El déficit de tarifa eléctrica alcanza los 692 millones de euros en enero

Pese a la envergadura de este desajuste, el desequilibrio de enero es inferior a los 829 millones previstos y viene acompañado de un incremento del 22% en los ingresos procedentes de los consumidores, que han ascendido a 404 millones.
Según la primera liquidación del año, elaborada por la Comisión Nacional de la Energía (CNE), el déficit generado en enero es un 16,52% inferior al previsto, pero superior en un 25,49% al registrado en el mismo mes de 2012, cuando todavía no se habían adoptado la mayor parte de las medidas del Gobierno para contener este desajuste.

En el documento, el organismo regulador precisó que el desfase de enero no tiene en cuenta los ingresos adicionales que durante el año podrá recibir el sistema eléctrico, entre los que figuran cerca de 3.000 millones de euros derivados de la Ley 15/2012, 450 millones de euros de las subastas de CO2 y un crédito extraordinario de 2.200 millones de euros con cargo a las cuentas públicas y que cubrirá posibles desfases en las primas a las renovables y vendrán a disminuir el déficit en sucesivas liquidaciones».

En total, para cuadrar las cuentas y que el déficit sea cero en 2013, Industria aspira a recibir 5.571 millones por los conceptos anteriores y a que además las cuentas públicas asuman cerca de otros 1.700 millones correspondientes a los costes extrapeninsulares.

De esta forma, no será necesario subir la parte regulada del recibo de la luz, según los cálculos del Gobierno. Como parte de su estrategia, el ministro de Industria, José Manuel Soria, anunció que congelará los peajes eléctricos en abril, con lo que la factura bajará un 6,5% y reflejará con ello el descenso del 16,2% en la subasta del miércoes para determinar la otra parte del recibo, la del coste de la energía.

Mientras aumenta la deuda eléctrica en enero, la CNE cifró en 5.511 millones de euros el desfase aún provisional del año 2012, tras incoporar cerca de 1.600 millones de costes extrapeninsulares que finalmente no asumieron los Presupuestos Generales del Estado.

La recaudación vía tarifas de acceso (parte del recibo de la luz que remunera costes regulados) y otros conceptos ascendió a 408 millones de euros, cifra superior en un 22% a la prevista y en un 5,7% a la de un año antes.

Una vez descontado el dinero correspondiente a las primas y el relativo a la regularización de ejercicios anteriores, el sistema registró un diferencial negativo de 331 millones de euros.

En enero, la energía declarada ascendió a 4.659 gigavatios hora (GWh), un 10,6% menos que en enero del año pasado y un 17,2% inferior a la prevista.

Según la misma fuente, el hecho de que la energía declarada haya caído y que, por el contrario, los ingresos sean superiores a lo previsto se debe al incremento de las tarifas de acceso, a pesar de que el Gobierno anunció su congelación.

En el capítulo de costes, las primas al régimen especial (renovables y cogeneración), y a cuyos errores en el cálculo de previsión se atribuye el déficit excesivo de 2012, sumaron 729,9 millones de euros, el 3,1% menos de lo estimado y un 18,4% más que a comienzos del ejercicio anterior.

El transporte de la electricidad costó 107,3 millones de euros, la distribución unos 145 millones de euros y el bono social unos 22 millones de euros, en tanto que las eléctricas ingresaron 74 millones de euros por mejoras en la calidad de sus servicios. Junto a esto, se reconocieron costes relacionados con las anualidades del fondo de la deuda eléctrica (FADE) de 36 millones de euros.

El sistema de interrumpibilidad, en el que el Gobierno prepara mejoras retributivas para amortiguar el efecto de la subida del coste energético para las grandes industrias, ocasionó un coste de 43 millones en el primer mes del año.

Además, en la liquidación se cifró en «cero euros» los extracostes que representan los sistemas eléctricos extrapeninsulares (islas y ciudades autónomas), y que está previsto que corran a cargo de los Presupuestos Generales del Estado de 2014.

Soria confirma que la luz bajará un 6,5% en abril tras caer su precio un 16,2% en la subasta eléctrica Cesur

En un acto organizado por Telefónica en Madrid, para visitar la Academia Wayra, el ministro aseguró que el Gobierno cumplirá con su compromiso y no va a modificar los peajes, que es la parte regulada que fija la Tarifa de Último Recurso (TUR) y con los que se retribuyen los costes regulados (transporte, distribución, primas a las renovables o moratoria nuclear).

«El Gobierno va a mantener congelado la parte correspondiente a los peajes. De forma que si, como consecuencia de la subasta ha habido una disminución de aproximadamente un 14%, la repercusión en el recibo de la luz va a ser una bajada para el próximo trimestre de aproximadamente un 6,5%«, explicó Soria.

La parte regulada de la tarifa eléctrica determina aproximadamente el 50% del recibo de la luz de la TUR, que es la que se aplica a más de 26 millones de consumidores, mientras que la otra mitad de la tarifa resulta de la subasta del precio de la energía.

El ministro valoró de forma «favorable» la noticia porque el hecho de que baje el precio de un servicio como el de la luz es «positivo» para todas la familias y, sobre todo, para las que se acogen a la tarifa de ultimo recurso, que son la mayor parte en España.

Respecto a si en un futuro el Gobierno subirá los costes regulados del sistema eléctrico, Soria señaló que es una cuestión que en estos momentos no se ha planteado de cara al siguiente trimestre. «Vamos a esperar a ver cual es la evolución del mercado y el efecto de las medidas que se están adoptando, así como de otras medidas que están en marcha y que se adoptarán dentro de no mucho y, por tanto, en función de eso el Gobierno irá decidiendo», añadió.

El ministro de Industria ya anunció que su departamento «no va a hacer nada discrecionalmente» para modificar la tarifa mediante la alteración de los peajes, a pesar de que una subida de esta variable permitiría contener el déficit de tarifa, con lo que la revisión final de la TUR dependerá exclusivamente de «consideraciones de mercado», es decir, del resultado de la subasta, en la que se compra y se vende la electricidad para el suministro a tarifa del segundo trimestre del año.

Según el Operador del Mercado Ibérico de la Electricidad (OMEL), la caída en el coste de la energía es fruto de un descenso del 16,2% (bruto) en el precio del producto base (que suministra electricidad cada una de las horas del día comprendidos entre el 1 de abril y el 30 de junio), que pasó de 54,16 euros por megavatio hora (MWh) en el trimestre anterior a 45,41 euros por MWh, y de los ajustes posteriormente practicados.

Por lo que respecta al producto punta (una especie de suplemento de electricidad para las horas de mayor consumo, entre las 08.00 y las 20.00 horas), concluyó la puja en 51,95 euros el MWh, un 15% por debajo que en la última subasta.

La cantidad total de energía subastada para el segundo trimestre del ejercicio fue adjudicada a un total de 29 vendedores.

En la subasta, las cinco comercializadoras con capacidad para suministrar la TUR, que son Endesa, Iberdrola, Gas Natural Fenosa, HC y E.ON, adquirieron 4.447 megavatios (MW) de carga base para cada hora del segundo trimestre, así como 380 MW de punta.

La de este miércoles fue además la vigesimosegunda de las subastas de electricidad entre comercializadoras de último recurso para fijar el coste de la energía de la tarifa eléctrica, conocidas como Cesur.

La subasta se desarrolló, por Internet, mediante el sistema informático de subastas de OMIE. Se utilizó un procedimiento de «subasta de reloj descendente» en el que, partiendo de unos precios iniciales (diferentes en cada producto), se procedió a una reducción progresiva de los mismos en sucesivas rondas hasta llegar al equilibrio entre oferta y demanda en cada producto.

Esta puja es la primera que se celebra desde que el pasado 1 de enero comenzasen a aplicarse los nuevos impuestos eléctricos, que incluyen una tasa del 7% a la producción y gravámenes para algunas de las tecnologías que, como el gas, tienen carácter marginalista y acaban condicionando el precio final del mercado.

Desde el pasado año, el Gobierno aprobó diversas medidas y reformas para intentar equilibrar los ingresos y los costes del sistema eléctrico, cuyo desfase alcanzó el pasado año los 5.500 millones de euros, según los datos provisionales, con lo que la deuda eléctrica acumulada asciende al menos a 27.000 millones de euros.

El objetivo del Gobierno es dejar de generar déficit de tarifa este año, para lo que recaudó ingresos adicionales: los obtenidos de los nuevos impuestos a la generación, de las subastas de CO2 y un crédito extraordinario de 2.200 millones de euros.

A esto hay que añadir el traspaso de los costes extrapeninsulares a los Presupuestos Generales del Estado y el recorte en la retribución de algunas actividades reguladas, ya sea de forma directa (como en la distribución) o indirecta (con el cambio de sistema en el régimen especial).

Esta circunstancia no impidió que se produjese una bajada en el precio de la electricidad provocada por una mayor participación de las energías renovables en el mercado eléctrico y por el continuado descenso de la demanda, según las fuentes del sector.

La paradoja es que esta menor demanda y mayor contribución renovable que abarata el mercado eléctrico encarece al mismo tiempo la otra parte del recibo, la de los costes regulados, ya que la caída del consumo reduce los ingresos necesarios para responder a las previsiones de costes, mientras que las tecnologías «verdes» aumentan las primas.

Este descenso de ingresos e incremento de costes regulados da origen precisamente al déficit de tarifa, que es una deuda del sistema eléctrico de unos 28.000 millones de euros cuyo importe, según las previsiones de Industria, debería dejar de aumentar en 2013.

En la anterior subasta Cesur se produjo una subida cercana al 6% en el coste de la electricidad, lo que, sumado a la decisión del Gobierno de congelar los peajes, provocó un incrementó final de la TUR del 3,1%.

Un alivio para el bolsillo de los consumidores de la TUR

Tras esta subasta y la bajada de la TUR, los consumidores se encontrarán en pocos días con la mayor bajada trimestral de la tarifa eléctrica desde julio de 2009. Por eso, este descenso será un alivio, si se tiene en encuentra que el recibo se encareció en un 60% en apenas un lustro.

Sólo en 2011, la TUR subió un 10%, y en 2012 lo hizo un 5,4% adicional, sin incluir el 7% de más que los consumidores estuvieron pagando entre octubre y diciembre para acatar una sentencia del Tribunal Supremo que obligaba a reintegrar el encarecimiento no repercutido entre octubre de 2011 y marzo de 2012.

La confusión en torno al recibo de la luz llegó al paroxismo el año pasado, cuando el recibo llegó a «bajar subiendo y a subir bajando». En octubre de 2012 la TUR bajó un 2,29%, pero la subida del IVA y las refacturaciones del Supremo la encarecieron, mientras que en enero la TUR subió un 3%, pero el final de las refacturaciones la abarataron.

En la actualidad, Industria trabaja en una nueva reforma del sistema, que según avanzó el secretario de Estado de Energía, Alberto Nadal, estará precedida por una revisión de todos los costes regulados.

Nadal advirtió a las eléctricas de que tendrán que contribuir a la hora de alcanzar ese equilibrio, porque actualmente la capacidad de traspasar nuevas cargas a los consumidores o los contribuyentes es «limitada».

Facua pide a Industria que cumpla y baje la tarifa de luz en abril

Por su parte, Facua-Consumidores en Acción «anima» al Ministerio de Industria, Energía y Turismo a que cumpla su promesa y baje la tarifa de la luz en abril, tras el fuerte descenso de precios registrado en la subasta de este miércoles.

El portavoz de Facua, Rubén Sánchez, consideró «positiva» la noticia del abaratamiento de la electricidad en los mercados, pero se mostró cauteloso y pidió al Gobierno que cumpla con el compromiso de bajar el recibo eléctrico porque «no se puede dar otro palo» a los consumidores.

Pese a la bajada «coyuntural» de hoy, la asociación sigue rechazando el sistema de subastas eléctricas y el actual diseño del sistema eléctrico, que se remonta «a los tiempos de (José María) Aznar» y en el que «la mayor parte de lo que paga el consumidor eléctrico depende de lo que fijan las eléctricas en los mercados de generación».

«El sistema adolece de anomalías e irregularidades, y produce subidas muchas veces poco justificadas, ya que Endesa e Iberdrola tienen casi la última palabra», afirmó el portavoz de Facua.

Respecto al déficit de tarifa, Facua parte de que «está basado en una gran mentira» y por este motivo no consideró pertinente que el Gobierno aproveche la bajada de los precios eléctricos para subir la parte regulada del recibo y forzar una congelación.

«No nos creemos el déficit de tarifa. Se han estado dando por buenos unos precios de generación hinchados durante la última década», afirmó Sánchez, quien se mostró partidario de un nuevo modelo eléctrico en el que «todo esté regulado» y se atienda a las necesidades de los consumidores.

Además, criticó la estrategia del Gobierno de liberalizar el recibo eléctrico mediante la expulsión al mercado de consumidores a tarifa regulada con potencias inferiores a 10 kilovatios (kW).

CCOO califica de «engaño» la bajada, por dedicarse dinero público a la tarifa

Por su parte, la Federación de Industria de CCOO consideró que el anuncio por parte del Gobierno de la bajada en un 6,5% en el recibo de la luz es en realidad «un engaño», ya que este abaratamiento se realiza a costa de los Presupuestos Generales del Estado (PGE), que sufragarán parte de los costes de la tarifa eléctrica.

«Lejos de verse beneficiado por la rebaja en el precio de la electricidad del 6,5%», señaló el sindicato, «el ciudadano pagará a partir de ahora dos veces el coste de la tarifa: una por el recibo de la luz y otra a través de sus impuestos».

Esta circunstancia se debe a que el Gobierno trasladó a los PGE parte del déficit de tarifa, «generado por las empresas». Entre las partidas que sufragarán las cuentas públicas figuran los costes extrapeninsulares, por valor de cerca de 1.700 millones de euros, indicó.

Además, CCOO señaló que, al precio resultante de la tarifa a partir de abril, se le aplicará un 28% de impuestos, incluidos el IVA y los impuestos eléctricos, con lo que «esta supuesta reducción del precio será de menos de un 4%».

«El Gobierno, en vez de afrontar una verdadera reforma del sector y con ello del sistema de cálculo del coste de la electricidad, empezando por modificar la actual ley del sector eléctrico y la metodología empleada en la valoración del mercado a coste marginal y no en función de los costes de producción, está optando por mantener la misma estructura existente«, afirmó.

Esta «estructura» incluye «llevar la deuda generada por el sector privado a los PGE y así garantizar los enormes beneficios del «lobby» eléctrico, de más de 6.000 millones de euros de beneficios en 2012 en solo cuatro empresas», aseguró.

Unesa afirma que el precio de la energía está al nivel de hace diez años y que «no es más cara en España que en el resto de Europa»

Para Bañón «no es correcta» la apreciación que tienen los usuarios de que se han encarecido los precios en el régimen ordinario (energía tradicional), porque desde que se produjo la liberalización del sector, en los últimos años «han estado oscilando» sin variaciones destacables.

En el Foro SER Cantabria habló sobre los «Aspectos económicos de la industria eléctrica«, sector en el que reconoció que se produjo una importante transformación en la última década con la aparición de las energías renovables.

Bañón subrayó que las empresas están sufriendo las «iras» de los consumidores porque hacen de «portavoces de montones de cosas que no son suyas».

En este sentido explicó que de la cantidad que tienen que pagar los usuarios, un 20,1% son impuestos, un 12,8% corresponde a la distribución, un 3,7% al transporte, un 22% al apoyo al régimen especial y un 35% a la energía, lo que significa que casi la mitad de lo que recauda la eléctrica no es para ella.

Sobre las cuentas de las empresas eléctricas, opinó que se precisan muchas inversiones para mantener los activos del sector, que rondan los 90.000 millones de euros. A su juicio, la rentabilidad de esos, que oscila entre el 5% y el 7% (4,4% y 3,9% en los dos últimos años) es «modesta» y el coste de funcionamiento está «por encima».

De ahí que, según Bañón, las empresas están «perdiendo valor» e irían hacia una «extinción» que tratan de evitar buscando rentabilidad en otros negocios, principalmente en el extranjero, que supone ya el 63% de su negocio.

Sobre el déficit tarifario, la diferencia entre lo que cuesta producir la energía y lo que se recauda por ella, desde la patronal eléctrica confiaron en que este año no se produzca, después de llevar un acumulado de unos 29.000 millones de euros. Pero para ello es necesario, sobre todo, que el impuesto a la generación del 7% recaude lo previsto, unos 3.000 millones de euros.

Además coincidiendo con la denominada subasta eléctrica, Bañón estimó en que se produciese una reducción entre el 10% y el 15% respecto a la de hace tres meses, aunque subirá respecto a los precios actuales que son «anormalmente bajos».

Como el Ministerio de Industria ya avanzó que no moverá la tarifa de acceso, que supone la mitad del recibo, estaremos, añadió Bañón, ante una rebaja entorno al 5%. Desde UNESA consideraron que esto no es bueno, porque los precios deben adecuarse al coste de su producción.

Por último, respecto a las energías renovables, según explicó, cubren ya el 30% de la demanda energética y reciben un apoyo del estado que este año podría alcanzar los 10.000 millones de euros. Bañón explicó que este régimen especial hace que produciendo un tercio de la energía, reciban el doble de ayudas de las que generan los dos tercios restantes.

Al acto asistieron, entre otros, el consejero de Industria cántabro, Eduardo Arasti; el presidente del Parlamento de Cantabria, José Antonio Cagigas; los secretarios generales de UGT y Comisiones Obreras, María Jesús Cedrún y Vicente Arce, respectivamente; la presidenta de CEOE-CEPYME Cantabria, Gema Diaz Real y numerosos responsables de empresas de la región.

El consumo energético de las empresas industriales alcanzó los 11.337 millones de euros en 2011, un 17,1% más que hace dos años

Los principales productos energéticos utilizados por las empresas industriales fueron la electricidad (51,7% del total), el gas (28,3%) y los productos petrolíferos (13,6%).

Desde 2001, primer año de realización de la encuesta, la electricidad siempre fue el principal producto energético en cuanto a consumo, con porcentajes que osciló entre el 48% y 54% del total.

Las ramas de actividad con mayor incremento de consumos energéticos entre 2009 y 2011 fueron las Industrias extractivas (57,7%) y la Industria química y farmacéutica (28,5%).

Las agrupaciones de actividad con mayor consumo energético en 2011 fueron metalurgia y fabricación de productos metálicos, excepto maquinaria y equipo (con el 20,6% del total), alimentación, bebidas y tabaco (16,7%) e Industria química y farmacéutica (16,3%).

Atendiendo a la utilización de los distintos tipos de combustibles, cabe destacar el elevado consumo porcentual de electricidad que registraron las agrupaciones caucho y materias plásticas (78,9% del total de la agrupación), material y equipo eléctrico, electrónico y óptico (76,0%) y material de transporte (70,8%).

El empleo de gas supuso el 39,8% en la Industria extractiva y el 39,1% en Productos minerales no metálicos. El consumo de productos petrolíferos representó el 33,1% en Industrias manufactureras diversas.

El porcentaje que representaron los consumos energéticos sobre el total de compras de bienes y servicios (compras, trabajos realizados por otras empresas y servicios exteriores) para el total de la industria fue del 3%. La agrupación con mayor peso fue productos minerales no metálicos, con un 11,2%.

El INE aclaró que la Encuesta de Consumos Energéticos ofrece datos desagregados de 96 sectores de actividad, lo que permite un estudio detallado de la realidad industrial al proporcionar información sobre cuáles son los sectores más significativos en el consumo de los distintos tipos de combustibles.

De los sectores que representaron más del 50% del total de la industria, el que presentó un mayor consumo fue la fabricación de productos químicos básicos, con un 12,1% del total.

El consumo del carbón y sus derivados fue especialmente importante en la fabricación de cemento, cal y yeso, donde representó el 36,4% del total del sector en 2011.

El consumo de electricidad representó una parte muy significativa del total para un gran número de sectores industriales, especialmente la fabricación de componentes electrónicos y circuitos impresos ensamblados (93,6% del total) y fabricación de ordenadores y equipos periféricos (89,6%).

Los sectores con un mayor uso porcentual de productos petrolíferos fueron Instalación de máquinas y equipos industriales (65,3%) y fabricación de elementos de hormigón, cemento y yeso (61,2%).

La utilización de gas (natural y manufacturado) fue muy significativa en los sectores de fabricación de productos cerámicos para la construcción (70,2% del total) e industrias del petróleo y gas natural (61,9 %).

Las comunidades autónomas con una mayor participación en el total de consumos energéticos fueron Cataluña (19,8% del total) y Comunidad Valenciana (11,3%). Por el contrario, Baleares (con un 0,3%) y La Rioja (0,8%) fueron las que menos peso presentaron en el empleo total de energía.

En lo que se refiere a los distintos combustibles utilizados, cabe destacar que el consumo de electricidad supuso más de la mitad del consumo energético total en 10 comunidades autónomas (en Comunidad de Madrid llegó a representar más del 60%). En la encuesta anterior, correspondiente al año 2009, la electricidad representaba más de la mitad del consumo energético en 12 comunidades.

Las comunidades autónomas que presentaron mayores consumos porcentuales de carbón y sus derivados fueron Baleares (6,7%), Comunidad Foral de Navarra (4,7%) y Cantabria (4,5%).

Por su parte, las que tuvieron un mayor uso de productos petrolíferos fueron Canarias (36,0%) y Galicia (29,4%).

Por último, las comunidades que presentaron los mayores porcentajes en la utilización de gas durante el año 2011 fueron Comunitat Valenciana (41,9%) y Aragón (40,8%).

Este miércoles se celebra la subasta de energía que marcará el precio de la luz a partir de abril

Según las fuentes consultadas, el precio base de la electricidad para el segundo trimestre se situó este martes en 46,41 euros por megavatio hora (MWh), un 6% menos que el utilizado como referencia para la revisión de la luz de enero, mientras que el precio punta es de 51,51 euros, un 15% inferior al trimestre anterior.

Estos descensos, en caso de consolidarse en la subasta de este miércoles entre comercializadoras de la Tarifa de Último Recurso (TUR), ejercerán una presión a la baja equivalente a la mitad del porcentaje final. La puja determina el coste de la electricidad, cuyo peso sobre la TUR es cercano al 50%. Por ello, el incremento o no del recibo de la luz vendrá determinado por el resultado de esta subasta.

El Gobierno insistió en reiteradas ocasiones en que no tiene previsto modificar, ni a la baja ni al alza, los peajes, es decir, la parte regulada de la tarifa eléctrica que determina aproximadamente el 50% del recibo de la luz de la Tarifa de Último Recurso (TUR), que es la que se aplica a más de 20 millones de consumidores.

En una reciente entrevista, el ministro de Industria, Energía y Turismo, José Manuel Soria, apuntó que «ahora lo que el Gobierno ha determinado es que la luz suba o baje siempre en función de lo que ha determinado el mercado». Entiende que «lo adecuado» es que el precio de la subasta sea el que determina la factura.

De esta forma, si se mantiene el escenario actual, los consumidores podrían encontrarse en pocos días con la mayor bajada trimestral de la tarifa eléctrica en años, lo que supone un alivio si se tiene en encuentra que el recibo se ha encarecido en un 60% en apenas un lustro.

Solo en 2011, la TUR subió un 10%, y en 2012 lo hizo un 5,4% adicional, sin incluir el 7% de más que los consumidores estuvieron pagando entre octubre y diciembre para acatar una sentencia del Tribunal Supremo que obligaba a reintegrar el encarecimiento no repercutido entre octubre de 2011 y marzo de 2012.

La confusión en torno al recibo de la luz llegó al paroxismo el año pasado, cuando el recibo llegó a «bajar subiendo y a subir bajando». En octubre de 2012 la TUR bajó un 2%, pero la subida del IVA y las refacturaciones del Supremo la encarecieron, mientras que en enero la TUR subió un 3%, pero el final de las refacturaciones la abarataron.

A la subasta, por un total de 4.447 megavatios (MW) para cada una de las horas base del primer trimestre del año, así como 380 MW para las horas punta, concurrirán las cinco empresas encargadas del suministro regulado, que son E.ON, Endesa, Gas Natural Fenosa, HC e Iberdrola.

Esta vigésimo segunda subasta arrancará a las 09.00 horas, realizándose en una sesión. El periodo de recepción de pujas para la primera ronda será de 20 minutos; en el caso de la segunda ronda y sucesivas dicho periodo será de 10 minutos y un periodo de casación y comunicación de 5 minutos.

Unesa solicita un nuevo plan para las energías renovables «ajustado a la realidad económica del país»

Durante su intervención en la presentación del «Balance Energético 2012« organizada por Enerclub, Montes pidió «certidumbre regulatoria» y abogó por una mayor liberalización del sector y avances en la integración de los mercados eléctricos de España y Portugal para abordar la deuda acumulada por el déficit de tarifa, que se produce porque los ingresos del sistema no cubren los costes, y que supera ya los 28.000 millones de euros.

Así, Montes planteó, a modo de «reflexión intelectual», que la financiación de este déficit sea proporcional a los ingresos que recibe cada agente en forma de costes regulados.

Hasta ahora, las cinco grandes eléctrica integradas en Unesa son las que financian por completo la deuda eléctrica antes de su titulización en los mercados, por lo que la asociación empresarial reclamó que otros agentes del mercado también participen en este esfuerzo.

A pesar de ello, Montes agradeció el «esfuerzo» del Gobierno en titulizar -es decir, de emitir en el mercado con el aval del Estado- esta deuda, por lo que reclamó que mantenga el proceso en los mercados

Al mismo tiempo, abogó por avanzar en la liberalización del sector eléctrico, que en su opinión dará resultados a medio plazo, y por avanzar en el mercado europeo.

Montes aseguró que «todos confiamos en que haya un principio de recuperación de la economía» en los meses de junio y julio aunque aludió al descenso de la demanda eléctrica, del 5% en el año móvil, y predijo que al cierre de 2013 podrían registrarse todavía caídas del consumo del 1%, dijo a título personal.

El presidente de Unesa pidió al Gobierno que la reforma que prepara para el sector y que, según Industria, estará aprobada en el primer semestre del año, sea «sensata, consensuada y discutida», lo que permitirá ofrecer certidumbre regulatoria al sector y acabar definitivamente con el problema del déficit de tarifa, indicó.

En este sentido, se mostró «convencido» de que el déficit de tarifa será cero en 2013 y recordó que la demanda eléctrica se encuentra actualmente a niveles de 2004.

Además, sostuvo que los precios de la electricidad en España están a un nivel comparable al de otros países del entorno.

El recibo de la luz puede registrar en abril la mayor bajada en años

Las fuentes explicaron que el precio base de la electricidad para el segundo trimestre se sitúa en 46,85 euros, un 16% menos que el utilizado como referencia para la revisión de la luz de enero, mientras que el precio punta es de 52,38 euros, un 14% inferior al trimestre anterior.

Estos descensos, en caso de consolidarse en la subasta del miércoles entre comercializadoras de la Tarifa de Último Recurso (TUR), ejercerán una presión a la baja equivalente a la mitad del porcentaje final. La puja determina el coste de la electricidad, cuyo peso sobre la TUR es cercano al 50%.

La otra mitad de la tarifa depende de los costes regulados, o peajes, cuya revisión decide el Ministerio de Industria, Energía y Turismo. El ministro José Manuel Soria anunció la semana pasada que el Gobierno no tocará los peajes y que la revisión de abril dependerá exclusivamente de lo que haga el mercado.

De esta forma, si se mantiene el escenario actual, los consumidores podrían encontrarse en pocos días con la mayor bajada trimestral de la tarifa eléctrica en años, lo que supone un alivio si se tiene en encuentra que el recibo se encareció en un 60% en apenas un lustro.

Solo en 2011, la TUR subió un 10%, y en 2012 lo hizo un 5,4% adicional, sin incluir el 7% de más que los consumidores estuvieron pagando entre octubre y diciembre para acatar una sentencia del Tribunal Supremo que obligaba a reintegrar el encarecimiento no repercutido entre octubre de 2011 y marzo de 2012.

La confusión en torno al recibo de la luz llegó al paroxismo el año pasado, cuando el recibo llegó a «bajar subiendo y a subir bajando». En octubre de 2012 la TUR bajó un 2%, pero la subida del IVA y las refacturaciones del Supremo la encarecieron, mientras que en enero la TUR subió un 3%, pero el final de las refacturaciones la abarataron.

Las fuentes del mercado explicaron que la bajada de precios de estos días en la electricidad responde a factores como una menor demanda y a una mayor contribución de las energías renovables relacionada por la meteorología.

La paradoja es que esta menor demanda y mayor contribución renovable que abarata el mercado eléctrico encarece al mismo tiempo la otra parte del recibo, la de los costes regulados, ya que la caída del consumo reduce los ingresos necesarios para responder a las previsiones de costes, mientras que las tecnologías ‘verdes’ aumentan las primas.

Este descenso de ingresos e incremento de costes regulados da origen precisamente al déficit de tarifa, que es una deuda del sistema eléctrico de 28.000 millones cuyo importe, según las previsiones de Industria, debería dejar de aumentar en 2013.

REE crea la figura del consejero independiente coordinador (CIC)

Ésta es una de las cuestiones tratadas en la reunión del consejo y que se elevará a la junta de accionistas que tendrá lugar en Madrid el próximo 17 de abril en primera convocatoria y un día más tarde en segunda convocatoria, tal y como informó la compañía a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).

La creación de la nueva figura responde también a la necesidad de adaptar el reglamento a las últimas reformas legislativas aplicables a las sociedades anónimas y a las más recientes prácticas internacionales de Gobierno Corporativo, señaló Red Eléctrica.

Con el mismo fin, se estableció en el reglamento el principio de mayoría de consejeros independientes en la composición de las comisiones del Consejo de Administración, hecho que en la actualidad la compañía ya está cumpliendo.

Red Eléctrica aseguró que con estas medidas ya cumple la totalidad de las 58 recomendaciones del Código Unificado de Buen Gobierno Corporativo.

La próxima junta de accionistas también votará, a propuesta del consejo de administración, la reelección de María de los Ángeles Amador Millán y la ratificación de María José García Beato como consejeras.

Industria tampoco tocará en abril el coste regulado de la luz y dejará la revisión a merced de la subasta

Lo que haga la tarifa en abril será «fruto de la subasta», ya que «el Gobierno decidió «hace algún tiempo» que la tarifa eléctrica «suba o baje en función de consideraciones de mercado» y que este «no va a hacer nada discrecionalmente» para alterarlo, por lo que no se tocará el importe de los peajes. Así fue a lo largo de los últimos meses y así va a seguir siendo», aseguró en un almuerzo organizado por el Foro ABC-Deloitte. «Yo lo que deseo es que baje», expresó.

Pese al mantenimiento de la parte regulada del recibo, Soria advirtió de que «ahora lo que toca es proceder a realizar determinados cambios regulatorios para dar sostenibilidad al sistema», sin precisar el contenido de las medidas.

Industria se encuentra este año «en proceso de poder consolidar la reducción» del déficit de tarifa, tras haber adoptado durante el año pasado medidas sin las cuales la deuda eléctrica generada solo en 2012 habría superado los 8.000 millones de euros, afirmó.

Como en otras ocasiones, insistió en que «no toda la solución puede recaer sobre los consumidores en términos de incrementos de tarifa ni tampoco en las operadoras ni tampoco en el Estado», que solo este año prevé articular un crédito por un máximo de 2.200 millones para financiar una parte de las primas al régimen especial.

La TUR, la tarifa regulada a la que están acogidos más de 20 millones de clientes, se forma a partir de dos elementos con un peso similar, el precio de la energía y los peajes, a lo que hay que sumar los impuestos.

El precio de la energía se determina en una subasta, donde se compra y vende la electricidad para el siguiente trimestre, mientras que los peajes, dedicados a cubrir los costes regulados, los fija el Gobierno.

El déficit de tarifa se dispara hasta los 5.511 millones de euros en 2012, un 28% más de lo previsto, para compensar el coste extrapeninsular

Esta orden fijó una compensación para los sistemas eléctricos insulares y extrapeninsulares de 1.622 millones de euros, lo que triplicó la asignación anterior, que debe ser incluida en las cuentas de 2012, puesto que el Gobierno finalmente no trasladó esta partida a los Presupuestos Generales del Estado (PGE).

Este «mayor coste de compensación insular y extrapeninsular» obligó a revisar la liquidación y elevar la cifra de déficit tarifario -que se genera porque los ingresos del sistema eléctrico no son suficientes para cubrir los costes- hasta los 5.511 millones de euros, lo que supone un incremento de 1.229 millones de euros, y supera en un 28,7% el déficit de la liquidación anterior.

El Ministerio de Industria, Energía y Turismo calculó en la memoria económica de esta orden que esta imputación de costes al ejercicio 2012 haría que el déficit de tarifa fuese de 5.101 millones de euros. Para permitir este desfase, había levantado anteriormente el tope legal de 1.500 millones de eurosde deuda eléctrica del año.

De esta forma, las últimas estimaciones de la CNE muestran que el déficit de tarifa de 2012 es 410 millones superior a lo previsto por Industria en la orden de tarifas, si bien el dato del regulador es aún provisional y no será definitivo hasta la liquidación del mes que viene.

La cifra de 5.511 millones supera en un 60% a la del mismo momento del año anterior, así como en un 243,5% a la previsión que manejaba el regulador tras la revisión de las tarifas eléctricas de abril del año pasado.

El aumento del déficit de tarifa se produce a pesar de que los ingresos del sistema eléctrico procedentes de las tarifas de acceso se sitúan en 14.592 millones de euros, un 15% más que los 12.645 millones del ejercicio anterior.

Para contener la deuda eléctrica, el Gobierno adoptó varias medidas el año pasado, entre ellas la moratoria a las renovables, alzas de peajes y recortes en partidas como la distribución o los pagos por capacidad. En 2013, retiró los límites anteriores de deuda, puso en marcha los nuevos impuestos eléctricos y aplicó nuevos recortes a las renovables.

La CNE calculó que las primas al régimen especial, que incluye renovables y cogeneración, ascienden en 2012 a un total de 8.585 millones de euros, un 22% más que lo previsto a comienzos del ejercicio y un 22,9% más que en el año anterior.

Costes e ingresos

El importe a liquidar por el conjunto de los distribuidores es positivo y la CNE lo fijó en 5.727 millones de euros, aunque afirmó que «resulta insuficiente para cubrir los costes de las actividades reguladas (a razón de 1.462 millones de euros para el transporte y 4.604 millones de euros para la distribución).

Asímismo, tampoco cubre aquellos otros costes que, según la distinta normativa publicada, tienen la misma prelación en su cobro que dichas actividades (1.257 millones de euros en anualidades del fondo de la deuda eléctrica (FADE) y 470 millones de euros por el sistema de interrumpibilidad). Es por este motivo, por el que se hizo preciso cubrir la totalidad de los costes regulados con cargo a la financiación del déficit».

Por su parte, igual que en la anterior liquidación, la prima al régimen especial ascendió a 8.585 millones de euros, superior en un 22,9% a la del ejercicio anterior, en un 22,42% y en un 18,9% a las previstas en las revisiones tarifarias de enero y abril, respectivamente.

En dicho informe, se aseguró que la energía declarada por tarifas de acceso de los suministros ascendió a 246.218 GWh, un 1,61% inferior a la del ejercicio anterior, un 2,16% inferior de la previsión de tarifas de enero y un 0,01% superior a la última previsión de abril.

El total de los ingresos brutos se situaron en 14.798 millones de euros, un 15% por encima de los del ejercicio anterior, un 6,13% superior a los de la previsión de enero y un 7,4% inferior a los de la última previsión correspondiente a la tarifa de abril.

El hecho de que, en relación al ejercicio anterior y a la previsión de enero, los ingresos aumenten en tanto que la energía disminuye «se debe al incremento de los precios de las tarifas de acceso», sostuvo la CNE. Por el contrario, en relación a la previsión de abril, a pesar de que la energía aumenta, disminuyeron los ingresos por peajes.