Entradas

La AIE no cree que Trump altere el mercado del petróleo y reitera que todo depende de la OPEP

EFE / Europa Press.- Los precios del petróleo corren el riesgo de sufrir una recaída a lo largo del próximo año en el caso de que la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) no alcance un acuerdo en su reunión del próximo 30 de noviembre para recortar la producción, según advierte la Agencia Internacional de la Energía (AIE), que considera «improbable» que la elección de Donald Trump como nuevo presidente de Estados Unidos altere significativamente las bases del mercado del petróleo a corto plazo.

En su informe mensual sobre el mercado petrolero, la AIE indicó que espera «más detalles» sobre las políticas energéticas que pretende realizar Trump a partir de su entrada en funciones para integrarlas en su edición de 2017 sobre el mercado a medio plazo. La agencia, que reúne a los grandes países consumidores de energía miembros de la OCDE (el mayor de los cuales Estados Unidos) se centró en este informe en la futura reunión del día 30 que ha convocado en Viena la OPEP, con intención de fijar un techo a su extracción de crudo.

Su principal comentario es que para cumplir los objetivos avanzados de un máximo de producción en una horquilla entre 32,5 y 33 millones de barriles diarios, la OPEP tendría que ponerse de acuerdo sobre «recortes significativos» a la vista de que estima que en octubre el cártel petrolero produjo una cantidad récord de 33,83 millones de barriles diarios. En octubre, la OPEP bombeó 230.000 barriles diarios más que en septiembre, sobre todo por la recuperación de la actividad en Nigeria y Libia, así como por Irak, que alcanzó un nuevo máximo histórico (4,60 millones de barriles), pero también porque Irán sigue acercándose a los niveles que tenía antes del periodo de las sanciones (3,75 millones).

Además, fuera del cártel también hubo un incremento del resto de los productores en 485.000 barriles diarios en octubre hasta 57 millones, y eso en particular gracias a yacimientos en el Mar del Norte, a Rusia y a Kazajistán. La AIE considera que Rusia, que es actualmente el mayor productor mundial de petróleo, incrementará sus extracciones este año en 230.000 barriles diarios y que la tendencia actual propiciará un nuevo aumento de cerca de 200.000 barriles en 2017. Si también se añaden las expectativas de subida igualmente en Brasil, Canadá y Kazajistán, los países que no pertenecen a la OPEP subirán su aportación en 500.000 barriles diarios el año próximo, después de que en 2016 la hayan recortado en 900.000.

En este sentido, la agencia considera que en caso de aplicarse el recorte de producción acordado, el mercado se moverá «con mucha rapidez» desde el exceso de oferta actual a un déficit en 2017. Por lo que respecta a la demanda, los autores no modificaron sus previsiones, de forma que auguran que el mundo consumirá este año una media de 96,3 millones de barriles diarios, lo que significará un alza de 1,2 millones de barriles respecto a 2015, cuando la progresión había sido de 1,8 millones. Para 2017, el ascenso será de 1,2 millones, hasta 97,5 millones de barriles diarios.

La AIE consideró que no hay signos de que la actividad económica vaya a absorber más crudo y cree que el estímulo que supuso un precio del barril por debajo de 30 dólares es algo pasado. Por eso, una de sus principales conclusiones es que si no hay acuerdo en la OPEP y algunos de sus países siguen aumentando sus extracciones, continuará el exceso de oferta en el mercado con pocas esperanzas de que el precio del barril suba significativamente. Es más, advirtió de que si esa situación persiste en 2017, hay riesgo de que los precios vuelvan a bajar. La agencia también subrayó la necesidad de hacer las inversiones que permitan responder a la demanda para garantizar el equilibrio.

Las renovables superan por primera vez al carbón en capacidad instalada, según la Agencia Internacional de la Energía (AIE)

Europa Press / EFE.- El año 2015 representó un «punto de inflexión» para las energías renovables, responsables de más de la mitad de la nueva capacidad de generación de energía en todo el mundo, con un crecimiento del 15% hasta un nuevo récord de 153 gigavatios (GW), lo que permitió a este tipo de energías convertirse por primera vez «en la mayor fuente mundial de energía por capacidad instalada», superando al carbón, según la Agencia Internacional de la Energía (AIE).

De este modo, la AIE ha revisado un 13% al alza su proyección de crecimiento para las energías renovables entre 2015 y 2021, periodo en el que confía en que el sector pasará a cubrir desde el 23% al 28% de la demanda eléctrica mundial. «Durante los próximos cinco años, las renovables seguirán siendo la fuente de generación de electricidad de mayor crecimiento», subraya la agencia, que calcula que este tipo de energías serán responsables de más del 60% del aumento de la capacidad mundial de generación a medio plazo. Además, la AIE calcula que la energía solar fotovoltaica y la eólica representan unidas el 75% del crecimiento de la capacidad renovable a medio plazo.

Las mejores expectativas para las renovables se explican por el fuerte apoyo recibido en países como Estados Unidos, México, China e India, así como en la reducción de costes, que para 2021 podrían bajar un 25% en el caso de los paneles solares y un 15% en el de la energía eólica terrestre. También destaca el papel desempeñado por el mayor apoyo político en mercados clave, así como las mejoras tecnológicas. Asimismo, junto a la preocupación por mitigar el impacto del cambio climático, en muchos países la apuesta por las renovables se explica por la necesidad de diversificar fuentes energéticas para ganar seguridad de suministro.

Según la agencia adscrita a la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), durante 2015 se instalaron alrededor de medio millón de paneles solares diariamente, lo que permitió incrementar la capacidad de generación en 49 gigavatios en 2015. De hecho, la AIE estima que la generación de energía a través de renovables excederá de 7.600 teravatios hora (TWh) para 2021, un volumen de generación equivalente a la suma de Estados Unidos y la Unión Europea en la actualidad.

El calor y el transporte

«Estamos siendo testigos de una transformación de los mercados energéticos globales encabezada por las renovables y, como es el caso de otros campos, el centro de gravedad del crecimiento de este tipo de energía se está desplazando hacia los países emergentes», indicó el director ejecutivo de la AIE, Fatih Birol. No obstante, a pesar de lo excepcional del 2015, la AIE subraya la necesidad de mantener la prudencia ante la «persistencia de incertidumbres normativas en demasiados países», lo que conlleva la ralentización de inversiones, mientras que los avances de las renovables en sectores como la calefacción y los transportes siguen siendo lentos y requieren esfuerzos más fuertes de las regulaciones.

El desarrollo de calor a partir de renovables, no obstante, sigue siendo un desafío, y la cuota de biocombustibles en la demanda de fueles para el transporte se espera que solo pase del 3% al 4% en ese periodo hasta 2021. Además, la AIE resaltó que cumplir los objetivos marcados en la COP21 requiere tasas de descarbonización más fuertes. Abordar el diseño del mercado para mejorar la integración de las renovables, poner en marcha políticas estables y sostenibles que fomenten la certidumbre en las inversiones y desarrollar mecanismos para reducir los costes de financiación son, según indicó, claves para conseguirlas.

“Insuficiente” acelerón de transición energética

Por otro lado, la AIE considera que la transición hacia las energías renovables ha experimentado una aceleración, pero advirtió de que todavía es insuficiente para alcanzar objetivos ambiciosos contra el cambio climático. «Hay señales de cambio», indicó el jefe de la división de renovables de la AIE, Paolo Frankl, quien advirtió de que crear el marco necesario para atraer inversión depende de políticas adecuadas. Se requiere, añadió, una visión a largo plazo. Su organismo calcula que la capacidad eléctrica global a partir de este tipo de energía crecerá un 42% hasta 2021, una perspectiva mucho más optimista que la efectuada en 2015, y que debe a Estados Unidos más de la mitad de esos cálculos.

Un menor crecimiento de la demanda eléctrica, legislación pendiente sobre el diseño del mercado o incertidumbre de las políticas al respecto en algunos mercados de la Unión Europea explican que su avance en el bloque comunitario sea menor que antes. China, por otra parte, se mantiene como «líder global indiscutible» de la expansión de las renovables, tanto por la preocupación por la contaminación del aire como por políticas medioambientales favorables.

La AIE aboga por mantener la energía nuclear para reducir la contaminación y destaca los avances logrados en eficiencia energética

EFE.- Las medidas de eficiencia energética que se han puesto en marcha en los países desarrollados desde el año 2000 han permitido ahorrar un 13% del consumo, algo que el pasado año representó 540.000 millones de dólares, según indicó la Agencia Internacional de la Energía (AIE). Por otro lado, su director ejecutivo, Fatih Birol, abogó por mantener la energía nuclear como una de las opciones para frenar la contaminación, reducir la emisión de dióxido de carbono y evitar el calentamiento global.

«Cada año mueren 6,5 millones de personas en el mundo a causa de la contaminación generada por el sector de la energía», denunció Birol durante el Congreso Mundial de la Energía (WEC) que se celebra en Estambul. Birol subrayó la importancia de la eficiencia energética como primera opción para reducir las emisiones, pero insistió que tampoco se debería dejar de lado la energía nuclear como opción limpia. «La nuclear puede realizar un importante aporte en los países en los que está socialmente aceptada«, apuntó el economista turco, que dirige la AIE desde hace un año.

Insistió también que la reducción del sector del carbón será inevitable si no se desarrollan tecnologías limpias o de captación de las emisiones, pero se opuso a «meter a todos los combustibles fósiles en el mismo saco». Aunque el estudio presentado por el Consejo Mundial de Energía predice un enorme aumento de la eólica y la solar en la generación mundial de electricidad desde el 4% actual hasta una horquilla entre el 20% y el 39% en 2060, Turquía en concreto espera también relanzar su programa nuclear en este congreso.

Es posible que en la reunión entre el presidente ruso, Vladímir Putin, con su homólogo turco, Recep Tayyip Erdogan, un nuevo gesto de acercamiento entre ambos países, enfrentados hasta agosto pasado, se haya abordado el desbloqueo del proyecto del primer reactor nuclear de Turquía, que se halla en construcción en la localidad de Akkuyu bajo un contrato con la empresa rusa Rosatom. Las obras, que ya han suscitado reiteradas protestas de los movimientos ecologistas turcos, se habían ralentizado o congelado durante la crisis diplomática que enfrentó a Moscú y Ankara durante el año pasado por el derribo de un avión ruso en la frontera sirioturca.

Eficiencia desde el año 2000

Según los datos de la AIE, las medidas de eficiencia energética han permitido ahorrar un 13% del consumo desde el año 2000. El ritmo de progresión de esa eficiencia ha avanzado, como lo pone en evidencia el hecho de que la intensidad energética mejoró un 1,8% en 2015 pese al abaratamiento del petróleo, después de haberlo hecho un 1,5% en 2014 y un 0,6% de media anual entre 2003 y 2013, pero la AIE puso el acento en que sigue siendo insuficiente. Para cumplir los objetivos que se ha fijado la comunidad internacional en la limitación del calentamiento climático y poner el mundo en una senda sostenible, la intensidad energética mundial tendría que crecer a una cadencia del 2,6% anual.

Las ganancias en intensidad energética fueron más pronunciadas en países emergentes, y muy en particular en China, donde en 2015 el incremento fue del 5,6%, comparado con el ritmo anual del 3,1% en la década pasada. Una de las principales consecuencias fue que la demanda energética en China el pasado año subió sólo un 0,9%, la cifra más baja desde 1997, y eso aunque su producto interior bruto (PIB) aumentó un 6,9%. Sin la contribución del gigante asiático, la mejora de la intensidad energética a escala global se hubiera quedado en el 1,4% en 2015.

Si se sumaran los resultados obtenidos gracias a las medidas de eficiencia energética de los miembros de la AIE, que reúne a los principales consumidores del mundo desarrollado, y de China, en 2014 se evitó la emisión de 2.700 millones de toneladas de dióxido de carbono (CO2), un 15% de las de ese grupo. La inversión en esas medidas dentro de la AIE se incrementó un 6% el pasado año para llegar a 221.000 millones de dólares, y en torno a la mitad se dirigió a la vivienda, donde la progresión anual fue del 9%.

Los autores del estudio señalaron la importancia de las políticas que imponen reglas de eficiencia, que por ejemplo cubrieron el 74% de los vehículos nuevos vendidos en el mundo en 2015, y que han conducido a unas mejoras del 23% desde 2005 En el transporte rodado (coches y camiones), los ahorros en 2015 representaron 2,3 millones de barriles de petróleo diarios, en torno al 2% de la demanda global. De acuerdo con la AIE, si todos los países adoptaran los estándares más exigentes, esa cifra prácticamente se duplicaría, para representar 4,3 millones de barriles diarios.

El precio del petróleo vive en 2016 su peor año en una década

EFE.- El precio del petróleo vive en 2016 su peor ejercicio desde 2004, con un precio medio en torno a los 43 dólares en lo que va de año y sin indicios que apunten a recuperarse. A ello contribuye la difícil combinación que arroja una demanda más débil de lo esperado con un exceso de oferta, lo que se va a mantener, como mínimo, en lo que queda de año, según los expertos.

Tras arrancar 2016 en mínimos no vistos en 12 años, el barril de Brent se mantiene en torno de los 40 dólares, muy lejos de los picos alcanzados en años como 2008 o 2012, que terminó con un promedio de 111 dólares. Tras un 2013 y un 2014 de precios en los 100 dólares, 2015 ya supuso un cambio radical terminando en 53 dólares de media. «Se esperaba que para este último trimestre del año se balanceara algo el mercado, cierta remontada de precios que, por ahora, parece complicada por varios factores», resume el director del programa de Energía del Real Instituto Elcano, Gonzalo Escribano.

Por un lado, una demanda ralentizada y, por otro, un exceso de oferta con los países de la OPEP con producción al máximo y resistiendo más de lo esperado. «Lo podríamos definir como el dilema del prisionero», señala el catedrático de la Universidad de Barcelona Mariano Marzo. «En la OPEP hay interés por subir precios, pero se miran unos a otros a ver quién es el primero en dar un paso. Necesitan que suban pero sin resucitar al fracking«, explica Marzo, que apunta a mediados de 2017 para poder ver una recuperación de los precios.

La Agencia Internacional de la Energía (AIE) ponía cifras a ese panorama: una reducción de sus previsiones sobre el consumo mundial de petróleo tanto para este año como el próximo y un pronóstico de que el desequilibrio del mercado va para largo. «El informe de la AIE ha sido un jarro de agua fría. Nos vamos a mediados de 2017 para llegar a ese cierto equilibrio», coincide Escribano. «Se barajaba que los precios a final de año estuvieran en 60 dólares pero parece complicado. Se van a quedar más o menos como ahora, alrededor de los 45 dólares, no se va a dar un repunte ni tampoco hundirse», concluye el experto del Real Instituto Elcano.

¿Y dónde podría estar ese equilibrio? Para Marzo, un barril de Brent por encima de los 60 dólares pondría de nuevo en el mercado a los no convencionales, a la industria del fracking, lo que no interesa a la OPEP, por lo que el equilibrio podría no llegar ni a ese nivel. «La industria petrolera norteamericana está viviendo su mayor crisis desde la gran depresión, necesitan vender en cuanto el petróleo repunte y reducir deuda», explica Marzo, que apunta que «lo mejor para todos es salir de esa volatilidad extrema, frenar ese mercado paralelo de futuros que distorsiona el sector”.

La inversión en energía cayó un 8% en 2015 a pesar del avance de las fuentes renovables, según la AIE

EFE / Europa Press.- La inversión energética global disminuyó un 8% en 2015, hasta los 1,8 billones de dólares (1,6 billones de euros), con una caída en los proyectos de exploración y producción de gas y petróleo, lo que contrarrestó la inversión realizada en renovables, redes eléctricas y eficiencia energética, según indicó la Agencia Internacional de la Energía (AIE).

En su informe Inversión mundial en energía 2016, la agencia destacó además que, después de tres años de preponderancia de Estados Unidos, en 2015 el país que contó con más inversiones en el sector energético fue China. Esto se debió «al récord de inversiones en el sector eléctrico» chino, comparado con un descenso del capital invertido en proyectos de crudo y gas en Estados Unidos, donde se había canalizado mucho dinero a proyectos de lutita. Así, China invirtió 315.000 millones de dólares, sobre todo en renovables y nuclear; seguida de Estados Unidos, que gastó 280.000 millones; la Unión Europea, que destinó 140.000 millones especialmente a medidas de eficiencia, y Rusia e India, que invirtieron 85.000 y 65.000 millones de dólares.

No obstante, la inversión en petróleo y gas sigue acaparando la mayor proporción de inversión mundial, a pesar de que el gasto en combustibles fósiles se ha reducido en 200.000 millones de dólares en 2015, representa el 46% del total, por delante de las energías renovables (17%), las redes eléctricas (14%), la eficiencia energética, la energía térmica (7%) y el carbón (4%). No obstante, el gasto en el sector eléctrico registró un nuevo récord al alcanzar los 690.000 millones de dólares (614.000 millones de euros) en 2015, un 37% del total, gracias a la expansión de las renovables y las redes eléctricas, y a pesar de la ralentización en el crecimiento de la demanda eléctrica.

En economías maduras como las de la Unión Europea, Japón y Estados Unidos, el crecimiento de los servicios «está rompiendo el vínculo entre demanda energética y crecimiento del producto interior bruto (PIB)», indicó la AIE. Este cambio estructural se traduce en un aumento de la inversión en medidas de eficiencia energética, que alcanzó 220.000 millones de dólares a nivel mundial en 2015, un 6% más que en el ejercicio anterior.

La Agencia, que se encarga de analizar el panorama energético para sus 29 países miembros, alertó de que, aunque la inversión se está reorientado hacia la energía limpia, «es esencial seguir invirtiendo en la extracción y producción de petróleo para garantizar la seguridad energética mundial». «Es imposible que las energías renovables puedan actualmente reemplazar al petróleo, en particular en sectores como el transporte o los petroquímicos», aseveró el director ejecutivo, Fatih Birol, que subrayó que la ralentización de la economía china está afectando a las inversiones globales, por el descenso de la demanda de petróleo, gas y carbón, y a que el dinero destinado a los combustibles fósiles ha bajado un 25% respecto a 2014.

La AIE predijo que la inversión en el sector petrolífero seguirá bajando en 2016, hasta un «preocupante» 24 %, debido a los bajos precios del petróleo. En este sentido, recordó que se ha ofrecido a colaborar con la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) para estabilizar la situación. «Oriente Medio continuará siendo clave para el mercado del crudo por muchos años, pues es la principal fuente de reservas a un precio barato», advirtió Birol.

La AIE avisó de que, dado que la inversión en el sector petrolífero se está destinando a sustituir activos viejos o deteriorados, «es clave que en los próximos años se incremente la inversión para mantener la seguridad del suministro«, al margen de que los indicadores apunten a una ralentización de la demanda energética. «Los Gobiernos deben no solo mantener, sino reforzar sus compromisos para conseguir la seguridad energética al mismo tiempo que cumplen sus objetivos de cambio climático», manifestó Birol.

La AIE reduce sus previsiones de consumo de petróleo para 2016 y 2017 mientras Arabia Saudí recupera el liderazgo productor

EFE / Europa Press.- Arabia Saudí ha recuperado el cetro como mayor productor mundial de petróleo, desbancando a Estados Unidos, que ocupaba la primera posición desde la primavera de 2014, según la Agencia Internacional de Energía (AIE), que advierte de una ralentización más intensa de lo previsto del crecimiento de la demanda mundial de crudo, lo que retrasará el reequilibrio del mercado más de lo estimado anteriormente, después de reducir las previsiones sobre el consumo mundial de petróleo tanto este año como el próximo.

En su informe sobre el mercado petrolero, la AIE disminuyó sus estimaciones sobre la demanda global en 100.000 barriles diarios para este año, de forma que será de media de 96,1 millones de barriles, lo que significa que el incremento respecto a 2015 será de 1,3 millones de barriles diarios cuando fue de 1,6 millones el ejercicio precedente.En este sentido, para 2017 el consumo será de 97,3 millones de barriles, es decir un alza interanual de sólo 1,2 millones de barriles y una corrección a la baja de 200.000 barriles si se compara con lo que había anticipado previamente.

Esa revisión resulta en primer lugar de la constatación de los datos del tercer trimestre, en el que la progresión del consumo, que fue de 1,4 millones de barriles diarios en términos interanuales en el segundo trimestre, ha sido únicamente de 0,8 millones en el tercero, la tasa más baja de los últimos dos años.Los autores del estudio destacaron que los principales pilares en los últimos tiempos de la expansión del consumo, que han sido China e India, cada vez lo son menos, y que las preocupaciones sobre los países en desarrollo están pesando.Además, en Europa hay un descenso en el tercer trimestre a causa de un descalabro de las entradas de crudo en Francia, Finlandia e Italia.

La AIE señaló que, en términos generales, después de más de un año en el que el barril se mueve en torno a los 50 dólares, el precio está dejando de ser un incentivo para elevar la demanda por ese motivo.Igualmente subrayó la aparente paradoja de que pese al hundimiento de las inversiones en la extracción por esos bajos niveles de precios, la oferta se está expandiendo por el tirón de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP). Precisamente los países de la OPEP mantendrán un encuentro informal entre el 26 y 28 de septiembre en Argelia con representantes de países productores de crudo ajenos al cártel con la expectativa sobre un potencial acuerdo para estabilizar los precios.

Desde finales de 2014, los países que no pertenecen a ese cártel han recortado sus extracciones en 1,4 millones de barriles diarios, y eso hay que atribuirlo en buena parte a Estados Unidos, que ha supuesto más de la mitad del recorte de las inversiones de los productores independientes. En paralelo, la OPEP ha tenido el comportamiento inverso, y en particular dos de sus miembros, Arabia Saudí e Irán, están bombeando alrededor de un millón de barriles diarios más de los que sacaban de sus pozos a finales de 2014.

La oferta disminuyó en 300.000 barriles diarios en agosto, pero eso ocurrió después de fuertes ascensos en los dos meses anteriores, y se situó en 96,9 millones de barriles diarios.Y la OPEP incrementó una vez más su contribución, en agosto en 30.000 barriles diarios, para situarse en niveles récord de 33,47 millones de barriles.Arabia Saudí, aunque disminuyó ligeramente ese mes su producción, con 10,60 millones de barriles diarios (5.000 menos que en julio), volvió a situarse como el primer país productor del mundo por delante de Estados Unidos.

La AIE señala que la estrategia emprendida por Arabia Saudí en 2014 para defender su cuota de mercado a costa del desplome de los precios del petróleo ha permitido al país «sobrepasar a Estados Unidos como el mayor productor mundial de petróleo». De hecho, la agencia adscrita a la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) subraya que los productores asiáticos de bajo coste de Oriente Próximo, incluyendo a Arabia Saudí, Emiratos Árabes Unidos, Kuwait e Irak, se encuentran cerca de sus máximos históricos, mientras Irán sigue incrementando con rapidez su oferta desde el levantamiento de las sanciones internacionales, y en agosto subió a 3,64 millones de barriles.

Fuera de la OPEP, el resto de países disminuyó sus extracciones en agosto en 1,4 millones de barriles diarios menos que el mismo mes de 2015 con 56,4 millones, sobre todo por Estados Unidos, Rusia, Kazajistán y el Mar del Norte.Una de las consecuencias de este prolongado desequilibrio entre la oferta y la demanda es el aumento de las reservas industriales, que en el caso de los miembros de la OCDE progresaron en 32,5 millones de barriles, para alcanzar un récord de 3.111 millones de barriles.La AIE indicó que no espera que la dinámica de la oferta cambie significativamente en los próximos meses, de forma que seguirá superando la demanda, al menos, hasta la primera mitad de 2017.

La AIE constata el éxito de la estrategia de Arabia Saudí para ganar cuota en el mercado de petróleo

Europa Press.- El actual entorno de bajos precios del petróleo como consecuencia de la estrategia de no limitar la oferta de crudo liderada por Arabia Saudí permitió a los productores de Oriente Próximo alcanzar su mayor cuota de mercado desde 1975 a la vez que provocaba un hundimiento sin precedentes de la inversión en el sector petrolero, particularmente en Norteamérica, según la Agencia Internacional de la Energía (AIE).

Según los datos de la agencia adscrita a la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), las inversiones en el sector petrolero han disminuido en 2015 y 2016, su primer retroceso en dos años consecutivos en las tres últimas décadas. Así, la industria petrolera recortó su inversión en más de 270.270 millones de euros en los dos últimos años, una cifra equivalente al 42% del total. «Norteamérica asumió alrededor de la mitad de esta caída», precisó la AIE, que considera «sin precedentes» un retroceso semejante, incluso teniendo en cuenta la significativa reducción de costes, y no espera un rebote significativo de la inversión en 2017 si los precios continúan a los niveles actuales.

Asimismo, el análisis de la agencia internacional concluye que a raíz de la bajada de precios los países productores de Oriente Próximo, incluyendo a Arabia Saudí, Irán e Irak, cuyos costes de extracción son sensiblemente inferiores a los de sus competidores cuentan con una cuota de mercado del 35%, la más alta desde 1975. Por otro lado, la AIE señala que esta bajada del petróleo, trasladada a unos menores precios del combustible, ha tenido un efecto negativo sobre los esfuerzos en materia de eficiencia energética en algunos países, impulsando la venta de coches deportivos en detrimento de otros más eficientes.

Los ministros de Energía del G20 estudian cómo aplicar los acuerdos de París

EFE.- Los ministros de Energía del G20 se reúnen a la búsqueda de fórmulas para aplicar los acuerdos alcanzados en la cumbre sobre el cambio climático de París (COP21) de diciembre pasado como principal objetivo. Este encuentro arrancó con una densa capa de contaminación en el cielo de Pekín, ciudad conocida mundialmente por su polución, poco después de que la Agencia Internacional de la Energía (AIE) alertara de que este problema provoca 6,5 millones de muertes prematuras cada año en todo el planeta.

«China ha copado portadas tanto por la magnitud de su problema de contaminación atmosférica como por sus encomiables esfuerzos por resolver esta cuestión», dijo el presidente de la AIE, Fatih Birol, en su discurso en la reunión del G20. Birol aseguró que, para cumplir con los compromisos adquiridos en la COP21, el gigante asiático debe implementar más controles de emisiones contaminantes industriales, mejorar su eficiencia energética y endurecer las normativas.

En este sentido, el viceprimer ministro chino Zhang Gaoli subrayó la importancia de desarrollar un suministro energético de bajas emisiones contaminantes y recalcó el compromiso de su país, mayor emisor de gases de efecto invernadero del mundo, por incrementar el peso de las energías limpias en su cartera energética, en detrimento de los combustibles fósiles. En este apartado China también contempla a la energía nuclear.

El viceprimer ministro avanzó que China controlará el consumo total de energía, invertirá en investigación y desarrollo de tecnologías de este campo y potenciará el uso de redes eléctricas inteligentes. Además, Zhang instó a los miembros del G20 a poner en marcha mecanismos para reforzar la cooperación internacional en energía, con una plataforma para compartir las innovaciones tecnológicas en este campo y mejorar las infraestructuras energéticas y garantizar su seguridad.

El 66% de la nueva demanda energética vendrá de países emergentes, según la Agencia Internacional de la Energía

EFE.- Las ciudades de los países emergentes representarán dos tercios, es decir el 66% del aumento de la demanda energética prevista hasta 2050, según un informe de la Agencia Internacional de la Energía (AIE). El estudio Perspectivas de la Tecnología de la Energía 2016, presentado en Enerclub por el responsable de sostenibilidad de la AIE, Kamal Ben Naceur, explica que actualmente las ciudades son responsables de cerca del 70% de las emisiones de dióxido de carbono (CO2) mundiales.

El encargado del estudio exigió a los gobiernos un mayor apoyo en la creación de ciudades con un consumo energético más eficiente. Acerca del pacto climático de París (COP21), cuyo objetivo es que la temperatura del planeta no aumente en 2 grados centígrados mediante un proceso de descarbonización mundial, Ben Naceur lo calificó de «impulso histórico para la energía limpia».

La mejora de las tecnologías energéticas es vital aunque Ben Naceur reconoció que solo las de vehículos eléctricos y de energía solar y eólica están «avanzando favorablemente». El número de este tipo de vehículos experimentará un gran aumento según las previsiones del informe, hasta alcanzar la cifra de 1.000 millones de coches eléctricos en 2050, lo que supondrá un 40% o 45% del total mundial.

El informe también prevé un descenso del 67% en las emisiones mundiales hasta 2050 si se cumplen los objetivos previstos. Ben Naceur ha destacado que desde el año 2013, los niveles de emisiones mundiales se mantienen estables, y ha señalado también que 2015 fue el primer año en que «las trayectorias de emisiones y crecimiento económico se separaron». La transformación de la economía china al sector servicios y el auge de las renovables son factores influyentes en estos hechos, indicó.

La AIE augura un aumento débil de la demanda gasista hasta 2021 pero un crecimiento «masivo» de operaciones con GNL

EFE.- La demanda de gas natural aumentará un 1,5% anual en el mundo hasta 2021 como consecuencia de unos mercados débiles en China y Europa, mientras crecen «masivamente» las exportaciones de gas natural licuado (GNL), según indicó la Agencia Internacional de la Energía (AIE). La agencia afirma que los suministros de GNL llegan justo cuando la demanda en algunos mercados se debilita, lo que produce un «importante cambio en el modelo global del comercio del gas».

Unas perspectivas débiles para Japón y Corea del Sur, los dos principales compradores de GNL, implican que los nuevos suministradores tendrán que buscar otros mercados, y China, la India y los países de la Asociación de Naciones del Sudeste Asiático (Asean) «emergerán como compradores clave», resume la AIE. «Vemos cantidades masivas de exportaciones de GNL mientras la demanda, pese a unos precios de gas más bajos, sigue suavizándose en mercados tradicionales», señaló el director ejecutivo de la AIE, Faith Birol.

Tras un estancamiento en 2014, la demanda global de gas ha vuelto al crecimiento en 2015, señala la agencia, pero la expansión ha permanecido muy por debajo de la media histórica, indica en su Informe del mercado gasístico a medio plazo de 2016. Desde 2012 la demanda mundial de gas solo se ha incrementado un 1% al año, mucho menos que la media de la última década, de un 2,2%.

«La transformación energética en China y el débil crecimiento económico en economías avanzadas generan vientos en contra de la demanda de energía en general», sostiene la AIE. «Los bajos precios de combustibles fósiles no han podido compensarlo hasta ahora», añade. Frente al mercado débil en China, en la India la demanda gasista crecerá de forma «sólida», a un ritmo medio anual de casi el 6% hasta 2021. En Oriente Medio, unos precios de petróleo más baratos y una actividad económica ralentizada afectan negativamente la trayectoria de la demanda de gas.

En Europa, la demanda gasista aumentará «muy modestamente». En Estados Unidos la producción permanecerá «relativamente plana» en 2016 y 2017, según la AIE. El crecimiento de la producción en Rusia y el Caspio, la región exportadora más grande del mundo, «baja a la mitad» de su nivel registrado entre 2009 y 2015, por la débil demanda en Europa y el crecimiento más reducido del consumo en China, indica la agencia.

La AIE también recalca que unos «suministros abundantes» de GNL llevan a una fuerte competencia entre productores, que permiten a Europa y China «arbitrar» entre gasoductos y GNL según los precios. La AIE ve además que el sobresuministro de GNL producirá una «competencia feroz» entre Estados Unidos y Qatar, que «lucharán para lograr acceso a los consumidores europeos». Las exportaciones de GNL aumentarán «sustancialmente», un 45% entre 2015 y 2021, según afirma la AIE, y el 90% procede de Estados Unidos y Australia, que «rivalizará» con Qatar como el mayor exportador de GNL en 2021.