Las ‘presiones de las empresas’

Que hay presiones y presiones eso está claro. Al hilo de la aprobación del mecanismo para la detracción de derechos de emisión por parte del Ministerio de Industria, y su crónica oficial del pasado viernes, pudimos conocer el lamento de la Secretaría General de Energía por las presiones que han realizado las empresas para eludir una normativa que se las prometía peligrosa para ellas, además de ser de dudosa legalidad.

Lo que parece que no se cuenta de esta historia de ‘presiones’ de las empresas, son las que ejerce el propio operador de red, sistema y transporte para conseguir más retribución por su actividad, algo que está muy cuestionado por parte de gran número de expertos, que la consideran suficiente, dados sus ‘pingües’ beneficios. Recordemos que las actividades que desarrolla Red Eléctrica tienen naturaleza de actividades reguladas, y que la fijación de su retribución se realiza mediante la determinación de costes estándares por parte del Ministerio de Industria. Para ello, la Secretaría General de Energía recibe la información de Red Eléctrica y el dictamen de la Comisión Nacional de Energía.

Según ha podido conocer Energía Diario de fuentes cercanas a la propia Red Eléctrica, Nieto podría haber ‘cerrado’ una subida en la retribución del operador del sistema eléctrico y de transporte, tanto en lo que se denomina por costes por operación como por costes de capital. De esta forma, Red Eléctrica evita las consecuencias de una actuación reguladora contra las empresas de redes -como ocurrió el año pasado- y se aprovecharía de su buena relación con la actual administración energética. Como pueden recordar, el año pasado el cambio en la retribución en determinados activos de transporte acabó con un fuerte descalabro de Enagás y Red Eléctrica en la bolsa.

Algunas de estas subidas, cuyo calendario en este caso es plurianual y la revisión se debía producir en estos momentos, según la información a la que ha tenido acceso Energía Diario, se elevan por encima del 50 %. Fuentes del Ministerio de Industria han confirmado que la última reunión entre Nieto y Luis Atienza tuvo lugar a principios de la semana pasada en el propio Ministerio de Industria. Nieto podría haber asumido entonces una actuación parecida a los cambios retributivos de principios del ejercicio pasado o las actuaciones que ya ha protagonizado desde su nombramiento, de forma que rsistiría cualquiera que fuera la posición de la CNE o de las empresas y establecería finalmente las modificaciones retributivas a aplicar a estos activos.

Recordemos que hasta el momento, de cara a la tarifa eléctrica 2008, hay una doble pinza. Por un lado, el límite superior de la inflación que ha situado el gobierno para las tarifas eléctricas. Por otro, la previsible evolución del precio de la energía el próximo año, que todos los expertos consultados consideran que se elevará abultadamente. En ese marco, la suma de costes llevaría a una elevación teórica de la tarifa de más del 30% según prevén los servicios de la propia Comisión Nacional de Energía (un resultado que, como es muy desagradable, hay que cambiarlo). En consecuencia, si se fija el techo políticamente y se eleva la retribución del transportista omnipresente vía actividades reguladas, tienen que disminuir la retribución de otras actividades o de otros conceptos de la tarifa. Es decir se podría decidir la tarifa no por el principio de la adición, sino por el de la sustracción.

Lo que está claro, volviendo al principio del artículo, es que no es lo mismo que presionen las empresas, a pesar de la amargura y melancolía de Nieto, a que presione Luis Atienza. A estas no les vale de nada. Por eso, progresivamente se erosiona su retribución, se elimina la garantía de potencia, se disminuyen las primas para las energías renovables, se detraen los derechos de emisión con criterios ‘amplios’ y de control de renta y se continúa con un modelo de retribución para la distribución que resulta kafkiano. En cambio, que presione un ex Ministro que habla en los medios ejerciendo de Ministro de Energía, con la cada vez menos secreta aspiración de integrar los operadores de sistema y de transporte, de electricidad y de gas, puede ser mucho más efectivo en su relación con la Secretaría General de Energía que todo un sector energético. Consecuencia: se le hace transportista único y se le sube la retribución. Ya pueda tener un apagón como el que tuvo en Barcelona, que mantenga un enfrentamiento abierto con todas las empresas y también uno sordo con muchas instituciones y administraciones locales.

0 comentarios

Dejar un comentario

¿Quieres unirte a la conversación?
Siéntete libre de contribuir

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *