«Creo que muy pronto celebraremos conversaciones con Rusia sobre el asunto del gas en relación a la introducción de algunas modificaciones a los acuerdos de comienzos de 2009», dijo Danilishin en una entrevista con la agencia rusa Interfax.

Según el ministro ucraniano, los cambios que desea Kiev se refieren a «los volúmenes de suministro y, posiblemente, a la propia estructura de la fórmula que se emplea para establecer el precio» del combustible.

La parte ucraniana, agregó, planteará también un aumento de la tarifa por el tránsito de carburante por el territorio de Ucrania, por donde actualmente pasa cerca del 80 por ciento del gas natural que Rusia exporta a Europa.

Danilishin expresó sus confianza en que se conseguirá llegar a un acuerdo que satisfaga a Moscú y a Kiev.

«Ucrania tiene un posición constructiva en este asunto y quisiéramos que nuestro socios tengan la misma actitud», recalcó.

La estatal ucraniana Naftogaz ha pedido al consorcio ruso Gazprom revisar algunos puntos del contrato bilateral para reducir la cantidad de gas contratado para este año de 40.000 millones a 33.000 millones de metros cúbicos de carburante.

De acuerdo con el contrato, la reducción de los volúmenes contratados implica multas, que hasta el momento Gazprom no ha aplicado.

En enero de este año, Rusia y Ucrania firmaron un acuerdo a largo plazo para poner término a una disputa por los precios del gas que dejó sin carburante durante trece días a millones de consumidores europeos.

Según informó la empresa energética, firmaron ayer un convenio de colaboración el ministro de Ciencia y Tecnología de China, Wan Gang; la ministra italiana de Medioambiente, Stefania Prestigiacomo, y el director del Área de Ingeniería e Innovación de Enel, Livio Vido.

El acuerdo alcanzado, que sigue al Memorando de Entendimiento firmado en mayo de 2008 en Beijing, derivará en un plan de viabilidad que estudie la implementación, en una planta china de carbón, de un sistema de captura de CO2 para luego inyectarlo en un yacimiento petrolífero, acción que incrementará la posterior producción de crudo.

La alianza Italia-China promoverá el intercambio de información entre las entidades investigadoras de los dos países. Enel contribuirá al éxito del programa ‘al compartir con sus colaboradores chinos la experiencia que acumula, así como con la construcción de un sistema-piloto que permitirá probar, a partir de 2010, la tecnología más avanzada de captura de CO2 en su planta Federico II, en Brindisi‘.

Enel ha desarrollado un programa, que está en fase de revisión por la Unión Europea para evaluar un reembolso por parte de los fondos europeos del Plan de Recuperación Económica, para implementar un sistema que, a partir de 2015, hará efectiva la captura general de CO2 en la planta de carbón que va a construirse en Porto Tolle.

Volkswagen desarrollará y producirá las minicentrales, que se alimentarán con motores de gas natural, mientras que LichtBlick se encargará de la comercialización e instalación de las mismas.

«Como mayor proveedor independiente de Alemania, sabemos cómo funciona el mercado del gas y la electricidad y cómo gestionar con éxito esta iniciativa», declaró tras la firma del convenio el presidente de Lichtblich, Christian Friege.

Estas centrales domésticas, basadas en la tecnología de alta eficiencia EcoBlue, parte de la marca BlueMotion que ya desarrolla Volkswagen para sus motores, proporcionarán a edificios individuales calor y estarán interconectadas formando una nueva red.

LichtBlick cuenta con una red de casi 100.000 centrales de gas domésticas en todo el país, lo que supone una producción de 2.000 megavatios o el equivalente a la capacidad de dos centrales nucleares.

La tecnología Volkswagen permitirá a esas minicentrales de gas ahorrar hasta el 60 por ciento de las emisiones de dióxido de carbono (CO2).

Según los planes de VW y LichtBlick, la ciudad de Hamburgo será la primera en estrenar esta nueva central doméstica, posiblemente a primeros del próximo año. El cliente pagará por su instalación 5.000 euros.