California lanza un programa para medir las emisiones de gases de efecto invernadero en todo su territorio

En principio, el sistema se centrará en las emisiones y concentraciones de metano, uno de los gases que más contribuye al calentamiento climático, y después se ampliará con el fin de cuantificar todos los gases de efecto invernadero.

Los dispositivos para su medición en tiempo real se instalarán este verano en distintos puntos del estado, entre ellos los valles de San Joaquín y Sacramento, donde se desarrollan actividades agrícolas y petroleras, así como en la ciudad de Los Ángeles.

El objetivo de la iniciativa es cumplir el objetivo de que en 2020 las emisiones de gases de efecto invernadero se sitúen al nivel de 1990, tal como fija la legislación californiana.

Para ello, dicho estado prevé un programa de intercambio de emisiones, por lo que precisará contar con datos precisos sobre las mismas para poder ponerlo en práctica, lo que ha motivado la puesta en marcha del programa.

España emitió en 2008 casi un 40 por ciento más de CO2 que en 1990, año base de Kioto

Así lo establece el Inventario Nacional de Emisiones de Contaminantes Atmosféricos que la Secretaría de Estado de Cambio Climático ha remitido a Bruselas, correspondiente a la serie temporal 1990-2008.

Según informó el Ministerio de Medio Ambiente, y Medio Rural y Marino, la Secretaría ha informado también de las proyecciones con horizonte 2020 de los inventarios correspondientes a la serie 1990-2007.

Medio Ambiente achaca el descenso de las emisiones a una mejora de la intensidad energética y a un cambio en el mix de producción de energía, con un «claro incremento» de las renovables y una disminución del uso del carbón.

Además, se observa una disminución de las emisiones a causa de un menor uso de combustibles en el sector transporte y en determinadas actividades industriales, como la fabricación de cemento.

Las proyecciones nacionales de emisión, basadas en la serie 1990-2007 del inventario, apuntan que las emisiones de gases de efecto invernadero medias para España en el quinquenio 2008-2012 se situarían en un 34,45% por encima del año base del Protocolo de Kioto.

Europa notifica a la ONU su compromiso de reducir un 20% sus emisiones de CO2

Según informó el Ministerio de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino, también se han notificado los objetivos de reducción de emisiones de gases de efecto invernadero de la Unión Europea para 2020.

Así, se reitera la oferta de alcanzar el compromiso de reducir las emisiones en un 30% si otros países industrializados y en desarrollo contribuyen de forma comparable de acuerdo con sus responsabilidades y capacidades.

La Unión Europea informa, asimismo, de que ya ha adoptado en su legislación comunitaria el compromiso unilateral de reducir sus emisiones en un 20% respecto a los niveles de 1990.

«La Presidencia española reforzará y ampliará el máximo consenso alrededor del Acuerdo de Copenhague dentro del proceso de Naciones Unidas. Estamos trabajando conjuntamente con nuestros socios para poner marcha los elementos del acuerdo tan pronto como sea posible y construir el camino para lograr un Conferencia de las Partes exitosa en México», señaló la ministra de Medio Ambiente, Elena Espinosa.

«Esfuerzos» para conseguir en 2010 lo que «no fue posible» en Copenhague

La ministra Espinosa, instó a la comunidad internacional a «seguir trabajando» para alcanzar a finales de este año en la Cumbre de México «lo que no ha sido posible conseguir en Copenhague», en la última conferencia del Clima de Naciones Unidas.

Según informó Medio Ambiente, la ministra hizo estas declaraciones al término de las comisiones de Medio Ambiente y Agricultura que se celebraron en el Parlamento Europeo.

«Tenemos que seguir trabajando a niveles internacionales para llegar a un acuerdo vinculante en México a finales de este año, y poner todo el esfuerzo para que en consigamos lo que no ha sido posible conseguir en Copenhague», concluyó la ministra.

Las emisiones de CO2 de los coches vendidos en 2009 se redujeron un 4 por ciento

Según la patronal de los concesionarios, la puesta en marcha del Plan 2000E ha supuesto un cambio en los hábitos de compra de los conductores, imponiéndose la adquisición de vehículos más pequeños, más baratos y menos contaminantes.

Los modelos cuyas emisiones están entre 0 y 149 gramos de CO2 acapararon en 2009 cerca del 70% de la cuota de mercado.

El Plan 2000E ha acelerado este cambio estructural, así como la reducción de emisiones, que daba muestras de ralentización tras el fuerte recorte experimentado con la aprobación del nuevo Impuesto de Matriculación en 2008.

Por otro lado, el año pasado también se redujo la potencia de los coches vendidos en los concesionarios, que ahora es un 3,2% menor, con 116 CV de media.

Desciende el interés de los inversores en el mercado de emisiones de CO2 tras el fracaso de Copenhague

Los mercados de carbono son un elemento fundamental del Protocolo de Kyoto y obligan a los países desarrollados que superan los límites de emisión a comprar créditos mediante los que se financian proyectos para la generación de energías limpias en países en vías de desarrollo.

La incertidumbre con respecto a futuras regulaciones motivada por la falta de acuerdo en Copenhague podría provocar un descenso del precio de los créditos para el intercambio de emisiones de CO2, según los expertos, por lo que ciertos inversores han abandonado ya proyectos para la generación de energías limpias.

Algunos apuntan que el precio de dichos créditos ya ha experimentado un descenso debido a que la introducción de planes para el intercambio de emisiones en ciertos países, como Estados Unidos y Australia, aún siguen siendo inciertos.

A la bajada de precios también esta contribuyendo la crisis económica global, que ha motivado un descenso de las emisiones de CO2, y, como consecuencia, ha reducido la necesidad de nuevos proyectos para la generación de energías limpias para compensarlas.

Los pastizales del mundo pueden absorber y almacenar más CO2 que los bosques

En su nuevo «Estudio de las evidencias sobre los sistemas pastoriles en áreas de secano y el cambio climático», la FAO informa de que los pastizales «tienen un enorme potencial sin explotar para mitigar el cambio climático», ya que también absorben y almacenan CO2.

El planeta cuenta en total con 3.400 millones de hectáreas de pastizales, que cubren cerca del 30% de la superficie terrestre libre de hielo y suponen el 70% de las tierras agrícolas.

Para esta agencia de la ONU, estos terrenos pueden desempeñar «un papel clave» a favor de la adaptación y para reducir la vulnerabilidad al cambio climático de más de mil millones de personas que dependen de la ganadería para vivir.

Además, el carbono retenido en estos espacios puede ayudar a las poblaciones dedicadas al pastoreo a adaptarse, ya que mejora la capacidad de retención del agua del suelo y, con ello, su capacidad para resistir las sequías.

Según datos de la FAO, las tierras de pastoreo almacenan el 30% del carbono del suelo a nivel mundial, además de la cantidad sustancial del carbono de superficie que almacenan árboles, matorrales, arbustos y hierbas.

Sin embargo, alerta de que las tierras de pastos «son muy sensibles a la degradación del suelo», que afecta al 70% de estos terrenos como consecuencia del sobrepastoreo, la salinización, la acidificación y otros procesos.

Por esta razón, la ONU propone dedicar entre el 5 y el 10% de las tierras de pastoreo a nivel mundial al secuestro de carbono para 2020, lo que supondría almacenar 184 millones de toneladas de carbono anuales.

Ecologistas en Acción insta a España a promover una reducción de emisiones de CO2 del 40% para 2020

Esta propuesta forma parte del documento de prioridades para la presidencia de turno presentado por la ONG, que anima a España a «tomar las riendas de la política europea en materia climática».

Según los ecologistas, esta disminución del 40% (respecto a los niveles de 1990) debería ser precedida de un descenso del 23% entre 2013 y 2017 como paso intermedio.

Además, critican la máxima del crecimiento económico indefinido recogido en la Agenda de Lisboa, que en su opinión «es incompatible con la sostenibilidad», y piden que la Unión Europea reduzca su consumo de materiales y energía y repare la deuda ecológica contraída con el Tercer Mundo.

En la práctica, señala la ONG, ello «implicaría renunciar a la firma de tratados de libre comercio entre la Unión Europea y distintos países o alianzas en América Latina».

Finalmente, instan a España incluir la biodiversidad en el corazón de todas las políticas sectoriales, especialmente las de energía, transporte, agricultura, agua, industria y turismo, en coincidencia con la celebración en 2010 del año Internacional de la Biodiversidad.

Hunosa y Endesa presentan la tercera fase de una planta de captura de CO2 en Asturias

Este proyecto lo desarrollan Hunosa y Endesa Generación, junto con el Instituto Nacional del Carbón (INCAR), además de Foster Wheeler como socio tecnológico.

El acto se celebró en la sede del INCAR, en Oviedo, y al mismo asistieron, entre otros, el presidente de la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI), Enrique Martínez Robles; el del Grupo Hunosa, Juan Ramón García Secades, y el director general de Endesa Generación, Manuel Morán.

También estuvieron presentes el presidente del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), Rafael Rodrigo, y Antonio Castilla Oliver en representación de Foster Wheeler.

Hunosa, Endesa y el CSIC firmaron el pasado año un acuerdo para el desarrollo de una planta de captura de dióxido de carbono (CO2) de un megavatio (MW) dentro de la central térmica de La Pereda.

Los costes de la investigación son asumidos a partes iguales por Hunosa y Endesa, mientras que el CSIC pone a disposición del proyecto sus conocimientos sobre la materia, que viene desarrollando desde el año 2000.

Está previsto que la planta, donde trabajarán técnicos de Hunosa, esté lista en 2012, cuando se realizarán las primeras demostraciones comerciales.

En febrero de 2007, el CSIC y Hunosa firmaron un acuerdo previo para el desarrollo de esta tecnología para la captura de CO2, basada en la combustión de carbón en lecho fluidizado circulante, en la central de La Pereda.

Repsol y Ciuden fomentarán las tecnologías de captura y almacenamiento de CO2

El acuerdo, explican ambas entidades, incluye realizar estudios para evaluar el transporte y almacenamiento de este gas.

El objetivo de esta colaboración es aportar el conocimiento básico de estas tecnologías, que sitúe a España entre los países de primer nivel en este campo, contribuyendo así a la sostenibilidad medioambiental.

Asimismo, la Fundación Repsol y la Fundación Ciudad Energía promoverán el conocimiento y difusión de la tecnología CAC a la sociedad, mediante actividades de formación y divulgación, entre las que destacan las relacionadas con el Museo Nacional de la Energía, que Ciuden empezará a construir próximamente en Ponferrada.

La Fundación Repsol, a través de su programa de Energía y Medio Ambiente, quiere contribuir al desarrollo de tecnologías energéticas que tengan un menor impacto ambiental, en especial en relación con el cambio climático, y que contribuyan a la mejora de la sostenibilidad medioambiental en los procesos de producción y transformación de energía.

A este respecto, los procesos con mayor proyección son los orientados a la captura y almacenamiento del CO2 producido por el empleo de combustibles fósiles, ya que permitirán una importante reducción de las emisiones de las instalaciones actuales de producción térmica de energía eléctrica y de producción de combustibles para el transporte.

Reducir un 30 por ciento las emisiones contaminantes sería desastroso para Francia

La representante empresarial indicó que Francia «no ha hecho el mismo trabajo» desde 1990 en reducción de emisiones de gases contaminantes, por lo que imponer acelerar la reducción de emisiones sería peligroso para la economía.

«No tener esto en cuenta puede provocar consecuencias económicas y sociales desastrosas«, indicó Laurence Parisot.

La presidenta de los empresarios aseguró que esa medida podría acarrear «destrucciones de fábricas, de empleos» ya que «en muchos sectores sería tan costoso en términos de competitividad que algunos no podrían hacerlo».

Aseguró que es favorable a que se adopte un objetivo vinculante de reducción de emisiones de gases a efecto invernadero durante la cumbre sobre el cambio climático que tiene lugar en Copenhague.

Parisot indicó que la principal patronal gala apuesta por mantener el compromiso de reducir un 20% las emisiones de gases de efecto invernadero en el horizonte de 2020 con respecto a los niveles de 1990, lo que constituye la primera propuesta de la Unión Europea.

Posteriormente, los Veintisiete se mostraron dispuestos a reducir hasta un 30% estas emisiones en caso de que el resto de los países apuesten por un acuerdo ambicioso en Copenhague.

Por el momento, Estados Unidos se compromete a reducir un 17% sus emisiones hasta 2020 con respecto a los niveles de 2005.