La gasolina y el gasóleo marcan otro récord histórico tras subir hasta un 1,5% en la última semana

En el caso de la gasolina súper 95, su precio acumula seis semanas consecutivas de récord histórico y se sitúa en 1,477 euros el litro. En algunas gasolineras de Madrid supera ampliamente los 1,5 euros, mientras que la súper 98 alcanza los 1,65 euros.

Por su parte, el litro de gasóleo cuesta 1,399 euros y suma su cuarto máximo histórico desde finales de febrero. Este combustible registró un encarecimiento del 8,8% desde comienzos de año, frente a la subida del 14% acumulada por la gasolina.

En el escenario actual, el llenado de un depósito medio de gasolina de 55 litros cuesta 81,2 euros, diez euros más que a comienzos de año, mientras que el usuario de un vehículo de gasóleo debe dedicar 76,9 euros a abastecer el tanque, 6,5 euros más.

Estas subidas se producen a pesar de que el precio del barril de crudo detuvo sus subidas durante la última semana. El barril de Brent, de referencia en Europa, cuesta 124 dólares, dos dólares menos que hace una semana, mientras que el Texas americano se mantiene en 106 dólares.

Pese a que estos precios son aún inferiores al máximo histórico de 147 dólares por barril alcanzado en julio de 2008, los niveles actuales se encuentran cerca del récord si se contabilizan en euros. La divisa europea se devaluó con respecto al dólar, lo que obliga a los países del continente a hacer más esfuerzos para comprar petróleo.

El encarecimiento de los combustibles no es un fenómeno aislado en España, donde estos productos siguen por debajo de la media europea. De hecho, la gasolina alcanza los 1,653 euros por litro en la Unión Europea de los 27 y los 1,684 euros en la zona euro. En el caso del gasóleo, el precio se sitúa en 1,527 euros en la Unión Europea de los 27 y en 1,512 euros en la eurozona.

Los dos únicos países de la Unión Europea en los que el litro de gasolina supera los 1,8 euros son Italia y Grecia, precisamente dos de las economías con mayores dificultades, mientras que el precio del gasóleo rebasa los 1,7 euros en Italia y Reino Unido.

La subasta Cesur cierra con bajadas del 7% y da un margen al ministro Soria para subir los peajes en abril

De esta subasta se desprende un descenso del 3,75% para base trimestral, hasta situarse a un precio de 51 euros el megavatio hora, y del 2,9% para el precio de punta trimestral, quedándose en 56,27 euros con respecto al trimestre anterior. No obstante, si se tienen en cuenta las horas punta del trimestre y los costes del sistema en los que puja Red Eléctrica, el descenso rondaría el citado 7%.

En esta subasta Cesur se ofertaron simultáneamente, para el segundo trimestre de 2012, un producto de carga base a tres meses por un total de 3.000 MW en cada hora, y un producto de carga punta a tres meses para todas las horas comprendidas entre las 8:00 y las 20:00 horas, de todos los días naturales, excepto sábados y domingos, por 451 MW en cada hora. En la subasta celebrada intermediaron un total de 26 operadores.

Este descenso da margen al Gobierno para aplicar en abril un incremento en parecida proporción de la otra parte del recibo, la correspondiente a los costes regulados de la actividad eléctrica, o peajes, sin necesidad de subir la TUR.

En todo caso, el Ejecutivo advirtió de que el recibo subirá previsiblemente en abril para recoger las recientes sentencias del Tribunal Supremo que obligan a refacturar los consumos de cerca de 22 millones de clientes desde octubre del año pasado para recoger el coste real de la actividad eléctrica (la diferencia entre lo que ingresan las empresas eléctricas por la tarifa y lo que les cuesta generar la electricidad), aunque será la decisión final del Gobierno sobre los peajes la que determine exactamente la evolución del recibo de la luz para el próximo trimestre.

No obstante, el ministro de Industria, Energía y Turismo, José Manuel Soria, explicó que el Gobierno está estudiando la cuantía de la subida de la tarifa eléctrica que se va a aplicar el 1 de abril, aún por determinar, y aseguró que va a cumplir con la sentencia del Tribunal Supremo que obliga al Ejecutivo a no congelar el recibo.

El ministro anunció que no todo el peso de la refacturación caerá «en la espalda del consumidor» porque no sería «justo ni adecuado». Para ello, el Gobierno trabaja en una reforma energética que permita rebajar los costes del sistema eléctrico.

«Todo el ajuste en el llamado déficit tarifario no puede ir a espaldas del consumidor y todos debemos participar en el ajuste«, agregó Soria, quien señaló que se debe tener en cuenta que hay cinco millones de parados y el precio de la gasolina está en niveles récord.

En el escenario actual, las eléctricas calcularon que, para evitar que en 2012 el déficit de tarifa supere el tope legal de 1.500 millones de euros, es necesario subir un 30% los peajes de luz, que recogen los costes regulados del recibo, lo que redundaría en un alza del 15% en el precio final de la electricidad.

En el caso hipotético de que el Gobierno trasladara ahora estas cifras que ofrecen las eléctricas y no aplicase medidas adicionales, el recibo de la luz debería subir en abril más de un 11%. En todo caso, tanto desde el Ejecutivo como desde la propia Comisión Nacional de la Energía (CNE) se consideró que estos incrementos serían excesivos para el consumidor.

Además, el secretario de Estado de Energía, Fernando Marti Scharfhausen, advirtió de que es el Gobierno el encargado de dirigir la política energética y advirtió a las eléctricas de que la solución del problema no recaerá sólo sobre el consumidor.

Al margen de posibles recortes en los costes que se reconocen a las empresas, otra de las opciones para mitigar una fuerte subida de la luz sería ampliar el máximo legal de 1.500 millones de euros de deuda eléctrica para el ejercicio, como ya hizo anteriormente el departamento dirigido por Miguel Sebastián.

La tarifa eléctrica de último recurso (TUR), que se revisa cada trimestre, está formada por dos componentes: los peajes que retribuyen las costes regulados del sector y que fija el Gobierno, y el precio de la energía que resulta de estas subastas denominadas Cesur.

No incrementar en la cuantía suficiente la parte regulada de la tarifa contribuyó a elevar el déficit del sector, generado al ser los ingresos vía recibo de la luz insuficientes para cubrir los costes del sistema, y que debe ajustarse a unos límites fijados por ley: 3.000 millones en 2011 y 1.500 millones este año.

La bajada en la subasta de este miércoles cumple con la tendencia de los últimos años, en los que el precio de la electricidad fue estacionalmente más bajo en la primera parte del ejercicio.

El año pasado, cuando ya se subió un 9,8% el recibo en enero, la subasta de marzo cerró con caídas del 9,4%, lo que permitió al Gobierno subir un 10,8% los peajes y forzar una congelación del recibo. Posteriormente, Industria subió el recibo en julio, un 1,5%, y aplicó congelaciones en octubre y enero, ambas anuladas por el Supremo.

La subasta eléctrica marcará el margen de Industria para subir la luz sin dañar a los consumidores

El Gobierno anunció que en abril habrá una subida de luz para trasladar al recibo los recientes autos del Tribunal Supremo, en los que se obliga a refacturar los consumos de cerca de 24 millones de clientes desde octubre del año pasado para recoger los costes reales del sistema eléctrico.

El ministro de Industria, Energía y Turismo, José Manuel Soria, justificó la subida apelando a las decisiones del Supremo, al tiempo que anunció que no todo el peso de la refacturación caerá sobre el consumidor. Para ello, el Gobierno estudia medidas para rebajar los costes del sistema eléctrico, afirmó.

En el escenario actual, las eléctricas calcularon que, para evitar que en 2012 el déficit de tarifa supere el tope legal de 1.500 millones de euros, es necesario subir un 30% los peajes de luz, que recogen los costes regulados del recibo, lo que redundaría en un alza del 15% en el precio final de la electricidad.

Al margen de posibles recortes en los costes que se reconocen a las empresas, otra de las opciones para mitigar una fuerte subida de la luz sería ampliar el máximo legal de 1.500 millones de euros de deuda eléctrica para el ejercicio, como ya hizo anteriormente el departamento dirigido por Miguel Sebastián.

Una subida del precio de la electricidad en la subasta de este miércoles complicaría aún más la situación. Estos precios suelen bajar estacionalmente en el primer trimestre, si bien el encarecimiento de los productos energéticos en los mercados dificultan los pronósticos.

El año pasado, cuando ya se subió un 9,8% el recibo en el primer trimestre, la subasta de marzo cerró con caídas del 9,4%, lo que permitió al Gobierno subir un 10,8% los peajes y forzar una congelación del recibo. Posteriormente, Industria subió el recibo en julio, un 1,5%, y aplicó congelaciones en octubre y enero, ambas anuladas por el Supremo.

El gas licuado por canalización sube un 10,64%, según publica el BOE

El término variable se encarecerá 12,15 céntimos, hasta los 126,4150 céntimos el kilo, mientras que el término fijo se mantiene en 1,55 céntimos de euros al mes.

Por su parte, el precio de los gases licuados del petróleo a granel para empresas distribuidoras de GLP por canalización se incrementará el 12,16% hasta los 112,0484 céntimos de euro por kilo, frente a los 99,8961 céntimos de febrero.

El precio de GLP, utilizado principalmente en urbanizaciones y chalés, se determina mediante la aplicación, una vez al mes, de una fórmula que tiene en cuenta la cotización internacional de la materia prima, el flete o coste del transporte y la cotización internacional del euro.

Estas tarifas de venta a los usuarios serán únicas para todo el territorio nacional.

Eduardo Montes (Unesa) cree que la luz debería subir un 15% en abril para parar el déficit de tarifa

«En abril, ustedes decían esta semana con razón que los peajes podrían llevar a una subida del orden del treinta y algo por ciento, lo que es un 15% del recibo», afirmó el presidente de Unesa, Eduardo Montes, en declaraciones a «Onda Cero«.

Los peajes recogen los costes regulados del sistema eléctrico y tienen un peso cercano al 50% en el recibo final de la luz. Montes indicó que en enero esta partida ya debería haber subido un 27%, lo que habría presionado al alza entre un 12% y un 13% el recibo de la luz.

Montes afirmó que las compañías eléctricas «no tienen nada que ver» con la inclusión de un buen número de costes regulados que están encareciendo la luz, entre ellos las primas a las renovables y las ayudas al carbón.

«Si de este recibo de la luz se quitara lo que no tiene nada que ver con el suministro eléctrico, con lo que cuesta la energía, la luz podría incluso bajar», afirmó Montes. «El problema son los costes regulados», aseveró.

El presidente de Unesa alertó además de que el déficit de tarifa de este año podría situarse en 5.000 millones si no se toman medidas y de que la deuda acumulada por las eléctricas podría alcanzar los 25.000 millones, esto es, por encima incluso de los 17.000 millones que deben los ayuntamientos, lo que es una «barbaridad».

Montes explicó que un decreto ley de finales de 2010 fijó el máximo incremento de déficit para el año 2011 en 3.000 millones de euros; para el año 2012, en 1.500, y para el 2013 en cero.

Junto a esto, recordó que las eléctricas «nos hemos visto obligadas, por ley, a financiar todo el desarrollo de energías renovables, es decir, la política energética» y que, para solucionar la deuda de los consumidores, propusieron medidas como el ‘céntimo verde’, la moratoria a la termosolar o la financiación de las renovables con las subastas de CO2.

La tarifa eléctrica de último recurso (TUR), que se revisa cada trimestre y a la que están acogidos unos 20 millones de consumidores, está formada por dos componentes: los peajes que retribuyen las costes regulados del sector y que fija el Gobierno, y el precio de la energía que resulta de una subasta denominada Cesur.

Cada uno de estos componentes supone la mitad de la factura. En enero, la variación al alza en los peajes se compensó con la caída del coste de la energía y supuso la congelación en la tarifa que pagan los consumidores acogidos a la TUR.

El Tribunal Supremo cuestionó esta práctica obligando a que los peajes suban lo suficiente para poder cumplir con los objetivos de déficit fijados por ley, por lo que el ministro de Industria, Energía y Turismo, José Manuel Soria, reconoció que esta decisión obliga al Gobierno a elevar la parte regulada del recibo de la luz y que lo «previsible» es que a partir del 1 de abril «haya un incremento en la tarifa eléctrica».

No obstante, Soria añadió que «se equivocará» quien piense que todo va a ser a cuenta del consumidor y apuntó a una reducción de los costes regulados que se retribuyen con la tarifa.

La gasolina y el gasóleo marcan máximos con alzas del 6,85% y el 4,04% desde que comenzó el año

Los datos señalaron que el litro de gasolina se vende de media a 1,451 euros; mientras que el gasóleo lo hace a 1,390 euros, lo que supone incrementos del 0,97% y el 1,91% frente a los datos de la semana pasada.

Con estos precios, llenar un deposito medio de 50 litros es 4,6 euros más caro que a principios de este año en el caso de la gasolina y unos 3 euros más en el del gasóleo. En lo que va de año, los precios de los carburantes han marcado ya tres máximos.

Con respecto a las mismas fechas del año pasado, la gasolina está un 8,53% más cara y el gasóleo un 7,59%.

El barril de crudo Brent, de referencia en Europa, cotiza hoy en el entorno de los 125 dólares tras varias jornadas al alza.

Frente a los precios de España, la gasolina sin plomo de 95 octanos se vende a una media de 1,634 euros por litro en la UE-27 y en la zona del euro se paga a 1,668 euros el litro, mientras que el precio del gasóleo de automoción es de 1,515 euros y de 1,5 euros, respectivamente.

La CNC autoriza comprar a Cepsa la totalidad de Chevron España

El organismo explicó que la autorización está condicionada al cumplimiento de unas medidas propuestas por Cepsa y que resultan «suficientes» para solucionar los problemas de competencia detectados como consecuencia de la concentración de ambas empresas.

En un principio, se consideró que la operación podía obstaculizar el mantenimiento de la competencia efectiva sobre distintos mercados de hidrocarburos líquidos en España y, en particular, en las Islas Canarias.

La CNC realizó entonces un estudio de mercado solicitando información y observaciones a distintos interesados y afectados por la operación.

El pasado 20 de febrero, Cepsa presentó una versión modificada de sus compromisos para solventar los problemas de competencia.

El primer compromiso establece que los operadores puedan rescindir sin penalización las obligaciones de compra en exclusiva de productos Cepsa y que esto ya no sea motivo de incumplimiento contractual.

El segundo compromiso se refiere al mercado de combustible de aviación y a los servicios de puesta a bordo en aeronaves de combustibles y lubricantes, denominado intoplane. Durante tres años, siempre y cuando concurran ciertas circunstancias, la petrolera se comprometió a mantener en los aeropuertos en los que Chesa suministra combustible de aviación y Cepsa está presente en intoplane (Alicante, Málaga y Sevilla) el mismo suministrador que había hasta ahora.

El tercer compromiso está dirigido a compensar la desaparición de Chesa como competidor en el mercado de almacenamiento de combustible para generación eléctrica.

Y el cuarto, obliga durante tres años a Cepsa a no importar, almacenar o comercializar combustible para barcos a través de la terminal de Las Palmas y a usar esta terminal solo para carburantes o combustibles que vayan al mercado de la automoción, el eléctrico, el uso industrial o productos intermedios correspondientes a estos usos.

Cepsa comunicó en febrero de 2011 la compra de la filial de la estadounidense Chevron en España. La operación contempló la adquisición de los negocios de almacenamiento y distribución de combustible en Canarias, así como de aviación y lubricantes terrestres en la Península

Chevron tiene en Canarias una red de 60 estaciones de servicio bajo la marca Texaco, algunas propias y otras bajo contrato de abanderamiento y suministro, y mantiene una importante actividad en el mercado de lubricantes.

La gasolina y el gasóleo marcan récord históricos en sus precios

El precio del litro de gasolina se situó en 1,432 euros y marca, por tercera semana consecutiva, su máximo histórico. Tras subir un 1,2% en la última semana, sumó quince días por encima del umbral de los 1,4 euros y acumuló un encarecimiento del 10,4% en lo que va de año.

La súper 95 rozó ya en algunas gasolineras de Madrid los 1,47 euros el litro, mientras que el litro de la súper 98 llega a registrar un precio de 1,607 euros.

Por su parte, el litro de gasóleo se elevó a 1,372 euros y sumó dos semanas consecutivas de récord históricos. El nivel actual es un 0,29% superior al de la semana anterior y un 6,7% superior al de comienzos de año.

Los precios de la gasolina y el gasóleo son en la actualidad un 9,4% y un 8,2%, respectivamente, superiores a los de la misma semana del año pasado, cuando estos combustibles se encontraban ya muy por encima de los niveles de 2009.

En este contexto, el automovilista con un vehículo de gasolina con un depósito medio de 55 litros debe dedicar 78,7 euros al llenado, 6,8 euros más que hace un año, mientras que el vehículo de gasóleo requiere 75,4 euros, 5,8 euros más.

Además la gasolina cuesta en la actualidad cerca de un 70% más que los 82 céntimos el litro de enero de 2009, mientras que el gasóleo se ha encarecido alrededor del 65% con respecto a los 83 céntimos de marzo de aquel mismo año.

La subida del precio de los combustibles coincide con el alza en el barril de crudo, especialmente del utilizado como referencia en Europa. El Brent se encareció en casi tres dólares en la última semana y cuesta 124,8 dólares el barril, mientras que el mientras que el precio del Texas sube en dos dólares, hasta 108 dólares el barril.

Pese a que estos precios son aún inferiores al máximo histórico de 147 dólares por barril alcanzado en julio de 2008, los niveles actuales suponen un récord si se contabilizan en euros. La divisa europea se devaluó con respecto al dólar, lo que obliga a los países del continente a hacer más esfuerzos para comprar petróleo.

Las subidas de precios en España no son aisladas y se producen en todo el continente, donde ya hay cuatro países en los que el litro de gasolina cuesta más de 1,7 euros. A la cabeza de los más caros está Grecia, con 1,764 euros el litro, frente a los 1,746 euros de Dinamarca y 1,473 euros de Países Bajos.

La gasolina cuesta de media 1,610 euros en la Europa de los 27, así como 1,644 euros en el zona euro, mientras que, en el caso del gasóleo, la media de los 27 asciende a 1,505 euros y la de la zona euro se sitúa en 1,494 euros.

WWF denuncia el aumento de las emisiones de CO2 en el sector eléctrico por la quema de carbón

Así lo puso de manifiesto el Observatorio de WWF de enero de 2012, que destacó que el carbón continúa siendo la primera fuente de generación de electricidad del mix energético, cuya consecuencia es el aumento de las emisiones de CO2.

La organización alertó de que España puede alejarse del cumplimiento de sus compromisos de reducción de emisiones para 2020 y de la lucha contra el cambio climático si continúa generando electricidad con fuentes contaminantes.

WWF subrayó que España no puede ir a contracorriente de Europa, ya que la Comisión Europea instó recientemente a los estados miembro a contribuir con una economía baja en carbono y a trabajar para conseguir objetivos más ambiciosos en reducción de emisiones de CO2.

La organización afirmó que estas metas son alcanzables a través de la inversión en tecnologías limpias y sostenibles, como las energías renovables, la eficiencia y el ahorro energético.

Según Raquel García Monzón, técnico de Energía del Programa de Cambio Climático de WWF España, «los cambios normativos, como la aprobación del Real Decreto Ley 1/2012, que suspende de forma temporal los incentivos económicos para nuevas instalaciones de producción de energía eléctrica a partir de fuentes renovables, cogeneración y residuos, generan desconfianza para los inversores en este tipo de tecnologías sostenibles, limpias y autóctonas».

Montes afirma que la forma «más ortodoxa» de acabar con el déficit de tarifa es subir los peajes de la luz

En rueda de prensa tras participar en unas jornadas de la Sociedad Nuclear Española (SNE) sobre experiencias operativas de las centrales nucleares en 2011, Montes se mostró en contra de aplicar una tasa a la nuclear, porque no sería «justo ni legal», porque las empresas «ya pagan su impuesto de sociedades» y advirtió que Bruselas no vería con buenos ojos su aplicación, «porque seria favorecer otras energías» sobre la nuclear y añadió que «no me puedo imaginar que (el Gobierno) adopte decisiones de ese tipo», porque hasta ahora ha adoptado medidas «sensatas».

Además, rechazó que la generación nuclear sea barata o que las nucleares estén amortizadas. «La central más amortizada es Garoña, porque es la más antigua, y ninguna de las otras lo está», aseguró, antes de rechazar que esta fuente de energía sea barata.

Entre las soluciones para acabar con el déficit de tarifa, que ya supera los 24.000 millones de euros, algunos sectores plantearon la necesidad de revisar los costes que reciben instalaciones como la nuclear por su producción o incluso de establecer una tasa adicional sobre esta energía. Este problema es una «bola de nieve que va creciendo» y que habrá que solucionar.

«La forma más ortodoxa de solucionar el déficit de tarifa es que el incremento de la factura eléctrica compense el incremento del déficit de tarifa», afirmó Montes. Estas declaraciones se produjeron un día después de que Endesa reclamara un incremento de peajes eléctricos del 10% en abril y otro del mismo porcentaje en enero de 2013 para acabar con el problema del déficit de tarifa.

Montes recordó que el déficit de tarifa (diferencia entre ingresos y costes) es una deuda que las eléctricas contabilizan en sus balances como un ingreso, y que «nos obligan a pagarlo por ley».

En este contexto, señaló que la factura eléctrica media de una familia ronda los 45 euros -la mayor parte «costes regulados, que no tienen que ver con la generación y distribución de electricidad»-, y se preguntó por qué no sube el precio de la energía a comienzos de año y al mismo ritmo que la inflación, al igual que lo hacen otros servicios como el transporte, la telefonía.

Por este motivo, Montes señaló que es «un error muy serio» que el Gobierno no suba la tarifa de luz para evitar que se genere el déficit. «La energía eléctrica es intocable».

Tras señalar que en 2011 la demanda de la energía eléctrica bajó un 1,9% por la crisis, dijo que el régimen ordinario (fuentes tradicionales) produjeron los dos tercios de la energía, mientras que el régimen especial (renovables y residuos) un tercio. Pero, advirtió, el primero ha costado 8.500 millones de euros y el segundo 10.500 millones de euros.

«Con cuatro veces menos potencia instalada, las energías ordinarias –nuclear, fuel, gas, hidráulica…– generaron la misma energía que las especiales, como las renovables o la biomasa», afirmó el presidente de la patronal eléctrica.

Montes indicó, por otro lado, que en 2011 el tope máximo de déficit fue de 3.000 millones de euros y se alcanzaron los 3.800 millones de euros, y en 2012 se preveía un tope de 1.500 millones y «se superarán los 5.000. Es una bola de nieve que en algún momento hay que solucionar».