El CSN pide a Cofrentes un análisis sobre las causas de su último incidente

EFE.- El Consejo de Seguridad Nuclear (CSN) ha trasladado a la central de Cofrentes la necesidad de elaborar un análisis de las causas de la parada programada de su actividad tras un desequilibrio de caudales de agua entre el lazo A y B del sistema de alimentación, que sufrió el pasado 31 de octubre.

Asimismo, Iberdrola, como titular de la central valenciana, deberá elaborar y remitir un programa detallado de actividades para poder localizar y extraer las partes sueltas de la válvula del lazo A, incluyendo las previsiones de dosis asociadas a los trabajos que se planifiquen, antes de proceder al arranque de la central.

El comunicado del CSN señala que el análisis debe incluir una evaluación detallada de los componentes de seguridad potencialmente afectados, particularmente la «inadecuada actitud cuestionadora que llevó a no realizar una revisión y el mantenimiento de la válvula durante la última parada de recarga».

El pleno del Consejo de Seguridad Nuclear ha sido informado por las direcciones técnicas del organismo, en su sesión ordinaria de este miércoles, de la situación del sistema de agua de alimentación de la central nuclear de Cofrentes tras el análisis de la información disponible sobre el asunto.

Esta central notificó al CSN una parada no programada para inspeccionar las líneas y las válvulas del lazo A del sistema de agua de alimentación, al observar, en el arranque tras la parada de recarga del mes pasado, un desequilibrio de caudales de agua entre el lazo A y el lazo B, que aportan agua a la vasija para producir el vapor necesario para mover la turbina.

Como resultado de las inspecciones llevadas a cabo por Iberdrola se han identificado defectos en una válvula, que han dado lugar al desprendimiento de fragmentos de esa válvula en el sistema de agua de alimentación que, según el CSN, no han podido ser recuperados.

La central nuclear de Vandellós II notifica la actuación inadecuada de un relé

Servimedia.- La central nuclear de Vandellós II, ubicada en la provincia de Tarragona, ha notificado la actuación inadecuada de un relé del sistema esencial de agua enfriada, que refrigera las salas de equipos relacionados con la seguridad.

Según informó el Consejo de Seguridad Nuclear (CSN), en la prueba de arranque del tren A del sistema esencial de agua enfriada, que refrigera salas de equipos relacionados con la seguridad, se ha producido una parada automática del mismo, debido a la actuación de un relé temporizado de protección de dicho sistema, que provoca su parada por baja presión en la aspiración del compresor.

La causa de la actuación inadecuada del relé ha sido un ajuste inadecuado de la temporización del mismo.

La incorrecta temporización ha impedido recuperar la situación transitoria de baja presión en la aspiración del compresor que se produce bajo determinadas condiciones ambientales exteriores.

En las pruebas anteriores de los meses de agosto, septiembre y octubre, debido a las temperaturas exteriores más elevadas, quedó inadvertido el error de calibración.

El suceso, que no ha tenido impacto en los trabajadores, en el público ni en el medio ambiente, se clasifica con nivel 0 en la Escala Internacional de Sucesos Nucleares y Radiológicos (INES).

Foro Nuclear alerta de que prescindir de la energía nuclear a corto plazo pondría en riesgo el suministro de electricidad

Europa Press.- El presidente del Foro de la Industria Nuclear en España, Ignacio Araluce, advierte de que prescindir de la energía nuclear a corto plazo puede poner en riesgo la seguridad y estabilidad del sistema eléctrico español, por lo que ha defendido el papel de esta energía durante la transición energética y ha llamado a los políticos a propiciar la viabilidad económico-financiera de las centrales nucleares mientras dure ese periodo de transición.

Araluce, quien ha participado en la Ponencia encargada de las relaciones con el Consejo de Seguridad Nuclear (CSN), ha explicado que la producción eléctrica total de España es de unos 260 TWh, de los que 60 TWh son producidos por el parque nuclear. El resto se reparte entre renovables, energía hidráulica y las fuentes emisoras de CO2, como el carbón, el gas y el fuel.

Con estas cifras, Araluce señala que cumplir con los tratados medioambientales significa «duplicar la actual capacidad de generación renovable del sistema, unos 30.000 MW», que es algo «factible pero difícil de lograr». Pero, además, si se quiere prescindir de las nucleares en este proceso, la capacidad renovable a instalar debería elevarse a los 60.000 MW, un sistema que necesitaría de una instalación de enorme capacidad de almacenamiento a gran escala. «Ambas actuaciones requerirían de una inversión muy significativa, de un desarrollo tecnológico rapidísimo, y de un desarrollo de redes y de potencia de respaldo difíciles de asumir totalmente en ese horizonte temporal», ha advertido Araluce.

Por ello, el experto subraya que España «no puede ser ajena a la continuidad de la operación del parque nuclear» y ha llamado a poner en perspectiva la Ley de Cambio Climático y Transición Energética y el Plan Integral de Energía y Clima, ambos en proceso de elaboración, destacando el papel de la energía nuclear como «mejor manera de transitar de forma eficiente, ordenada, fiable y competitiva hacia un modelo descarbonizado y fundamentalmente renovable, por la complementaridad de ambas tecnologías«.

En cuanto a una de las principales críticas que los opositores a esta energía hacen de su uso, su seguridad, Araluce ha asegurado que todas las instalaciones funcionan «de forma segura» y que las centrales «están permanentemente supervisadas por el organismo regulador» lo que, a su juicio, constituye «la mayor garantía del cumplimiento de la normativa nacional e internacional establecida«.

Ensa ensaya a tamaño real el ensamblaje de la futura cámara de vacío del Proyecto ITER de fusión nuclear

Europa Press.- La empresa estatal Equipos Nucleares (ENSA), ha ensayadoen Cantabria,a tamaño real, el ensamblaje de la cámara de vacío, conocida como vacuum vessel, que será parte nuclear del Proyecto internacional ITER, una ambiciosa iniciativa en la que se busca probar la generación de energía de fusión nuclear a nivel comercial.

Para ello, en la fábrica de ENSA en Maliaño (Camargo) han fabricado una maqueta que se utiliza solamente «para entrenar» ya que esta empresa española tiene la misión de ensamblar las distintas partes de esta cámara de vacío que fabrican en otras empresas, procedentes de los 35 países que participan en este proyecto internacional que busca demostrar que la energía de fusión nuclear es posible. Una vez terminada la fase de desarrollo y prueba, en los próximos 4 años ENSA ensamblará en Francia las distintas partes de esta cámara de vacío o contenedor en cuyo interior se realizarán las reacciones de fusión, según ha explicado el responsable de desarrollo de negocio de ENSA, Rubén Moreno.

Moreno ha explicado que la empresa ha firmado un contrato para desarrollar «toda la ingeniería necesaria» para la instalación de los 9 sectores que formarán el vacum vessel en Caradache (Francia). Asimismo, ha precisado que ENSA se encargará de desarrollar los procedimientos de soldadura, las mediciones, los ensayos no destructivos de soldadura (visuales, Ultrasonidos, Radiografías, Helio), el mecanizado pero también de todos los utillajes y robots necesarios para acometer estos trabajos. Precisamente, destacó que la futura cámara de vacío, dentro de la cual se tratará de probar la fusión nuclear, tendrá unas dimensiones de 19,4 metros de diámetro exterior y 11,4 metros de altura que, en total sumarán 5.200 toneladas de peso una vez ensamblado.

Parte del complejo de ENSA en la localidad cántabra está ocupado por el laboratorio de Investigación y Desarrollo, en el que se estudian, diseñan y prueban distintos robots o tipos de soldadura entre los diferentes materiales antes de su fabricación definitiva. «Aquí se analiza todo, hasta el líquido para limpiar las soldaduras o cualquier material que se prueba», ha comentado.

Con estos robots patentados por ENSA, el experto explicó que se pretende minimizar tiempos y evitar los fallos humanos no solo en el proyecto del ITER sino en los otras áreas de negocio de la empresa, tales como la fabricación de los contenedores para los residuos nucleares y el combustible gastado de las centrales nucleares, vasijas de reactor o los generadores de vapor de los propios reactores, que salen desde Cantabria a países como Estados Unidos, Francia, Corea, China, Japón, Finlandia o India, entre otros.

Presupuestados 14.000 millones de euros

Para ensayar el proyecto del ITER en Maliaño se ha fabricado una maqueta con las piezas a tamaño real que simula la cámara de vacío para conocer la viabilidad y la eficacia de las herramientas. Para Moreno, esta maqueta es «una pieza única» que demuestra el nivel de «entrenamiento y meticulosidad» de la empresa con el fin de evitar problemas futuros. «Es una pieza que hacemos solo para entrenar. Gastamos mucho dinero para que las cosas salgan bien a la primera en el ITER», añadió Moreno, que explicó que todo se hace a escala real para entrenar el posicionamiento y practicar el ensamblaje. «Se ensaya todo para evitar deformaciones inesperadas y lograr cero defectos«, sentenció.

En total, el proyecto del ITER tiene una duración superior a los 7 años y un coste de 14.000 millones de euros para un experimento científico a gran escala que busca producir energía de forma comercial con fusión nuclear, lo que le convierte en una de las empresas más caras de la investigación. La Unión Europea asume en torno al 40% del coste total mientras que del resto se encargarán Estados Unidos, Rusia, China, Japón, India y Corea del Sur, con un 10% cada uno.

En total, según el presidente de ENSA, Eduardo González-Mesones, la empresa cuenta con una cartera de negocio para los próximos 3 años estimada en 222 millones de euros y su cifra de negocio alcanzó 73 millones de euros en 2016. El 90% de los equipos que fabrica ENSA tiene como destino el exterior así como el 50% de la prestación de servicios en plantas nucleares.

González-Mesones ha destacado que las distintas áreas de negocio de esta empresa están «al más alto nivel tecnológico«, contando con «algunos de los equipos y máquinas más grandes de España», como un torno de 12 metros de altura por 5 de diámetro o las grúas de carga en muelle de mayor capacidad del país, con capacidad para cargar 1.800 toneladas. Así, ha defendido que desee Cantabria salen desde vasijas de reactor, generadores de vapor, tuberías de circuito primario de refrigeración, presionadores, intercambiadores de calor, contenedores para almacenaje y transporte de combustible a mercados como el chino, francés, estadounidense, taiwanés, argentino, eslovaco, belga, finlandés o sudafricano.

En este contexto, González-Mesones apuesta por lograr que todos los contenedores para el combustible gastado del parque nuclear español salgan de la fábrica de Maliaño. De hecho, subrayó que ENSA se prepara para optar a las distintas fases del desmantelamiento de la central nuclear de Santa María de Garoña (Burgos) para la que hasta ahora ha fabricado 5 contenedores. Finalmente, reivindicó que ENSA es «una empresa pequeña pero que es referente mundial» y por tanto está en condiciones de competir.

Ecologistas en Acción critica la «posible ampliación sin sentido» del almacenamiento de residuos radiactivos de El Cabril

Eurpa Press.- La Asociación de Ecologistas en Acción y el Movimiento Ibérico Antinuclear han criticado que el almacenamiento de residuos radiactivos de media y baja actividad de El Cabril, ubicado en Hornachuelos (Córdoba), «ha recibido óxidos de uranio que no está autorizado para almacenar», sospechando ambos colectivos «que puede haber motivos relacionados con una justificación posterior para una «posible ampliación sin sentido» de la instalación.

A este respecto, ambos colectivos han afirmado que, «en pleno debate sobre su posible ampliación, esta instalación nuclear recibe residuos con millones de años de actividad, vulnerando la limitación de aceptar exclusivamente residuos que no superen hasta 300 años de vida radiactiva». Además, «cuando aún quedan por desmantelar 8 de las 10 centrales nucleares que se construyeron en España, el cementerio nuclear de residuos de media, baja y muy baja actividad de El Cabril», que gestiona la Empresa Nacional de Residuos Radiactivos (Enresa), «se encuentra al 70% de su capacidad«.

Según Ecologistas en Acción y el Movimiento Ibérico Antinuclear, este hecho coincide con que «los procesos de desmantelamiento de las centrales nucleares son los que generan una mayor cantidad de residuos, que se transportan por todo el territorio nacional hasta El Cabril», con lo que «es muy probable que los residuos procedentes de Garoña, cuyo cese de actividad se decidió el pasado 3 de agosto, dejen saturado el almacén nuclear, imposibilitando la recepción de materiales provenientes de otras instalaciones nucleares».

La consecuencia de ello, a juicio de estos colectivos ecologistas, es que «Enresa tiene que proceder a la ampliación de El Cabril o a la búsqueda de otro emplazamiento, para tener capacidad para gestionar los residuos que se producirán en el futuro próximo». Según dichas asociaciones ecologistas, «la industria nuclear española apuesta por duplicar la capacidad de almacenamiento de El Cabril, para permitir el alargamiento del funcionamiento de las centrales y que este cementerio nuclear pueda albergar los nuevos residuos producidos. Incluso Enresa podría plantearse nuevas ampliaciones si fuera necesario«.

En este contexto, según Ecologistas en Acción y el Movimiento Ibérico Antinuclear, «se ha dado a conocer, tras la publicación del Informe al Congreso del CSN de 2015, que Enresa depositó durante ese año en El Cabril algo más de 111 kilos de óxidos de uranio procedentes de la fábrica de Enusa en Juzbado (Salamanca). Un hecho que contraviene las normas de este cementerio nuclear, que tiene limitada la recepción de estos productos a aquellos cuya vida radiactiva no supere los 300 años, y no admite emisores de partículas alfa».

Sin embargo, «el uranio recibido es un emisor alfa y tiene una vida de millones de años», lo que «demuestra que la industria nuclear se salta sus propias normas de seguridad cuando recibe residuos de alta actividad sin una solución a su gestión. Estos residuos condenan a que el desmantelamiento de El Cabril, que debería producirse 300 años después de su clausura, sea demasiado problemático».

Esto, en opinión de los colectivos ecologistas, podría usarse como «justificación para ampliar este cementerio nuclear, en lugar de buscar otro emplazamiento más adecuado para el necesario almacenamiento de este tipo de residuos radiactivos. La ampliación evitaría así el necesario traslado de esos residuos, que incumplen las normas de seguridad». Por estos motivos, Ecologistas en Acción y el Movimiento Ibérico Antinuclear subrayan que «en estas condiciones no tiene ningún sentido la ampliación de este cementerio nuclear», a la vez que exigen el «cierre escalonado de todas las centrales nucleares y buscar otro emplazamiento para evacuar los residuos para los que El Cabril no tiene autorización».

La nuclear de Almaraz (Cáceres) simula la pérdida de refrigeración del reactor y evacua a la población en 5 kilómetros

Europa Press.- La central nuclear de Almaraz (Cáceres) simuló la pérdida de suministro eléctrico, la falta de capacidad de refrigeración de uno de sus dos reactores, lo que conllevó la evacuación de la población cercana al enclave en un radio de 5 kilómetros y la declaración de emergencia general, según indicó el Consejo de Seguridad Nuclear (CSN).

Se trata del preceptivo ejercicio de simulacro anual en la central nuclear que en este caso ha consistido en un suceso de nivel 4 en la Escala Internacional de Sucesos Nucleares (INES) que supone un accidente con consecuencias de alcance local. El simulacro se realizó conforme a los requisitos del Plan de Emergencia Interior y contó con la participación de la Organización de Respuesta ante Emergencias del CSN, tanto desde la Sala de Emergencias (SALEM) como desde el Centro de Coordinación Operativa (CECOP) de Cáceres.

Según indicó el CSN, el ejercicio comenzó cuando se ha simulado una prealerta de emergencia a consecuencia de la pérdida de suministro eléctrico exterior de la central. Además, la central ha perdido la capacidad de refrigerar el reactor de la unidad I, que ha llevado a la declaración de emergencia general. Por su parte, el organismo regulador recomendó al CECOP de Cáceres medidas preventivas como el control de accesos a la instalación y la activación de las Estaciones de Control y Descontaminación (ECD) de Plasencia y Navalmoral de la Mata.

Además se ha evacuado a las poblaciones ubicadas en la zona 1-A (radio de 3 kilómetros respecto de la central) y 1-B (radio de los 5 kms) y se ha repartido, pero sin ingerir, la profilaxis radiológica a sus habitantes y, en el resto de la zona 1 (entorno de los 10 kilómetros de la central nuclear), se ha llevado a cabo el confinamiento de la población y el reparto de profilaxis radiológica. Durante el simulacro, el CSN mantuvo activos a todos los grupos operativos, tal y como requiere el modo 2 de su Organización de Respuesta ante Emergencias (ORE).

La empresa estatal ENSA prepara una oferta para optar a distintas fases del desmantelamiento de la central nuclear de Garoña

Europa Press.- La empresa Equipos Nucleares (ENSA) está trabajando «intensamente» y a «iniciativa propia» para adelantarse y presentar la oferta más competitiva con la que pueda participar en el futuro desmantelamiento de la central nuclear de Santa María de Garoña, cuyo cierre dictó el Gobierno en agosto.

El presidente de ENSA, Eduardo González-Mesones, ha anunciado así las aspiraciones de la compañía que se abren tras el cierre de la planta burgalesa, generando la «oportunidad» de fabricar muchos más contenedores para el combustible gastado en el reactor a lo largo de sus 42 años de funcionamiento. «Esperamos que finalmente podamos ser la oferta más competitiva. Nuestro objetivo será hacerlo todo», ha deseado González-Mesones.

Así, estimó que el proceso de extraer el combustible gastado de Garoña podría acometerse en 5 o 6 años pero ha confirmado que Ensa, una empresa de la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI),tiene capacidad de comprometerse a terminar el pedido en 3 años si fuera necesario, ya que la línea de gestión de combustible es una de las más importantes para la entidad.

Eso sí, matizó que ese momento «todavía está lejos de realizarse», debido a que el primer paso debe ser la apertura de un concurso público a nivel internacional por parte de Enresa, la Empresa Nacional de Residuos Radiactivos, para que se presenten distintas ofertas. «Una vez que tengamos los papeles de petición de ofertas, con el conocimiento que tenemos queremos hacer la mejor oferta tecnológica para el desmantelamiento», ha añadido el presidente de ENSA. González-Mesones ha subrayado que este sería «un pedido muy importante» tanto a nivel social como económico y por ello están trabajando «intensamente» y «a iniciativa propia» para adelantarse y ser competitivos.

De ganar el concurso abierto, no sería la primera vez que ENSA trabaja para Garoña, una central para la que ya ha fabricado 5 contenedores de tipo Enun52B, aunque aún no están cargados, de modo que están almacenados en el taller de Maliaño. El propósito, ahora, sería presentarse y ganar el licenciamiento de los futuros contenedores en los que deberá guardarse todo el combustible gastado.  González-Mesones ha manifestado que «desgraciadamente» la noticia del cierre de la central le da «muchísima pena», pero añadió que una vez terminada su vida, se abren oportunidades para las que asegura que ENSA está «absolutamente preparada, con conocimiento y tecnología”.

El presidente de ENSA diferenció la primera fase, la del vaciado del fuel, y la segunda fase, de desmantelamiento propio de la planta, y ha defendido que la empresa española tiene conocimiento técnico y capacidades para optar a las dos fases, tanto a la del suministro de contenedores como en la fase de desmantelamiento. González-Mesones ha defendido en todo momento el potencial de ENSA, a la que ha calificado de «puntera» y «de las más completas» del mundo y que se mide con las grandes empresas de Estados Unidos, Corea del Sur, Japón o China.

Ecologistas en Acción es pesimista ante la próxima Declaración de Impacto Ambiental del ATC nuclear por parte de Medio Ambiente

Europa Press.- El portavoz de Ecologistas en Acción Castilla-La Mancha, Miguel Ángel Hernández, se ha mostrado pesimista ante la próxima Declaración de Impacto Ambiental con la que el Ministerio de Agricultura, Pesca, Alimentación y Medio Ambiente (MAPAMA) se pronunciará ante la viabilidad de la instalación del Almacén Temporal Centralizado (ATC) de residuos nucleares prevista en la localidad conquense de Villar de Cañas.

Según Hernández, «las señales son negativas» ante este pronunciamiento ya que «los movimientos por parte de Enresa y del Ministerio es de seguir planteando documentos cada vez más voluminosos que ensombrecen el análisis del proyecto». Ha recordado que la instalación «tiene riesgos no sólo radiológicos, sino también en cuanto al transporte y por el sustrato geológico donde se plantea». «Estamos muy preocupados, no sabemos por donde saldrá la declaración pero no somos optimistas», ha lamentado.

Hernández hacía estas declaraciones después de reunirse con el vicepresidente segundo del Gobierno autonómico, José García Molina, con quien ha compartido que son necesarios «algunos cambios a nivel normativo y estatutario» para dar cabida a reivindicaciones ecologistas que blinden aspectos como la prohibición del fracking o el propio ATC. Ha alertado de que en los últimos años el recorte en políticas medioambientales ha sido del 40%, algo que «todavía no se ha recuperado». «Debemos rectificar y mejorar para que la situación medioambiental de la región se consolide como algo importante para todos los ciudadanos», subrayó.

Detenido un grupo de Greenpeace tras entrar en una central nuclear francesa

EFE.- Un grupo de militantes de Greenpeace fue detenido tras penetrar en la central nuclear francesa de Cattenom, en el noreste del país, con el objetivo de denunciar la fragilidad de esas instalaciones.

Los activistas entraron de madrugada, a las 05.35 hora local (03.35 GMT), y lanzaron fuegos artificiales cerca de la piscina de combustible gastado.

La ONG indicó en un comunicado que quería alertar sobre el peligro de esos establecimientos y sobre la accesibilidad a unos edificios «cargados de radiactividad».

«Los riesgos son conocidos y reconocidos por las autoridades al frente de la seguridad, pero nada cambia», denunció en la nota el encargado de la división nuclear de Greenpeace Francia, Yannick Rousselet.

La ONG entregó esta semana un informe a las autoridades competentes en el que alertaba de que las piscinas de combustible gastado están mal protegidas de ataques exteriores, y de que el impacto de un accidente en ese tipo de instalaciones podría notarse a hasta 80 kilómetros de distancia.

La empresa energética EDF, operador de la central, precisó que los activistas fueron arrestados en menos de ocho minutos y que no llegaron a penetrar en la zona nuclear.

«Esta intrusión no ha tenido ningún impacto en la seguridad de las instalaciones», dijo la empresa en un comunicado, que aseguró que presentará una denuncia y condenó estas «acciones violentas de un movimiento que multiplica las ilegalidades».

Castilla y León prevé recaudar 10 millones de euros por el impuesto nuclear creado tras anunciarse el cierre de Garoña

EFE.- La Junta de Castilla y León prevé recaudar en el 2018 hasta 10 millones de euros por el impuesto al impacto de los residuos radiactivos de carácter temporal, que anunció para afrontar el cierre de la central nuclear de Garoña.

En total la Junta, según detalló el presidente de la comunidad, Juan Vicente Herrera, prevé contar con 74 millones recaudados por el conjunto de impuestos por daño medioambiental, que incluirían el dirigido a Garoña. Tras presentar los Presupuestos, Herrera ha detallado que se deberá presentar un proyecto o una proposición de ley a lo largo de 2018 para «dar respaldo legal» a este impuesto. Lo que se recaude, esos 10 millones previstos inicialmente para el 2018, irán al plan de reactivación del entorno de la central burgalesa, ha comprometido Herrera.