Los informes de la CNMC sobre los márgenes brutos de los carburantes «confunden al ciudadano», según afirman las petroleras independientes

Las conclusiones de informes como el de octubre, señaló la asociación, inducen al ciudadano a «sacar la impresión» de que las bajadas en las cotizaciones internacionales se han visto compensadas por el aumento de los márgenes de los operadores. «Esta impresión es fruto de la desinformación y falta de claridad», afirmó.

UPI realizó estas consideraciones en una nota aclaratoria en la que reaccionó al contenido del último informe sobre carburantes del regulador tras comprobar su impacto en los medios de comunicación, en un momento de fuertes bajadas en la cotización del petróleo.

UPI señaló en primer lugar que las comparaciones de precios antes de impuestos en la Unión Europea, en las que la CNMC atribuye a España unos niveles entre los más elevados del continente, se realizan a partir de una comparación «no homogénea», ya que «los Estados miembros utilizan distintos criterios de selección y tratamiento de datos».

Pese a que España ha pedido una armonización de las metodologías de cálculo entre los distintos Estados miembros, la CNMC «ni siquiera menciona la falta de armonización en letra pequeña en los informes de supervisión de precios de los carburantes como causa de un posible margen de error».

Sobre el término «margen bruto» usado en el informe, UPI consideró que se «confunde al ciudadano», porque se usa la diferencia entre el precio antes de impuestos y el precio final, cuando en realidad este margen incluye hasta quince costes distintos de actividad y no equivale, por tanto, a la ganancia bruta del operador.

Los operadores independientes citaron esta quincena de costes, entre los que figuran los gastos logísticos, tasas portuarias, controles de calidad, costes de personal, costes de seguros, costes financieros, gastos de transporte o almacenamiento, existencias obligatorias de seguridad u objetivos de biocarburantes.

La asociación también rechazó que se comparen cotizaciones internacionales de referencia con precios finales de los carburantes, ya que el coste del producto supone menos de la mitad del precio final. «Nunca por parte de la CNMC se recuerda que los impuestos representan aproximadamente la mitad del precio final», indicó.

Por último, UPI aseguró que los operadores petrolíferos no tienen capacidad para fijar el precio final de los carburantes en el 80% de las estaciones de servicio.

Industria autoriza a Capricorn a agrupar diversos permisos para la exploración de hidrocarburos frente a las costas valencianas

En concreto, la autorización permite la concentración de los trabajos y de las inversiones de los permisos de Benifayó, Gandía, Alta Mar 1 y Alta Mar 2, tras constatar Industria que los objetivos exploratorios son comunes.

Los permisos de Alta Mar 1 y 2 fueron concedidos a Capricorn en 2010, mientras que los de Benifayó y Gandía recayeron sobre la empresa Medoil. No obstante, esta empresa vendió los permisos a finales de 2011 a Capricorn, que a mediados de este año solicitó la agrupación de las concesiones.

La resolución publicada este jueves, en la que Industria reconoce la existencia de sinergias que mejorarán el uso de los recursos en las labores de exploración de hidrocarburos, permitirá a Capricorn hacer frente de forma conjunta a las diversas exigencias de cumplimiento contraídas con la Administración.

Los carburantes bajan otro 3% y el diésel cae por debajo de 1,20 euros

En concreto, el precio medio en España de la gasolina sin plomo 95 se abarató en la última semana un 3,1%, hasta 1,254 euros, frente a 1,294 euros de hace siete días. Por su parte, el diésel registró también un descenso semanal del 2,8%, hasta fijar su precio en 1,195 euros, frente a los 1,229 de hace siete días. Con respecto a principios de año, el precio del litro de gasolina es un 10,94% más barato, mientras que en el caso del gasóleo se ha abarato un 9,5%. Ambos carburantes acumulan cuatro semanas consecutivas de descensos, que suman un 6%.

Estos precios suponen una bajada del coste del litro de gasolina del 10,7% y del 9% en el caso del diésel desde octubre, como consecuencia de la repercusión de la caída de la cotización del barril de Brent. Llenar un depósito de 55 litros de gasolina cuesta 68,97 euros, lo que supone 2,20 euros menos con respecto a los 71,17 euros de hace una semana, mientras que un depósito de un vehículo de gasóleo conlleva un gasto de 65,73 euros, 1,86 euros menos que hace 7 días cuando costaba 67,59.

Este escenario de precios se registra en un momento en el que el barril de referencia en Europa, el Brent, ha caído por debajo de la barrera de los 65 dólares por primera vez desde septiembre de 2009, después de que la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) haya recortado sus previsiones de consumo de crudo para el próximo año. Por su parte, el precio del barril de petróleo Texas, de referencia en Estados Unidos, caía hasta los 62,21 dólares desde los 63,33 dólares del comienzo de la sesión.

La Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) constató esta tendencia a la baja en los precios de los combustibles después de que el precio de venta al público promedio de la gasolina en Península y Baleares disminuyese en octubre por cuarto mes consecutivo, un 3,4%, hasta situarse en 1,371 euros, mientras que el gasóleo disminuyó un 3%, situándose en 1,29. Asimismo, también destacó que los márgenes brutos promedio que obtienen los distribuidores aumentaron en octubre, situándose en 17,9 céntimos por litro de gasolina, un 5,1% más, y 17,3 céntimos de litro para el gasóleo, un 3,4% más.

Los carburantes siguen costando en España menos que en la media de la Unión Europea, donde el litro de gasolina se sitúa en 1,419 euros y en 1,432 en la eurozona. Por su parte, el litro de gasóleo cuesta 1,292 euros de media en la Unión Europea y 1,262 en la eurozona. El menor nivel de precios finales con respecto a los países del entorno se debe a que España, pese a las subidas del IVA, a los mayores impuestos y a los gravámenes al biodiésel, tiene menor presión fiscal.

El barril Brent baja de 65 dólares por primera vez desde 2009

En concreto, la cotización del barril de Brent llegó a bajar hasta los 64,98 dólares, frente a los 66,25 dólares del comienzo de la sesión.

De este modo, el barril de crudo de referencia para Europa acumula una depreciación del 41,4% desde principios de año.

Por su parte, el precio del barril de petróleo Texas, de referencia en EEUU, cayó hasta los 62,21 dólares desde los 63,33 del comienzo de la sesión.

La OPEP revisó a la baja su previsión de demanda mundial de petróleo en 2015, que ahora prevé que aumente en 1,12 millones de barriles al día, hasta los 92,26 millones de barriles diarios, lo que representa un descenso de 70.000 barriles por día respecto al anterior pronóstico del cártel.

Asimismo, la organización calculó que la demanda mundial de crudo en 2014 crecerá alrededor de 930.000 barriles diarios, 12.000 menos de los previstos en noviembre, hasta los 91,13 millones de barriles al día.

El precio del barril de Brent toca mínimos de cinco años cayendo por debajo de los 66 dólares

En concreto, el precio del barril de crudo de Brent llegó a tocar un mínimo de 65,36 dólares, el más barato desde finales de septiembre de 2009, lo que representa una depreciación del 41% en lo que va de año. Por su parte, el precio del petróleo Texas, de referencia en Estados Unidos, tocaba mínimos de cinco años al caer hasta los 62,51 dólares por barril, lo que representa un descenso del 36,5% desde enero.

A las preocupaciones por sobreabastecimiento del mercado y el impacto a la baja sobre el crudo de los productores alternativos como el shale gas estadounidense se suman los recientes anuncios de Arabia Saudí e Irak de reducir el precio del petróleo. En este sentido, Bagdad anunció una rebaja en el precio del crudo que exporta hacia el mercado asiático y estadounidense, mientras que subirá ligeramente el de Europa, en un movimiento que emula el adoptado por Arabia Saudí la semana pasada y que busca mantener la cuota de mercado de los productores de Oriente Próximo.

Además, el precio del crudo se vio afectado por el informe de Morgan Stanley, que revisó sus previsiones a la baja para 2015 y 2016. Así, el banco de inversión augura para el próximo año que el precio del Brent se situará en los 70 dólares, desde los 98 dólares previos, y de cara a 2016 en los 88 dólares, desde los 102 dólares. Hay que recordar que la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) acordó en noviembre mantener el actual volumen de la oferta de crudo del cártel en 30 millones de barriles diarios, lo que provocó una inmediata reacción a la baja en los precios del petróleo.

Las petroleras recuerdan que sólo fijan el precio en menos del 20% de las gasolineras y que los carburantes sí que bajan

Por tanto, la AOP negó que existan «ni cohetes ni plumas» en la traslación de los precios de la materia prima a los surtidores, en referencia al denominado efecto de cohetes y plumas, que señala que las subidas de las cotizaciones repercuten rápidamente en los precios finales de los carburantes, subiendo como un cohete, mientras que las bajadas tardan más, cayendo como una pluma. En este sentido, la AOP indicó que comparar las variaciones porcentuales entre el coste de los carburantes al por mayor y el precio en el surtidor es «incorrecto», ya que el coste del gasóleo es sólo el 39% de su precio en la estación de servicio y de un 33% en el caso de la gasolina.

Desde el pasado 30 de junio, cuando se alcanzaron los precios máximos de lo que va de año, hasta este viernes, la cotización internacional del gasóleo cayó 12 céntimos el litro y el precio antes de impuestos (PAI) 13 céntimos. Esto supone que disminuyó «más que su cotización internacional», subrayó la AOP, que recordó que el gasóleo representa el 80% del mercado nacional. En el caso de la gasolina, tanto la cotización internacional como el PAI han descendido 17 céntimos el litro en ese mismo período. De esta forma, las petroleras replicaron que en la evolución desde el 30 de junio «se observa claramente cómo los precios han reflejado el abaratamiento del coste de aprovisionamiento«.

La AOP desglosó también los componentes de los precios. Así, de 1,25 euros que cuesta un litro de gasolina, 42 céntimos son del coste de la gasolina al por mayor (33%) y los impuestos (54,5%) suponen 68 céntimos del total. Respecto al gasóleo, cuyo precio se sitúa en 1,19 euros el litro, el coste del gasóleo al por mayor (39%) supone 46 céntimos y los impuestos (48,5%) ascienden a 58 céntimos. Quedaría añadir, y desde la AOP lo resaltaron, que se tiende a confundir las ganancias de los operadores, que según AOP son del 1,5%, dos céntimos por litro, con el margen de distribución, que tiene un peso del 11%, 13 céntimos, y que incluye costes como el transporte, las reservas estratégicas o los biocarburantes.

Brufau augura una recuperación de los precios del petróleo

Los precios del crudo han bajado en el segundo semestre del año, con una caída que se agudizó en los últimos días y que colocó en cerca de 70 dólares el barril del crudo Brent, de referencia en los mercados globales. «Este es un sector donde la oferta y la demanda están muy próximos», afirmó Antonio Brufau. En este sentido, respecto al precio de rentabilidad que maneja Repsol en sus campos, Brufau dijo que «a 60 dólares entran todos», refiriéndose a yacimientos de Brasil, Libia, los pozos antiguos de Venezuela o de Trinidad y Tobago.

Pero también dijo que, a nivel mundial, y específicamente en campos de petróleo no convencionales de Estados Unidos, «a 70 dólares empieza ya todo a resquebrajarse». Por ello, cree que la empresa de petróleo, consecuentemente, «para la perforación, con lo que no se produce tanto y los precios volverán a subir». Asimismo, citó informaciones publicadas en las últimas horas que indican que ha disminuido el número de licencias de perforación en Estados Unidos en yacimientos de petróleo no convencional y dijo que «dentro de poco tiempo la producción será menor que la que hubiese sido a un precio más estable».

«Se volverá a tensionar la oferta y la demanda y los precios volverán a recuperar parte de la senda perdida», añadió Brufau, que no cree que sean sostenibles los actuales precios y recordó que una caída de 20 dólares en el barril representa cerca de 300.000 millones de dólares que se quedan en los países que importan el petróleo y que pierden en consecuencia los productores. También citó un informe de la Agencia Internacional de la Energía que indicó que por debajo de los 80 dólares «hay un riesgo razonable de que 2 millones de barriles diarios desaparezcan del mercado», en este caso, «automáticamente el precio volverá a subir», añadió.

En 2008, recordó Brufau, el precio del crudo estaba a unos 40 dólares, y «en dos meses subió a 100 y llegó a cifras de 130 y 140», y dijo que el mercado se mueve con 92 millones de barriles diarios tanto de oferta como de demanda, «y cualquier variación, por pequeña que sea, afecta al precio». «Creo que en el 2015 veremos precios de 85 dólares, pero esto no lo sabe nadie», concluyó Brufau.

Repsol en los Estados Unidos

Brufau destacó que Repsol tiene en Houston (Estados Unidos)su segunda sede mundial, después de la de Madrid, y dijo que la compañía invirtió en este país 6.600 millones de dólares y ahora cuenta con unos 700 empleados. El presidente de Repsol destacó que Estados Unidos se toma «muy en serio» el mundo de los negocios y que tiene una industria «altamente técnica y competitiva». Además, añadió que es un país que «respeta el estado de derecho, lo que es muy importante porque Repsol ha sufrido en algunos países la falta de esos principios», agregó el ejecutivo sin precisar ninguna nación.

El presidente de Repsol señaló que la petrolera española produce desde Estados Unidos cerca de 35.000 barriles diarios de hidrocarburos y confía en que a finales de 2016 se puedan alcanzar los 65.000 barriles, y mantener una «presencia más profunda de la que tiene ahora» en este país. Habló también de la necesidad de que las actuales generaciones dejen a las futuras los mismos recursos energéticos que han recibido, con menos emisiones de gases de efecto invernadero, con un sector más sostenible y con una clara apuesta por la modernidad.

«La energía ha demostrado ser el motor de la prosperidad global desde hace 150 años», dijo e insistió en que debe seguir siéndolo en las próximas décadas. Pero también lamentó que, hoy en día, la energía sea usada «geopolíticamente por muchas razones que no son la energía». «La energía no debe ser usada como una amenaza de algunos países o regiones para los demás, una amenaza para la estabilidad del planeta», insistió el ejecutivo catalán.

Sobre las tendencias del sector, dijo que existen recursos suficientes para cubrir la demanda de energía por más de 200 años. «Pero tenemos que hacer muchas cosas para que la producción siga creciendo», insistió. Destacó que los campos de hidrocarburos convencionales están reduciéndose en un 5% cada año y pidió apostar por recursos energéticos no convencionales, como el petróleo y gas shale, un campo en el que Estados Unidos se ha convertido en líder mundial. «Estados Unidos está enseñando al mundo que las cosas se pueden hacer de forma distinta», insistió, al referirse a la explotación de hidrocarburos de esquisto.

También señaló la necesidad de proteger el medio ambiente en la explotación de recursos energéticos, destacó en ese sentido la apuesta que existe en Europa y se refirió a la autorización para realizar sondeos en aguas próximas a las Islas Canarias. «Tenemos que proteger el medio ambiente, pero una cosa es proteger el medio ambiente y otra es no hacer nada», agregó, y lamentó que haya críticas por esos sondeos «a sesenta kilómetros de las islas», comparando esa situación con la explotación intensa en las costas del Golfo de México.

Diplomáticos, empresarios y personalidades de la comunidad española en Nueva York participaron en la gala de la Cámara, creada en 1959 y ahora presidida por el exembajador de Estados Unidos en Madrid Alan Solomont. El diplomático retirado, al presentar a Brufau, presidente de la petrolera española desde 2004, destacó de él su carrera en el campo de la energía y el liderazgo que ha demostrado al frente de Repsol para convertir al grupo en una compañía líder en exploración y tecnología en todo el mundo.

De Guindos exige que la bajada de la energía no engorde a las petroleras y éstas dicen que hay «gran traslación» de las caídas

De Guindos, que hizo estas consideraciones en la ceremonia de entrega de la IV edición de los Premios El Economista.es, añadió que el Gobierno va a poner «todo el énfasis» en que la Comisión Nacional de Mercados y Competencias (CNMC) vigile que la reducción del petróleo se traslade a los consumidores españoles y también comentó que la bajada del precio del petróleo supondrá el 1% del PIB.

Por otra parte, el director general de la Asociación Española de Operadores de Productores Petrolíferos (AOP), Álvaro Mazarrasa, afirmó que hay «una gran traslación» de los costes de la gasolina y el gasóleo al precio final de los combustibles y criticó el informe publicado por la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) esta semana.

En declaraciones a los medios después de intervenir en una jornada sobre eficiencia energética organizada por Enerclub, Mazarrasa señaló que su organización «para nada» está de acuerdo con este informe y pidió rigor en su elaboración «para no confundir a la opinión pública».

Así, señaló que comparar la evolución porcentual del coste de las materias primas con el precio final es «un error de principiante» porque este coste «solo representa un 35% del precio final».

«Sólo pedimos rigor. Pedimos que la CNMC no confunda a la opinión pública y a los medios con el margen bruto de distribución, cuando el 90% de ese margen son costes», señaló Mazarrasa.

Además, subrayó que este error en el informe es «muy dañino» y manda una señal equivocada al confundir un coste con un margen. «Creemos que es erróneo y falto de rigor», expresó.

En cualquier caso, Mazarrasa defendió que en esa comparativa con la Unión Europea se tuviese en cuenta el coste adicional de la eficiencia energética, que este año supuso el desembolso 54 millones de euros a las petroleras.

Llamazares exige acabar con el «oligopolio de facto»

Finalmente, el diputado de la Izquierda Plural (IU-ICV-CHA) por Asturias, Gaspar Llamazares, exigió al Gobierno que tome medidas para acabar con el «oligopolio de facto» que existe en el sector de la distribución de carburantes, que impide que las bajadas del precio del barril de petróleo se trasladen a los consumidores.

En una pregunta parlamentaria, Llamazares recordó que, según el informe de la CNMC, pese a las caídas del barril de Brent y de los precios de referencia internacional de la gasolina, los márgenes de beneficio siguen subiendo, y en España superan incluso la media de la UE-6.

«España continúa en los puestos de precios antes de impuestos de los carburantes más altos de la Unión Europea, y la CNMC constata que el precio de las gasolinas está cayendo menos de lo que correspondería», insistió el diputado asturiano.

Esta falta de competitividad en los precios es mayor en las gasolineras abanderadas por alguna gran compañía, que suponen el 70% de la red en España, mientras que las estaciones de servicio independientes cuentan con precios de venta al público «más bajos», según dijo Llamazares.

Así, concluyó que es precisamente la «situación de oligopolio de las empresas distribuidoras» la que impide que la bajada de los precios del petróleo se traslade «automáticamente» y «en el mismo porcentaje» a la gasolina y el gasóil.

«Todo indica que no hay competencia, que estamos ante un oligopolio donde las petroleras campan a sus anchas porque en España tenemos una altísima concentración en los contratos de abanderamiento entre las marcas y las gasolineras, lo que favorece la existencia explícita e implícita de mecanismos de concertación de precios de venta», acusó el responsable de la Izquierda Plural.

De hecho, Llamazares aseguró incluso que las distribuidoras mayoristas «no pujan ni compiten entre ellas» por conseguir contratos con gasolineras de sus rivales cuando vencen los contratos de modo que «se produce una prórroga de facto del contrato».

Por todo ello, exigió al Ejecutivo que tome medidas para «acabar con el oligopolio de facto existente en el mercado de distribución de carburantes» y para que «España deje de ser uno de los países donde la gasolina es más cara y los márgenes brutos más altos». «¿Cómo justifica que, en un momento en que los precios del petróleo caen acentuadamente, los precios de venta de la gasolina y el gasóleo al consumidor bajen apenas y los márgenes brutos de explotación, antes de impuestos, aumenten?», preguntó además.

Esta semana, la CNMC constató la tendencia a la baja en los precios de los combustibles en octubre, después de que el precio de venta al público promedio de la gasolina 95 en Península y Baleares disminuyese en octubre por cuarto mes consecutivo, un 3,4%, hasta situarse en 1,371 euros por litro, mientras que el precio promedio del gasóleo A disminuyó un 3% respecto a septiembre, situándose en 1,290 euros por litro.

Sin embargo, destacó que los márgenes brutos promedio que obtienen los distribuidores de gasolinas aumentaron en octubre con respecto a septiembre, situándose en 17,9 céntimos de litro para la gasolina 95 (+5,1%) y 17,3 céntimos de litro para el gasóleo A (+3,4%).

Asimismo, después de la caída del 1% de los carburantes en la última semana, el precio del litro de gasolina es un 8,1% más barato con respecto a principios de año, mientras que en el caso del gasóleo se ha abaratado un 9,5%.

Este escenario de precios se produce en un momento en el que el barril de referencia en Europa, el Brent, continúa con su tendencia bajista, después de haberse situado a lo largo de la semana por debajo de los 68 dólares. Actualmente cotiza a 70,1 dólares. Por su parte, el Texas sweet light, de referencia en Estados Unidos, cotiza a 67,64 dólares.

La salida de productos petrolíferos desde las instalaciones de CLH cae el 1,1% en el mes de noviembre

Por productos, las gasolinas disminuyeron un 0,2% y el gasóleo de automoción aumentó un 4,0%. En su conjunto, las salidas de los carburantes de automoción se elevaron un 3,2% y se situaron en 2 millones de metros cúbicos.

En lo que respecta al total de gasóleos (A+B+C), las salidas alcanzaron los 2,2 millones de metros cúbicos, un 1,4% menos que en el mismo periodo de 2013.

Por su parte, las salidas de querosenos ascendieron a 337.000 metros cúbicos, lo que representa una bajada del 0,5% respecto a noviembre del año pasado.

Los carburantes bajan un 1% y la gasolina cae por debajo de 1,30 euros

Concretamente, el precio medio en España de la gasolina se abarató en la última semana un 1,07%, hasta 1,294 euros, frente a los 1,308 de hace siete días. De esta manera, el precio de este combustible se sitúa por debajo de 1,30 euros, lo que no sucedía desde diciembre de 2011, y es un 8% inferior respecto a principios de este año. Por su parte, el diésel registró también un descenso semanal del 0,97%, hasta fijar su precio en 1,229 euros, frente a los 1,241 de hace siete días, lo que supone a su vez una disminución del 9,5% frente al inicio del año. Además, también registró su dato más bajo desde abril de 2011.

Con estos precios, los carburantes acumulan tres semanas consecutivas de descensos, con una bajada desde mediados de octubre del coste del litro de gasolina del 7% y del 5,3% en el caso del diésel, como consecuencia de la repercusión de la caída de la cotización del barril de Brent. En comparación con el mismo período del 2013, la gasolina abarata su precio un 8% y el diésel es un 9,4% más bajo. Respecto a los máximos históricos de septiembre de 2012, el diesel, el carburante más consumido, cayó un 15,02% y la gasolina un 15,05%.

Con estos precios, llenar un depósito de 55 litros de gasolina cuesta 71,17 euros, lo que supone 77 céntimos menos con respecto a los 71,94 euros de hace una semana, mientras que uno de gasóleo conlleva un gasto de 67,59 euros, 66 céntimos menos que cuando costaba 68,25 euros. Estos mínimos anuales de los carburantes coinciden con la disminución del precio del barril de petróleo Brent, de referencia en Europa, que se sitúa en mínimos de cinco años al caer por debajo de la barrera de los 70 dólares. Por su parte, el Texas sweet light, de referencia en Estados Unidos, cotiza a 67,64 dólares.

Esta semana, la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) constató esta tendencia a la baja en los precios de los combustibles después de que el precio de venta al público promedio de la gasolina en Península y Baleares disminuyese en octubre por cuarto mes consecutivo, un 3,4%, hasta situarse en 1,371 euros por litro, mientras que el precio del gasóleo disminuyó un 3%, situándose en 1,29 euros. Sin embargo, también destacó que los márgenes brutos promedio que obtienen los distribuidores de gasolinas aumentaron en octubre, situándose en 17,9 céntimos por litro de gasolina, un 5,1% más, y 17,3 céntimos de litro para el gasóleo, un 3,4% más.

Los carburantes siguen costando en España menos que en la media de la Unión Europea, donde el precio de venta al público del litro de gasolina se sitúa en 1,447 euros y en 1,468 en la eurozona. Por su parte, el litro de gasóleo cuesta 1,316 euros de media en la Unión Europea y 1,29 en la eurozona. El menor nivel de precios finales con respecto a los países del entorno se debe a que España, pese a las subidas del IVA, a los mayores impuestos y a los nuevos gravámenes al biodiésel, sigue contando con una menor presión fiscal.