El Gobierno dice que la Armada actuó «con proporcionalidad de medios y fuerza» ante Greenpeace en Canarias

Esta controversia nace de una respuesta escrita del Ejecutivo al diputado de ICV, Joan Coscubiela, a la pregunta de si hubo uso de la fuerza por parte de las Fuerzas Armadas en la protesta de Greenpeace contra las prospecciones que Repsol realiza en Canarias. «A pesar de que los métodos de Greenpeace para protestar se demostraron pacíficos, simplemente pretendían desplegar una bandera con un mensaje en contra de las prospecciones y a favor de la utilización de energías renovables, la respuesta de las Fuerzas Armadas a esta protesta fue extremadamente violenta y desproporcionada», señala Coscubiela.

Al mismo tiempo, asegura que las dotaciones militares «actuaron de una forma totalmente imprudente e irresponsable«, tal y como se aprecia a su juicio en las imágenes que se difundieron del suceso, y cuya principal consecuencia fue que una de las personas que navegaba a bordo de una de las embarcaciones resultara herida al caer al mar, sufriendo cortes y una «fractura de considerable gravedad», que requirió de su hospitalización.

En su respuesta, el Gobierno remarca que fueron los miembros de la Armada los que «rescataron, aplicaron primeros auxilios, estabilizaron y evacuaron con medios del Servicio Aéreo de rescate del Ejército del Aire a la activista herida». Profundizando más, añade que el buque de Repsol fue autorizado por el Gobierno a realizar trabajos de prospección petrolífera en aguas internacionales en las que España ostenta derechos soberanos sobre la plataforma continental.

«Para permitir las labores de prospección, Fomento estableció una zona de exclusión de una milla de diámetro alrededor de la situación donde debían comenzar los trabajos«, agrega el Ejecutivo. En este sentido, el Gobierno recuerda cómo la Armada, en cumplimiento de las órdenes recibidas, desplegó un dispositivo de vigilancia y control marítimo para la aplicación de esta medida. «El buque de Greenpeace violó la zona de exclusión e ignoró las repetidas instrucciones de abandonar la zona dadas por el buque Relámpago. Además, puso en el mar tres embarcaciones con el objeto de hostigar e intentar abordar el Rowan Renaissance «, concluye.

Greenpeace, crítica con el Gobierno

Greenpeace calificó de «lamentable» que el Gobierno considere «proporcionada» la actuación de la Armada. «No es nuevo. El Gobierno considera que es proporcionado atacar a unos activistas pacíficos con pancarta, poniendo en serio peligro la vida de las personas y que tuvo como resultado que una joven activista cayera al agua y se rompiera la tibia, el peroné y varios tendones», indicó el portavoz de Greenpeace, Julio Barea. Barea cree que el Ejecutivo apoya así «acciones de tal calibre y violencia» contra unos activistas que iban en una lancha, con pancartas, desarmados y anunciando por radio lo que iban haciendo.

Además, recordó que los servicios jurídicos de la ONG están valorando si emprender acciones legales tras lo ocurrido, reflejado en las imágenes de un vídeo divulgado ese día. Finalmente, indicó que la activista italiana que resultó herida de gravedad y que fue operada en Canarias ya se encuentra en su país de origen donde fue valorada e intervenida quirúrgicamente de nuevo. «Va a tener una recuperación larga porque los daños que sufrió fueron serios», apuntó.