Un aire acondicionado eficiente reduce su consumo energético hasta un 75%, según WWF España

Con motivo de la subida de temperaturas que sufrirá esta semana todo el país, la organización ecologista recomendó no abusar del aire acondicionado ya que, además de reportar un ahorro económico, evita el calentamiento del planeta.

Durante los meses estivales el uso del aire acondicionado dispara el consumo energético y, con ello, las emisiones de gases de efecto invernadero responsables del cambio climático. Por tanto, «enfriar la casa» tiene un impacto directo en el clima, subrayó WWF.

Respecto al uso del aire acondicionado, el consumo de los equipos eficientes es un 75% menor a la que consumen los aparatos que no lo son, explicó Tragopoulos, técnico de eficiencia energética de esta organización.

Para conocer cuáles son los aparatos de aire acondicionado más eficientes del mercado español, Tragopoulos recomendó consultar la lista que ofrece el Proyecto EuroTopTen (eurotopten.es), financiado por el Programa de Energía Inteligente para Europa de la Comisión Europea.

Aparte de la eficiencia, es importante combatir las altas temperaturas «con medidas alternativas que enfríen los hogares», como mejorar la ventilación natural de las viviendas, reducir el uso de la iluminación artificial y apostar por los ventiladores de techo.

El uso de este tipo de ventiladores, en lugar de equipos de aire acondicionado, supone evitar la emisión a la atmósfera de alrededor de 300 kilogramos de CO2 por aparato durante los tres meses de verano.

En 2010, el consumo energético de los hogares se acercaba al 30% del total de España, y el 0,8% de ese consumo energético correspondió a la refrigeración de los hogares, según el Instituto para la Diversificación y el Ahorro Energético (IDAE).

En principio, los españoles parecen dispuestos a hacer este esfuerzo, ya que el 52,6% de la población afirma reducir «siempre» o «casi siempre» el uso del aire acondicionado en verano para ahorrar energía, según el informe «La sociedad ante el cambio climático«, elaborado por la Fundación Mapfre en 2011.

Un aire acondicionado eficiente reduce su consumo energético hasta un 75%, según WWF España

Con motivo de la subida de temperaturas que sufrirá esta semana todo el país, la organización ecologista recomendó no abusar del aire acondicionado ya que, además de reportar un ahorro económico, evita el calentamiento del planeta.

Durante los meses estivales el uso del aire acondicionado dispara el consumo energético y, con ello, las emisiones de gases de efecto invernadero responsables del cambio climático. Por tanto, «enfriar la casa» tiene un impacto directo en el clima, subrayó WWF.

Respecto al uso del aire acondicionado, el consumo de los equipos eficientes es un 75% menor a la que consumen los aparatos que no lo son, explicó Tragopoulos, técnico de eficiencia energética de esta organización.

Para conocer cuáles son los aparatos de aire acondicionado más eficientes del mercado español, Tragopoulos recomendó consultar la lista que ofrece el Proyecto EuroTopTen (eurotopten.es), financiado por el Programa de Energía Inteligente para Europa de la Comisión Europea.

Aparte de la eficiencia, es importante combatir las altas temperaturas «con medidas alternativas que enfríen los hogares», como mejorar la ventilación natural de las viviendas, reducir el uso de la iluminación artificial y apostar por los ventiladores de techo.

El uso de este tipo de ventiladores, en lugar de equipos de aire acondicionado, supone evitar la emisión a la atmósfera de alrededor de 300 kilogramos de CO2 por aparato durante los tres meses de verano.

En 2010, el consumo energético de los hogares se acercaba al 30% del total de España, y el 0,8% de ese consumo energético correspondió a la refrigeración de los hogares, según el Instituto para la Diversificación y el Ahorro Energético (IDAE).

En principio, los españoles parecen dispuestos a hacer este esfuerzo, ya que el 52,6% de la población afirma reducir «siempre» o «casi siempre» el uso del aire acondicionado en verano para ahorrar energía, según el informe «La sociedad ante el cambio climático«, elaborado por la Fundación Mapfre en 2011.

Endesa está «tranquila» y segura de la legalidad de ampliar Enersis

La compañía explicó que está estudiando «en detalle» el pronunciamiento de la Superintendencia de Valores y Seguros (SVS) de Chile, que estimó que el comité de directores y el directorio de Enersis, que integra su actividad en Latinoamérica, debe revisar el anunciado aumento de capital por 8.020 millones de dólares.

Endesa se ratificó en que la ampliación de capital «es beneficiosa para Enersis y evidentemente para todos sus accionistas», ya que convierte a la compañía «en la plataforma única de crecimiento en América Latina, lo que clarifica cuál es el vehículo de inversión en la región».

«Esto, evidentemente, es bueno para el país, ya que convierte a la empresa chilena en el principal actor energético en Latinoamérica y confirma la apuesta de confianza institucional en el país: la operación aportará a Enersis casi 2.000 MW de capacidad instalada«.

Además, con la ampliación de capital y la caja que se generará, la compañía tendrá recursos «para acelerar los proyectos de crecimiento que tiene en cartera, la compra de participaciones a minoritarios y las adquisiciones de compañías«, afirmó.

Desde el punto de vista financiero, la operación hace incrementar en 323 millones de dólares (alrededor de un 40%) el resultado neto después de impuestos de Enersis, dejándolo en unos 1.100 millones de euros, con cifras de 2011.

También recalcaron que se aumentará la liquidez de la acción y el peso del valor en la Bolsa chilena, que pasaría de un 6% a un 10%, convirtiéndose en la primera compañía del país.

Endesa transmitió además «con rotundidad» que, dicha operación se realizó con el máximo respeto a la legalidad chilena, «habiendo solicitado, con anterioridad su planteamiento, diversos informes jurídicos de algunos de los principales estudios jurídicos de Chile».

En esa operación, Endesa Latinoamérica, controladora de Enersis, traspasaría al grupo chileno sus participaciones en trece activos que tiene en esta región, tasados en 4.862 millones de dólares, en tanto que los accionistas minoritarios aportarían los 3.158 millones restantes.

Este plan fue criticado por las administradoras de fondos de pensiones privadas (AFP) de Chile, poseedoras de un 13% de las acciones de Enersis, que dudaron de que los activos aportados por el socio mayoritario valgan realmente 4.862 millones de dólares, al tiempo que cuestionan el destino del dinero que se recaudará.

Esas compañías, entre las que se encuentra la Administradora de Fondos de Pensiones (AFP) Provida, propiedad del grupo español BBVA, acusaron también a Endesa Latinoamérica de querer obtener financiación en Chile para paliar sus dificultades en Europa.

Endesa está «tranquila» y segura de la legalidad de ampliar Enersis

La compañía explicó que está estudiando «en detalle» el pronunciamiento de la Superintendencia de Valores y Seguros (SVS) de Chile, que estimó que el comité de directores y el directorio de Enersis, que integra su actividad en Latinoamérica, debe revisar el anunciado aumento de capital por 8.020 millones de dólares.

Endesa se ratificó en que la ampliación de capital «es beneficiosa para Enersis y evidentemente para todos sus accionistas», ya que convierte a la compañía «en la plataforma única de crecimiento en América Latina, lo que clarifica cuál es el vehículo de inversión en la región».

«Esto, evidentemente, es bueno para el país, ya que convierte a la empresa chilena en el principal actor energético en Latinoamérica y confirma la apuesta de confianza institucional en el país: la operación aportará a Enersis casi 2.000 MW de capacidad instalada«.

Además, con la ampliación de capital y la caja que se generará, la compañía tendrá recursos «para acelerar los proyectos de crecimiento que tiene en cartera, la compra de participaciones a minoritarios y las adquisiciones de compañías«, afirmó.

Desde el punto de vista financiero, la operación hace incrementar en 323 millones de dólares (alrededor de un 40%) el resultado neto después de impuestos de Enersis, dejándolo en unos 1.100 millones de euros, con cifras de 2011.

También recalcaron que se aumentará la liquidez de la acción y el peso del valor en la Bolsa chilena, que pasaría de un 6% a un 10%, convirtiéndose en la primera compañía del país.

Endesa transmitió además «con rotundidad» que, dicha operación se realizó con el máximo respeto a la legalidad chilena, «habiendo solicitado, con anterioridad su planteamiento, diversos informes jurídicos de algunos de los principales estudios jurídicos de Chile».

En esa operación, Endesa Latinoamérica, controladora de Enersis, traspasaría al grupo chileno sus participaciones en trece activos que tiene en esta región, tasados en 4.862 millones de dólares, en tanto que los accionistas minoritarios aportarían los 3.158 millones restantes.

Este plan fue criticado por las administradoras de fondos de pensiones privadas (AFP) de Chile, poseedoras de un 13% de las acciones de Enersis, que dudaron de que los activos aportados por el socio mayoritario valgan realmente 4.862 millones de dólares, al tiempo que cuestionan el destino del dinero que se recaudará.

Esas compañías, entre las que se encuentra la Administradora de Fondos de Pensiones (AFP) Provida, propiedad del grupo español BBVA, acusaron también a Endesa Latinoamérica de querer obtener financiación en Chile para paliar sus dificultades en Europa.

Medio Ambiente negocia reducir en un 91% el precio por tonelada de CO2 para cumplir con Kioto

En este sentido, el secretario de Estado de Medio Ambiente, Federico Ramos de Armas, ha asegurado que el Gobierno va a trabajar hasta el último minuto para cumplir el Protocolo de Kioto, cuyo plazo de vencimiento acaba el 31 de diciembre de 2012.

Según el Protocolo, que obliga a la UE ha reducir sus emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) un 8 por ciento para el periodo 2009-2012 respecto a las niveles de 1990, España puede emitir en este periodo un 15 por ciento más de lo que registraba en aquella fecha. Teniendo en cuenta las emisiones entre 2008 y 2010 (+22,9%) y las unidades ya adquiridas o contratadas, el Ejecutivo estima necesario adquirir en torno a 105 millones de unidades adicionales entre 2012 y 2014 para cumplir Kioto.

«Las negociaciones que hemos llevado a cabo han sido inmejorables pues suponen una eficacia en la gestión doce veces superior a la realizada en el periodo anterior, una muestra clara de que se puede hacer más con menos», ha asegurado Federico Ramos.

El secretario de Estado ha admitido que hay cuestiones que se sabe que van a producir un aumento de emisiones, como por ejemplo, «el decreto famoso del carbón», aunque todavía no cuenta con los datos definitivos de emisiones de gases de efecto invernadero correspondientes al año pasado.

Sin embargo, ha precisado que el Ejecutivo cuenta con dos estrategias para cumplir con el Protocolo de Kioto. Por una parte, trabajar en el desarrollo de proyectos internos que supongan reducción de emisiones. «Para eso, hemos puesto en marcha un fondo que llamamos ‘Proyectos Clima’ para la reducción de emisiones, se trata de incentivar proyectos en nuestro territorio que reduzcan emisiones -ha explicado-. Esa idea nos gusta mucho más que la de seguir comprando derechos de emisión a otros países».

En este sentido, ha comentado que en apenas cinco meses y tras una breve exposición pública se han recibido casi 200 propuestas de proyectos para ser apoyados y que los adjudicatarios definitivos se conocerán en octubre. A su juicio, este tipo de proyectos son los que pueden generar empleo, oportunidades e innovación en España.

No obstante, ha reconocido que «no queda otro remedio» que continuar con las adquisiciones de derechos de emisión, aunque con un enfoque diferente al del anterior Gobierno, «más racional y optimizando los recursos». «El Gobierno anterior gastó 770 millones de euros en cinco años en materia de compra de derechos de emisión. Hemos sido el segundo país del mundo, tras Japón, en comprar derechos de emisión y, aún así, nos hemos quedado todavía lejos de Kioto, puesto que la herencia que nosotros recibimos y lo que nos encontramos cuando empezábamos esta legislatura es que estábamos muy lejos de cumplir Kioto», ha criticado el secretario de Estado.

Así, ha asegurado que España ha abierto procesos de negociación, cambiado fórmulas y buscado optimizar los recursos limitados de los que dispone para adquirir derechos de emisión. «Mantenemos el compromiso de acercarnos a cumplir el Protocolo de Kioto, acercarnos hasta cumplirlo porque ese es el compromiso que tenemos y lo que tiene que hacer este ministerio», ha insistido.

Aunque el cumplimiento de Kioto acaba en diciembre, los países que han suscrito el acuerdo tienen dos años más para acreditar el cumplimiento. «En ese margen que tenemos de esos dos años, junto con estos meses, vamos a hacer todos los esfuerzos para cumplir todos nuestros compromisos internacionales, porque es muy importante como país cumplir sus compromisos internacionales. No simplemente firmarlos, sino trabajar y hacer todos los esfuerzos para cumplirlos. Está nuestra imagen como país y nuestra seriedad en ella», ha recalcado.

Por ello, según ha explicado, el Ejecutivo está negociando todas las variables posibles que puedan ayudar a España a cumplir, desde negociación con organismos internacionales, países y empresas que tienen derechos de emisión y los quieren compensar, vender o permutar.

«La idea del Gobierno es no pagar sanción y, sobre todo, antes que pagar sanción, es cumplir con nuestros compromisos, pero no sólo por evitar la sanción sino porque nosotros somos un país que quiere cumplir», ha concluido.

Medio Ambiente negocia reducir en un 91% el precio por tonelada de CO2 para cumplir con Kioto

En este sentido, el secretario de Estado de Medio Ambiente, Federico Ramos de Armas, ha asegurado que el Gobierno va a trabajar hasta el último minuto para cumplir el Protocolo de Kioto, cuyo plazo de vencimiento acaba el 31 de diciembre de 2012.

Según el Protocolo, que obliga a la UE ha reducir sus emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) un 8 por ciento para el periodo 2009-2012 respecto a las niveles de 1990, España puede emitir en este periodo un 15 por ciento más de lo que registraba en aquella fecha. Teniendo en cuenta las emisiones entre 2008 y 2010 (+22,9%) y las unidades ya adquiridas o contratadas, el Ejecutivo estima necesario adquirir en torno a 105 millones de unidades adicionales entre 2012 y 2014 para cumplir Kioto.

«Las negociaciones que hemos llevado a cabo han sido inmejorables pues suponen una eficacia en la gestión doce veces superior a la realizada en el periodo anterior, una muestra clara de que se puede hacer más con menos», ha asegurado Federico Ramos.

El secretario de Estado ha admitido que hay cuestiones que se sabe que van a producir un aumento de emisiones, como por ejemplo, «el decreto famoso del carbón», aunque todavía no cuenta con los datos definitivos de emisiones de gases de efecto invernadero correspondientes al año pasado.

Sin embargo, ha precisado que el Ejecutivo cuenta con dos estrategias para cumplir con el Protocolo de Kioto. Por una parte, trabajar en el desarrollo de proyectos internos que supongan reducción de emisiones. «Para eso, hemos puesto en marcha un fondo que llamamos ‘Proyectos Clima’ para la reducción de emisiones, se trata de incentivar proyectos en nuestro territorio que reduzcan emisiones -ha explicado-. Esa idea nos gusta mucho más que la de seguir comprando derechos de emisión a otros países».

En este sentido, ha comentado que en apenas cinco meses y tras una breve exposición pública se han recibido casi 200 propuestas de proyectos para ser apoyados y que los adjudicatarios definitivos se conocerán en octubre. A su juicio, este tipo de proyectos son los que pueden generar empleo, oportunidades e innovación en España.

No obstante, ha reconocido que «no queda otro remedio» que continuar con las adquisiciones de derechos de emisión, aunque con un enfoque diferente al del anterior Gobierno, «más racional y optimizando los recursos». «El Gobierno anterior gastó 770 millones de euros en cinco años en materia de compra de derechos de emisión. Hemos sido el segundo país del mundo, tras Japón, en comprar derechos de emisión y, aún así, nos hemos quedado todavía lejos de Kioto, puesto que la herencia que nosotros recibimos y lo que nos encontramos cuando empezábamos esta legislatura es que estábamos muy lejos de cumplir Kioto», ha criticado el secretario de Estado.

Así, ha asegurado que España ha abierto procesos de negociación, cambiado fórmulas y buscado optimizar los recursos limitados de los que dispone para adquirir derechos de emisión. «Mantenemos el compromiso de acercarnos a cumplir el Protocolo de Kioto, acercarnos hasta cumplirlo porque ese es el compromiso que tenemos y lo que tiene que hacer este ministerio», ha insistido.

Aunque el cumplimiento de Kioto acaba en diciembre, los países que han suscrito el acuerdo tienen dos años más para acreditar el cumplimiento. «En ese margen que tenemos de esos dos años, junto con estos meses, vamos a hacer todos los esfuerzos para cumplir todos nuestros compromisos internacionales, porque es muy importante como país cumplir sus compromisos internacionales. No simplemente firmarlos, sino trabajar y hacer todos los esfuerzos para cumplirlos. Está nuestra imagen como país y nuestra seriedad en ella», ha recalcado.

Por ello, según ha explicado, el Ejecutivo está negociando todas las variables posibles que puedan ayudar a España a cumplir, desde negociación con organismos internacionales, países y empresas que tienen derechos de emisión y los quieren compensar, vender o permutar.

«La idea del Gobierno es no pagar sanción y, sobre todo, antes que pagar sanción, es cumplir con nuestros compromisos, pero no sólo por evitar la sanción sino porque nosotros somos un país que quiere cumplir», ha concluido.

Repsol demanda a banco Mellon por no cumplir sus obligaciones como depositario de ADR’s de YPF

Según explicaron fuentes de Repsol, BNY Mellon no admitió las instrucciones de voto con respecto a los American Depositary Receipts (ADR) de YPF, instrumentos financieros requeridos a las entidades extranjeras para inscribir sus acciones en Wall Street, dadas por Repsol para la junta del pasado 4 de junio.

Repsol tenía derecho a dar instrucciones de voto tanto sobre los ADRs de su titularidad no sujetos a expropiación (6,4% del capital social), como respecto a los ADRs que el Grupo Petersen le tiene dado en prenda (5,38% del capital de YPF).

Así, Repsol no pudo votar en la junta con la totalidad de su participación en YPF, ya que prácticamente la mitad del 12% del capital de la argentina que aún posee está custodiado por Mellon.

Por este motivo, Repsol sólo pudo designar a un miembro en el consejo de administración «Directorio» de YPF; al letrado Luis García del Río, en lugar de tres que hubiera podido nombrar, de haber cumplido el banco con las instrucciones dadas, y pretendía debido a la parte que aún controla tras sufrir la expropiación del 51% de la argentina.

En la demanda se indica que la española «ha sufrido un daño irreparable y el valor de su participación minoritaria en YPF ha sido significativamente disminuido», indicaron las mismas fuentes.

El pasado mayo, la petrolera española Repsol presentó ante un tribunal federal de Nueva York una demanda civil colectiva («class accion») contra el Estado argentino por haber incumplido su obligación de haber lanzado una OPA como consecuencia de la toma de control de YPF en virtud de la expropiación del 51% de YPF con el fin de obtener una indemnización económica.

Hasta la expropiación ordenada por el Gobierno argentino, Repsol era el máximo accionista de YPF con el 57,4% del capital, una participación que la compañía presidida por Antonio Brufau valoró entonces en 10.500 millones de dólares (unos 8.000 millones de euros).

Repsol demanda a banco Mellon por no cumplir sus obligaciones como depositario de ADR’s de YPF

Según explicaron fuentes de Repsol, BNY Mellon no admitió las instrucciones de voto con respecto a los American Depositary Receipts (ADR) de YPF, instrumentos financieros requeridos a las entidades extranjeras para inscribir sus acciones en Wall Street, dadas por Repsol para la junta del pasado 4 de junio.

Repsol tenía derecho a dar instrucciones de voto tanto sobre los ADRs de su titularidad no sujetos a expropiación (6,4% del capital social), como respecto a los ADRs que el Grupo Petersen le tiene dado en prenda (5,38% del capital de YPF).

Así, Repsol no pudo votar en la junta con la totalidad de su participación en YPF, ya que prácticamente la mitad del 12% del capital de la argentina que aún posee está custodiado por Mellon.

Por este motivo, Repsol sólo pudo designar a un miembro en el consejo de administración «Directorio» de YPF; al letrado Luis García del Río, en lugar de tres que hubiera podido nombrar, de haber cumplido el banco con las instrucciones dadas, y pretendía debido a la parte que aún controla tras sufrir la expropiación del 51% de la argentina.

En la demanda se indica que la española «ha sufrido un daño irreparable y el valor de su participación minoritaria en YPF ha sido significativamente disminuido», indicaron las mismas fuentes.

El pasado mayo, la petrolera española Repsol presentó ante un tribunal federal de Nueva York una demanda civil colectiva («class accion») contra el Estado argentino por haber incumplido su obligación de haber lanzado una OPA como consecuencia de la toma de control de YPF en virtud de la expropiación del 51% de YPF con el fin de obtener una indemnización económica.

Hasta la expropiación ordenada por el Gobierno argentino, Repsol era el máximo accionista de YPF con el 57,4% del capital, una participación que la compañía presidida por Antonio Brufau valoró entonces en 10.500 millones de dólares (unos 8.000 millones de euros).

ANPIER solicita a Agricultura que incorpore la visión medioambiental en el texto de la reforma energética

La Oficina Española de Cambio Climático, que tiene rango de Dirección General dependiente de la Secretaria de Estado de Medio Ambiente del Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente (MAGRAMA), tiene asignada la tarea de formular la política nacional de cambio climático, de conformidad con la normativa internacional y comunitaria en la materia, así como prestar asesoramiento a los distintos órganos de la Administración General del Estado en los asuntos relacionados con el cambio climático.

Según dio a conocer ANPIER, en el Plan Nacional de Adaptación al Cambio Climático, el epígrafe referido a Industria y Energía advierte dice lo siguiente: «Bajo un escenario de incremento de temperaturas y disminución de precipitaciones se prevé un incremento de la demanda eléctrica que deberá cubrirse sin poder recurrir a energía hidráulica, pues ésta se reducirá. Se prevé, asimismo, un incremento de la demanda de petróleo y de gas natural, y una reducción del aporte de la biomasa. La proyectada disminución de precipitaciones afectará a la estructura de la oferta de hidroelectricidad, así como a determinadas centrales térmicas y nucleares refrigeradas en circuito abierto. Sólo la energía solar se vería beneficiada por el plausible incremento de las horas de insolación«.

En coherencia con este planteamiento, ANPIER solicitó al MAGRAMA que, visto el negativo impacto que presentan tanto las energías fósiles, como los adversos escenarios esperados para la generación nuclear y la hidroeléctrica, y reconocida la oportunidad que supone la energía solar para nuestro país, asuma un papel protagonista en la definición del futuro modelo energético, a través de Oficina Española de Cambio Climático y de la Comisión Interministerial para el Cambio Climático, órgano colegiado interministerial adscrito al Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente, y presidido por el ministro Miguel Arias Cañete.

ANPIER solicita a Agricultura que incorpore la visión medioambiental en el texto de la reforma energética

La Oficina Española de Cambio Climático, que tiene rango de Dirección General dependiente de la Secretaria de Estado de Medio Ambiente del Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente (MAGRAMA), tiene asignada la tarea de formular la política nacional de cambio climático, de conformidad con la normativa internacional y comunitaria en la materia, así como prestar asesoramiento a los distintos órganos de la Administración General del Estado en los asuntos relacionados con el cambio climático.

Según dio a conocer ANPIER, en el Plan Nacional de Adaptación al Cambio Climático, el epígrafe referido a Industria y Energía advierte dice lo siguiente: «Bajo un escenario de incremento de temperaturas y disminución de precipitaciones se prevé un incremento de la demanda eléctrica que deberá cubrirse sin poder recurrir a energía hidráulica, pues ésta se reducirá. Se prevé, asimismo, un incremento de la demanda de petróleo y de gas natural, y una reducción del aporte de la biomasa. La proyectada disminución de precipitaciones afectará a la estructura de la oferta de hidroelectricidad, así como a determinadas centrales térmicas y nucleares refrigeradas en circuito abierto. Sólo la energía solar se vería beneficiada por el plausible incremento de las horas de insolación«.

En coherencia con este planteamiento, ANPIER solicitó al MAGRAMA que, visto el negativo impacto que presentan tanto las energías fósiles, como los adversos escenarios esperados para la generación nuclear y la hidroeléctrica, y reconocida la oportunidad que supone la energía solar para nuestro país, asuma un papel protagonista en la definición del futuro modelo energético, a través de Oficina Española de Cambio Climático y de la Comisión Interministerial para el Cambio Climático, órgano colegiado interministerial adscrito al Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente, y presidido por el ministro Miguel Arias Cañete.