Iberdrola gana la batalla a ACS y ésta interpondrá un recurso de apelación por la sentencia

La compañía que preside Florentino Pérez no está «conforme con el contenido de dicha sentencia»; de ahí su decisión de interponer «el oportuno recurso de apelación que deberá resolverse por la Audiencia Provincial de Vizcaya», informó. Para ello, la constructora tiene un plazo de cinco días para presentar su recurso.

La sentencia del juez Marcos Bermúdez, celebró la semana pasada las vistas por la impugnación por parte de ACS del acuerdo de la última Junta General de Accionistas de Iberdrola , desestima íntegramente la demanda interpuesta por Residencial Monte Carmelo (es decir, por el grupo ACS) contra Iberdrola. ACS impugnó dos acuerdos de la última Junta de Accionistas de la eléctrica (celebrada el 26 de marzo de 2010): los que le impidieron hacerse con un consejero en el órgano de gestión de Iberdrola.

Se trata, por un lado, del acuerdo por el que se destituyó al consejero de ACS que acababa de ser designado (José María Loizaga) ese mismo día en la Junta, y del acuerdo por el que se establecía la reducción del número de miembros del Consejo de Administración.

Iberdrola alegó, para impedir la entrada de ACS en su Consejo, que ACS es una empresa competidora y que entre ambos grupos se da un conflicto de competencia «estructural, directo y permanente»; una tesis que negó el grupo constructor, según el cual sólo se producen algunas coincidencias puntuales en algunos negocios.

Cuando se celebró aquella Junta de Accionistas de Iberdrola, ACS ostentaba una participación del 12,6% en la compañía que preside Ignacio Sánchez Galán, porcentaje que, a fecha de hoy, la constructora ha elevado hasta el 20,2%.

En la sentencia, el juez incide en que «ninguno de los motivos de impugnación alegados por la demandante justifica la pretendida nulidad de los acuerdos» adoptados en la Junta de Accionistas de la eléctrica. También apunta que «no ha sido vulnerado el derecho de representación proporcional del principal accionista de Iberdrola, el grupo ACS».

«Los grupos Iberdrola y ACS son competidores en los sectores de energías renovables e ingeniería industrial, estratégicos para Iberdrola. Y mantienen intereses económicos contrapuestos en otras áreas de negocio, concretamente en el desarrollo del coche eléctrico, en los servicios de ahorro energético y en sus relaciones comerciales como cliente/proveedor», añade el juez Marcos Bermúdez.

La constructora puso en venta el pasado noviembre todos sus activos nacionales e internacionales de energías renovables, que suman un total de 1.757 megavatios (MW) y que están valorados en cerca de 5.000 millones de euros.

Las dos compañías mantienen abierto otro frente judicial, éste en Madrid, donde el próximo 5 de abril tienen previsto verse las caras ante el Juzgado de lo Mercantil número 1 de la capital. Iberdrola ha impugnado ante este tribunal las cuentas de ACS correspondientes al ejercicio 2009, ya que cree que han sido alteradas para ocultar pérdidas brutas por valor de 4,5 millones de euros.