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Cañete comparte su «enorme preocupación» por la falta de apoyo de la CNMC al gasoducto MidCat con Francia

Europa Press.- El comisario europeo responsable de Energía y Acción Climática, Miguel Arias Cañete, ha compartido en el Congreso su «enorme preocupación» con la falta de apoyo por parte de los reguladores español y francés al proyecto de interconexión gasista entre España y Francia.

El comisario europeo lamentaba así la decisión de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) y su homólogo francés, la Comisión de Régulation de l’Energie (CRE), de rechazar la inversión en el gasoducto Step, la primera fase del proyecto MidCat. Según estos organismos, este proyecto no cumple con las necesidades del mercado y «carece de la madurez suficiente para ser considerado en una asignación de costes transfronteriza», razones por las cuales rechazaron la solicitud de inversión presentada por Enagás y la firma francesa Teréga el pasado enero.

Frente a ello, Arias Cañete reivindica la necesidad de contar con interconexiones eléctricas y gasísticas para desarrollar el potencial de las energías renovables y asegurar un nivel de seguridad energética, e incide en que la Península Ibérica «es una isla«. Por ello, lamenta que las conexiones transpirenaicas, en la que se encuadra el rechazado proyecto Step, vaya a un menor ritmo que la interconexión eléctrica.

Cañete ha apostado por contar con «el mayor número de interconexiones», sean eléctricas o gasísticas, pues así podría «participar en los mercados centrales europeos» que, a su juicio, «reciben un gas en mejores condiciones que probablemente el gas natural licuado». Si bien cree que España está «bien» preparada, considera que «en estos momentos tiene un diferencial de coste» con el gas que llega al norte de Europa, principalmente a Alemania, con la cual, ha apostillado el comisario comunitario, las empresas deben competir en coste energético.

La CNMC y el regulador francés tumban el gasoducto MidCat (STEP), el proyecto de interconexión gasista con Francia por Cataluña

Europa Press.- La Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) y la Comisión francesa de Regulación de la Energía (CRE) han tumbado el proyecto de interconexión gasista entre España y Francia a través del Pirineo Oriental, denominado STEP (South Transit East Pyrenees), al rechazar la solicitud de inversión presentada por Enagás y la gala Teréga.

Según indicaron en un documento la CNMC y la CRE, el proyecto «no cumple con las necesidades del mercado y carece de madurez suficiente para ser considerado en una asignación de costes transfronteriza». Por ello, los reguladores rechazan la solicitud de inversión y recomiendan a Enagás y Teréga realizar «evaluaciones adicionales» sobre el proyecto, con el fin de valorar si pudiera «proporcionar un ratio coste-beneficio claro y positivo en el futuro, teniendo en cuenta la naturaleza de las capacidades ofrecidas». El pasado mes de julio, Enagás y Teréga sometieron a las autoridades reguladoras esta solicitud de inversión transfronteriza y costes repartidos para el proyecto STEP.

¿Beneficios superiores a los costes?

La inversión del proyecto asciende a unos 442 millones de euros, de los que 290 millones serían aportados por Teréga y los restantes 152 millones por Enagás. A este respecto, tanto la CNMC como el regulador galo afirman que el análisis costes-beneficios del proyecto no demuestra claramente que sus beneficios sean superiores a los costes en los escenarios más realistas. Con este proyecto de interconexión gasista entre Francia y España se preveía crear una capacidad de intercambio adicional entre ambos países de 180 GWh/diarios desde Francia a España y de 230 GWh/diarios en sentido contrario.

En la decisión conjunta, los dos reguladores señalan que los operados del sistema no han presentado un proyecto que ofrezca una capacidad de interconexión firme, por lo que las capacidades creadas serían interrumpibles, lo que supone «un factor negativo determinante en la evaluación de la viabilidad de la infraestructura a largo plazo, y de su contribución a la obtención de precios competitivos y estables para los consumidores domésticos e industriales». Asimismo, destacan que el mercado no ha manifestado «ningún interés comercial» por nuevas capacidades de interconexión y subrayan que la interconexión gasista actual entre Francia y España «no está congestionada».

STEP ha sido reconocido por la Comisión Europea como Proyecto de Interés Común. El proyecto de la infraestructura consta de un tramo de gasoducto de 106 kilómetros en el tramo español y de 120 kilómetros en el francés. En el lado nacional, las infraestructuras asociadas al desarrollo de la conexión internacional STEP serían: el gasoducto Martorell-Figueras, tramo norte (Hostalric-Figueras); el gasoducto Figueras-Frontera Francesa; y la estación de compresión de Martorell.

En Comú (Unidos Podemos) exige a Ribera que frene el gasoducto MidCat entre Francia y España a través de Cataluña

Europa Press.- En Comú Podem ha exigido a la nueva ministra para la Transición Ecológica, Teresa Ribera, la paralización del proyecto MidCat de interconexión energética a través del gasoducto entre España y Francia, tras el informe remitido a la Comisión Europea que cuestiona su viabilidad económica y su impacto sobre el medioambiente.

Para ello, el diputado Josep Vendrell ha registrado una proposición no de ley para su debate tanto en el Pleno del Congreso como en la Comisión de Energía, en la que reclama al Gobierno rechazar esta interconexión. Asimismo, Vendrell pide al nuevo Ejecutivo que promueva reuniones con la Comisión Nacional de los Mercados y de la Competencia (CNMC) para que rechace la solicitud de inversión de Enagás, recordando que en junio del año pasado el regulador condicionaba la entrada de este proyecto en el sistema gasista a su aprobación definitiva, y esta a las decisiones que se tomaran, de forma coordinada, entre España y Francia.

«Ante la no idoneidad del proyecto demostrada por el análisis independiente coste-beneficio desfavorable entregado a la Comisión Europea, el propio regulador debería rechazar las solicitudes de inversión de Enagás», considera Vendrell, que señala que la propia Comisión de Regulación de la Energía de Francia informó de que el proyecto aumentaría los precios de la energía, sin que la infraestructura incidiera en la seguridad de suministro.

MidCat, gasoducto que uniría Francia con España a través de 450 kilómetros en su tramo por territorio español, está reconocido como Proyecto de Interés Común (PIC) por parte de la Comisión Europea, una condición que la formación catalana de Unidos Podemos busca revisar. Así, pide al Gobierno que solicite a la Comisión que no proporcione fondos públicos a este proyecto.

En su iniciativa, Vendrell se apoya en el último informe realizado por la consultora Pöyry en el que, critica, no queda acreditada la posible reducción de las tarifas y se cuestiona la viabilidad económica. Es más, sostiene que la consultora «explicita que el proyecto obedecería, en todo caso, a intereses de Francia, y que la apuesta por combustibles fósiles tendría para España un importante impacto sobre el territorio«. Por otro lado, también apunta a la «contradicción» que supone, a su juicio, la apuesta por un mayor peso de las energías renovables y apoyar infraestructuras gasísticas.

Además, Vendrell incide en la división del proyecto original, ya que primero se desarrollaría el denominado STEP I, que uniría España con Francia, y después se conectaría la parte sur de Francia con el norte del país, con el proyecto STEP II. Un «troceo» que Vendrell critica porque «dificulta los controles y trámites administrativos” y el riesgo que expone a España ya que la posibilidad de que la segunda fase no se desarrolle «dejaría un agujero económico y medioambiental que volvería a ubicar a España en la vanguardia de Estados con infraestructuras en desuso y abandono» que, además, acabaría repercutiendo en la correspondiente factura energética.

El Gobierno relanza la interconexión gasista con Francia por Cataluña reanudando la tramitación de STEP, el primer paso del MidCat

Europa Press / EFE.- El Consejo de Ministros ha aprobado restablecer la tramitación de las instalaciones asociadas al proyecto STEP (South Transit East Pyrenees), que consiste en el desarrollo de una tercera interconexión gasista entre España y Francia a través del Pirineo Oriental, primer paso del gasoducto MidCat, que luego debería desarrollarse desde Cataluña al corazón de la Península.

Concretamente, las infraestructuras asociadas a STEP se recogieron en la planificación energética aprobada en 2008. Sin embargo, en 2012, el Gobierno decidió la suspensión de las autorizaciones administrativas de gasoductos planificados para asegurar el equilibrio financiero en el sector del gas. Con el acuerdo del Gobierno se restablece ahora la tramitación de las instalaciones de STEP, suspendidas por dicha decisión, para el desarrollo de una tercera interconexión gasista entre España y Francia a través del Pirineo Oriental, que se sumaría a las ya existentes por Irún (Guipúzcoa) y Larrau (Navarra).

El proyecto pretende incrementar la capacidad de interconexión con Francia para contribuir a la mejora en la seguridad del suministro de gas, así como a la creación de un verdadero mercado energético integrado en la Unión Europea. Fruto de su relevancia, STEP ha sido reconocido por la Comisión Europea como Proyecto de Interés Común (PIC), según el Ministerio de Energía.

Con un coste aproximado de unos 400 millones de euros, que será sufragado en parte por la Unión Europea a través del programa Connecting Europe Facility, destinado a promover inversiones en infraestructuras que fomenten el crecimiento, el empleo y la competitividad, y también por España y Francia en porcentajes aún por definir, constará de un tramo de gasoducto de 106 kilómetros en el tramo español y de 120 kilómetros en el francés. En España las infraestructuras asociadas a la conexión internacional STEP son el gasoducto Martorell-Figueras, en el tramo norte entre Hostalric y Figueras, el gasoducto Figueras-Frontera Francesa y la estación de compresión de Martorell.

El Ministerio señaló que la seguridad de suministro del sistema energético experimentará una notable mejoría con la puesta en servicio de STEP, dado que incrementará el nivel de diversificación de aprovisionamientos y permitiría reaccionar con mayor rapidez, por ejemplo, ante eventuales interrupciones de suministros por gasoducto o incidencias de abastecimiento de gas natural licuado (GNL) a las plantas de regasificación.

Además, el gabinete dirigido por Álvaro Nadal destacó que su construcción resulta estratégica por «dos razones fundamentales», ya que, en primer lugar, incrementa la capacidad de interconexión de la Península con el resto de Estados miembros, que se encuentra entre las más bajas de la Unión Europea; y, en segundo lugar, contribuye a «la necesaria integración de mercados, a la convergencia en precio y al fomento de la competencia, aspectos imprescindibles de un verdadero mercado interior de la energía que redundará en beneficio del consumidor».

La Península Ibérica tiene uno de los suministros de gas natural más diversificados del mundo, gracias a sus dos conexiones directas con países productores en el norte de África y a sus plantas de regasificación, que son clave para la seguridad de suministro. El incremento de la capacidad de interconexión con Francia permitirá aprovechar ese potencial y avanzar hacia una verdadera Unión Energética. Además, contribuirá a mejorar la competitividad e incrementar la seguridad de suministro.

Energía dará prioridad a la interconexión gasista con Francia ante el nuevo Gobierno de Macron y avanzar en la descarbonización

Redacción / Agencias.- El secretario de Estado de Energía, Daniel Navia, ha reiterado el compromiso del Gobierno con el desarrollo del gas natural para cumplir con los objetivos mundiales de descarbonización pero manteniendo la sostenibilidad financiera y la competitividad industrial. Asimismo, comprometió que la interconexión gasista con Francia va a ser una cuestión prioritaria en las relaciones con el nuevo Gobierno de ese país, con el fin de «lograr resultados lo antes posible».

Navia, que ha clausurado la asamblea anual de la asociación Gas Industrial, que agrupa a grandes industrias consumidoras de gas, ha reconocido que el proceso para llevar adelante el proyecto MidCat, renombrado ahora Step, se ha visto ralentizado por la celebración de elecciones en el país galo. Daniel Navia ha añadido que, pese a las resistencias que existen entre países para hacer interconexiones gasistas en Europa, la Comisión Europea está teniendo una «colaboración muy activa».

El secretario de Estado subraya que en la negociación que ahora se abre del denominado Paquete de Invierno, la directiva de la Comisión Europea en materia energética para el periodo 2020-2030, España va a plantear que el objetivo que recoja en materia de interconexiones sea «vinculante». Además, ha anunciado que solicitarán que se establezcan procedimientos de tramitación abreviados para infraestructuras estratégicas como el proyecto Step, así como financiación para los proyectos de interconexión. El presidente de Gas Industrial, Juan Vila, aseveró que «ya es hora de perder la paciencia con Francia. Si no nos podemos duros, el tubo no estará nunca en marcha porque van a poner pegas a todo«.

Por otra parte, Navia aseguró que la regulación del creador de mercado obligatorio del Mercado Ibérico del Gas (Mibgas), una figura orientada a incrementar la competencia en ese mercado y contener los precios, se aprobará próximamente y que la plataforma de ese mercado ofrecerá próximamente más productos, como futuros. En este sentido, el presidente de Mibgas, Antonio Erías, reconoció que «en menos un año habrá un mercado de futuros del gas», que contribuirá a desarrollar el mercado spot (corto plazo).

Respecto a las reformas energéticas, Navia cree que las grandes ya se han hecho, “en gran medida están superadas”, y España ya no está en una situación «anómala» como en la que estuvo, en que había que conseguir que el sistema tuviera «sostenibilidad financiera». Ahora debe afrontar los problemas existentes en el ámbito energético español, que son «muy similares a los que hay en otros países europeos», como la adecuada planificación energética. El secretario de Estado considera que el sistema debe obtener nuevos ingresos para conseguir un mejor reparto de las cargas. Ello pasa por el desarrollo de nuevas actividades, ya que se obtendrían ingresos por peajes a la regasificación, descarga de buques o almacenamiento de gas natural licuado (GNL).

Descarbonización sin renunciar a competitividad

Por otro lado, Navia destacó el “papel fundamental” del gas como fuente de energía limpia de cara al Acuerdo de París (COP21) por el cambio climático y su voluntad de que España se convierta en hub del gas. Para alcanzar los compromisos de sostenibilidad ambiental a la vez que mejora la competitividad, el secretario de Estado incidió en que el programa del Gobierno contempla expresamente mantener los costes regulados del sistema energético y, aunque entiende que «sería más eficiente reducirlos», asegura que el sistema todavía arrastra «cargas del pasado» que hay que «asumir y saber gestionar». «El sistema energético es un trasatlántico y no se puede variar de rumbo de un día para otro sin arriesgar su continuidad», ha asegurado.

«Tenemos la obligación de responder al cambio climático, no es una opción, pero como reguladores nos enfrentamos al desafío de compaginar esta transición hacia una economía baja en carbono con la competitividad industrial en un entorno en el que la coordinación de las políticas a nivel global presenta dificultades», ha explicado. Además de la contención de los costes regulatorios del sistema, la intención es reducir los costes a medio y largo plazo «donde haya espacio para hacerlo con garantías suficientes».

Por su parte, la vicepresidenta de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC), María Fernández, ha defendido la necesidad de revisar la normativa para mejorar la regulación sin necesidad de modificar las leyes en el corto plazo. «La gran reforma regulatoria ya está hecha y ahora lo que tenemos que hacer es una regulación de detalle, un análisis del impacto normativo, del impacto económico y de las cargas administrativas», ha explicado. En este sentido, reconoce que la revisión normativa es un trabajo «complejo», pero considera que la solución no pasa por su constante modificación. «No podemos estar todos los días modificando las leyes, hay que ir al detalle, remangarse y analizar dónde están las barreras», ha concluido.