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Pedro Sánchez asegura que España alcanzará las cero emisiones de CO2 en 2050 y que será «pionera» en transición justa

Europa Press.- Greenpeace ha animado al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, a actuar «en consonancia» con sus anuncios y que acelere la transición energética después de que haya asegurado que España reducirá sus emisiones invernadero en un 37% en 2030 y «al menos» un 90% en 2050 para luchar contra el cambio climático, con una estrategia de transición «pionera» para asumir el reto, pero teniendo en cuenta a los colectivos más vulnerables.

En este sentido, Sánchez ha anunciado que España se ha adherido a la declaración impulsada por el presidente de Austria y anima a otros países a sumarse porque en la actualidad el planeta está «lejos» de cumplir los objetivos de clima adoptados en 2015 en el Acuerdo del Clima de París. Eso sí, ha señalado que es consciente de los efectos de la descarbonización en algunos colectivos y, por ello, ha anunciado que España va a ser «pionera» en el diseño de una estrategia de transición justa que tenga en cuenta el impacto en zonas más específicas y muy en particular en las comarcas mineras.

Para Sánchez, este es el momento de «fortalecer» el multilateralismo y poner en marcha los compromisos adquiridos y avanzar en la plena aplicación de los Acuerdos del París. «La hoja de ruta es clara: reducción de emisiones, desarrollo económico sostenible y justo, inclusivo y sociedades adaptadas al cambio climático«, ha resumido el presidente. A su juicio, la cumbre de Katowice debe suponer un antes y un después para sentar las bases de una visión «más ambiciosa» para asumir «mayores responsabilidades».

En ese sentido, indicó que su Gobierno quiere ir «más allá» de estos compromisos porque España es un país «vulnerable» al cambio climático. Así, en el marco de la coalición para la neutralidad del carbón, ha confirmado la voluntad de reducir a cero las emisiones netas en 2050 y quiere movilizar 900 millones de euros anuales a partir de 2020. Asimismo, ha añadido que la apuesta de su Ejecutivo es por la eficiencia, energías renovables y movilidad eléctrica para lo que se fijarán «objetivos claros y ambiciosos» para los años 2020, 2030 y 2050 porque, en su opinión, se necesita dar certidumbre y confianza «no solo» a los inversores económicos, sino «especialmente» a los ciudadanos.

En concreto, resaltó que su propuesta es reducir un 37% las emisiones en 2030 y al menos un 90% en 2050, para alcanzar la neutralidad de carbono. «La calidad del aire, el impacto sobre los colectivos más vulnerables y la modernización de la industria son motores de nuestro compromiso», ha defendido. Sánchez quiere aprobar un paquete de medidas para luchar contra el cambio climático y trabajar en una senda «viable» de descarbonización de la economía pero es consciente del impacto de estas medidas en territorios, sectores y los colectivos más expuestos, algo que se paliará con la estrategia de transición justa «pionera» que tendrá en cuenta el impacto en zonas «más específicas» y «muy en particular» en las comarcas mineras.

Del mismo modo, ha mostrado el apoyo a la declaración sobre solidaridad y transición justa presentada y que cuenta con el apoyo de las principales organizaciones sindicales a nivel internacional. «El momento es ahora. España tiene clara su elección, que es actuar por una transición inaplazable, urgente y que solo dará frutos si todos actuamos desde la honestidad, el sentido común y la responsabilidad. Debemos elegir, seguir en la inacción o actuar conjuntamente frente a la tentación del repliegue mediante un liderazgo colaborativo», ha concluido.

Greenpeace: acelerar la transición energética

Por su parte, Greenpeace ha animado al presidente del Gobierno a actuar «en consonancia» y acelere la transición energética, ponga fecha de cierre de energías sucias y emita señales claras para impulsar las energías renovables. La ONG ha respondido así a la intervención de Sánchez, quien ha reconocido que no se están cumpliendo las metas marcadas, y celebra que el presidente califique el cambio climático como un desafío «real y urgente» frente al que hay que actuar de forma conjunta.

Respecto al anuncio de una transición ecológica justa pionera en España, Greenpeace le recuerda que el plan de transición debe establecer fechas para el cierre de las energías sucias y peligrosas; dar señales claras para incentivar las inversiones en energías renovables y para la protección ambiental, además de aumentar los planes de formación en las regiones afectadas por la transición.

La responsable de la campaña de cambio climático de Greenpeace, Tatiana Nuño, ha subrayado que además de justa la transición debe ser rápida porque no solo se trata de puestos de trabajo sino del «bienestar futuro» de las comunidades. «Los mejores trabajos están en un planeta vivo», destacó. Además, ve positivo la confirmación del apoyo de Sánchez a la declaración de Silesia sobre la transición justa y al llamamiento de la Presidencia europea de Austria para reclamar un aumento de la ambición climática en Europa.

Respecto a los objetivos futuros, Greenpeace ve «urgente» hacer todo lo posible por acercar el sistema eléctrico a un mix 100% renovable en 2030 y a reducir a cero las emisiones netas en 2040. Asimismo, le piden que el Plan Nacional de Energía y Clima incluya un calendario para el fin de las centrales nucleares cuando terminen sus licencias actuales de explotación y que 2025 sea el límite para cerrar las centrales térmicas de carbón.

Antonio Guterres, secretario general de la ONU, pide liderazgo y ambición para afrontar el «profundo problema» con el cambio climático

Europa Press.- El secretario general de la ONU, Antonio Guterres, ha reclamado a los líderes mundiales un «liderazgo sagaz» y «mayor ambición» y compromiso para afrontar el «profundo problema» con el cambio climático, que está yendo «más rápido» que los hombres. «Debemos alcanzar su ritmo pronto, antes de que sea demasiado tarde», urgió Guterres, quien ha apelado a reducir las emisiones un 45% en 2030, respecto de los niveles de 2010, y alcanzar cero emisiones en 2050.

En la Conferencia de las Partes de la Convención de Cambio Climático (la COP24) en Katowice (Polonia), el secretario general de la ONU ha advertido a los jefes de Estado y presidentes de Gobierno presentes, entre ellos, Pedro Sánchez, de que esta es una cuestión «de vida o muerte» para muchas personas, regiones e incluso países y destacó que la reunión es «la más importante» para avanzar desde que hace 3 años se firmó el Acuerdo del Clima de París.

En este contexto, ha recordado que el objetivo en Katowice es finalizar el programa de trabajo del Acuerdo de París para su implantación y ha advertido de que el plazo es el que entonces se dieron los propios mandatarios. En su receta, Guterres ve necesaria una transformación «completa» de la economía energética, de la gestión de los recursos, al tiempo que es preciso llegar a un desarrollo sostenible bajo en carbono y resistente al clima.

El secretario general de la ONU ha reprochado a los asistentes de que a pesar de que la sociedad está siendo testigo de los «devastadores» impactos del cambio climático que se están produciendo «a lo largo de todo el mundo» no se está haciendo «lo suficiente» ni se va lo suficientemente rápido. Asimismo ha insistido en que no se está haciendo «lo suficiente» para capitalizar las «enormes» oportunidades medioambientales, sociales y económicas de la acción climática. En concreto, recordó que la ciencia demanda una «respuesta significativamente más ambiciosa» en el marco de acción que proporciona el acuerdo de París, pero que es preciso hacerlo operativo.

El secretario general de la ONU ha apelado a la responsabilidad colectiva para invertir este «caos climático global» y consolidar el compromiso financiero hecho en París y para asistir a las comunidades y naciones más vulnerables. «La acción climática ofrece un convincente camino para transformar nuestro mundo a mejor», añadió. En este contexto ha recordado que según la Organización Meteorológica Mundial, los 20 años más cálidos se han registrado en los últimos 22 años, y entre estos, los cuatro más cálidos, en los últimos cuatro años; que la concentración de CO2 ha sido la más alta registrada en 3 millones de años y que las emisiones están volviendo a crecer.

Igualmente, ha precisado que el reciente informe del IPPC advierte de que el calentamiento podría llegar a 1,5ºC en 2030 y tendría impactos devastadores. «El último informe de misiones de la ONU nos dice que las contribuciones y compromisos nacionales actuales conducirán a un calentamiento global de unos 3ºC a final de siglo», ha comentado. En definitiva, ha afeado a la mayoría de los países más responsables de las emisiones invernadero están por detrás de sus esfuerzos para llegar a las necesidades de París. «Estamos muy lejos del rumbo. Necesitamos más acción y más ambición. Tenemos que cerrar absolutamente esta brecha de emisiones», ha apostillado.

Para ello, ubicó el Acuerdo de París como el «marco de trabajo» para la transformación necesaria y que marca las reglas para su implantación. «Necesitamos una visión de implantación unificadora que establezca reglas claras, que inspire la acción y promueva el aumento de la ambición, basada en el principio de la igualdad y con responsabilidades comunes pero diferenciadas y de acuerdo a las capacidades respectivas, a la luz de las diferentes circunstancias nacionales. No tenemos tiempo para negociaciones limitadoras», advirtió.

En cuanto a los recursos, avanzó que es necesario movilizar recursos e inversiones para combatir «con éxito» el cambio climático en cinco áreas económicas clave: la energía, ciudades, uso de la tierra, agua e industria. De momento, según estima falta construir el 75%de las infraestructuras necesarias en 2050 y según se haga el proceso, bloqueará un futuro de altas emisiones o conducirá a un desarrollo sostenible bajo en emisiones. Por ello, asegura que Gobiernos e inversores deben apostar por la economía verde, no por la economía gris. En concreto, ha pedido «aceptar» el precio del carbón y eliminar los subsidios dañinos a los combustibles fósiles e invertir en tecnologías limpias.

También ha instado a los líderes a tener la responsabilidad colectiva para realizar una transición justa, que asista a las comunidades más vulnerables y los países más sensibles, y a los trabajadores en los sectores tradicionales que se enfrentan a la interrupción de su sector. Para ello, ha pedido hacer un «claro» progreso para movilizar los 100.000 millones de dólares anuales comprometidos y ha urgido a los Estado miembro a implantar «rápidamente» el reaprovisionamiento del Fondo Verde para el Clima.

Por último, ha negado que la acción climática sea un obstáculo y lo considera una oportunidad decisiva para llevar el barco y establecer un rumbo hacia un futuro mejor para todos. «Lo que necesitamos es más una política con mayor voluntad y un liderazgo sagaz. Es el reto por el que los líderes de nuestra generación serán juzgados», ha concluido. Finalmente, Guterres resaltó que el cambio climático es el asunto «más importante» al que se enfrenta el mundo, porque afecta al desarrollo sostenible y a la seguridad de un mundo próspero. Así, ve «difícil» comprender por qué «colectivamente» aún el mundo se mueve lentamente e incluso en la dirección incorrecta.

Fijar precios altos para el carbono dispararía la desinversión en combustibles fósiles y la reducción de emisiones de CO2

Europa Press.- La fijación de precios sustancialmente altos para el carbono impulsaría significativamente la reducción de emisiones de CO2, al disparar así la desinversión en combustibles fósiles, según un equipo de economistas próximos al sector energético. Según expertos, se temía que se produjese una paradoja verde tras los acuerdos de París, pues con la anticipación de fuertes políticas de reducción de CO2, los propietarios de combustibles fósiles podrían acelerar su extracción de recursos para maximizar las ganancias, aumentado así las emisiones de CO2.

Sin embargo, y al mismo tiempo, otro efecto acarrearía que los inversores podrían dejar de invertir su dinero en plantas generadoras de carbono, ya que pueden esperar que sus activos se estanquen. El estudio elaborado por estos economistas, que por primera vez investiga ambos efectos de manera conjunta, revela que esta desinversión sí podría superar esta paradoja verde pero sólo si se anunciaran de manera creíble precios altos del carbono.

«Las fuertes políticas climáticas futuras pueden reducir las emisiones incluso antes de que entren en vigor si se anuncian de manera creíble», afirma el autor principal, Nico Bauer, del Instituto Potsdam de Investigación del Impacto Climático (PIK), en Alemania. Si bien el Acuerdo de París es débil en ambiciones políticas a corto plazo, con cerca de 200 países que se comprometen a limitar el aumento de la temperatura a menos de 2 grados centígrados en comparación con los niveles preindustriales, se requerirán políticas climáticas fuertes en el futuro para reducir las emisiones a largo plazo.

«Encontramos que 10 años antes de que se introduzcan realmente las políticas de fijación de precios del carbono, los inversores comienzan a sacar su dinero del sector energético del carbón. Rehúyen invertir en centrales eléctricas alimentadas con combustibles fósiles ya que se dan cuenta de que la vida útil de estas plantas se verá reducida por la política climática futura. Descubrimos que esta desinversión reduce las emisiones entre un 5% y un 20%, dependiendo de la fortaleza de la política climática, ya en el tiempo anterior a la implementación de la política climática», explica Bauer.

El carbón es particularmente susceptible a los precios del carbono. «Agregar un precio del carbono de 20 dólares estadounidenses por tonelada de CO2 duplica el coste del uso del carbón», destaca Christophe McGlade, del University College London (UCL), en Reino Unido, y la Agencia Internacional de la Energía (IEA). «Los inversores del sector energético ven que las plantas de carbón no serán competitivas con los precios del carbono y, por lo tanto, cambiarán sus carteras hacia fuentes de electricidad con bajas emisiones de carbono«, apunta.

Mejor adoptar medidas cuanto antes

Según indica McGlade, el petróleo es «mucho menos sensible a los precios del carbono». «Aunque descubrimos que el efecto paradoja verde puede surgir en los mercados petroleros, con los principales propietarios de recursos petroleros impulsando la producción por temor a que sus recursos se queden encallados, es probable que sea mucho más pequeño que el efecto de desinversión que reduce el uso de carbón», añade.

Comúnmente, se emplean simulaciones informáticas de la dinámica futura de los mercados de energía para investigar los efectos económicos de las políticas. «Realizamos nuestras simulaciones con una variedad de niveles de precios de CO2, alcanzando constantemente entre 25 y 300 dólares estadounidenses por tonelada de CO2 para 2050, con un escenario medio que alcanza los 100 dólares estadounidenses. Estos impuestos se introdujeron con una serie de demoras diferentes para representar varios grados de rigor y credibilidad de la política climática y ver cómo reaccionan los mercados de combustibles fósiles en anticipación de tales políticas climáticas», relata Jérôme Hilaire de PIK.

Este experto subraya que esto sirve para darse cuenta de las incertidumbres, pero el efecto de desinversión prevalece sobre el efecto paradoja verde en casi todos los casos fiscales investigados, independientemente de la demora en la implementación y, por lo tanto, disminuye las emisiones globales. Sólo si el precio del CO2 comienza muy tarde, por ejemplo, antes de 2050 a un nivel muy bajo, la anticipación de las fuerzas del mercado conduce a un aumento en las emisiones de CO2 en lugar de una disminución».

«Nuestros resultados dependen de algunas suposiciones cruciales: que los responsables políticos pueden comprometerse a introducir políticas climáticas sólidas en varios años en el futuro, que el precio del carbono es uniforme en todas las regiones, que los inversionistas creen que los responsables políticos harán lo que dicen que harán; que los inversores son astutos en la adaptación de sus estrategias de inversión en consecuencia», apunta Paul Ekins, de UCL, también perteneciente al Panel de Alto Nivel de la Comisión de Descarbonización de la Unión Europea.

Si se introdujeran diferentes regulaciones de precios de CO2 a distintos precios en varios países, aunque algunas instalaciones de producción intensivas en emisiones se moverían de lugares de alta regulación a aquellos con estándares bajos, este efecto es limitado. «Los esquemas de fijación de precios de emisiones de CO2 están emergiendo en China, la Unión Europea se encuentra actualmente en el proceso de arreglar su esquema comercial, y los precios del CO2 están vigentes en Reino Unido, Chile, Canadá e, incluso, en California», señala Ekins.

El experto concluye que el Acuerdo de París emitió una fuerte señal de que los responsables políticos toman en serio el cambio climático y están listos y dispuestos a cumplir con las reducciones de emisiones necesarias. «Al anticipar la implementación de políticas para enfrentar el cambio climático, las fuerzas del mercado probablemente reducirán las emisiones, ayudándonos en el primer paso para lograr reducciones de emisiones profundas, siempre y cuando las señales de política sean fuertes, claras y creíbles», indicó Ekins.

La exministra francesa Ségolène Royal apuesta por impulsar en África la energía solar en la lucha contra el cambio climático

Europa Press.- La ministra francesa de Medio Ambiente, Energía y Asuntos Marinos entre 2014 y 2017, Ségolène Royal, apostó por sumar al continente africano y a las mujeres en la lucha contra el cambio climático apelando a una «justicia climática mundial». En este sentido, Royal habló de las reticencias iniciales del continente africano por sumarse a un acuerdo climático por no haber vivido la revolución industrial de países desarrollados, si bien ahora en África son «los más activos», siendo los menos responsables.

Royal ha encomiado el trabajo que se realiza desde el continente africano, donde ya se dan consecuencias de la crisis climática, y ha apostado por alimentar a estos países con tecnología y energía solar: «Así se resolverán problemas de todos y se hará justicia mundial, justicia climática con África también«. Asimismo, Royal ha reivindicado la cuestión de las mujeres como un ámbito «crucial» a la hora de combatir el cambio climático, puesto que sobre éstas pesa el liderazgo del 80% de la agricultura en África, y ha apostado por empoderar al colectivo femenino con microcréditos.

La exministra ha hablado de una nueva humanidad organizada alrededor de la economía verde y ha considerado la necesidad de acoger el reto climático como una «oportunidad extraordinaria», a través de la inversión en finanzas verdes, que también pueden contribuir a conseguir paz en el mundo. Royal ha recordado que el Acuerdo de París supuso una conjura de los principales países para evitar un calentamiento global de más de 2ºC en el Planeta hasta 2100, y Francia aprobó luego una Ley de Transición Energética que prevé una reducción del 30% del consumo de energías fósiles.

Royal ha lamentado que el presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, haya decidido sacar el estado norteamericano del acuerdo de París, firmado en abril de 2016 por parte de unos 150 países del mundo, entre los que figura España. Las Naciones Unidas auguran que con un calentamiento global de más de 3ºC o 4ºC a final de siglo, 200 millones de personas se desplazarán por el cambio climático: «La falta de acceso al agua potable mata a más gente que todas las guerras«, asevera.

«Formamos parte de la cadena de la vida y si pensamos que solo van destruirse animales y plantas estamos muy equivocados», subrayó la exministra y autora del libro Manifest pour une justice climatique. «En la guerra contra la naturaleza, si el hombre gana pierde», resaltó Royal, que recalcó que el cambio climático no es ninguna amenaza, sino que ya es una realidad con episodios de sequía, seguidos de lluvias intensas, destrucciones de viviendas y ganados.

El compromiso mundial en la lucha contra el cambio climático se refuerza en París con la One Planet Summit

Europa Press.- El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, asistió en París a la Cumbre Un Planeta (One Planet Summit), en la que se calcula que hubo 2.000 participantes aproximadamente con el objetivo de reforzar el compromiso mundial con la lucha contra el cambio climático y con el Acuerdo de París. La cumbre fue auspiciada por el presidente francés, Emmanuel Macron, dos años después de la firma del Acuerdo de París sobre cambio climático.

Convocada por el presidente francés en calidad de antigua sede de la COP21, la ONU y el Grupo del Banco Mundial, participaron más de 100 Estados, organizaciones internacionales, instituciones financieras y bancos internacionales y regionales y administraciones locales. El encuentro es también una respuesta al anuncio del presidente Trump de Estados Unidos de que su país saldrá del Acuerdo del Clima de París, a lo que el mandatario francés respondió con el eslogan Make our planet great again. El Acuerdo de París entró en vigor en noviembre de 2016. El asunto principal abordado fue la financiación destinada a la lucha contra el cambio climático, así como a la adaptación a sus efectos, especialmente por parte de los países en desarrollo.

De manera particular, en París se abordaron las iniciativas vinculadas a la financiación climática, es decir, la transferencia de recursos de países desarrollados a países en desarrollo para la financiación de proyectos y actuaciones en los ámbitos de lucha contra el cambio climático y de adaptación al cambio climático. En este marco, España ha incrementado anualmente sus contribuciones a la financiación climática desde 205 millones de euros en 2012 a 595 millones en 2016, en línea con el compromiso adoptado hace dos años en la COP de Paris de alcanzar los 900 millones de euros anuales a partir de 2020.

A otro nivel, España también mantiene su firme compromiso con los esfuerzos internacionales de lucha contra el cambio climático. Así, ha asumido compromisos de reducción de emisiones, uso de energías renovables y aumento de la eficiencia energética, lo que le ha permitido tener una tasa de emisiones per cápita inferior a la media de la Unión Europea y situarse en la senda para cumplir con sus objetivos en 2020. Además, y con vistas a asegurar el cumplimiento de los nuevos objetivos europeos para 2030, el Gobierno está trabajando en la elaboración de una Ley de cambio Climático y Transición Energética, que permita abordar estas cuestiones desde una perspectiva amplia y fomentando la implicación y participación de todos los actores involucrados.

Cumbre de interconexiones en 2018

Por otro lado, el jefe del Ejecutivo español, el presidente de Francia, el primer ministro de Portugal y el vicepresidente de la Comisión para la Unión Energética, Maros Sefcovic, han anunciado además la celebración de una nueva Cumbre de interconexiones en Portugal en el primer semestre de 2018, como continuación de la celebrada en Madrid en marzo de 2015. Estas interconexiones entre los tres países (España, Francia y Portugal) permitirán aumentar su contribución a la seguridad energética y cumplir con los objetivos de la Unión Europea en materia de energías renovables y de reducción de los gases de efecto invernadero.

Mientras, el responsable de la organización WWF en Francia, Pascal Canfin, ha señalado que se podrá considerar que la Cumbre es un éxito si se logra una hoja de ruta para cambiar las reglas no solo del sistema financiero global, sino también de los sectores del transporte y la energía. «En los países ricos y con el acuerdo de París, estamos comprometidos a lograr la neutralidad de carbono para 2050. Esto significa que tenemos 33 años para reducir drásticamente las emisiones de gases de efecto invernadero. Esta es la lucha de toda una generación», subraya.

En este sentido, Margaret Kuhlow, líder del Programa sobre financiación de WWF, pide a las empresas que adopten las recomendaciones del Grupo de Trabajo sobre Divulgaciones Financieras Relacionadas con el Clima (TCFD) que establece la conexión entre los problemas ambientales y la estabilidad financiera. «Hacemos un llamamiento a los miembros del G20 para que apoyen la implementación de TCFD y consideren su integración en las políticas de forma obligatoria», añade. Para la organización, iniciativas como esta Cumbre auspiciada por Macron son importantes para mantener a los líderes comprometidos y para impulsar nuevas acciones climáticas entre todos los actores. «Es vital si queremos mantener el calentamiento por debajo de los 1,5°C y evitar los peores impactos del cambio climático», subraya WWF.

WWF insta al sistema financiero a incorporar «criterios climáticos» en sus inversiones y advierte de los riesgos del cambio climático

Europa Press.- WWF insta a los actores del sistema financiero a incorporar criterios climáticos en sus inversiones y «definir el compromiso con el Acuerdo de París en los mandatos de la política de inversiones y las estrategias». En su informe Cambio Climático. Riesgos y oportunidades en las inversiones financieras, la organización incluye un listado de 9 recomendaciones para incorporar la variable clima al sistema financiero y evitar los riesgos que, según indica, se derivan del calentamiento global.

«La regulación del cambio climático, los riesgos de transición y, en algunos casos, los impactos físicos, afectarán al valor de una porción significativa de estos activos y esto implica un gran riesgo para los propietarios con carteras expuestas a sectores fósiles», señalan los responsables del informe. Además, citan un estudio del Instituto de Liderazgo Ambiental de la Universidad de Cambridge que aconseja tener en cuenta la percepción del cambio climático como «factor de riesgo agregado» en las inversiones y afirma que «los beneficios de una acción temprana conducen a tasas de rendimiento significativamente más altas a largo plazo, especialmente cuando se compara con la inacción».

Alinearse con el acuerdo COP21

Por ello, la organización subraya el papel del sistema financiero como «motor fundamental para acelerar la transición a una economía sostenible y de bajo carbono» y recomienda a los inversores y a las instituciones oficiales que participan en el mercado que realicen un diagnóstico del impacto climático de sus inversiones, para comprobar «si su cartera de inversiones se encuentra alineada con el Acuerdo de París».

Entre las recomendaciones se encuentran también las de definir el compromiso y estrategia de inversiones conforme al acuerdo internacional y comunicarlo a los share-holders (accionistas) y stake-holders (grupos de interés), así como crear una «estructura de gobernanza climática» en las junta de accionistas con responsabilidad para definir objetivos y medidas conforme a criterios climáticos y para involucrar a los inversores.

Asimismo, invita a los actores del sistema financiero a que participen en las coaliciones de inversores por el clima y a que quienes tengan activos en empresas de combustibles fósiles y de altas emisiones «se involucren como accionistas» para incentivar un cambio en el modelo de negocio. Por último, señalan la importancia de colaborar y dialogar con los reguladores y legisladores para impulsar marcos regulatorios adecuados al Acuerdo de París.

Telefónica afianza sus objetivos de reducción de emisiones de CO2 y se compromete a ser energéticamente 100% renovable en 2030

Europa Press.- Telefónica ha conseguido que sus objetivos de reducción de emisiones de CO2 sean certificados por la iniciativa Science Based Targets (SBT), lo que indica que están avalados por criterios científicos y contribuyen al Acuerdo de París, según indicó la compañía, que resaltó que el acuerdo necesita el apoyo de todos los agentes, incluidas las empresas, para lograr que la temperatura de la Tierra no aumente por encima de los 2ºC.

Con su compromiso, Telefónica señala que logrará desligar el crecimiento de su negocio del aumento de las emisiones de gases de efecto invernadero, disminuyéndolas un 30% en términos absolutos para 2020 y un 50% para 2030. En 2016, la compañía redujo sus emisiones un 26%. Con Telefónica, son ya 6 las empresas del sector teleco que están avaladas por SBT y hay un total de 300 firmas que se han comprometido a fijar objetivos de reducción de emisiones, pero solo unas pocas lograron su validación.

Para la directora de Mitigación Climática del Sector Privado del Instituto de Recursos Mundial (WRI), Cynthia Cummis, «es alentador ver a Telefónica establecer un objetivo de reducción de emisiones que alinee sus estrategias comerciales con la tasa de descarbonización necesaria para evitar los peores impactos del cambio climático». «Telefónica asume un papel de liderazgo en la transición hacia el futuro con bajas emisiones de carbono. Su objetivo demuestra a los clientes, inversores y al propio sector que está comprometida con la consecución de los objetivos del Acuerdo de París», destacó.

Para lograrlo, la compañía trabaja en un Plan de Energías Renovables y se ha comprometido a ser 100% renovable en 2030. Hace unos meses también se sumó a la iniciativa RE100, que aglutina a empresas que apuestan por fuentes renovables para su negocio. Asimismo, Telefónica trabaja en un Plan de Eficiencia Energética, para reducir en un 50% el consumo de energía por unidad de tráfico.

«La adhesión a la iniciativa Science Based Targets (SBT) representa el espaldarazo al compromiso de Telefónica por la descarbonización. SBT es una guía muy útil para que todas las empresas comprendan cuál debe ser su contribución a los objetivos de París. Y al mismo tiempo, permite visibilizar el compromiso privado, que debe sumarse al trabajo que hacen los gobiernos y los ciudadanos para combatir el calentamiento global», según la directora de Sostenibilidad y Gestión de Intangibles de Telefónica, Geert Paemen.

Actualmente el 44% de la energía que consume Telefónica a nivel mundial ya es renovable, lo que equivale al consumo medio anual de 203.749 hogares. Su Plan de Energía Renovable le reportará además un ahorro potencial del 6% en la factura de energía y evitará a la atmósfera alrededor de 1,5 millones de toneladas de CO2 para 2030. En 2016, Telefónica consiguió reducir el consumo de energía un 34%, gracias al Plan de Eficiencia Energética que desarrolló 130 proyectos concretos que ahorraron unos 22 millones de euros, según la compañía.

CCOO pide a Podemos, PSOE y Ciudadanos reconsiderar la moción que aprobaron en el Congreso ya que liquida la minería

Europa Press.- Comisiones Obreras (CCOO) de Industria ha instado a Podemos, PSOE y Ciudadanos a reconsiderar la moción aprobada en el Congreso de los Diputados en la que hacen varias peticiones al Gobierno ya que supone, a su juicio, «acabar con la minería del carbón». El sindicato subraya que estos partidos políticos, con la excusa de eliminar los combustibles fósiles, «desindustrializan, aniquilan empleos y desertizan comarcas enteras«.

El sindicato recuerda que en otras ocasiones estas formaciones políticas, en lugar de aniquilar un sector que mantiene «muchísimos puestos de trabajo», han realizado propuestas que iban encaminadas a utilizar «correctamente» los combustibles fósiles con proyectos que consiguen producir electricidad con baja emisión de carbono y que cumplen con todos los acuerdos europeos sobre combustión limpia. Asimismo, subraya que debe ser en el grupo de expertos creado por el Ministerio de Energía para analizar los escenarios de transición energética y cumplir con el Acuerdo de París donde se debe incidir en que los escenarios propuestos tengan en cuenta la sostenibilidad técnica, económica y social. Para CCOO, es «fundamental» una transición energética que contemple estas cuestiones.

El comité ambiental del Parlamento Europeo apoya ampliar el objetivo de eficiencia energética del 27% al 40%, según EBB

Europa Press.- El Comité de Medio Ambiente del Parlamento Europeo ha apoyado, en una votación celebrada este jueves 7 de septiembre, ampliar sus objetivos de eficiencia energética para 2030, de un 27% a un 40%, además de cambiar la meta de «indicativa» a «vinculante» para los Estados, según indicó la organización ambiental European Environmental Bureau (EBB), que ha acogido la noticia con «satisfacción».

Según el marco sobre clima y energía para 2030, el Consejo Europeo había aprobado para 2030 un «objetivo de ahorro energético indicativo del 27%, revisable en 2020, teniendo presente otro del 30%». Para la EBB, este cambio es un «paso positivo» que inicia las negociaciones del paquete de energía limpia en el Parlamento Europeo, al tiempo que lo ha calificado como «clave para cumplir el Acuerdo de París». «Es vital que aceptemos este nivel de compromiso y hagamos que las reglas sobre eficiencia energética sean vinculantes», han añadido. Asimismo, otra de las novedades es que también ha incluido el sector del transporte en el ahorro anual de energía, así como mejorar el monitoreo y la presentación de informes, según EBB.

Energía da más tiempo a las centrales nucleares de Trillo, Cofrentes y Ascó para pedir la renovación de su licencia

Europa Press.- El Ministerio de Energía, Turismo y Agenda Digital publicó en el Boletín Oficial del Estado (BOE) las órdenes ministeriales por las que se concede más tiempo a las centrales nucleares de Trillo I, Cofrentes y Asco I y II para la solicitud de la renovación de su licencia de operación.

Conforme a la orden ministerial, cuyo borrador fue informado favorablemente por el Consejo de Seguridad Nuclear (CSN), las centrales ya no tendrán que solicitar la renovación tres años antes del vencimiento de las mismas, sino un año antes o, previsiblemente, dos meses después de la aprobación del Plan Integral de Energía y Clima que prepara el Gobierno. Es decir, la nueva norma establece que la solicitud de renovación podrá presentarse cuando el Gobierno haya aprobado su planificación energética, contemplada en el Plan Integral de Energía y Clima, en el que establecerá los objetivos de cara a cumplir los compromisos del Acuerdo del Clima de París.

El Gobierno justifica la modificación en la conveniencia de que las decisiones relativas a la continuidad de las plantas nucleares puedan plantearse «teniendo en cuenta el contenido de dicha planificación», una vez ponderado el papel que deberá jugar la energía nuclear en el mix. Para el Gobierno, esto «favorecerá su coherencia con la política energética”, señala la orden. Sin embargo, en el caso de que esta planificación no estuviera aprobada, dos meses antes de la fecha en que el titular tiene que presentar la Revisión Periódica de Seguridad (RPS) de la central, se podrá presentar la solicitud de la renovación «con ocasión de tal presentación».

En el caso de Cofrentes (Valencia), propiedad 100% de Iberdrola, la autorización de 10 años expira el 20 de marzo de 2021, mientras que para Ascó I (Endesa 100%) y II (Endesa 85% e Iberdrola (15%), finaliza el 2 de octubre de 2021. Para Trillo I (Guadalajara), participada por Iberdrola (48%), Gas Natural Fenosa (34,5%), EDP (15,5%) y Nuclenor (2%), concluye el 17 de noviembre de 2024. Con esta modificación, las centrales nucleares contarán con más plazo para conocer la planificación energética y optar así o no a pedir una nueva renovación de su licencia.

La propuesta del Gobierno sí que mantiene el plazo de 3 años para que los titulares de las centrales nucleares presenten un conjunto de documentación asociada a la eventual operación a largo plazo. Se trata del Plan Integrado de Evaluación y Gestión del Envejecimiento (PIEGE); el Suplemento del Estudio de Seguridad (ES); la Revisión de las Especificaciones Técnicas de Funcionamiento (ETF); el estudio del impacto radiológico; las revisión del plan de gestión de residuos radiactivos y combustible gastado y la Revisión de la Guía de Seguridad GS-1.10., que incorpora la experiencia internacional en materia de RPS en los países de nuestro entorno así como los documentos generados en el Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA).

El pasado junio, el Ministerio de Energía, Turismo y Agenda Digital ya concedió más tiempo para la solicitud de la renovación de su licencia de operación a las centrales nucleares de Almaraz (Cáceres) y de Vandellós II (Tarragona), que eran las que antes expiraban. En el caso de Almaraz, participada en un 53% por Iberdrola, en un 36% por Endesa y en un 11% por Gas Natural Fenosa, tiene permiso de operación hasta el 8 de junio de 2020, mientras que en la de Vandellós II, en la que Endesa tiene un 72% e Iberdrola un 28% del capital, la caducidad está fijada para el 26 de julio de 2020.