Elena Salgado afirma que el Gobierno aún no ha fijado cuánto subirá la luz en enero

«No está decidido. El término de energía es una parte importante de la tarifa, pero no hemos decidido todavía«, explicó Elena Salgado en los pasillos del Congreso aludiendo al resultado de la subasta de energía eléctrica celebrada por el OMEL, que determina el llamado «término de energía».

La tarifa eléctrica de último recurso (TUR), a la que están acogidos 20 millones de consumidores, consta básicamente de dos partes: los peajes de acceso regulados, que establece el Gobierno y que en esta ocasión se congelan, y el coste de la energía, que se fija cada trimestre mediante subastas.

En la subasta, el coste de la energía eléctrica para el primer trimestre de 2011 subió un 4,3% para el producto base y el 1,86% para el suministro en horas punta.

Al ser preguntada por la posibilidad de que el encarecimiento del coste de la energía se traduzca en una subida del 10 por ciento en el recibo de la luz, Salgado dijo: «No, un 10 por ciento es si se aplicara ese término de energía, que no depende del Gobierno. Pero no está todavía decidido».

«A la vista de este incremento del término de energía tenemos que decidir», concluyó.

El Ministerio de Industria consideró prematuro determinar ahora mismo el impacto que el resultado de la subasta tendrá en la tarifa regulada.

Según fuentes del departamento que encabeza Miguel Sebastián, Industria tiene que analizar aún el informe completo con los datos de la subasta y realizar los cálculos pertinentes para conocer cómo quedará finalmente la tarifa.

Industria propone, de nuevo, no subir en enero la parte de la luz que estipula el Gobierno

El documento contiene también previsiones de demanda eléctrica para 2011, para el que se espera un crecimiento del 2,1% (similar al augurado para 2010); así como de costes e ingresos del sistema, en virtud de los cuales el próximo ejercicio se produciría un déficit de unos 3.000 millones de euros, frente al objetivo de 2.000 millones fijado por real decreto.

El mantenimiento de los peajes no significa que no vaya a subir el recibo de la luz para los hogares y pymes acogidos a la tarifa eléctrica de último recurso (TUR), que en la revisión de octubre aumentó una media del 4,8% por el alza del coste de la energía.

Recientemente, el presidente de la patronal eléctrica Unesa, Pedro Rivero, señaló que los mercados a futuro indican que el resultado de la subasta que determina el coste de la energía (CESUR) estará entre un 4 y un 5% por encima de los precios obtenidos en la celebrada para fijar las tarifas del cuarto trimestre.

Los peajes o tarifas de acceso remuneran los costes regulados del sistema eléctrico, como las primas a las renovables, el transporte o la distribución, y las pagan todos los consumidores de electricidad.

En el caso de la TUR, a la que pueden acogerse usuarios con potencias inferiores a los 10 kilovatios (hogares y pymes), los peajes constituyen uno de los componentes usados para su cálculo, junto a los impuestos y el precio de la energía, que determina la subasta CESUR (está previsto que la próxima se celebre el 14 de diciembre).

En el documento remitido a la CNE, Industria propone mantener las tarifas de acceso a las redes de transporte y distribución que entraron en vigor el 1 de julio, tanto para los grandes consumidores como para los pequeños.

A finales de junio, el ministro de Industria, Miguel Sebastián, y el portavoz económico del PP, Cristóbal Montoro, anunciaron que habían acordado no aplicar la subida de la luz prevista para julio, lo que obligó al Ejecutivo a mantener o incluso bajar los peajes en contra de su propuesta inicial.

El Gobierno y el PP acordaron congelar la tarifa eléctrica para buscar un pacto de Estado en materia energética que aún no se ha cerrado y que, entre otras actuaciones, conllevaría la revisión de todos los costes que soporta el sistema eléctrico.

En cuanto al balance económico del sistema, la propuesta contempla unos costes de 15.757 millones de euros y unos ingresos de 12.709, lo que arroja un déficit de tarifa de unos 3.050 millones de euros, superior en mil millones al previsto en la normativa que establece que este «agujero» (que a finales de este año puede acumular más de 20.000 millones) debe dejar de generarse en 2013.

Entre los costes, destacan las primas al régimen especial (renovables y cogeneración), que se prevé que sumen 6.759 millones de euros.

Por otra parte, la propuesta contempla un aumento de los pagos por capacidad del 72% para poder hacer frente a la previsión de costes relacionados con la entrada en aplicación del real decreto que establece incentivos al consumo de carbón nacional para la generación de electricidad.

Esto implicará un incremento del coste de la energía de entre el 4,7 y del 0,8%, dependiendo del tipo de cliente.

La demanda total de energía eléctrica aumenta un 3,5 por ciento en lo que va de año

Según los datos hechos públicos por Unesa, la patronal eléctrica, el mercado peninsular de energía eléctrica cubierto con energía generada en el régimen ordinario ha sido de 163.229 millones de kWh (-1,3%).

Dicha energía representa el 68,9% de la demanda total peninsular. El 31,1% restante ha sido cubierto por la energía generada por los productores en régimen especial y el saldo de los intercambios internacionales de energía eléctrica.

En lo que va de año, la electricidad aportada por los productores en régimen especial ha aumentado un 14,9% respecto al mismo período del año anterior y supone el 34,5% de la demanda total peninsular.

Entre el 1 de enero y el 30 de noviembre de este año, la producción bruta en el régimen ordinario ascendió a 173.240 millones de kWh, lo que supone un descenso del 1,1%. Por tipos de centrales, la producción de origen hidroeléctrico aumentó un 68,4%, mientras que la producida mediante carbón, fuelóleo y gas descendió un 23,2% y la nuclear aumentó un 17,1%.

La demanda de electricidad crece hasta el 3,3 por ciento en noviembre, según REE

Ajustados los efectos del calendario laboral y de las temperaturas, el incremento de la demanda bruta de electricidad fue del 7,2%, debido a que en noviembre de este año ha hecho más frío que en el mismo mes del año pasado, informó Red Eléctrica de España (REE).

En el acumulado de once meses, el consumo de electricidad aumentó un 3,2%, hasta los 237.327 GWh, en tanto que en términos brutos el incremento fue del 3,6%.

Durante el mes de noviembre, la energía eólica registró un nuevo máximo histórico de potencia instantánea, tanto horaria como diaria.

Así, el pasado día 9, la producción instantánea de energía eólica alcanzó los 14.962 megavatios (MW) a las 14.46 horas, un 13,5% más que el récord anterior. Un día antes, también se superó el máximo de energía eólica diaria con 315.258 MWh.

Entre enero y noviembre, las energías renovables aportaron el 34,4% de la generación total, mientras que la nuclear concentró el 22%, los ciclos combinados el 23% y el carbón el 8%.

Durante el undécimo mes del ejercicio, el 55,2% de la generación eléctrica peninsular correspondió a tecnologías que no emiten CO2.

La demanda eléctrica alcanza su máximo desde febrero al situarse ayer en 43.849 MW

Según datos de Red Eléctrica de España (REE), se trata del pico de demanda más alto desde el pasado 12 de febrero, cuando se elevó hasta los 43.866 MW a las 19.32 horas.

En el momento de más consumo, el 35,6% fue cubierto por la generación de los ciclos combinados, la energía nuclear el 14,4%, la hidráulica cubrió el 13,5%, la eólica el 11,3%, el resto del régimen especial el 12,7% y el carbón el 10,9%.

La demanda máxima de energía en lo que va de año 2010 se registró el día 12 de enero, cuando a las 19.18 horas se situó en 44.167 megavatios.

Nomura aconseja evitar la prisa al colocar el déficit de tarifa este año y no considera «dramático» esperar a 2011

En un informe, Nomura considera que a finales de la segunda semana de diciembre los mercados podrían tranquilizarse, como suele ocurrir cuando se acerca el final del año, y podría aparecer una «ventana de oportunidad» para realizar una primera emisión de deuda eléctrica.

No obstante, y a pesar de la «inexplicable ansiedad de todas las partes», considera que una eventual decisión de trasladar la primera emisión a 2011 no debe percibirse como algo «dramático ni generar el temor a un recorte del ‘rating’.

En todo caso, los analistas de Nomura afirman que, «desgraciadamente», el final del proceso de tramitación de la titulización del déficit ha coincidido con «un momento de volatilidad sin precedentes en el riesgo de la deuda soberana de España».

«El ambiente de los mercados se ha deteriorado hasta niveles sin precedentes» y el lanzamiento «inmediato» de una primera emisión por entre 2.000 y 3.000 millones podría encarecer el tipo de interés de los bonos, señalan.

Esta circunstancia, indican, afectará negativamente a los consumidores, que son los que tienen que devolver el déficit de tarifa. «El Gobierno tiene el deber de proteger los intereses de los consumidores, que son los que deberán soportar los costes de financiación de la titulización», señalan, antes de considerar que «el sentido común aconseja esperar».

La demanda de electricidad sube un 3,24 por ciento en lo que va de 2010, según la CNE

El Consejo de Administración de la Comisión Nacional de la Energía (CNE) examinó el Boletín semanal del mercado de electricidad correspondiente a la semana entre el 13 al 19 de noviembre.

En el Boletín se analiza la evolución diaria, semanal y anual de los precios horarios habidos en los mercados, diario e intradiarios, así como en los servicios de ajuste.

Durante la semana de estudio se ha alcanzado un nivel de acoplamiento de los precios en el Mibel (Mercado Ibérico de Energía) del 89% de las horas.

Las eléctricas prevén colocar en dos o tres operaciones los 13.500 millones de euros del déficit, según Pedro Rivero

Esta semana, la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) aprobó el folleto para la titulización (conversión en deuda negociable) del déficit de la tarifa eléctrica, que a finales de 2009 superaba los 14.600 millones de euros y que se genera porque los ingresos vía recibo de la luz no cubren todos los costes que soporta el sistema.

El programa de emisión de bonos del Fondo de Amortización del Déficit Eléctrico (FADE) prevé un importe máximo de 25.000 millones de euros, de los que 13.500 millones ya cuentan con el aval del Estado.

Rivero explicó que previsiblemente la primera emisión, a la que «damos mucha importancia porque es la primera», será de 3.000 millones de euros y señaló que sería «una enorme sorpresa» que hubiera problemas para su colocación, a lo que añadió que esperan poder «acabar en dos o tres operaciones con los 13.500 millones».

«No hay razones para no hacerlo así, salvo que hubiera circunstancias no previstas en los mercados, que no tiene por qué haberlas«, afirmó Rivero, quien, no obstante, recordó que los bancos colocadores son los que deben decir qué momento es el mejor para hacer la titulización y por qué importe.

En cuanto al calendario previsto para las próximas operaciones (tras esta primera, cuyo período de prospección de demanda terminará en torno al 8 de diciembre), el presidente de Unesa explicó que serán los colocadores quienes «dirán cuál es el momento mejor para la colocación en cada uno de los tramos y el volumen del tramo. Eso es un problema de la agencia de colocación», es decir, un tema que quedará en manos de los bancos, en contacto a su vez con los inversores.

Por otra parte, confió en que el Gobierno y el PP sean capaces de lograr un acuerdo en materia energética y espera que la necesidad de revisar la tarifa eléctrica en enero «influya» entre ambos a la hora de pactar. Eso sí, admitió no saber si dicho acuerdo será «para bien o para mal».

Sobre esta cuestión, Rivero explicó que el Gobierno aún no les ha comunicado su propuesta de peajes (que retribuyen conceptos como primas a las renovables, transporte o distribución) y recordó que su evolución también dependerá de la subasta para la compra de energía (CESUR) que se celebrará el 14 de diciembre.

Apuntó que los futuros indican que el resultado de la subasta estará entre un 4 y un 5% por encima de los precios obtenidos en la celebrada para fijar las tarifas del cuarto trimestre del año.

En cuanto al pacto en materia energética que negocian el Gobierno y el PP, Rivero dijo que estaría bien que, por una vez, se pusieran de acuerdo «en lo que hay que hacer en la regulación, especialmente en lo que no es mercado, sino precio fijado».

En este sentido, confió en que no se repita el acuerdo entre socialistas y populares que conllevó la congelación de la tarifa de último recurso, como ocurrió el pasado mes de julio.

Tras la congelación de precios para el tercer trimestre, la TUR subió una media del 4,8 por ciento en octubre, después de que el Gobierno decidiera mantener los peajes y de que la CESUR arrojara precios un 5% superiores a los obtenidos en la subasta anterior.

Por otro lado, Rivero eludió opinar sobre la reunión que este sábado mantendrá el presidente del Gobierno con los presidentes de 30 compañías españolas. «Yo no voy a opinar de una reunión en la que han convocado a mis socios. Las patronales no hemos sido convocadas», dijo.

Acciona y APPA dicen que las energías renovables no son la causa del déficit de tarifa

Durante un foro sectorial organizado por el Club Español de la Energía, Carmen Becerril ha afirmado que «el déficit de tarifa tiene muchas causas y orígenes, y necesita de un análisis muy global» que aborde «todos los costes del sistema eléctrico y cómo se producen», sin caer en la «simplificación» de culpar a las renovables.

De hecho, advirtió de que, «si se mira alrededor», se podrá apreciar que «las subvenciones cruzadas y los costes hundidos no están precisamente en las renovables». Además, recordó que en 2008, el año en que más déficit de tarifa hubo, de 5.200 millones, las prima a las renovables se situaron en 2.400 millones, lo que supone casi la mitad de los niveles actuales.

«En realidad, uno de los problemas de las renovables es que son el mecanismo de retribución más transparente que hay, en el que la cuenta sale nítida y meridiana y todo el mundo sabe cuánto cuesta la fotovoltaica«, afirmó Becerril, antes de precisar que su empresa no tiene intereses en esta última tecnología.

Por otro lado, lamentó la «incertidumbre» regulatoria en el sector de las renovables y el «triste espectáculo» con el que se revisan en cuestión de meses documentos oficiales sobre esta materia. Como ejemplo, recordó que los objetivos de renovables en 2020 del Pacto de Zurbano se modificaron primero en el Plan de Acción de Energías Renovables (Paner) y, hace apenas unos días, en la Subcomisión de Energía del Congreso.

«La incertidumbre de que la planificación pueda cambiar en tres meses es una señal de poca solidez«, señaló, antes de advertir de que «España está proyectando hacia fuera una sensación de debilidad del sistema jurídico y provocando falta de credibilidad».

Por último, pidió al Gobierno que «abra la puerta a la eólica marina» para que las empresas españolas no pierdan su liderazgo y para que sus «tecnólogos» puedan ser también «competitivos» y «llevar un nuevo modelo de desarrollo fuera de las fronteras».

Por su parte, González Vélez lamentó que la regulación califique a las renovables de «sobrecoste» del sistema, cuando son en realidad «un coste más», y pidió que el Gobierno deje de hacer «política económica con las tarifas» y que la tarifa regulada se limite exclusivamente a un pequeño grupo de consumidores con necesidades.

Sobre el déficit de tarifa, negó que las primas a las renovables puedan considerarse la causa de este problema y mostró un cuadro en el que se aprecia que no existe una relación entre el aumento del desajuste del sistema y los mayores incentivos ‘verdes’. «Es una evolución completamente errática y el importe del déficit no tiene ninguna relación con el importe de las primas», afirmó.

Otro de los ponentes del foro, el presidente de la Asociación Empresarial Eólica (AEE), José Donoso, lamentó la «imagen penosa» de España a nivel internacional por su incertidumbre regulatoria y defendió la aportación de la energía eólica a la economía. También afirmó que incentivar esta fuente de generación no «penaliza» la competitividad, sino que responde a una «política de estadista».

Donoso recordó además que las primas a las renovables no se crearon como una subvención, sino que fueron el incentivo con el que se evitó, como pretendía la Unión Europea, que las energías que emiten más CO2 pagaran una tasa por contaminar. «A nadie le pareció una amenaza en ese momento, pero en cuanto empezamos a crecer comenzaron a cuestionarnos», señaló.

La próxima subasta cesur que fijará la tarifa eléctrica se celebrará el 14 de diciembre

El resultado de esta puja servirá para fijar uno de los dos principales componentes de la Tarifa de Último Recurso (TUR) de la luz, referido al coste de la electricidad, cuyo peso ronda el 50% en la fórmula final.

El otro componente, el de los costes regulados del sistema eléctrico, se integra en la fórmula a través de la tarifa de acceso y debe ser calculado por el Ministerio de Industria.

La subasta de diciembre se celebrará después de que la última puja, la de septiembre, arrojase una subida del 5,6% que, tras varios ajustes posteriores, se situó en el 11%. Este incremento, acompañado de una congelación de peajes, condujo al Gobierno a aplicar una subida final de 4,8%.

Esta subida fue la segunda del año, después de que en enero se aplicase un incremento del 2,6% y de que en julio Industria y el PP pactasen una congelación. La TUR afecta a cerca de 24,9 millones de consumidores con menos de 10 kilovatios (kW) de potencia contratada que no hayan querido contratar el suministro en el mercado libre.

En la decimotercera subasta Cesur se colocarán entre las comercializadoras de último recurso 8.132 megavatios (MW) de electricidad base para el próximo trimestre, así como otros 306 MW de electricidad punta, según consta en el Boletín Oficial del Estado (BOE) del sábado.

La puja se realiza mediante un mecanismo de reloj descendente. En este caso, el precio máximo de apertura, que deberá ir abaratándose en cada ronda, será de 65 euros por megavatio hora (MWh) para el producto base y de 75 euros por MWh para el punta.

En la anterior subasta, el producto base se colocó a un precio de 46,94 euros por MWh, mientras que el punta marcó un precio de 53 euros por MWh. Esta electricidad fue adquirida por las cinco compañías capacitadas para ofrecer la TUR, que son Endesa, Iberdrola, Gas Natural Fenosa, E.On y HC.