacén Temporal Individualizado, o la visita durante tres semanas de una misión OSART.

De esta manera, Campos ha señalado que en febrero la Central Nuclear de Almaraz recibió la visita de los miembros del Organismo Internacional de la Energía Atómica (OIEA) así como de técnicos expertos de otras plantas nucleares, que analizaron y evaluaron diversos aspectos de la planta.

España se sitúa en el puesto 16 del índice global energético Trilemma 2018, que lideran Dinamarca, Suiza y Suecia

Europa Press.- España ocupa el puesto 16 en el índice global energético Trilemma 2018, que está liderado por Dinamarca, Suiza y Suecia y posiciona a los países en función de su integración de las 3 dimensiones de sostenibilidad, equidad y seguridad de suministro.

Según las conclusiones del informe, que elabora el Consejo Mundial de la Energía en asociación con la consultora global Oliver Wyman, los sistemas energéticos equilibrados no son sólo del dominio de los países ricos, sino que pueden impulsar el buen desempeño de las economías emergentes. El socio y director global de Energía de Oliver Wyman, Francois Austin, señaló que el índice demuestra que «todos los países, a pesar de su situación económica, pueden aspirar a tener un sistema energético equilibrado«.

Dentro del ranking de 125 países del informe, un total de 8 consiguen alcanzar un balance de grado AAA, destacando los tres primeros: Dinamarca, Suiza y Suecia. No obstante, aunque los 10 primeros países dentro del índice se mantienen relativamente estables, existen cambios que contrarrestan la tendencia habitual asociada con el PIB nacional, como Eslovenia, que está en el número 6, por delante de países como Alemania, que ocupa un séptimo puesto, Francia, el décimo, Estados Unidos, que se sitúa en el número 14 o España que ocupa el 16.

Además, el informe destaca que varios países muestran una mejora significativa y demuestran que un sistema de redes energéticas equilibrado no es un lujo, sino un producto de estrategias integrado e inteligente en favor de la transición energética. Países como Nepal, Kenia y Bangladesh, con economías más vulnerables, han mejorado significativamente sus puntuaciones en el Trilemma en cuanto a la equidad energética mientras buscan mejorar el acceso a la energía.

Iberdrola coincide con el IPCC de la ONU en la «necesidad» de limitar el calentamiento a 1,5ºC con políticas «robustas»

Europa Press.- Iberdrola considera que el informe del Panel Intergubernamental de Cambio Climático de la ONU (IPCC) es un «elemento básico y sustancial» de cara a la próxima cumbre del Clima y coincide con el grupo de expertos en la «necesidad» de limitar el calentamiento a 1,5 grados centígrados (ºC) frente al objetivo actual de 2ºC y considera que algunas herramientas para lograrlo pasan por una fiscalidad adecuada y políticas «climáticas robustas».

La compañía eléctrica considera que el informe del IPCC es un «elemento básico y sustancial» para consolidar con éxito la fase política del Diálogo de Talanoa en la Cumbre Climática de Katowice de diciembre de 2018 (COP24). Además, Iberdrola comparte «la visión» del IPCC sobre la «necesidad» de avanzar hacia un escenario de 1,5ºC, su viabilidad y las oportunidades asociadas en términos de mejoras de crecimiento económico, desarrollo industrial y de calidad del aire. En este contexto, apoya «firmemente» el desarrollo de estrategias climáticas de largo plazo para alcanzar economías con emisiones netas «nulas» y marcos de políticas climáticas robustos.

En concreto, Iberdrola afirma que la fiscalidad y los instrumentos del precio de carbono deben estar basados en el principio quien contamina, paga y juegan un papel «central». En su opinión, la eficiencia energética debe lograrse «principalmente» a través de la electrificación de usos finales, como el transporte eléctrico, las bombas de calor, la iluminación LED, así como con el desarrollo de energías renovables. Del mismo modo, observa que las políticas y los planes sectoriales deben ayudar a superar las actuales barreras a la descarbonización.

Para ello, considera que es urgente actuar para alcanzar un pico de emisiones «lo antes posible» y una senda de reducción de emisiones que asegure que el incremento de la temperatura a final de siglo se sitúe «sensiblemente» por debajo de los 2ºC. Asimismo, Iberdrola manifiesta su convencimiento en que «todos» los sectores, tales como el transporte, edificación o la industria, deben acelerar su transición hacia la descarbonización para cumplir con ese escenario. Igualmente comparte la visión sobre el «importante papel» del sector energético y, en particular, de la electricidad como la «principal vía» para descarbonizar los usos finales de la energía tanto en transporte, como en edificación e industria.

Por último, Iberdrola cree también «oportuno» tener en cuenta la «elevada incertidumbre» asociada al papel que pueden jugar las tecnologías de captura de CO2, ya que el informe del IPCC les otorga un papel «muy relevante» y señala que la «efectividad de estas técnicas no está probada a gran escala«. Si bien, aunque la empresa pone la vista en el largo plazo, insiste también en que las acciones de corto plazo deben ser «prioritarias» debido a la «gravedad del problema y su ritmo de agravamiento».

Unidos Podemos reclama un plan

Unidos Podemos ha reclamado al Gobierno en el Congreso un «plan de choque para revertir los daños irreparables» del cambio climático de los que han advertido el IPCC de Naciones Unidas. Según este texto, está previsto que las temperaturas aumenten hasta 1,5ºC entre 2030 y 2052 si el calentamiento global continúa avanzando a su ritmo actual y no se ponen en marcha una serie de medidas a nivel internacional. En este sentido, los expertos han aseverado que la limitación del cambio climático «tendría beneficios claros para las personas y los ecosistemas naturales y podría ir acompañada del afianzamiento de una sociedad más sostenible y equitativa».

El portavoz de Medio Ambiente de Unidos Podemos, el diputado Juan López de Uralde, ha señalado, en este sentido, que la posición geográfica de España en la región Mediterránea es una de las más expuestas al cambio climático y hace al país «especialmente vulnerable» a este fenómeno. López de Uralde también recuerda en la iniciativa que la ministra para la Transición Ecológica ya informó que la calidad del aire ha empeorado en 2017, con respecto a los niveles de 2016, y que ha aumentado el número de zonas y poblaciones donde se han superado los niveles límite de dióxido de nitrógeno (NO2) y las partículas en suspensión (PM10) han aumentado.

Ante esta situación, el coportavoz de Equo apremia al Ejecutivo a presentar el proyecto de Ley de Cambio Climático y Transición Energética prometido por la ministra para antes de que acabe el año y también medidas para que entre el 70% y el 85% de la electricidad global sea de origen renovable, tal y como el IPCC propone para 2030.

Ribera suspende el impuesto del 7% a la generación eléctrica durante 6 meses y aprueba una exención del céntimo verde

Europa Press.- El Gobierno, dentro del paquete de medidas recogidas en el decreto-ley aprobado para abordar, de forma urgente, la actual subida de los precios de la electricidad, ha decidido suspender el impuesto del 7% a la generación eléctrica, aprobado en 2012 por el Ejecutivo del PP, durante 6 meses, así como introducir una exención en el Impuesto Especial de Hidrocarburos para desactivar el denominado céntimo verde.

En este sentido, la ministra para la Transición Ecológica, Teresa Ribera, señaló que el impacto de estas medidas en el recibo de la luz será de alrededor del 4% y supondrán «un alivio» para trabajar en medidas de más calado como la revisión del mercado eléctrico, la fiscalidad, «que es compleja y no es la óptima», así como el almacenamiento.

El Ministerio para la Transición Ecológica señaló que el «mal llamado» céntimo verde, pensado para desincentivar el uso de fuentes de energía ligadas a hidrocarburos, emite en el mercado una señal opuesta, ya que es trasladado a los precios de la electricidad cuando tecnologías como el gas a través de los ciclos combinados fijan los precios en el mercado mayorista.

Según el gabinete dirigido por Ribera, la evolución del mercado mayorista en un escenario de normalidad apunta a que, al final de 2018, la factura de la electricidad podría experimentar una subida del 3,6% respecto al ejercicio anterior. Para un hogar con un consumo de unos 2.600 kilovatios hora (kWh) anuales, la subida podría ser de 23,4 euros para el conjunto de 2018, según las expectativas de precio de mercado. En el caso de un hogar que consuma 3.600 kWh, la subida sería de unos 32,4 euros en todo el año. Con estas medidas fiscales, el Gobierno prevé ahorrar a los consumidores unos 6,2 euros y unos 8,5 euros según la cuantía de los consumos.

Para garantizar que los menores ingresos tributarios derivados de las medidas anteriores pongan en riesgo la sostenibilidad del sistema eléctrico con la generación de déficit de tarifa, el Gobierno eleva para 2018 el límite máximo de los ingresos por la subasta de los derechos de emisión de gases de efecto invernadero que se transfiere al sistema eléctrico anualmente y que hasta ahora estaba establecido en el 90% del ingreso total, con un máximo de 450 millones anuales. Además, el superávit acumulado de ingresos del sector eléctrico podrá ser aplicado a los desajustes que se pudieran producir en 2018 y 2019.

Por otra parte, el Gobierno también ha adoptado medidas con el fin de impulsar el cumplimiento de los objetivos de penetración de energías renovables, fijados por la Unión Europea para 2020 en el 20%. Una de ellas será otorgar una prórroga excepcional, por una sola vez, para los permisos de acceso y conexión otorgados con anterioridad a la aprobación Ley 24/2013, en cuya ausencia caducarían el próximo 31 de diciembre. Mediante esta prórroga, hasta marzo de 2020, se posibilitará la entrada en funcionamiento en 2020 de los cerca de 9.000 megavatios (MW) de potencia adjudicada en las últimas subastas de renovables y anteriores procedimientos, ya que, en la actualidad, apenas se han instalado 100 MW.

Con esta medida, se evita que deba remitirse una nueva solicitud, tramitación y otorgamiento, algo que impediría alcanzar los objetivos internacionales acordados por España, según considera el gabinete dirigido por Ribera. En la misma línea, se adoptarán medidas tendentes a evitar la especulación y asegurar la finalización de los proyectos con derechos de acceso a la red otorgados, elevando las garantías exigidas e imponiendo obligaciones de reporte del grado de avance de los proyectos, lo que redundará en unos menores costes y, en último término, menores precios para los consumidores.

Actuar sobre las cargas fiscales

Por su parte, Endesa considera una medida «razonable y positiva» para reducir los costes del sistema y beneficiar de manera directa a los consumidores la suspensión durante 6 meses del impuesto del 7% a la generación eléctrica. Fuentes de la compañía recuerdan que, para bajar de manera sustancial los precios eléctricos, la vía «más eficaz» es actuar sobre las cargas fiscales que encarecen «notablemente las tarifas y no tienen relación con los costes del suministro».

En lo que respecta al bono social, la energética subraya que siempre ha considerado positivo su existencia para permitir el acceso al servicio eléctrico a los consumidores de rentas más bajas y señala que es también «favorable» a que se definan con rigor las condiciones para su aplicación, «sobre la base de procedimientos simples y eficaces, a fin de que se beneficien de él las familias que realmente lo necesitan».

Además, también recibe de «manera positiva» la intención de crear un marco «estable y duradero» que dé seguridad a su implementación. No obstante, la compañía se suma a quienes consideran que es una medida de política social y que, en consecuencia, «su financiación debe ser asumida por parte de los presupuestos públicos, como señalan diversos informes de expertos y de organismos de la Unión Europea».

En lo que se refiere a la derogación del conocido como impuesto al sol, Endesa afirma que no solo es muy favorable al desarrollo del autoconsumo, sino que ofrece a los consumidores soluciones comerciales de muy diverso tipo para promover su implantación. En todo caso, recuerda que «ese mal llamado impuesto» no afecta en ningún caso a los ingresos de la compañía por cuanto que, tras su eliminación, los costes regulados del sistema serán los mismos». Sin embargo, destaca que en la medida en que los clientes que tengan instalaciones de autoconsumo no asumirán la totalidad del pago de esos costes, «será el resto de los consumidores quien lo haga».

El PP presenta una moción para evitar el cierre de las centrales de generación eléctrica viables

Europa Press.- El PP ha presentado una moción en el Senado para evitar el cierre de las centrales de generación eléctrica «viables» de forma unilateral y sin tener en cuenta «el interés general» ni los objetivos o garantías de suministro y cambio climático e «impacto en el precio de la electricidad». Esta iniciativa está así en línea con la propuesta de Ley que intentó sacar adelante el anterior Gobierno, que pretendía endurecer los criterios que tenía que cumplir una eléctrica para cerrar una central de generación.

En este nuevo intento en el Senado, cámara en la que el PP cuenta con mayoría, el grupo parlamentario insta también al Ejecutivo a mantener el carbón como componente del mix energético, «planteando los términos de una transición justa del sector minero en términos de transición, no de cierre, y defender los pagos por capacidad de las centrales térmicas de carbón hasta que las interconexiones sean las mínimas necesarias para una correcta gestión de la red, siendo las centrales térmicas indispensables para el control de la red y abaratamiento de la factura de la luz».

Una interconexión eléctrica del 15%

Asimismo, solicita continuar impulsando «decididamente» la instalación de renovables y biomasa que complemente los más de 28.000 megavatios (MW) de solar fotovoltaica que, o bien están operando o están en proceso de construcción, los 2.300 MW de termosolar y 23.000 MW de energía eólica, para cumplir los objetivos de penetración de renovables y emisiones de CO2 en el año 2030 y 2050. Además, en su iniciativa insta a impulsar las interconexiones energéticas de España y «poner todos los medios necesarios» para que en el año 2030 se alcance un mínimo del 15% de interconexión en redes de transporte de electricidad.

Por otra parte, pide al Gobierno replantearse la decisión de crear un nuevo impuesto especial para el diésel, por lo perjudicial que supondría para la industria automovilística, el sector agrario, los autónomos, los transportistas y para todos los usuarios propietarios de vehículos diésel. De esta manera, ve necesario apostar por un nuevo modelo sostenible de transporte con cero y bajas emisiones, «pero exigiendo un modelo de transición ordenada para que la economía, la industria y los consumidores se puedan adaptar a este nuevo modelo energético».

La central nuclear de Almaraz

Por otro lado, el PP de la provincia de Cáceres ha denunciado que el cierre de la central nuclear de Almaraz supondría terminar «de golpe» con el futuro de la comarca de Campo Arañuelo, además de destruir «de inmediato» cientos de puestos de trabajo, y provocar que las familias extremeñas pagasen un 15% más por la luz y las empresas afrontasen un incremento del 25%.

El presidente del PP de la provincia de Cáceres, Laureano León, se reunió con los alcaldes, portavoces y presidentes locales para abordar este asunto que «preocupa» a los dirigentes del PP, que «quieren evitar el cierre de la central» y «conseguir un compromiso serio» del Gobierno de España, de la Asamblea de Extremadura y de la Diputación de Cáceres. Por ello, no descartan impulsar movilizaciones ante la «preocupación» por esta situación de Campo Arañuelo, e informar a todos los vecinos de la zona de lo que supondría el cierre de la central, entre otras acciones.

Cabe recordar que el PP ya ha solicitado en el Congreso que se modifique la Ley de cierre de estas instalaciones, y ha pedido al PSOE que rectifique su postura del sí al cierre de la central nuclear, al tiempo que pide al Gobierno de España que «reflexione» y «rectifique». «Que el Gobierno defienda el no al cierre de las centrales nucleares, porque tener una energía a un precio desorbitado es sinónimo de pérdida de competitividad de nuestra industria y de empleo, y el objetivo del PP es seguir creando condiciones óptimas en nuestra sociedad para continuar creando empleo», concluye.

Vara destaca que Extremadura no es Garoña ni Zorita y que «o está la alternativa» o Almaraz «no se cierra»

Europa Press.- El presidente de la Junta de Extremadura, Guillermo Fernández Vara, ha destacado que Extremadura no es ni Garoña ni Zorita y que, o «está la alternativa» para la central nuclear de Almaraz «o no se cierra». En cualquier caso, Vara «no tiene ninguna duda» de que «lo nuclear es pasado» y que se debe elaborar una Ley de Cambio Climático y establecer un calendario de cierres «adecuado de las nucleares» para que el mercado energético español «lo pueda ir asumiendo».

«Evidentemente yo no voy a permitir que se tome ninguna decisión sobre nada que sea nuclear para Extremadura sin que la alternativa esté; nosotros no somos ni Garoña ni Zorita, ¿eh? Yo no voy a permitir que me prometan, o está la alternativa o no se cierra», aseguró, para agregar: «no quiero pasarme la vida abrazado a un almacén de residuos nucleares, pero entiendo que la alternativa tiene que estar antes de tomar ninguna decisión«.

Las renovables y el diésel

Vara también se ha referido a otros aspectos de la política energética y, en concreto, a las renovables, al apuntar que para 2030 se prevé que en España se produzcan 20.000 megavatios de fotovoltaicas y que «allí hay que estar». Así, ha defendido que Extremadura debe ser capaz de coger «una buena tarta de ese futuro», para lo cual «hay que moverse» y se va a reunir próximamente con Red Eléctrica y la ministra para la Transición Ecológica, Teresa Ribera.

Sobre este asunto e interpelado posteriormente por su parecer sobre el Impuesto al Diésel, ha considerado que «no lo va a pagar todo el mundo» y que quienes necesiten el automóvil para usos esenciales como autónomos o repartidores no lo deberán abonar, al tiempo que se ha preguntado si «de verdad alguien duda» de que «esto del cambio climático va en serio» y si el hecho de que no suba el impuesto del diésel «merece la pena» para que nuestros hijos «sufran» un planeta con 5 grados más de temperatura.

La OCDE insta a mover las economías hacia una senda baja en carbono para cumplir con el Acuerdo de París

Europa Press.- La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) ha advertido a los países de que es necesario que respeten sus compromisos climáticos al tiempo que los riesgos crecen y afea que, 3 años después de sus promesas en la Cumbre del Clima de París, una «aplastante mayoría» de Gobiernos no han tomado las acciones necesarias para contener el aumento de los riesgos climáticos.

Por ello, en un contexto de nuevo crecimiento de emisiones, la OCDE urge a sus 42 miembros que necesitan más seriedad para abordar la cuestión y dirigir a sus países a un modelo bajo en carbono y dejar de invertir en infraestructuras intensivas en carbón. Así lo recomienda la OCDE en el documento de la OCDE Financing Climate Futures: Rethinking Infraestructure. El estudio denuncia que solamente 9 de los 180 países firmantes del Acuerdo del Clima de París se han comprometido con la estrategia baja en carbono de largo plazo para 2050 de la ONU.

Sin embargo, se siguen gastando más de 424 billones de euros anuales en subsidios al petróleo, al carbón o al gas y la mayoría no han roto su dependencia presupuestaria de los ingresos procedentes de los combustibles fósiles. Además, el documento también denuncia que los Gobiernos están fallando a la hora de hacer un suficiente uso del gasto público como palanca para descarbonizar sus economías mediante la inversión en infraestructuras bajas en emisiones e innovación.

«Después de todos los compromisos de París y a pesar de tener en la mano todas las herramientas que se necesitan para avanzar, esta inercia nos pone en el riesgo de perder la guerra contra el cambio climático», alerta el secretario general de la OCDE, Ángel Gurría. Por ello, insiste en que los Gobiernos necesitan implantar sus compromisos por completo y entonces aumentar la acción.

Para alcanzar el objetivo de temperatura de París, las emisiones globales de CO2 necesitan dejar de crecer tan pronto como sea posible y desde ahí iniciar un rápido declive hasta llegar prácticamente a cero durante la segunda mitad de este siglo. La OCDE valora que se han producido algunos progresos en materia de financiación verde, por ejemplo el mercado de bonos verdes, que se ha inflado en un 1.000% en los cinco años antes de 2017 y la transparencia sobre los riesgos climáticos está mejorando.

El informe sugiere también vías para atraer mayores flujos financieros, públicos y privados, a alinearse con los objetivos de París y en particular con la financiación de infraestructuras. El estudio cree que debería hacerse a través de una mejor planificación y previsión, mediante la integración de la preocupación climática en las decisiones presupuestarias y dar ventaja a la compra pública de infraestructuras bajas en emisiones.

El análisis de la OCDE muestra asimismo como el cambio hacia inversiones en infraestructuras hacia opciones bajas en carbono combinadas con reformas estructurales para apoyar esta transición podría en la actualidad aumentar el Producto Interior Bruto como mucho un 5% en 2050, más que situarse como una amenaza para el crecimiento económico. Esta conclusión incluye también los efectos de tener menor riesgo de daños a consecuencia de los fenómenos meteorológicos extremos, ya que el coste de impulsar las infraestrucutras verdes frente a otras podría ser mayor que el balance por los ahorros de combustibles fósiles.

Todavía se ha hecho poco por los gobiernos para nivelar el campo de juego entre las alternativas altas o bajas en carbono, según la OCDE, que pone de ejemplo que las centrales eléctricas que están en la actualidad bajo construcción o en la planificación conducirán casi a duplicar las emisiones procedentes de la generación eléctrica actual. Por ello, la organización admite que todavía son débiles los incentivos para hacer el cambio hacia la energía e infraestructuras verdes y desincentivar las emisiones en todos los sectores.

El análisis de precios de carbono de la OCDE se basa en los impuestos y las emisiones transferibles, que permiten a 42 países que el 46% de las emisiones globales de CO2 no están sujetas a precio y solo el 12% de las emisiones globales de CO2 tienen un precio por encima del coste real estimado para el medio ambiente, que se sitúa en 30 euros por tonelada de CO2. Entiende la organización que con el ritmo de crecimiento anual del precio de las emisiones, los precios del carbón solo llegarán a sus costes reales para el clima en 2095.