Endesa mantiene la inversión en España «al mínimo» y cuestiona los nuevos plazos para la tarifa eléctrica

El consejero delegado de Endesa, Andrea Brentan, señaló durante la presentación del plan estratégico de la compañía en Roma que el grupo necesita «un poco más» de tiempo para implantar el nuevo sistema de tarifas, así como una simplificación de «las maneras de calcular este precio», una opción que el Gobierno «se está pensando».

El Gobierno anunció que a partir de abril la tarifa eléctrica regulada estará vinculada directamente al mercado mayorista y dio dos meses a las eléctricas para adaptarse al cambio, un mes más de lo planteado inicialmente, un plazo que estas consideraron insuficiente.

Las eléctricas cargaron reiteradamente tanto contra el plazo como contra la dificultad del modelo, una cuestión que según Brentan se aproxima a «una solución» después de que el Gobierno se haya mostrado dispuesto a mejorarlo tras los últimos encuentros técnicos entre empresas y Ejecutivo.

Esta ampliación supone «una mejora, pero todavía no es suficiente», según Brentan, sobre todo, porque son necesarias simplificaciones en el mecanismo que podría llevarse a cabo tras los encuentros celebrados entre el sector y las eléctricas.

«Estamos encarrilados hacia una solución», aseguró, dado que «en los últimos tiempos se han intensificado las reuniones técnicas» de trabajo entre empresas y Ejecutivo, en las que el Gobierno también les consultó sobre posibles ajustes del mercado mayorista.

El presidente de Endesa, Borja Prado, también celebró este acercamiento, ya que en su opinión faltaba un diálogo «de trabajo» con el Gobierno para colaborar en el actual marco de «buena relación» institucional, una vía en la que se han registrado mejorías en las últimas semanas.

Por su parte, el consejero delegado de Enel, matriz de Endesa, Fulvio Conti, subrayó que «lo más importante en nuestro negocio siempre ha sido y siempre seguirá siendo la estabilidad regulatoria», una cuestión que está «dispuesto a discutir con todos los Gobiernos, incluido el de España».

La inversión en España para 2014 será de 600 millones de euros

Según el plan estratégico 2014-2018, cuyo objetivo global de inversión para este año es de 2.000 millones de euros, Endesa prevé mantener este año las inversiones en España y Portugal en alrededor de 600 millones de euros. No obstante, la energética elevó hasta los 800 millones de euros este objetivo de cara al año 2016.

Estas inversiones constituyen el mínimo «obligatorio» para mantener el funcionamiento de las instalaciones y la calidad del servicio, según la compañía.

En cambio, las inversiones en Latinoamérica ascenderán a 1.400 millones de euros, un 15,13% más, con lo que las inversiones totales de la compañía ascenderán a 2.000 millones de euros en 2014.

En 2013, las inversiones de Endesa en el negocio de España y Portugal fueron de 604 millones de euros, un 33% menos que en 2012, mientras que las inversiones en Latinoamérica ascendieron a 1.216 millones de euros, un 5% más.

En el periodo 2014-2018, Endesa planea 5.200 millones brutos de inversión, 4.000 millones en términos netos, en España y Portugal, un quinquenio que estará marcado por un «mayor recorte» de inversiones, así como en una apuesta por el mercado libre.

En este sentido, Endesa señaló entre sus líneas estratégicas del periodo un «estricto control» y un «mayor recorte» en las inversiones destinadas a mantenimiento, así como la necesidad de avanzar hacía la liberalización del mercado con el fin de las tarifas reguladas en España y Portugal.

El Consejero delegado del grupo, señaló que el objetivo del grupo en España y Portugal es «limitar las inversiones a las obligatorias», de manera que «plantas de ciclos combinados más ineficientes serán congeladas -la empresa cerrará su última planta de fuel este año- mientras que las de carbón importado se van a mejorar», aunque «va a depender de cómo el Gobierno plantee el acuerdo» alcanzado con las empresas mineras para que esta fuente mantenga una cuota del 7% de la demanda nacional hasta 2018.

Conti descartó sacar a Endesa de la bolsa, donde actualmente sólo cotiza un 8% de la compañía, así como vender activos en España, al mismo tiempo que defendió que la central nuclear de Garoña «sigue siendo importante» para el grupo, pero que «necesita una decisión final por parte de los reguladores».

Por otro lado, Endesa apuntó a Latinoamérica por su potencial de crecimiento y se marcó como objetivos aumentar la capacidad instalada, lanzar nuevos negocios y lograr nuevos clientes por encima de los 400.000 nuevos al año, mejorar la calidad de servicio o poner el «foco» en Brasil.

«Latinoamérica es la sólida plataforma de crecimiento del grupo», destacaron.

En cuanto al resultado bruto de explotación (ebitda), Endesa puso como meta 6.400 millones de euros para 2014 (3.600 millones aportados por Latinoamérica y 2.800 millones por España y Portugal), un 4,7% menos frente los 6.720 millones de euros de 2013, debido al lastre regulatorio.

Del ebitda de 2013, 3.277 millones de euros correspondían al negocio de España y Portugal por lo que el descenso para este año en la región ronda el 14,5%. Para 2016, la eléctrica fijó un objetivo de ebitda de 7.500 millones de euros: 4.200 millones de euros del negocio en Latinoamérica y 3.300 millones de euros de España y Portugal.

Endesa apuntó también sus previsiones de evolución de la demanda eléctrica que espera crezca en España un 1,8% en tasa anual en el periodo 2014-2018, partiendo de un 0,1% en 2014 para llegar al 2,8% en 2016 y terminar 2018 con un 2,3%. Para Latinoamérica, las previsiones de crecimiento del consumo eléctrico son de un 4,2% anual.

Respecto a las actividades de generación y comercialización, fijó como objetivos la reducción progresiva del umbral del Precio Voluntario al Pequeño Consumidor (PVPC) hasta la total liberalización, salvo para clientes «vulnerables», así como inversiones bajo «estricto» criterio de rentabilidad.

Con respecto a la filial chilena Enersis, Prado apuntó que se utilizarán los fondos obtenidos con la ampliación de capital del pasado año «en invertir donde consideremos que son oportunidades de compra de minoritarios interesantes».

Las previsiones de Endesa se enmarcan dentro del plan estratégico de su matriz Enel para el periodo 2014-2018, por el que el grupo italiano espera mantener el beneficio de casi 3.000 millones euros este año para aumentarlo a 3.700 millones en 2016 y 4.500 millones en 2018, gracias al impulso de los mercados emergentes.

En estos cinco años, Enel prevé invertir 25.700 millones de euros y reducir su endeudamiento financiero neto a 36.000 millones en 2018, desde los 39.862 millones con los que cerró el pasado año, lo que le permitirá incrementar el dividendo el próximo ejercicio.

0 comentarios

Dejar un comentario

¿Quieres unirte a la conversación?
Siéntete libre de contribuir

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *