La compañía, que presentó resultados mejores a los que habían pronosticado los analistas, anunció al mercado que obtuvo beneficios líquidos de 1.005 millones de euros.

Su ebitda (beneficios antes de impuestos y amortizaciones) cayó un 0,3%, hasta los 3.617 millones de euros en comparación con el 2012, afectado por «diversas alteraciones de regulación adversas en las actividades tradicionales ibéricas», esencialmente en España, según indicó EDP.

En la península Ibérica, donde controla la española HC Energía entre otros activos, el ebitda operacional cayó el 3% por las nuevas leyes de regulación energética en Portugal y España, nuevos impuestos en España y el fin de las licencias gratuitas de C02.

En el sector eólico y solar, donde también opera en Estados Unidos, el ebitda del grupo mejoró el 1% a través de la actividad de la filial de EDP, EDP Renovables, y el de Brasil subió el 9%.

Geográficamente, el 58% del ebitda del grupo procedió de Portugal y España a través de producción contratada, redes liberalizadas y redes reguladas; el 26% de energía eólica y solar; y el 16% de Brasil.

Las inversiones operacionales de la eléctrica descendieron el 2%, hasta los 1.978 millones de euros, mientras que la deuda líquida bajo el 4%, hasta los 17.431 millones de euros, en línea con los objetivos de la empresa, realzó EDP, cuyas provisiones aumentaron de los 16 millones de euros a los 55 millones de euros por «contingencias laborales en Brasil y provisiones relativas a litigios, entre otros, en España».

La estatal portuguesa Parpública fue el accionista de referencia de EDP hasta que vendió a finales de 2011 el 21,35% a la estatal china Three Gorges por 2.800 millones de euros. En la empresa lusa también participan la inmobiliaria francesa Oppidium (7,19%), la eléctrica española Iberdrola (6,66%) y la estadounidense Capital Group Companies (5,03%).

El volumen de negocio del grupo se redujo en un 2% el pasado año, hasta los 526,3 millones de euros, mientras que el beneficio de explotación recurrente se situó en 225,6 millones de euros, un 1,6% más que en el ejercicio precedente.

Los ingresos por logística básica bajaron un 1,4%, hasta los 457 millones de euros, tras anotar una caída del 0,3% en los ingresos por consignaciones de gasolinas y gasóleos, y un descenso del 3,1% en los ingresos por consignaciones de productos de aviación.

Dentro de este capítulo, los ingresos por almacenamiento estratégico y de seguridad disminuyeron un 1% y los ingresos por recepción y almacenamiento de biocarburantes se redujeron un 45,8%. Esta caída obedece principalmente a la desaparición de las bonificaciones fiscales al consumo, junto con la reducción del porcentaje obligatorio de utilización, señala CLH.

En lo que respecta a la logística capilar, sus ingresos cayeron en su conjunto un 6,1%, tras la disminución del sector marino (-5,7%) y el sector aviación (-6,5%), debido en gran parte a la entrada del tercer operador en las instalaciones aeroportuarias de Madrid y Barcelona en el último trimestre de 2012.

El resultado neto de operaciones financieras de CLH en 2013 arrojó unas pérdidas de 15,5 millones de euros, un 2,5% mejor que el obtenido en el ejercicio 2012.

El pasado año, CLH gestionó unas salidas de productos petrolíferos de 39,8 millones de metros cúbicos, un 2,8% menos que en 2012 ante la caída de la demanda interna, apunta la compañía.

De ellos, las retiradas de carburantes de automoción cayeron un 2,1% el pasado año, el resto de gasóleos se incrementaron un 1,3%, y los fuelóleos se redujeron un 17,9%, por el cese de actividad para estos productos en la instalación de almacenamiento de Castellón y por la situación del entorno económico.

De igual forma, la situación de algunas compañías aéreas y la reducción del número de pasajeros en el aeropuerto de Barajas repercutieron en las salidas de productos de aviación, que cayeron un 0,8% respecto al mismo periodo del año anterior.

Por otra parte, CLH invirtió en 2013 casi un 60% menos que el año anterior, con un total de 46,8 millones de euros frente a los 79,2 del ejercicio 2012.

De estos, 23,2 millones de euros se dedicaron a instalaciones de almacenamiento y aeropuertos, enfocadas a la realización de mejoras operativas y de seguridad (19,9 millones de euros) y a la construcción de nuevas plantas y ampliación de la capacidad de almacenamiento (3,3 millones de euros).

Para la mejora de infraestructuras de transporte y la prolongación de la red de oleoductos CLH destinó 8,9 millones de euros, otros 10,4 millones de euros a proyectos ligados a la protección medioambiental y los 4,3 millones de euros restantes al desarrollo de aplicaciones informáticas y a la adquisición de maquinaria y equipos.

En una conferencia con analistas para valorar los resultados del ejercicio 2013, el presidente de Acciona, José Manuel Entrecanales, explicó que la prioridad para este año es la culminación de desinversiones para reducir la deuda del grupo, seguido del dividendo, y «luego» la inversión, tras haber registrado en 2013 las primeras pérdidas de su historia, de 1.972 millones, por los cambios regulatorios.

En concreto, la empresa detalló que los efectos directos en la cuenta de resultados de los cambios regulatorios ascendieron a 257 millones de euros, mientras que el deterioro del valor de sus activos renovables restó 1.675 millones de euros.

De no haber tenido lugar el cambio regulatorio, el beneficio bruto de explotación (Ebitda) de la compañía se hubiese situado en 1.485 millones de euros, un 4% más frente a la caída del 14,1% registrada finalmente en los resultados.

Al cierre del año, Acciona contaba con 8.480 MW de capacidad total instalada, de ellos 5.974 MW en España. La compañía, centrada en el negocio renovable, sufrió especialmente los cambios planteados por el Gobierno para la retribución que cobran estas instalaciones.

Acciona también señaló que sus resultados se vieron afectados, aunque en menor medida, por el deterioro del valor de algunos activos inmobiliarios y de otros negocios, así como por algunas plusvalías de ventas de activos eólicos y de concesiones hospitalarias. Todo ello arrojó un beneficio antes de impuestos con un saldo negativo de 2.174 millones de euros, tras contabilizar unas pérdidas extraordinarias 2.203 millones de euros.

Con todo esto, las ventas del grupo bajaron el 5,8%, hasta los 6.607 millones de euros, y el resultado bruto de explotación (ebitda) cayó el 14,1% y sumó 1.228 millones de euros.

La inversión neta ordinaria de los distintos negocios del grupo en 2013 fue de 381 millones de euros, un 55,4% menos que en el ejercicio anterior, mientras que su deuda financiera neta se redujo un 10,2%, hasta los 6.715 millones de euros. En 2012 obtuvo 7.482 millones de euros.

Por negocios, la división de Energía mantuvo su cifra de negocio prácticamente plana (+0,6%) en 2.120 millones de euros pero su beneficio cayó un 95,9% por el impacto de las medidas aprobadas por el Gobierno hasta los 6,7 millones de euros. En Infraestructuras, la cifra de negocio disminuyó un 17,8% hasta los 2.733 millones de euros, por «la caída de la construcción en España y en el mercado internacional».

Frente a esto, en el negocio de Agua mejoró sus ventas el 15,6%, hasta los 585 millones de euros, y en el de Servicios las elevó un 8,3%, hasta los 641 millones de euros.

Por el contrario, destacó el aumento de ingresos de la división de agua, «impulsada por el buen comportamiento tanto de la actividad de diseño y construcción así como de la de operación y mantenimiento».

Acciona se va a «reinventar»

Junto a todo esto, Entrecanales destacó que se va a «reinventar» el grupo, con la reorganización en dos grandes áreas operativas, una división de energía y otra de infraestructuras, agua y servicios, con el fin de generar «sinergias» y una mayor eficiencia.

Aunque Acciona se enfrenta a «desafíos sin precedentes en sus casi 100 años de historia», en que tuvo «momentos muy difíciles», la compañía «va a superar los actuales desafíos», aseveró Entrecanales, que garantizó un futuro «prometedor» y «brillante» para empleados, accionistas, clientes y socios.

Respecto al reparto del dividendo, Entrecanales indicó que se producirá en función del cumplimiento de los objetivos, especialmente de reducción de deuda y desinversiones, fijados en el plan de acción, aprobado el año pasado y que se intensificará este año.

Así, aseguró que estudian la «posibilidad» de volver al dividendo «con cargo a 2014» si se consigue un desapalancamiento a niveles «cómodos», aunque aclaró que no se trata de un compromiso sino de una «esperanza» y que no se recuperará hasta reducir la deuda a «ratios menores».

En cualquier caso, para lograrlo, la compañía intensificará el plan de acción iniciado el año pasado, que prevé limitar las inversiones en 2014, año en el que destinará un total de 470 millones de euros, de los que 350 millones de euros irán a parar a la división de energía para finalizar los parques de Costa Rica, Sudáfrica y Chile.

De cara a 2014, Acciona confía en volver a beneficio en función del éxito de estos planes y apunta a incrementos de sus ingresos en sus divisiones de Infraestructuras y Servicios.

En busca de socios para su negocio internacional de renovables

Asimismo, Entrecanales, anunció que el grupo planea dar entrada a uno o dos socios financieros con la venta de una participación minoritaria significativa en sus proyectos de renovables en el extranjero y en sus concesiones en Canadá como vía para seguir creciendo, y que supondría un «éxito» en caso de efectuarse en el primer semestre del año.

El grupo señaló que se busca una «alianza estratégica» que permitirá al grupo «acelerar su crecimiento» sin aportar recursos.

El portfolio de renovables del grupo suma 2.273 megavatios (MW) netos, distribuido en países como Canadá, Estados Unidos, México, Costa Rica, Chile, Hungría, Portugal, Polonia, Sudáfrica, Grecia, Italia, Croacia, India y Australia. Del total, 2.078 MW están en operación y 195 en construcción. Los ingresos de este negocio rondan los 500 millones de euros.

Según explicaron fuentes de la compañía, esta iniciativa se enmarca en el proceso de profundización del plan de acción presentado el año pasado para combatir el impacto de las sucesivas reformas energéticas.

La entrada de esos socios se incluye en los objetivos de desinversión de entre 500 y 1.000 millones de euros fijados para el periodo 2013-2014. En 2013, la empresa realizó desinversión por unos 370 millones por lo que quedan pendientes unos 600 millones de euros. Dentro de la revisión de este plan la empresa también apuntó a «más iniciativas» para reducir costes.

Crítica al «desproporcionado» recorte a la eólica

Por su parte, el consejero delegado de Acciona Energía, Rafael Mateo, se refirió a la última orden ministerial de parámetros a las renovables, que afectará en «más de 2.000 millones de euros» al sector, «mucho más de lo que inicialmente indicó el Gobierno».

A su juicio, el recorte al sector eólico es «desproporcionado» al suponer un 65% de la «penalización», aún a pesar de ser la energía «más eficiente, que crea más empleo y a poya a la industria de renovables».

De esta forma, Acciona no descartó llevar a los tribunales la normativa al verse perjudicados los 4.743 MW eólicos que dispone en España.