Sánchez Galán dice que quien quiera controlar Iberdrola que lance una opa en metálico
Ignacio Sánchez Galán hizo estas afirmaciones en una rueda de prensa celebrada dos días antes de la Junta de Accionistas de Iberdrola, y en la que ACS (su máximo accionista con el 12,6% del capital) reclamará un puesto del consejo de la eléctrica y mientras en el Congreso se disponían a debatir la enmienda «antiblindajes» que, finalmente, ha sido retrasada hasta después de Semana Santa.
Actualmente, las compañías españolas pueden limitar en sus estatutos el derecho de voto de sus accionistas -en Iberdrola se limita al 10%) y la enmienda, presentada por el PSOE, pretende prohibir estas prácticas para que cada accionista vote en proporción al capital que posee.
«Iberdrola defiende un proyecto industrial independiente a largo plazo y en beneficio de todos los accionistas», afirmó Sánchez Galán, que subrayó que el Consejo de la compañía siempre dispensará el mismo trato a todos sus accionistas.
«Queremos defender a grandes, medianos y pequeños para que unos no se beneficien de los otros», apuntó el presidente de Iberdrola, que rehusó contestar si prevé entrar en batalla judicial con ACS.
Respecto a la enmienda, Sánchez Galán consideró que influye en muchas empresas de muchos sectores y que, por tanto, «necesita de un debate sosegado y no estresante» para que los políticos puedan analizar sus pros y sus contras y añadió que en la Unión Europea se han descartado este tipo de medidas, que sólo se aplican en Alemania e Italia.
Respecto a la repercusión que tendría su aprobación en Iberdrola, recordó que los estatutos de la eléctrica y sus reglas de gobierno corporativo ya prevén que desaparezcan las limitaciones estatuarias en caso de que prosperen opas por el cien por cien del capital.
En su opinión, si alguien hace una buena oferta por la compañía «luego vendrán más» y los accionistas podrán elegir en función de lo que les convenga, a lo que añadió que Iberdrola «vale mucho».
Preguntado por si algún accionista le ha manifestado su intención de salir de la compañía -en concreto BBK o Bancaja-, afirmó que Iberdrola cuenta con un «accionariado absolutamente estable y de vocación a largo plazo».
En este sentido, dijo que, además de en las cajas, esta fidelidad se da también en el caso de los pequeños accionistas de Iberdrola, que representa al 27% del total de su accionariado.
Está previsto que ACS reclame en la Junta un puesto en el Consejo de Administración de Iberdrola, en el que pretende entrar desde que el año pasado saliera del Consejo de su competidora Unión Fenosa.
La compañía hará esta petición después de que el Consejo de la eléctrica haya decidido cubrir dos vacantes sin dar entrada al grupo presidido por Florentino Pérez, al que Iberdrola insiste ahora en cerrar el paso con el argumento de que compiten en diversos mercados (ingeniería, inmobiliario o renovables).
Preguntado por el hecho de que otros miembros del Consejo de Iberdrola están presentes en compañías competidoras, Sánchez Galán se limitó a señalar que el Consejo de Administración de la eléctrica siempre ha mostrado un «respeto exquisito» por las normas de gobierno corporativo, por lo que si el «sistema» detecta alguna anomalía la resolverá.
Según consta en la CNMV, ACS está presente en Iberdrola a través de su sociedad Residencial Montecarmelo, cuya participación asciende al 7,774 por ciento. Además, mantiene un contrato de «equity swap» -derivados- con Nexgen Capital, filial de la entidad francesa Natixis, por el que suma un 4,881 por ciento adicional.
Por su parte, las cajas BBK y Bancaja mantienen en la eléctrica el 7,184 y el 5,736 por ciento del capital, respectivamente.
De acuerdo con la Ley de Sociedades Anónimas, todo accionista tiene derecho a contar con un representante en el consejo de administración de una empresa en igual proporción de la que resulte de dividir cien entre el número máximo de consejeros fijado por los estatutos.
En el caso de Iberdrola, cuyo Consejo cuenta con 15 asientos (el máximo previsto en sus estatutos), una participación del 6,6 da derecho a un representante.
Contento con los resultados de la eléctrica en 2009
Por otra parte, el presidente de la eléctrica hizo gala de los resultados alcanzados por el grupo en 2009, año en que ganó más de 2.800 millones de euros (-1,3%), a pesar del difícil contexto internacional. Iberdrola aspira además a incrementar anualmente sus resultados operativos entre un 5% y un 9%.
Además, resaltó la importancia de que la compañía tenga su sede «aquí, en España» y de que más de la mitad de sus compras se concentraran en el mercado español en el pasado ejercicio.
Igualmente destacó el crecimiento del negocio internacional y de las renovables (que calcula que concentrarán un 70% de su Ebitda en 2012) y la mejora de la calidad de servicio a lo largo de la última década.
La compañía prevé invertir 18.000 millones de euros entre 2010 y 2012 para materializar su proyecto de crecimiento orgánico y consolidar su expansión internacional.
El 85% de esta inversión irá destinado al negocio regulado y a las energías renovables. Sobre todo, se centrará en la eólica terrestre (en Estados Unidos, Reino Unido y el resto de la Unión Europea); eólica marina; hidroeléctrica (con 1.050 megavatios nuevos en España en la próxima década, y 3.000 MW en total, entra España, Portugal y Brasil), carbón limpio y nuclear.


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