Mubadala, fondo soberano de Abu Dhabi y único accionista de Cepsa, estudia vender parte de su participación de la petrolera

EFE.- La compañía de inversiones estatal del emirato de Abu Dhabi Mubadala Investment Company, único accionista de Cepsa, está valorando vender parte de su participación en la petrolera. Según fuentes de la petrolera, Mubadala ha empezado a mirar diferentes opciones para esa venta, bien dando entrada a algún socio o a otros inversores, o bien sacando a bolsa a Cepsa. Asimismo, precisaron que aún no hay nada cerrado y que la situación del proceso para vender parte de Cepsa esta arrancando.

La Compañía Española de Petróleos (Cepsa) fue fundada en 1929 en España y fue la primera empresa petrolera privada del país. En 2011, el fondo de inversión estatal de Abu Dhabi, IPIC, compró todas las acciones de Cepsa y se convirtió en su único propietario. Más tarde, en 2017, los fondos IPIC y Mubadala fueron fusionados para formar una nueva compañía, Mubadala Investment, actual propietario de Cepsa. Cepsa tiene una participación del 42% en Medgaz, la sociedad que opera el gasoducto entre Argelia y España y en la que también participan la petrolera estatal argelina Sonatrach y Gas Natural Fenosa.

Moody’s rebaja su perspectiva sobre la deuda de Iberdrola pero mantiene su nota

EFE.- La agencia de calificación crediticia Moody’s ha decidido mantener la nota de la deuda de Iberdrola en Baa1, lo que se conoce comúnmente como aprobado alto, y rebajó la perspectiva de positiva a estable. Según Moody’s, la decisión de cambiar la perspectiva de las calificaciones de Iberdrola se debe a la rentabilidad más débil que tuvo en 2017 y refleja la opinión de la agencia de que es poco probable que Iberdrola logre un perfil financiero consistente para elevar su nota dentro de los próximos dos años.

No obstante, Moody’s cree que la reciente actualización del plan estratégico del grupo para el período 2018-2022 continuará mejorando el perfil de riesgo comercial del grupo, aunque ve posibles «vientos en contra» para la recuperación de ganancias. Estima que el crecimiento de la deuda por el programa de inversiones se reflejará en una posición en la relación de fondos procedentes de operaciones (FFO) sobre deuda neta superiores en los próximos años, consistente con la nota Baa1 dada a Iberdrola, su estrategia y su mix de negocios. Por ello, considera que la perspectiva estable es consistente con su calificación de Baa1.

Atlantica Yield perdió 111,8 millones de euros en 2017 por la reforma fiscal en Estados Unidos

EFE.- Atlantica Yield, sociedad de la que la española Abengoa vendió a la compañía canadiense Algonquin un 25% de la participación del 41,5% que tiene, perdió en 2017, por la reforma fiscal en Estados Unidos, 111,8 millones de dólares (90,2 millones de euros), muy por encima de los 4,8 millones de dólares (3,9 millones de euros) que perdió en 2016.

El beneficio bruto de explotación (ebitda) aumentó un 2% respecto al 2016 y alcanzó los 786,6 millones de dólares (634,6 millones de euros), según indicó Atlantica Yield. Los ingresos fueron de 1.008,4 millones de dólares (813,4 millones de euros), un 4% más que en 2016, y superaron, por primera vez, la cota de los mil millones. Atlantica Yield añadió que el acuerdo con Abengoa-Algonquin Global Energy Solutions (AAGES), la sociedad creada en virtud del acuerdo entre Abengoa y Algonquin, le hace estimar un objetivo de crecimiento del dividendo por acción del 8% al 10% en tasa media anual hasta 2022.

Esperanzas en la futura AAGES

Además, espera que los acuerdos con AAGES y Abengoa sean la fuente principal de crecimiento y recibir activos contratados que representen entre 600 y 800 millones de dólares en valor patrimonial en los próximos dos ó tres años. También pronostica una tasa anual compuesta de crecimiento (CAGR), que mide el retorno de la inversión, en dividendos por acción de dos dígitos hasta 2019 con la cartera existente, alcanzando un pay-out (porcentaje de beneficio destinado a dividendo) del 80%. El grupo de ingeniería y energía Abengoa, que acomete un plan de reestructuración tras salvarse de llegar al concurso de acreedores, anunció recientemente la venta del 25% de Atlantica Yield a Algonquin por 607 millones de dólares (unos 490 millones de euros).

Abengoa pretende vender lo que le queda de Atlantica a otros inversores si Algonquin no ejecuta su opción de compra

EFE.- El presidente de Abengoa, Gonzalo Urquijo, asegura que están abiertos a vender a otros inversores el 16,5% que les resta de Atlantica Yield, después de la venta de un 25% a la canadiense Algonquin, que tiene una opción de compra sobre el porcentaje que queda. Urquijo confirmó el interés de otros inversores por la venta de ese 16,5% que le resta por desprenderse a Abengoa.

El presidente de la compañía ha recordado que Algonquin, la empresa de servicios y energías renovables a la que ha vendido el 25% de filial en Estados Unidos por 607 millones de dólares (unos 492 millones de euros), tiene una opción de compra sobre el resto de la participación de Abengoa, que se elevaba en total al 41,5%, que puede ejercer. No obstante, ha señalado que están abiertos a otros compradores y han tenido acercamientos a otros potenciales inversores o interesados en hacerse con el porcentaje restante, aunque ha señalado que la prioridad es Algonquin, con la que cerraron la venta de un 25% de la filial y «eso es en lo que estamos ahora».

En cuanto a la estructura de capital de Abengoa, que consiguió eludir el concurso de acreedores tras llegar a un acuerdo con la banca para reestructurar la importante deuda que tenía, Urquijo señaló que no es ahora una de las preocupaciones. Respecto a cómo dar más valor a la acción de Abengoa, cotizando a 0,0113 euros, Urquijo resaltó que se avanza en el cumplimiento del plan de reestructuración, se está incrementando la rentabilidad, la cartera de pedidos y los proyectos, al tiempo que se reduce la deuda y sus gastos asociados, aunque no haya ningún plan específico para los accionistas.

Repsol logra un beneficio de 2.121 millones en 2017, un 22,2% más y el mayor de los últimos 6 años

Europa Press / EFE.– Repsol obtuvo un beneficio neto de 2.121 millones de euros en 2017, lo que supone un incremento del 22,2% respecto al alcanzado un año antes, según comunicó a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV). En un escenario de precios bajos de las materias primas, la compañía, apoyada en las fortalezas de sus negocios y sus planes de eficiencia, alcanzó el mayor resultado neto de los últimos 6 años.

El modelo de negocio integrado de Repsol facilitó que la compañía afrontase de «manera satisfactoria» la coyuntura y aprovechase la leve recuperación de los precios del crudo y del gas a partir de junio. Repsol ha destacado que la gestión con foco en la creación de valor y la flexibilidad y diversificación que proporciona la integración de los negocios impulsaron el beneficio neto ajustado, que creció un 25,1%, hasta los 2.405 millones de euros, frente a los 1.922 millones de 2016, también el más alto de los últimos seis años.

La buena marcha de los negocios de Repsol se tradujo en una subida del 29% del resultado bruto de explotación (Ebitda), que con 6.723 millones de euros, logró el mejor dato del último quinquenio. Paralelamente, Repsol redujo su nivel de deuda un 23%, hasta situarla en 6.267 millones de euros al cierre del ejercicio. La ejecución del programa de sinergias y eficiencias generó cerca de 2.400 millones de euros de ahorro, con lo que Repsol batió las expectativas y superó un año antes de lo previsto el objetivo que se había fijado para 2018 en el plan estratégico, que era de 2.100 millones de euros.

El resultado del área de Upstream (exploración y producción) se situó en 632 millones de euros, lo que supone un aumento de 580 millones de euros respecto a los 52 millones que se obtuvieron en 2016, lo que supone multiplicar por 12 su resultado. A este aumento contribuyeron las medidas adoptadas en su plan de sinergias y eficiencias, el reinicio de la actividad en Libia y la subida de los precios internacionales de referencia. Estos resultados del negocio de exploración y producción se registraron con una cotización media de las materias primas que se mantuvo en un rango bajo durante 2017, con 54,2 dólares por barril en el caso del Brent y 3,1 dólares por Mbtu en el Henry Hub.

Además, la compañía presidida por Antonio Brufau aumentó su producción un 0,7% respecto al 2016 hasta alcanzar una media de 695.000 barriles equivalentes de petróleo diarios, la mayor producción desde 2011 y superando el objetivo de 680.000 barriles marcado para 2017, gracias al reinicio de la actividad en Libia, a los incrementos obtenidos en distintos activos y a la puesta en marcha de proyectos como Juniper (Trinidad y Tobago), Lapa y Sapinhoa (Brasil )y Shaw, Cayley y Flyndre (Reino Unido).

En cuanto al Downstream (refino, química y marketing), el resultado, de 1.877 millones de euros, se mantuvo en línea con los de ejercicios anteriores, cayendo apenas un 0,3% respecto a los 1.883 millones del 2016, lo que referencia a esta división de negocio como el «gran generador» de caja de la compañía. Durante 2017, las áreas de Refino, Marketing, Trading y Gas&Power aumentaron sus resultados, el área de Lubricantes incrementó sus ventas y el área de Química mantuvo la robustez de los dos últimos años. La petrolera situó su margen de refino el año pasado en los 6,8 dólares por barril, un 7,9% superior a los 6,3 dólares por barril obtenidos en el ejercicio 2016.

Retribución del consejo de administración

Por otro lado, los principales directivos de Repsol, Antonio Brufau y el consejero delegado Josu Jon Imaz, ganaron 3,08 millones y 4,03 millones de euros, respectivamente, en 2017, un 5,8% más en el caso de Brufau y un 34% más en el de Imaz. En el caso de Antonio Brufau el total de la retribución la percibió en metálico y en el de Imaz 3,84 millones fueron en metálico y 187.000 euros en acciones. Además, en el caso de este último se contabilizan 254.000 euros de aportación a sistemas de ahorro, en los que ya acumula 1,62 millones de euros.

El presidente de Repsol, Antonio Brufau, percibió en 2017 2,5 millones de euros de remuneración fija y 589.000 euros por otros conceptos. Por su parte, el CEO Josu Jon Imaz recibió 1,2 millones en concepto de sueldo, 177.000 euros de remuneración fija y 1,44 millones de euros en retribución variable a corto plazo y 821.000 euros en variable a largo.

En cuanto a otros miembros del consejo de administración de Repsol, Gonzalo Gortázar, que es consejero delegado también de Caixabank, percibió 376.000 euros en 2017 en Repsol, un 22% más que el año anterior. El exvicepresidente de Caixabank, Antonio Masanell, que a finales del año pasado renunció a su puesto en el consejo de Repsol, percibió 243.000 euros en 2017 como consejero de la petrolera, el triple que un año antes, en que percibió 81.000 euros. Por su parte, el presidente de Caixabank, Jordi Gual, que fue nombrado en diciembre consejero externo dominical en sustitución de Masanell, no ha tenido tiempo de recibir ninguna cantidad.

Mario Fernández, que el pasado 20 de febrero dimitió como consejero de Repsol tras conocer que el Tribunal Supremo había desestimado el recurso que interpuso contra una sentencia que lo condenó por un delito de apropiación indebida en su etapa de presidente de Kutxabank, percibió en la petrolera el año pasado 309.000 euros, lo mismo que en 2016. El consejo de administración de Repsol recibió en conjunto 14,46 millones de euros en 2017, un 13,6% más que el año anterior.

Moody’s cree que Repsol tendrá más flexibilidad financiera para invertir en crecimiento orgánico tras la venta de Gas Natural Fenosa

EFE.- La agencia de calificación de riesgos Moody’s ha señalado que la venta por parte de Repsol del 20% del capital que mantenía en Gas Natural Fenosa aumentará la flexibilidad financiera de la petrolera a pesar de que caerán sus ingresos por dividendos, que en 2017 alcanzaron los 195 millones de euros. El análisis de Moody’s plantea que lo más recomendable es que Repsol reinvierta «prudente y gradualmente» los ingresos de esta operación en impulsar el crecimiento orgánico de la empresa.

Moody’s ve más conveniente está opción que realizar una gran adquisición o devolver efectivo a los accionistas. Este análisis llega tras el acuerdo de la petrolera con la sociedad Rioja Bidco, controlada por la gestora británica de fondos CVC y en la que tomará una participación Corporación Financiera Alba (Grupo March), para venderle el 20,072% del capital de Gas Natural Fenosa por 3.816,3 millones de euros. Con este acuerdo, que proporcionará a Repsol una plusvalía de unos 400 millones, el grueso del capital de Gas Natural quedará repartido entre Criteria, el fondo estadounidense Global Infrastructure Partners (GIP) y Rioja Bidco.

Repsol completa su salida de Gas Natural Fenosa con la venta del 20% a CVC y Alba por 3.816 millones

EFE / Europa Press.- Repsol cerró con la sociedad Rioja Bidco Shareholdings, una sociedad controlada por la gestora británica de fondos CVC y en la que tomará una participación la Corporación Financiera Alba (Grupo March), la venta por 3.816,31 millones de euros de 200,85 millones de acciones de Gas Natural Fenosa, equivalentes al 20,072% del capital, según comunicó la petrolera a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).

Con este acuerdo, que proporcionará a Repsol una plusvalía de unos 400 millones de euros, el grueso del capital de Gas Natural Fenosa quedará repartido entre Criteria, el holding de participadas de La Caixa, con un 24,43%; el fondo estadounidense Global Infrastructure Partners (GIP), con un 20%; y Rioja Bidco, con un 20,072%, participando indirectamente el Grupo March. El acuerdo fija un precio de 19 euros por acción, el mismo que abonó hace más de un año GIP, lo que supone una prima del 4% respecto a la cotización de Gas Natural Fenosa (18,28 euros). Asimismo, los títulos de la gasista subían un 1,83%, hasta 18,61 euros, mientras que las acciones de Repsol se revalorizaron un 0,75%, hasta 14,12 euros.

El cierre de la operación está supeditado al cumplimiento de una serie de condiciones, entre ellas que Rioja Bidco cuente con 3 miembros en el consejo de administración de Gas Natural, en sustitución de los 3 representantes actuales de Repsol. Además, Rioja, Criteria y GIP deberán firmar un contrato de accionistas no más tarde del 22 de marzo. La operación está supeditada también al visto bueno, en un plazo no superior a 6 meses desde la firma del contrato, de las autoridades competentes de México, Corea del Sur, Japón y Alemania; y a la no oposición expresa o tácita del Banco Central de Irlanda a la compra indirecta de una participación significativa en la entidad Clover Financial & Treasury Services.

La Corporación Financiera Alba, la sociedad de cartera del Grupo March, anunció un acuerdo para invertir 500 millones en Rioja Bidco. De completarse la transacción, Alba contará con una participación del 25,7% en Rioja Bidco, lo le permitirá controlar de forma indirecta un 5,1% del capital de Gas Natural. Además de la inversión, Alba asumirá la parte correspondiente de la deuda contraída por Rioja Bidco para comprar el 20,072% de Gas Natural. Según fuentes financieras, de los 3.816,3 millones que Rioja Bidco desembolsará en esta operación, en torno a la mitad la pagará con recursos propios, de CVC y de Alba, y la otra mitad con deuda. En consecuencia, Alba tendría que asumir el 25,7% de 1.900 millones de deuda.

Este traspaso en el accionariado de Gas Natural Fenosa, que dejará en manos así de dos fondos de inversión el 40% de su capital, se produce en un momento de cambios en el grupo energético. El accionariado de Gas Natural Fenosa ha experimentado cambios sustanciales desde 2016, cuando La Caixa y Repsol pusieron fin al pacto parasocial con el que dirigían la compañía desde 2000. En consecuencia, Repsol y La Caixa, a través de Criteria, vendieron un 20% del capital a GIP por 3.803 millones. Concretamente, GIP compró un 10% a Repsol y otro 10% a Criteria, de forma que la petrolera rebajó su participación en Gas Natural Fenosa del 30% al 20% y Criteria pasó del 34,4% al 24,4%.

La entrada del fondo estadounidense conllevó cambios en la cúpula de la compañía ya que Isidro Fainé pasó a ocupar la presidencia. Sin embargo, el 6 de febrero Gas Natural Fenosa anunció que el entonces consejero delegado de Abertis, Francisco Reynés, hombre de confianza de La Caixa y de Fainé, tomaría las riendas de la compañía gasista como presidente ejecutivo. En consecuencia, Fainé pasó a ocupar la presidencia de honor de la compañía y Rafael Villaseca cesó como consejero delegado.

Ahora se produce la entrada de CVC, un clásico inversor en el mercado español, donde actualmente está presente en el capital de compañías como CLH, donde es el primer accionista con un 25%, Cortefiel, Deoleo o Vitalia Home, además de haber pasado por Abertis, El Árbol o el operador R, entre otras. El desembarco de CVC en el capital de Gas Natural le permitirá influir en el plan estratégico que tiene previsto elaborar la gasista de la mano de su nuevo primer ejecutivo en el primer semestre de este año.

La marcha total de Repsol de Gas Natural Fenosa era un secreto a voces desde que la compañía confirmó en enero que había recibido «muestras de interés» de diversos inversores por su paquete accionarial. Según explicó entonces, dentro del Plan Estratégico 2016-2020 y «como parte de una gestión dinámica permanente del portafolio de negocios», Repsol analiza «regularmente» distintas alternativas. La salida de la petrolera del capital de la gasista pone fin a una relación que se remontaba a 1991, cuando se constituyó Gas Natural SDG, fruto de la fusión entre Catalana de Gas y Gas Madrid y de los activos de distribución de gas canalizado aportados por Repsol, todavía perteneciente al Instituto Nacional de Hidrocarburos.

Desde 2016 Repsol había dejado claro que su participación en Gas Natural Fenosa había dejado de ser considerado el activo estratégico de siempre para pasar a ser «un activo más, sometido a cualquier tipo de reflexiones en todo momento». «No tenemos ninguna fidelidad a ningún activo», señaló el presidente de Repsol, Antonio Brufau, en la pasada junta de accionistas. Repsol, que presentará la próxima semana sus resultados de 2017, actualizará en esta primera mitad del año su plan estratégico, que lanzó en octubre de 2015 y que está vigente hasta 2020, con el fin de adaptar su hoja de ruta.

Galán critica los planteamientos «a corto plazo» de los últimos ministros de Energía mientras Iberdrola cuestiona a Siemens en Gamesa

EFE.- Iberdrola, propietaria del 8% del capital de Siemens Gamesa, ha pedido que la compañía germano-española incluya en el orden del día de su próxima junta de accionistas un punto para ratificar que la sede social de la compañía seguirá en España. Por su parte, el presidente de la compañía eléctrica, Ignacio Sánchez Galán, ha lamentado que «desgraciadamente» los últimos ministros de energía actúen con planteamientos «a corto plazo» en un negocio, como el energético, que «necesita planificación a largo plazo».

«Por necesidades de corto plazo no se está haciendo una planificación de largo: qué energía necesitamos, cómo la vamos a producir y cómo la vamos a pagar», ha señalado Galán. El presidente de Iberdrola subrayó que, cuando una empresa va a invertir 32.000 millones de euros en el periodo 2018-2022, entre 7.000 y 8.000 millones en España, los accionistas piden que no haya cambios regulatorios «a mitad de camino» y que haya “una predictibilidad permanente».

El primer ejecutivo de Iberdrola ha destacado, no obstante, que el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, ha dado «un tremendo paso» al crear un grupo de expertos sobre transición energética, la Comisión para la Transición Energética, y promover una ley de cambio climático y transición energética. En su opinión, estas dos iniciativas «pueden sentar las bases del futuro modelo energético».

Tensión con Siemens en Gamesa

Según comunicó Siemens Gamesa a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), el nuevo punto incluido por Iberdrola en su próxima junta de accionistas pide que se detallen las medidas para garantizar el cumplimiento de los compromisos asumidos sobre el mantenimiento en España del domicilio social, la sede efectiva y operativa de la sociedad matriz. Además, Iberdrola ha incluido otro punto para reforzar el gobierno corporativo de Siemens Gamesa y proteger a los accionistas minoritarios frente al mayoritario (Siemens).

El pasado año Gamesa y la división eólica de Siemens se fusionaron en una nueva sociedad en la que la compañía alemana controla el 59% y que, según los términos en los que se formuló la operación, tendría su sede en Zamudio (Vizcaya), la sede tradicional de Gamesa. La junta, que se celebrará el 23 o el 24 de marzo próximos, también tendrá que aprobar un plan de incentivos para el periodo 2018-2020 destinado a los directivos de la compañía.

El fondo BlackRock eleva al 5% su participación en Iberdrola y se convierte en el tercer máximo accionista

Europa Press.– El gestor de fondos internacionales BlackRock se ha erigido en el tercer máximo accionista de Iberdrola tras elevar su participación en la petrolera hasta el 5%. Según consta en los registros de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), BlackRock se hizo con casi un 2% del capital de Iberdrola, para controlar el 5,006%, desde la participación del 3,023% que poseía.

En concreto, la mayor gestora de fondos del mundo posee 322,34 millones de títulos de la energética, con un valor de más de 1.960 millones de euros. De esta manera, BlackRock se convierte en el tercer principal accionista de Iberdrola, tan sólo por detrás de Qatar Investment, que posee un 8,5% del capital de la energética, y Capital Research, que cuenta con el 5,11%. El cuarto principal accionista de Iberdrola es Norges Bank, el fondo soberano noruego, que elevó su presencia en el capital de la compañía hasta el 3%.

BlackRock también apostó recientemente por otra de las compañías energéticas del Ibex 35, Repsol, en la que aumentó su participación hasta el 5%, erigiéndose en su tercer máximo accionista, tan solo por detrás de Caixabank, que cuenta con una participación del 9,6%, y de Sacyr (8%). La gestora de fondos estadounidense está también presente en el capital de otras empresas del Ibex, como Telefónica, donde posee una participación de más del 6%, Red Eléctrica (3,1%) o Enagás (3,2%), entre otras.

Moody’s advierte que los ajustes retributivos para el sector eléctrico y gasista afectarán negativamente a los ratings

Europa Press.– Moody’s ha advertido que de convertirse en leyes las medidas anunciadas por el ministro de Energía, Álvaro Nadal, para ajustar la retribución de las redes tanto de electricidad como de gas, así como de incrementar los requisitos para el cierre de plantas de carbón y nucleares, «tendrán implicaciones crediticias negativas para el sector«.

En un informe sobre la calidad crediticia de las compañías financieras en España para 2018, la agencia de calificación subraya que estas decisiones impactarían «en especial» en REE (Baa1 estable), el operador de la red eléctrica, así como en los principales operadores de plantas nucleares, que son Endesa (Baa2 estable) e Iberdrola (Baa1 positiva). Para Moody’s, «las inquietudes del Gobierno en torno a la asequibilidad de la energía han propiciado una posible carga regulatoria adicional».

Para el sector de petróleo y gas, la agencia considera que la recuperación de los precios del petróleo y los ahorros en los costes mejorarán las condiciones crediticias. Así, destaca que Repsol (Baa2 estable) se beneficiará del crecimiento de sus operaciones de exploración y producción (upstream) y de las operaciones de refinería y comercialización (downstream) «históricamente sólidas«. Asimismo, Moody’s pronostica un crecimiento real del PIB del 2,3% en España, lo que «respaldará la calidad crediticia de las empresas este año».

«Una mayor recuperación económica generalizada en sus principales mercados finales, Europa y América Latina, también beneficiará a las empresas españolas con presencia internacional», destaca la vicepresidente-senior analista de la agencia, Laura Pérez. No obstante, considera que las tensiones políticas y la normalización de la política monetaria seguirán siendo «factores relevantes» desde el punto de vista del crédito que afectarán a la mayoría de sectores corporativos.

A este respecto, el escenario central de Moody’s es que Cataluña seguirá formando parte de España. No obstante, las tensiones políticas y la incertidumbre «probablemente pesarán en el sentimiento económico y el gasto del consumidor y, por tanto, limitarán la demanda, lo cual conlleva implicaciones crediticias negativas para las empresas españolas», añade la agencia. Por otra parte, señala que la política monetaria seguirá siendo favorable y los bajos spreads de crédito respaldarán el coste de financiación y refinanciación de las empresas en 2018. Por ello, cree que la subida de los tipos de interés producirá un aumento inmediato del coste marginal de la deuda en el momento de la emisión.