Elecnor ganó 58,5 millones de euros durante 2014, un 10% más gracias a su negocio internacional

La cifra de ventas descendió el 7,5%, hasta 1.723,7 millones, por la caída de los ingresos de generación eléctrica, las menores inversiones en los sectores en los que opera la compañía en España y el retraso en la ejecución de algunos proyectos internacionales. De esta cantidad, el 54% procedió del mercado internacional, mientras que el nacional supuso el 46%, siendo el tercer ejercicio consecutivo en que resultan mayoritarias las ventas en el exterior. El resultado de explotación bruto (ebitda) ascendió a 228,8 millones, un 3,8% más que un año antes.

La compañía explicó que esta mejora se debe a la mayor aportación de los proyectos eólicos que el grupo opera en Brasil y Canadá, al aumento de la productividad en los proyectos de infraestructuras y a la fuerte presencia en países como Angola, Chile o Brasil y una mayor rentabilidad en otros de reciente implantación. Además, también contribuyó la entrada en operación de nuevas líneas de transmisión eléctrica en Brasil y el buen comportamiento de las sociedades concesionarias que operan el resto de las líneas de transmisión de ese país.

Elecnor indicó que estos avances se registraron a pesar de un entorno económico marcado por la aún «débil recuperación» del mercado español y de los efectos de la reforma energética. La aplicación de la reforma significó que los parques eólicos de Elecnor en España hayan aportado al resultado consolidado 9 millones menos que en el ejercicio 2013, así como una menor rentabilidad de las tres plantas termosolares con que cuenta el grupo en España con relación a la prevista en el momento de su promoción y desarrollo. A ello se añade la reforma fiscal que entró en vigor el pasado 1 de enero, que ha tenido un impacto negativo en la cuenta de resultados del grupo de otros 10 millones.

De cara al futuro, Elecnor indicó que no espera más cambios regulatorios que afecten a sus activos de generación en España. A 31 de diciembre pasado, la cartera de contratos pendiente de ejecución ascendía a 2.417 millones de euros. Por mercados, la de origen internacional se situó en 1.979 millones del euros, el 82% del total, mientras que la contabilizada en España fue de 438 millones de euros, el 18%.

Red Eléctrica gana un 35,7% más en 2014 por la expropiación de TDE y el efecto de la reforma fiscal

El crecimiento de las ganancias una vez eliminados estos factores extraordinarios habría sido del 5,4%, debido al mayor volumen de activos y las mejoras en eficiencia operativa y financiera, superando el objetivo establecido para 2014. La cifra de negocio del grupo sumó 1.846,7 millones de euros, un 5% más, gracias a la puesta en marcha de nuevas instalaciones de transporte puestas en servicio en el curso del año 2013 y al incremento de los ingresos asociados a los servicios de operación del sistema conforme a la orden de Peajes del año pasado, a lo que se une la explotación de la fibra óptica de Adif.

El resultado bruto de explotación (ebitda) alcanzó 1.385,4 millones, un 6,4% más, impulsado por «la favorable evolución de los costes operativos». El beneficio neto de explotación (Ebit) aumentó un 5,6%, hasta situarse en 949 millones. En cuanto al efecto fiscal, REE destacó que la reforma puesta en marcha por el Gobierno no afectó a las cantidades pagadas en 2014, aunque la contabilidad se beneficie de una reducción de los pasivos por impuesto diferido. Además se suma, tal y como anunció REE el pasado noviembre, un impacto positivo de 52 millones en su beneficio por el acuerdo de compensación firmado con el Gobierno boliviano por la expropiación de su filial TDE.

El pasado ejercicio REE invirtió 957,6 millones de euros, de los que 492,6 millones se corresponden con el desarrollo de la red de transporte eléctrico en España y con especial atención a las nuevas interconexiones con Francia y Portugal. Otros 433,7 millones de inversión recogen el acuerdo para la adquisición de los derechos de uso y explotación de la red de fibra óptica de Adif.

Por su parte, la deuda financiera neta del grupo se incrementó en 884,9 millones de euros durante 2014 respecto al ejercicio precedente y alcanzó un importe de 5.408,5 millones de euros, un 19,1% más que un año antes, mientras que sus costes se redujeron del 3,84% al 3,49%. No obstante, si se elimina de esta cifra el efecto de la inversión en la red de fibra óptica de Adif y el IVA de las operaciones, la deuda se habría situado en 4.883,7 millones de euros.

Por otro lado, el consejo de administración de Red Eléctrica Corporación, en sesión celebrada el 24 de febrero de 2015, acordó proponer a la junta general ordinaria de accionistas pagar un dividendo de 3 euros por acción, lo que supone un incremento del 18% respecto al pagado el año anterior. El pago del dividendo se efectuará el próximo 1 de julio, en los bancos y entidades financieras que oportunamente se anunciará, descontando de su importe la cantidad bruta de 0,8323 euros por acción que desembolsó como dividendo a cuenta el pasado día 2 de enero, en virtud del acuerdo del consejo de administración de fecha 23 de diciembre de 2014.

Invertirá 4.500 millones hasta 2019

Además, Red Eléctrica prevé invertir más de 4.500 millones de euros en el periodo 2014-2019, de acuerdo a su plan estratégico presentado, de los que la mayor parte se concentrará en la red de transporte eléctrico. Según explicó el presidente de la compañía, José Folgado, el grupo dedicará más de 3.500 millones de euros a sus actividades «consolidadas»: 3.100 millones para red de transporte y 475 millones para fibra óptica, una cifra que también incluye la compra de la red de Adif. Adicionalmente, la compañía prevé dedicar otros 1.000 millones a «nuevas actividades», entre ellas el almacenamiento de electricidad en las islas y negocios internacionales.

Con respecto a las inversiones en la red de transporte, José Folgado recordó que el Gobierno congeló las nuevas inversiones previstas en línea con su política de contención de costes para combatir el déficit tarifario. Sin embargo, el Ejecutivo autorizó inversiones para instalaciones críticas por más de 900 millones, principalmente dedicadas a los sistemas extrapeninsulares para enlazar las islas entre sí y con la Península, así como la conexión Ceuta-Península y también las interconexiones internacionales. Además, el borrador de plan de infraestructuras eléctricas 2015-2020, todavía pendiente de su aprobación definitiva, prevé inversiones por 4.400 millones principalmente en refuerzo de la red, interconexiones, enlace con sistemas extrapeninsulares y almacenamientos de energía.

De esta manera, la cartera de Red Eléctrica para la red de transporte estima las inversiones en unos 515 millones de euros anuales, que supondrá puestas en servicio por 600 millones cada año. José Folgado detalló que la retribución de la actividad de transporte eléctrico ascenderá este año a 1.725 millones, de los que 1.654 millones corresponden a Red Eléctrica, y que esta cifra se incrementará en un 12,6%, hasta los 1.742 millones, en 2019, una estimación que podrá verse alterada en función de las inversiones que finalmente se implementen.

En cuanto a los 1.000 millones consignados para «nuevas actividades», según el director Corporativo Económico Financiero, Juan Lasala, se distribuirán a partes iguales entre los archipiélagos y negocios internacionales. Así, este importe recoge los 300 millones de inversión previstos para la central de bombeo de Chira-Soria (Gran Canaria), cuya puesta en servicio se espera para 2019, y los «ciento y mucho o doscientos millones» correspondientes al bombeo previsto en Tenerife. En ese sentido, Folgado insistió en que la operación de las centrales de bombeo por parte de Red Eléctrica forma parte de las herramientas del sistema, con retribución regulada, y que la compañía «no actúa como generador convencional de energía«.

Paralelamente, la compañía buscará «nuevas oportunidades en mercados estables que ofrezcan una rentabilidad adecuada», preferiblemente con una participación mayoritaria y un papel activo en la gestión. Otras nuevas actividades de REE son la gestión de las subastas del mecanismo de interrumpibilidad o la elaboración de los perfiles de consumo de la tarifa regulada, el precio voluntario al pequeño consumidor (PVPC), siempre con la intención de ampliar la base de negocio.

El plan estratégico de REE prevé un crecimiento medio anual del beneficio por acción de entre el 5% y el 6% y que la deuda neta se mantenga al final del periodo en un ratio de 3,5 veces el ebitda de media. El plan estratégico se enmarca, según subrayó Folgado, en un momento en que la Comisión Europea apuesta por un mercado único de energía y un sistema bajo en emisiones, en el que se reforzarán las interconexiones internacionales. Folgado insistió en que el nuevo marco retributivo de la actividad de transporte en España es «transparente» y «estable», lo que da «sostenibilidad al sistema y establece incentivos a la eficiencia«.

Folgado ganó un 2,8% más

Por otro lado, el presidente de Red Eléctrica, José Folgado, recibió el pasado año una retribución de 746.000 euros, un 2,8% más que el año anterior. El resto de consejeros recibió una remuneración de entre 53.000 y 190.000 euros, en su totalidad en efectivo. Así, el conjunto del consejo de administración cobró el pasado año una remuneración de 2,39 millones, un 1% más que los 2,36 millones del año anterior.

El exministro de Economía y Hacienda, Miguel Boyer, fallecido el pasado mes de septiembre, ingresó 53.000 euros por su puesto de consejero de Red Eléctrica el año pasado. Respecto a la retribución de Juan Iranzo, que dimitió en octubre tras verse involucrado en el caso de las tarjetas black de Caja Madrid, por el periodo de 2014 que estuvo en el cargo percibió 155.000 euros.

Enagás prevé que la demanda de gas crezca este año hasta un 6% en su primera subida desde la crisis

La demanda de gas registrará este año su primera subida desde el inicio de la crisis, al experimentar incrementos que pueden situarse «entre el 4% y el 6%», según pronosticó el presidente de Enagás, Antonio Llardén. Las subidas a tasas del 6% se producirán si las condiciones meteorológicas se sitúan «en la media» de otros años y gracias a que el número de clientes de gas está creciendo «a pesar de la crisis», señaló Llardén.

Otro de los factores que contribuye a este anuncio optimista, después de 6 ejercicios consecutivos de caídas que se corresponden con la crisis económica, es el previsible aumento del consumo de gas industrial, «que está íntimamente ligada al crecimiento del PIB«, y que, por lo tanto, según señaló el presidente de Enagás, si las expectativas de repunte económico se materializan también lo hará el consumo.

Enagás también pronostica que el peso del gas sobre el mix energético pasará del 19% actual al 24% en 2020, y que la demanda de España aumentará a un ritmo medio anual del 4% en los próximos tres años. Además, Enagás calcula que, en lo que va de año, la demanda aumentó un 7% con respecto al mismo periodo de 2014, si bien esta evolución al alza «no se puede extrapolar al conjunto del ejercicio».

Por otro lado, Llardén añadió que, pese a que las plantas de cogeneración redujeron un 10% su demanda en términos interanuales, este recorte es relativamente limitado en comparación con las previsiones apuntadas tras las reformas. En consecuencia, este aumento de la demanda y de los ingresos contribuirá a la desaparición del déficit de tarifa del sistema gasista, explicó Llardén. «Incluso con incrementos inferiores al 2% se eliminaría este déficit», añadió.

Gana 406,5 millones en 2014

Enagás obtuvo un beneficio neto de 406,5 millones de euros en 2014, lo que supone un incremento del 0,8% respecto al año precedente, en un entorno marcado por el impacto de la reforma regulatoria, según informó la compañía. Dichos resultados son los primeros afectados por el nuevo marco regulatorio aprobado en el Real Decreto-ley 8/2014, que establece un periodo regulatorio estable hasta el año 2020. Enagás estima un impacto medio anual de 120 millones de euros en los ingresos regulados de la compañía hasta 2020.

El impacto de la reforma regulatoria de España, con efecto desde el mes de julio, supuso un recorte en los ingresos regulados del año 2014 en 57 millones de euros. En concreto, los ingresos totales de Enagás al finalizar 2014 ascendieron a 1.223,4 millones de euros, un 3% inferiores a los obtenidos un año antes, mientras que el resultado bruto de explotación (Ebitda) se situó en 939,8 millones de euros, con una reducción del 5,6%.

Esta disminución de ingresos, según explicó, se ve compensada fundamentalmente por una menor amortización derivada de la extensión de la vida útil de los gasoductos contemplada en la nueva regulación y por el impacto puntual contable positivo de la reforma fiscal en 2014. Tras la aprobación de dicha reforma fiscal, se han actualizado los activos y pasivos diferidos de balance a la nueva tasa del impuesto de sociedades, con un resultado contable positivo de 58,1 millones de euros en 2014.

Las inversiones en el ejercicio 2014 ascendieron a 625 millones de euros, cumpliendo el objetivo de inversión establecido. El 76% de dichas inversiones corresponden a proyectos internacionales, fundamentalmente a la participación en TGP/COGA (Perú) y las inversiones realizadas en Gasoducto Sur Peruano y en el gasoducto TAP en Europa. El endeudamiento financiero neto de la compañía a 31 de diciembre fue de 4.059,1 millones de euros, lo que supone un ratio de deuda neta sobre Ebitda ajustado de 4,2 veces.

El dividendo correspondiente al ejercicio 2014, que será sometido a la aprobación de la próxima junta general de accionistas, se mantiene en 1,30 euros por acción, en línea con lo establecido en el Plan Estratégico, y que supone un crecimiento del 2,4% con respecto al dividendo de 2013. Por último, la demanda total de gas transportada alcanzó 397.519 GWh, un 1,4% menos que en 2013, afectada fundamentalmente por el efecto de las temperaturas excepcionalmente altas durante 2014 y por el descenso en la cogeneración con gas natural. Corregido el efecto de la temperatura, la demanda se habría incrementado en torno al 2% respecto a 2013.

Invertirá 1.290 millones hasta 2017

El gestor del sistema gasista Enagás prevé invertir un total de 1.290 millones de euros entre 2015 y 2017 e incrementar su beneficio alrededor de un 1% anual hasta esa fecha, según informó la propia compañía en la actualización de su Plan Estratégico. Este Plan Estratégico para el periodo 2015-2017 prevé unas inversiones anuales medias de 430 millones de euros, 1.290 millones en total, de las que la mitad se dedicarán a España y la otra mitad a proyectos internacionales.

Enagás prevé invertir en España una media de 220 millones anuales, con los que se reforzarán las interconexiones con Europa, se construirá la planta regasificadora de Tenerife, cuyas obras espera iniciar este año, así como la ejecución de los acuerdos de compras de participaciones en las regasificadoras de Sagunto y Bilbao. Llardén cree que «en 2016 o 2017» se podría construir el Midcat, la nueva interconexión gasista con Francia a través de Cataluña, y explicó que el viernes pasado se celebró una «reunión bilateral a puerta cerrada» en la que se constató el «verdadero interés» por desarrollar esta nueva infraestructura.

Mientras tanto, la inversión media anual en proyectos internacionales se estima en unos 210 millones de euros, de los que unos 90 millones anuales ya están comprometidos en proyectos como el del gasoducto del Sur de Perú y el del Adriático. «Seguimos analizando además alternativas de inversión que encajen con nuestros criterios estratégicos», indicó el presidente de la compañía gasista.

En el periodo 2015-2017, Enagás prevé un crecimiento medio del beneficio del 1% cada año, desde los 406,5 millones contabilizados en 2014. Estos avances se basan en un crecimiento previsto de la demanda de gas en España del 4% de media anual, debido a la mejora del contexto económico y también a una mayor penetración del gas, incrementando el número de clientes. Esta previsión de beneficio es «prudente», según Llardén, quien recordó que las inversiones que se están haciendo ahora, tanto en España como en el extranjero, comenzarán a dar «rendimiento económico» cuando se terminen de construir, después de 2017.

Así, Enagás estima que las inversiones internacionales comprometidas hasta ahora, que actualmente aportan un 3% del beneficio, supongan un 13% de las ganancias en 2017 y el 25% en 2020. Esto será posible gracias a que los dividendos que aportan estos proyectos pasarán de los 24,5 millones de euros actuales a 60 millones en 2017 y 100 millones en 2020. Enagás espera avanzar en este proceso de internacionalización porque «tiene habilidades y conocimiento que merece la pena continuar exportando», ahora que «se están presentando oportunidades de inversión en otros países muy adecuadas para nuestra compañía«.

Este crecimiento internacional será, según Llardén, el que «asegure el crecimiento a largo plazo de la compañía» y que se centrará, según el plan estratégico, en Europa, México, Perú y Chile. Para 2015, Enagás espera mejorar en un 0,5% el beneficio neto e invertir 430 millones de euros. En términos de dividendo, Enagás prevé retribuir a sus accionistas con 1,32 euros en 2015, un 1,5% más que en 2014, y se compromete a incrementarlo un 5% anual desde entonces, hasta los 1,39 euros en 2016 y 1,46 euros en 2017.

Llardén subrayó que 2014 ha sido «un año muy importante para Enagás» debido a la «confluencia de tres factores»: la reforma gasista, que ha tenido «un impacto apreciable sobre las cuentas», la reforma fiscal y el impulso a la internacionalización, que supone inversiones importantes. Pese al impacto de la reforma, valoró que ahora «contamos con un marco regulatorio estable y predecible y esto no lo habíamos tenido nunca hasta ahora», porque ofrece una «clara predictibilidad para los próximos seis años«.

Abengoa ganó 125 millones de euros en 2014, un 24% más gracias a su diversificación geográfica de negocio

La cifra de negocios de Abengoa ascendió en 2014 a 7.151 millones de euros, un 1% menos que en el ejercicio anterior, mientras que el Ebitda consolidado fue de 1.408 millones de euros, un 11% más. De cara a este año, la compañía estima unos ingresos de entre 7.850 y 7.950 millones de euros, entre un 10% y un 11% más, así como aumentar en 2015 su Ebitda hasta un 4%, situándolo entre 1.400 y 1.450 millones y obtener un resultado neto de entre 280 y 320 millones, más del doble del obtenido durante el pasado ejercicio. Abengoa, que desarrolla soluciones tecnológicas en los sectores de energía y medioambiente, explicó que la diversificación geográfica continúa siendo «clave» en su crecimiento.

Por zonas geográficas, América del Norte y América del Sur, que representaron un 32% y un 30% de las ventas, respectivamente, continuaron siendo las regiones clave para la compañía, mientras que el peso de España sobre el total disminuye y representa un 12%, al igual que el resto de Europa, y frente a África, que representa un 9% y Oriente Medio y Asia, que acumulan un 5% de las ventas.

A 31 de diciembre pasado la deuda corporativa de Abengoa era de 2.353 millones de euros y la deuda sin recurso de 2.936 millones. Desde el pasado otoño la multinacional sevillana distingue tres categorías de deuda en sus cuentas: deuda corporativa, deuda sin recurso en proceso y deuda sin recurso. La corporativa está destinada a inversiones y asuntos corporativos y respaldada con garantías corporativas; la deuda sin recurso se utiliza para financiar proyectos a largo plazo y está respaldada por el propio proyecto, mientras que la deuda sin recurso en proceso está destinada a servir de puente a la financiación a largo plazo sin recurso y garantizada por la compañía.

La cartera total ascendió a más de 46.000 millones de euros, lo que representa un incremento interanual del 22%. Ésta se compuso de una cartera de negocio de ingeniería y construcción de 8.000 millones, que creció un 17% impulsada por una fuerte actividad de nueva contratación en el cuarto trimestre de 2014 que «continuó en el primer mes de 2015», y una cartera de ingresos futuros de concesiones de 38.600 millones, que creció un 25%.

El segmento de ingeniería y construcción experimentó una caída en ventas del 7% respecto a 2013, hasta alcanzar los 4.514 millones de euros, al tiempo que el Ebitda se mantuvo estable en 806 millones. La división de ingeniería y construcción se adjudicó contratos nuevos por valor de 5.672 millones, lo que supone un incremento del 16% frente al mismo periodo del 2013, situando la cartera de pedidos en 7.953 millones. De igual forma, la actividad de infraestructuras de tipo concesional incrementó sus ventas un 30% frente al año anterior, alcanzando los 499 millones de euros. Por último, el área de producción industrial, que incluye el negocio de bioenergía, aumentaron un 5%, hasta los 2.137 millones, y el Ebitda ascendió a 271 millones, un 13% más.

Misma remuneración que en 2013

Por su parte, el presidente de Abengoa, Felipe Benjumea, obtuvo una remuneración total de 4,48 millones de euros en el ejercicio 2014, la misma cantidad que percibió un año antes. Del conjunto de la remuneración recibida, 3,3 millones de euros correspondieron a la retribución variable a corto plazo, 1,08 millones al sueldo y 93.000 euros de dietas. Además, el vicepresidente y consejero delegado del grupo, Manuel Sánchez Ortega, percibió también 4,48 millones de euros, la misma cantidad que en 2013, distribuidos de igual forma que el presidente de la compañía.

Javier Benjumea, hermano de Felipe, recibió 2,1 millones de euros, un 12,4% más que los 1,8 millones de euros de 2013. Su retribución variable a corto plazo ascendió a 1,3 millones, el sueldo a 450.000 euros y las dietas a 93.000 euros. Además, la sociedad Aplidig logró una remuneración de 3,09 millones, la misma que un año antes. En total, el consejo de administración de la compañía recibió 15,8 millones de euros en 2014, el 2,6% más que en 2013.

Las ganancias de la austriaca OMV se desploman un 65% en 2014 por el descenso en el precio del crudo

El presidente de OMV, Gerhard Roiss, recordó, al presentar los resultados de la empresa, que 2014 fue «un año turbulento para el sector, con una caída de los precios del crudo en torno al 50% en la segunda mitad del año».

Además, la producción se vio afectada por «problemas de seguridad en Libia y Yemen», donde está presente el consorcio que cotiza en Bolsa.

Respecto a 2013, la facturación, de 35.913 millones de euros en 2014, retrocedió un 15%, mientras que el beneficio Ebit (antes de impuestos y pago de intereses) cayó un 59%, hasta los 1.054 millones de euros.

A pesar de estos datos, Roiss destacó que OMV está «sana» y preparada para un escenario «con precios de entre 50 y 60 dólares por barril de petróleo» en 2015.

El presidente aludió así al desplome del precio del «oro negro», que cayó casi un 60% entre fines de junio, cuando el barril superaba los 100 dólares, y mediados de enero, a menos de 50 dólares.

La cotización del crudo Brent, de referencia en Europa, ronda actualmente los 60 dólares por barril.

A pesar de los problemas de producción en los convulsionados países árabes, Libia y Yemen, el consorcio austríaco consiguió elevar su producción de crudo hasta los 309.000 barriles diarios (bd), desde los 288.000 bd extraídos en 2013, gracias a sus actividades en Noruega.

Iberdrola ganó 2.326,5 millones de euros en 2014, un 9,5% menos debido a la menor demanda energética y al impacto regulatorio en España

La compañía energética explicó que estos resultados se enmarcan en un entorno operativo «complejo», caracterizado por una mejora en la situación macroeconómica internacional pero que «no se concreta todavía en una mayor demanda de electricidad y gas en la Eurozona«. Además, el ejercicio 2014 se ve impactado por los efectos de las modificaciones regulatorias y fiscales en España iniciadas en 2012, que minoran los ingresos de los distintos negocios, con especial incidencia en las renovables.

No obstante, el resultado bruto de explotación (Ebitda) alcanzó los 6.965 millones de euros, un 3,1% más, gracias a la contribución de Reino Unido, Estados Unidos, Brasil y México, que compensó el peor comportamiento de España, donde el beneficio bruto de explotación cayó un 7,4%. Asimismo, la cifra de ventas disminuyó un 3,4%, al pasar de 31.077 a 30.032 millones, mientras que la eficiencia operativa mejoró un 2% gracias a la contención del gasto operativo neto recurrente. Las inversiones brutas realizadas en 2014 alcanzaron los 3.376 millones de euros, con el 90% destinado a negocios regulados, y mayoritariamente centradas en Reino Unido; se mantuvieron por debajo del flujo de caja operativo en todas las áreas.

Por negocios, el Ebitda de Redes alcanzó los 3.534,8 millones en 2014, lo que supone una mejora del 5,6% respecto al 2013. De hecho, todos los países presentaron una evolución positiva salvo España, en donde el negocio registra un Ebitda de 1.438 millones, afectado por el impacto negativo del real decreto ley 9/2013. Este efecto se compensó, en parte, por los planes de eficiencia puestos en marcha y por las inversiones realizadas en años anteriores.

Iberdrola generó 138.891 gigavatios hora (GWh) el pasado año, un 1,8% más. Por ello, el área de Generación y Clientes obtuvo un Ebitda de 2.292,2 millones de euros, un 15,4% más, debido al buen comportamiento operativo registrado a lo largo del ejercicio 2014, coincidiendo con un descenso temporal de los tributos en un 6,2%. En España, el aumento de la producción permitió compensar «los precios más bajos» del mercado eléctrico; en el Reino Unido, las centrales registraron un mejor comportamiento, y en México, el Ebitda estuvo impulsado por los nuevos contratos y las mayores ventas.

Por su parte, el Ebitda de Renovables se situó en 1.326 millones de euros, un 11,7% menos, motivado por la caída de los resultados del negocio en España, que no logra ser compensada por el buen comportamiento en Reino Unido, Estados Unidos y Latinoamérica. De hecho, en España el Ebitda del negocio descendió un 37%, hasta 420,6 millones, esto es, 247,8 millones menos que en el ejercicio anterior, debido fundamentalmente al impacto negativo de las medidas regulatorias puestas en marcha, que asciende a 339 millones, y a los menores precios. Las renovables en otros países mejoraron su Ebitda gracias a la puesta en marcha de nueva capacidad y a unos mejores índices de producción eléctrica.

En las cuentas financieras, Iberdrola registró unos menores costes de deuda tras optimizar su estructura y contabilizó unas plusvalías de 96 millones de euros vinculadas a la venta de su participación en EDP. Los tributos ascendieron a 1.581 millones de euros, un 1,5% más, tras la contabilización del bono social y mayores impuestos en el Reino Unido, que no pudieron compensar la sentencia favorable sobre derechos de CO2 en España, que supuso una contribución positiva de 113 millones de euros.

La contribución fiscal de Iberdrola superó los 5.500 millones de euros en 2014, de los que 2.440 millones son cargas fiscales propias, un 49% del beneficio antes de impuestos. Además, el grupo redujo su deuda en 2014 en cerca de 1.500 millones de euros, hasta 25.343 millones, y disminuyó su ratio deuda neta/Ebitda a 3,6 veces, en línea con su objetivo para el año 2016. Por otro lado, los resultados obtenidos por Iberdrola en 2014 permiten mantener la retribución anual al accionista en, al menos, 0,27 euros brutos por acción.

En esta línea, el consejo de administración de Iberdrola aprobaba proponer a la junta general de accionistas, que se celebrará previsiblemente en primera convocatoria el 27 de marzo en Bilbao, la ejecución de dos nuevos aumentos de capital que permitirán llevar a cabo dos nuevas ediciones del programa Iberdrola Dividendo Flexible. Con este programa, los accionistas pueden elegir entre recibir su retribución en efectivo o en acciones de la compañía.

Espera mejores resultados en 2015

En relación con los resultados presentados, el presidente de Iberdrola, Ignacio Sánchez Galán, aseguró que la energética mejorará su Ebitda y beneficio neto recurrente este año, para el que pronosticó un incremento del precio de la electricidad y un aumento de la demanda. Así lo señaló Galán, que explicó que la mejora de los resultados de Iberdrola provendrá de las inversiones acometidas, la «normalización» de los niveles de demanda y producción y por el efecto positivo del tipo de cambio. «Nos sentimos optimistas acerca de cuáles van a ser los resultados de este año», manifestó.

El ejecutivo explicó que los resultados de Iberdrola en 2014 se vieron lastrados por la menor demanda energética, especialmente en la Eurozona, y el impacto de las medidas regulatorias en España, de hasta 339 millones en renovables. En esta línea, indicó que todos los mercados en los que opera la compañía hacen una aportación positiva a los resultados salvo España por el impacto regulatorio. En cualquier caso, afirmó que los resultados obtenidos «nos permiten avanzar en el cumplimiento de los objetivos para el periodo 2014-2016», y el director Financiero y de Recursos, José Sainz, vaticinó su mejora con los beneficios futuros de un plan de eficiencia que implica una reducción de personal de 400 personas.

Asimismo, el presidente de Iberdrola valoró que se haya resuelto el déficit de tarifa estructural en España, de forma que sólo quedan pendientes «algunos ajustes», tras la ejecución de cambios regulatorios «dramáticos». Al mismo tiempo, sostuvo que la demanda ya está creciendo, aunque recordó que actualmente se utilizan aparatos más eficientes y que el crecimiento de la demanda podría verse condicionada por las medidas de eficiencia en hogares e industria.

En línea con lo indicado por Gas Natural Fenosa, desde Iberdrola auguraron también para este año un incremento del precio de la electricidad, ya que el precio en el mercado mayorista podría situarse en una media de 58 euros por megavatio hora (MWh), según indicó el director general de negocios de la compañía, Francisco Martínez Córcoles. Por último, preguntado por el posible cierre de determinadas instalaciones de carbón o ciclos combinados de gas natural en España, Galán indicó que existe un exceso de capacidad del sistema, si bien la decisión final dependerá de la regulación pendiente de aprobación y de la evolución de la demanda.

El impacto regulatorio en España y la incertidumbre en Egipto lastran el beneficio neto de Gas Natural Fenosa

Tres vías mantiene abiertas la compañía con respecto a su planta de licuefacción en Egipto: la negociación con las autoridades egipcias, a pesar de los incumplimientos de los acuerdos previos que ya han llevado a la segunda opción, la de los litigios y conflictos de tipo jurídico como el arbitraje internacional interpuesto ante el Ciadi, institución vinculada al Barco Mundial. También se contempla una tercera vía, la de hacer funcionar la planta egipcia con gas natural de las bolsas descubiertas recientemente en el Mediterráneo Oriental. Una situación de incertidumbre en cualquier caso que ha supuesto un deterioro de activos de 485 millones de euros por la participación al 50% de estos activos entre la italiana ENI y Unión Fenosa Gas.

También en el capítulo negativo, las sucesivas reformas en el sector energético español supusieron para la compañía un impacto sobre el resultado bruto de explotación (Ebitda) de 683 millones de euros, de los que 48 millones corresponden a la reforma gasista y otros 93 millones a medidas de la normativa eléctrica de 2013, aplicadas por primera vez durante 2014. En cualquier caso, el consejero delegado de Gas Natural Fenosa, Rafael Villaseca celebró que los cambios regulatorios resolvieron el problema «absolutamente dramático» del déficit de tarifa del sector eléctrico y, en ese sentido, afirmó que el desfase será «cero» en 2014.

El Ebitda de la energética se situó en 4.853 millones de euros, un 0,1% más, gracias a la contribución de la división de actividades internacionales, que mejoró en un 3,7%. La compañía energética «consiguió mantener la estabilidad y crecer en beneficios finales» a pesar de que 2014 fue «un año con tantos hechos atípicos negativos», según indicó Villaseca. Además, las cuentas de 2014 de Gas Natural se beneficiaron de la reforma fiscal, que suponen un impacto contable positivo de 325 millones de euros por unas provisiones correspondientes a la partida de impuestos de 2015 y sucesivos ejercicios que finalmente no se van a hacer efectivas.

Gas Natural Fenosa también se anotó unas plusvalías de 252 millones de euros por la venta de su filial de telecomunicaciones y ahorró 228 millones de euros gracias a su plan de eficiencia, al tiempo que la compra de la empresa chilena Compañía General de Electricidad (CGE) aportó 36 millones de euros a su resultado bruto de explotación. Las actividades internacionales ya representan el 44,7% del total de la compañía.

El pasado año, Gas Natural invirtió 1.799 millones de euros, especialmente en el área internacional, mientras que la deuda al cierre del ejercicio alcanzó los 16.942 millones, un 18,9% más, vinculada a las adquisiciones. Por otra parte, Gas Natural anunció que el dividendo correspondiente a 2014 ascenderá a 0,908 euros por acción en efectivo, 0,397 euros y 0,511 euros como dividendo complementario lo que supondrá un incremento del 1,2% con respecto a 2013, en línea con el crecimiento del beneficio obtenido en el ejercicio 2014.

Gas Natural Fenosa registró una cifra de negocios de 24.742 millones de euros el pasado ejercicio, un 1,7% más, afectada por los diversos impactos extraordinarios y por la caída de la demanda de electricidad y gas en España, una tendencia que prevé que se corrija este año. Villaseca confía en que este ejercicio suba la demanda energética, en línea con las previsiones de los operadores del sistema y cifró el incremento de la demanda en lo que va de año en un 4% en el gas y en un 3,5% en la electricidad. De la misma manera, Villaseca espera un «cierto repunte» en los precios del mercado mayorista eléctrico, que en 2014 resultó «singularmente bajista» debido a las condiciones meteorológicas.

Fersa cierra 2014 con un beneficio neto de 2 millones, un 47 % más

El ebitda (beneficio bruto de explotación) de la compañía, en cambio, se redujo en el último año en un 10,7%, situándose en 22,1 millones de euros, según informó la empresa a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).

Los ingresos de las operaciones ascendieron a 34,2 millones de euros, un 10% menos, y los gastos de explotación cayeron un 9%, hasta los 12 millones de euros.

Fersa atribuyó el descenso de los ingresos al impacto de la reforma energética, a la disminución del precio de venta de la energía, a una menor producción (del 6%, básicamente en los parques de España) y a la venta del parque eólico de Kisielice, en Polonia, el pasado 7 de marzo.

La compañía catalana, presidida por el exconseller de Economía Francesc Homs, tiene actualmente negocios en España, Francia, Polonia, Estonia, Montenegro, India y Panamá.

El desplome del precio del petróleo lastra el beneficio neto de Total

Al cierre del 2014, la facturación de Total cayó un 6% con respecto a 2013, hasta los 236.120 millones de dólares. Por ello, el resultado neto ajustado de la sexta petrolera del mundo por volumen de negocio retrocedió un 10%, hasta los 12.840 millones de dólares. «Con la caída del precio del Brent, la industria petrolera entra en un nuevo ciclo», apuntó Total, que publicó una depreciación de activos de 6.500 millones de dólares en el cuarto trimestre, esencialmente ligados a la producción de arenas bituminosas en Canadá, el gas no convencional en Estados Unidos y el refinado en Europa.

Además, el grupo continuará con su plan de reducción de inversiones, que volverán a caer en 2015 en torno al 10% para situarse en el ámbito de los 24.000 millones de dólares frente a los 26.000 millones de dólares en 2014 y frente a los 28.000 millones de dólares en 2013. Para ello, destinará menos recursos a sus explotaciones maduras en el mar del Norte y en África occidental y, además, recortará en un 30% su presupuesto de explotación, hasta los 1.900 millones de dólares.

Cuando se cumplen cien días desde que asumió la presidencia Patrick Pouyanné, tras la muerte en accidente de avión en Rusia de Christophe de Margerie, Total también anunció que congelará la contratación de personal en sus actividades de exploración, producción y refinado. «Congelar quiere decir una división por cinco o por seis de nuestra contratación en las prospecciones, el refinado petroquímico y los servicios de mercadotecnia en Europa», precisó Pouyanné. En esa lógica se inscribe la reducción de 2.000 empleados en la sede corporativa para 2017, aunque la reestructuración no implicará despidos, puntualizó el grupo.

Todo ello contribuirá a que el grupo francés aporte «una respuesta fuerte e inmediata generando 8.000 millones de dólares de tesorería en 2015», indicó la petrolera. A pesar de la sensible caída de los precios del petróleo por un aumento de la oferta ligada a la producción de gas no convencional y a una demanda aún endeble por la crisis económica internacional, Total espera elevar su producción en este año hasta el equivalente de 2,3 millones de barriles por día, frente a los 2,15 millones de 2014 y los 2,28 millones de un año antes.

En concreto, en el cuarto trimestre del 2014, la ganancia neta de Total, que excluye ciertos elementos como las existencias de petróleo o las participaciones financieras, fue de 2.801 millones de dólares frente a los 3.385 millones del mismo período de 2013, lo que supone una disminución del 17%. El volumen de negocios de Total en ese último trimestre del año se redujo un 19%, hasta 52.511 millones de dólares.

La tensa situación entre Bruselas y Moscú a propósito del conflicto en Ucrania tampoco beneficia a Total, con fuertes inversiones en Rusia. El director financiero del grupo, Patrick de la Chevardière, había previsto una pérdida de 1.500 millones de dólares de beneficio neto por cada 10 dólares de caída del precio del barril de Brent, que perdió cerca de un 50% de su valor en los últimos seis meses. El consejo de administración propuso un dividendo de 2,44 euros por acción correspondiente a 2014, es decir, un alza del 2,5% con respecto al ejercicio precedente.

EDF elevó un 5,2% sus beneficios hasta los 3.701 millones en 2014

Los resultados de 2014 integraron 1.151 millones de euros negativos de elementos excepcionales (en el ejercicio anterior fueron de 600 millones de euros) que corresponden esencialmente a pérdidas de valor de activos en el Benelux y en Alpiq, así como al efecto positivo de la reforma de las pensiones de 2013, según indicó EDF.

El resultado bruto operativo (Ebitda) progresó un 6,5% hasta los 17.279 millones de euros (12,6 %), de los cuales 12.198 millones de euros correspondieron a su actividad en Francia, 1.941 millones de euros al Reino Unido (-8,5%), 886 millones de euros a Italia (-17,3%) y 632 millones de euros al resto del mundo (15%).

La compañía explicó que su producción eléctrica en Francia el pasado año fue de 460,3 teravatios hora, 1,5 teravatios hora menos que en 2013, una evolución en términos relativos positiva, teniendo en cuenta que el consumo en el país cayó un 7% debido sobre todo a un invierno más suave.

Por tipos de generación, la electricidad de origen nuclear subió un 3% a 415,9 teravatios hora, lo que supone más que la horquilla de 410-415 que se había fijado por un parón de los reactores más breve de lo previsto.

La producción hidroeléctrica se redujo un 12% a 37,5 teravatios hora, lo que constituye «una vuelta a la normal» después del nivel «excepcional» que se había alcanzado en 2013 por condiciones hidrológicas «muy favorables». En las centrales térmicas francesas, sólo se generaron 6,9 teravatios hora, es decir, 8,7 menos que en 2013.

La facturación global de EDF aumentó un 1,3% en cifras absolutas a 72.874 millones de euros, aunque en términos orgánicos bajó un 1,4%.

Las inversiones netas de 12.000 millones de euros se situaron ligeramente por encima de los 11.800 millones de 2013. Su endeudamiento financiero aumentó a 34.200 millones de euros a finales de 2014, frente a los 33.400 millones un año antes.

El consejo de administración propondrá a la junta el pago de un dividendo de 1,25 euros por acción a cuenta de 2014, lo que significa un 52% del resultado neto corriente.

Para 2015, EDF se fijó como objetivos financieros un alza del Ebitda de entre el 0% y el 3% en términos orgánicos, un nivel de deuda en términos de Ebitda entre 2% y 2,5% (era de 2% al acabar 2014) y la distribución del 55% al 65% del resultado neto corriente.