En un entrevista con el diario Público, Miguel Sebastián asegura que el alza de enero fue «inevitable y necesaria», pero que también fue «excepcional e irrepetible».

No obstante, precisa que el escenario que maneja, salvo que ocurra un acontecimiento internacional que impacte en los precios, es que la factura de la luz no vuelva a subir este año.

Asimismo, varios analistas y la propia Iberdrola en su reciente día del inversor coinciden en que el Ministerio de Industria congelará la Tarifa de Último Recurso (TUR) en su revisión trimestral de abril después de aplicar un alza de entre el 10% y 15% sobre uno de los dos principales componentes del recibo eléctrico, el de los peajes, y procurar de esta forma ingresos adicionales por unos 1.000 millones al sistema.

Tanto las intenciones expresadas hasta ahora por Industria como el escenario de precios eléctricos podrían permitir al departamento dirigido por Miguel Sebastián adoptar esta medida.

La TUR, que se revisa cada trimestre, tiene dos componentes, que son el coste de la energía y el coste de las actividades reguladas. El primero se fija en función de las subastas Cesur entre comercializadoras, mientras que el segundo lo ajusta el Gobierno con el objetivo de que esta partida deje de ser deficitaria antes de 2013.

En diciembre, cuando Industria decidió subir un 9,8% la TUR a partir de enero, Sebastián adelantó que en la primera revisión de 2011 se produciría previsiblemente una bajada en el coste de la energía que podría dar margen para elevar la parte regulada de la tarifa y, de esa forma, equilibrar el sistema eléctrico sin necesidad de una subida del recibo.

Dicho de otra manera, en condiciones normales la luz debería bajar en abril, pero no lo hará porque hay una parte del recibo que es deficitaria y el Gobierno entiende que ahora es una buena ocasión para reducir este desajuste. En vez de bajar, la tarifa quedará congelada.

Los analistas de «La Caixa» estimaron como positiva esta medida y dan crédito a su cumplimiento. «Veríamos de forma muy positiva la congelación de la TUR, con el consiguiente incremento de los peajes del 10% al 15%, lo que permitiría incrementar los ingresos en 1.000 millones, reduciendo el déficit que estimamos para este año de 4.400 millones a 3.400 millones, ya más cerca del objetivo del Gobierno de 3.000 millones», afirmó.

Por su parte, JPMorgan también vió esta opción como la más plausible e indicó que si el Gobierno congela la TUR y sube un 15% la parte regulada logrará reducir en 2.000 millones el déficit de tarifa de 2011, lo que supone una cifra superior a los 1.300 millones inicialmente previstos por los analistas de la propia entidad.

Los analistas de Exane BNP explicaron que Iberdrola expuso en su día del inversor su previsón de que Industria congelará la TUR. «La compañía piensa que en el segundo trimestre el Gobierno podría elevar las tarifas de acceso un 15% sin necesitar aumentos en el recibo de la luz«, señaló.

Este mes Industria debe remitir a la Comisión Nacional de la Energía (CNE) el borrador de orden ministerial de peajes eléctricos que servirá de referencia para la fijación de la tarifa.

Además, el 22 de marzo se celebrará la subasta Cesur entre comercializadoras de la que saldrá el precio de la energía para el próximo trimestre. En concreto, se colocarán entre las comercializadoras de último recurso 5.981 megavatios (MW) de electricidad base para el próximo trimestre, así como otros 406 MW de electricidad punta.