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WWF reclama “más audacia” a España y pide aprovechar la Ley de Transición Energética para dejar atrás los combustibles fósiles

Europa Press.- Mientras Amigos de la Tierra critica el «estancamiento» de los compromisos climáticos y la persistencia en el uso de carbón, la organización WWF ha reclamado «mucha más audacia» e innovación para ganar al cambio climático y destaca los avances para aumentar la ambición climática hasta 2020 a nivel internacional y, en este contexto, cree que España tiene una oportunidad en la Ley de Cambio Climático y Transición Energética para dejar atrás los combustibles fósiles y apostar por las energías renovables.

El director del programa mundial de clima y energía de WWF, Manuel Pulgar-Vidal considera que éste es un año marcado por desastres climáticos extremos y es el primer año de incremento de emisiones después de cuatro años estancadas. «La paradoja entre lo que estamos haciendo y lo que debemos hacer es clara: Los países deben actuar con mayor ambición climática pronto para ponernos en el camino hacia un futuro incremento de la temperatura limitado a 1,5 grados centígrados», ha reclamado. Por ello, WWF cree que queda mucho trabajo por hacer y que 2018 será determinante para que los países demuestren claramente su compromiso para avanzar y mejorar sus planes climáticos.

Respecto a España, la responsable de Clima y Energía de WWF España, Mar Asunción, ha señalado que la ley de Cambio Climático y Transición Energética es una oportunidad para un cambio de modelo que aproveche la ventaja competitiva que tiene España en recursos renovables y favorezca la creación de empleo en «tecnologías del siglo XXI en vez de seguir apoyando un modelo obsoleto, basado en combustibles fósiles, que tiene sus días contados si se hace realidad el Acuerdo de París».

Mientras tanto, resuenan aún las palabras de la jefa de Gobierno de uno de los países más ricos del mundo, la alemana Angela Merkel, en la Cumbre del Clima celebrada el mes pasado en Bonn, en la que advertía de la dificultad de cerrar las contaminantes plantas de energía de carbón. Hay «cuestiones sociales y puestos de trabajo» involucrados, según ha explicado. «Solo les quiero decir que hay considerables conflictos sociales también en un país rico como el nuestro. Y que tenemos que resolver«, asegura.

El objetivo principal de la Cumbre de Bonn fue dar un nuevo impulso a la implementación del acuerdo de París 2015 sobre la reducción de las emisiones de CO2 después de la decisión del presidente estadounidense Donald Trump de retirarse del acuerdo histórico. Así, la cumbre tenía como meta reunir una miríada de documentos en los que están plasmadas las posturas de cada país para la puesta en marcha concreta del Acuerdo de París. Esto se deberá condensar para convertirse en el manual de reglas en el que, por ejemplo, una tonelada de dióxido de carbono deberá ser igual en un país que en otro.

Dejar el carbón en 2030

Según el acuerdo de París, las naciones signatarias se han comprometido a reducir el calentamiento global a más largo plazo muy por debajo de los 2 grados centígrados por encima de los niveles preindustriales. Por otro lado, Siria se convirtió en la nación número 196 en adoptar formalmente el Acuerdo de París, dejando a Estados Unidos como el último miembro de la ONU que se opone. Unos 23.000 delegados asistieron a la conferencia de Bonn. Asimismo, destacó la iniciativa en la que Gran Bretaña, Canadá, Costa Rica, México y otros Estados unieron fuerzas para formar una coalición destinada a abandonar el carbón como fuente de energía. Entre los firmantes no se encuentran España ni Alemania.

En este sentido, Amigos de la Tierra ha criticado la «falta de ambición» de España por haber «rechazado formar parte de la Alianza Global para Eliminar el Carbón». «La Unión Europea continúa diciendo que lidera la lucha contra el cambio climático, pero la realidad es que sigue anclada a una economía basada en los combustibles fósiles. De hecho financiará 90 nuevas infraestructuras de gas, algo completamente incompatible con el Acuerdo de París«, denuncia la organización ambiental, que señala que estos países actúan «como si el cambio climático se pudiese postergar».

Por ello, ha elogiado el apoyo de organizaciones de la sociedad civil al compromiso con los objetivos del acuerdo contra el Cambio Climático y ha recordado a los países europeos que «la urgencia por actuar es irrefutable«. En este sentido, un informe de Amigos de la Tierra también resalta «el incremento de las emisiones de gases de efecto invernadero después de un período de estancamiento» y adelantaba que «2017 será uno de los tres años más cálidos jamás registrados». Según Amigos de la Tierra, el uso de combustibles fósiles (incluido el gas) en el sistema energético europeo durante un periodo superior a 9 años más es «incompatible» con el objetivo de limitar el calentamiento global.

Por su parte, Greenpeace demandó liderazgo climático a los países y llamó a los líderes a atender con urgencia la transformación de sus modelos energéticos y los usos del suelo hasta abandonar totalmente las energías sucias. La organización ecologista recuerda que es necesario un plan de acción urgente. «Exigimos al Gobierno de España que avance en la Ley de Cambio Climático y Transición Energética para que esté alineada con los compromisos internacionales para luchar contra el cambio climático. Exigimos un sistema energético renovable al 100% y el abandono de las energías sucias», aseveró Tatiana Nuño.

La sequía dispara las emisiones de CO2 de la electricidad un 28,13% por el mayor peso de carbón y gas

Europa Press.- Las emisiones de dióxido de carbono (CO2) procedentes de la generación eléctrica han aumentado un 28,13% en 2017 respecto al mismo periodo de 2016, ya que a consecuencia de la sequía la energía hidráulica cayó casi a la mitad hasta el 30 de septiembre, según indicó Red Eléctrica de España.

En concreto, la energía hidráulica disminuyó un 49,5% desde el 1 de enero hasta el 30 de septiembre y cayó un 29,1% durante septiembre por la falta de agua, por lo que la demanda eléctrica en España se ha compensado con energía de carbón y de ciclo combinado de gas, que son más caras y también más emisoras de CO2.

Así, en lo que va de año (de enero a septiembre) se han emitido en el conjunto de España 52.990.411 toneladas de CO2 relacionadas con la producción de electricidad, de las que 30.318.938 toneladas de CO2 se debieron a la generación por carbón y 10.069.124 toneladas de CO2 al gas (ciclo combinado). Estas cifras, suponen un 28,13% más que en el mismo periodo del 2016 (41.354.702 toneladas). El año pasado el carbón en el mismo periodo emitió 21.960.124 toneladas de CO2, es decir, un 27,52% menos, y el ciclo combinado, 8.614.516 toneladas de CO2, un 14,45% menos que este año.

Según datos de Red Eléctrica de España, la energía generada con carbón ha crecido un 39,5% en este año y, en la misma línea ascendente, se sitúa el ciclo combinado (gas), que ha aumentado un 42,6% en este año, al mismo tiempo que la energía eólica disminuyó un 9,8% en lo que va de año, aunque repuntó un 4,7% en el mes de septiembre. En total, desde septiembre de 2016 a septiembre de 2017, la hidráulica ha generado un 42,6% menos de electricidad y la eólica ha perdido también un 12% en el mismo periodo. Además, en la actualidad se genera un 25% más de energía con carbón que hace un año y un 44% más de ciclo combinado (gas).

Los datos apuntan que en el último mes disminuyó un 5,9% la generación renovable para suplir la demanda eléctrica pero, si se compara con los datos de hace un año, la electricidad procedente de renovables se redujo en un 22,9%. Así, las emisiones de CO2 asociadas a la generación eléctrica alcanzaron 7.089.179 toneladas en julio; 6.038.501 toneladas en agosto y 5.720.637 toneladas de CO2 durante el mes de septiembre a nivel nacional. De estas, el carbón supuso más de la mitad de las emisiones de CO2 en julio, 4.098.000 toneladas de CO2; entorno a la mitad en agosto, 3.079.792 toneladas y 2.919.485 toneladas de CO2 por carbón correspondieron a septiembre.

Según fuentes de Red Eléctrica, la falta de energía hidráulica por la sequía y de eólica, que disminuyó por la falta de viento, se está compensando con carbón y gas, mientras la nuclear permanece constante. En los datos, según subraya, tiene importancia Canarias, que fundamentalmente depende de combustibles fósiles, al no tener interconexión eléctrica. Así, en septiembre, las centrales nucleares, que no emiten CO2, aportaron el 24,9% de la generación y se convirtió en la fuente de energía con mayor peso en la producción eléctrica.

En segundo y tercer puesto se situaron el ciclo combinado, con el 17,2%, y el carbón, con el 14,9% respectivamente. En su conjunto, las renovables contribuyeron a la demanda eléctrica con un 29,8% del total y debido a la disminución de la generación hidráulica junto con el aumento del ciclo combinado volvió a producirse un descenso renovable de 0,5 puntos porcentuales respecto al año anterior.

Si bien, del total de la energía generada, el 54,4% en septiembre fue libre de CO2 (renovables + nuclear). En la actualidad, a finales del mes de septiembre las reservas hidráulicas se situaron en un 29,2%, casi 17 puntos por debajo que en septiembre de 2016 y 3,4 puntos menos que en el mes de agosto. En cuanto a la producción eólica peninsular, en septiembre llegó a 2.793 gigawatios hora, lo que supone un 4,7% más frente al mismo mes de hace un año. El máximo de generación eólica peninsular se produjo el 9 septiembre, lo que supuso un 34,1% de la generación ese día.

Finalmente, el precio final de la demanda peninsular en septiembre fue de 56,36 euros por megavatio hora, lo que significa un aumento del 3% respecto al mes anterior y un 10,3% más frente a septiembre de 2016. Sin embargo, la demanda fue un 3% menor en este mes. Este dato también tendría relación con la sequía y el viento en calma, ya que la demanda se está supliendo con carbón y gas que España adquiere en el exterior, lo que provoca un aumento del precio.

Telefónica afianza sus objetivos de reducción de emisiones de CO2 y se compromete a ser energéticamente 100% renovable en 2030

Europa Press.- Telefónica ha conseguido que sus objetivos de reducción de emisiones de CO2 sean certificados por la iniciativa Science Based Targets (SBT), lo que indica que están avalados por criterios científicos y contribuyen al Acuerdo de París, según indicó la compañía, que resaltó que el acuerdo necesita el apoyo de todos los agentes, incluidas las empresas, para lograr que la temperatura de la Tierra no aumente por encima de los 2ºC.

Con su compromiso, Telefónica señala que logrará desligar el crecimiento de su negocio del aumento de las emisiones de gases de efecto invernadero, disminuyéndolas un 30% en términos absolutos para 2020 y un 50% para 2030. En 2016, la compañía redujo sus emisiones un 26%. Con Telefónica, son ya 6 las empresas del sector teleco que están avaladas por SBT y hay un total de 300 firmas que se han comprometido a fijar objetivos de reducción de emisiones, pero solo unas pocas lograron su validación.

Para la directora de Mitigación Climática del Sector Privado del Instituto de Recursos Mundial (WRI), Cynthia Cummis, «es alentador ver a Telefónica establecer un objetivo de reducción de emisiones que alinee sus estrategias comerciales con la tasa de descarbonización necesaria para evitar los peores impactos del cambio climático». «Telefónica asume un papel de liderazgo en la transición hacia el futuro con bajas emisiones de carbono. Su objetivo demuestra a los clientes, inversores y al propio sector que está comprometida con la consecución de los objetivos del Acuerdo de París», destacó.

Para lograrlo, la compañía trabaja en un Plan de Energías Renovables y se ha comprometido a ser 100% renovable en 2030. Hace unos meses también se sumó a la iniciativa RE100, que aglutina a empresas que apuestan por fuentes renovables para su negocio. Asimismo, Telefónica trabaja en un Plan de Eficiencia Energética, para reducir en un 50% el consumo de energía por unidad de tráfico.

«La adhesión a la iniciativa Science Based Targets (SBT) representa el espaldarazo al compromiso de Telefónica por la descarbonización. SBT es una guía muy útil para que todas las empresas comprendan cuál debe ser su contribución a los objetivos de París. Y al mismo tiempo, permite visibilizar el compromiso privado, que debe sumarse al trabajo que hacen los gobiernos y los ciudadanos para combatir el calentamiento global», según la directora de Sostenibilidad y Gestión de Intangibles de Telefónica, Geert Paemen.

Actualmente el 44% de la energía que consume Telefónica a nivel mundial ya es renovable, lo que equivale al consumo medio anual de 203.749 hogares. Su Plan de Energía Renovable le reportará además un ahorro potencial del 6% en la factura de energía y evitará a la atmósfera alrededor de 1,5 millones de toneladas de CO2 para 2030. En 2016, Telefónica consiguió reducir el consumo de energía un 34%, gracias al Plan de Eficiencia Energética que desarrolló 130 proyectos concretos que ahorraron unos 22 millones de euros, según la compañía.

Galán ratifica que Iberdrola abandonará el carbón en 2020 para reducir sus emisiones en un 50% en el horizonte 2030

Europa Press.- El presidente de Iberdrola, Ignacio Sánchez Galán, ha anunciado el abandono del carbón en el mix energético de la compañía en 2020 con el objetivo de reducir sus emisiones en un 50% en el año 2030, durante la ceremonia de entrega de los II premios a la Cooperación Energética Internacional.

En este sentido, Galán ha afirmado que con el cierre de 15 plantas de carbón y fuel-oil en todo el mundo han reducido las emisiones específicas en Europa un 75%, y ha subrayado que es «imprescindible» seguir liderando la lucha contra el cambio climático. Durante su intervención, recalcó su «firme convencimiento» de que juntos «es posible aportar las mejores soluciones» para dar respuesta a los retos energéticos, sociales y medioambientales a los que la sociedad se enfrenta para conseguir, entre todos, «un mundo más sostenible».

Los encargados de entregar los galardones convocados por Iberdrola y el Club de Excelencia en Sostenibilidad han sido el ministro de Asuntos Exteriores, Alfonso Dastis, junto al presidente del Club, Ramón Paredes, que ha señalado la importancia de promover iniciativas de universalización de la energía y la oportunidad que supone poder contribuir a la consecución de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) fijados por la ONU para el horizonte 2030.

Por su parte, el ministro ha enmarcado los premios en «esta nueva y esperanzadora actitud de la sociedad civil» hacia los objetivos de desarrollo sostenible, que «persiguen la promoción de iniciativas de universalización de las energías«, respaldadas por la ONU y el Banco Mundial, y de ayuda a la consecución del objetivo número 7 de la Agenda 2030, garantizar el acceso a una energía asequible.

En esta línea, Dastis ha reafirmado el «profundo compromiso» del Gobierno con «la visión, el espíritu y la puesta en marcha» de la Agenda 2030 de desarrollo sostenible, y ha señalado que se priorizará «como elemento medular de diseño e implementación de las políticas públicas para los próximos años«. En este sentido, el titular de la cartera de exteriores y cooperación destacó que el compromiso de España no es solo del Ejecutivo, sino de toda la sociedad, y por eso la sociedad civil, el mundo financiero, los municipios, las comunidades o las universidades están construyendo estrategias para ponerla en práctica.

En esta segunda edición de los premios a la Cooperación, los ganadores han sido Trama TecnoAmbiental, en la categoría empresa, con el proyecto Electrificación rural a través de microrredes solares híbridas en islas remotas de Ghana; el Instituto Nacional de Eficiencia Energética y Energías Renovables de Ecuador (INER), en la categoría de Administraciones Públicas, con el Estudio de la viabilidad de producción de bioetanol a partir de la hidrólisis enzimática de la cáscara de la semilla de Jatropha Curcas, conocida como piñón; y en la categoría tercer sector, Nexus Development, con el proyecto Pioneer Facility, un fondo de inversión dirigido al acceso a la energía limpia en el sudeste asiático.

Iberdrola pide a la industria que siga su ejemplo de dejar el carbón y tome medidas contra el cambio climático

Europa Press.- Mientras hay políticos, como el presidente del Gobierno de Aragón, Javier Lambán, que recriminan que el decreto publicado por el Gobierno central para endurecer el cierre de las centrales térmicas «no evita» que puedan clausurarse estas instalaciones, el presidente de Iberdrola, Ignacio Sánchez Galán, ha pedido a la industria de todos los sectores que «siga su ejemplo» y tome medidas contra el cambio climático porque considera que «el momento de hablar ya ha pasado; ahora es el momento de actuar».

Sánchez Galán ha explicado la decisión de Iberdrola de cerrar sus centrales de carbón para cumplir con su objetivo de reducir sus emisiones de carbono en un 50% en 2030. Así, ha garantizado que la multinacional seguirá haciendo su parte pero necesita que «otras industrias y compañías» sigan su «ejemplo». En este contexto, ha defendido que el camino hacia una economía descarbonizada, sostenible y competitiva «no es un problema sino una oportunidad única que crea valor para la sociedad en su conjunto». «Esta transición necesita esfuerzos continuos y responsabilidad compartida. Tanto las empresas como los gobiernos debemos trabajar juntos más que nunca con el fin de impulsar el mundo hacia un futuro energético más sostenible y económicamente viable«, ha concluido.

“No evita” cerrar las térmicas

Por su parte, Lambán anunció que el Ejecutivo autonómico de Aragón se pondrá en contacto con el Gobierno de España para aclarar los términos del decreto y enmendarlo, dado que «enducere las condiciones para el cierre de una térmica, pero no evita el cierre de una central». Ha añadido que «es fundamental que las centrales térmicas nutridas por carbón autóctono se preserven de una forma especial y esto no ha sido contemplado. La protección del decreto es endeble y otras centrales como las nucleares quedan más salvaguardadas«, ha considerado Lambán.

Greenpeace pide desbloquear los cierres

Por otro lado, la organización ecologista Greenpeace exigió al Gobierno español que, en coherencia con los compromisos adquiridos en el Acuerdo de París, no bloquee el cierre de las centrales térmicas de carbón de Iberdrola de Lada (Asturias) y Velilla (Palencia), sino que «dé un mensaje sólido de lucha contra el cambio climático y asuma un compromiso para el abandono de las energías sucias y a favor de las renovables».

En este sentido, Greenpeace ha aplaudido la decisión de Iberdrola de solicitar al Ministerio de Energía el cierre de sus 2 térmicas en España, que suman 874 megavatios (MW) y que emitieron más de 2 millones de toneladas de CO2 en 2016, al tratarse el carbón del combustible que más contribuye al cambio climático. Dicho plan de cierre incluye el compromiso de mantenimiento del empleo, algo «fundamental», según Greenpeace, para la necesaria transición justa del carbón a la energía sostenible».

Para la organización ecologista, el anuncio de cierre de todas las centrales térmicas de carbón de Iberdrola es «una victoria de la lucha contra el cambio climático», y considera que es «una de las novedades más positivas» de la Cumbre COP23. Greenpeace ha pedido al resto de las grandes eléctricas que operan en España (Endesa, Gas Natural Fenosa, EDP y Viesgo) que informen de sus planes de cierre de sus respectivas térmicas de carbón, para que el Gobierno pueda planificar un nuevo sistema eléctrico sin carbón a partir de 2025.

Subvenciones a los combustibles fósiles

En este sentido, recuerda que, de momento, 3 de las 5 grandes eléctricas (Iberdrola, Endesa y EDP) han pedido que los objetivos europeos de renovables se eleven del 27% al 35% para 2030, en el contexto del debate del paquete europeo de energía y clima. «Pero el Gobierno español no apoya ni más objetivos de renovables, ni más participación ciudadana, sino que quiere nuevas subvenciones para la energía sucia», lamenta.

Greenpeace pide ahora a Iberdrola que «dé el siguiente paso» y anuncie el cierre de sus centrales nucleares y se comprometa a reemplazar esa energía por nueva generación renovable y eficiencia energética, en vez de aumentar la quema de gas. «Una compañía que pretenda ser líder en energía limpia debe presionar por un futuro completamente renovable, facilitando la participación», subraya.

La importancia del compromiso de Iberdrola se pone de manifiesto, según Greenpeace, tras la publicación de los datos del Global Carbon Project, que revelan que las emisiones mundiales de CO2 aumentarán este año en aproximadamente un 2% después de tres años de haberse mantenido estables, con un crecimiento nulo. Este repunte se debe, según la organización, al «lento ritmo» de reducción de las emisiones en la Unión Europea y Estados Unidos y el «anómalo» crecimiento de las emisiones en China.

José Luis García Ortega, responsable del programa de cambio climático de Greenpeace España, espera que el anuncio de Iberdrola sea un «empujón definitivo» para que las otras eléctricas propietarias de térmicas de carbón definan una fecha para el cierre de las mismas y para que el Gobierno «marque un camino claro para un sistema energético 100% renovable en manos de la ciudadanía». «Es vergonzoso que tengamos un Gobierno más fósil que las empresas eléctricas», sentenció.

Las emisiones de CO2 a nivel mundial crecerán en 2017 cerca de un 2% y seguirán creciendo en 2018

Europa Press.– Las emisiones mundiales de CO2 terminarán 2017 con un aumento del 2% después de mantenerse estables durante los últimos tres años y, según las primeras estimaciones, seguirán creciendo también en 2018, de acuerdo con los datos presentados en la revista Environmental Research Letters, que estima que 2017 terminará con 41 gigatoneladas de emisiones de CO2, de las que 37 gigatoneladas proceden del uso de combustibles fósiles.

El informe apunta que este aumento se debe sobre todo a China, que prevé emitir un 3,5% más que el año anterior, hasta 10,5 gigatoneladas por un mayor uso del carbón. Del mismo modo, India terminará el año con un aumento de sus emisiones, aunque en este caso del 2% por la debilidad económica actual, pero se prevé que si la economía se recupera pronto, las emisiones podrían volver a crecer rápidamente el próximo año. Frente a estos dos países asiáticos, el informe confirma que Europa y Estados Unidos emitieron menos CO2, entre un 0,2% y un 0,4%, pero a un ritmo «demasiado lento como para compensar la subida» en otras regiones, según los investigadores.

La directora del estudio, del Tyndall Centre for Climate Change Research de Norwich (Reino Unido) Corinne Le Quéré, ha expresado su decepción por los resultados. Por ello, advierte de que el tiempo se está agotando para alcanzar el objetivo de limitar el calentamiento global a 2 grados Celsius, por no hablar del objetivo de 1,5 grados centígrados. Entre los años 2014 y 2016 las emisiones estuvieron estables pese al crecimiento económico mundial y a ello contribuyó sobre todo el menor uso del carbón, la mejora de la eficiencia energética y el auge de las energías renovables como eólica o fotovoltaica.

Para los expertos resulta especialmente satisfactorio el desacoplamiento del crecimiento del producto interior bruto (PIB) y las emisiones porque demuestra que el crecimiento económico no tiene que implicar necesariamente un aumento de las emisiones de CO2. En la última década, según el estudio, más de 20 países con un crecimiento económico constante redujeron sus emisiones. Entre ellos figuran Alemania, Dinamarca, Estados Unidos, Francia, Polonia, Rumanía y Serbia, que entre todos suman aproximadamente un 20% de las emisiones de CO2 mundiales.

De hecho, los expertos calculan que éstas continuarán aumentando también en el próximo año. «Este es un verdadero motivo de preocupación», apuntó Robert Jackson, de la Universidad de Stanford. Los expertos remiten a las previsiones de crecimiento económico del Banco Mundial, que calcula que en todo el mundo se crecerá un 2,9% en 2018, el mayor valor desde 2011. Y las previsiones del Fondo Monetario Internacional (FMI) son incluso superiores.

El PSOE insta al Gobierno a comprar vehículos eléctricos para la Administración y el transporte público

Europa Press.- El PSOE ha registrado en el Congreso una proposición no de ley por la que insta al Gobierno a poner en marcha medidas que potencien la movilidad eléctrica en el transporte público, así como la promoción del vehículo eléctrico de uso privado. El objetivo de esta iniciativa es que «las administraciones sean ejemplarizantes y se sumen a las iniciativas de compra de vehículos eléctricos, además de todas aquellas entidades que reciben fondos públicos«, ha explicado el portavoz socialista de Cambio Climático, Ricardo García Mira.

El diputado pone en relieve las cifras actuales que llevan a su partido a solicitar al Gobierno unas políticas «de reducción de emisiones más efectivas». Así, destaca que son más de 520.000 las muertes prematuras en Europa, 30.000 en España, como consecuencia de la contaminación. En este sentido, apunta que el 23% de las emisiones globales de gases de efecto invernadero son consecuencia del transporte.

El responsable socialista en materia de Cambio Climático destaca también que «España debe reducir sus emisiones de gases de efecto invernadero entre un 80% y un 95% hasta 2050 para cumplir con los objetivos de descarbonización establecidos por la Unión Europea». Unas cifras que, a su juicio, no se pueden garantizar actualmente. García Mira ha explicado que una reducción de este calibre implicará pasar de emitir 329 millones de toneladas de CO2 equivalentes en el año 2014 a emitir entre 14 y 88 millones de toneladas de CO2 en 2050.

«La consecución del objetivo de reducción de emisiones pasa, en consecuencia, por potenciar la electrificación del transporte de pasajeros y por incidir en el cambio modal a ferrocarril y en la electrificación del transporte de mercancías», ha insistido el diputado socialista. Por todas estas razones, la propuesta del PSOE apuesta por un conjunto de medidas tales como, crear un observatorio del vehículo eléctrico para la coordinación de las diferentes administraciones públicas, planificación y seguimiento de la penetración del coche eléctrico, y análisis de la efectividad de los programas de incentivos y fomento de la infraestructura de recarga de acceso público.

García Mira también ha destacado otras medidas de la iniciativa como «establecer objetivos a 2030 y desarrollar un plan de incentivos económicos a la adquisición de vehículos eléctricos; definir y desarrollar un modelo de despliegue de la infraestructura de recarga de acceso público, así como políticas que incentiven la compra de dichos vehículos y para la transformación de la industria automovilística y sus industrias auxiliares«.

En otro orden de cosas y con el objetivo de descarbonizar el transporte terrestre de mercancías, también «se insta al gobierno, en colaboración con todas las administraciones competentes en la materia, a llevar a cabo una planificación de las infraestructuras ferroviarias destinadas específicamente al desarrollo del transporte de mercancías, en el horizonte de los próximos 15 años», resaltó el socialista.

Por otro lado, en relación al uso del gas natural licuado (GNL), García Mira asegura que la iniciativa registrada pide, igualmente, «una planificación de las inversiones a realizar para instalar en los principales puertos españoles sistemas de suministro de GNL a buques, así como incentivar las inversiones por parte de armadores para la adaptación de los buques al consumo de GNL«, entre otras muchas medidas acompañadas de ayudas económicas específicas.

Las emisiones de CO2 aumentarán este año en el mundo entre un 0,8% y un 3% tras mantenerse desde 2014

Europa Press.- Está previsto que las emisiones mundiales de dióxido de carbono procedentes de los combustibles fósiles y la industria aumenten este año aproximadamente un 2% en comparación con el año anterior, con un rango de incertidumbre de entre el 0,8% y el 3%, tras 3 años de emisiones manteniéndose relativamente planas.

Es la conclusión del Presupuesto Global de Carbono 2017, que se publica por Global Carbon Project (GCP, por sus siglas en inglés) en las revistas Nature Climate Change, Environmental Research Letters y Earth System Science Data Discussions. El anuncio se produce mientras los países se reúnen en Bonn, Alemania, para las negociaciones anuales sobre el clima de Naciones Unidas (COP23).

El investigador principal, Corinne Le Quéré, director del Centro Tyndall para la Investigación del Cambio Climático en la Universidad de East Anglia (Inglaterra) destacó que «con las emisiones mundiales de dióxido de carbono de todas las actividades humanas estimadas en 41.00 millones de toneladas para 2017, el tiempo se está agotando en nuestra capacidad para mantener el calentamiento por debajo de 2 ºC. Necesitamos alcanzar un pico en las emisiones globales en los próximos años y reducir las emisiones rápidamente después para abordar el cambio climático y limitar sus impactos«.

Las emisiones de China representan el 28% de las emisiones globales. El coautor del documento Glen Peters, director de investigación de CICERO en Oslo (Noruega), quien dirigió uno de los estudios, explica: «La vuelta al crecimiento de las emisiones globales en 2017 se debe principalmente a un retorno al crecimiento de las emisiones chinas, que se prevé que crecerán un 3,5% en 2017 después de dos años con emisiones decrecientes. El uso de carbón, la principal fuente de combustible en China, puede aumentar un 3% debido al mayor aumento de la producción industrial y la menor generación de energía hidroeléctrica por menor cantidad de lluvia».

«Varios factores apuntan a un aumento continuo en 2018», advierte el coautor del informe Robert Jackson, copresidente del GCP y profesor de Ciencias del Sistema Terrestre en la Universidad de Stanford (Estados Unidos). «Es una preocupación real. La economía mundial está repuntando lentamente. A medida que aumenta el PIB, producimos más bienes que, en su creación, generan más emisiones», subraya.

Sin embargo, el equipo cree que, a pesar del crecimiento en 2017, es demasiado pronto para decir si se trata de un evento puntual en el camino hacia un pico global de emisiones o el comienzo de un nuevo periodo con presión al alza sobre el crecimiento global de las emisiones. A largo plazo, es poco probable que las emisiones vuelvan a las altas tasas de crecimiento persistentes observadas durante la década de 2000 de más del 3% anual. Es más probable que las emisiones se estabilicen o tengan un ligero crecimiento positivo, gracias a los recortes de emisiones nacionales comprometidos en la Cumbre COP21.

Según el Global Carbon Project, las emisiones globales de dióxido de carbono de todas las actividades humanas (combustibles fósiles, industria y cambio en el uso de la tierra) alcanzarán alrededor de 41.000 millones de toneladas de dióxido de carbono en 2017. Las emisiones mundiales de dióxido de carbono de los combustibles fósiles y la industria llegarán a alrededor de 37.000 millones de toneladas de dióxido de carbono en 2017. En 2017, las emisiones de dióxido de carbono de los combustibles fósiles y la industria crecerán un 2% (de 0,8% a 3%), tras tres años de casi ningún crecimiento (2014-2016). El PIB aumentará un 3,6%, según cifras del Fondo Monetario Internacional.

Se prevé que las emisiones chinas subirán un 3,5% en 2017 mientras su PIB aumentará aproximadamente un 6,8%. Se proyecta que las emisiones de Estados Unidos disminuyan en un 0,4% en 2017, más bajo que el declive del 1,2% anual que viene cayendo de media durante la década anterior, con un inesperado incremento en el consumo de carbón. El PIB subió alrededor de un 2,2% en 2017. Además, se estima que las emisiones de India crecerán un 2% en 2017, en comparación con el 6% anual promediado en la década anterior, debido a las intervenciones gubernamentales significativas en la economía, cuyo PIB sube un 6,7%.

Se espera que las emisiones europeas disminuyan provisionalmente en un 0,2% en 2017, más bajo que el descenso del 2,2% anual promediado con respecto a la década anterior mientras el PIB sube alrededor de un 2,3%. El documento calcula que las emisiones de los países restantes, que representan aproximadamente el 40% del total mundial, aumenten en torno al 2,3% en 2017. La energía renovable ha aumentado rápidamente un 14% anual en los últimos cinco años, aunque desde una base baja.

El Presupuesto Global de Carbono lo realizan 76 científicos de 57 instituciones de investigación en 15 países que trabajan bajo el paraguas del Proyecto Global de Carbono (GCP). El presupuesto, ahora en su 12° año, estudia profundamente la cantidad de combustibles fósiles que queman las naciones de todo el mundo y dónde termina. El GCP está patrocinado por Future Earth y World Climate Research Programme.

La directora ejecutiva de Future Earth, Amy Luers, señala: «Las noticias del presupuesto de carbono de este año son un paso atrás para la humanidad. Debemos revertir esta tendencia y comenzar a acelerar hacia un mundo seguro y próspero para todos». «Esto significa que hay que priorizar el acceso a las energías responsables para los cientos de millones de personas en todo el mundo sin acceso a la electricidad. Afortunadamente, ahora no solo es posible, sino que en la mayoría de los casos tiene simplemente sentido financiero satisfacer estas necesidades de electricidad con fuentes de energía renovables«, agrega esta experta.

La cumbre climática COP23 de Bonn (Alemania) impulsa el cumplimiento del Acuerdo de París al margen de Estados Unidos

Europa Press.- Bonn (Alemania) acoge hasta este viernes la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el cambio climático a la que asisten en torno a 25.000 personas de todo el mundo para tratar de impulsar la acción climática y el desarrollo sostenible y reforzar el cumplimiento de las metas y ambiciones del Acuerdo contra el cambio climático firmado en París en 2015 y avanzar en su aplicación sin la aportación de Estados Unidos.

La primera semana se han celebrado distintos procesos de avance, multitud de eventos paralelos y reuniones entre las delegaciones mundiales. Ahora comienza el segmento de alto nivel. Así, entre este miércoles y jueves los jefes de delegaciones, ministros y jefes de Gobierno y de Estado acudirán a Bonn para el tramo final de negociación. Cada parte podrá intervenir una sola vez durante un máximo de 3 minutos para exponer su posición. Desde España, confirmaron la presencia de la ministra de Agricultura y Pesca, Alimentación y Medio Ambiente, Isabel García Tejerina desde este miércoles en Bonn.

El Acuerdo de París, alcanzado en diciembre de 2015, fue firmado en abril de 2016 por la mayoría de los países del mundo y entró en vigor en noviembre de ese mismo año, después de que fuera ratificado por más de 50 países que al menos sumaran el 55% de las emisiones de gases efecto invernadero de todo el mundo.

La Cumbre COP23 se centra en el impulso de los países a la aplicación del Acuerdo de París y en elaborar las directrices para aplicar sus disposiciones sobre cuestiones como la transparencia, la adaptación, la reducción de las emisiones, la financiación, la creación de capacidad y la tecnología. El fin será avanzar en todas estas áreas de manera que las directrices «claras» puedan quedar terminadas en la COP24 que se celebrará en Polonia en 2018.

Sin Trump y sin EEUU

Esta será la primera COP sin Estados Unidos, después de que su presidente Donald Trump anunciase su decisión unilateral de salir este acuerdo global, que han firmado más de 190 países. Sin embargo, también se recibirá a Nicaragua, que recientemente firmó el citado acuerdo. Por tanto, solo Siria y Estados Unidos permanecen al margen de la lucha contra el cambio climático, por razones muy diferentes: la primera por la guerra y la segunda por la voluntad política de su presidente.

Una vez el presidente anunció su voluntad de abandonar el Acuerdo de París, surgieron voces discrepantes dentro de Estados Unidos, que anunciaron que voluntariamente seguirían con la lucha contra el cambio climático, y también críticas del resto de la comunidad internacional. Lejos de desencadenar una reacción en cadena para apearse del acuerdo, la mayoría de países señalaron su voluntad de incrementar esfuerzos para compensar así la falta de acción norteamericana.

Ese fue el caso de China, la Unión Europea o de la propia Convención Marco de la ONU. La directora de Greenpeace Internacional, Jennifer Morgan, considera que la decisión de Trump de retirarse de París «fracasó espectacularmente» y provocó una «oleada de apoyos» para la acción climática global. «No hay vuelta atrás y no habrá renegociación y ese mensaje debe quedar claro en la COP23», confía la ecologista. Eso sí, Greenpeace pide a España asumir sus responsabilidades contra el cambio climático y planificar el abandono progresivo y ordenado de las energías sucias como el carbón.

Otra de las tareas principales en Bonn será hacer un primer balance global de esfuerzos colectivos respecto a los compromisos adquiridos en París para 2018. Las ONG ven en esta COP una «oportunidad» para empezar a cumplir con las promesas de París. Para la responsable de la campaña de cambio climático de Greenpeace España, Tatiana Nuño, España debe asumir una posición firme en la lucha contra el cambio climático y planificar un abandono progresivo y ordenado de las energías sucias.

Las energías renovables aportaron 8.511 millones de euros al PIB en 2016 y abarataron el sistema eléctrico en 10 millones

Europa Press.- El sector renovable contribuyó con 8.511 millones de euros al PIB nacional en 2016, un 3,3% más que en 2015, fruto de una mayor actividad ligada fundamentalmente a la puesta en marcha de nuevas subastas, como la realizada el año pasado de 500 megavatios (MW) de eólica y 200 MW de biomasa, y el anuncio de las nuevas subastas que ya se realizaron este año.

Presentando el Estudio del Impacto Macroeconómico de las Energías Renovables en España de la Asociación de Empresas de Energías Renovables (APPA), el director general de la asociación, José María González Moya, señaló «la paralización» que sufrió el sector en 2016, en el que la potencia permaneció prácticamente estancada, con solo 43 nuevos MW. En el periodo, el sector aportó 1.000 millones de euros en fiscalidad neta y mejoró su balanza comercial con un saldo exportador neto de 2.793 millones de euros, según datos del informe.

Por su parte, el empleo, al contrario que el PIB, sufrió un retroceso y se situó en 74.566 puestos de trabajo, 2.760 menos que el año anterior, situándose en su nivel más bajo de empleos en toda la serie analizada, con un descenso cercano al 50% respecto al 2008, cuando el sector empleaba a 142.940 trabajadores. Este descenso se debió al «fuerte» ajuste de los empleos de las instalaciones en funcionamiento, derivado de la reforma eléctrica y, particularmente, en las tecnologías más asociadas a la bioenergía, más intensivas en empleos.

Ahorraron 10 millones al sistema

En lo que se refiere a los ahorros producidos en el mercado eléctrico por las renovables, ascendieron a 5.370 millones de euros, cifra superior a la retribución específica percibida de 5.360 millones de euros. Además, evitaron la emisión de 52,2 millones de toneladas de CO2, lo que supuso ahorros en derechos de emisión por valor de 279 millones de euros. Este valor fue anormalmente bajo debido al descenso del 30% en el precio de la tonelada de CO2, indicó APPA.

Por otra parte, la asociación se mostró especialmente crítica con la normativa que establece la retribución para el sector ya que en el primer semiperiodo regulatorio, finalizado en 2016, se han perdido 574 millones de euros «que no se recuperarán nunca». «Creemos que es necesario mejorar los marcos normativos», aseguró el presidente de APPA, José María Villarig, quien recalcó que la reforma energética que se llevó a cabo en 2013 «fue injusta y recayó sobre unos más que sobre otros». Además, Villarig se ha mostrado confiado en que se ganará el recurso presentado contra el impuesto del 7% sobre la generación. «No es un tema defendible y acabáremos ganando», auguró.

En lo que respecta al autoconsumo, APPA mostró su sensación de que se producirá un cambio en el actual marco normativo por parte del Gobierno que permita su desarrollo. Así, González Moya destacó que en las conversaciones con el Ministerio de Energía se traslada el mensaje de que en autoconsumo «hay algunas condiciones de mejora, especialmente en temas administrativos». Finalmente, respecto a la posibilidad de una integración con la patronal eléctrica Unesa, Villarig subrayó que «no piensan en procesos de fusión, otra cosa es que podamos hablar y haya reivindicaciones del sector que sean confluyentes».