La posibilidad de que Goldman Sachs entre en DONG Energy genera una gran oposición en Dinamarca
Tras recibir el apoyo de la mayoría de la oposición a una ampliación de capital de la principal energética danesa, el Gobierno presentó en noviembre un acuerdo inicial por el que Goldman Sachs y dos fondos de pensiones daneses comprarían el 26% por 1.478 millones de euros.
Las voces discordantes aumentaron a la vez que se conocieron detalles de la negociación y del acuerdo, lo que retrasó la votación parlamentaria, último paso para cerrar la venta que dejaría al banco con el 19% de DONG Energy y al Estado, con el 61%.
Los críticos advirtieron del bajo precio pagado, del descarte de otra oferta mejor y del veto otorgado en varias áreas a Goldman Sachs, que realizaría la compra a través de un entramado de empresas tapadera mediante su filial en Luxemburgo, según la televisión pública DR.
Expertos y políticos señalaron que Goldman Sachs, una de las instituciones más atacadas por su papel en la crisis financiera, obtendrá pingües beneficios cuando DONG Energy sea privatizada en 2018 y una jugosa indemnización en caso de que fracase el proceso.
Los reproches partieron también del seno de la coalición de centroizquierda que gobierna desde 2011, encabezados por el ex primer ministro socialdemócrata Poul Nyrup Rasmussen, que calificó la venta de «catástrofe» y pidió que se renegocie.
«Hemos pasado un largo proceso hasta la mejor oferta global. Hemos elegido a Goldman Sachs en nombre de los contribuyentes. Es lo que hace un Gobierno responsable», dijo la primera ministra, la también socialdemócrata Helle Thorning-Schmidt.
Pese a las críticas y la amenaza del ultraconservador Partido Popular de salirse del acuerdo, al que sólo se oponía de inicio la «rojiverde» Lista Única, la operación cuenta con el apoyo de una mayoría suficiente y podría ser aprobada la próxima semana.
DONG Energy, que cuenta con 7.000 empleados e inversiones en Dinamarca y otra media docena de países, facturó por valor de 9.028 millones de euros el año pasado, aunque registró pérdidas importantes por la situación del mercado gasístico.
Una mayoría parlamentaría aprobó en 2004 la privatización de DONG Energy, reservando para el Estado el control del gas y las infraestructuras, pero ese proceso fue aplazado varias veces, la última tras el estallido de la crisis financiera en 2008.


Dejar un comentario
¿Quieres unirte a la conversación?Siéntete libre de contribuir