La nuclear produjo el 19,64% de la energía en España en 2011, siendo su principal contribuyente, según un informe de Foro Nuclear
Así, el informe destacó que la operación de las centrales nucleares españolas fue «excelente» a lo largo del año y los resultados de las pruebas de estrés confirmaron que operan con seguridad. Por ello, destacó que Europa «apoya esta tecnología con la construcción de 16 reactores» y con la planificación de nuevas centrales.
Concretamente, el informe señaló que la producción eléctrica de origen nuclear en España supuso 293.737 giwatios hora, el 19,64% del total.
En este sentido, añadió que, con un 7,32% del total de la capacidad instalada en el país, la nuclear fue «la fuente que más electricidad» generó en 2011 y la que mayor número de horas ha funcionado, a pesar de que la producción de energía de origen atómico descendió en este ejercicio respecto a 2010 debido a las paradas por recarga realizadas en «todos» los reactores a lo largo del año.
Además, la nuclear representa el 40% de la electricidad libre de emisiones generada en el sistema eléctrico español. En total, los reactores suministraron a la red 57.687 gigawatios.
De este modo, el Foro Nuclear destacó estos resultados como «positivos» y los achaca al «apoyo continuado de la industria nuclear al funcionamiento de las instalaciones, que hacen que su operación sea fiable y segura», tal y como reflejaron las pruebas de resistencia que se practicaron al parque atómico español a raíz del accidente nuclear que se produjo en la central Fukushima (Japón) a causa de un tsunami que siguió al terremoto de 9 grados de magnitud en la escala Richter el 11 de marzo de ese ejercicio.
De acuerdo a estas pruebas, las centrales nucleares españolas «tienen sólidos diseños y altos márgenes de seguridad» y añadió que el sector seguirá trabajando en los programas de mejora continua de estos márgenes.
«Nuestro país necesita contar con la energía nuclear a largo plazo. Entre 2010 y 2011 recibieron el permiso de renovación por diez años más Almaraz I y II, Vandellós II, Cofrentes y Ascó I y II. Es necesario continuar con la renovación de las licencias para que la energía nuclear contribuya dando estabilidad al sistema eléctrico español y proporcionando independencia energética a España«, manifestó la presidenta del Foro Nuclear, María Teresa Domínguez.
Concretamente, a nivel mundial operan 436 reactores, que producen alrededor del 17% de la electricidad y 62 unidades más se encuentran en construcción. En cuanto a Europa, el Foro subrayó que se están construyendo un total de 16 reactores nucleares en Finlandia, Francia, Eslovaquia, Rusia y Bulgaria y que hay otras unidades planificadas en República Checa, Hungría, Rumania, y Finlandia y una más en Francia, Lituania, Eslovaquia, Eslovenia y Polonia. Asimismo, Reino Unido tiene preseleccionados ocho emplazamientos nuevos y confía en que el primer reactor de nueva generación esté operativo en 2018.
El Foro de la Industria Nuclear Española recordó que este año se celebra el 50 aniversario de su fundación y que de este periodo, destaca el «gran desarrollo» de la industria nuclear española, porque logró la consolidación de su aportación al sistema eléctrico español y una presencia competitiva y destacada en el mercado internacional.
Fukushima, Garoña y el ATC
En este contexto, Domínguez recordó que 2011 estuvo marcado por el accidente en Fukushima y por la designación, a finales de año, de un emplazamiento para instalar el almacén temporal centralizado (ATC) de residuos nucleares de alta actividad y combustible gastado.
Así, consideró que pese a Fukushima, los programas nucleares en el mundo «no se vieron prácticamente alterados» y que, de hecho, Estados Unidos autorizó la construcción de otras dos nuevas unidades, después de 30 años sin nuevas construcciones.
Igualmente, además de los proyectos en Europa, se refirió a los programas de China e India y reconoció que «únicamente y de forma puntual», algunos países tomaron decisiones como retrasar o cerrar las instalaciones nucleares, como en Alemania, que adoptaron cerrar en 2022 sus centrales, o Italia, que votó no seguir adelante con el programa nuclear que anunció previamente.
La presidenta del Foro Nuclear destacó también que los sucesos de Japón suscitó el análisis de todos los organismos internacionales, supranacionales y de todos los órganos reguladores de los países con centrales nucleares en operación, con el objetivo de obtener «lecciones aprendidas» del accidente. Así, en España, a pesar de que las pruebas de resistencia dieron fe del buen estado del parque nuclear y de los márgenes suficientes de seguridad, se acordó la implantación de las modificaciones de diseño que se estimen oportunas.
Por otro lado, el sector valoró como un «paso importante» el anuncio del Gobierno elegido en noviembre de apostar por mantener todas las fuentes energéticas en el mix y de apoyar el mantenimiento de la energía nuclear.
En este contexto, el Ejecutivo anunció, nada más tomar posesión, su intención de facilitar la continuidad de la central nuclear de Santa María de Garoña (Burgos) –sobre la que pesa una orden de cierre para julio de 2013– hasta 2019. Al mismo tiempo, anunció el 30 de diciembre la designación de Villar de Cañas (Cuenca) como municipio elegido para albergar el almacén temporal centralizado de residuos nucleares de alta actividad y combustible gastado.
Para la presidenta del Foro Nuclear este es un «hito relevante» para la energía nuclear en España y añadió que la instalación tendrá un «alto valor tecnológico» y supondrá un «importante motor económico y de empleo en la zona». «Este almacén supone un impulso y proyección importante para el futuro nuclear de España», apostilló.
La opinión pública sobre la nuclear empeora tras Fukushima
La opinión pública sobre la energía nuclear empeoró tanto en España como en el resto de Europa después de que el marzo de 2011 se produjera el accidente en la central nuclear japonesa de Fukushima , según reconoció el informe «Resultados y Perspectivas Nucleares, 2011 un año de energía nuclear» publicado por el Foro de la Industria Nuclear española.
El documento reconoció que la opinión pública sobre este tipo de energía empeoró en la Unión Europea tras el accidente en Fukushima, aunque con «distintos resultados». Concretamente, apuntó que en Alemania y Suiza, la oposición creció de manera significativa mientras que en otros, donde existen planes para construir nuevos reactores, como Reino Unido, Finlandia o Francia, la mayor parte de la población «sigue apostando por el uso de la energía nuclear».
Según un estudio de opinión pública, realizado por Ipsos Mori en mayo de 2011, en nueve países (Bélgica, Francia, Alemania, Reino Unido, Hungría, Italia, Polonia, España y Suecia) de los 27 Estados Miembros menos de una quinta parte de quienes se oponen a la energía nuclear fue por influencia de Fukushima. De este estudio se dedujo que la opinión pública se sitúa de nuevo en niveles del año 2007, cuando uno de cada cuatro encuestados está a favor y tres de cada cinco en contra de usar la energía nuclear para producir electricidad. «Es un resultado coherente con lo ocurrido en la central nuclear japonesa», admitió el sector.
Además, recordó que, de acuerdo a los últimos años, «a mayor información, existe más aceptación» y que en 2011, antes del accidente nipón, el 74% de los encuestados consideraban que las centrales nucleares funcionaban con seguridad.
No obstante, el Foro estimó que habrá que esperar al próximo Eurobarómetro sobre Seguridad y Residuos Radiactivos que se realizará en 2012 para actualizar la opinión de los europeos tras Fukushima, ya que en 2008 había un 44% de ciudadanos a favor de la energía nuclear frente al 45% en contra, frente a los 55% en contra y 37% a favor de 2005. Mientras, los datos de 2010 reflejaban que el 56% de los ciudadanos de la Unión Europea querían que la atómica se mantuviera o incrementara, un 8% más que en 2007.
El documento desgranó la evolución antes y después del accidente de Fukushima en los distintos países de Europa con centrales nucleares en funcionamiento. Los datos del Eurobarómetro destacaron que, tras el accidente, el 58% de los franceses está a favor de la energía nuclear frente al 66% anterior; mientras que Alemania optó por prescindir de la nuclear a partir de 2022 debido a que el 57% por ciento de la población estaba a favor de cerrar las centrales, según una encuesta realizada por el Instituto Emnid.
La empresa de combustible nuclear ENUSA alcanza un récord de fabricación y de exportaciones en 2011, según el sector
Así, según el informe presentado por Foro Nuclear, Enusa suministró en 2011 a las centrales nucleares de Almaraz II, Ascó II, Trillo, Vandellós II y Cofrentes, un total de 151 toneladas de uranio de distintos grados de enriquecimiento, lo que equivale a 1.268 toneladas de uranio natural en forma UF6 y 1.026 miles de UTS (unidades técnicas de separación), y 1.503 toneladas de concentrados de uranio.
Además, en la fábrica de elementos combustibles de Juzbado (Salamanca), Enusa fabricó 341,4 toneladas de uranio, de las que 234,3 toneladas se destinaron a la exportación.
En total, a lo largo del año se fabricaron 1.029 elementos combustibles, de los que 532 eran para reactores de agua a presión (PWR) y 497 elementos para reactores de agua en ebullición. El informe del sector destaca que estos datos «constituyen un récord tanto en la cantidad fabricada como en el de toneladas destinadas a la exportación».



Dejar un comentario
¿Quieres unirte a la conversación?Siéntete libre de contribuir