Los diputados velan por su derecho a acudir al Congreso sin corbata

Sus señorías opinaron sobre este asunto después de que el presidente de la Cámara Baja, José Bono, y el ministro de Industria, Comercio y Turismo, Miguel Sebastián, protagonizaran su segundo enfrentamiento de esta legislatura a cuenta del uso de esta prenda masculina.

El secretario general del Grupo Socialista, Eduardo Madina, tras dejar claro que le parece «banal» debatir sobre este asunto «con la que está cayendo», aseguró que no conoce ningún «diputado ni diputada» que no respete los usos y costumbres en la Cámara. «Y eso –agregó– no empieza y termina sólo en una corbata, sino en venir adecuadamente a trabajar de forma libre, en un país del siglo XXI y en un Congreso de una zona que se llama Europa».

El veterano diputado del PSOE José María Benegas rechazó que se imponga un «protocolo» sobre vestimenta en la Cámara que obligue a utilizar corbaba, porque considera que «basta» con que uno vaya «bien y decentemente vestido», sobre todo en los meses de verano con «el calor que hace en Madrid». «Me alegro de que toda la preocupación de ustedes en este momento sea la corbata, eso quiere decir que el país está relajado», ironizó ante los periodistas.

Otro «clásico» parlamentario, el socialista extremeño Francisco Fernández Marugán, confesó que no suele utilizar corbata porque está «cómodo» sin ella. «Ya tengo 65 años como para someterme a estos mecanismos de adhesión. El señor Bono dijo lo que pensaba y yo hago lo que pienso y no pasa nada, nos respetamos mutuamente», zanjó.

Desde la filas del Partido Popular, Rafael Hernando, que según el mismo recalcó «muchas veces» no porta corbata, subrayó que sus señorías «no tienen uniforme», aunque haya «alguno» que parece que les «quiere uniformar», un asunto que consideró «intrascendente» porque «lo importante es lo que dicen, votan y hacen los diputados».

También el portavoz del BNG en el Congreso, Francisco Jorquera, reivindicó el derecho de cada uno a vestir como considere oportuno siempre que se mantenga el decoro. El, que unos días lleva corbata y otros no, cree que los diputados deben acercarse también en estos uso a lo que hacen los ciudadanos.

Por contra, el expresidente de Nuevas Generaciones del PP, Ignacio Uriarte, quiso dejar claro que él lleva corbata a los plenos porque lo considera una «muestra de respeto a los ciudadanos y a la historia de la institución».

Pero no sólo los diputados opinaron sobre el uso de la corbata y la temperatura del hemiciclo, también lo hicieron una ministra y una exmiembro del Gobierno, que ahora forma parte de la Mesa del Congreso que preside José Bono.

Así, Carme Chacón, titular de Defensa, que fue vicepresidenta del Congreso en la anterior legislatura, confesó que acude al Pleno «como si fuera a Siberia» y abogó por mantener los edificios parlamentarios a una «temperatura adecuada para ahorrar energía y para que sus señorías puedan también estar a gusto».

Por su parte, la actual secretaria cuarta de la Mesa del Congreso, la «popular» Celia Villalobos arremetó a partes iguales contra Bono y contra Sebastián. Así, tachó de «chorrada» la iniciativa del ministro de quitarse la corbata y «regalar termómetros», porque, desde su punto de vista, eso no sirve para «acabar con el excesivo uso de la energía en España».

Villalobos también apuntó que si fuera mujer, Sebastián estaría «todos los días en los informativos» recibiendo críticas por este tipo de cosas. «Si fuera mujer estaría crucificada, pero como es un hombre puede equivocarse y decir chorradas», denunció.

Al preguntársele si, por tanto, apoya la postura del presidente del Congreso en este tema, Villalobos contestó: «Yo con Bono jamás, a mí lo que me parece increíble es que el señor Bono aproveche cualquier momento para tener un protagonismo, como si no tuviera protagonismo siendo presidente del Congreso«. «El señor Bono no es buen compañero de viaje para mí», concluyó.