Entradas

Las principales compañías del mundo urgen a los gobiernos a intensificar la lucha contra el cambio climático

Europa Press. – Las 50 empresas agrupadas en la Alianza de Primeros Ejecutivos por el Clima organizada por el Foro Económico Mundial, entre las que se encuentran las españolas Iberdrola y Acciona o la italiana Enel -matriz de Endesa-, han exigido a los gobiernos ser «más ambiciosos» en la lucha contra el calentamiento global, estableciendo claras líneas de trabajo para acelerar la transformación.

Así, en una carta abierta que ha coincidido con la celebración de la Cumbre del Clima (COP24), se ha subrayado que el cambio climático «es una amenaza de primer orden para el medio ambiente, la sociedad y la economía, que pone en riesgo el bienestar y la prosperidad».

De este manera, han mostrado su compromiso en la lucha contra el cambio climático y su disposición a «proporcionar soluciones rápidas que les permitan poner en marcha un plan de acción perfeccionado y más ambicioso con el fin de mitigar el calentamiento global y conseguir los objetivos establecidos en el Acuerdo de París de 2015».

Además de Iberdrola, Acciona o Enel, integran este grupo ‘gigantes’ mundiales como Accenture, Allianz, AXA, Basf, Bloomberg, Deutsche Post, Engie, Heineken, HSBC, ING Group, Orsted, Scheneider Electric, Unilever o Vestas, entre otros.

Los miembros del grupo han reducido sus emisiones en más de 47 millones de toneladas de CO2 equivalente entre 2015 y 2016, suponiendo una disminución del 9%.

Los principales ejecutivos de estas compañías creen necesario, entre otras medidas, implementar mecanismos eficaces de fijación de precios que permitan aplicar un precio significativo al carbono en todo el mundo, así como estimular la financiación y las inversiones bajas en emisiones de carbono.

Además, solicitan el desarrollo de herramientas normativas que ayuden a educar e influir en favor de una demanda social de soluciones bajas en carbono.

El Foro Económico Mundial considera que la mayoría de los países latinoamericanos aún no están listos para la transición energética

EFE.– La mayoría de los países de América Latina todavía no están bien preparados para afrontar la transición energética, según revela un informe del Foro Económico Mundial en el que se analizan 114 países, entre ellos varios latinoamericanos. El análisis Promover una transición energética efectiva fue publicado en el marco del Foro Económico Mundial sobre América Latina, celebrado en Sao Paulo.

De acuerdo con esta evaluación, que clasifica a los países en función del estado actual de sus sistemas energéticos y su nivel de preparación estructural para adaptarse a las futuras necesidades energéticas, América Latina debe mejorar en varias áreas, como la innovación, el desarrollo del capital humano, la seguridad de las inversiones y la eficacia del marco institucional. El informe examina el desempeño de los sistemas energéticos actuales de los países bajo tres dimensiones: acceso y seguridad energética; sostenibilidad ambiental del sistema; y potencial de crecimiento. Asimismo, analiza en qué medida existen condiciones que faciliten una transición hacia un sistema de bajas emisiones de CO2.

Los países escandinavos y de Europa occidental encabezan el Índice de Transición Energética, con Suecia, Noruega y Suiza a la cabeza, en tanto que el Reino Unido (7) y Francia (9) son las únicas economías del G7 que se ubican dentro de los 10 primeros. En la región latinoamericana, los que muestran los mejores desempeños son Uruguay, que ocupa el puesto 13, Costa Rica (20), Chile (24) y México (28). De manera general la región obtiene una puntuación similar al promedio global en cuanto a la contribución del sistema energético al crecimiento económico, a la seguridad y al acceso, y por encima del promedio cuando se trata de sostenibilidad ambiental.

Sin embargo, varios países se quedan atrás porque no están preparados adecuadamente para la transición, según el informe. Es así que Perú se ubica en el puesto 34, Paraguay en el 37, Panamá en el 39, Ecuador el 48 y Argentina el 56. De manera particular, el informe menciona a Colombia (32) y Brasil (38) por tratarse de dos países que «cuentan con sistemas energéticos con buen desempeño debido a sus abundantes recursos naturales», pero que al mismo tiempo «tienen niveles de preparación bajos» para la transición«. Ello es debido a «deficiencias en materia de capital humano y fallos en sus instituciones y marcos regulatorios».

Los últimos países latinoamericanos que figuran en la clasificación son Guatemala (62), y El Salvador (69), mientras Venezuela se queda a cuatro puestos de cerrar la lista, el 111, sólo por delante de Kirguizistán, Sudáfrica y Zimbabue. A nivel global, el informe establece que el avance hacia la sostenibilidad ambiental se ha detenido y considera que la tendencia prácticamente plana en la intensidad de las emisiones de carbono lo demuestra.

Además de las repercusiones positivas para el clima, la mejora de los sistemas energéticos contribuiría a remediar la situación de 1.000 millones de personas en el mundo que actualmente carecen de electricidad, según el Foro Económico Mundial. Finalmente, el director de Industrias Energéticas del Foro, Roberto Bocca, sostuvo que el informe permite tener una visión del funcionamiento actual de los sistemas energéticos nacionales, así como una perspectiva «muy necesaria de lo que se requiere para lograr el éxito a futuro».

El Foro Económico Mundial considera que España debe asumir un mayor compromiso político para lograr una transición energética eficaz

EFE.- España saca buena nota a nivel mundial en cuanto al estado actual de su sistema energético y su nivel de preparación para adaptarse a las futuras necesidades energéticas, pero debe asumir un mayor compromiso político para lograr una transición energética eficaz, según el Foro Económico Mundial. España se sitúa en el puesto 21 de los 114 países analizados en el informe Promover una transición energética efectiva publicado dentro de la edición latinoamericana del Foro Económico Mundial.

A nivel mundial ocupan los diez primeros puestos del Índice de Transición Energética del Foro Suecia, Noruega, Suiza, Finlandia, Dinamarca, Holanda, el Reino Unido, Austria, Francia e Islandia. España se sitúa con su vigésima primera posición en el ránking por detrás de los diez primeros países, de Nueva Zelanda, Singapur, Uruguay, Irlanda, Malasia, Alemania, Bélgica, Luxemburgo, Portugal y Costa Rica, pero por delante de Canadá, Japón, Chile o Estados Unidos. El Foro Económico Mundial considera que España tiene un sistema energético con un «buen desempeño», por lo que se posiciona en la posición 14 a nivel global en este capítulo.

En el apartado de la preparación para la transición energética, España ocupa el puesto 27, una posición que el Foro Económico Mundial califica de «elevada». Eso sí, añaden sus expertos, es «más baja que en la mayoría de las economías avanzadas» analizadas. En el análisis sobre la preparación de España para la transición energética se ubica en los puestos 26 tanto en el capítulo de capital e inversión, como en el de infraestructura y clima empresarial innovador. En opinión de los expertos del Foro Económico Mundial, España tendría que mejorar el acceso al crédito, su inversión en capital humano y «asumir un compromiso político más fuerte para lograr una transición energética eficaz en el país».

En el capítulo del desempeño de su sistema energético actual, España destaca por el puesto 15 que logra en la dimensión de la sostenibilidad ambiental. El Foro Económico Mundial indica que el país cubre una «parte importante» de su demanda energética con energías renovables, por lo que supera en 12 puntos la media de las economías avanzadas. El informe revela que en lo que se refiere al porcentaje de la electricidad generada con renovables el país ocupa el puesto 46. A nivel global, el avance hacia la sostenibilidad ambiental se ha detenido y considera que la tendencia prácticamente plana en la intensidad de las emisiones de carbono así lo demuestra.

De acuerdo con sus expertos, en el último lustro se registró una mejora marginal de tan solo un 1,8% anual en comparación con el 3% requerido para cumplir con el Acuerdo de París en materia de objetivos climáticos. Asimismo, se ha constatado un aumento del precio real de la electricidad para los hogares desde 2013 en más de la mitad de países analizados, a pesar de la reducción general del precio del combustible, recuerda el informe. Como dato más positivo el informe destaca tendencias que apuntan a que más del 80% de los países registran una mejora en sus sistemas energéticos en el último lustro.

En los apartados de acceso y de seguridad energética, España ocupa el puesto 15. En tanto, el país destaca en la tasa de electrificación en relación a la población, el uso de combustibles sólidos y la calidad del suministro eléctrico. El Foro Económico Mundial explica que España tiene una base «bien diversificada» de fuentes de energía primaria y socios de importación igualmente diversificados, pero aún «depende sustancialmente de las importaciones para cubrir su demanda energética».

Galán (Iberdrola) pide que se haga una política energética «de verdad» y no «política con la energía»

Europa Press.- El presidente de Iberdrola, Ignacio Sánchez Galán, ha pedido hacer una política energética «de verdad» y «no hacer política con la energía«. A este respecto, insistió en que en los años que lleva en el sector ha visto pasar a distintos políticos que han cometido «los mismos errores», que al final «los pagan los consumidores y los accionistas».

El directivo, que defendió así la necesidad de impulsar la descarbonización de la economía mundial para cumplir con los compromisos asumidos en el Acuerdo de París, señaló respecto a la transición energética que los cambios profundos no son un problema «sino una oportunidad». Así, afirmó que la descarbonización y la rentabilidad son totalmente compatibles y puso como ejemplo a la misma Iberdrola que, después de haber invertido 100.000 millones de dólares (unos 81.623 millones de euros) en renovables, redes y tecnología hidroeléctrica de bombeo, ha multiplicado por 5 su base de activos y triplicado sus resultados y dividendos. «Hemos pasado de ocupar el puesto 20 por capitalización bursátil entre las utilities a situarnos entre las cuatro primeras del mundo», añadió.

Además, Galán explicó que para dar respuesta a una demanda creciente con un modelo energético descarbonizado es imprescindible desarrollar más generación renovable, mayor capacidad de almacenamiento, más redes inteligentes y más vehículos eléctricos. A este respecto, aseguró que la tecnología necesaria ya está disponible y que sus costes se están reduciendo rápidamente. En este sentido, indicó que la inversión requerida por el sector eléctrico durante los próximos 25 años asciende a 19 billones de dólares (unos 15,5 billones de euros).

Galán, que hizo hincapié en que sean todos los actores los que se impliquen en la lucha contra el cambio climático, también consideró necesario para avanzar hacia un modelo económico descarbonizado que se implementen marcos legales estables y predecibles, que deben ir acompañados de una reforma de la fiscalidad ambiental bajo el principio de quien contamina, paga, así como de la eliminación de los costes no energéticos incluidos en la tarifa eléctrica. En este sentido, señaló que no todos los países que suscribieron el Acuerdo de París están desarrollando políticas para cumplir los compromisos asumidos.

En Asturias preocupa la descarbonización

Por su parte, el presidente del Principado de Asturias, Javier Fernández, ha reiterado que su comunidad autónoma tendrá «un problema» si finalmente se cierran sus centrales térmicas de carbón «antes de tiempo«. En este sentido, ha subrayado que España va «a cumplir el objetivo de 2020» en cuanto a la reducción de emisiones de CO2 se refiere y ha garantizado que también lo hará en 2030 si no se va «más allá en las exigencias» que ya se «autoimponen» los países de la Unión Europea.

El barón socialista ha aseverado que le parece «bien» todo avance en energías renovables y que «nadie es enemigo de combatir el cambio climático», pero ha advertido de que si actualmente no existiesen las centrales de carbón el precio lo marcaría exclusivamente el gas y, por lo tanto, la electricidad resultaría «mucho más cara». En este sentido, ha puesto en duda que España pudiese garantizar «un precio razonable» de la electricidad y esgrimió que el encarecimiento de la electricidad será «un problema general para el conjunto de la industria española».

Galán (Iberdrola) defiende en el Foro de Davos un cambio de mix energético que apueste por las renovables maduras

Europa Press / EFE.- El presidente de Iberdrola, Ignacio Sánchez Galán, defendió en el Foro Económico Mundial, también conocido como Foro de Davos, un cambio en el mix energético que permita el desarrollo e integración de las renovables maduras. Para el presidente de la compañía, la generación hidroeléctrica, la eólica terrestre y marina y la solar fotovoltaica liderarán la transformación del mix, que deberá ir acompañada de la mejora de las redes y de las tecnologías de respaldo y almacenamiento.

Galán, en un debate en el que también participó el director de la Agencia Internacional de la Energía (AIE), Fatih Birol, planteó un escenario para las próximas décadas que estará marcado, en primer lugar, por un aumento del 40% en la demanda energética hasta 2040 y, además, por los compromisos derivados de la cumbre climática de París. «El único camino para dar respuesta a estas dos tendencias es cambiar sustancialmente el mix energético, reduciendo el consumo de combustibles fósiles e incrementando la aportación de la electricidad, fundamentalmente en sectores como el transporte», indicó el presidente de Iberdrola en su apuesta por electrificar la economía y hacer más accesible su acceso.

En su opinión, el mundo entero ha reconocido que existe un problema de suministro, y enormes problemas de acceso para grandes masas de población; la solución que necesitamos, ha indicado, es electrificar más la economía. Aunque ha reconocido que el sector es responsable de cerca de un 20% de las emisiones contaminantes, «tenemos los medios para reducirlas en dos a tres veces respecto a los niveles actuales. Para eso, es preciso diseñar estrategias a largo y no a corto plazo.

Durante su intervención, Galán explicó cuáles serán las tecnologías que tendrán un mayor desarrollo en los próximos años, entre las que ha citado aquellas lo suficientemente maduras como para dar soluciones a gran escala a un coste razonable. Como ejemplos principales, el presidente de Iberdrola ha destacado la energía hidroeléctrica, que se incrementará un 60% en los próximos 25 años gracias a los proyectos en marcha en China, Latinoamérica, India y África, y la eólica, tanto terrestre como marina. Además, hizo referencia a los avances experimentados por la energía solar fotovoltaica, cada vez más eficiente.

«La mayor contribución de estas tecnologías requerirá aumentar la capacidad de absorción del sistema, para lo que se precisarán inversiones en redes, capacidad de respaldo, fundamentalmente con centrales de ciclo combinado de gas, y almacenamiento de energía, especialmente mediante plantas de bombeo», explicó Galán, que defendió con vehemencia los bombeos como la solución más eficiente y económica para almacenar energía en los sistemas interconectados frente al uso de baterías. Se trata de un sistema de almacenamiento mediante el que se sube agua al embalse por la noche, utilizando electricidad cuando hay menos demanda, para que el agua esté disponible para generar energía durante el día.

En este sentido, Galán subrayó que el acuerdo de París «reafirma la estrategia de Iberdrola, basada en energías limpias, redes y almacenamiento». El directivo recordó que los orígenes de Iberdrola están ligados a la generación hidroeléctrica y que el grupo fue pionero al apostar, hace 15 años, por el desarrollo eólico, que le ha llevado a ser líder mundial con 15.000 megavatios (MW) en operación. El presidente de Iberdrola valoró además positivamente el resultado de París puesto que aumentará la seguridad del sector. Finalmente, reiteró sus críticas a las subvenciones a energías «caras» y que además no son limpias, como el carbón, lo que dificulta el desarrollo de otras alternativas.

En este sentido, el responsable de la AIE, Fatih Birol, diferenció que una cosa son energías limpias y otra energías eficientes, dos conceptos que no se deben confundir puesto que en el segundo caso de lo que se trata es de obtener la energía a bajo coste, pero nada más. Birol también se refirió al impacto que la caída del precio del petróleo está teniendo en el volumen de inversiones, que el último año se han reducido en un 16%. Según la AIE, las inversiones necesarias en electricidad en los países que no son miembros de la OCDE se elevarán hasta 13 billones de dólares.