Desde diciembre las eléctricas facturan mensualmente a los usuarios, aunque la lectura de los contadores es bimensual, por lo que una de cada dos facturas se basa en estimaciones de consumos anteriores, lo que, según varias asociaciones de usuarios, ha dado lugar a cobros indebidos.

La portavoz del PP en la Comisión de Consumo del Congreso, Dolors Nadal, acusó a Sebastián de «atentar contra los intereses de los consumidores» por establecer el nuevo método y criticó a Soria por no defender a los usuarios frente a este abuso.

Nadal exigió la vuelta al anterior sistema, así como que las cantidades cobradas de forma irregular sean devueltas a los usuarios sin que éstos tengan que reclamarlo.

Por otra parte, pidió que la Oficina de Defensa del Consumidor de Electricidad y de Gas, que se creará próximamente, no dependa del Ministerio de Industria sino del de Sanidad y Consumo, ya que, subrayó, «Sebastián no puede ser juez y parte».

El miércoles, Soria dijo en el Senado que el Gobierno contempla la posibilidad de volver al sistema de facturación eléctrica cada dos meses si persisten las quejas de los consumidores y se demuestran «irregularidades» en la facturación.

Poco después, desde Industria se aseguró que mantienen su idea de que el sistema de factura mensual de la luz es una «buena medida» porque permite que los consumidores perciban los cambios del precio de la electricidad de forma más inmediata.